Ver a Severus y Sirius pelear habia sido como una revelación para James, él que llevaba dos meses intentando obtener la atención que se merecía por parte del Slytherin, no habia logrado ni siquiera que Severus lo volteara a ver.
Pero Sirius molestándolo y diciéndole quejicus habia logrado que Severus le prestara atención, una atención que él también quería recibir. Así que se le unió a su amigo planeando burlas y bromas constantes hacia el Slytherin.
Provocando que Peter se les uniera y Remus y Lily los reprendieran, pero a James le importaban muy poco los reclamos de Remus y Lily ya que por fin tenia lo que quería.
Ahora cuando tenía clases con Slytherin, Severus siempre lo volteaba a ver, atento por si él, Sirius o Peter le querían hacer una broma, y no solo en clases también cuando estaban en el gran comedor Severus le dedicaba rápidas miradas que a él le gustaban.
Con la atención para nada forzada que ahora tenía de Severus, James se sentía contento y con muchas energías renovadas, para andar haciendo todo tipo de travesuras y merodear por el castillo casi todas las noches con Sirius, Remus y Peter.
Cuando se dio cuenta las vacaciones de navidad se aproximaban rápidamente y él se sentía emocionado por ver a sus padres, no lo diria en voz alta pero los habia extrañado mucho.
Caminando por los pasillos del castillo con Remus por pura casualidad escucho a Lily decirle a Severus, que no se olvidara de ir a verla a su casa en las vacaciones. Y aquello no le habia gustado nada.
—Mañana nos vamos de vacaciones, deberíamos de aprovechar esta noche para, recorrer las partes del castillo que todavía no conocemos— les dijo James a sus amigos, mientras buscaba su capa de invisibilidad.
—Yo me apunto, necesito distraerme y pensar en cosas divertidas, estoy seguro que mis vacaciones serán horrorosas, ya me imagino los reclamos de mi madre— dijo Sirius levantándose de su cama.
—Todo estará bien Sirius— le dijo Remus poniendo una mano en su hombro.
—Lo dices porque no conoces a mi madre—
—Rems tiene razón Sirius, además si quieres puedes venirte a pasar las vacaciones conmigo— le dijo James con una sonrisa.
Sirius sonrió a sus amigos y dijo— si tienen razón, y tal vez me dé una vuelta por tu casa James—
—Eso espero, Rems tú y Peter también son bienvenidos a mi casa, claro si quieren ir, a mis padres les haría muy felices conocerlos—
—Claro que me encantaría ir James, oigan no creen que Peter ya se está tardando mucho—dijo Remus.
—Rems, ya sabes cómo es Peter no se vendrá hasta que haya comido tanto que ya no pueda comer más—dijo Sirius, imaginándose a Peter indigestado otra vez.
—Mejor vamos a buscarlo antes de que se indigeste otra vez— dijo James caminando hacia la salida del dormitorio con su capa de invisibilidad en la mano.
A su padre no le habia gustado nada enterarse de que su mamá y el eran Magos, pero se habia mantenido normal ante ese hecho. Pero cuando regreso a su casa a pasar navidad se llevó la sorpresa de que su padre habia sido despedido y habia empezado a consumir alcohol desmedidamente. Provocando que tuviera una actitud agresiva hacia él y su mamá, llegándoles a decir que los odiaba.
Cuando los efectos del alcohol abandonaban a su padre este pedía perdón por lo que habia hecho cuando estaba borracho, y su madre lo perdonaba pero él no podia, no podia porque el intuía que su padre se volvería a emborrachar y a comportar cruel con ellos.
Así que cuando las vacaciones de navidad acabaron y tuvo que regresar a Hogwarts no quiso volver, no quería dejar a su mamá sola con su padre.
Pero su madre no le hizo caso y de todas maneras lo fue a dejar a King's Cross, para que abordara el expreso a Hogwarts.
Antes de subir al tren vio a lo lejos James Potter su pesadilla personal despedirse de una pareja algo grande por lo que pensó que eran sus abuelos, pero rápidamente dejo de verlo tenía que buscar a Lily y disculparse por no haber ido a verla como habían quedado.
Antes de que pudiera encontrar a Lily, tuvo la mala suerte de toparse con Sirius quien intencionalmente le puso el pie para que se cayera—fíjate por donde caminas quejicus— le dijo Sirius burlón, saludando con su mano a James que se acercaba hacia ellos.
—Quejicus, es lindo que te quieras poner de tapete para que pase, pero no eres un tapete digno de mí— le dijo James burlón pasando al lado de él.
Así que enojado por la burla agarro el pie de James, provocando que este también se cayera.
—Uchhh— dijo James levantándose al mismo tiempo que Severus, ambos se vieron por unos segundos a los ojos hasta que James dijo —Rompiste mis lentes quejicus arréglalos—
—Arréglalos tu Potter— le dijo Severus mientras se sacudía la túnica.
James sonrió burlón y dijo —esta me la vas a pagar quejicus— antes de irse con Sirius, quien se reía un poco de su amigo debido a su caída.