Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Enfermizo Paraíso por kairitempa

[Reviews - 3]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Sí tarde montones, pero enserio se me dificulta escribir rápido ;;

Gracias a Dona <3 fuiste mi primer review en esta historia y eso me hizo muy feliz, espero que la sigas leyendo y que te guste.

*Vernon PoV

 

-¡No puedo creer que lo hicieras de nuevo! ¿Acaso no te importa el daño que le estas haciendo?- Mingyu estaba frente a mí, gritándome exasperado, incluso pasaba con desesperación ambas manos por su cabello signo claro de la frustración que tenía por no poder hacer nada.- Hansol, lloro hasta dormir… ¿Enserio así quieres hacer que te ame?

 

Solo suspire al escucharlo y mantuve mi mirada fija en el móvil, subiendo como si nada por las noticias de Facebook, aunque quisiera negarlo, Mingyu tenía razón, en lugar de hacer que me ame mas solo hago que me odie, pero ¿qué más puedo hacer? Él me desobedeció, era justo que le castigara por eso, además así podía hacer que mi recuerdo estuviera en su pensamiento un buen rato.

 

-Por favor Hansol, escuchame, si las cosas van a ser así olvídate de contar conmigo.- Mingyu suspiro y se sentó junto a Sofía que solo nos miraba en silencio con un rostro de preocupación que me hacía sentir hasta cierto punto mal.- Es la última vez que lo tratas así Vernon o lo sacaré de aquí y lo llevaré de nuevo a su hogar.

 

Por fin bote el móvil por ahí y mire con seriedad a Mingyu, el cual me retaba con una mirada en verdad furiosa. Sonreí y pasé una mano por mi cabello, mirando después al techo, no me importaba lo que dijera, después de todo él no podría hacer nada por salir de aquí con mi Seungkwan.

 

-Sí, sí… Lo que digas Mingyu… Seré más bueno con el chico. Ahora si no te importa, iré a dormir que mañana debo presentar exámenes.- Mentí y me puse de pie para ir a mi habitación, mientras lo hacía escuche las maldiciones de Mingyu y las palabras de calma de mi hermana ¿porque interfieren tanto? Después de todo ellos no pueden hacer nada por que cambie, tratándose de Seungkwan jamás cambiaría.

 

— § • § —

 

Con pereza me levanté de la cama tan pronto el despertador comenzó a sonar, tarde en encontrarlo pero al hacerlo lo apague y suspire, en verdad me estaba cansando de esta farsa, no me agradaba para nada el ir a la escuela y fingir al igual que los demás qué estaba ansioso por que encontraran a Seungkwan. Cuando escuche a Sofía avisandome que el baño estaba listo, salí de la cama y fui a tomar un baño lo suficiente largo como para poder dejar al tonto de Mingyu sin agua caliente, esa seria mi venganza por molestarme ayer con lo que hacía y cómo educaba a mi Seungkwan.

 

Tras vestirme y estar listo baje a la cocina, encontrándome a mi hermana que de manera feliz cocinaba el desayuno, poco después se escuchó el grito de molestia de Mingyu porque le dejamos sin agua.

 

-¡Hansol! ¿Porque hiciste eso?- Me recrimino mi hermanita y riendo me alcé de hombros, sentandome para poder comer el desayuno que ya me ofrecía.- Ah, en verdad no se te quitara nunca esa actitud maldosa.- Negué y ella solo sonrió, sentándose después frente a mi.

 

-Sé que me dirás un gran sermón como el de Mingyu así que suéltalo ya.- Le dije sin ganas, comiendo después en espera de que me dijera lo que sea que se supone diría, igual no lo tomaría en cuenta.

 

-Hermano… Sé lo mucho que te importa todo esto y aunque sabemos que todo lo que hacemos está mal, nunca me he negado a ayudarte, ni siquiera he pensado en las consecuencias.- Escuché su suspiro y una de sus manos sobre la mía que andaba libre, obligándome así a que la viera.- Por favor Hansol, no trates tan mal a Kwannie.

 

La mire al escuchar aquella súplica y aunque quisiera jamás podría negarle nada si me ponía esas caras.- Esta bien, intentare de nuevo ser complaciente con él ¿feliz?- Ella asintió feliz y me soltó para después levantarse y preparar el desayuno que sería de Mingyu.

 

-Por cierto, ayer habló nuestro padre, dijo que estaba ansioso por que terminaras ya la escuela.- Rodé los ojos con molestia y mejor volví a comer.- El tiempo se está acabando, Hansol.

 

-Y ustedes no dejan de entrometerse con lo que hago con él.- Le recordé con un suspiro y ella rió mientras ponía en la mesa el plato de Mingyu.- ¿Y mamá?

 

-De ella aun no sé nada, creo que sigue de viaje.- Asenti y termine de comer para poder ponerme de pie.- ¿No esperas a Mingyu?

 

-Para nada, no quiero escuchar más sermones.- Me acerque a ella y besé con cariño su frente.- Cuidate y procura que él coma ¿si?- Ella asintió con una sonrisa y tras despedirse con la mano salí de la cocina para poder ir a la salida.






En el camino se unió a mi Seokmin que con unas ojeras terribles recitaba de memoria algo. No pude evitarlo y reí con poco disimulo, algo que sacó de sus pensamientos a mi compañero que me miraba con cansancio.

 

-¿Estas bien?- Pregunte y señale las terribles ojeras que tenía, él sonrió y asintió con cierta ilusión.- ¿Has encontrado algo?

 

-La última vez que vieron a Kwannie fue con Seungcheol ¿no?- Asentí y él aún con emoción siguió con su relato.- Cheol lleva perdido el mismo tiempo que SeungKwan.

 

-¿Y eso qué? Todos lo sabemos así que no hay nada de…

 

-Ayer encontré a JiHoon.- Me interrumpió e hizo que ahora si tuviera cierto interés por lo que me decía.- Estaba en una tienda de ropa por las afueras de la ciudad, entonces lo seguí.

 

-Sabes que te puedes meter en problemas por algo así ¿verdad?- El asintió y se alzó de hombros, cuando se trataba de su amigo, nada importaba.

 

-Ya sé en dónde está Seungcheol, seguro que el muy maldito tiene a Kwannie con él.

 

-Oye, Seokmin en verdad no creo que…

 

-¡Ya deja de decir lo que piensas! No ayudas en nada… ¿no lo entiendes? Esto podría ser el fin de todo, lo encontraríamos y entonces…

 

-¿Y si no está con él?- Pregunté cortante, mirando con molestia a Dk que ahora tartamudeaba cosas.- Mira… Si en verdad hubiese sido él ¿No crees que la policía ya lo habría encontrado? Y aún más, no creo que si en verdad es el que lo ha secuestrado estaría en un lugar que hasta tú encontraste. Ya deja de ser tan idiota, Seokmin.

 

Molesto decidí mejor alejarme de él, perdiéndome entre los alumnos. Era mejor así, sin esperanzas y lejos de ese imbécil, era peligroso que logrará hablar con él, después de todo sabía muchas cosas que podrían hacer que las sospechas pasen a mi. Sí, era mejor hacer llorar a Seokmin y tirarle cada una de sus suposiciones, eso me daría más tiempo para ganarme a SeungKwan, aunque fuese solo un poco…

 

— § • § —

 

-No puedo creer que de verdad hayas reprobado ¡Estudiaste demasiado!- Joshua acariciaba la espalda de JeongHan que no dejaba de llorar de una manera desconsolada.- Tranquilo mi ángel, verás que podrás recuperar la nota.

 

-¿Pero como?... Odio a ese profesor ¡Incluso pasó al idiota de Hansol!

 

-Oye, aquí estoy.- Medio alce mi mano y él me miró con molestia, decidiendo mejor abrazarse a Joshua.- Como sea…

 

-Por cierto, Hansol ¿Has escuchado los rumores?- Me preguntó Joshua que solo seguía acariciando la espalda de su novio. Negué y él se acercó un poco más, acción que yo imite.- Seungcheol volvió a la ciudad, muchos dicen que es para entregarse junto con SeungKwan pero otros dicen que es para delatar a alguien ¿tu que crees?

 

-¿Porque me cuentas esto?- Con el ceño fruncido me aleje de él y bebí mas de mi jugo, intentando ignorar el pequeño miedo que crecía en mi.

 

-Bueno, tú y SeungKwan eran casi pareja, creí que te importaría saber algo sobre él.- Lo mire con molestia y Jeonghan se quejo, apartándose de Joshua.

 

-¿Que tanto le dices? Es un maldito egoísta, es más que obvio que no le importa lo que le pase al pobre de Kwannie.- Mi molestia aumento y sin contenerme un poco lance la caja que antes tenia mi jugo a la cabeza del afeminado novio de mi primo.

 

-No hables como si en verdad me conocieras.- Sin decir más me puse de pie y comencé a buscar con la mirada a Mingyu, las cosas sin duda se estaban poniendo mal y necesitaba hablar con él para poner una solución. Y al parecer él pensaba lo mismo.

 

-Hasta que te veo, Hansol. Debemos hablar ya.- Murmuró tan pronto estuvo cerca de mí y tomándome con fuerza de uno de los brazos me hizo seguirlo por lo que faltaba de la cafetería, saliendo ambos bajo las atentas miradas de varios alumnos.

 

Mientras le seguía me solté de su agarre y miré su espalda por un momento antes de que hablará.- ¿Qué haremos ahora? Los rumores son ciertos, ví a Seungcheol en la entrada cuando llegue con Wonwoo y lo peor es que parece ubicarnos ya a todos.- Cuando estuvimos lo suficientemente lejos de los alumnos se detuvo y volteó a verme, estábamos ambos en la parte trasera de los edificios.- Esto es peligroso Hansol y lo sabes, al parecer él piensa delatar todo lo que sabe a la policía y si así lo hace irán de inmediato a investigar en nuestras casas…

 

Aunque no quisiera, de nuevo Mingyu tenía la razón y esta vez no podía hacer nada para solucionar todo rápido. Me crucé de brazos y sin muchas ganas me recargue en la pared, mirando sin interés el suelo mientras escuchaba el suspiro de frustración de Mingyu que se dejaba caer contra la pared para terminar sentado en el suelo, ocultando su rostro entre sus manos.

 

-Es el fin, nos van a encontrar y todos seremos castigados.- Reí al ver de esa manera a Mingyu e ignorando su mirada de molestia me senté a su lado, palmeando después su espalda.- ¿Por Qué estás tan tranquilo? ¿De verdad no te importa lo que llegue a pasar?

 

-Bueno, piensalo bien, Mingyu, después de todo ¿qué puede decirles ese idiota?... ¿Que golpeó y maltrató a su novio hasta dejarlo inconsciente solo porque le pidió que terminarán? Recuerda que hasta donde él sabe tú y yo aparecimos esa tarde para rescatarlo de su departamento, después de eso no hay nada más que él pueda saber ¿o si?- Mingyu negó y se relajo un poco, acomodándose mejor para estar en una mejor posición contra la pared.- Si llegara a culparnos del secuestro de Seungkwan nosotros podemos seguir ocultandonos tranquilos, hemos seguido con nuestras vidas normales y no hay nada de raro en nuestras rutinas, recuerda que todo esto ha sido planeado a la perfección, nada podría salir mal.- Le dedique una sonrisa confiada y antes de que él me pudiera decir algo noté como su expresión cambió a una de preocupación, fue entonces cuando giré y me encontré de frente con Seokmin que nos miraba a los dos atónito, apretando con fuerza un cuaderno que llevaba entre sus manos.

 

-Ustedes dos… ¡Malditos! ¡Todo este tiempo fueron ustedes!- Gritó con furia y sin contenerse se acercó hasta mí que era el más cercano y aunque quise levantarme él me ganó, llegando directo a mi con un puño que golpeó con fuerza mi mejilla, haciendo que me recargara un poco en Mingyu que tan pronto pudo se puso de pie para ir junto a Seokmin.- ¡Los odio a los dos! ¡Malditos!... Engañandome a mi y a todos mientras el pobre de Kwannie sufre…- Antes de que pudiera seguir, Mingyu lo tomó por atrás del cuello y con su otra mano cubrió su boca, mirándome después a mi que sin que me dijera que hacer me acerqué a ellos.

 

-Lo siento Seokmin.- Me disculpe y sin más miramientos golpeé con fuerza su estómago, después Mingyu lo soltó y empujo, haciendo que cayera en cuatro frente a mi. Noté su mirada, estaba llorando y con la misma me hacía miles de preguntas que no podía contestar, me dolió verlo así pero no podíamos dejarlo libre y menos tras todo lo que sabía, cerré mis ojos y antes de que lo volviera a golpear escuche como se quejaba por última vez. Mingyu se me había adelantado y sin sentimientos pateó su rostro, logrando noquearlo con el primer golpe, ahora DK estaba inconsciente frente a nosotros.

 

-Joder ¡Vernon! ¿Ahora que haremos con él?- Mingyu frustrado pasaba ambas manos por su cabello, caminando de un lado a otro antes de ir a la esquina del edificio, buscando a alguien que anduviera cerca pero estábamos solos. Después volvió y recogió lo que antes había tenido entre sus manos Seokmin, aquél cuaderno de notas inútiles que reunía con posibles pistas de lo que podría haberle pasado a Seungkwan. Mingyu lo revisó en un intento por calmarse mientras yo me hinque y verifique el golpe que tenía Seokmin.

 

-Creo que tengo una posible solución a esto.- Sonreí y mire desde mi lugar a mi amigo que negando cerró el cuaderno y me miró, esperando a que le diese la solución. De nuevo estaba apuñalando a Seokmin pero debía de hacer lo que fuese con tal de mantener a Seungkwan conmigo, me levante y sacudiendo mi pantalón me acerque a Mingyu.- Diremos que esto fue una riña porque él creía que yo tenía que ver con el secuestro de Seungkwan.

 

-Sí claro, la mejor solución de todas ¿qué haremos cuando nos delate con la policía?-Enarcó una ceja y aún molesto me miró, lanzando el cuaderno de notas a un lado de Seokmin.

 

-Bueno, él ya ha ido varias veces a contar sus suposiciones, será fácil que no le crean.- Por fin Mingyu se notó más tranquilo.- También me encargaré de mandarle fotos de Seungkwan, lo amenazaremos con hacerle algo a él si dice algo y si tranquilo, me encargare de que sea una cuenta falsa desde donde le mande todo.

 

-Aún no sé porqué acepté unirme a ti, pero es lo último Hansol, si nos descubren yo me iré con Wonwoo ¿Entendido?- Asentí y él solo palmeo mi hombro antes de caminar, supongo que a su salón. Le dí una última mirada a DK y sintiendo un pequeño remordimiento decidí mejor seguir a Mingyu, era difícil traicionar la amistad que me había brindado Seokmin pero ahora era alguien peligroso para mi, así que lo mejor era seguir así, negandolo todo y tirándolo de a loco con sus suposiciones.

 

Al igual que Mingyu fui a mi salón pero solo a recoger mis cosas que Joshua se había encargado en llevar y despidiéndome de él salí del salón para de una vez por todas irme de la escuela, no tenía ganas de seguir ahí para contestar las preguntas de mi reciente “riña” y mucho menos quería volver a casa, seguro Seungkwan se portará frío conmigo y me obligara a hacer de nuevo alguna estupidez, debía despejar mi mente y calmar todas las emociones que repentinamente habían crecido en mi interior gracias a la ansiedad de saber que Seungcheol estaba de nuevo en la ciudad.

 

Camine sin rumbo alguno, solo pensando en todo lo que estaba pasando en mi vida, quién diría que mi tiempo de intercambio en Corea sería así de desastrozo y todo por culpa de cierto chico que a pesar de todos mis intentos por no pensar rondaba de nuevo mi mente ¿estaba haciendo las cosas bien? Probablemente no pero sin duda no era mi culpa que todo haya terminado así, tan solo si Seungkwan dejará su obsesión por Seungcheol las cosas marcharían de forma distinta.

 

Cansado de andar me senté en la banca de una  de las plazas cercanas a mi hogar y acomodandome me dedique a mirar a la gente que pasaba, seguro que a Seungkwan le encantaría estar aquí.

 

Flashback

 

En teoría esta iba a ser mi tercera cita no oficial con Seungkwan, pues aunque doliera reconocerlo él aún era de Seungcheol, así que no podría decirse que era una cita como tal, solo éramos un par de amigos que saldrían a comer algo por ahí. Me había esforzado bastante en cuanto a mi apariencia, incluso le pedí a mi hermana que me ayudara a elegir el mejor conjunto y desde temprano comencé a arreglarme, tanto como para estar listo un par de horas antes de la hora de nuestro encuentro.

 

Aún bajo las burlas de mi hermana decidí mejor salir de ahí para poder calmar mis nervios antes de ver a mi querido amigo. Como siempre habíamos acordado vernos en el centro comercial cercano a la escuela, iríamos a comer, a jugar y quizás después a caminar un rato por la plaza antes de que lo llevará a su casa, tal cual como eran siempre nuestras citas. Podría sonar como lo más común y aburrido del mundo pero siempre que era a lado de él las cosas se ponían en verdad divertidas y jamás se repetía lo mismo, eran citas en verdad emocionantes.

 

Como aún luchaba por lograr tener un poquito de atención por parte de Kwannie aproveche el llegar temprano para recorrer las tiendas en busca de un pequeño y bonito presente para él pero por más que buscaba no encontraba algo que me agradara o fuera adecuado para mi cachetón. Mi última opción fue una tienda parecida a un bazar de cosas para chicas, de verdad, por donde mirara había cosas de las que le encantaban a mi hermana pero la razón por la que había entrado fue por un pequeño cartel que avisaba de una liquidación de obsequios para parejas, creí entonces que quizás ahí encontraría algo para Seungkwan. Apenas me había acercado a un mostrador cuando una de las empleadas se acercó sonriente a mi, de manera cortés regrese el gesto y seguí mirando las cosas pero por más que quisiera no me podía centrar en algo así que opté por preguntarle a la joven que seguía cerca de mi.

 

-Uhm, buenas tardes… Verá, fuera ví que estaban liquidando cosas de pareja… Quisiera que por favor me ayude a buscar un bonito presente de ese estilo.- Con total seriedad pedí su ayuda y como respuesta solo recibí una risa que hasta cierto punto me hizo avergonzarme, sí, de seguro me veía patético pidiendo ayuda para algo así.

 

La chica entonces calmó su risa y pidiéndome que la siguiera fui tras ella hasta uno de los mostradores en el cual había pequeños y coloridos objetos de todo tipo. Ella me había explicado que por lo regular lo que tenía más fama entre los obsequios de parejas eran los colgantes, los collares o las pulseras, cosas de las que estaba lleno el mostrador. La joven siguió dándome opciones pero yo me centre en todas las cosas que había frente a mi hasta que encontré algo que incluso a mi me gusto, era pequeño, discreto y bonito.

 

Eran un par de colgantes con un gato negro, lo único que cambiaba era el color en la bola de estambre, sin dudarlo los pedí pues estaba seguro de que a Kwannie le gustarían, a él le agradaban los gatos así que un colgante de uno podría ser buen regalo ¿no? además de que era algo que podría cargar sin pena. La empleada obedeció y fue por una cajita para poder guardarlos, después me guió a la caja para que hiciera el pago debido. Cuando todo estuvo en orden le agradecí y salí con una amplia sonrisa, estaba seguro de que esto me daría muchos más puntos con Seungkwan y estaría así un poco más cerca de ganarme su bonito corazón.

 

Con ese sentimiento tan positivo fui a esperarlo en la misma banca en la que nos veíamos cuando salíamos, había llegado justo a tiempo pues faltaban no menos de cinco minutos así que pronto podría verlo. Por la emoción mis manos comenzaron a temblar y curiosas pasaban de vez en vez por la caja que estaba en la bolsa sobre mis piernas, ¿le gustaría? era lo único en lo que pensaba mientras veía a la gente pasar.





Y el tiempo siguió corriendo cada vez más lento, hace más de una hora se supone que debía de haber llegado pero aún no, siquiera ha contestado mis llamadas o mensajes y bueno, aquí sigo con la esperanza de que quizás llegará. Mingyu me ha dicho que mejor vaya a casa o a la suya, lo que sea menos esperarlo pero, Boo nunca me ha fallado él siempre llega a tiempo¿qué habría pasado para que no llegue? Suspire largo y jugué de nuevo con la caja entre mis manos, me niego a creer que en verdad me ha dejado esperando, seguro que pronto llegará.

 

Cuando mi celular sonó, no espere a que llegara al tercer tono y lo tome de mi lado, mirando la pantalla que causo que mi rostro se iluminara y una sonrisa tonta me surgiera, era Seungkwan.

 

-¡Kwannie!... Es bueno poder…

 

-Hansol, ayudame…- Apenas y pude escuchar su voz, al parecer estaba susurrando y se notaba muy bien su miedo.- Ven por mi… por favor.

 

-¿En donde estas?... ¿A donde…- En lugar de escuchar su respuesta, escuché como abrían con fuerza una puerta.

 

-¿Qué crees que haces?- Esa voz me era muy conocida, con fuerza apreté el móvil y guarde silencio, escuchando como era que SeungKwan se quejaba.- Seungcheol… Por favor… Lo siento cariño.- Después de eso la llamada se cortó, dejándome con una preocupación horrible.

 

Decidido me levanté de la banca y con las manos temblorosas marque el número de Mingyu, necesitaría de su ayuda porque contra Seungcheol siempre perdía, incluso en algo tan simple como la confianza.

 

— § • § —

 

Mingyu sin dudarlo me había acompañado tan pronto como logramos ubicar el departamento de Seungcheol entre llamadas a algunos compañeros. Al salir del auto dude un momento en lo que haríamos pero la mano de Mingyu en mi hombro me animo a seguir con el plan.

 

Entramos directo con el portero avisando que necesitábamos la llave del departamento de Seungcheol pues solo éramos compañeros de trabajo de él. El portero no lo dudo y nos dio la llave, tal cual como nos lo había dicho Jun, cuando Seungcheol tenía que trabajar con otras personas siempre hacía lo mismo así que el portero estaba acostumbrado a ese tipo de favores con él. Sin mostrar apresuracion subimos al ascensor y marcamos el piso al que debíamos ir, estaba en verdad desesperado, jugaba nervioso con la llave en mi mano y no dejaba de suspirar, tenía miedo de ver a SeungKwan mal.

 

-Hansol, tranquilo.- Volte y Mingyu me sonrió, acercándose después a la puerta para salir, yo lo seguí.- Pase lo que pase estaré ahí para ayudarlos, así que en cuanto veas a Seungcheol no dudes en meterle un buen golpe.- Sonreí al escuchar su consejo y asintiendo lo seguí.

 

Cuando dimos en el departamento ambos tardamos en entrar, por lo menos ni uno de los dos tenía el valor para ser el primero, ahora comenzaba a arrepentirme pero antes de dar la vuelta escuchamos un golpe seguido de una queja lo bastante audible. Mire a Mingyu y él pronto quitó la llave de mi mano para abrir la puerta, al hacerlo pudimos ver cierto desorden en la sala que era lo primero que estaba al entrar.

 

Había cosas tiradas, la mochila de Kwannie estaba abierta y regada junto con algunas prendas, al parecer habían tenido una pelea que terminó muy mal. De nuevo escuchamos ruido pero esta vez eran los llantos y súplicas de SeungKwan. Con la molestia creciendo pase por encima de todo eso y fui directo al lugar de donde venían lo sollozos, aunque al estar más cerca comenzaba a sentir una sensación de miedo horrible.

 

Al abrir la puerta nos encontramos con una escena desagradable, SeungKwan estaba contra la pared con sus manos sujetas por arriba de su cabeza, desnudo y con notorios golpes en su cuerpo, detrás de él estaba Seungcheol a medio vestir embistiendo con fuerza a SeungKwan que no dejaba de llorar. Ver de esa manera a SeungKwan hizo que actuara con ese coraje que desde hace tiempo le tenía a Seungcheol.

Me acerque a ellos y jale con fuerza a Seungcheol logrando así apartarlo de SeungKwan y tan pronto pude ver su rostro lo golpeé con toda la fuerza que tenía.

 

-¡Eres un maldito!- Solté con desprecio logrando dar otro golpe a su rostro antes de que me empujara. El se acomodo la ropa y después me miró con una sonrisa.

 

-Así que por eso es que quería terminar… Eres una puta, SeungKwan.- Ignorandome giró de nuevo a donde estaba SeungKwan el cual al escucharlo se hizo pequeño en brazos de Mingyu que intentaba cubrirlo con su suéter.- ¿De verdad crees que ese mocoso te dará lo que yo?

 

-Ya déjalo tranquilo.- De nuevo iba a jalarlo pero esta vez fue más rápido que yo, al escuchar que me acercaba giró y golpeó con fuerza mi abdomen.

 

Y de nuevo estaba pasando, no era la primera vez que peleaba con él pero todos nuestros encuentros terminaban igual, él era más grande y fuerte que yo así que fácilmente podía tirarme de un golpe. Entre pequeñas quejas intente regresarle el golpe pero él me dio otro en el rostro con la suficiente fuerza como para tirarme, era molesto todo esto, Seungcheol ya se acercaba a mí de nuevo y pude ver por debajo a SeungKwan que lloraba desconsolado apretando la prenda en sus hombros. Cerré mis ojos al sentir a Seungcheol más cerca y solo espere el siguiente golpe pero en lugar de eso escuche la queja que soltó.

Cuando abrí mis ojos vi a Mingyu que había dado el primer golpe contra Seungcheol el cual antes de poder recuperarse ya estaba siendo atacado por los constantes golpes que iban contra él, suspire aliviado e incorporandome lento me acerque a SeungKwan que al verme ya me estiraba los brazos. Me hinque frente a él y lo abracé con cuidado, besando constantemente su cabello.

 

-Todo estará bien… Tranquilo.- Y es que confiaba plenamente en Mingyu pues a diferencia mía él era bueno en las peleas, ni Seungcheol había podido ganarle antes. Se escucharon las maldiciones que soltaba al ser golpeado por mi amigo y note la desesperación de SeungKwan probablemente por el miedo de la situación así que solo me dedique a mantenerlo entre mis brazos, susurrándole pequeñas palabras de consuelo para que dejara de llorar.

 

Pronto el ruido de la pelea se alejó y término, voltee curioso de saber el resultado y tal cual como lo había pensado, Seungcheol estaba siendo arrastrado por Mingyu que lo ponía en la cama. Después de eso miro sus manos y haciendo muecas comenzó a darle caricias, no había terminado limpio mi amigo, los golpes que Seungcheol logró darle se notaban bien en su rostro.

 

-¿Cómo están?- Pregunto serio, acercándose a nosotros y sentándose a un lado mío. SeungKwan cuando lo escucho se alejo de mi pecho y de nuevo sus ojos se pusieron llorosos.

 

-Mingyu… Lo siento, todo… todo fue mi culpa.- De nuevo lloraba y gateando se acercó a mi amigo para poder abrazarlo. Mingyu sonrió y palmeó con suavidad su espalda antes de reír.

 

-¿Sabes? Deberías mejor cubrir tu trasero, yo estaré bien.- Le aseguro aun risueño aunque recibió un golpe de mi parte por aquel comentario. Kwannie tan pronto entró en cuenta de su situación se apartó de él y sentándose cubrió apenado su cuerpo con el suéter que antes le había dado Mingyu.- Creo que iré por tu ropa, Vernon no lo manosees de más.

 

Antes de que pudiera hacerle algo, él se levantó y fue a la sala, por su parte SeungKwan rió, algo que llamó mi atención y entonces gire a verlo, de nuevo lloraba pero lo hacía entre risas pequeñas.

 

-¿Estás bien?- Él negó y su risa se hizo un llanto que me dolió tan pronto lo escuche. Suspire y de nuevo lo abrace.

 

-No… No es justo, tú… Eres tan lindo y yo no… No puedo amarte.- Me habló entre sus sollozos haciendo que mi corazón se oprimiera, lo sabia pero aun así había intentado ganar por lo menos un poquito de su amor, algo imposible. Mordía con fuerza mi labio y callando todo lo que quería decirle me dedique a solo consolarlo con pequeñas caricias que al final terminaron durmiendolo, cuando lo note quise acomodarlo pero Mingyu me interrumpió.

 

-Oye, sé que no debo meterme en tus asuntos amorosos y esas cosas pero ¿en verdad lo vale todo esto?- Acercándose a mi me extendió la ropa de Seungkwan, la recibí y de nuevo lo mire, durmiendo así tan tranquilo parecía que en verdad todo estaba bien, negué y solo quite el suéter que tenía aún encima para poder comenzar a vestirlo.- Ahora los dos estamos metidos en un buen problema, dudo que Seungcheol quiera quedarse tranquilo después de lo que le hicimos y si tú sigues tan aferrado a Seungkwan no harás nada más que meterte cada día en más problemas.

 

-Lo sé Mingyu, lo sé bien y aún así me decidí a venir por él. Es exactamente lo mismo que tú con Wonwoo, si Seungkwan fuera él te aseguró que no lo habrías dudado tampoco.- Recoste a Seungkwan en el suelo y siendo cuidadoso comencé a colocar su ropa interior seguido de su pantalón, era terrible acomodar cada prenda y cubrir esos golpes que seguro mañana estarían peor.- No quiero dejarlo solo, él tiene que estar conmigo…

 

-¿Y entonces qué harás ahora?- Cuando noto que se me dificultaba el seguir vistiendo a Kwannie, él se acercó a ayudarme, levantando con suavidad su cuerpo el cual aún entre sueños se quejaba.

 

-Se que es terrible pero tengo una idea ya sobre lo que haré para cuidarlo.- Mingyu terminaba de acomodar el pantalón y mientras yo acomodaba la camisa comencé a contarle lo que tenía en mente.- Mingyu, lo llevaré a mi hogar y no lo dejaré ir hasta que pueda sanar bien su corazón.- Cuando acabe con su ropa, lo acomode y recoste de nuevo contra mi pecho. Con cariño acaricie su cabello y alce la mirada para ver a Mingyu que como me lo esperaba me miraba sin mucho gusto.- Entenderé que no quieras ayudarme pero deberás entonces prometer que no le dirás a nadie lo que haré.

 

-¿De verdad estas tan seguro de hacer esto?

 

-¿Qué otra opción tengo?

 

-Bueno, piensalo bien Hansol, lo que tienes en mente se llama secuestro y por muy bueno que llegues a ser con Seungkwan no ocultará lo que en verdad es. ¿Qué pasará si nos descubren?

 

-Mingyu, ya basta, sé que no es la mejor idea de todas pero en verdad quiero hacerlo, no quiero volver a ver así a Kwannie por culpa de alguien que no lo cuida como debe ser y en cuanto a las culpas, pase lo que pase todo el peso del castigo iría sobre mi en caso de que nos descubrieran.

 

-Pensando que sí lo hagamos ¿en donde lo tendrías?- Con eso tenía ya ganado a Mingyu, ya había cedido a mi idea solo tenía que seguir convenciendolo.

 

-Lo tendríamos en el hogar donde esta mi hermana, esa casa es de mi madre así que no tendríamos que preocuparnos por que alguien pueda decir algo y piensalo así ¿quién dudaría de nosotros? En todo caso sería de Seungcheol que desde hace días ha tratado mal a SeungKwan y muchas personas lo saben.

 

Mire esperanzado a Mingyu y él solo suspiró mirando un punto al azar en el suelo, lo estaba pensando en serio y eso me animó bastante.

 

-Tengo que pensarlo mejor, pero ahora debemos salir de aquí, por muy noqueado que este Seungcheol en cualquier momento podría despertar.- Mingyu salió de la habitación, supongo que a recoger las cosas de SeungKwan así que yo, aunque no quisiera, lo desperté.

 

-Kwannie… Debemos irnos ya, despierta.- Susurré moviéndolo pero él solo se quejo no podría esperar hasta que despertara así que me puse de pie y después lo cargue o por lo menos hice el intento, mi vientre aun dolía y más si lo forzaba como en este momento.

 

-¿Que haces? - Preguntó con una risa Mingyu que seguro al verme no pudo contenerla, solo negó y se acercó para apartarme.- Anda, dame la espalda, lo dejaré encima tuyo.

 

Obedecí y le di la espalda, poco después sentí la calidez y el peso extra de SeungKwan en mi espalda. Mingyu puso la mochila en su hombro y sonriendome salio.

 

-Oye… ¿y el portero? Por distraído que este no creo que sea muy normal que nos vea así.- Él solo rió y se alzó de hombros.

 

-Le diremos que se ha puesto muy ebrio y que por eso vinimos por él, no te preocupes yo me encargo de él.

 

Cuando salimos del departamento de Seungcheol mire a ambos lados, para nuestra suerte no había nadie por los pasillos o siquiera el ascensor que al abrirse no lo volvió a hacer hasta la planta baja. Ni uno decía nada, aún estaba nervioso y dudoso de si podría llevar a cabo el plan que antes le había dicho a Mingyu pero él parecía que en verdad aceptaría hacerlo.

 

— § • § —

 

Tal cual y como lo había dicho Mingyu, él se encargó de las preguntas del portero y nos llevó sin problemas a la casa en donde estaba mi hermana.

Cuando llegamos nos bombardeó con miles de preguntas que ni uno de los dos quiso responder hasta que terminó de limpiar y curar las heridas de SeungKwan y Mingyu. Ahora los tres estábamos reunidos en la sala mientras que SeungKwan descansaba en la habitación de mi hermana.

 

-¿Y entonces? ¿Porque están así los dos y por qué no lo llevaron al hospital?- Mi hermana rompió el silencio ya con molestia, me miro y espero alguna respuesta.

 

-Lo siento Sofía, pero… Hemos decidió que se quedara aquí durante un buen tiempo.- Mire a Mingyu para escapar de la mirada de mi hermana y él solo suspiro largo.

 

-Sofi, lo que quiere decir tu hermano es que tendrá secuestrado a Kwannie hasta que logre enamorarlo.- Mi hermana al escuchar eso comenzó a reír y me miró con dudas, yo solo baje mi mirada y ella negó.

 

-Deben estar bromeando, esto no es un juego muy agradable y deben saber que las…

 

-Las consecuencias son grandes, ambos lo sabemos pero hemos tomado nuestra decisión.- Interrumpí a mi hermana y por fin me arme de valor para verla, ella por su parte se había quedado sin habla, mirándome con miedo.- No te preocupes, no tienes que involucrarte en esto, será sólo mi problema.

 

-Pero Hansol…. Hay formas más sanas de hacer lo que quieres ¿porque retenerlo?

 

-Porque él no entiende, esta tan enamorado del imbécil de Seungcheol que no ve el mal que le está haciendo, esos golpes fueron a causa de su querido novio con el que se supone que había rompido. ¿Entiendes? Él debe quedarse y sanarse lejos de lo que le hace daño.

 

-Sé que suena descabellado lo que dice tu hermano, pero Sofi, yo he visto las consecuencias de que siempre se escape con Seungcheol, así que no queda más que confiar en que tu hermano pueda lograr su objetivo. Lo he pensado y lo ayudare pero solo en el tiempo que dura su intercambio, tiene hasta entonces para lograr hacer un cambio en SeungKwan.- Mingyu me miro serio y yo asenti.

 

Mi hermana se quedó en silencio un momento, estaba pensado en las cosas y por más que esperábamos una respuesta suya solo se quejaba cada vez más.

 

-No tienes que involucrarte, no te estamos obligando lo único que te pedimos es que no digas nada.- Volví a explicarle y ella me miro rendida.

 

-Es que por mas que lo pienso no se me ocurre método más insano para llevar a cabo las cosas, pero ya que ambos están tan decididos no me negaré y los ayudare. No puedo dejarte solo y de cierta manera me importa el pobre de SeungKwan.

 

Sonreí amplio al escuchar su respuesta y levantándome fui a su lado para abrazarla con fuerza, ella solo se quejo y palmeo apenas mi espalda en forma de consuelo.

 

-Te prometo que haremos las cosas bien.

 

Fin del flashback

 

Y qué bien estaba haciendo las cosas, me queje y pase ambas manos por mi rostro, recargandome mejor en la banca para poder mirar al cielo, comenzaba a anochecer y el frío ya se sentía, sin duda me había quedado buena parte del día ahí sentado pensando.

 

Antes de que me decidiera a levantarme alguien se sentó a mi lado, lo mire de reojo, se me hacia conocido pero no sabia de donde. Negué y mire de nuevo el cielo, seguro los recuerdos me traicionaban, di mi último suspiro y tome mi mochila de entre mis piernas  dispuesto ya a irme, pues gente ya no había y seguro en casa Sofía estaría preocupada por mi, pero antes de hacerlo el joven a mi lado dijo algo que apenas pude escuchar.

 

-¿Disculpa? ¿Dijiste algo?- Pregunte tan amable como podía, mirando atento al joven que quitó sus lentes y después me miro serio. Ahora que lo veía mejor me empezaba a acordar de él.

 

-Dije, que tu vida debe ser muy cómoda ¿no, Hansol?... Ah pero por favor, no me mires como si fuera algo peligroso… ¿O quizás sí lo soy?- Enarco una ceja, jugueteando con su índice en su labio mientras sonreía.

 

-¿Que quieres, JiHoon?- Apreté con molestia mi mochila y espere su respuesta ¿que hacia aquí?

 

-Bueno, Cheolie está de regreso, si yo fuera tú estaría por demás asustado.- Se puso de pie y mirando al cielo suspiró.- ¿Verdad, cariño?- Frunci el ceño al escucharlo y de mi otro lado, Seungcheol me tomo de mi hombro, obligándome a verlo. Había cambiado, sin duda no era el mismo de antes al igual que su nuevo juguete.

 

-Claro baby, creo que este inútil me debe una buena disculpa.- Su mano apretó con más fuerza mi hombro causando que me quejara y levantara pronto. Seungcheol me soltó y alzó ambas manos mientras reía.

 

La situación comenzaba a tensarse así que sin preguntar más me decidí a salir rápido de ahí, habría querido lograrlo pero un sonido seco y un fuerte dolor en mi cabeza me hicieron caer. Estaba en el suelo intentando ver que pasaba pero lo único que recibí fueron constantes golpes hacia mi rostro que apenas y podía esquivar.

 

-Pero mira…. Sigues siendo el mismo inútil de siempre.- Seungcheol había dejado de golpearme para tomar mi barbilla, observándome divertido.- ¿Que se siente? ¿Ah?- Rió con ganas y de nuevo empezó a golpearme.

 

No podía hacer nada, seguía siendo más pesado que yo así que de la manera en que me tenia sometido apenas y podía cubrirme. Dolía y molestaba estar así, seguramente el muy maldito me dejaría tal cual lo hizo Mingyu con él hace tiempo.

 

-¡Ustedes! ¡¿Que hacen?!- Alguien gritó llamando la atención de Seungcheol que era jaloneado por JiHoon.

 

-Esto no se acaba aquí ¿escuchaste?- Me amenazó antes de levantarse e irse de la mano con su novio. Yo solo me queje y me quedé un rato tirado en el suelo hasta que un par de tenis se pusieron sobre mi cabeza, alcé la mirada y noté la mirada de preocupación de Wonwoo que al reconocerme se hinco para ayudarme.

 

-¡Hansol! ¿Pero que paso? ¿Era un asaltante?- Me pregunto alarmado, ayudandome a sentar para después con la manga de su suéter limpiar las heridas de mis labios.

 

No podía creerlo, de nuevo era rescatado, pero no podría quejarme ahora tenía una preocupación más grande y es que Seungcheol rondando la ciudad era peligroso, debía apresurar ya las cosas en casa o si no todos saldríamos afectados por mi capricho.

 


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).