Como había acordado Scarlett luego de un par de días ella volvió a casa, Vanessa respiro más tranquila al verla caminar bien, pero ella se veía incomoda, no quería hablar del conflicto que tuvo. Así que con Fernanda decidieron sacarla para despejarse, como aún estaba adolorida la llevaron a un parque cercano, donde se sentaron a disfrutar del sol, Scarlett apoyo su cabeza en el regazo de Vanessa mientras Fernanda le daba gomitas en la boca. “es como el paraíso” pensó la menor mientras masticaba una gomita en forma de delfín. Ahora que lo pensaba era la segunda vez que se recostaba en el regazo de Vanessa la primera vez fue hace algunas semanas atrás, cuando la menor acaparaba gran parte del sillón y Vanessa le pidió que quitara los pies, así que como no quería sentarse simplemente se giró y apoyo su cabeza en las piernas de Vanessa, como no vio el rechazo simplemente se quedó ahí. La charla era bastante amena y parecía que la menor se divertía olvidándose de todos los problemas.
- ¡Scarlett!- se escuchó a varias personas gritar su nombre antes de ver como se abalanzaban sobre ella. Un grupo de al menos cuatro chicos estaba sobre ella, aplastándola, se podían escuchar decir “maldita sea que bueno verte bien” “creí que te habías muerto” “te extrañe”
- Chicos… no puedo… respirar- exclamo la menor a duras penas
Todos se levantaron de encima de la menor quien se sentó respirando agitadamente, tanto Fernanda como Vanessa se apartaron de la situación no querían meterse en aquello. Todos los chicos se miraron con una sonrisa maligna en el rostro antes de que cada uno agarrara a la menor de cada extremidad, Scarlett al percatarse de lo que tramaban trato de defenderse pero fue inútil, no estaba en sus mejores condiciones y luego de forcejear un rato se rindió.
- Ayuda…- exclamo mirando a Fernanda y a Vanessa pero ambas se hicieron las desentendidas, jamás podrían luchar contra ellos, simplemente la observaron cómo se la llevaban. Algunos minutos después apareció llena de hojas y pasto, desganada simplemente se lanzó al suelo boca abajo
Fernanda se rio bajito antes de acercarse para quitarle las hojas del cabello, realmente la menor tenía una gran variedad de amigos, tratando de ocultar su sonrisa le pregunto que le habían hecho para estar así, pero la menor se negó a contar, pero se sentó y se quitó su sudadera cayendo una gran cantidad de pasto del interior, Fernanda no aguanto las carcajadas y se agarró el estómago mientras que Vanessa desvió la mirada tratando de aguantarse la risa.
Pronto volvieron a la casa de Vanessa debido a que Scarlett quería ducharse y quitarse el pasto bien. A pesar de lo malhumorada que se puso después Vanessa respiro aliviaba de verla mejor, menos nerviosa, menos triste. Aunque le costó la primera vez admitirlo de verdad que la casa era muy silenciosa sin Scarlett, esa semana en la que se encerró en su cuarto, ni sus padres pudieron animar el ambiente en la mesa, usualmente Scarlett comía en silencio pero muchas veces ambas terminaban metiéndose en un duelo de miradas o simplemente le gustaba observar las reacciones que tenía la menor cuando la incordiaba o sobre algo que hablaban sus padres, no tenerla ahí hizo que extrañara su presencia más de lo que admitía y no tenerla en la casa fue aún peor, pero si fuera admitir algo para ella misma diría que la enana le llamo la atención desde el primer momento que cruzo el umbral de puerta, su forma de ser tan distinta, su mirada, su aura misteriosa, sus gestos, cautivo completamente a la mayor y detestaba aquello porque entre más trataba de quitársela de la cabeza no podía. Cada vez que la menor le daba algo de confianza contándole algo de su pasado o revelándole sus emociones ella se aferraba a ello, pero aquello era ¿correcto? No, no lo era, siempre se confundía cuando estaba cerca de ella. Aquello no era correcto, por supuesto que no lo era.
Con el correr de los días Scarlett parecía mejorar bastante rápido, ya podía moverse con tranquilidad sin que le doliera el cuerpo, lo único que aún le molestaba era su brazo izquierdo, pero estaba casi en su máxima capacidad, incluso había comenzado a salir más, aunque aún cada dos días iba a visitar la tumba de su hermana. Luego de quedarse ahí un buen rato decidió marcharse, no fue hasta varios metros después que pude percatarse que la seguían, era extraño no sabía de quien se trataba, eran demasiado cautos para ser los chicos con los que solía pelear y si fuera ese hombre… el no actúa en grupo, si no era ninguno de los dos entonces ¿Quiénes eran? Con tranquilidad comenzó a meterse en varias calles con multitudes tratando de perderlos pero le fue inútil, así que puso en marcha su plan B “correr” por un momento creyó perderlos pero de alguna forma se las arreglaron para encontrarla y acercársele aún más, eran persistentes pero si no era por las buenas seria por las malas, se desvió por un callejón y se escondió entre dos basureros, cuando ellos pasaron buscándola ella los ataco. No eran simples personas fue el primer pensamiento de la menor cuando era agarrada por detrás con una llave asiendo presión en su brazo lastimado, con impulso y aguantando el dolor se hecho hacia atrás golpeando de lleno en la espalda a su captor, quien de inmediato la soltó.
Cuando se deshizo de todos, la mayoría estaba inconsciente en el suelo, le parecía extraño que se repitieran entre ellos mismo que no me maltrataran mucho y algo de un encargo. Buscando respuesta se acercó al único que aun parecía moverse, lo tomo de su sudadero y lo levanto.
- ¿Quién te envió?- pregunto mientras una gota de sudor corría por su mejilla- ¿fue él?
- ¿qué?- pronuncio con dificultad- no tienes idea de lo que acabas de hacer mocosa-
- ¡Contesta la maldita pregunta!- Scarlett alzo su voz, levanto su puño y lo golpeo directo en la nariz, aquel sujeto grito de dolor pero luego como si de un loco se tratase rio, aquello no le dio buena espina a la menor
- No tienes idea de quienes somos pequeña Scarlett… no es nadie de quien te imaginas-
Scarlett sintió un escalofrió al escuchar aquello, algo no andaba bien, podía sentirlo, el tipo frente a ella sonreía como si no le hubieran dado una paliza, cuando ella pregunto nombres, ni volver a golpearlo sirvió para que el contestara, cuando el tipo estaba inconsciente su teléfono vibro fuerte, ella lo sacó del bolsillo del pantalón y vio que era desconocido, contesto sin responder ni una palabra. “¿funciono? ¿La tienen?” se escuchó y ante el silencio rio por un momento antes de responder “hola Scarlett… sabía que un grupo de matones no sería rival para alguien tan especial como tú”
- ¿Quién eres? y ¿qué quieres?- pregunto la menor
- Lo que quiero es fácil y respecto a la primera pregunta podrías averiguarlo si vienes a casa, la señora Silvana estará feliz de verte-
- Si le haces algo yo…- exclamo con furia antes de ser interrumpida
- No estás en posición de exigir pequeña Scarlett, si quieres verla sana y salva ven a tu casa no llames a la policía ni a nadie, si no lo haces puede que se me resbale el dedo y presione sin querer el gatillo- dicho esto finalizo la llamada
De inmediato Scarlett se echó a correr en dirección a su casa, tenía que llagar rápido, el hablo de Silvana pero no de Vanessa así que esperaba que ella estuviera lejos y que no llegara pronto a casa. Se golpeó la frente con su puño tratando de ideal algún plan que le ayudara a salvar a Silvana pero nada se le venía a la mente, no sabía cuántos tipos habían, ni lo que querían, de lo que estaban dispuestos a hacer, solo que tenían armas y que la querían a ella pero ¿porque? Parecían conocerla pero ¿cómo?
Cuando llego a la esquina respiro profundamente y se tomó unos momentos para calmarse, camino tranquilamente y entro. De inmediato sintió fuertes manos tomarla por los brazos y hombros tirándola fuertemente contra el suelo.
- Sí que nos diste problemas- exclamo un sujeto acercándose colocándose en cuclillas para mirarme con una sonrisa triunfal- venciste al plan A sin problemas tal y como estaba previsto-
¿Qué? ¿Previsto? Scarlett estaba confundida no entendía lo que estaba pasando, no conocía a ninguno de ellos… miro en todas direcciones y vio a Silvana asustada en un rincón sentada de rodillas mientras era apuntada con un arma, pero entre los sujetos que estaban ahí había alguien, una persona que ella conocía.
- Profesor…- pronuncio sorprendida- ya veo… usted les dijo todo- exclamo dolida, realmente trato de confiar en él, siempre se mostró amable con ella y fue el único que le defendió en el colegio, pero… pero todo fue una maldita trampa, de solo verlo sonriendo ahí le llenaba de rabia, estaba enojada consigo misma por haber ignorado esa corazonada que tuvo, estaba enojada por haber confiado en él y caer en su maldita trampa, por su culpa puso en peligro a la madre de Vanessa, si algo le pasa a ella, Vanessa jamás se lo perdonaría, ni ella misma sería capaz de verse al espejo nuevamente.
- No lo tomes personal Scarlett, el dinero es dinero… y vaya que me hiciste sudar por el- exclamo el profesor
Scarlett apretó los dientes ignorando el dolor por la presión que ejercían aquellos hombres comenzó a moverse con furia tratando de zafarse, en cuanto vio oportunidad de liberarse de aquellas manos se levantó y corrió en dirección al profesor quien solo retrocedió un paso antes de que ella lo golpeara de lleno en la cara tirándolo contra la pared dejándolo inconsciente.
- ¡fascinante!- exclamo asombrado aquel sujeto- con razón te quería sin importar que-
En cuanto vio al profesor en el suelo miro a Silvana y tacleo al hombre que la tenía encañonada, se escuchó un disparo que cayó entre los pies de uno de los sujetos que estaban cerca del que ella creía que era el líder.
- Ella no tiene nada que ver ¡déjenla ir!- exclamo Scarlett colocándose delante de Silvana mientras colocaba su mano tras su espalda, un poco más arriba de su cintura tenía algo que usaba en casos extremos y que tenía por protección, de alguna forma la hacía sentir segura llevarlo siempre consigo, pero aun no era el momento
Aquel sujeto la miro un momento pensativo, mientras alguno de sus subordinados apuntaba a la menor con un arma, ella trago grueso mientras lo miraba esperando respuesta.
- ¿Por qué la defiendes?- pregunto como si no entendiera las acciones de Scarlett- ella no te ha tratado bien ¿verdad?- Scarlett abrió enormemente sus ojos- ella fue la causante de que tus padres se separaran, no recuerdas esos momentos en la calle…o esas malas caras- Scarlett tembló al escuchar aquello ¿hasta donde sabia el de su vida?- constantemente decías que detestabas estar en casa porque esa mujer no dejaba de mirarte feo y tratándote como si no existieras. Debió ser duro ¿no? Comprendería que trataras de salvar tu vida, que la dejaras ahí y trataras de escapar, pero no comprendo que trates de protegerla-
- “Vanessa se pondría triste si algo te pasara”- susurro, la única que pudo escucharlo fue Silvana quien solo la miro con los ojos llorosos- yo no soy como tú que solo ve por su propio bienestar- exclamo la menor alzando su voz para que el la escuchara.
Respiro profundamente antes de abalanzarse sobre uno de los sujetos, golpeándolo en la pierna arrebatándole el arma que poseía para golpearlo en la cabeza, les apunto a todos pero no podía jalar el gatillo, le perturbó lo pesada que era, no era broma si disparaba iba a matar a alguien, tembló de solo pensarlo, ella no era una asesina y si en algún momento se vería en la necesidad de matar a alguien definitivamente solo había un hombre en mente, pero ante el primer disparo de advertencia no hubo respuestas, de hecho el arma no percuto ningún disparo, parecía trabada ¡maldición! Tenía seguro y no sabía cómo quitarlo, pero si fuese necesario los golpearía con esa arma hasta que ninguno se moviera. Aquel sujeto chasqueo sus dedos y todos fueron contra la menor quien a duras penas pudo defenderse, cuando uno le apunto de inmediato fue interceptado por el líder.
- Ella es valiosa, se nos ordenó traerla viva y en buenas condiciones-
Aquel sujeto observo con diversión como el objetivo luchaba con todas sus fuerzas contra sus subordinados, su trabajo era simple era observar y llevar a sujeto al punto en que se les ordeno. Antiguamente había tenido la oportunidad de ver a un miembro de la familia de la chica y aunque le faltaba más gracia, la chica no se quedaba atrás se le notaba el talento innato que poseía.
Cuando la menor se acercó a él con la intención de golpearlo, alguien la golpeo por el costado tirándola al suelo con fuerza.
- ¿Por qué demoras tanto? Se te pidió puntualidad- dicho esto aquel sujeto dio una rápida mirada alrededor y vio a todo el equipo que se supone que estaba encargado de contener al objetivo en el suelo inconsciente.
Cuando Scarlett se recuperó del golpe observo que había otro sujeto más, él era diferente, su presencia era totalmente distinta al resto y no solo eso el poseía un tamaño descomunal como si no fuera normal, se veía joven como si no superara los 25 años
- Así que es ella- exclamo aquel sujeto con desprecio- acabemos con esto rápido no quiero retrasarme porque te pusiste a jugar con una mocosa-
- ¿jugar?- Scarlett pregunto furiosa mientras se levantaba del suelo
- Solo media sus habilidades, aunque supongo que tu serias la prueba final- exclamo el líder entusiasmado, el otro sujeto que había llegado ultimo chasqueo la lengua y miro a la menor
- Supongo que no es mala idea que termine el trabajo, así demostrare que soy mejor que tú y tu patética herencia asesina-
Dicho esto hizo crujir sus dedos y ataco a Scarlett quien solo pudo esquivar un potente golpe, eso sujeto no solo era gigante sino también absurdamente fuerte, si la agarraba… si tan solo acertaba un golpe no podría salvar a Silvana.
- ¿acaso no sabes otra cosa que esquivar? Eso es bastante patético y se supone que tu derribaste a todos esos incompetentes- hablo mientras otro de sus ataques era esquivado por muy poco- ¡No puedo creer que ella quiere a un ser tan patético como tú!- dicho esto en un giro que hizo la más baja logro tomarla del tobillo, con fuerza la lazo contra la pared oyéndose un golpe seco, luego la tomo de su ropa y la estrello contra la mesa con fuerzas provocando un quejido por parte de la menor, quien aprovecho el agarre para hacerle una palanca en el brazo pero fue inútil, no pudo evitar el segundo golpe contra la mesa, con el tercero la mesa se rompió, Scarlett apretó los dientes para no gritar de dolor, pero el aire se le escapó de los pulmones cuando el sujeto le piso el estómago con fuerzas.
- Oye… recuerda que hay que llevarla en buenas condiciones-
Aquel hombre la miro bajo su pie tosiendo todavía consiente y la piso de nuevo antes de voltearse para mirar a Silvana quien retrocedió aterrorizada al verle acercarse a ella, pero algo lo detuvo, al parecer Scarlett aún no había tenido suficiente, se había arrastrado y sujetado su tobillo, él se zafo con brusquedad antes de patearle el rostro.
- No… no te dejare que la toque- exclamo Scarlett levantándose lentamente del suelo mientras que de su nariz y labio brotaba sangre
- ¿Crees que te aremos caso solo porque lo dices? Tus palabras no tienen ningún peso para nosotros, eres débil y los débiles solo deben seguir órdenes de los más fuertes- dichos esto agarro a Silvana por el cabello y la levanto del suelo, Scarlett observo horrorizada como la madre de Vanessa lloraba y gritaba.
Sin pensarlo dos veces se abalanzó sobre el golpeándolo en las costillas con todas sus fuerzas, pero el parecía no inmutarse ante los golpes, su primer movimiento fue golpear con el revés de su mano el rostro ya lastimado de la menor para luego lanzar con fuerzas a la mujer mayor al suelo para sujetar de nuevo su cabello y dejar expuesto su cuello.
- ¿Unas últimas palabras? Solo espero que no lo tomes personal, solo sigo ordenes- dicho esto saco un cuchillo y lo puso sobre el cuello sin presionar
- ¡no te atrevas! ¡no puedes quitarle la vida alguien solo porque si! ¡ella tiene familia!- no, no quiero pasar por esto, tan inútil soy que no soy capaz de salvar ni una sola persona ¿todo este entrenamiento fue inútil? Me niego a dejar que termine así. En un impulso saco el cuchillo de su espalda y apunto al sujeto, quien solo sonrió levemente, subestimando a Scarlett.
- Ese cuchillito no te ayudara a salvar a esta mujer-
- No es para atacarte a ti…- dicho esto en un ágil movimiento giro el cuchillo apuntándose a sí misma para luego apuñalarse en el costado derecho de su abdomen, grito de dolor y al retirar el cuchillo broto una gran cantidad de sangre. Ambos sujetos abrieron enorme los ojos y quien tenía a Silvana la soltó de inmediato- muchas veces… dijeron que me querían viva y en buenas condiciones- Scarlett respiraba entrecortadamente y en cada segundo que pasaba la cantidad de sangre aumentaba- lleguemos a un acuerdo… me iré con usted… pero… déjenla viva… no la maten…-
- ¿si no que?- pregunto enojado
- Si no… me apuñalare en el jodido estómago y me desangrare hasta morir… tu puedes saberlo ¿no? Me alejaron de mi madre… mi hermana está muerta… no soy más que un extraño en esta casa… ¿crees que tengo algo por lo que aferrarme a esta miserable vida? ¡NO ME JODAS! Mi vida a cabo antes de comenzar-
- Bien… podemos llegar a un acuerdo, no hay necesidad de llevar las cosas a este extremo- dicho esto el líder quien se había apartado de la pelea, se movió donde Silvana con rapidez y la aparto de su colega- conmigo no le pasara nada, te lo prometo, solo la dejare inconsciente y nos iremos-
Scarlett asintió, miro a Silvana y sonrió antes de soltar el cuchillo y desmayarse. El sujeto contra quien peleo con Scarlett se apresuró a ella, la volteo levanto su sudadera y presiono la herida con sus manos, del estuche que tenía atado a su cinturón saco gazas y vendas y atendió a la menor a juzgar por el sitio creía que no había tocado nada muy serio. Luego ato sus manos y pies y se la llevo en brazos fuera de la casa. Mientras que el ultimo sujeto que estaba en la casa tomo su arma y con el revés golpeo la cabeza de la mujer con fuerzas para dejarla inconsciente en el suelo, miro a su alrededor y vio como algunos de sus hombres se levantaban aun aturdidos les ordeno llevarse a sus camaradas aun inconscientes y dejar a la mujer ahí. Había aprendido mucho de su interacción con la menor y respeto los intentos de salvar a aquella mujer, fue muy inocente de su parte creer que cumpliríamos nuestra palabra una vez que ella estaba inconsciente pero aunque se les ordenó matar a los testigos reconocía el esfuerzo y el valor de Scarlett, solo por ello respetaría su voluntad. Con eso en mente salió de la casa, siguiendo el rastro de sangre hasta la furgoneta frente a él.
Cuando Silvana despertó su cabeza dolía enormemente, cuando la luz dejo de brillar exageradamente se dio cuenta que estaba en el hospital, a su lado estaba Vanessa con los ojos llorosos sosteniendo su mano. Cuando trato de sentarse el mundo giro demasiado rápido.
- No te levantes el doctor dijo que recibiste un golpe muy fuerte en la cabeza- exclamo Vanessa preocupada
- ¡¿Scarlett?! ¡¿Dónde está ella?! ¿está bien?- exclamo con angustia mientras recordaba todo lo ocurrido, Vanessa la miro con tristeza y negó con la cabeza- Ella… ella me protegió, ellos querían… pero ella… ¡dios! Esta lastimada- exclamo
En aquel momento dos oficiales entraron a la habitación acompañados de un doctor luego de un intercambio de palabras y de la autorización del ultimo procedieron a interrogar en privado a Silvana.
Mientras tanto Vanessa espero al lado de la puerta apoyándose en la pared, pasando sus manos por su rostro, tratando de borrar aquellas escenas de mente, se había despedido de Fernanda y caminaba tranquilamente frente a su casa feliz, había sido una buena tarde, cuando vio la puerta abierta de su casa fue extraño, cuando llego al umbral de la puerta su corazón dio un vuelco y el olor a sangre le dieron ganas de vomitar. Un terror le invadió cuando vio muchos de los muebles destruidos y a su madre en el suelo ¿Qué paso? Corrió lo más rápido que pudo al lado de su madre cuando le tomo entre sus brazos, noto que estaba sangrando por lo que de inmediato llamo a la ambulancia. Mientras esperaba trato de llamar a Scarlett la llamada se desviada de inmediato.
- Scarlett…- pronuncio débilmente Silvana
- ¿Qué paso? ¿Qué pasa con Scarlett? ¿Qué ocurrió?- exclamo al borde de las lágrimas, había sangre salpicando las paredes y el suelo, no muy lejos había un gran charco de sangre ¿de quién era esa sangre? ¿Por qué su madre llamaba a Scarlett? ¿fue ella? No, no fue ella, Scarlett jamás aria algo como esto, algo tuvo que haber pasado pero ¿qué?
Cuando la ambulancia llego se llevaron se llevaron rápidamente a su madre y ella la acompaño, atendieron a su madre rápidamente una vez que llegaron y ella tuvo que esperar y dar explicaciones de algo que no sabía, el mismo hospital llamo a la policía mientras llevaban a su madre a un cuarto. Luego de paralizarse unos momentos llamo al padre de Scarlett quien apenas tuviera chance volvería a la cuidad. Cuando al fin pudo pasar a ver a su madre tomo su mano y lloro.