—Vamos Baek, deja de poner esa cara…
SeokJin comentó a la ligera, pero solo logró que el aludido frunciera mas la boca, como una mueca de desagrado y un poco de frustración.
—Si sigues haciendo eso, te vas a arrugar y necesitaras botox demasiado joven.
Inmediatamente BaekHyun estiró la cara y comenzó a alisarse las arrugas imaginarias.
—¡Por supuesto que no!, todo lo que gasto en cremas y humectantes es para evitar el tan necesario botox.
Jin sonrío por lo vanidoso que era su amigo, pero la verdad que esa era la razón por la que se llevaban tan bien.
—Pues no funcionaran si sigues frunciendo el ceño.
Baek rápidamente se comenzó a alisar el entrecejo. —Al menos tu envejecerás antes que yo…anciano.
—Ahhh, ¡COMO TE ATREVES A DECIRME ANCIANO! —La cara histriónica de Jin era caricaturesca —Soy el hombre mas hermosos del mundo. —Dice muy seguro.
—Lu dudo con esa acumulación de grasa en tu vientre.
Jin se levantó inmediatamente la camisa para verificar si su vientre había mutado o inflamado sin previo aviso los últimos minutos, se miraba de un lado y del otro frente al espejo mientras sumía la panza buscando algún desagradable bordo.
—¡No es verdad!
—Solo bromeo, guapo—Baek le dio un beso en la mejilla.
—Oye, no me agrada el lesbianismo —Se limpió con el puño de la camisa el rostro.
—Ya, mejor préstame algo de ropa, no traje nada para salir…
—Baek trajiste una maleta rellena de ropa para un solo fin de semana.
—Pues si pero me apresuraste a empacar que no distinguí bien lo que metí…—Empieza a aventar el contenido de la maleta sobre la cama de Jin—Para el frio, para el calo, por si llueve, para ir a una cafetería…nada para salir a bailar…mejor préstame esa camisa —Señala algo del closet.
El guardarropa de Jin se distinguía por el uso del rosa, su color favorito.
—Mmm pero sabes … esta no es de marca. — Toma una camisa entre sus manos.
—No importa, luzco bien con cualquier cosa.
Jin sonrío y se la alcanzó, se sentaron compartiendo el banco del tocador, para comenzar a arreglarse, un poco de maquillaje, algo de sombras para Jin y suficiente delineador para Baek. Luego una hora mas para dejar el peinado perfecto. El cabello de JIn era un rubio muy claro y el de Baek era de un tono rosa pastel. Después de algunas horas, lucian para ir de fiesta, uno enfundado en una gran camisa rosa, bastante holgada, dejándola caer de un lado para dejar ver su musculosa negra bastante escotada, dejando ver sus hombros, polveados con brillo.
—Baek, iremos a un club normal, no debiste usar tanto brillo.
—No entiendo tu necedad de evitar ir a un club gay.
—Ya te dije, iré a ver a mi amigo que no veo desde hace años, no quiero incomodarlo.
—Vas a ligarlo, déjate de falsedades. —Le mira haciendo ojitos.
—No lo se, solo es un amigo, NamJon es muy serio, no creo que le guste ese tipo de lugares.
—No entiendo porque me obligaste a venir, esta ciudad ni me gusta.
—No seas quejumbroso.
La verdad es que regresar aun cuando fuera solo por el fin de semana a la ciudad donde pasó varios años de su infancia, siendo vapuleado por sus compañeros de escuela por ser diferente, no era su mas grande deseo, solo quería disfrutar de la vida como cada fin de semana hacía en la universidad. Sino fuera porque sorpresivamente Jin se encontró con un viejo amigo del instituto por facebook, diciéndole -falsamente- que casualmente vendría este fin de semana, no lo hubiera convencido-arrastrado para acompañarlo.
—No me necesitas, te he visto ligarte a muchos chicos, que se miraban bastante heterosexuales y guapo otros abiertamente gays …aunque pensándolo bien no tengo idea de cómo lo lograste. —Dice en una falsa pose de pensante, mientas sostiene su mentón entre su mano y su dedo índice golpea sus labios.
—Porque soy guapo, no lo olvides. —Le da un pequeño empujón.
Jin se roció con perfume por todo el cuerpo, incluyendo genitales.
—¡Ay vamos Jin!, estas fumigándote… en lugar de atraerle, lo vas a ahuyentar.
Jin hizo una mueca, se ajuste la segunda piel o también podría llamársele pantalón de cuero en su cuerpo, llevaba una camisa blanca con líneas delgadas, ligeramente abierta que dejaba ver una bien conservada figura. Un collar de cuero en el cuello.
—Anda, estoy nervioso y no quiero cagarla, acompáñame y después iremos a un bar gay. —Le dice Jin a Baek mientras le toma la mano y le hace un puchero con los labios.
—Vaya, me has convencido, hace demasiados años que salí del closet como para volver a encerrarme en el. —Vaya que de eso hace demasiados años.
Salieron de la habitación, para pasar por el living donde se encontraba su madre quien al verlos llegar frente a ella, los mira con desaprobación.
—¡Por Dios Jin esa ropa!
—Vamos mamá, no es para tanto…
—Jin por favor, no es adecuado que te vistas así.
—Mamá, deberías estar orgullosa de tener un hijo tan guapo, cuando tu no eres tan bonita.
Oprime la mandíbula de su mamá con el dedo índice y pulgar , mientras le daba un beso.
—Van a verte los vecinos, por favor Jin. —Suplica, aunque sabe que no cambiara a su hijo ni hoy ni nunca.
La camisa tranparente de los costados era cubierta por su gran camisa, pero al agacharse a besarla, fue inevitable que no se viera.
—No te preocupe, no me mirarán, saldré rápido. Además solo iremos a comer algo, no te preocupes.
Caminó contoneándose un poco, pero cuando salieron, se dejo resbalar la camisa, dejando al descubierto el hombro y la camisa casi transparente debajo.
Rieron y mucho, como niños pequeños.
BaekHyun odiaba tener que fingir, el era abiertamente gay, le pareciera o no al mundo, había luchado contra todos si bien no físicamente, si emocionalmente, contra sus padres, las reglas escolares, las personas en la calle, con conocidos y desconocidos, el era lo que era y nunca lo negaría.
Hasta que logró que su familia aceptara su estilo, de vida, su hermana no, porque ella nunca lo rechazó, al contrario, solían jugar juntos a las princesas, y por supuesto el era uno, con sus coronas y brillos, con los vestidos de volantes que su hermana le prestaba. Ella era su roble.
Tomaron un taxi, llegaron a un bar, no era muy lujoso, pero se veía la gente pululando, entrando y otros saliendo, a su arecer era muy temprano, pero la gente se veía de ambiente al entrar.
Lo típico, una amplia barra, semioscuridad, luces parpadeantes, mesas con personas riendo y bebiendo.
Todo tan ordinario, tan simple.
Al fondo un sujeto les hacía señas. Jin sonrió y lo tomó de la mano para acercarse.
En un sillón de cuero, un sujeto de lentes y muy alto (Aunque realmente para Baek cualquiera era mas alto que el) con camisa aun fajada , solo se notaba se había retirado la corbata y tenía el saco a un lado. Se levantó para saludar, pero en el trayecto tiró un vaso con su bebida, Jin quisó agacharse a recogerlo para que no se vaciara todo, pero el tipo también lo hizo golpeándolo la cabeza.
BaekHyun no creía que para ver algo como eso había viajado de tan lejos.
Lo presentó como un amigo de la Universidad. NamJoon, era mayor que Jin por dos años, era el amor platónico de Jin, ahora el tipo era pasante en una gran empresa con miras de incorporarse de manera formal, decía Jin que era muy inteligente, pero de no ser por los lentes, no se notaba, porque se notaba era bastante torpe.
Se sentaron y Jin lo miraba como si mirará una pintura de Pollock tratando de encontrarle sentido.
Cursi y demasiado gay.
Baek ya estaba aburrido, cuando decidió pararse por una bebida a la barra.
—Voy por una bebida— Dijo por amabilidad pero Jin en respuesta solo sacudió la mano restándole importancia. Pareciera que le hacia un favor a todas luces.
BaekHyun resopló y caminó, de seguro podría conocer a alguien para pasar el rato, no importaba que el lugar no fuera gay, el conocía a muchos hombres heterosexuales, que se les olvidaba eso una vez que le metían mano, solían excusarse al siguiente día con, “Estaba alcoholizado y no sabía lo que hacía” pero a el eso poco le importaba, estaba tan acostumbrado a las aventuras, que prefería ese comportamiento que lidiar con una pareja formal donde ambos tuvieran que dar explicaciones. El era libre, de follar con quien quisiera. El vivía la vida.
Se sentó en un banquillo y le pidió a al barman que le sirviera una bebida, de esas que llevan sombrillas, ese era el medio para llamar la atención.
Delicadamente retiró la sombrilla y jugaba con ella , sonriendo coquetamente al barman, que tenía ojos gatunos.
Cuando alguien se acercó a pedir una bebida llamó su atención.
No todo el, solo una parte en particular.
Sus orejas.
Podía decir que eran bastante características, aunque claro había crecido como árbol y definitivamente perdió peso y definitivamente se miraba interesante pese a los lentes.
—¿ChanYeol?
—¿Si? —El sujeto sonrió con amabilidad mirándolo con un poco de duda.
—Eres Chanyeol…
—Si—Sonrió ante la obviedad, pues ya había contestado. — Lo siento...¿ tu eres…?
Baek se sintió ofendido, pero bueno tal vez el también había cambiado y era mas hermoso que cuando niño, tan simplón.
—¿No me recuerdas?
Estúpido poste con piernas largas, como había podido olvidarlo. Pensó.
—¿BaekHyun?…si eres tu ¿no?
Lo señaló mientras entrecerraba los ojos como si eso ayudara en algo.
—Si— Baek cruzó las piernas con autosuficiencia, como si modelara para un fotógrafo de una revista prestigiosa. —Vaya me recuerdas…
— Si éramos amigos en el preescolar y luego en el elemental.
Vaya si se le pudiera decir ser amigo a eso.
—No éramos amigos ¿lo recuerdas?
—Si —Contestó apenado, bajando la cabeza— Era solo un niño, solo …solo hacia lo que me decían.
La conversación era básicamente de boca a oído por el ruido de la música.
—Podríamos salir a hablar afuera, aquí es insufrible. —Propone ChanYeol.
—Claro.
Cuando salían se acercó a una mesa a decir algo, tres sujetos y dos chicas comenzaron a decirle cosas, pero el solo negaba con la cabeza.
Fue inevitable preguntar.
—¿Estas bien?, digo no era mi intención separarte de tus amigos.
—No, realmente te agradezco, no quería estar ahí.
—Ah bien…supongo que fue un placer ser tu pretexto. —Baek sonríe con arrogancia, se siente utilizado.
—Podemos platicar o ir a tomar un café. —ChanYeol evita el comentario.
—No, mi amigo está dentro.
—Entonces ¿ yo interrumpí algo?. —Pregunta expectante.
—No, es mejor estar fuera, el está ocupado. —Salen a la parte de enfrente.
BaekHyun encendió un cigarro, daba bocanadas, largas, aspiraba un poco el humo y luego lo soltaba, estaban parados bajo una farola. ChanYeol, miraba hacía la calle, silencioso.
El silencio se tornó incomodo.
—Y bueno cuéntame, que haces de tu vida, no se … ¿estas en la universidad?
—Egresé el año pasado, igual que tú supongo.
—No supongas, tuve que repetir un año— Ríe— No soy muy buen estudiante, sabes . —Le confía Baek.
—Y bueno…dices que no querías venir.
—La verdad no, solo vine a este lugar por mi amigo Jin…que a su vez vino por otro amigo.
A Baek le come la lengua preguntar, pero no se atreve, tiene curiosidad y no de una muy amable. Pero afortunadamente le ganan la pregunta.
—Mmm, ¿tienes novia?
—Chan…digo puedo ¿llamarte así? o ¿debe ser ChanYeol?
—Chan está bien.
—Sabes, creo recordaras, me gusta desde niño los vestidos y los niños , así que no es necesario disimular.
—Si, solo no quise ser grosero…entonces tienes novio supongo.
—Vuelves a suponer mal, soy un alma libre.
Cuando las personas insisten en ser almas libres ¿Será que en el fondo es una negación de la verdadera necesidad de pertenecer a alguien? Pero lo dicen tan alto y tan seguido con el deseo de convencerse a si mismos.
—Vaya, entiendo.
—Que hay de ti…¿una señora Park? …aunque no veo un anillo en tu mano. —Esos pequeños grandes detalles no pasaban nunca desapercibidos por Baek, en ello era muy astuto.
—No, no la hay, estuvo a punto, pero no…
—Vaya…no la amabas…
—No lo suficiente como para querer morir , pero no tan poco como para mentir diciéndote que no me duele.
—Vaya…supongo que fue…no , la verdad soy muy malo consolando, es mejor que no diga nada o terminaré diciendo que el amor es una gran mierda.
—El amor no es una mierda. —Protesta ChanYeol.
—Lo es querido, lo es…dime ¿Por qué terminaron?
—Ella conoció a alguien al parecer mas divertido que yo.
—¡Pero el amor no es una gran mierda…! —Dice con ironía y con un algo de saña. Realmente el no cree en el amor.
—Solo porque mi relación no haya funcionado, no significa que no exista.
—Pues las parejas siempre terminan buscando en alguien más aun cuando tengan a alguien a su lado.
—Yo nunca le fui infiel.
—¿Y de que te sirvió? Te dejaron aun así…no Chan, debes vivir la vida, disfrutar, tener acostones con desconocidas, disfrutar.
—Eso dicen mis amigos, por eso me obligaron a venir hoy.
—Pues tienen razón. —El cigarro se ha acabado entre sus manos, no se dio cuenta en que momento hasta que sintió el calor en los dedos. Lo aplasta con el pie.
—La vida es mas que eso…
—La vida es una gran mierda , que te mastica y escupe, no importa lo que hagas, siempre habrá algo que lo joda todo, que no te haga ser feliz, por eso debes ser una alma libre y hacer lo que te venga en gana.
—Si no eres feliz, tal vez deberías…
—¡No, no, no! no te atrevas a darme de lecciones de moral y buenas costumbres.
—Yo solo digo que…
—No ChanYeol, no solo digas, estoy hasta el culo de que la gente me diga lo que puedo o no puedo hacer, que sean prejuiciosos solo porque prefiero un pene en mi boca que una vagina, que piensen que arderé en el infierno porque me gustan los hombres en lugar de tener una linda novia con un anillo en el dedo, con el deseo de un futuro con un hogar en un suburbio, para regresar del trabajo y que me espere con la comida caliente y un niño en brazos…
—Eso no es malo…yo quiero algo como eso.
—Claro, porque para los heterosexuales los cuentos de hadas funciona muy bien, quieren ser el príncipe que rescata a la hermosa princesa, tienen su castillo y viven felices por siempre…la felicidad completa no existe…!No e-xis-te!
—Eres prejuicioso Baek…
—¿Yo soy prejuicioso? Yo…¿sabes cuantas veces me he peleado con las personas que me juzgan por ser homosexual?, ¿sabes cuantas veces me han negado un servicio por mi forma de vestir? ¿sabes cuantas veces me han rechazado los chicos cuando se dan cuenta que han follado con un hombre diciendo que estaban borrachos ? …¿sabes cuantas veces me golpearon en la escuela por ser lo que soy?...claro que lo sabes… tu muchas veces lo viste.
—Tenía miedo…
—Pues yo no, yo no tengo miedo a ser lo que soy, esto orgulloso de mi mismo —De repente Baek se siente eufórico y poderoso al recordar su pesado. —Y por eso vivo a mi manera, disfruto lo que puedo.
—Pero aun así …eres prejuicioso.
—No entiendo.
—Es verdad, has tenido una vida difícil, pero eso no significa que el amor no exista, quiero pensar que en algún lugar del mundo hay alguien que pueda amarme, soy optimista, tal vez muchas chicas me hayan encontrado simple y por eso me rechacen, pero no me escondo tras una fachada de indiferencia y descaro diciendo que vivo una vida que me hace feliz cuando es mentira…
—¡Como te atreves a decirme hipócrita!
—No dije eso…solo digo que niegas de la felicidad y te escondes en un tu orgullo homosexual diciendo que eres fuerte, rechazas lo bueno que hay en la vida…¿Qué hay de malo en querer ser monógamo ?¿Que hay de malo en querer un vida tranquila?... tu finges ser feliz con una vida desenfrenada, porque es mas fácil decir eso que aceptar que también deseas encontrar a alguien a quien amar y sentirte amado…
—¡No es verdad!
—Que hay de malo en ser humano… ¿Por qué no darte la oportunidad?
—Los hombres te utilizan…
—Tu permites que te utilicen usándolos.
—Tu fuiste bueno y te engañaron…
—Dos veces…dos diferentes chicas, pero aun así soy un creyente, tal vez debía pasar primero por ello para encontrar el verdadero amor y poderlo valorar aun mas … aun guardo uno de cuando niño…
Baek lo mira, con duda.
—Eras un niño, no era real.
—Tal vez no lo era…tal vez si, no lo sabré si no lo intento.
—Has tenido novias…
—Yo no hablé de géneros, yo solo hablé de amor…se ama sin importar que …o a quien.
— Si es demasiado alocado, no te gustará.
—Tal vez no le guste mi quietud, pero aun así algo podría pasar.
—¿En verdad lo crees? —Le es difícil confiar, mucho menos en algo que sucedió cuando niños, un toque de manos, su primer besos, las primeras caricias ha escondidas, un amor lejano y clandestino. Un amor limpio del que nunca se atrevió a contar a su hermana, a Jin, a nadie.
—Realmente…sin duda alguna.
—Es una casualidad encontrar a alguien… —Tal vez ni siquiera se refería a el.
—Tal vez es el destino, toparte en el mismo lugar, en el mismo momento no puede ser casualidad. Creo en las señales.
—Eres un romántico.
—Lo soy y no me avergüenzo de ello. —Sonríe, sabe que son palabras que se burlan de el hablando de “Ser orgullosamente homosexual”
—Hacías lo que te decían…
—Era un niño, ahora soy un adulto.
—Quieres niños…
—Solo si se puede.
—No te gustan los gatos…
—No te gustan los perros…nada es perfecto, pero eso no significa que no sea posible.
Se acerca a Baek que está recargado en la farola. La diferencia de estaturas hace que se agache un poco, siente el aliento tibio, cierra los ojos y espera el contacto, el recuerdo de un pasado, de tal vez un probable futuro.
—¡BAEK! ¡BAEK!
El grito lo sobresalta.
—¿Qué pasa?
Jin mira a la pareja y sonríe con malicia.
—No pierdes tiempo cariño.
—Jin, me buscabas a gritos supongo quieres algo.
—Nam se va a casa, esta cansado y quiere dormir… ¡Al diablo con el ! vamos al club gay conozcamos chicos lindos y follemos.
—Si…
Regresa a donde el chico está parado.
—Lo siento debo irme — Ha sido una linda platica, pero no es real, fue cosa de niños.
—Si, me dio gusto saludarte, espero…
—No esperes.
—Esperare al destino, si tiene que ser será. —Le da un beso en la mejilla y Baek tarda en reaccionar, da un paso atrás y lo ve sonreír.
—Adiós. —Agita la mano lentamente.
—Tengo un blog, escribo poesía, puedes contactarme ahí —Le dice antes que termine de alejarse. —Se llama Amor, por ParK ChanYeol.
—¡Que original!
—Lee : “Amor de niños”, te gustará, siempre tuve la esperanza que tal vez algún día lo leerías.
—El destino ¿No? —Camina de espaldas con lentitud, como si temiera alejarse.
—Dijimos que cuando grandes…me debes una promesa…
BaekHyun se da la vuelta, dándole la espalda, el cree que es una tontería creer en el destino y en una promesa de niños.
Jin le sonríe y le toma de la mano.
—Debes contarme que pasó.
—Nada importante…
—¡BAEK! —Se escucha el grito de ChanYeol.
Voltea lo ve, con esa gran sonrisa, tan grande como sus orejas.
—¡Te queda bien el rosa!
Baek se sacude el cabello y sonríe…
Vive en otra ciudad.
Le gustan las fiestas.
Aun no termina la universidad.
No sabe cocinar.
No puede tener hijos
Tal vez no funcione…
Pero aun así…tal vez es bueno creer en el destino, tal vez es momento de cumplir un promesa.
Fin.
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