Para Vanessa hoy oficialmente podía darse de vacaciones, había recibido su última nota con lo que podía darse por eximida de todas sus materias pero tenía que admitir que se sentía algo mal por no darle un regalo más apropiado a la enana, incluso su mejor amiga le había regalado una polera con un diseño de un cocodrilo muy hermoso al parecer era el animal favorito de la menor, quien de verdad parecía contenta con el regalo. Camino un poco por las calles para ver si encontraba algo para la enana, era lo justo Scarlett la sorprendió mucho cuando le regalo algo por su cumpleaños. No conocía muy bien sus gustos, tal vez podría regalarle algo para dibujar, últimamente se centraba bastante en eso, bueno siempre dibujo pero hasta hace poco la nota más centrada en ese hobby, de hecho era muy buena, una vez la descubrió dibujándola cuando vio el boceto descubrió el talento que tenía. Se maldijo otra vez sus recuerdos estaban llenos de esa enana ¿Qué diablos le pasaba? Ella la odiaba… era molestosa, siempre encontraba un modo de hacerla sentir mal, pero a su vez tan bien era agradable y a veces increíblemente confiable, bueno no la odiaba como tal, simplemente no podía decir con palabras como se sentía respecto a ella, a veces quería conocerla más, todo a su alrededor siempre era un misterio pero a veces sentía que debía alejarse de ella, que no debía relacionarse con ella o algo malo pasaría a lo mejor era miedo nunca pudo superar el incidente del baño, ¡diablos! Su mirada, esa satisfacción de ver a sus enemigos retorciéndose de dolor, su sonrisa daba escalofríos y la forma en que estaba parada en medio del baño, incluso el inspector que estaba junto a ella retrocedió, todo en ella decía peligro.
Camino perdida en aquellos pensamientos unos momentos hasta chocar con alguien, se disculpó algo apenada.
- Eres Vanessa ¿verdad?- cuando miro de quien se trataba vio que era Victoria la hermana mayor de Scarlett ¿buena suerte o mala suerte? Se preguntó Vanessa
- Si, tu eres Victoria- al escuchar aquello la chica frente a ella le ofreció su mejor sonrisa
Vanessa aun no sabía como pero termino caminando junto a la hermana de Scarlett, aquella chica se había interesado en su odisea, a medida que caminaban Vanessa no podía dejar de sentirse algo incomoda, aquella chica bueno… era muy opuesta a Scarlett, aunque ciertamente compartían rasgos similares. Victoria rio bastante cuando noto la mirada de Vanessa sobre ella.
- Lo sé, no somos muy parecidas es que Scarlett tiene los rasgos Bustamante-
- Si es verdad- sonrió levemente
- Sabes… yo quería conocerte porque quería hablar contigo- Vanessa vio como la hermana de Scarlett desviaba su mirada avergonzada, era un gesto muy parecido al de la menor
- ¿Por qué?- pregunto Vanessa sorprendida
- Quería conocer a la persona que tomaría mi lugar, tengo que admitir que estaba algo celosa cuando Scarlett te menciono-
- Yo no…- trato de decir Vanessa
- Lo se… no necesitas explicar nada es solo… - se llevó la mano a su boca pensando brevemente- Scarlett me va a matar pero necesitas saber algo-
Vanessa accedió a seguir a Victoria, de alguna forma le daba curiosidad saber algo más de Scarlett. Pero algo en la chica frente a ella no estaba bien, bajo la sonrisa que tenía podía ver una melancolía, algo que también apreciaba en la menor-
- ¿te gustan las historias?- pregunto una vez que llegaron a un parque bastante alejado- cuando mi madre quedo embarazada de su primera hija no lo podía creer, ella se alegró pero su pareja ósea mi padre no le pareció bien de hecho quería que abortara pero ella se negó así que mi padre no quiso hacerse cargo de un hijo y se marchó. Por algunos años solo fuimos mi madre y yo vivimos felices hasta que el llego…- Vanessa pudo notar cierto rencor en el tono de voz de la chica, cuando lo nombro su lenguaje corporal fue totalmente distinto, cuando se refiere a “el” es por el padre de Scarlett ¿David?- mi madre mantuvo a su nuevo novio un tiempo fuera de casa, pero pronto comenzaron a vivir juntos, la convivencia no fue buena… él no era agradable conmigo trato de formar una familia solo con mi madre yo solo estorbaba, cuando quedo embarazada de Scarlett yo al poco tiempo me tuve que ir, a diferencia del inútil de mi padre en realidad tengo buenos abuelos, ellos siempre se involucraron y bueno aceptaron cuidarme- Vanessa no daba crédito a lo que escuchaba era como si hablaran de una persona diferente, un David diferente al que ella conoció, lo primero que se le vino a la mente fue ese extraño momento de desconcierto que tuvo la menor al conocerla y la recriminación a su padre- yo no la conocí hasta que ella cumplió 4 años, la vi caminar tomada de la mano de mi mama y la odie por eso- victoria sonrió con tristeza- creía que ella me había quitado a mi madre, que me había privado de su amor pero en realidad… condene a una niña que la estaba pasando peor que yo… con Scarlett nos llevamos 9 años de diferencia así que aproveche esa ventaja para tratarla mal- Victoria apretó sus puños y se mordió el labio inferior tratando de suprimir sus emociones con poco éxito- gracias a su gran padre ella usualmente estaba sola así que aproveche de molestarla con mi grupo de amigos creía que se lo merecía pero lamentablemente me di cuenta tarde que yo no era la única que la molestaba… cuando un amigo mío me conto de esa familia de asesinos y que Scarlett era pariente de ellos me di cuenta del porque siempre estaba sola, así que un día la espié la seguí todo el día y lo que vi me hizo sentir culpable…- lagrimas se deslizaron por la mejillas de Victoria, se sentía tan culpable por lo que le hizo a su hermanita, Vanessa desvió la mirada unos segundos y en modo de apoyo toco el hombro de la chica- David no se preocupaba mucho por ella la dejaba vagar sola por la calle mientras mi madre se partía el lomo trabajando y lo peor es que la engañaba, como ella pasaba tanto tiempo en la calle era blanco de esos tipos de una iglesia, muchas veces la trataban mal incluso la golpeaban, yo… no pude aguantarlo y me metí como pude… ¿sabes cuál fue su reacción cuando me vio? Se alegró, simplemente me abrazo y me sonrió, me dijo que sabía quién era y que tenía muchas ganas de conocerme y hablar conmigo, nunca me había sentido tan culpable en mi vida así que comencé a reunirme con ella en secreto, me costó un poco cambiar mi actitud hacia ella-
- ¿Por qué me cuentas esto?- pregunto Vanessa mirándola extrañada, algo le decía que no era su intención darle pena o poner como víctima a la menor.
- A eso voy…como veras fuera de esos incidentes ella era una chica más o menos normal, aún tenía esa inocencia de un niño y a pesar de todo era alegre pero todo cambio cuando se marchó con mi madre, practicante salieron huyendo pero nunca supe el porqué, creía que era por David pero él estaba con tu madre, entonces si no era el ¿quién? No supe de ella hasta que Scarlett comenzó a vivir con ustedes pero… ya no era la chica que yo conocí… estaba llena de cicatrices y su actitud había cambiado, parecía herida y tenía mucha rabia, a pesar de la confianza que nos tenemos ella no me ha dicho que le paso, incluso repite las mismas patéticas escusas cuando le pregunto por sus cicatrices-
- Espera…- le interrumpió Vanessa- ¿Qué cicatrices?
Victoria suspiro y llevo su mano a su frente tocando su ceja con su índice, luego llevo su dedo hasta su brazo, aquella chica marco varios sitios más antes de detenerse.
- Cuando vi la cicatriz en su frente me dijo que se le había caído una baldosa en el reformatorio pero no le creí es estúpido que le hayan creído semejante estupidez, si miras bien esa cicatriz tiene como 5 cm y es perfecta es obvio que alguien se la hizo- Victoria alzo su voz un poco, dando a notar el enfado que le provocaba ver aquello
- No sé si te lo ha dicho pero… ambas no nos llevamos muy bien-
- Lo sé pero sabes… caminar solo resulta tremendamente doloroso y Scarlett quiere seguir ese camino y tu pasas mucho más tiempo cerca de ella de lo que yo puedo pasar… sé que esto te parecerá inapropiado pero podrías hacerme un favor ¿podrías cuidar de ella?-
- No estoy segura de poder hacerlo creo que ella puede cuidarse sola- exclamo Vanessa incomoda
- Lo se… pero no me refiero físicamente, me refiero a su corazón, no quiero que destruya sus emociones, a ella le es fácil aislarse intimidando a la gente- rio un poco y miro el cielo- aun es estúpida, es agresiva, se cree autosuficiente y cree que puede solucionar todo con golpes- una melancolía invadió la mirada de Victoria, el solo recuerdo de verla llorando de impotencia jurando volverse fuerte y luego verla convertida en alguien totalmente distinto.
- Are lo que pueda…- exclamo Vanessa
- Gracias… -
- ¿nena?- la voz masculina nos sobresaltó- ¿Por qué no me llamaste cuando saliste?- un chico vestido bastante formal se acercó a ambas, abrazo a Victoria y deposito un suave beso en su mejilla
Mientras tanto Scarlett caminaba a su salón luego de un recreo bastante aburrido, al menos ya había entregado ese dichoso trabajo pero cuando llego fue recibida con una cachetada bastante fuerte, cuando supo de quien se trataba quedo bastante confundida Michelle la había golpeado pero ¿porque?
- ¿Cómo pudiste?- me reclamo
- ¿Qué?- pregunto sumamente confundida
- Besaste a mi mejor amiga… sabiendo lo que siento por ti-
Scarlett suspiro, ahora lo entendía al parecer Érica había hablado y cambiado las cosa, claro fue lista y espero a entregar el maldito trabajo, realmente no tenía tiempo para invertirlo en estúpidas rencillas y no quería ser la causa por la que dos amigas se separen aunque una de ellas no sea la mejor persona del mundo.
- ¿confías plenamente en tu amiga?- pregunto Scarlett inclinando la cabeza brevemente
- Por supuesto que si- exclamo Michelle molesta
- Entonces no tengo nada que decir- dicho esto empujo levemente a Michelle para apartarla de su camino y se fue a sentar, casi de inmediato pudo sentir las miradas de odio de sus compañeros, ahora que lo pensaba Michelle era una chica sumamente querida dentro de su curso esto le causaría problemas con los de su curso ¿genial no?
Cuando al fin llego a su casa escucho la voz de Fernanda, casi de inmediato fue a la habitación de Vanessa abrió la puerta de golpe sobresaltando a ambas chicas dentro, tomo el brazo de Fernanda y se al comedor.
- ¿Qué paso?- pregunto alarmada Fernanda
- Necesito tu consejo…-
Vanessa había quedado un tanto sorprendida por la actitud de la menor, se había llevado a Fernanda sin siquiera decir una palabra, pero mejor aquellos momentos de silencio le ayudaba a reflexionar la información que recibió, le preocupaba como debía actuar, no es como si pudiera llegar de la nada y hablar esto con la menor no importaba cuantos escenarios se imaginara simplemente llegaba a la mismo, a Scarlett diciéndole que no se metiera. Espero algunos minutos antes de ir en búsqueda de su amiga, tanto Scarlett como Fernanda estaban instaladas en el comedor.
- Tienes razón esto te traerá problemas y aunque intentes hablar con esa chica no creo que te crea- exclamo Fernanda cruzándose de brazos
- Maldita sea lo que me faltaba- exclamo Scarlett chasqueando la lengua- es por eso que detesto las relaciones amorosas-
- ¿terminaron de hablar?- pregunto Vanessa
- Si, te devuelvo a tu amiga-
Cuando Fernanda se marchó ambas quedaron solas, Scarlett preparo café mientras ambas estaban sentadas en el sofá, la menor sintió de vez en cuando la mirada de Vanessa sobre ella, pensó que la mayor tendría curiosidad de lo que habían hablado con Fernanda, tampoco es como si fuera tan privado de hecho fue Vanessa quien intervino, tal vez no sea tan malo contarle, nunca tuvieron una estrecha relación cada quien tenía su mundo, usualmente le diría que no se metiera en sus asuntos pero pareciera que últimamente se han acercado bastante o al menos eso creía. Miro a Vanessa hasta que sus ojos se encontraron y luego de dudar un poco le relato brevemente lo ocurrido.
- ¿Qué aras?- pregunto Vanessa
- Nada- Scarlett se rasco la nuca- encuentro estúpido que buenas amigas se separen por un chico o en mi caso por una chica-
- Pero aunque no hagas nada esto te va a traer problemas, me preocupa que te hagan algo- exclamo Vanessa
- Tu… ¿estas preocupada por mí?- Scarlett parecía visiblemente sorprendida y conmovida- podrías repetir eso de nuevo- se llevó ambas manos a su pecho- quisiera disfrutarlo un poco más-
- Tarada- exclamo Vanessa cruzándose de brazos mientras desviaba su mirada incomoda
Scarlett rio un poco, realmente disfrutaba molestar a Vanessa, se sentía tan irreal estos momentos, muy pocas veces podía sentirse feliz y le gustaba aprovecharlo al máximo, muchas veces sentía que de un segundo a otro alguien podía arrebatárselo en un respiro.
- Tienes algo en el pelo- Vanessa acerco su mano al cabello de la menor cerca de su cien y sin querer corrió un mechón mostrando levemente la gran cicatriz en su ceja izquierda, al apreciarla fue tal y como lo dijo a hermana de Scarlett, por inercia la mayor toco suavemente aquella marca tan perfecta provocando un leve estremecimiento de la menor quien se llevó la mano a su cicatriz- lo siento yo…
- Está bien… es horrible ¿verdad? Usualmente causa curiosidad por eso suelo esconderla-
- ¿Cómo fue que te la hiciste?- Scarlett bajo la cabeza tapando su rostro levemente con su pelo, para luego mirarla sin ninguna expresión en su rostro
- Me cayó un baldosa en el reformatorio, impacto directo en mi ceja-
Como muchas veces pasaba el ambiente entre ambas se volvió incomodo, Vanessa simplemente pensaba en la respuesta de la menor y luego en lo que le conto Victoria y le preocupaba, aquello no dejaba de surcar su mente.
Scarlett caminaba tranquilamente por los pasillos, salía de la oficina de la psicóloga, lo único que quería era llegar a casa, hoy especialmente sus compañeros fueron molestos y se sintió aún más aislada, maldita sea… sabía que Michelle era súper querida en el curso pero no espero que todos los estudiantes de su curso se pusieran de acuerdo para joderle la existencia. Estaba perdida en sus pensamientos cuando fue empujada contra los casilleros, varios de sus compañeros la rodearon.
- La hiciste llorar- exclamo uno enfurecido
El primero que lanzo el primer golpe fue interceptado rápidamente por la más baja, lo segundo que paso fue a la menor abalanzándose sobre ellos. Ella nunca había peleado con tantas personas, aunque fueran inexpertos era complicado por cada golpe que daba recibía dos o tres más, uno de ellos la tomo por detrás inmovilizando sus brazos para que otro le golpeara pero rápidamente se zafo estrellando al chico contra los casilleros, dio un pequeño giro sobre su pie para patear al chico frente a ella.
Se encontraba girando por el suelo con uno de ellos cuando un profesor intervino, cuando vio quien se trataba chasqueo la lengua en disgusto.
- ¿Qué significa esto?- pregunto cruzándose de brazos
- Ella…-
- ¡Basta! No digan nada, retírense mañana los quiero a primera hora frente a la oficina del director- exclamo tajante, todos se miraron extraños y se marcharon- ¿estás bien?
- S-si- exclamo extrañada Scarlett mientras se levantaba de suelo-
- Me alegro…- sonrió aquel profesor era el de educación física, era quien constantemente buscaba hablarle y hacerla participar en algún club, ella nunca le agrado le daba desconfianza y como nunca se equivocaba en sus corazonadas simplemente lo ignoro, pero se sentía desconcertada al ver que él no la culpaba como el resto de profesores, pensó que el fingía amabilidad para luego tirarla a la jaula de los leones pero al parecer no fue así- ¿quieres que te lleva a casa?
- No se preocupe estoy bien- dicho esto le agradeció y se marchó rápidamente.
Cuando llego a casa lo primero que hizo fue mirarse al espejo, no se veía tan mal tenía un rasguño y un moretón pequeño en la mandíbula. Se levantó su blusa y no observo nada muy extravagante, sonrió satisfecha.
- Gane- exclamo sonriéndole al espejo pero esa sonrisa se esfumo rápidamente- pero aun no es suficiente-
Cuando llego su padre y vio el rasguño rápidamente le pidió explicaciones de lo ocurrido y le regaño por pelear en clases y le ordeno que dejara de meterse en problemas.
- No fue mi culpa que me atacaran- dicho esto se levantó de la mesa se fue a su habitación, cuando llego ahí se sentó frustrada, su padre jamás la apoyaba, detestaba no tener su apoyo y que gente externa de su familia lo hiciera. Espero a que todos se durmieran para salir a escondidas de su habitación, camino por las calles oscuras hasta llegar a un “Bar” cuando la vieron de inmediato le abrieron el paso puesto que ese no era un bar ordinario aquello era un fachada para esconder las peleas que se hacían ahí, donde ella era una de las estrellas.
- ¡ESTAN LISTO PARA UN ESPECTACULO!- exclamo Scarlett trepándose a la reja del ring subiendo a lo más alto, escucho vítores y aplauso del público presente, mientras el dinero corría, junto a alcohol y drogas- ¡¿Quién espera ver una pelea sangrienta?!- exclamo alzando su índice para luego lanzarse y aterrizar de forma perfecta en el ring
Realmente había extrañado pelear, sentía que le relajaba y le ayudaba a superar el día a día y más en los peores momentos, como los estaba teniendo ahora, cuando volvió al colegio a día siguiente de inmediato fue llamada a la dirección, pensó que se había ganado una suspensión, puesto que sus compañeros que tan amablemente le habían golpeado estaban ahí con su mejor cara de perrito maltratado, tal vez para la situación seria mejor pero no fue así cuando el profesor que le había ayudado intervino, hablo con el director sin miedo y dio argumentos bastantes convincentes, para el final de la jornada ellos habían sido suspendidos y ella estaba libre de toda culpa. Aquello no se lo espero, incluso Michelle había tratado de acercarse a ella para decirle que no estaba involucrada en el incidente pero simplemente no le escucho y se fue rápidamente.
Cuando llego a casa había una nota sobre la mesa, explicando la ausencia de casi todos los miembros de la familia y que la comida estaba en el microondas, ahora que lo recordaba su padre viajaba hoy. Comió rápidamente y se cambió, luego de hacer su rutina de ejercicios se dedicó a vagar un poco mientras miraba algún programa. Silvana y Vanessa llegaron cuando ella estaba mirando televisión.
Silvana la llamo para que se sentara junto a ella en la mesa, mientras Vanessa se retiraba, pensó que le daría el mismo discurso que usualmente le daba, pero se sorprendió cuando le pregunto qué había pasado y si necesitaba ayuda, puesto que le habían llamado de la dirección y que le habían explicado lo ocurrido de forma confusa. Scarlett miro a aquella mujer por unos momentos, para luego suspirar ¿enserio? Esto es aún más confuso, la mujer sentada frente a ella en los dos años que llevan viviendo juntas jamás se había preocupado por ella más allá de darle estúpidos discursos, primero acepto que ella fuera lesbiana, luego dijo que la aceptaba a pesar de que era pariente de unos asesinos y ahora se preocupaba de ella por algún incidente ¿Qué vendría ahora? ¿Que su padre recapacite? No pudo evitar esbozar una sonrisa, aunque era demasiado pensar en que su padre recapacite esto no era tan malo.
Scarlett conto brevemente lo que había ocurrido omitiendo el hecho de que la amiga de Michelle la beso y lo trato todo como un mal entendido, le resultaba algo incómodo contarle todo tan detallado, cuando estaba recibiendo algunos consejos de cómo tratar la situación alguien golpeo la puerta, la madre de Vanessa fue a abrirla rápidamente preguntándose de quien se trataba.
- Buenas noches, nosotros somos los abuelos de Scarlett ¿esta ella?- cuando Scarlett escucho aquello su expresión calmada cambio drásticamente, se levantó bruscamente de su asiento y camino hacia ellos.
- ¿Qué demonios hacen ustedes acá?- aquellas palabras salieron como un gruñido de su boca ¿Por qué ahora? ¡¿Porque?! Ellos no tenían el maldito derecho de estar parados frente a ella, no después de lo que hicieron
- Vinimos a verte… nosotros queríamos…
- ¡LARGO!- grito casi fuera de sus cabales Scarlett- no los quiero ver aunque rueguen de rodillas que los perdone-
- Niña… nosotros te perdonamos por lo que nos hiciste-
- ¿qué?- exclamo sorprendida y confusa Scarlett, tanto que retrocedió unos pasos y por unos momentos, se llevó sus manos a su cabello, para luego reír un poco- es una broma ¿no?-
- ¿Scarlett?- la madre de Vanessa seguía ahí mismo entre ellos, sumamente confundida- porque dicen eso ¿Qué hiciste?
- Ella incendio nuestra casa pero la perdonamos- exclamo su abuelo
La madre de Vanessa miro horrorizada a la menor quien solo agacho la mirada unos momentos, apretó tanto sus puños que sus nudillos se colocaron blancos y sus uñas se enterraron en la palma de su mano provocándole un leve dolor.
- Ya que estamos hablando de eso… contemos la historia completa- dicho esto se apartó del camino y les hizo un gesto para que pasaran a la casa- venga contémosle a Silvana porque incendie su casa-
- Scarlett…- exclamo su abuela tratando de callarla
- Scarlett nada…- exclamo la menor mirándolos con odio- vengan cuéntenle a ella el motivo… cuéntenle lo que me hicieron… cuéntenle lo que él me hizo…- su voz sonaba sepulcral- cuéntenle que cuando les pedí ayuda ustedes simplemente se hicieron de la vista ciega y me abandonaron ahí… me humille pidiéndoles que me ayudaran… se supone que debían protegerme- su voz se quebró pero se negó a dejar que saliera una lagrima- ustedes son los que debieran pedir perdón ¡Lárguense o no respondo!- sus abuelos se miraron unos momentos y se marcharon sin decir una palabra ¿Cuál era el motivo de verla? No lo sabía pero le dolía, se desplomo sobre sus rodillas y se llevó sus manos a su rostro. Lanzo un grito desgarrador para luego golpear el suelo con fuerza, una y otra vez. Por su maldita culpa ahora ella… no iba a dejar de recordar ese momento ¿porque? ¿Por qué no podían dejarla en paz? ¿Qué querían conseguir? La querían atormentar más de lo que ya estaba, la madre de Vanessa había desaparecido o eso creía. Todo se volvió a romper, la poca confianza que le estaba dando aquella mujer se había desvanecido luego de lo que sus abuelos habían dicho.
Se levantó del suelo presa de su rabia y su dolor, golpeo todo lo que tenía en frente, pateo sillas y golpeo la mesa en repetidas oportunidades.
- ¡Se suponía que eran mi familia!- grito golpeando la mesa- ¡Se suponía que debían cuidarme!- una fuerte presión en el pecho apareció, seguido de un fuerte dolor de cabeza
- ¿Scarlett?- cuando escucho aquella voz volteo levemente para toparse con Vanessa, luego del escándalo que acaba de montar era lógico que ella apareciera, un poco más calmada decidió marcharse del lugar, si seguía ahí sentiría que perdería el control
- Aléjate…- musito, a pesar de las advertencias de su madre Vanessa no retrocedió y trato de tocar a la menor- ¡no me mires! ¡no te atrevas a tocarme!- sus palabras salieron roncas- estoy a punto… estoy a punto de perder el control- exclamo a duras penas, mierda… por más que tratara de calmarse una vez que perdía su control, absolutamente todo se iba al carajo, no quería detestaba no poder controlar esa rabia que sentía, no quería lastimar a nadie
Vanessa la miro perpleja por unos segundos, pareciera que estuviera sufriendo y luchando por no perder el control, pero acaso ¿no lo había perdido ya? Se preguntó mientras miraba su comedor destrozado, Scarlett corrió fuera de la casa, Vanessa dudo unos instantes antes de correr fuera de la casa persiguiendo a la menor, el solo recuerdo de la promesa con Victoria le hacía no quedarse ahí parada. Tuvo que quemar bastante aire antes de poder si quiera divisarla, era demasiado rápida, cuando al fin la vio la encontró parada frente a un parque cercano a su casa, le costó recobrar el aliento.
- Te encontré- exclamo tocando el hombro de la menor- maldita sea… corres demasiado rápido-
- Ahora no Vanessa, no estoy de humor para peleas- exclamo la menor mirando al suelo
- No vengo a pelear, estaba… estaba preocupada por ti- al escuchar eso la menor abrió desmesuradamente los ojos y se giró rápidamente a mirarla
- Tu… ¿de verdad? Después… de lo ¿qué escuchaste?- la menor realmente parecía sorprendida al escuchar las palabras, pareciera haberse calmado
- Por supuesto que lo estoy… dejaste la casa hecha un desastre- cuando la menor la miro simplemente agacho la mirada con tristeza
- Claro… es por eso- exclamo sin mirarla, podía verla temblando- en cuanto me calme…- cuando Scarlett volvió a mirarla Vanessa se sorprendió, esa expresión nunca la había hecho frente a ella, era una sonrisa fingida, sus ojos estaban anegados en lágrimas, parecía ¿rota? Era como si hubiera usado todos sus esfuerzos para sonreír, pero sus ojos la estaban traicionando
- ¿Qué paso con ellos?- pregunto Vanessa- déjame escucharte… no quiero creer que lo hiciste por maldad-
Cuando Scarlett escucho aquello no pudo evitar ponerse a llorar, se llevó sus manos a su rostro ocultando sus lágrimas, pensar que aquellas palabras la desmoronarían aún más, cuando Vanessa la vio llorando no pudo evitar pensar que ella solo tenía 16 años por más fuerte que Scarlett fuera ella aún era una adolecente y pareciera que llevaba una carga bastante pesada, su cuerpo se movió solo y rodeo a la menor en un cálido abrazo.
- Yo… lo siento… no puedo contarte lo que paso- exclamo la menor apartándose de Vanessa- podrías dejarme sola por favor-
- Scarlett…- Vanessa parecía afligida- no es bueno estar sola-
Scarlett la miro por unos segundos y por un momento pareciera que iba a decir algo pero se detuvo, una fuerte punzada en su cabeza la detuvo, se llevó ambas manos a su cabeza.
- ¡Mierda! Ahora no- exclamo tratándose de alejar de Vanessa- escúchame… vete a casa, no…no quiero lastimarte yo estoy a punto de perder el control…te contare más tarde… pero vete- dicho esto se alejó corriendo dejando a Vanessa con su brazo estirado con aun más dudas-
No se supo de Scarlett hasta la mañana siguiente, cuando regreso por la tarde, no dijo nada simplemente se fue a su cuarto. Su madre como ella se miraron por un largo momento preocupadas.
- Deberíamos darle su espacio ¿no crees?-
- No creo que resuelva nada- exclamo Vanessa cruzándose de brazos
- Me preocupa lo que dijeron sus abuelo… sin decir mira como dejo la casa- miro a su alrededor, costo bastante dejar su casa como se veía antes- trata de no relacionarte mucho en sus asuntos-
- ¿No crees que ya estoy mayor para que decidas eso por mí?- suspiro levemente- tranquila sé hasta dónde llegar- le sonrió tratando de calmarla.
Vanessa decidió ir por algo de comer al supermercado, fue a una cuadra de su casa cuando se topó con los abuelos de Scarlett, solo los vio de forma rápida el día anterior cuando escuchó gritos y fue a ver qué pasaba.
- Disculpa… ¿vives con Scarlett?- pregunto uno de ellos, Vanessa simplemente asintió, por alguna razón les molestaba la presencia de ellos- podrías darle esto- le extendió un gran sobre amarillo- nosotros ya no la volveremos a molestar
Vanessa quedo confusa por unos momentos mientras los observaba alejarse, luego se concentró en aquel sobre. Cuando volvió de sus compras le trato de dar aquel sobre a Scarlett pero se negó a tocar algo de ellos, así que opto por guardarlo ella, lo dejo sobre su escritorio. Cuando comieron el ambiente fue totalmente incomodo, Scarlett estaba distinta, su mirada había perdido ese brillo característico de ella, parecía en transe como si su mente estuviera en otro lugar, ahora que lo pensaba era como tenerla de nuevo el primer día que llego, de inmediato recordó el sobre ¿tendrá algo que ver? Camino a su cuarto y cerro con llave, dudo por unos instantes antes de tomar el sobre ¿era correcto ver esto sin la autorización de Scarlett? No lo sabía, pero ella no lo quería, parecía importante y bastante personal. Dudo unos minutos hasta que al fin lo abrió
- ¡¿Qué?!- se paró de inmediato impactada al ver el contenido, de inmediato se llevó su mano a su boca- no puede ser-