- Spiderman narra –
Hola nuevamente, permítanme contarle la historia más extraña de mi vida, si, incluso más extraña que hombres lagartos, personaje de electrizante personalidad amante del tecno y rinocerontes que pueden andar en dos pata. Quiero contarle la historia donde conocí al idiota, degenerado, bocazas (y un sinfín de adjetivos calificativos insultante mas) desesperante personaje de rojo y negro.
Después de todas las pérdidas que he sufrido (tío, novia y mejor amigo – aunque este último por volverse un psicópata gran duende verde – y un par de trabajos, por causas de abandono por razones que no puedo explicar, entiéndase ir a salvar el día) uno creería que trataría de mantener mi vida lo más estable y sin complicaciones posible, o por lo menos tanto como se me permita al ser un héroe que lucha contra el crimen en la ciudad de New York.
Pero cuando conocí a Deadpool simplemente no pude alejarme de él, culpo a mi sentido arácnido por no advertirme de la locura en la que me estaba metiendo. Aunque era algo inevitable, después de todos los sujetos extraños que aparecen en mi vida – con demasiada frecuencia me gustaría mencionar – encontrar a otro enmascarado que no estuviera cazándome, ya sea para destruirme o por mi sangre mutante, digamos que es algo que llama la atención.
En fin, ya habían pasado cuatro semanas desde mi primer encuentro con el misterioso mercenario, de esa 4 semanas cinco veces me tope con él. Quieren saber que paso en nuestro segundo encuentro, dejen que se los cuente;
Spiderman se encontraba vigilando su ciudad como era su costumbre, dividir su vida entre sobrino, universitario, empleado y héroe lo tenían sumergido en sus pensamientos por lo cual fue tarde cuando su sentido arácnido le advirtió del peligro y una bala rompió su telaraña. Una suerte su velocidad para reaccionar, su flexibilidad y que aun podía lanzar otra telaraña que lo salvara de caer al vacío.
Se pego a un edificio para estudiar la zona y descubrir el enemigo que le había atacado, solo para descubrir en el tejado de otro edificio de menor tamaño al extraño sujeto que había conocido hacia solo un par de días atrás. Deadpool era su nombre un mercenario, lo había investigado y descubierto que era un sujeto muy buscado, también que ofrecían una gran cantidad de dinero si lo entregaban desmembrado – algo que me extraño, se que los carteles de búsqueda pueden ser de vivos o muertos, pero era la primera vez que encontraba la opción de desmembrado – pero también descubrí que era un sujeto que estaba siendo reclutado por los X-men, había escuchado de ellos, mutantes que utilizaban sus poderes en beneficio de la humanidad, y aunque tenían mala publicidades al igual que Deadpool... bueno, no igual que Deadpool, la verdad era que el si tenía mucha, pero que MUCHA MALA PUBLICIDAD, no eran cosas de las cuales yo me llevara, después de todo, incluso yo tenía mala publicidad, esa fue la razón por la cual decidí darle una oportunidad al mercenario.
Con la ayuda de su telaraña llego al encuentro del otro enmascarado.
Spiderman: Sr. Pool debo interpretar sus acciones como que ya soy un objetivo suyo y que jugaremos el juego del gato y el ratón.
Deadpool: me encanta tu cinismo, pero no, no he tomado ningún trabajo donde tu cabeza sea el pedido, te investigue y decidí que me gusta por eso mejor tomare las cabezas de aquellos que me soliciten la tuya.
Spiderman: (creyendo que el otro bromeaba) eso es muy amable de tu parte.
Deadpool: (hablando muy enserio) siempre puedo traerte la extremidad u órgano de aquellos que te molesten.
Spiderman: (aun creyendo que el otro bromeaba) que dulce, pero dejando eso de lado si no soy uno de tus encargo y realmente te gusto, a que se debe el que dispararas a mi telaraña mientras me balanceaba a una altura de más de 400 metros.
Deadpool: bueno trate de llamar tu atención gritando tu nombre de héroe pero como no me hacías caso, utilice el método más lógico.
Aunque no se le pudieran ver los ojos, en ese instante Spiderman estaba mirando a Deadpool como al bicho más raro de todos los tiempos, como rayos le pareció lógico cortar aquello que lo mantenía a salvo de una caída de más de 400 metros.
Spiderman: Claaaaaaaaaaro, entonces ya que has llamado mi atención, que puedo hacer por usted Sr. Pool.
Deadpool: bueno como te dije te investigue y me gustaste, solo que me gustaste mucho, me he convertido en un fan tuyo y quiero un autógrafo.
Un minuto procesando....
Diez minutos después
Spiderman: me has disparado para llamar mi atención y decirme que eres mi fan y que quieres mi autógrafo.
Si, incluso después de decirlo en voz alta no pudo encontrarle sentido.
Deadpool: (feliz porque creyó que le habían entendido) exacto, aquí tengo mi cuaderno y bolígrafo.
Antes de que Spiderman pudiera decir algo se escucho una explosión, la cual provenía de un edificio cercano.
Spiderman: supongo que tendremos que dejarlo para otro día, el deber me llama.
Sin esperar contestación del otro se marcho al referido edificio, tendría que ver si habían personas lastimadas o atrapadas y ayudarlas a salir, después vería si podía apagar el incendio antes de que llegaran los bomberos.
Entro en el lugar de la explosión por la pared destruida y pudo apreciar a varias personas inconscientes en el suelo, algunos heridos y otros en pánico tratando de escapar, para rematar su sentido arácnido le alertaba que el piso colapsaría en cualquier momento.
Spiderman: (con voz quejumbrosa) deberás me encantan este tipo de situaciones tan fáciles.
Se giro para disparar su red fuera del edificio, luego regreso su atención a las victimas
Spiderman: hora de pescar.
De manera rápida y efectiva, usando sus redes, comenzó a jalar, una por una, a todas las personas y a lanzarla por donde él había entrado, se movía entre paredes y el tejado buscando por todas partes para no dejar a nadie. Justo cuando estaba lanzando a la última persona el suelo se desplomo, el problema era que nuestro héroe se encontraba sobre el en ese momento.
Luego del derrumbe, Spiderman se quita los escombros de encima y se apoya en una pared.
Spiderman: eso definitivamente dejara marca (se quejaba), puede que incluso huesos rotos y sangrado interno... nada nuevo, bien revisemos este nivel, salvemos personas y apaguemos el fuego antes que se extienda más.
Por suerte en ese nivel no había tantas personas como en el anterior, pero no tenía tanta suerte como para encontrarlo vacio, después de que rompió un par de ventanas volvió a lanzar a las personas hacia fuera, sabía que al igual que el resto quedarían a salvo pegadas a su red.
Minutos más tarde descubrió que su suerte realmente era mala, al encontrar a una viejita testaruda que no quería marcharse sin antes recoger a sus diez gatos, los cuales se encontraban esparcidos y escondidos por todo el lugar.
Para colmo de males, la anciana comenzó a golpearlo con su bastón exigiendo que salve a sus números felinos. Spiderman suspiro, el que quiso ser considerado y sacarla de manera más corte, no lanzándola como al resto pues tenía en cuenta la avanzada edad de la señora, en fin, no siempre se puede ser caballeroso. Haciendo caso omiso de los reclamos la sujeto con su red y la lanzo por la ventana... tendría que reprenderse mentalmente después, porque aquello se sintió muy bien.
Bueno, ahora que la abuelita estaba fuera de la ecuación comenzó a buscar a los tontos gatos que no le facilitaban el hecho de salvarlos, como esas bolas de pelos eran tan inteligentes para robar almuerzo pero no para acercarse a la persona que trataba de rescatarlo de la calurosa situación en la que se encontraban.
Ser héroe eran tan fastidioso en algunas ocasiones, entonces comenzó a desplazarse por todo el lugar buscando a los mininos, lanzo uno luego, tres y siguió hasta que solo le faltaba uno, pero el desgraciado parecía tener tendencia suicidas pues no se dejaba atrapar fácilmente.
Spiderman: vamos amiguito, estoy seguro que gato y araña al carbón no es una buena receta gastronómica.
Al fin logro acorralar a la bola de pelos, pero se dio cuenta de que el fuego estaba cubriendo la mayor parte del lugar, el humo le estaba haciendo difícil el respirar y ya no podía ver bien una vía de escape. Su sentido arácnido le advirtió que la pared de la cual se apoyaba se derrumbaría pero por lo débil que se sentía no creía poder escapar.
Spiderman: joder, otra vez no.
Pero en el último minuto fue empujado lejos de la pared que se venía abajo, desconcertado vio a Deadpool salir de los escombros con un pedazo de metal que le atravesaba el pecho.
Spiderman: ¡Deadpool! (exclamo alarmado)
Deadpool: tranquila arañita, unos de mis súper poderes, además de lo que me cuelga entre las piernas, es tener la habilidad de no morirme, puedo regenerarme de cualquier herida, muy útil en estos casos. (Comento bromista mientras se sacaba el pedazo de metal)
Ahora que la pared se había ido abajo, el humo se disipaba, podía respirar mejor y ya tenían vía de escape.
Spiderman cargando tanto al gato como a Deadpool salió del edificio, justo a tiempo para ver llegar a los bomberos que se encargarían del incendio.
El arácnido lleva a Deadpool hacia un tejado hasta que pudiera recuperarse.
Spiderman: espérame aquí hasta que reúna a este amiguito (el gato) con su dueña y baje a todas esas personas de mi red.
Deadpool: no se suponía que las arañas se comían todo lo que caía en sus redes.
Spiderman: quizás las arañas plebeyas, sin embargo yo pertenezco a la realeza, soy una araña con un paladar muy fino y selectivo que no come cualquier cosa. (comenta con tono pomposo)
Se marcha a cumplir con su deber dejando a tras a un Deadpool estallando en carcajadas.
Deadpool: joder (se ríe) se supone que no debería reírme (mas risas) hasta que se me cure el pulmón.
Minutos mas tarde regresa Spiderman
Spiderman: gracias por haberme ayudado, es genial tener tus poderes poder curarte de cualquier herida y no sufrir dolor alguno.
Deadpool: (confundido) ¡eh!... oh no arañita, si que siento dolor... y mucho, mi poder solo es la acelerada curación y regeneración
Spiderman: quieres decir que sentiste el dolor de las quemaduras y cuando fuiste atravesado y aplastado. (comento horrorizado)
Deadpool: lo que sea por ti arañita.
Spiderman:... eres, eres... o un gran héroe o un gran masoquista... y como ya dijiste que no te consideras un héroe.
Deadpool: espera, espera... no puedes voltearme las cosas así, si puede que tenga algo de sangre sadomasoquista, pero no es razón para que desprenda esa aura de rechazo que ahora te siento, se supone que como te salve la vida, tienes que estar agradecido y enamorarte de mí.
Spiderman: en tus sueños, maniático.
Se acerca a la orilla del tejado con la intención de marcharse, lanza una telaraña hacia otro edificio, pero antes de saltar se gira hacia Deadpool.
Spiderman: pero puede que reconsidere enviarte esa solicitud de amistad. (se marcha)
Deadpool: (se ríe) así se comienza arañita, así se comienza.