Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

¡Voy a conquistarte! por DNA

[Reviews - 62]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Hola hermosas!!!

Bueno aquí el siguiente cap :3

Disfruten~

-¿Qué rayos estoy haciendo?-se preguntó a sí mismo mientras apretaba con fuerza su celular-“Yo en verdad quiero pasar el día contigo” ¿En qué diablos estaba pensando al decir eso?-masculló molesto consigo mismo.

Eso estaba muy mal, ya no entendía nada y eso era lo que más lo enojaba, se suponía que quería alejar a ese pequeño acosador pero lo único que estaba logrando con sus tonterías era tenerlo cada vez más y más cerca, nunca iba a librarse de él de seguir de esa forma.

“¿De verdad quieres no volver a verlo?”

La pregunta involuntaria le sonó tan fuerte y clara que lo dejó sin habla por varios minutos, se suponía que su respuesta debería ser una afirmación rotunda pero… ¿por qué estaba pensándoselo?

Se daba cuanta entonces que Luhan estaba haciendo un desastre de proporciones catastróficas en su interior y tenía que acabar con eso cuanto antes, no podía seguir conviviendo con él, su resplandeciente sonrisa y esa mirada con ese brillo tan único eran un verdadero peligro para él y lo poco que estaba quedándole de cordura pero había prometido un mes y…

-Sehun-llamarón a su puerta sacándolo de sus cavilaciones.

-¿Qué quieres?-le gruñó en respuesta a la persona al otro lado de la puerta.

-La cena está lista-anunció sin tomarle la más mínima atención a la hostilidad de Sehun.

Sehun gruñó por segunda vez y se puso de pie de mala gana, abrió la puerta de su habitación encontrándose cara a cara con su fastidioso hermano mayor que lo miraba con igual o mayor desprecio que él mismo le dirigía, ambos avanzaron al comedor sin mediar ni media palabra ocupando en la mesa sus habituales sitios.

Su padre los miró seriamente cuando tomaron asiento, una pequeña sonrisa fue dirigida hacia su hermano mientras para él solamente había una mirada de reproche, lo mismo de siempre a decir verdad. Su madre apareció poco después con la que sería su cena y comenzó a servir empezando, como siempre, por el plato del jefe de la familia.

Sehun los observaba en silencio sintiéndose desplazado de aquella bonita escena donde sus padres se sonreían mientras su madre acariciaba cariñosamente el cabello de su hijo favorito para luego mirarlo a él con indiferencia pero eso era normal, Sehun era la oveja negra de aquella perfecta familia.

Por un rato los cubiertos contra la loza fue lo único que se escuchó, todo era un silencio incómodo que sabía bien era su culpa, era por eso que siempre hacía lo posible por no comer con su familia, Sehun ya sabía que les arruinaba la felicidad.

-Mamá, papá-habló por fin su hermano mayor rompiendo el pesado silencio.

-¿Qué sucede cariño?-preguntó amorosamente la única mujer en la mesa.

-Tengo algo importante que decirles-anunció con alegría, sus padres lo miraron expectantes y cariñosos mientras Sehun sentía que podría atragantarse con el trozo de carne que masticaba.

-¿Qué es?-preguntó con entusiasmo su padre.

-Bueno yo... -hubo una larga pausa estúpidamente innecesaria-No sé cómo decirlo-rió ligeramente contagiando a ambos mayores.

-Tan sólo dilo y no nos tengas así-pidió su madre con voz risueña.

-Está bien-rió un poco más-Yo... por fin me armé de valor y le pedí matrimonio a Ha Rin-anunció feliz.

-¡No es cierto!-chilló su madre-¡Mi bebé se casara!

-Muchas felicidades hijo, estoy muy orgulloso de ti-felicitó su padre.

El comedor fue inundado de alegría, abrazos y felicitaciones hacia su hermano mayor, Sehun no emitió ni una sola palabra y discretamente se puso de pie sabiendo que obviamente él estaba de más además de que esa noche no estaba de ánimos para presenciar cómo sus padres se llenaban la boca de interminables halagos para su hermano.

-Sehun-llamó severamente su padre cuando estuvo a nada de salir-Todavía no terminamos de comer.

-Yo sí-respondió y siguió caminando.

-¿Pero que le pasa a ese mocoso?-pudo escuchar a su madre.

-Cada día está peor y todo es porque dejamos que siguiera adelante con esa estupidez de estudiar danza-y ese era su padre.

No se detuvo de ninguna forma sabiendo bien ya que ellos continuaran hablando porquerías de él, se aseguró de ponerle pestillo a la puerta y se dejó caer en la cama cerrando los ojos cuando su cabeza tocó la almohada. Dormir era lo mejor, o por lo menos ese era su plan hasta que algo vibrando bajo su cuerpo llamó su atención, se incorporó con pereza encontrándose con su celular el cual tomó y desbloqueó para leer el nuevo mensaje.

De: Acosador.

No me dejaste darte las buenas noches Hunnie, eres malo pero de cualquier forma te deseo dulces sueños ;)

Ya quiero que sea mañana *u*

Sehun no pudo contener la sonrisa que se extendió en sus labios luego de leer ese infantil mensaje. Repentinamente ya no se sentía tan molesto como antes, Luhan tenía el poder de hacerlo olvidar los malos ratos y no tenía idea del porqué de eso.

Luhan de hecho era todo eso a lo que no debía acercarse y continuaba viéndolo. Era incorrecto empezando porque era un hombre y lo que era peor, un chiquillo apenas. Él también era todo lo contrario a Sehun en todo sentido y él ya debería saber que todo eso significaría problemas solamente.

Era más que obvio que una relación así estaba destinada al fracaso y Sehun lo sabía también; pero aun sabiendo eso seguía mirando su celular con una sonrisa en los labios mientras se dedicaba a pensar en cuál sería el mejor lugar para llevar a Luhan a pesar de que minutos atrás había estado pensando que lo que sea que había entre ellos estaba mal y tenía que terminar.

¿Se podía ser realmente así de contradictorio?

***

Se miró al espejo por... la verdad ya había perdido la cuenta de cuantas veces lo había hecho pero llevaba así mucho tiempo. Nervioso era poco para describir lo que Luhan sentía en esos momentos. De tener que describirlo Luhan diría que se había desatado un huracán en el interior de su estómago y su corazón cada segundo estaba más acelerado haciéndole temer la posibilidad de que explotara en cualquier segundo.

Un fuerte suspiro salió de entre sus labios, volvió a recorrer su imagen en el espejo sintiéndose inseguro de su aspecto, comenzó a retorcerse los dedos en un gesto nervioso mientras se giraba hacia Jongdae y Minseok preguntándoles con la mirada cómo lucía.

-Estás perfecto-aseguró una vez más Minseok porque era como la millonésima vez que Luhan hacía eso.

-Te dije que te veías gordo con... -Chen no pudo terminar de hablar luego del codazo que Minseok le dio justo en el estómago.

-De verdad te ves muy bien Lulu-afirmó nuevamente Min.

-¿De verdad? ¿No luzco gordo, cierto?-inquirió preocupado.

-Claro que no, estás fenomenal-sonrió divinamente.

La mirada ansiosa de Luhan viajó rápidamente a Jongdae en espera de su aprobación y al mayor no le quedó más que suspirar pesadamente antes de obligarse a sonreír por muy inconforme que estuviera; pero no podían culparlo cuando su hermanito lucía tan hermoso y estaba por irse con un tipo que podría ser un pervertido con quien sabe que retorcidas intenciones, ya podía ver a Luhan llorando por piedad mientras ese tipo le...

-¡NO! ¡POR LO MENOS PREPÁRALO BIEN Y USA LUBRICANTE!-gritó llamando la atención de los otros dos que lo miraban horrorizados.

-¡¿Se puede saber en que demonios estás pensando degenerado?!-exclamó escandalizado Minseok.

-E-en nada-farfulló avergonzado para luego mirar a Luhan que lo miraba con desconfianza-Te ves bien-dijo al final borrando del rostro de Luhan la expresión de desconfianza y obteniendo una preciosa sonrisa a cambio-Pero te podrías ver mejor-agregó.

-¿D-de verdad?-cuestionó inocente.

-¡Claro!-exclamó-¿Quieres que te ayude?-Luhan asintió-Okay.

Los otros dos miraron atentamente como Chen se ponía de pie rápidamente y salía corriendo volviendo poco tiempo con una bolsa entre las manos, Luhan no se movió mientras Chen le ponía algunas cosas encima para luego girarlo hacia el espejo cuando terminó con lo que había hecho.

-¡Tachan!-soltó alegremente.

Luhan sintió un tic al mirarse al espejo y tuvo que esforzarse de forma sobrehumana para no lanzar a su idiota hermanito por la ventana. Chen le había puesto un enorme, amarillo y esponjoso suéter de cuello de tortuga, una larga bufanda morada y un ridículo gorrito con orejas y astas de ciervo.

-¡Te ves tan guapo!-chilló Chen imitando patéticamente la voz de una chica.

-Tú... -gruñó amenazador-¡¿Cómo rayos crees que saldré con esto?!-casi gritó antes de arrancarse las prendas de más que Chen le había puesto.

-¡Pero que dices, estás genial!

-¡Claro que no, parezco un niño!

-Y justo esa era la idea-habló poniendo su sonrisa de sabelotodo-A los hombres que son como Sehun y como yo nos gusta un chico inocente-aseguró guiñando de forma espantosa.

-Eso ni tú te lo crees-bufó.

-¡No es mentira!

-Sehun y tú no se parecen en lo más mínimo comenzando por el hecho de que aunque él es menor que tú se comporta como todo un adulto mientras que tú todavía te peleas con los niños en la fila del supermercado por los dulces-declaró seriamente.

-¡Mentira!-chilló.

-Justo a eso me refiero-lo señaló por completo.

-Oh vamos, solamente estoy ayudándote, afuera hace mucho frío.

-No es verdad.

-Por lo menos llévate el gorro, el tempano de hielo ese lo amara-prometió.

-Número uno; no lo llames así y número dos; eso de que amara el gorro también es mentira-dijo seriamente y luego le echó un vistazo a su celular-Debes dejar de tratarme como a un niño, ya tengo dieciséis y debes parar.

-Yo...

-Sehun ya está abajo-informó-Nos vemos más tarde-se despidió.

-¡Lo sé!-dijo apresurado deteniendo los pasos de Luhan-Ya sé que no eres más un niño pero... es justo por eso que me empeño más en cuidarte... sé que debería dejarte hacerlo solo pero tengo miedo porque estás creciendo muy rápido. Yo le prometí a mamá y papá cuidarte siempre e incluso me hice esa misma promesa a mí mismo pero... el tiempo está pasando muy rápido y tú pronto ya no vas a necesitar más a tu molesto hermano mayor y es por eso que soy así... es porque tú pronto querrás seguir tu propio camino y entonces yo ya no podré cuidarte... es eso lo que me asusta. Sé que Sehun te gusta mucho y es justo por eso que me preocupa, yo no quiero que te hagan llorar... yo solamente intento protegerte justo como he hecho desde que te conocí-sonrió con algo de melancolía-Intento hacerlo como cuando eras un niño pequeño y me despertabas a medianoche para que fuera a conseguirte galletas a la cocina del orfanato... tú y yo en realidad no somos familia y es por eso que sé que ese tipo de cosas cada vez serán más y más lejanas porque pronto serás un adulto independiente que va a querer dejarme atrás y me cuesta aceptarlo todavía por eso... ¿podrías soportarme un poco más?-preguntó con una suplicante expresión.

Luhan no sabía que decir ante eso, era la primera vez que Chen se abría de esa forma ante él y sinceramente no tenía palabras, en serio estaba en blanco y fue por eso que simplemente caminó hacia donde estaba el espejo y recogió del suelo el gorrito que Chen había comprado para él.

-La verdad es que me gusta mucho y por eso lo llevare-sonrió ampliamente.

-Gracias.

Luhan asintió lentamente y finalmente dio la medía vuelta marchándose y dejándolo a solas con Minseok que miraba fijamente a su novio.

-Manipulador, incluso parecía en que llorarías en cualquier instante-acusó Minseok con reproche y diversión combinados en su tono de voz.

-Que puedo decir, fui bendecido con un gran talento para la actuación-rió escandalosamente, al final se había salido con la suya y no podía estar más satisfecho.

***

-¿Cuánto más tardara?-preguntó en un susurro mientras volvía a mirar con impaciente hacía la entrada del edificio donde Luhan vivía.

Suspiró pesadamente una vez más decidiendo que iba a llamarlo, marcó rápidamente el conocido número sorprendiéndose ligeramente cundo escuchó la familiar y ridícula melodía que Luhan tenía en su móvil, se giró rápidamente encontrándoselo fuera del elevador mirando con nerviosismo su celular antes de que seguramente contestara.

-¿Se-Sehun?

Tartamudeó al responder la llamada sin ser consciente de que Sehun lo miraba desde el exterior. Sehun no respondió al llamado y se mantuvo mirando atentamente lo bien que Luhan se veía con la ropa que usaba ese día aunque había algo que no encajaba en todo ese perfecto y tentador atuendo y eso era el encantador gorrito de ciervo que el pequeño usaba y del cual seguramente cualquiera otra persona se burlaría pero no él, de hecho para Sehun eso únicamente lo hacía lucir mucho más perfecto.

-¿Hola?

-Estoy afuera y de hecho te estoy mirando así que date prisa-ordenó.

Vio a Luhan elevar la mirada y sonrojarse visiblemente antes de formar una gran sonrisa y correr hacía él provocando que algo se removiera en su interior como siempre que Luhan hacía eso. Un dulce y sutil aroma a fresas golpeó sus sentidos en cuanto la pequeña figura del pelinegro estuvo frente a él mostrándole su inconfundible sonrisa.

Verlo de cerca era cien veces mejor que mirarlo a distancia y Sehun tuvo que obligarse a apartar la mirada de la preciosa imagen frente a sus ojos cuando sus pensamientos comenzaron a irse demasiado lejos.

"¡Es un niño!"

-¿A dónde iremos?-preguntó curioso el menor.

-¿Haz desayunado ya?-inquirió asegurándose de no mirarlo.

"¡¿Desayunar dices?! ¡¿Cómo esperas que hubiera pensado en hacerlo cuando sentía un tifón en mi estómago por tu culpa?!"

-N-no.

-Vayamos a desayunar entonces, ¿estás de acuerdo?

-S-sí.

Ambos empezaron a caminar sin decir nada y aunque el silencio era incómodo para Luhan estaba bien, podía lidiar con eso porque Sehun nunca tenía mucho que decir, aunque tampoco podía negar que le hubiera gustado que Sehun comenzara una charla de lo que fuera sobre todo cuando entraron al maldito subterráneo, sí, Luhan seguía odiándolo.

Tan sólo entrar al maldito vagón fue una proeza porque estaba absurdamente lleno de personas, por un momento Luhan de verdad pensó que iba a gritar debido a eso pero entonces todo mejoró y él casi se muere ahí mismo.

Sehun no había tardado en darse cuenta lo mal que Luhan estaba pasándola y sin detenerse a pensarlo mejor únicamente lo había tomado del brazo para alejarlo de la multitud y resguardarlo entre la pared del vagón y su propio cuerpo.

El color rojo tiñó por completo el rostro de Luhan cuando se vio acorralado de esa forma por Sehun, se sentía demasiado expuesto ante la penetrante mirada del rubio la cual no era ni capaz de devolver, seguramente todos en el vagón podían escuchar el violento latir de su corazón y eso hacía todo millones de veces más vergonzoso.

-Gra-gracias-murmuró tímidamente.

-No importa-respondió él.

Ninguno dijo nada más después de eso, tampoco dijeron nada luego de bajar del vagón, ni cuando salieron del subterráneo y mucho menos cuando comenzaron a andar al pequeño restaurante a donde Sehun lo llevó, era un lugar realmente agradable y no había mucha gente, lo único malo era que todo entre ellos estaba de verdad incómodo y Luhan no tenía idea de cómo resolver eso.

-Luhan-llamó Sehun y Luhan rápidamente lo miró-¿Pasa algo malo?

-N-no, para nada-sonrió como pudo-¿Po-por qué lo dices?-preguntó algo preocupado.

-Porque estás callado y tú nunca lo estás, ¿no te diviertes?

-¡No, nada de eso!-elevó la voz sin darse cuenta.

-No tienes que gritar.

-L-lo lamento es...

-¿Qué pasa?

-Estoy nervioso-confesó avergonzado-Yo... sé que esta no es la primera vez que hacemos algo juntos pero si es la primera vez que es una cita real y... de verdad no sé cómo actuar-admitió totalmente ruborizado.

-Actúa igual que siempre, me gusta eso-pidió.

Luhan lo miró muy sorprendido sin saber realmente si eran sus palabras o su mano tomando la suya sobre la mesa lo que más lo sorprendía, Sehun jamás había hecho eso, nunca. Ya podía decir que algo grave le pasaba luego de sentir como esa desconocida sensación se instaló en su pecho.

"Creo que mi corazón se acaba de descomponer, ¿qué debo hacer ahora?"

***

Luego de su tranquilo desayuno Sehun en verdad esperaba que todo en su cita mejorara pero la suerte no parecía estar de su lado ese día, había querido llevar a Luhan a ese parque de diversiones que se había inaugurado recientemente pero este no estaba abierto ese día a pesar de que era un maldito sábado.

¿Qué clase de idiota no abría un jodido sábado?

Al final no dejó que eso le afectara y llevó a Luhan al cine con la esperanza de arreglar lo del parque de diversiones, sin embargo, no fue mejor. No era que estuviera cerrado pero no tenían boletos para la película que Sehun había planeado ver en un principio, había elegido otra pensando que podía rescatar eso pero habían terminado viendo la película más larga y aburrida que podía existir y de ahí nada mejoró en absoluto.

Fueron al centro comercial y terminó por perder a Luhan durante tres horas.

Lo llevó a la N Seoul Tower solamente para enterarse que Luhan sufría de acrofobia y que no iba a poder subir ahí por eso, el menor ni siquiera se había atrevido a decírselo y simplemente se había dejado arrastrar hasta el lugar donde los teleféricos estaban ubicados, probablemente hubiera subido de no ser porque Sehun logró darse cuenta que estaba por comenzar a hiperventilar y lo obligó a revelarle cual era el problema.

Eso era un desastre que solamente continuó y continuó, cada cosa que había planeado salió mal y eso no podía tenerlo más frustrado y molesto, estaba listo para tirar la toalla pero entonces lo vio, era increíble pero ahí estaba y ahora que lo estaba viendo se dio cuenta que en realidad siempre había estado ahí desde el principio.

Cuando el parque de diversiones estuvo cerrado, cuando tuvieron que ver la peor película de la historia, cuando lo perdió en el centro comercial, luego de casi tener un ataque de pánico en la N Seoul Tower y en todo lo que siguió a ese desastre.

Luhan sonreía desde el inicio de esa espantosa cita, todo estaba saliendo pésimo pero él parecía más que feliz y Sehun simplemente no lo entendía porque él debería ser quien más molesto estuviera, seguramente había esperado con ansias algo inolvidable pero en su lugar tenía un horrible fiasco y un parque público en el que llevaban una hora porque Sehun se negaba a ir a algún otro lugar.

-¿Cómo puedes sonreír luego de todo esto?-preguntó desconcertado y algo irritado con la sonrisa ajena.

-¿Eh?

-Toda esta... esta cosa es un desastre pero tú continuas sonriendo como si nada y no entiendo-explicó.

-Se supone que uno sonríe cuando está feliz y yo lo estoy-afirmó.

-¿Feliz? ¿Cómo puedes estar feliz con esto?

-Es porque estoy contigo-fue su rápida respuesta que veía acompañada de esa preciosa sonrisa que parecía imborrable-Para mí eso era lo más importante, no importaba si al final me llevabas a un museo o a hasta a la biblioteca, yo iba a estar bien porque estaríamos juntos-murmuró tímidamente-Además, aunque esto no haya salido como querías yo fui capaz de ver que en verdad te esmeraste en planearlo y para mí eso es lo único que importa porque de alguna forma eso significa que yo te importo-sonrió divinamente.

Por un instante lo único que Sehun pudo hacer fue abrir y cerrar la boca sin tener idea de que responder a lo que Luhan había dicho. ¿Importarle?, eso era imposible y absurdo, si se había esforzado era porque… seguramente debía haber una gran razón que se le había olvidado para esos momentos, miró nuevamente a Luhan que continuaba sonriendo mientras miraba atentamente al frente, realmente él lucía como un sueño aunque era en realidad una pesadilla, dio un gran suspiró al darse cuenta que nuevamente estaba pensando de más innecesariamente, eso era una tontería total pero se trataba de algo relacionado con Luhan y eso era normal tratándose de él.

-¿Quieres un helado?-preguntó ya resignado, le compraría un helado, lo llevaría a comer y terminaría con todo eso de una buena vez.

-De vainilla-pidió alegremente.

-Bien, no vayas a moverte de aquí-ordenó ya que definitivamente no repetiría lo del centro comercial.

Luhan asintió obediente y se dedicó a observar a Sehun ir hacia donde el heladero se encontraba, eran cerca de las tres de la tarde y estaban en un lindo parque donde se podía ver a varias parejas y familias divirtiéndose, los niños gritaban y corrían de un lado a otro, había algunas personas paseando con sus mascotas y la tranquilidad era lo único que podía sentir al estar ahí sentado en esa banca bajo la sombra de los grandes árboles.

Cerró los ojos un momento permitiéndose un instante de calma pero un suave golpecito en su cabeza lo hizo abrir los ojos y mirar a todos lados con el ceño fruncido en busca del causante de aquello pero no había nadie a excepción de una linda niña que le dedicaba una mirada curiosa mientras permanecía parada frente a él.

-Hola-saludó amablemente.

-Oppa tiene un gusano en la cabeza-señaló risueña la pequeña castaña.

Luhan sintió un escalofrió luego de eso, una de sus temblorosas manos subió a su cabeza palpando con temor hasta que sus dedos tocaron algo pequeño y vicioso que se retorció a su toque, su rostro se descompuso en una mueca de horror y gritó como una niña sin importarle quien lo escuchara.

Sehun acababa de pedir dos helados cuando escuchó un ensordecedor grito idéntico a los de las niñas en las películas de terror, se giró rápidamente para ver que era lo que sucedía porque de alguna forma ya sabía que Luhan tenía algo que ver en ello, y apenas tuvo el tiempo suficientemente para reaccionar cuando Luhan se abalanzó sobre él.

-¡Quítamelo! ¡Quítamelo!-chillaba histérico mientras lo abrazaba cada vez más fuerte.

-Luhan estás dejándome sin aire-se quejó luchando por alejarlo.

-¡Quítamelo! ¡Va a matarme!-exclamó aterrado.

-¿De qué hablas?-inquirió confuso e irritado.

-¡Del asqueroso gusano!

Sehun dejó de luchar y parpadeó incrédulo, miró detenidamente a Luhan encontrándose con una inofensiva y diminuta oruga en el gorro del menor, una suave risa casi escapa de sus labios pero consiguió reprimirla mientras tomaba al pequeño animalito y lo alejaba del aterrorizado chico que lo abrazaba con fuerza.

-Listo-informó.

Luhan alzó la mirada mostrándole a Sehun el más adorable de los pucheros acompañado de un par de bonitos y brillantes ojos asustados que casi logran hacer que se derritiera por tanta ternura y… ¿por qué no había notado antes que Luhan era así de lindo?

-Está bien, estoy aquí-sonrió cálidamente mientras acariciaba tiernamente sus mejillas con ambas manos ya que por alguna razón quería hacer desaparecer esa mirada asustada que el lindo chico le mostraba-Ningún feo gusano va a tocarte mientras yo esté contigo-prometió.

Un casto beso se presionó sobre los pequeños labios que formaban un puchero dejando a Luhan totalmente asombrado, era la primera vez que Sehun lo besaba por iniciativa propia y era maravillosamente perfecto. El calor se apoderó de su rostro y no dudo en ocultar su avergonzada expresión en el hueco que formaba el cuello de Sehun que no dudo en abrazarlo también, era también la primera vez.

-Que vergüenza-musitó débilmente.

-No importa, está bien-aseguró Sehun con calma.

No entendía por qué lo había besado y mucho menos porqué lo estaba abrazando, lo único que si entendía era que tenerlo así era increíble y que no le importaría repetirlo a menudo, realmente le gustaba cuidar de ese torpe, acosador y escandaloso niño aunque no pudiera explicarlo.

-Vayamos mejor a comer, ¿te parece?

-Bien-susurró apenas, sus brazos dejaron libre a Sehun y antes de que se arrepintiera y volviera a abrazarlo, él tomó su mano.

-Vamos-indicó.

Luhan apenas consiguió asentir permitiendo que Sehun lo guiara sin que él pudiera dejar de mirar sus manos juntas, en pocos minutos había conseguido realizar tres de sus más anheladas fantasías y sentía que podría gritar de alegría, su corazón bombeaba, latía, brincaba, corría o lo que fuera que hiciera pero lo estaba haciendo a la máxima velocidad, era como si hubiera enloquecido y tal vez de verdad se había descompuesto y eso no podía tenerlo más contento.

***

-Estoy aburrido-resopló molesto antes de patear el asiento de su chófer-¿Por qué hacemos esto?-exigió saber.

-Fue idea suya señorito, dijo que era sumamente importante conocer al novio de su amigo-le recordó con fastidio.

-Oh, es verdad-sonrió arrogante-¿Soy un genio, no?

-Sí usted lo dice-bufó.

-Oh vamos, no te enojes Kiyoshi-pidió con un adorable puchero-Voy a compensarte-prometió coqueto.

-No.

-¿Por qué no?-inquirió ofendido con la respuesta del joven nipón-¿No vas a decirme ahora que te preocupa tu novia, o sí?

-Oye un minuto, tú no puedes...

-Shhhhh-lo mandó a callar-Están entrado a el restaurante-dijo antes salir rápidamente del auto ignorando olímpicamente a su chófer.

Revisó con detenimiento todo el lugar hasta que ubicó a su amigo sentado en una de las mesas al fondo hablando animadamente con un chico rubio, una sonrisa se dibujó en sus perfectos labios rosas mientras se encaminaba a la barra del restaurante, no quería verse tan obvio después de todo.

-Un batido de frambuesa y kiwi para llevar-pidió.

Esperó pacientemente hasta que su pedido fue entregado y finalmente se encaminó hacia su objetivo, varias miradas se pasaron sobre él pero eso era natural cuando aquel personaje caminaba de ese modo tan presuntuoso, como si el mundo no lo mereciera.

-Pero miren nada más a quién me vengo a encontrar-habló para luego sonreír ladino ante la mirada espantada de su mejor amigo-Nada más y nada menos que la cierva.

-Venus-murmuró horrorizado.

-El único-amplió más su sonrisa maliciosa antes de posar su mirada en cierto rubio que lo miraba entre sorprendido y enojado-Así que fue por él por quien me cambiaste.

Sehun frunció el ceño tan rápido esas palabras escaparon de la boca del niño/niña que lo miraba como si fuese menos que nada, ¿quién rayos se creía ese mocoso y por qué rayos estaba ahí mirando de esa forma a Luhan?

-Venus... ¿qué haces aquí?-preguntó visiblemente incómodo.

-Vine a comprar algo para beber-alzó su bebida-¿Y tú?

-Bueno...

-Estamos teniendo una cita así que esfúmate-ordenó Sehun.

La sonrisa burlona del chiquillo arrogante se ensanchó todavía más y sin recibir ninguna invitación ocupó la silla a un costado de Luhan que lo miraba horrorizado.

-Así que tú eres el famoso Sehun-comentó-No me lo hubiera imaginado luego de ver como coqueteabas con Hyuna en aquella fiesta-Sehun le envió una mirada fulminante y fue el turno de Luhan para fruncir el ceño.

-Eso a ti te da igual-masculló.

-Sí, tiene razón-asintió-Por cierto mi nombre es Kyung Jin-se presentó.

-Lo siento Sehun, Kyung Jin es mi muy estúpido mejor amigo que no sabe cuándo debe cerrar la boca e irse-masculló Luhan mirándolo mal en todo momento.

-Yo también te amo Lulu-sonrió divinamente.

Sehun se sintió mucho más molesto luego de esas palabras, se detuvo un poco para mirar con más atención al recién llegado encontrándolo extrañamente familiar olvidándose un poco del odio que comenzaba a sentir por el atrevido mocoso.

-¿Nos hemos visto antes?-preguntó extrañado.

-Sí, en la fiesta-respondió con obviedad.

-Me refiero a antes se eso-bufó.

-Mmm no aunque tal vez hayas visto mis trabajos, soy modelo-anunció con orgullo.

-No creo haber escuchado nunca de Kyung Jin-negó.

-Eso es obvio idiota-resopló.

-¡Venus!-le llamó la atención Luhan.

-Lo que quiero decir es que no uso ese nombre para mi trabajo pero seguro si has escuchado de Myah-sonrió travieso.

-Sí, ella es bastante popular aunque... espera un segundos, ¿estás diciendo que tú eres ella?-preguntó algo sorprendido.

-Vaya que inteligente-rió mordaz-Por lo general tardan en entenderlo.

-Imposible-musitó incrédulo.

-Cariño yo prácticamente soy una mujer con pene, la genética es bastante caprichosa y hace todo posible. Además con la ropa adecuada y el maquillaje correcto más de uno podría ser una bella mujer.

-Venus vete-ordenó Luhan al ver lo incómodo que su amigo ponía a Sehun.

-Pero eso es imposible, nadie mantendría un secreto así por...

-Mi lista de contactos y amantes es amplia, actores, modelos, cantantes, productores, fotógrafos-dio un especial énfasis a esa palabra mientras miraba intensamente a Luhan ignorando la mirada mortal que Sehun le envió luego de eso-Todos se acercan porque creen que soy mujer y la mayoría de ellos no van a manchar su reputación al revelar que soy un hombre y que se acostaron o acuestan conmigo, para más de uno eso sería fatal así que todos harán lo que sea para que nadie sepa la verdad-afirmó.

-La verdad me da igual así que mejor...

-Lulu ahora que recuerdo, ¿adivina quién empezó a dar clases en mi escuela y preguntó por ti?-cuestionó entusiasmado.

-Venus de verdad...

-¡Exacto! ¡Tu ex el profesor Cho y no sabes lo buenísimo que está!-exclamó emocionado.

Venus podía sentir la mirada asesina de cierto rubio intensificar cada vez más y no podía estar más divertido con la situación, Luhan por su parte quería matar a su amigo ahí mismo que se estaba divirtiendo de lo lindo.

-¿Qué acaso no tienes nada que hacer hoy?-preguntó Luhan ya fastidiado.

-No realmente-se encogió de hombres-Entonces... háblame de ti Sehun-pidió.

-Vete-ordenó seriamente el mayor.

-¡Uy!, mirada amenazante, que sexy-rió-De alguna forma me recordaste a Luhannie en sus días de gloria-suspiró.

-Venus basta-ordenó amenazador Luhan.

-Tranquilo que esto es bueno-afirmó-Era en la época que recién lo conocí, tenía entonces... ¿catorce? Sí, tenía catorce años y debiste verlo, era todo un niño malo, incluso hubo una vez que llegó la policía y Luhan...

-Voy al baño-interrumpió un molesto Luhan.

-Ve con cuidado Lu-dijo sonriente agitando su mano entre más se alejaba Luhan antes de volver a mirar a Sehun que parecía listo para despellejarlo vivo.

-Más vale que desaparezcas o ten por seguro que...

-El único que tiene que desaparecer aquí eres tú, Luhan es mío y te quiero lejos de él-advirtió con una seriedad que Sehun no imaginó que el irritante chiquillo poseía.

-¿Tuyo?-soltó con burla.

-Es mío desde el primer segundo en que lo vi y ningún imbécil va a venir a interponerse-masculló-Luhan me pertenece y ni tú ni nadie va a quitármelo así que más te vale alejarte o te ira muy mal-sentenció.

La mirada de Sehun se oscureció y el pelinegro estaba muy convencido de que él iba a levantarse y partirle la cara en cualquier segundo, si eso pasaba iba a ser un gran problema pero antes de que algo pasara Luhan apareció salvándolo sin saberlo.

-Nos vamos ahora-sentenció el rubio poniéndose de pie bruscamente y seguidamente tomó la mano de Luhan para arrastrarlo hacia la salida.

Luhan no puso ningún tipo de resistencia pero era cada vez más difícil seguirle el paso a Sehun, sentía que podría caerse en cualquier momento y en lugar de llamarlo para pedirle caminar más despacio decidió tratar de zafarse del agarré ajeno que empezaba a volverse doloroso.

-Camina-exigió Sehun.

-Se-Sehun espera-pidió-¿Qué pasa?-preguntó confundido pero no recibió respuesta-Sé que Venus puede ser realmente irritante pero...

Sehun se detuvo de golpe haciendo que Luhan chocara con su espalda, quiso quejarse pero antes de poder decir algo su brazo fue fuertemente apresado por la mano del mayor que lo miraba tenebrosamente.

-No vas a volver a ver a ese tipo-sentenció seriamente.

-Pero...

-No te quiero cerca de él, ¿estamos claros?-su voz era amenazante y su mirada intimidante pero ninguno efecto surtieron en Luhan.

-No-habló con firmeza.

-Luhan-masculló.

-No, tú no tienes derecho a prohibirme nada, Venus es mi amigo, el único que tengo de hecho, así que no dejare de verlo por que a ti no te haya caído bien-declaró.

-No me hagas repetírtelo-advirtió.

-No-repitió desafiante.

La mirada furiosa de Sehun se clavó en su cuerpo activando todas las alarmas de Luhan, intentó retroceder olvidándose que él ya lo sujetaba del brazo del cual tiró fuertemente haciendo que chocara bruscamente con su pecho, la boca del rubio buscó la suya y estrelló violentamente sus labios sobre los del pelinegro que luchaba por empujarlo sin comprender absolutamente nada.

-¡Aléjate de mí!-ordenó completamente asustado y desesperado por apartarlo-¡Te digo que pares!-exigió sin poder evitar que su voz fallara.

Sehun frenó todas sus acciones luego de escuchar la temblorosa voz de Luhan, sus ojos chocaron con la mirada llena de miedo de Luhan que había perdido su gorrito durante el forcejeo, lo liberó lentamente mientras se maldecía internamente al ver las marcas rojizas  de sus manos en los delgados brazos del menor que sin dudarlo un segundo se alejó tres pasos de él, era por eso que debía alejarse se Luhan, él era demasiado posesivo y celoso para alguien tan terco como Luhan.

-Lo siento-murmuró con la mirada gacha.

-¿Por qué has hecho esto?-preguntó desconcertado y algo dolido mientras seguía masajeándose los brazos.

-Yo... -sonrió de forma indescifrable, eso era imposible pero era la única respuesta-Creo… creo que estoy celoso de tu amigo-admitió sin podérselo creer ni él mismo.

Dejando más que sorprendido a Luhan con esa simple oración y tal vez nunca creyó que oiría en la vida.

Notas finales:

Y eso ha sido todo por hoy, espero les gustara, creo que este fic no tendrá más de diez capítulos así que estén preparadas para el final, dejen sus RW si les gusto y muchas gracias por leer, las amuuuuuu <3


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).