Pov Seungkwan
Estoy completamente nervioso, paranoico, el día de ayer desperté tirado en medio de la cocina y completamente solo, no tenía ningún indicio de ser abusando mientras estaba inconsciente, pero como mierda puede abusar de mi un maldito fantasma, quiero pensar que sólo fue producto de mi mente agotada por tanto trabajo.
Hoy he quedado con mi mejor amigo Seokmin y su novio para tomar desayuno en una cafetería cerca de casa, pero voy terriblemente atrasado producto de la escena de ayer.
—Siento la demora Seokminiie —Me disculpo apenas tomo asiento.
—No te preocupes Kwaniie, entiendo que todavía estés cansado por los turnos caóticos que tuvimos —me tranquiliza mi amigo con una sonrisa de oreja a oreja, siempre tan comprensivo.
A Seokmin lo conocí en la Universidad, fue el primero en dirigirme la palabra, y desde ahí no nos volvimos a separar, lo aprecio demasiado, y hoy después de 7 años de Amistad al fin me presentara a su querido novio, llevan alrededor de 4 meses saliendo.
—S-si... Bueno ya estoy mejor —le miento, lo que menos quiero es que se dé cuenta de que algo inexistente me pasa.
—Chan ya debe de estar por llegar, de seguro que se ha atrasado con el tráfico.
—Seguro y cuentame sobre él antes de que llegue —le pido para tratar de distraerme.
—¡Claro! él es tan hermoso.....—la voz de Seokmin sonó dulce pero se fue apagando hasta llegar a ser un solo murmullo apenas inaudible.
Entre en pánico cuando veo a la persona que se acercó a nosotros, tal vez sólo estoy alucinando ¡otra vez...!
—Hola soy Hansol y seré tú mesero el día de hoy, ¿Puedo anotar su pedido? —dijo con la misma sonrisa de ayer y sólo se dirigía a mi.
Mire a Seokmin que seguía hablando sin percatarse de la presencia del supuesto mesero.
—¿Vas a pedir algo Kwaniie? ¿Un caramel macchiato tal vez? Se que es tu favorito o prefieres un jugo natural de piña —dice guiñándome uno de sus ojos color miel.
¿Como sabe eso?
Mis manos comenzaron a sudar y a temblar, sentía mi pulso cada vez más acelerado, mis oídos se taparon pero no podía quitar mis ojos de los suyos, es el mismo desconocido "Chico fantasma" de ayer, creo que realmente me estoy volviendo loco o he tenido una premonición y el chico realmente trabaja aquí y en algún momento lo conocería, osea hoy.
—Kwaniie, hey Seungkwaniie...¡¡SEUNGKWAN!! —logra llamar mi atención —¿Estas bien? Estas muy pálido, y estas sudando.
—Y-yo... Uhmm... —mi mirada pasaba desde Seokmin hasta el desconocido.
—¿Que es lo que te pasa? ¿Que miras? —me dijo mientras miraba en la misma dirección que yo.
—¿Q-que m-miro? ¿Q-que no v-ves al m-mesero que e-está a n-nuestros l-lado? —tartamudeo.
—¿Que mesero? No hay nadie a nuestro lado ¿De que hablas Seungkwaniie?
¡¡No puede ser!! Pero si el chico está justo a su lado y enfrente de mi.
—¡¡Que no ves al maldito mesero a tu lado!! —mi voz sonó muy fuerte llamando la atención de la gente alrededor nuestro.
El desconocido "chico fantasma" seguía parado allí vestido con el típico traje de mesero sin moverse, me sonreía, me miraba de pies a cabeza, me saludaba con su mano, me guiñaba un ojo, y yo solo podía mirar alrededor pero al parecer nadie se percataba de la presencia de ¿Hansol? Creo que así se presentó.
—Tranquilo seungkwan, no te alteres —mi amigo trataba de tranquilizarme.
—¡Pero si hay un jodido chico justo aquí! ¿QUE NO LO VES? —me pare de la silla alterado apuntando al "chico fantasma" pero sin acercarme.
—Seungkwan tranquilízate por favor, sera mejor que te sientes estas llamando la atención de la gente.
No podía tranquilizarme, Seokmin no lo ve, la gente de aquí no lo ve, ¿Por que solo yo puedo verlo?
—Si Kwaniie sera mejor que te calmes, te puedes desmayar igual que ayer —volvió hablar "el chico fantasma" mientras soltaba una risa burlona.
—¡CALLATE JODER! —su voz me irrita es la segunda vez que lo veo y ya siento que lo odio.
—Pero yo no he dicho nada —dice seokmin mirándome sorprendido.
—No te digo a ti si no al chico que esta al lado tuyo —digo enojado ¿Como maldita sea nadie puede verlo?.
—Pero kwaniie ya te dije que no hay nadie a mi lado ¿Realmente estas bien? —Seokmin ya esta parado a mi lado y en su mirada hay un deje de preocupación.
—Estaré bien cuando me digas que ves al chico que esta parado allí, ¡¡Por favor dime que lo ves!! —le decía a Seokmin con una notable desesperación en mi voz.
—Y-yo... Uhm... Lo siento pero no veo a nadie más que a nosotros, no veo a ese tal mesero...—dijo apenado mirándome con preocupación.
Sólo eso me faltaba para creer que hay algo mal en mi cabeza, o el chico ¿Hansol? Es un fantasma realmente, pero ¿Por que yo? Nunca he creído en cosas paranormales. Aunque esto definitivamente me hace dudar. O debería de ir a un psiquiatra. ¡¡No se que hacer!!
—Cariño... ¿Estas bien? —la voz del "chico fantasma" me atrae a la realidad, porque esto es la realidad ¿Verdad? Ya no se que pensar.
Cuando lo miro esta a tan sólo unos centímetros de mi, siento su respiración chocar en mi cara, huele a menta, un olor familiar, lo miro fijamente, ahora que esta así de cerca puedo darme cuenta de lo guapo que es, tiene unos hermosos ojos color miel, sus cejas perfiladas y unos labios muy finos pero de un lindo color, su piel blanca se ve muy suave y tersa, su cabello cae perfectamente sobre su frente ni muy largo ni muy corto, ¡Dios su cercanía me tiene confundido! Alza lentamente su mano y acaricia suavemente mi mejilla como con miedo a que fuera a romperme, su tacto es tan real como los gritos de Seokmin a mi lado.
—¡¡SEUNGKWAN!! —oigo a seokmin cuando caigo nuevamente desmayado, pero no se si es por mi locura o por que el desconocido "Chico Fantasma" me a tocado y fue tan real como cualquier otra cosa.
"Seungkwaniie deberias despertar"
Eso lo que escucho en medio de mi inconsciencia y el alboroto a mi alrededor.