Abrí los ojos con mucha dificultad, pero los volví a cerrar a estar los focos emitiendo mucha luz y de la nada sentí mucho dolor en varias partes de mi cuerpo, situándose las punzadas más fuerte en mis costillas. Abrí los ojos con mucho cuidado, esperé a acostumbrarme a la luz y comencé a mirar a todos lados. Me llevé la sorpresa de que Rosé se encuentra aquí, “¿Qué hace ella aquí?”traté de sentarme pero no pude, el dolor no me dejó sentarme, dejándome completamente inmóvil.
— ¿Qué está pasando? ¡Rosé! ¡ROSÉ! —Le comencé a gritar desesperado, Rosé se levantó del mueble y se me acercó preocupada, la mire a los ojos y estos lucen hinchados, como si hubiera llorado por un largo tiempo.
— ¡Philip! Eh ¿Cómo te sientes? Ya tus padres vienen en camino—sus ojos se pusieron llorosos y de golpe me comenzó a doler todo
—Rosé, ¿Qué pasó? ¿Por qué estoy así? —Se sentó en una silla al lado de la camilla, cerró los ojos por un momento y comenzó a jugar con sus manos, y me preocupó.
—En realidad esperó a que tú me lo cuentes. Te encontré tirado en las escaleras que van al consejo estudiantil, había, había mucha sangre saliendo de tu cabeza. Me asuste mucho—como si fuera una lluvia de muchos golpes, cada uno de los recuerdos vinieron a mi mente y eso me provocó un intenso dolor de cabeza.
— ¡Ah! ¡Llama a un médico! ¡Rosé!, me duele mucho, me duele mucho!-Ella asustada salió disparada del cuarto y comenzó a pegar gritos afuera, mientras mi cabeza me comenzó a torturar de manera muy lasciva.
Al poco rato el doctor llegue y me suministró unos calmantes…
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Mientras dormía tuve un pequeño Flashback de todo. Los sentimientos de frustrado, rabia, molestia, me torturaron salvajemente, soy una persona débil muy débil por no haberlo puesto en su sitió; “si tan solo me hubiera defendido, si lo hubiera golpeado no tendría múltiples fracturas en mi cuerpo, nada me doliera y no estaría aquí”.
Al poco tiempo mis padres llegaron junto a mi hermana. Los tres más el doctor al entrar al cuarto, prácticamente se echaron a llorar excepto mi hermana, la cual en sus ojos se reflejan mucha ira “Tranquilizate, no pierdas el control de la situación”trate de ignorar los dolores y las pulsadas constante en mi cabeza, pero se me hace difícil por el alboroto que mi familia tiene. Mi madre no para de llorar en los brazos de mi papá y mi hermana está atosigando al doctor. Estoy avergonzado por el comportamiento de mi familia, me siento mal, tengo dolor y calambres, mi cabeza está hecha un caos y todo es un descontrol, no se todavía lo que hice mal para merecer esta tortura.
—Doctor, ¿Puede hacer que se callen? Mi cabeza va a reventar en cualquier momento—el doctor me miró con condolencias, admito que me sentí peor, pero no lo culpo para nada.
—No te preocupes, haré todo lo posible por calmar la situación.
Como pudo(de verdad lo lamento por él), pero los calló, la habitación se llenó de un silencio reconfortante y pude cerrar los ojos para tratar de aliviar mi dolor.
—El golpe te causó un traumatismo, más una fractura en el lado izquierdo de tu cabeza, menos mal que tu amiga te encontró a tiempo y pudimos saturar las heridas, aparte sufriste una fractura en una de tus costillas, aparte por la caída que sufriste, tal vez pisaste tu brazo con tu cuerpo o te apoyaste y pues también tienes una lesión en esa área—tanto mis padres como yo nos quedamos completamente en silencio.
— ¿Y la sangre?
—Como ya te dije, sufriste un traumatismo por el golpe, pero la cantidad de sangre que perdiste fue muy poca, solo necesitas descansar unos días y después tomar reposo por uno dos o tres meses, para verificar que el golpe no te causo más nada a nivel neurológico.
“Raín Martín, ese hijo de su ¡Pu*# madre! Es el causante de todos mis problemas, por su culpa estoy así, pero esta vez se la voy a cobra. Juró por lo más sagrado que tengo, que no descansaré hasta verlo llorar”
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El doctor se fue y me dejo a solas con mis padres y Mariana. Sus miradas se clavaban en mi cual alfiler, el ambiente se puso muy pesado, pero en estos momentos no estoy para soportar sus preguntas.
—¿Quien fue?—Escuche la dulce y melodiosa voz de mi hermana.
Su cara está roja, muy roja, y sus ojos verdes se pusieron grises como él de un tigre.
—No lo sé—no podía decirles quien fue, esto es algo que resolveré solo—recuerdo que iba a bajar las escaleras y alguien me empujo. Pero no recuerdo más nada—se que no debo mentirles a mis padres y menos en esta situación tan delicada, si alguien iba a hacerlo pagar, ese sería yo.
— ¿No habrá sido la misma persona que te golpea? —“¡Oh dios! ¿Por qué abrió su boca?” mis padres voltearon a verme.
—¡Bocona!—Le grité y sentí una fuerte punzada en la cabeza
—¡Yo sí! ¿Acaso no te das cuenta de que pudiste morir?—Ella tiene razón, pero no les pudo decir—. ¡Es un maldito criminal! Y tiene que pagar por todo esto.
— ¡Déjame en paz Marina! Yo… Estoy cansado de escucharte, es mejor que te vayas, no quiero oírte—Mariana acomodó su bolso en su hombro, se echó el cabello hacia atrás y salió del cuarto .
—Philip, tenemos que hablar—miré a mi papá y este está completamente serio.
—Nos explicaras bien qué fue lo que pasó. Y no me mientas—“Maldita Mariana, ¿Por qué carajo abrió su boca?”
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1 Mes después
Ya estaba en casa, hace unas tres semanas, el doctor me dio la oportunidad de regresar para chequearme con él, los huesos de mi brazo ya estaba sano y hace un par de día me quitaron el yeso. El dolor en mi cabeza ya no era constante gracias a las pastillas que me recetaron, aparte que este mes me ayudado a bajar algo de peso por las prohibiciones médicas que he tenido. Miré el cielo a través de la ventana, el sol brilla con intensidad, mientras algunas nubes están cubriendo el cielo azul, los pájaros cantan y a pesar de todo, de estar un tanto mejor, de estar tranquilo, ya he imaginado y planeado que es lo que le haré a Raín, pero todavía no puedo volver a la escuela.
— ¿Ahora qué haré? —De solo pensar en volver a ese infierno y verle la cara, a ese estúpido me da rabia—. Ve voy a vengar—me apoye en mis muletas para poder salir del cuarto.
Baje las escaleras, camine despacio hasta la cocina, en donde mamá debe de estar preparándome esa comida del infierno(quiero acotar de que ella cocina bien, pero no tan bien). Mire a mamá y realmente me siento mal por mí, ella cocina muy bien (algunas cosas), pero algo que no entiendo y que no me cabe en el coco es: “¿Por qué me tiene que servir tantas verduras y sin sal?” se que el doctor me mando a hacer dieta, ok, lo puedo entender pero de ahí a comer eso, es una gran tortura.
—Mamá, me iré a estudiar a casa de los abuelos.
— ¿¡Qué!? ¿¡Cómo que te vas a casa de los abuelos!? ¿Sabes que eso está muy lejos? Además, ¿Cuándo decidiste eso?-Volteé a ver a Mariana que justamente acababa de entrar.
—Lo decidí hace un tiempo. De verdad no quiero pasar por algo similar a esto y lo más prudente que puedo hacer, es irme por un tiempo. Creo que eso me ayudará mucho a sentirme más tranquilo, ¿No lo crees mamá? —Sus ojos se aguaron un tanto, pero asintió rápidamente mientras que con un paño se limpiaba las lágrimas.
—Sí es lo que quieres, puedes hacerlo. Tú padre y yo no nos opondremos a ninguna decisión que tomes, si crees que es lo mejor para ti—mi mamá se acercó a pasos lentos y me abrazó, pasó suavemente su mano por mi cabeza, acariciando mi nuca. —Te voy a extrañar mucho.
—Lo sé, pero recuerda que todavía no me he ido—ella rió amargamente y me sentí culpable, ya que la razón de esta huida tiene nombre: Raín, me da asco, me siento mal por ser un cobarde y huir de un momento a otro por algo que yo debí de detener hace mucho tiempo.
—Wow… Yo realmente no puedo con esto—mi hermana salió de la cocina dejándonos a mí y a mamá solos.
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La cena se llevó en completa calma pero con esto no quiero decir, que Mariana nos puso incómodos, como sí el hecho de que yo me fuera a ir cambiará en lo más mínimo para ella. Mis decisiones no la perjudica en nada, ella es modelo y cuando la llamen para hacer algún trabajo afuera se irá, ósea no es la gran cosa, pero ella quiere volver este problema un circo mediático.
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La semana pasó volando, mi mamá ya había hablado con el abuelo para que me buscara una escuela en donde estudiar y creo que estando allá, podre planear todos lo que haré cuando regrese, podre acomodar los detalles, aparte que aprovechare todo este tiempo para cambiar un poco mi vida o bueno hacer lo suficiente como para poder defenderme y hacerle frente a esos matones; porque no dejare que le hagan lo mismo a otra persona y menos cuando estuve a punto de morir por culpa de Raín Martín.
Lo odio tanto, no saben cuán difícil es odiar a una persona, las sensaciones negativas que te llevan a sentir que quieres matarlo son malas. Yo desde hace mucho tiempo fui el objeto de él, siempre se burlándose de mí, nunca entendí cual fue el daño que le hice para que me tratara tan mierda.
Me mire en el espejo.
—Lo haré sufrir tanto como el me hizo sufrir a mí.
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Muchos meses más tarde.
— ¡Philip! Necesito que me ayudes con esto.
—Claro, ¿Con qué?
El tiempo pasó relativamente rápido y en ese lapso de tiempo, pasaron muchas cosas. Hace poco recuerdo que estaba en muletas y con 30 kilos de más en mi cuerpo, ahora 10 meses después de tanto drama, me convertí en una persona completamente diferente. El desarrollo me pegó fuerte, mi cuerpo de un momento a otro se estiró, crecí unos 15 centímetros más y gracias al ejercicio y la buena alimentación, mi cara se le fue todas las manchas y granos que tenía.
Me adapté a mi nueva vida rápidamente, estar aquí me dio tranquilidad y mucho tiempo para pensar en todo las cosas que haré (quiero recalcar que eso me tiene nervioso)pero he tratado de manejar las cosas con cuidado.
Salí de clases y conduje hasta la granja de mi abuelo, vivir con ellos a sido reconfortante, he aprendido mucho de la granja y pues también gracias a la estadía aquí siempre me mantenía activo haciendo actividades de ganadería entre otras cosas. Vivir en un pueblo realmente es raro; no hay muchas cosas que hacer, a donde siempre será lo mismo porque este sitio no es muy grande.
Estacione el carro al frente de la casa, me baje y al entrar, mi nariz se activó detectando un olor envolvente, suculento y muy delicioso. Seguí ese fantástico olor, hasta llegar a la cocina, mi abuela está haciendo un banquete completo, mis ojos comenzaron a brillar, por tanta comida en la mesa.
— Wow… ¿Qué estamos celebrando?
—Sé que te irás pronto, así que decidí hacerte algo en grande, aparte de que llame a tus amigos para que festejen que se han graduado con honores —Abrace a mi abuela y le di un beso enorme en la mejilla.
— ¡Eres la mejor! Me iré a cambiar y después vengo ayudarte.
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Semana Después….
“Ya todo aquí acabo. Es momento de regresar a casa”
Las manos me tiemblan, estoy ansioso, nervioso y asustado. Tengo miedo de que las cosas que puedan pasar ahora que vuelva como una persona distinta, tengo miedo de que me descubran, tengo que llegar a ese lugar, siendo yo, tengo que volver a usar lentes, voy a maquillar mi cara para hacerla ver como antes o solo un poco parecida.
Mi plan es perfecto, pero al mismo tiempo tiene tantas fallas y complicaciones, pero si todo sale de acuerdo a lo que maquine en mi cabeza será completamente su fin.
Esto es lo malo ser el villano, lo que haces todos el días es preguntarte: “¿Esto estará bien? ¿Valdrá la pena? ¿Este es el camino correcto?”y un montón de otras cosas más sin sentido.
El autobús llego al terminar, rápidamente agarre mi bolso de mano, las manos las tengo algo sudorosas y mi corazón está acelerado. Retire mi maleta y busqué un taxi y estoy súper emocionado, porque mi llegada será una sorpresa. Me monté en el taxi y le indique a donde me iba a llevar.
Volver a mirar la ciudad y respirar su contaminado aire, por el humo de todos los carros, mirar los enormes edificios, las casas increíblemente grandes, los parques y aquellos panoramas que deje hace un año, no me hacían sentir para nada mal, era lo contrario, me hace ver que vivir en el campo es mucho más tranquilo que vivir en esta ciudad llena de mucho ruido y complicaciones.
El taxista me dejó en una tienda que está a 25 minutos de mi casa caminando. El taxista se detuvo y le pagué, me baje rápido, con mi bolso y él abrió el maletero del auto y saque mis maletas.
— ¡Muchas gracias!
—No te preocupes.
El señor se fue y entré rápido a la tienda, compre algunas cosas que se que le encanta a mi mamá y otras que le fascinan a mi papá. Salí de la tienda y camine por la calle que acorta el camino a casa. Esa calle es un pequeño callejón que siempre esta vació, por la cantidad de basura que a veces la gente deja allí. La gente tampoco viene hacia acá, porque hay contenedores de basura y pues algunos desadaptados lo agarraron para tener relaciones sexuales.
Observo mi reloj y noté que se me está haciendo muy tarde, así que camine algo apurado por ese lugar, observó la cantidad de basura y no puedo evitar pensar que la gente de este lugar son unos cochinos (Realmente lo son) por arrojar tanta basura en un lugar “transitado”es algo muy desagradable. Caminé lo más rápido que pude, pero me detuve al escuchar un sonido peculiar.
— ¿Crees que esto es seguro? —sentí un fuerte deja vú, esa voz se me hace terriblemente familiar.
—Sé que quieres esto más que yo—con mucho cuidado caminé hacia esas voces, me recosté de la pared y eche un vistazo a las personas que están hablando.
—Si tú lo dices, continua—Mis ojos se dilataron al ver a la persona que está aquí, con ese tipo a punto de hacer cosas lascivas, una persona que todavía no esperé ver, alguien que odio…
—“Raín Martín… Él es… ¡Claro que lo es! ¡JA! Todo me lo esta dejando en bandeja de plata”
Continuará…