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The V Kings por Mal-Dita

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Notas del capitulo:

Hola :D!!!

Aqui va el cap dos :S, con uno de mis grupos favoritos *-*...son geniales en vivo T...T.

Espero que les guste.

 

Gracias por leer :D

Playlist song n°2:    Song 2-Blur

 

Y el publico enloquece...

La estampida humana es algo inevitable cuando termina un concierto tan masivo como el de "The V Kings", y extraviarse del grupo de amigos es algo normal en esos casos. Pero ser llevado por la ola humana y perderte dentro de la área restringida del recinto era algo que solo a Shoyo le podía suceder.

"¡Ah!, ¿dónde estoy?. ¡Suga sálvame!¡responde!."-gritaba internamente el de cabellos anaranjados.

La última vez que vio a sus amigos fue cuando trataban de salir por la puerta principal, pero ni Suga, Tadashi y Lev, lograron tomarle el brazo antes de desaparecer.

 

MENSAJES:

Shoyo:

-SUGA ¡SALVAME!, NO SE EN DONDE ESTOY  D_:  

Suga:

-Shooooyooo, ¡busca un guardia!

Shoyo:

-No veo ninguno, creo que estoy en el piso tres pero parece un laberinto aquí T-T. -visto-

Suga:

-QUEDATE AHÍ, VAMOS POR TI.  -visto-

Shoyo:

-GRACIAS T------------------------------------------T -visto-

 

Debía haberlo sabido, Shoyo era fácil de perder. Ahora el joven de cabellos anaranjados estaba perdido y debía ir a su rescate.

-¿Qué dijo?-pregunto Tadashi-

-Cree que esta en el piso tres, pero siento que  está confundido .

-¿No sé por qué no me sorprende?.-contesto el de pecas-

-Es porque es muy pequeño y fácil de ser llevado por una masa-dijo Lev-

-Debemos ir a buscarlo.-concluyo Suga-

-¡¿Cómo?!, está lleno de guardias. -respondió el pecoso-

-Esta cosa es enorme, es normal que se pierda-dijo Lev-

-¡Ah!¡no lo sé! -se revolvía el cabello-

 

Finalmente lograron traspasar la barrera de seguridad gracias al caos colectivo que reinaba en el lugar.  Porque al momento de que una fan callera desmayada por la falta de aire y un tipo se comenzara a desnudar gracias a los efectos de las drogas(que ingirió en los últimos minutos del concierto), hizo que los guardias dejaran uno de los accesos desprotegidos y facilitaran el ingreso a un grupo de tres chicos que buscaban a su desorientado amigo.

Pero la suerte duro solo unos segundos, porque un par de guardias que salían para auxiliar a sus compañeros divisaron el grupo y lo comenzaron a perseguir sin escucharlos. Corrieron tanto que no supieron cuando perdieron a los guardias, pero tampoco notaron en qué momento se dispersaron y al igual que Shoyo se encontraban desorientados en aquel enorme edificio.

Suga estaba con ataque, él era el mayor y los había invitado, ahora tenía a dos chicos de veintidós y uno de veintiún años perdidos, con posibilidades de ser arrestados por ingresar a esa zona restringida.  Quizás los confundirían con fanáticos locos que querían un autógrafo a toda costa, pero ellos simplemente buscaban la salida.

-¡¿Donde se metieron esos chicos?!-dijo sin darse cuenta que pensaba en voz alta-

-¿Necesitas ayuda?-dijo una voz profunda y amable-

Cuando Suga se volteo vio a un joven fornido no mucho más alto que él que tenía un semblante curioso.

-¡Oh!¡Lo siento, lo siento!

-Tranquilo, ¿querías un autógrafo?

-¡¿Qué?!¡no!-dijo moviendo sus manos y su cabeza en señal de negación-

-Jajaja, tranquilo no le diré a nadie que estas aquí si eso es lo que te preocupa.

-¡¿En serio?!

-Sí, no hay problema.

-¡Uf! ¡gracias!-sacándose un peso de encima-

-Y dime, ¿cuál es el problema?

-No encuentro a mis amigos y yo fui quien los invito, y ahora podrían estar arrestados por creerlos fanáticos locos y luego tendré que ir a la policía y pagar una fianza y...

-¡Wait! ¡tranquilo!, ya comprendí. Veo que eres una persona preocupada.-dijo con una sonrisa cálida-. Vamos, te ayudare a encontrarlos.

-¡¿En serio?!-dijo impactado por la amabilidad-

-Claro, no tengo nada mejor que hacer ahora.

-Eres demasiado amable, ya debes estar suficientemente cansado.

-Como dije, no tengo nada mejor que hacer hasta dentro de dos horas, cuando por fin podamos salir de este lugar.

-Bueno, gracias.

-Vamos, este sitio puede parecer un laberinto, pero no es tan difícil de andar si sabes más o menos como funciona.

-Eso supongo, espero que los chicos estén bien.

-Te preocupas demasiado ¿no crees?

-Suelen decirme eso.

-Ja, no eres el único. De hecho yo también busco a alguien.

-¿A sí?¿a quién?

-A uno de mis compañeros.

-Oh.

-Por suerte yo si se donde esta, quizás nos topemos de camino con tus amigos.

 

En ese mismo momento, pero en otro piso del edificio...

 Shoyo ya había dejado el miedo que le causaba sentirse perdido, porque ahora su vejiga era todo lo que ocupaba su mente. Lo único que deseaba era encontrar un baño, pero ya llevaba un buen rato caminando y no veía ninguno.

Hasta que de improviso diviso a lo lejos un cartel con una figura femenina y otra masculina.

"¡Un baño!"-grito internamente-

Apuro el paso e ingreso a aquel oasis. Cuando concluyo su tarea se dispuso a salir de aquel lavado, pero un cuerpo duro como una muralla choco contra él.

-¡Ah!-grito el otro-

-¡Ay!-grito Shoyo-

-¡Fíjate por donde andas!

-¡Hey!¡tú fuiste quien no ponía atención!-dijo aun en el suelo-

Cuando levanto la mirada pudo ver a un tipo tirado en el suelo que lo miraba con profundo odio y desprecio. Sintió un fuerte escalofríos que recorrió su espalda, pero se calmo y rápidamente se puso de pie.

-No necesito tu ayuda.-dijo el otro rechazando la mano extendida de Hinata-

-¡Hey!, no seas tan gruñón.

-¡¿Quien te crees para decirme eso?!

-¿Ah?

-¿Acaso no sabes quién soy?

-Eeee, ¿un hombre enojado?

-¡¿Estás jugando conmigo?!-dijo poniéndose de pie-

"Miedo, miedo. Este tipo da mucho miedo"

-¡Socorro!-grito Hinata con cara de pánico-

-¡¿Qué te sucede?!

-¡Dios!, ¡ lo dije en voz alta! -palideció de vergüenza y eso relajo un poco al otro-

-¡Hey!, no te voy a matar o algo así.

-Espera -dijo recién notando al personaje que tenía frente a sus ojos-¡¿eres el rey?!

-Recién lo vienes a notar idiota.

-¡No me digas idiota, idiota!. La luz no me dejaba ver bien tu rostro. Das más miedo en vivo.

-¡¿Qué estás diciendo?!

-¡Vez!, ahí está esa cara aterradora.

-¿Qué?-dijo desconcertado-

-¿Jamás te habían dicho que tu cara da miedo?

-Sí, pero no me lo decían hace mucho tiempo.

-Además frunces mucho el seño -dijo tocando el entrecejo del otro-, eso te producirá arrugas.

-Tks -sacando la mano del más bajo-, ¿y a ti no te han dicho que eres muy molesto ?

-Sí, constantemente. -dijo muy naturalmente-, mi mamá dice que...

-No quiero saber lo que dice tu madre. Esto es una estupidez, perder el tiempo contigo.

-¡Hey!¡eres un rey egocéntrico! -dijo indignado- Yo tampoco quiero perder mi tiempo contigo.

-Bien.

-¡Bien!

-¡Bien!

-¡No quiero verte ni en un millón de años!

-¡Ni yo en diez mil!

-¡Shoyo!

-¡Tobio!

La estúpida pelea fue frenada y ambos chicos voltearon para ver de frente a sus respectivos amigos.

-¡Koshi!-dijo Hinata corriendo hasta su amigo-¡pensé que no te vería nunca más!

-¡Vamos!, no seas dramático-dijo alborotando los cabellos de Shoyo- ¡Oh!, pero veo que no estás solo, es...

-¡Suga-sempai!-grito efusivo el azabache-

-¿Suga sempai?-repitieron desconcertados Daichi y Hinata-

-¡Tobio!¡tantos años!, pensé que ya no me recordarías.

-Jamás lo olvidaría sempai-dijo formalmente-

-¡Oh!, vamos, vamos. Ya no debes tratarme tan formalmente, dime solo Suga o Koshi.

-Está bien, Suga.-dijo algo dudoso-

-Bien, bien. Veo que ustedes estaban juntos por suerte.-dijo Daichi-

-¡Suerte!-gritaron ambos-¡Es la persona más molesta que he conocido en mi vida!

Ambos se miraron desconcertados y luego con furia.

-¡No repitas lo mismo que yo!-dijeron nuevamente al unisonó-

-¡Cállate!

-¡No tu cállate!

-¡Chicos!-dijo Suga-

-Tobio...

El miedo recorrió la espalda de Tobio, quien pudo percibir el aura maligna que emanaba desde Daichi.

-Tks. -chasqueo con la lengua Tobio, aunque el miedo aun estaba presente-

-Miedo...-dijo Hinata-

-Bueno, ya es tiempo de irnos. Siento las molestias -dijo  Suga tratando de escapar de ese ambiente tenso-

-No fue una molestia -respondió Daichi más relajado-

-Adiós Tobio, adiós y muchas gracias por la ayuda Daichi.

Suga se llevo rápidamente a su amigo de aquel sitio. Estaba muy feliz de haber conocido a uno de sus músicos favoritos, y aun más porque era amable y considerado como había imaginado, pero no quería causar más molestias. Además aquel aura también le produjo algo de miedo.

En cuanto al par de músicos el desconcierto no fue menor. Ambos creyeron por un segundo que esas dos personas habían sido una alucinación, pero sabían que esos chicos eran reales. Tobio lo sabía por el golpe y Daichi por los latidos que alborotaban su pecho.

-Tobio-dijo colocando su mando en el hombro del más joven- ¿quién era ese chico?

-Eh, yo....-Daichi daba mucho miedo-, no lo sé. Ese tipo choco conmigo y...

-No me refiero a el pequeño, sino al chico que conoces.

-¡Ah!, Suga-sempai.

-Sí, si él. ¿Cómo?, ¿cuándo? y ¿por qué lo conoces?.

-Fue mi sempai en la secundaria, jugábamos ambos en la posición de armador.

-Ya veo. -lo medito un segundo- Bueno, también es tiempo de irnos.

-Sí.

Daichi jamás creyó en los flechazos a primera vista por lo idealizado y fantasioso que era para él, pero lo que sintió con ese chico de cabellos plateados y un hermoso lunar bajo su ojo izquierdo fue tan poderoso e instantáneo que podría confundirse con ese sobrevalorado amor a primera vista. Sin embargo no era eso lo que sintió el músico, sino, algo más parecido a un deja vu, como reencontrase con alguien que conocía hace mucho tiempo . Ahora sentía que podía escribir mil canciones con la inspiración divina que le había entregado Suga.

 

Dos pisos más abajo...

Cuando los fans ya eran minoría y las puertas de acceso estaban casi vacías el manager de la banda creyó que su trabajo estaba por terminar, solo debía alistar un par de detalles y en menos de lo que su torturado cuerpo esperaba, ya estaría en una gran y cómoda cama de dos plazas para él solo. Pero para ese momento debía esperar aún.

-¡Te divertiste lo suficiente!¡¿No?!

-¡Veras lo que le hacemos a los que escapan de nosotros!

-¡Por favor!¡suéltenme!

Un par de guardias a simple vista retenían a un intruso, por lo menos eso es lo que pudo percibir el rubio. Pero noto que el par de sujetos se estaban propasando con el ser humano que mantenían reducido.

-¡Ja! ¿creíste que te íbamos a dejar escapar tan fácil?.-dijo el guardia 302-

-¿Duele, no?  -pregunto el guardia 304-, esto mismo le vamos a hacer a tus amiguitos.

-¿No te gusto vernos las caras?

-¡Ah!-una patada en el estomago hizo que el joven diera un grito ahogado-

-¡Ustedes!¡es suficiente!-dijo arto el manager-

-¡¿Quién eres tú?!-pregunto el 302-

-No me levantes la voz, patético.

-¡¿Quién demonios eres?!-pregunto el mismo guardia nuevamente-

-¡Cállate!¿no ves que es...? -trato de calmar el 304-

-Están despedidos.

-¡Pero señor!, el se metió con sus amigos sin permiso y se burlaron de nuestra seguridad. -trato de excusarse el 304-

-No me importa como llego aquí, desde un inicio fue un error de ustedes dejarlos entrar. Y no voy a soportar que uno de los fanáticos reciba violencia de un par de ineptos que se creen superiores por tener un traje.

-¡Pero!-protestaron los dos-

-Ahora salgan de mi vista si no quieren a parte del despido una demanda.

El par de ex-guardias se retiro entre la furia y la impotencia de ser despedidos y humillados por aquel tipo.

Cuando los hombres desaparecieron del campo de visión de Kei bajo la vista hasta el sujeto herido.

-¿Estás bien?

-Supongo.-dijo secándose la sangre que tenía en el labio-

-¿Qué haces aquí?, podría llamar la policía ahora mismo y a parte de recibir esa golpiza estarás encerrado en un calabozo hasta que paguen tu fianza.

-Buscaba a mis amigos.

-¿Y debo creerte?

-¡Sí!,  una avalancha de gente se llevo a uno de mis amigos y se perdió aquí adentro, pero no sabíamos donde ni que hacer. Solo vimos que uno de los accesos quedo desprotegido cuando se desmayo una chica y un tipo se estaba desnudando, nosotros simplemente entramos. Solo quiero irme, de verdad- dijo a modo de suplica-

-Tks, ¿cuántos son?

-Somos cuatro en total.

-Tks -chasqueo nuevamente la lengua en seña de hastió-, que molesto.

 

En la zona vip...

El deber de los guarda espaldas es velar por la seguridad de quienes tienen bajo su cuidado y Yaku sabía eso. Era organizado, meticuloso y con un gran sentido de responsabilidad, es por eso que era muy estimado por sus compañeros, mas todos sabían que cuando alguien hablaba de su altura era mejor huir. Lástima que Lev no tenía esa información.

El joven de cabello castaño se dirigía a los vestidores para tomar un ligero descanso después del arduo trabajo  del día, pero a pocos metros se topo con un sujeto sospechoso de contextura alta y que miraba en todas direcciones como buscando algo.

-¡Hey! ¿que buscas?

-¡Ah! -el chico alvino grito del susto-, ¡oh! me asustaste.

-Lo siento, pero no puedes estar aquí.

-Sí, sí. Por favor no le digas a los guardias.

-Yo soy de seguridad.

-¡¿Qué?!, wow eres muy bajito, no lo aparentas para nada. Por favor no le digas a nadie.

Fue como encender los sentidos asesinos de Yaku, quien no dudo ni un segundo en reducir aquel sospechoso que lo había insultado. Tenía grandes dotes marciales y sin importar que aquel tipo midiera aparentemente dos metros, con su potencial no fue muy difícil dejar el rostro de Lev pegado en el suelo.

-¡Ay,ay,ay,ay!-gritaba en chico de dolor-

-¡¿Quién eres y que haces aquí?!

-¡Suéltame!!ay,ay,ay,ay!

-Hice una pregunta, responde.

-¡Esta bien!¡pero no aprietes tan fuerte!

-Habla si no quieres terminar con tu brazo dislocado.

-¡Busco a mis amigos!

-¿Qué? -no se espero esa respuesta-¿tus amigos?

-¡Sí! -el castaño redujo la tensión-

-Continua.

-Estábamos buscando a uno de mis amigos que fue llevado por una masa de personas y quedo varado en alguna parte de este lugar, ¡¿puedes dejar de apretar tan fuerte?!.

-¿Y?

-Unos guardias nos quisieron atrapar porque no escucharon nuestras explicaciones y nos separamos. Ahora no sé donde están.

-¿Cómo se que no quieres ir con los chicos de la banda, y esta es solo una mentira?

-¡¿Qué?! -aun con el rostro en el frío suelo-, ¡ay,ay!, ¡ok,ok, entendí!. No preguntas, si respuestas.

-Exacto.

-Bien, porque no me interesa conocerlos.

-¿Qué?

-Me gusta su música y todo, pero no me interesa conocerlos.

-¡¿Y quieres que te crea eso?!

-Sí -dijo con los ojos verdes penetrantes a Yaku-

Ante la mirada el joven guarda espaldas quedo choqueado, aquel par de ojos esmeralda lo había dejado helado. Pero en ese mismo segundo escucho su auricular de seguridad llamando.

-"A quienes se encuentren dentro del recinto hay cuatro chicos perdidos, solo indíquenles la salida".

Aquel tipo enorme estaba diciendo la verdad.

-Está bien, te puedes ir. -dijo soltando el cuerpo del alvino-

-¡¿En serio?!

-Sal de aquí antes que me arrepienta.

-Ok, ok-dijo levantándose del frio suelo-, esto...¿donde está la salida?

-...-suspiro arto-ven, te indico.

-¡Gracias!

-No hagas tanto alboroto.

-Está bien. Hey.

-¿Sí?

-¿Tienes un arma?-dijo curioso-

-¿Quieres que te golpee con ella?

-¡No!, pero tienes una, ¿no?-dijo con suma curiosidad-

-...-dudo si contestar, aun era sospechoso. Pero bastante idiota-Si.

-¡Wow!¡es genial!, eres como los tipos de las películas.

-No es para tanto.

-¡Pero me tiraste al suelo siendo tan bajito!

-¡¿Quieres probar de nuevo?!

-¡Perdón!¡Perdón!-dijo horrorizado-, lo que quiero decir es que fuiste asombroso.

-No digas más tonterías. Ven, es por aquí.

 

A las afueras del recinto...

Casi veinte minutos habían transcurrido desde que el concierto había finalizado, y aun no había señales de Shoyo por ninguna parte. Además el frio de inicios de noviembre se estaba haciendo presente y estar a esas horas fuera ya pasaba la cuenta.

-¿No habrá olvidado que veníamos por él?-pregunto Akaashi-

-No lo creo.-contesto Kenma-

Kenma y Akaashi se conocían hace un par de años cuando entraron a la universidad y coincidieron en clases de comunicación, la cual aborrecían y por una especie de sensor adaptativo ambos simpatizaron con el otro. Al ser los dos personas algo tímidas y con un carácter reservado, pudieron encontrar alguien agradable con quien hacer trabajos y pasar el rato. Desde ese momento hasta la actualidad, ambos habían logrado confiar plenamente en el otro y aceptar sus opiniones.

Ahora el dúo se estaba comenzando a congelar mientras esperaban que Hinata saliera del concierto.

-Me envió un mensaje.

-¿Qué dice?

-Que disculpemos la demora y que viene.

-Ya veo. ¿Le habrá sucedido algo?

-Probablemente, siempre le suceden cosas.

-Tienes razón.

Se encontraban en la parte trasera del edificio esperando mientras un solitario farol los iluminaba; Kenma jugaba con su consola y Akaashi leía un libro.

                                                                   *           *            *

El ambiente era gélido, pero para Kuroo y Bokuto la noche había sido perfecta. Estaba claro que Tsukishima y Daichi los querrían moler a palos por salir sin ninguna precaución, pero ni al gato y ni al búho le importaba en lo más mínimo en esos momentos las palabras de sus policías personales. Solo deseaban un poco de aire  fresco en el rostro (no aire acondicionado), y fumar un par de cigarros.

Dieron una calada honda a sus respectivos cigarros, retuvieron el aire unos segundos y expulsaron el humo en forma natural y relajada.

-Oh, esto es vida.

-Tienes razón, ya estaba aburrido de estar encerrado.-dijo Bokuto-

-¿Qué crees del concierto?-pregunto algo serio Kuroo-

-¿A qué te refieres?

-Mmm, a como lo sentiste.

-Supongo que igual que siempre.

-¿Loco y  explosivo?

-Exacto, ¿y tú?

-Creo que emocionante. Ya sabes, el público, la adrenalina, el corazón  bombeando sangre de forma alocada a todo el cuerpo, el oxigeno entrado, co2 saliendo. Creo que esto me gusta bro.

-Supongo que siento lo mismo, pero diferente.

-Tienes razón.

Mientras caminaban divisaron dos figuras bajo un farol. La intriga los atrajo.

-Hey bro, un par de chicas.-dijo Bokuto-

-Hace frio, ¿serán fans?, ¿qué dices?

-No podemos defraudar a nuestras fans bro.

-Bien dicho hermano.

 

Se acercaron a ese par de figuras taciturnas desde las sombras, pero grande fue su sorpresa cuando comprendieron que esas figuras correspondían a un par de chicos. Aun así, no tenían nada mejor que hacer y decidieron pasar a saludar.

-Hey -comenzo Kuroo-

-Hey-acompaño Bokuto-

El rostro de ese par de chicos los miraron inmutables y eso descoloco a los músicos. Fueron unas miradas tan indiferentes que no concordaba con la de los fans, quienes se habrían abalanzado sobre ellos sin pensarlo.

-Si es dinero lo que buscan, puedo decirles que entre él y yo no hacemos más de mil yenes.-Dijo Akaashi con tono defensivo-

-Hey, hey, hey, no buscamos dinero - dijo Bokuto divertido-

-No queremos drogas-contesto Kenma-

-No tenemos drogas -Dijo Kuroo sorprendido-

-¿Entonces nos van a asesinar?-dijo Kenma ahora sin apartar el rostro de su consola-

-No, no. Solo queríamos saludar.-dijo Kuroo finalmente-

La situación de por si era extraña para los cuatro. Porque para Akaashi y Kenma tener a ese par de sujetos sospechosos frente a ellos solo para decir "hola", no era la cosa más normal del mundo. Y para Bokuto y Kuroo no ser reconocidos era aun más sorprendente.

-¿Podemos fumar nuestros cigarros aquí?-pregunto Kuroo en un acto de tranquilizar el ambiente enrarecido-

-Como quieras-dijo Kenma-

-Eres libre de sentarte si quieres-respondió Akaashi-

Bokuto y Kuroo se miraron de reojo, pero solo se dispusieron a sentarse junto a ese par de antisociales. Bokuto decidió sentarse junto al chico del libro, porque le pareció interesante el grueso que tenía el objeto, mientras que Kuroo se dispuso al lado del chico con la consola.

-¡Wow!, eso es un gran libro.-dijo asombrado el búho- ¿de qué trata?

-Sí lo es. Creo que es una historia larga de contar.

Bokuto puso cara de cachorro triste y Akaashi no pudo negarse a explicar.

-Parece un juego difícil-dijo Kuroo entretenido viendo como el chico de cabello rubio y raíz negra mataba criaturas deformes-

-Sí.

-¿No es mejor que trates de apuntar a su estomago?-Dijo Kuroo luego de ver como vencían dos veces al chico en la misma forma-

Kenma estaba hace media hora tratando de eliminar al jefe del nivel, pero el campo de fuerza nivel cinco le impedía usar su espada Zeus contra el enemigo. Es por eso que decidió tomar la sugerencia de ese extraño tipo.

-¡Hey!¡lo venciste!-dijo como si la victoria también fuese parte de él-

-No es para tanto.

-¡Vamos!, fue genial.-con una sonrisa ladina-

Los cigarros se habían consumido  y el tiempo se había pasado más rápido de lo que pensaron. Tanto para Bokuto y Akaashi, porque el primero escuchaba con atención cada palabra que el azabache decía acerca de su libro, quien no se sentía para nada incomodo como en un principio relatando lo que para él era una historia interesante. Mientras que para Kuroo y Kenma las cosas eran más calmas, ya que este ultimo continuaba tecleando sin parar una etapa tras otra siendo visto atentamente por unos orbes del azabache, ojos que analizaban cada jugada para de vez en cuando dar algún consejo.

Pero el teléfono de Kuroo sonó sin previo aviso.

-Tks-chasqueo con la lengua al ver el numero entrante- ¿Sí?. Está bien, no es para tanto. Ok, ok. Si, está conmigo. Adiós.

Kenma miro de reojo al tipo extraño quien se dio cuenta de la curiosa mirada, pero rápidamente volvió a su juego.

-Lamentablemente ya nos debemos ir, la policía nos llama.

-Suerte-consiguió sacar de los labios del más bajo-

-¡Bro!¡ya es hora!-dijo a un enajenado búho que escuchaba atento a Akaashi-

-¡¿Qué?!, ¡pero si la historia estaba interesante!-dijo protestando como un niño pequeño-

-Ya sabes cómo se ponen.

-¡Ah!-protesto Bokuto-, está bien-dijo enfadado-

De mala gana los hermanos se levantaron, no sin antes dar una última mirada a ese par de chicos antisociales que de una forma u otra los habían entretenido durante un rato.

-¡Fue una buena historia!, me encantaría saber si los protagonistas logran reencontrarse.-dijo emocionado Bokuto- ¡Adiós!

-Adiós.-dijo Akaashi un poco turbado por la emoción del otro-

-Deberías prestar atención a las zonas azules y las violetas cuando tratas de matar a los vigilantes.-señalo Kuroo-, suerte con el juego.

-Sí. Suerte.

Los chicos raros se alejaron en la misma dirección en la que habían llegado y dejaron nuevamente tranquilos en la soledad de la noche a Kenma y Akaashi.

-Era un par de idiotas.-dijo Kenma-

-Ni que lo digas-afirmo Akaashi-

-Creí que nos matarían y venderían nuestro órganos.

-Yo también, pero solo eran raros.

-Tenía mucha energía el que estaba contigo-dijo Kenma-, me canse de solo oírlo.

-Shoyo también tiene mucha energía.

-Lo sé, pero no es igual.

-Claro; el estaba contigo te dio consejos y tu aceptaste.-no era algo normal en Kenma-

-Ya no tenía más opción.

-Así parece.

En ese momento unas sombras con características familiares se acercaron al par.

-¡Kenma!¡Akaashi!-dijo la voz inconfundible de Hinata-

El chico de cabellos anaranjados corrió hasta la pareja que estaba bajo el farol. Luego de unos segundos pudieron divisar que las otras figuras correspondían a Lev, Tadashi y Koshi. Mas la impresión fue grande al ver como el pecoso se encontraba herido.

-¿Dónde demonios se metieron?-no pudo evitar preguntar Akaashi-

-Es una larga historia-dijo Suga-

-Hace frio-dijo Kenma tratando de calentar sus manos-, es hora de irnos y curar a Yamaguchi.

-Tiene razón Kenma, de camino le contamos que sucedió.-dijo Suga-

Tomaron un taxi, aunque el conductor no estaba muy feliz de llevar a seis personas en su vehículo, cuando vio el rostro de Tadashi se lo pensó dos veces y de mala gana acepto. Ya en el departamento que Kozume y Hinata compartían trataron las heridas del pecoso y tomaron algo caliente para pasar el frio otoñal.

-¿Ahora nos pueden decir que le sucedió a Tadashi?-dijo un poco molesto Akaashi-

-¿Por dónde empezamos?-medito Suga en voz alta-

-Conocimos a dos reyes, aunque Suga ya conocía a uno. A Lev lo tiraron al suelo y a Tadashi lo golpearon los guardias.-confeso Hinata desde la cocina-

Akaashi y Kenma no pudieron evitar mirarse con asombro. Habían muchos detalles que faltaban, ¿pero qué era eso de conocer a dos reyes?¿tirar al suelo a Lev?¿guardias que golpean a Tadashi?. Fue una noche más que alocada para esos cuatro.

Cuando finalizaron  las explicaciones y las dudas habían quedado despejadas las mentes de Keiji y Kozume estaban mucho más claras.

-¿Y a ustedes no les sucedió nada interesante antes que llegáramos?-pregunto Lev-

Los chicos se miraron de reojo y entre suspiros contestaron.

-No. Nada interesante. -resolvió  Kenji-

-Solo los esperamos a ustedes y pasamos frio-dijo Kenma-

-¡Lo sentimos!-dijeron los cuatro implicados-

Esa noche todos durmieron desparramados en el pequeño apartamento, pero ninguno se imaginaba que los encuentro fortuitos tras el concierto era tan solo el preludio de lo que sucedería en el futuro.

Notas finales:

Espero que les guste el cap e.e.

Los niños se estan recien conociendo >-<...aunque Daichi tiene sus dudas e.e.

Nos leemos.

Creo que voy a subir los viernes con más seguridad c:


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