Cuando Scarlett abrió sus ojos lo primero que vio fue un brillo cegador seguido de un olor a estéril que le molestaba, cuando trato de moverse se dio cuenta que estaba amarrada a la cama, un dolor punzante en el costado derecho de su abdomen evito que siguiera moviendo bruscamente tratando de liberarse de lo que sea que estaba sujetándola a la cama.
- Al fin despiertas- al escuchar aquello se dio cuenta que no era la única ahí, por un momento había olvidado lo que había pasado, había sido secuestrada. Cuando miro a la persona que le estaba hablando abrió enormemente los ojos, no pudo evitar jadear al ver a la mujer rubia parada frente a ella, era… peculiar, vestía una bata de laboratorio blanca, eso era lo que más resaltaba en su atuendo, pero eso no era lo importante, sus ojos… jamás en la vida había visto a un mujer que poseyera los ojos de un color cereza. Era aún más extraño que el color de ojos de la menor.
- ¿Dónde…?- pregunto a duras penas sintiendo su boca seca
- Ten- dicho esto le acerco un vaso con agua y una pajita, cuando la menor tomo un sorbo no pudo evitar toser un poco- despacio…- cuando la menor estuvo satisfecha la mujer de ojos rojos aparto el vaso y sonrió- estas en mis instalaciones, precisamente en mi laboratorio-
Scarlett miro a su alrededor todo parecía tan tecnológico y pulcro que la mujer no mentía cuando dijo aquello, pero eso no era lo importante ¿Quién era ella? ¿Fue quien ordeno traerla aquí? O solo era un peón.
- Veo que estas más despierta…- exclamo cruzándose de brazos mientras lamia lentamente sus labios- supongo que debes tener muchas preguntas las cuales contestare ahora mismo- sonrió levemente- mi nombre es Evelyn y desde ahora serás mi espécimen más nuevo-
- ¿Qué?- exclamo Scarlett
- Serás mi ratón de laboratorio más nuevo. Veras… por muchos años he dedicado mi vida a investigar a tu familia y toda esas “habilidades” que ya poseen al nacer. Antiguamente mi familia trabajaba con la tuya pero Alexa me despacho cuando tuve demasiado interés, así que investigue un poco más a fondo fue difícil pero había una rama aparte de la principal y con eso te descubrí- dicho esto se acercó a la menor y con el revés de su mano acaricio su mejilla, cando la menor la miro directamente a los ojos noto un brillo que le hizo erizar la piel.
- Tu… querías asesinar a mi familia para experimentar conmigo- Scarlett la miro con odio, mientras apretaba los puños tratando de liberarse de su amarre.
- Estoy dispuesta a todo para tenerte a ti y tu herencia. Exclamo la mujer delineando con la yema de sus dedos el rostro de la menor bajando por su cuello, delineando su clavícula bajando aún más hasta detenerse en su herida- ¿entiendes? Eres mía desde ahora, tratemos de llevarnos bien-
Scarlett trago grueso, aquella mujer rubia daba algo de miedo y no porque fuera más fuerte que ella, si no fuera por sus heridas y las amarras estaba segura de ganarle, su miedo era de lo que sería capaz de hacerle esa mujer de ahora en adelante, ahora era una posesión de ella y no la dejaría a merced de nadie. Sonaba de alguna forma obsesiva aunque tratara de ocultarlo tratando de dar una buena impresión.
- Me gustaría que descanses y te alimentes bien para que te recuperes rápidamente para iniciar con los experimentos- exclamo mientras se giraba y se marchaba sin decir mas
Los días transcurrieron lentamente en esa habitación blanca, lo único que podía hacer era estar acostada mientras su herida cerraba lentamente, al menos tenía un poco más de movilidad, unos tres días después la mujer le quito aquellos amarres solo si prometía comportarse. Por supuesto que lo aria, estaba herida, no sacaba nada molestar a aquella mujer si ni ir al baño sola era capaz, sin decir que no tenía la más mínima idea de cómo salir de ahí. Sin decir que desde el día dos aquella mujer venia acompañada de su “asistente” o su ratón de laboratorio n°1, cuando lo vio lo único que quería era golpearlo.
- ¡TU!- grito Scarlett mirándolo enfurecida
- Veo que se conocen- exclamo Evelyn tocando el brazo de aquel sujeto
- Por supuesto, él quería matar a Silvana y me uso para romper la mesa-
- Dante…- exclamo Evelyn con cierto enojo- ¿la razón por la que mi espécimen esta tan lastimado es por ti?-
- N-no…- exclamo retrocediendo- ella se resistió en primer lugar y logro vencer a todos esos incompetentes, si no hubiera sido por mí, ella no estaría aquí, hubiera logrado escapar- se justificó, la menor no pudo evitar sorprenderse de verlo tan intimidado por una mujer que no le ganaba en altura ni en contextura- sin decir que esta tipeja se apuñalo así misma- la mujer levanto una mano para que el guardara silencio
- Ya veo… requiere mucho valor apuñalarse- dicho esto aquella mujer se mordió el labio mirando a Scarlett- pero tengo que admitir la culpa, mi asistente actuó bajo mis órdenes desde un principio, te quería a ti y no quiero que nadie se interponga en mi camino por eso le dije que se deshicieran de todos en la casa pero, tu padre estaba de viaje y solo tu madrastra estaba presente, sé que la usaron para atraerte, aunque pensándolo bien… no creo que sea necesario matarlos… aunque la policía hiciera bien su trabajo por una vez jamás encontrarían este lugar- dicho esto sonrió y junto sus palmas- así que olvidemos todo el asunto del secuestro y espero que ustedes dos se lleven bien-
Tanto como Dante como como Scarlett se miraron con odio y asombro al escuchar las palabras de la investigadora, por alguna razón ese sujeto la miraba con resentimiento a la menor y la Scarlett no iba a olvidar tan fácilmente lo que le hizo a Silvana y la paliza que le dio.
- Dante pídele disculpas a Scarlett y olviden el resentimiento-
Dante guardo silencio unos minutos pero la mirada desaprobatoria de Evelyn lo hizo temblar, camino donde estaba la menor y le ofreció una disculpa rápida cargada de odio.
Desde ese día Evelyn se encargó de revisar todos los días la herida Scarlett hasta que casi se cerró por completo. Durante su tiempo de recuperación no se le permitió salir de aquella habitación, aunque al principio mayormente dormía y comía. Pronto se aburrió, aunque trato de ejercitarse no pudo hacerlo hasta que su herida dejo de doler casi por completo. No se había dado cuenta de cuan incapacitada se había dejado luego de apuñalarse y cuanto usaba esos músculos, fue algo estúpido pero fue lo único que se le ocurrió en ese momento de desesperación.
- Solo espero que estén bien- susurro mientras caminaba alrededor de la habitación, realmente no había mucho que ver, la ventana que tenía aquel sitio resultó ser falsa así que presto atención a casa detalle buscando alguna posible ruta de escape o alguna debilidad
En aquel momento Evelyn entro con lo necesario para revisar y limpiar su herida, Scarlett al verla simplemente se sentó en la cama sin intentar nada arriesgado aun. La mujer sonrió al verla tan obediente. El procedimiento fue rápido su herida había sanado casi al completo. Le incomodaba ver como aquella mujer la devoraba con la mirada, podía ver el anhelo en sus ojos y desde hace poco aquella mujer acercaba su mano y con el revés de su mano acariciaba su mejilla con dulzura.
- Veo que estas mejor por lo que desde mañana comenzaras con las pruebas- dicho esto retiro su mano del rostro de la menor y se marcho
Tal y como ella dijo al día siguiente fue llevada fuera de su habitación por el “asistente” de Evelyn, quien por alguna razón parcia aún más molesto con ella, definitivamente no entendía a ese sujeto, no lo había visto en varios días pero parecía que le hubiera dado motivos para odiarla aún más. Fue llevada por unos pasillos confusos hasta un laboratorio donde aquella mujer extrajo varias muestras de sangre y otro tipo de muestras, la escaneo completamente, sin decir que los días siguientes las pruebas físicas a las cuales la sometieron fueron extremas, había momentos en la que perdía la conciencia o quedaba tan agotada y adolorida que no podía moverse. Producto de aquello Scarlett perdió el sentido de los días, no estaba segura cuanto tiempo había pasado con exactitud o si era de día o de noche, todo se reducía a rutina.
Luego de unos análisis Scarlett caminaba con los brazos bastantes adoloridos, fue escoltada por el asistente de Evelyn, pero una vez que estuvieron lo suficientemente lejos la tomo por los hombros y la estrello fuertemente contra la pared blanca del pasillo.
- No trates de pasar el límite con ella…- advirtió Dante mirándola enojado, la menor podía sentir como los celos le quemaban vivo, ahora comprendía porque el odio
- ¿Qué? No… te equivocas nunca…- un fuerte golpe en el estómago la dejo tosiendo de rodillas
- Tampoco pronuncies algo negativo contra ella o estas muerta ¿escuchaste?- dicho esto la agarro de aquel “pijama de hospital” que traía puesto y la llevo a su habitación
Scarlett llevo sus manos a su estómago adolorido, frunciendo el ceño ¿Qué carajos acababa de pasar? Ese tipo estaba enamorado de Evelyn y no quería que ella se metiera en su relación o lo lamentaría pero que no tenga interés en esa mujer también era ofensivo para el… ¡¿Qué carajos quería que hiciera entonces?! Esa mujer tiene un claro interés en ella había que ser estúpido para no darse cuenta, los toques, la forma en que la devoraba con la mirada esa forma de hablarle y de meterse en su espacio personal ¿Cómo frenaba ese interés? Cualquier cosa que hiciera Dante reaccionaria mal. Aunque podría aprovechar aquellas “libertades” que poco a poco aquella mujer le daba con cada experimento realizado con éxito.
Pronto tuvo permiso para recorrer las instalaciones cuando había más personas merodeando alrededor que se resumían a varios guardias de seguridad y algunos científicos de confianza totalmente leales a Evelyn. Sin decir que vio otra parte de aquellas instalaciones, se dio cuenta que de verdad era privilegiada, además de ella había otras personas con la que experimentaban, ellos vivían en condiciones precarias, mientras experimentaban sin piedad con sus cuerpos hasta arrebatarles la vida, Scarlett sintió un nudo en la garganta y un malestar en el estómago.
Evelyn lo había dicho una vez en que Dante se había pasado con el castigo luego de negarse a realizarse unos análisis, la habían llevado a una sala donde la amarraron de pies y manos para darle descargas eléctricas, no pudo evitar gritar al recibir las fuertes descargar eléctricas. Fue en ese momento donde Evelyn intervino parando el castigo, prácticamente abalanzándose sobre la camilla. Cuando Scarlett reacciono, pudo ver a aquella mujer con el rostro cargado de preocupación.
- Pensé…- exclamo aquella mujer sujetando la mano la de menor- creí que no la ibas a contar- dicho esto respiro profundamente- tu eres especial… eres valiosa y prefiero detener mi investigación a matarte-
A pesar de lo que vio en aquel lugar era horrible realmente se sintió bien que ella dijera aquello y con eso en mente quedo inconsciente. Cuando despertó su cuerpo se sentía entumecido y por alguna razón sintió una leve confusión que se esfumo con los segundos. Con energía renovada salió de aquella habitación y camino por los pasillos, vio a los mismos guardias fuertemente armados en los mismos lugares, cuando vio a Evelyn y a Dante salir de la oficina acompañada de alguien uniformado, aquella mujer estrecho la mano de aquel hombre y dejo que Dante lo escoltara.
- Te ves mejor- exclamo Evelyn sonriendo mientras se acercaba a ella y colocaba su mano en la mejilla de Scarlett, quien al ver que Dante le daba una mirada furiosa, sonrió a aquella mujer y quito con delicadeza la mano.
Evelyn se sorprendió ante ese pequeño gesto pero no lo demostró, de inmediato vio como la menor dirigía su mirada a su asistente, no había que deducir demasiado para darse cuenta de lo que pasaba. Scarlett apretó sus puños y luego de vacilar un momento decidió preguntar algo importante.
- ¿Qué es lo que pretendes investigar de mi cuerpo?- al escuchar aquella pregunta la mujer sonrió de lado, tomo en sus manos el rostro de la menor y comenzó a explicar, no quería perderse por ningún segundo la reacción de la menor. Aprecio como de una sorpresa total paso a un terror, que la llevo a separar bruscamente las manos de la investigadora y a correr.
Los siguientes días fueron bastantes agotadores para todos, debido a que Scarlett se resistió desde el primer momento a los experimentos, con lo que sabía ahora no dejaría que esa mujer la usara para desarrollar esa habilidad maldita que tenía, lucharía con todo lo que tenía.
Fue llevaba prácticamente a la fuerza, golpeo a algunos doctores presentes y se resistió a todo el procedimiento, al final Evelyn opto por el castigo y con pesar lo dejo en manos de Dante. Al final del día Scarlett estaba sobre una camilla con espasmos involuntarios en sus extremidades. Los siguientes días fueron algo confusos para la menor, no recordaba del todo lo ocurrido pero su cuerpo tenia moretones en sus muñecas y tobillos producto del forcejeo, la confusión se debía a las descargas eléctricas constantes que recibió o eso creía ella.
En aquel momento entro Evelyn con una bandeja con comida y un pequeño botiquín de primeros auxilios.
- No hay nada que curar… solo son moretones- exclamo Scarlett apartándose de aquella mujer
- No lo creo… te golpeaste contra una máquina que rompiste… sabes eso era bastante costoso- exclamo preparando algunas cosas, ella tenía una sonrisa divertida en el rostro al ver aquello Scarlett bufo molesta.
- Creo que eres más que capaz de reemplazarla, aunque con todo lo que me has extraído y torturado supongo que ya lo pague-
- Bueno… tienes razón cariño, también fue muy educativo verte resistir con tanta fuerza me ayudo a descubrir algunas cosas de ti que me ayudaran a crear una droga que ayude a llevarte a ese modo y no solo a ti, si no a otros-
- Sabes que yo no controlo eso a voluntad- exclamo molesta Scarlett, pero se molestó aún más al ver que aquella mujer ignoro su comentario y comenzó a hablar sola
- Tu cuerpo tiene la capacidad de anular el dolor a voluntad y usar tu fuerza muscular al máximo por periodos de tiempo… quiero crear una droga que tenga el mismo efecto y que no sea dañino para ti o quien lo use, veras hay drogas que he usado en ti que no tienen efecto pero si los uso en mis otros ratones ellos convulsionan y gritan de dolor… también descubrí lo rápido que tu cuerpo se adapta al dolor, vas creciendo más rápido de lo habitual- dicho esto se llevó su mano a su barbilla- ¿serán factores externos?
- No te ayudare con eso… -
- Cariño… no creo que tengas opción- dicho esto le hizo una señal para que se sentara- recuerda que eres mía para mandar… siéntate y deja que te revise-
Scarlett se mordió el labio inferior al escuchar lo último que dijo esa mujer, podía sentir esa mirada sobre ella, camino lentamente y se sentó, dejo que ella le quitara la parte de arriba de su “pijama de hospital” como usualmente le decía, sintió un picor en su espalda pero eso no era nada con la vergüenza que sentía de que ella la mirara sin pudor alguno, podía sentir como ella tocaba sus cicatrices como si fuera algo interesante, como si le contara algo, pero para Scarlett solo le recordaba cosas que definitivamente le gustaría enterrar.
- ¿Terminaste? Me gustaría descansar…- Scarlett no pudo esconder un quejido cuando los brazos de aquella mujer la rodearon apretándola fuertemente, lo siguiente que sintió fue un beso sobre su hombro- ¿Qué?-
Sintió un escalofrió recorrer su espalda y un miedo abrumador le invadió ¡NO! Definitivamente no dejaría que esa mujer le toque de esa forma, no quería, no… sentía que en cualquier momento iba a vomitar. Se separó bruscamente de ella, quien la miro entre molesta y sorprendida.
- Creí que tú y Dante tenían algo- exclamo mientras se tapaba sus pechos con un brazo y de hecho él le había dado a entender aquello luego de golpearla debido a los celos en varias ocasiones, sin decir que muchas veces los vio de manera muy unidos. Evelyn rio un poco al escuchar aquello, luego se lamio sus labios mientras sostenía la parte de arriba de la vestimenta de la menor.
- ¿Qué te hace pensar eso? Él es un perro para mí, uno muy fiel e inteligente-
Scarlett quedo sin palabras al escuchar aquello, pensó que diría que ya no tenía interés o que si tenía algo con ese sujeto pero al parecer solo era una mascota para ella, de cierta forma le daba pena Dante aunque haya sido un total hijo de perra con ella desde el principio.
- Ya que todo está dicho… ¿te gustaría continuar? O prefieres a esa falsa hermana tuya a quien a veces llamas en tus sueños- al escuchar aquello Scarlett se le olvido respirar ¿Cómo sabia de…? Hasta donde llegaría el nivel de acoso de esa mujer. Al ver que Scarlett no decía nada Evelyn suspiro antes de continuar- Vanessa…Vanessa… la llamas entre sueños- exclamo la mujer bastante seria- ese no es el nombre de la chica que vivía contigo-
- yo no…- exclamo sorprendida- ella ni siquiera me agrada- se excuso
- ¿enserio? Dejabas que cure tus heridas, la dejabas abrazarte, tocarte, la dejabas que te viera llorando- había un toque de celos en la voz de la investigadora- ¿Qué debería hacer con esa chica? ¿debería deshacerme de ella? Bastaría con enviar a mi fiel perro-
- Ella no me gusta…- exclamo Scarlett mirando el suelo- ella es una hermana para mí, me apoyo en mis momentos difíciles… no creo que esa sea una buena idea para llegar a mi…- Scarlett con esfuerzo esbozo una sonrisa- yo… no es que te rechace por ella… es complicado tu… investigaste sobre mi ¿cierto? Hay algunas cosas de mi pasado que… son complicadas y tengo miedo… solo… dame tiempo… tu eres hermosa y yo…- exclamo Scarlett desesperada, ni siquiera estaba segura de lo que balbuceaba, solo se concentró en alejar la atención de Vanessa y de un plan homicida de esa loca investigadora- soy joven e inexperta-
- Cariño… soy tan poco empática ¿me perdonas?- Scarlett asintió más aliviada al escuchar aquella palabras, incluso permitió que ella se acercara nuevamente y la estrechara contra sus brazos.
La menor sintió que podía respirar de nuevo solo por un momento hasta que sintió la puerta abrirse y con eso escucho la voz de Dante, no estaba segura de lo que dijo solo que al verlas de ese modo sus celos se dispararon y no podía culparlo ella estaba semidesnuda en los brazos de su querida Evelyn.
- Crees que con tu cuerpo de adolecente vas a llamar su atención- exclamo Dante mirándola de forma despectiva, al escuchar aquello Evelyn se colocó delante de Scarlett enfrentando a su asistente, basto que ella se cruzara de brazos para que el nivel de enojo del hombre bajara drásticamente.
- ¿necesitas algo?- exclamo la mujer
- N-no pero…- exclamo desviando la mirada ¿Cómo explicaba que paso por la sala de seguridad? Y que a penas la vio entrar en el cuarto de la chica Bustamante se quedó ahí parado mirando por la cámara de seguridad, mientras el guardia a cargo se burló de él. Que no fue capaz de tolerarlo y sin pensar un momento fue hasta ahí.
- ¿qué?- exigió Evelyn mirando con frialdad, pero luego de unos minutos sin obtener respuesta decidió hablar- recuerda tu lugar- dicho esto camino fuera de la habitación y el la siguió.
Cuando estuvieron lo suficientemente lejos y en un lugar apartado de los ojos curiosos, aquella mujer rubia se mordió el labio inferior molesta, se giró y le dio una cachetada a su asistente.
- ¿Cuál es tu lugar?- pregunto Evelyn
- Yo soy…- Dante sintió una punzada de dolor cuando Evelyn le pregunto aquello, quería que le dijera su posición, quería que él lo dijera a modo de recordatorio- tu mascota…- respondió, mientras aquella mujer dueña de su corazón lo agarraba por la barbilla
- ¡cómo te atreves a cuestionar mis acciones y a detenerme! Desde que ella llego has estado haciendo cosas innecesarias ¿Cómo te atreves a comportarte como “mi pareja”?- dicho esto agarro el cabello de Dante y lo jalo hasta que lo obligo a arrodillarse ante ella- me has hecho presenciar esta mierda acaso ¿te pedí que hicieras esto?- Dante miro al suelo avergonzado, ellos tenían un acuerdo, pero jamás formalizaron nada ¿acaso había algo que formalizar? Ella jamás lo vería a su altura, para Evelyn él era solo un perro, un asistente muy capaz y fiel- no cruces la línea- advirtió- recuerda que eres mi mascota, mi perro, mi esclavo-
- Ella también…- trato de decir
- Lo que haga con ella o como me relacione con ella es mi problema, no te metas- advirtió, dicho esto se dio la vuelta y se marchó dejando a Dante ahí en el suelo apretando los puños.
Evelyn había dejado que Dante actuara a libertad porque no interfería con el trabajo y no había visto que lastimara a su nuevo espécimen, pero entre más interés tenia por la chica Bustamante, más molesto era el comportamiento de su asistente, en el tiempo que llevaban juntos jamás se había comportado así, jamás había cruzado la línea que ella había trazado, después de todo su relación era Ama-esclavo, aunque al principio no era más que un ratón con el cual ella experimentaba, uno muy fuerte, hasta el momento él había sobrevivido a todo y había mostrado interés por ayudarla por lo que era conveniente para ella aprovechar eso. Pronto ella tendría que salir por una semana para atender unos “asuntos” así que tenía que calmar el temperamento de Dante ¿tendría que ajustar la correa de su mascota nuevamente? Tendría que marcar límites nuevamente ahora que en la ecuación estaba Scarlett. Una sonrisa surco sus labios. Realmente estaba interesada en ella, esa chica era especial como todos los de su casta, no la dejaría ir tan fácilmente, esta vez no se resignaría tan fácilmente. Todavía sentía dolor cuando Alexa la aparto, cuando la desechó como basura, después de haber dado todo por ella, la cabecilla simplemente dijo que su curiosidad era demasiado peligrosa y la aparto, la amenazo con destruir todo si se acercaba nuevamente a su familia.
Ese mismo día en la noche Evelyn estaba en su habitación recostada leyendo algunos análisis de Scarlett, cuando Dante entro mirando al suelo, cerrando tras de sí la puerta, aquella mujer suspiro cansada.
- Hoy no… no quiero verte más por hoy- exclamo mirándolo solo un momento de reojo
Pero sintió un leve golpe, cuando volteo a verlo escucho un suave clic, inevitablemente no pudo evitar sonreír al ver aquella escena, Dante estaba arrodillado, con las manos en el suelo mirándola suplicante, con un collar de perro color negro en el cuello.
- Perdóname- suplico
Evelyn dejo sobre su mesita de noche los papeles que estaba leyendo, observo como su mascota enganchaba una correa a su collar y con sus manos lo ofreció, la mujer se levantó y antes de tomar la correa, estiro su pie.
- Lámelo- exclamo y con ello sin vacilar Dante lo hizo- buen chico-
- No lo volveré hacer…-
- ¿Dije que hablaras? Si quieres decir algo ladra-
Con eso Evelyn comenzó a prepararse, se colocó algunos condones de dedos y saco un plug anal con forma de cola de zorro y un lubricante, era momento de un castigo.
Mientras castigaba a Dante y le recordaba su lugar, recordó por un breve momento como inicio este acuerdo, realmente fue divertido romper su resistencia, ella conocía lo que el chico sentía por ella pero, no le interesaba de esa forma, era su juguete nada más. Aquella mujer sonrió ahogando un leve gemido mientras se imaginó a la menor en el suelo golpeada, resistiéndose con todas sus fuerzas a ella, enojada pero con sus mejillas sonrojadas, con ese brillo en sus ojos desvaneciéndose poco a poco. Dante observo la mirada de Evelyn y de inmediato supo que ella no estaba concentrada en el presente, estaba imaginando un escenario con infinitas posibilidades junto a esa niña, no pudo evitar molestarse por aquello, ella era tan especial para Evelyn, con suerte llevaba un mes en ese lugar, esa maldita mocosa ni siquiera se había desarrollado por completo, era baja y era más débil que él, no tenía nada especial, si no fuera por su linaje ni siquiera tendría algo de valor… entonces ¿Por qué seguía metiéndose en la mente de Evelyn? ella no estaba interesada en Evelyn se lo dejo claro y después de la amenaza ella aumento más la distancia, incluso comenzó a resistirse pero a pesar de todo Evelyn no parecía molestarse por todo eso, lo que él deseaba, lo que él quería, esa mocosa lo tenía.
Evelyn se marchó de las instalaciones creyendo que todo estaba solucionado, pero no podría estar más equivocada porque con su salida marco el inicio de la semana del terror para Scarlett a manos de Dante, no solo llevo todo a un nivel extremo, el cual hizo colapsar muchas veces a la menor. Él se aseguraba de no dejar marcas muy notorias en el cuerpo de la menor para que ella no lo notara. Scarlett aguanto lo mejor que pudo pero la gota que derramo el vaso, fue cuando Dante la levanto en la noche, le amarro las manos por detrás con un sujetador de plástico y la llevo hasta una habitación que hasta el momento era desconocida para ella, la dejo ahí unos momentos hasta que llegaron alrededor de 30 personas más, todos eran sujetos de experimentación, algunos no se veían en buenas condiciones otros estaban bastante desarrollados.
- ¡Caballeros!- Dante hablo desde un lugar más alto- les tengo una propuesta que les será difícil de negar, la chica que ven ahí amarrada de manos, ella será su objetivo, aquel que logre derribarla ganara privilegios y le concederé un deseo- dicho aquello sonrió hasta que sus mejillas le dolieron
- ¿Dante se te está permitido hacer esto?- escucho tras del, cuando el volteo vio a uno de los investigadores acercarse hasta pararse a su lado. Allí arriba varios se habían reunido viendo cómo los sujetos de prueba la rodeaban, incluso algunos hicieron apuestas.
Scarlett apretó los dientes mientras observaba como todos la rodeaban, podían ver la desesperación en sus ojos, cuando el primero se atrevió a atacarla ella lo esquivo, junto a ello una ola de manos y pies la atacaron, lo único que pudo hacer fue esquivar y escapar como pudo, no podía contraatacar debido al imbécil de Dante le había amarrado las manos, se había centrado tanto en escapar que no pudo esquivar un fuerte golpe en el abdomen que le quito el aire, pero no la lanzo al suelo. Scarlett temía por su vida, su desesperación era tan profunda que si la derribaban podían matarla y ella no podía morir aun. Estaba cansada de correr, debía cambiar de táctica, si no podía huir de la habitación entonces noquearía a todos, a los 30. Pero no quería lastimarlos, había visto a varios como sufrían constantemente en ese maldito lugar, pero era ellos o ella. Como pudo comenzó a noquear a todos con sus piernas aunque no pudo salir invicta, recibió muchos golpes antes de bajar a la mayoría, gotas de sudor corrían por su rostro, su respiración era agitada y sus piernas temblaban, no estaba segura como pero sus piernas aun la sostenían, su cuerpo dolía y su bata estaba manchada con gotas de sangre, el suelo donde estaba parada estaba levemente manchado con su propia sangre. Cuando uno de los últimos corrió en su dirección, ella corrió en su dirección y con un impulso de la pared que tenía a su lado salto hasta darle un gran cabezazo a su agresor quien cayó inconsciente de inmediato, mientras que Scarlett cayó a su lado algo aturdida, cuando se levantó vio sobre ella al último chico mientras sostenía en sus manos un trozo de baldosa, si no fuera porque salto a un lado ese trozo se hubiera incrustado en su estómago, pero lo único que logro el sujeto fue cortarle el brazo, ahogando un quejido de dolor se levantó y ataco al chico hasta dejarlo inconsciente. Estaba agotada y de su brazo brotaba una gran cantidad de sangre, su visión se nublo y casi cae al suelo, pero no dejo que eso sucediera, con las últimas fuerzas que le quedaban miro a Dante que estaba en lo alto y le sonrió.
- Creo que a ella no le va a gustar la marca que acabas de dejar en su espécimen- exclamo el investigador mirando a la menor una última vez antes de bajar hasta donde estaba ella, pudo verla tambaleando- esa fue una buena victoria, vamos a curarte- exclamo tocando su hombro.
- Tsk- exclamo Dante furioso
Aquel investigador la llevo a su sección para curarle las heridas, la más profunda que tenía era en el brazo que requirió puntos, tenía algunos moretones, rasguños superficiales y un enorme chichón en la cabeza producto del cabezazo que dio.
- Gracias…- exclamo Scarlett
- No hay nada que agradecer- exclamo sonriendo- solo hago mi trabajo-
- Tu eres… uno de los investigadores principales de esa mujer- pudo reconocerlo al fin
- Si, ese soy yo- rio un poco, pero de un momento a otro miro a la menor con mucha curiosidad e ilusión- a decir verdad con esto Dante me dio la posibilidad de poder habla contigo- Scarlett lo miro raro- ya sé que debe sonar raro, siendo que trabajamos estrechamente pero… Evelyn mantiene a todos a raya, es bastante celosa contigo, de todos sus “espécimen” tú eres su favorito y no le gusta compartir, no deja que nadie más te toque aparte de ella- Scarlett frunció el ceño al ser llamada espécimen, se sentía menos humana con aquello, cuando miro aquel sujeto de unos cuarenta años, se dio cuenta que él era tan peculiar como Evelyn pero noto que él era más observador que participe y eso fue lo que llamo la atención de la menor- entiendo mucho mejor ahora porque te quiere para ella sola- exclamo sonriendo- eres única e inigualable y eso lo acabas de demostrar en esa “battle royal” que Dante hizo-
- No soy tan especial… no soy tan inteligente, ni tampoco la más atlética, sangro al igual que todos, si me lastiman profundamente podría morir como cualquiera- exclamo Scarlett mirando al suelo
- Pero tienes algo que no todos tienen, tu genética es única, tus antepasados hicieron lo necesario para criar niños con las mejores cualidades… es algo maravilloso pero a la vez trágico- exclamo emocionado
Por unos días Dante le dejo tranquila, cuando Evelyn volvió lo primero que hizo fue ver a la menor, se calmó por un momento al verla bien pero en cuento la reviso noto moretones en su cuerpo y lo peor de todo puntos en su brazo.
- ¿Quién te lastimo?- la voz de Evelyn le dio escalofríos, decir que estaba furiosa era quedarse corto- ¿Quién fue?
- Fue un accidente- exclamo Scarlett asustada
- Tus heridas no son producto de un accidente… así que te preguntare una vez más ¿Quién fue?- Scarlett se mordió el labio inferior, si decía que fueron los otros… ella realmente podía matarlos sin dudar, si decía que fue Dante no estaba segura de lo que ella le aria, no quería cargar con la muerte de ese bastardo y en caso de dejarlo vivo eso solo aumentaría la enemistad entre ellos.
Scarlett guardo silencio y eso fue suficiente para darle una idea de quien fue, aquello no se quedaría así le aria pagar a los responsables lo que le hicieron a su espécimen. Tomo el rostro entre sus manos con delicadeza y la obligo a mirarla.
- Yo me encargo- exclamo- tendrá que saber que tienes un lugar-
- Yo no…- no alcanzo a terminar cuando los labios de la investigadora se unieron a los suyos, al principio la menor se sorprendió por el repentino acto pero apenas se recuperó la aparto.
- Porque sigues apartándome…- pregunto cuando era nuevamente apartada, se notaba a kilómetros la incomodidad que sentía Scarlett- ¿no puedes ver que me necesitas? Sería mejor para ti si me aceptas y te resignas a poder escapar.
Los labios de la investigadora volvieron a unirse brevemente a los de Scarlett, mientras que sus manos recorrían el cuerpo de la más baja, pero esta vez Evelyn se apartó y se marchó, tenía algo que solucionar el problema de celos de su asistente.
Scarlett se dispuso a dormir incomoda, pronto nada detendría a esa investigadora de hacerla suya, tenía que salir rápido de ahí. Se despertó debido a que su la puerta de su habitación se desbloqueó y se abrió, ni siquiera dudo si era correcto o no salir en la noche, podía ser una oportunidad única como también una trampa. Camino por los pasillos oscuros esquivando algunas oficinas que aún tenían luz, no estaba seguro donde estaba jamás había estado en ese sector, camino sin emitir sonido alguno antes de escuchar ¿gritos? No aquello no eran gritos eran… quejidos o más bien gemidos.
La menor abrió los ojos desmesuradamente y se asomó lentamente a la puerta que más cerca tenia, estaba levemente abierto lo suficiente para que alguien pudiera espiar sin ser notado, cuando se asomó se quedó sin respiración, de verdad hubiera deseado con todas sus fuerzas no ver aquella escena, sintió su bilis subir por su garganta. Aquella mujer tenía totalmente sometido a Dante, estaba con un collar de perro con una cadena desnudo en el suelo mientras era penetrado por Evelyn. La menor tuvo que llevarse la mano a su boca para no vomitar. Escuchaba la voz de Dante llamando a Evelyn “ama” la forma en que le suplicaba le revolvía aún más el estómago.
Evelyn sonrió e hizo contacto visual con la menor, se llevó su índice a sus labios en un gesto de guardar silencio, para luego mirar a Dante. Scarlett retrocedió un paso cuando los ojos de Dante se abrieron de forma desmesurada cuando cruzaron miradas, la menor se dio media vuelta y corrió a su habitación.
Jamás debió salir de su cuarto, era lógico suponer que eso fue una maldita trampa orquestada por esa investigadora loca pero ¿porque? ¿Por qué querría mostrarle eso? De solo recordarlo le daban arcadas. Acaso… ¿eso era lo que le esperaba a ella? ¡NO! Jamás se dejaría tocar por esa mujer, no caería en su juego. Permaneció alerta toda la noche pensando que esa mujer o Dante vendrían su cuarto, pero cuando la mañana llego ninguno se hizo presente, algo extraño pero a su vez relajante, sentía que podía respirar con calma.
Los siguientes tres días uno de los investigadores de confianza fue quien la superviso en los experimentos que se realizaron, aquel sujeto parecía tratarla con cuidado al contrario de Dante, parecía preocupado por su bienestar, al parecer Evelyn se había encerrado en su laboratorio privado luego de verla para investigar algo y le había encargado a ese investigador que hiciera las pruebas de rutina pero con el máximo cuidado. Respecto a Dante no supo mucho por lo que tuvo miedo de que esa mujer se deshiciera de él, pero escucho hablar a algunos guardias diciendo que Dante había sido castigado severamente y que se encontraba recluido en una celda, no pudo averiguar dónde pero al parecer el castigo fue bastante brutal.
Cuando al fin apareció Evelyn se veía bastante cansada y usaba lentes de sol, al parecer la luz artificial del lugar le incomodaba como si se tratase del sol, lo poco que vio cuando se acomodaba sus lentes era ojeras. La menor se preguntó qué era lo que estuvo haciendo todo ese tiempo para llegar a ese extremo, si no recordaba Evelyn le había contado como anécdota que sus ojos eran bastantes sensibles a los rayos del sol, como si de un vampiro se tratase o eso pensó la menor, Evelyn al escucharlo se rio bastante.
Cuando llego a la sala de pruebas con dos personas más Scarlett estaba atada con correas alrededor de su cuerpo, Evelyn la miro unos momentos antes de continuar una conversación con sus colegas, cuando finalmente se detuvo vio como preparaba una jeringa con algo transparente.
- Prueba uno del suero 201- exclamo al insertar la aguja en el brazo de la Scarlett- “que funcione esta vez”- susurro Evelyn apartándose una vez que todo el líquido entro en el cuerpo de la menor.
Pareciera que todos aguantaron la respiración mientras la miraban atentamente, los minutos pasaron pero cuando se estaban dando por vencido, Scarlett se contorsiono bajo las ataduras, lanzo un grito de dolor antes de comenzar a convulsionar violentamente, comenzó a echar espuma por la boca, mientras que el dolor se acrecentaba. Luego de unos minutos de agonía Scarlett dejo de moverse y comenzó a vomitar sangre, Evelyn asustado se acercó y desato las ataduras para girar el cuerpo de la menor y evitar que se ahogara con su propia sangre.
- ¡MIERDA!- exclamo Evelyn golpeando la mesa tirando algunos papeles al suelo. El suero no solo no había funcionado, si no que casi mata a Scarlett, si no fuera por la rápida acción de sus colegas ella no hubiera sobrevivido. No lo entendía ¿Qué estaba mal? Según su investigación ese suero debería haber funcionado en Scarlett y no ser letal, lo había probado en otros especímenes y había funcionado algunos segundos antes de incapacitar al portador ¿Qué salió mal en Scarlett? En ella debería haber funcionado bien.
Observo a la menor descansando en la camilla con una máscara de oxígeno, estaba pálida y ojerosa, su respiración era débil pero estaba estable, le administraron fluidos. Con sus dedos rozo la cara de la menor, podía ver vestigios del dolor que sintió y no lo entendía y eso le frustraba, de inmediato debería saber que salió mal, por lo que tomo una muestra de sangre.
Cuando llegaron los análisis que pidió, necesito sentarse un momento mientras observaba a Scarlett dormir profundamente, la palabra “veneno” resonaba en su cabeza. Todo ese tiempo Scarlett tenía veneno en su cuerpo y con el suero definitivamente no hicieron una buena combinación. Solo una persona se le vino a la mente que sería capaz de hacer semejante acción. Se levantó y se acercó a la menor, sonriendo levemente.
- En verdad eres magnifica- susurro- no puedo creer que pudiste adaptarte al veneno- aunque… parte de su logro se debía a su asistente, si le hubiera administrado dosis más grandes sin dudas la habría matado pero en pequeñas dosis y regularmente sin duda desarrollaría inmunidad.
Cuando Scarlett despertó se sentía horrible, su boca sabia a sangre y le dolía horriblemente la cabeza, sentía su cuerpo anestesiado, cuando pudo sentarse se dio cuenta que esta no era la habitación habitual que tenía, era totalmente distinta, estaba mucho más decorada, habían papeles por todos lados, incluso la suavidad de la cama era distinta. Se levantó con pesadez y camino de una forma poco agraciada hasta la puerta, la abrió y casi se cae de cara al piso.
- Veo que despertaste cariño- a su lado estaba aquella investigadora que rápidamente la tomo del brazo y la llevo dentro del cuarto
- ¿Dónde estoy?- exclamo la menor
- Te traje a mi habitación para que descansaras bien, estuviste varios días inconsciente y mi cama era más apta para tu cuidado- al escuchar aquello Scarlett se puso pálida- tranquila no te hice nada aun- exclamo divertida- ¿tienes hambre?- pregunto
Scarlett se tocó su estómago tenía una sensación extraña en él y no estaba muy segura del porqué, negó con la cabeza, usualmente siempre tenía hambre pero esta vez no, aunque sentía un vacío ¿Qué paso? Por alguna razón no podía recordar lo que paso antes de desmayarse.
- ¿conoces el termino mitridatismo?- pregunto Evelyn sentándose al lado de la menor, quien negó con la cabeza- significa resistencia al veneno- Scarlett la miro extrañada no entendía a que se refería con eso, se encogió de hombros y guardo silencio- al parecer ahora eres resistente al veneno- la menor abrió enormemente los ojos al escuchar aquello, si no se sintiera tan mal hubiera gritado un enorme “que”, eso era ¿posible? Sabía que en una película había visto aquello pero era una fantasía, no era real- deberías agradecerle a Dante por aquello… el investigo aquello, incluso uso su propio cuerpo como prueba-
Aquella investigadora le sonrió y presiono con sus manos el cuerpo de Scarlett para obligarla a acostarse, la observo un momento resistirse pero rápidamente desistió, se le notaba aun débil y de cierta forma eso le pareció sexy, se mordió el labio inferior tratando de expulsar aquellos pensamientos.
- Descansa- dijo acariciando con el revés de su mano la mejilla de Scarlett- te necesito fuerte-
Los siguientes días Evelyn cuido con mucho cariño a Scarlett, evito todo tipo de pruebas para que se recuperara lo máximo posible, la trato como si fuera su pareja incomodando demasiado a la menor quien se tuvo que resignar a ese trato debido a que aún le costaba mover su cuerpo. Dormir era la parte más incómoda para la menor quien tenía que aguantar como aquella mujer se cambiaba frente suyo y se acostara a su lado, aunque siempre trato de evitar el contacto, no podía evitar que se le subieran los colores, podía sentir como el cuerpo de la investigadora se apegaba al suyo. Todo ese contacto le molestaba de sobremanera, revivía recuerdos que quisiera olvidar, la desnudez le causaba incomodidad, le provocaba una extraña sensación, ella odiaba su propio cuerpo debido a todas esas cicatrices que tenía, todo era un maldito viaje a sus peores recuerdos. Cada vez se convencía más de que tenía que huir de ese sitio, pero ¿cómo? Si volvía a su casa… lo más probable es que esa mujer buscaría ahí como su primera opción y no solo eso… no sabía dónde carajos estaba, cuando despertó ya estaba ahí, ni siquiera sabía cuánto tiempo estuvo inconsciente. ¿Qué debería hacer? La única solución que tenía era matarla para que no la persiguiera, pero… la instalación estaba llena de guardias e investigadores, sin decir que había cámaras, no sabía que le esperaría una vez fuera, ciertamente estaba en clara desventaja… sin decir que asesinar era una palabra fuerte, estaba realmente preparada para ello, la única vez que pensó en llegar tan lejos fue con el… pero incluso en ese momento, deseó con todas fuerzas realmente no hacer, dentro de toda su desesperación y odio por primera vez en su vida temió convertirse en el monstruo que todos creían ¿Si le gustaba? ¿Si no podía parar? su vida aparentemente normal acabaría para siempre, su abuelo pasó por mucho para que su descendencia no tomara ese destino.
Se acostó en la cama boca abajo, podía sentir el aroma de Evelyn en la cama, le molestaba porque era un olor agradable, le gustaba, se giró para mirar a la pared y se llevó su antebrazo a su rostro, respiro profundamente su ropa también olía a ella.
- ¿Qué haces aquí mocosa?- aquella pregunta salió como un gruñido, Scarlett de inmediato se sentó en la cama, abriendo los ojos enormemente al ver que se trataba de Dante, hace mucho no lo veía desde bueno… desde que Evelyn se enteró de su pequeño juego. Se veía golpeado y algo demacrado, se hubiera preguntado que le paso de no ser porque literalmente la arrojo fuera de la cama, levantando el colchón y todo, de no ser porque su cuerpo seguía débil hubiera caído mejor que el peso muerto que en ese momento fue. Sin darle tiempo a reaccionar la tomo de su ropa y la alzo, pero aquello no duro mucho ya que casi de inmediato la soltó dejándola caer, mientras él se tambaleaba, parecía agotado.
- ¡MALDITA SEA! Puedes si quiera dejarme responder antes de golpearme- exclamo Scarlett acomodando su ropa, la tela era bastante delgada así que a Dante no le costa nada romperla un poco.
- ¿Por qué estás en la habitación de Evelyn?- Dante se llevó la mano a su rostro y no tuvo más remedio que apoyarse en la pared y sentarse en el suelo.
- Pues… ella me trajo porque casi me muero así que está cuidando de mi-
- ¿lo hicieron? Hueles a ella- exclamo Dante frunciendo el ceño aun con su mano en su rostro
- ¿Qué? ¡No Imbécil! Cuantas veces debo decirte que ella no me gusta, me da miedo- Scarlett se cruzó de brazos- ¿tenemos que pasar por esto siempre?-
- ¡Maldita!- exclamo
- Sé que te gusta mucho y debe ser desagradable ver como alguien obtiene lo que tú quieres…-
- No sabes nada de mí, no hables como si me conocieras o supieras mis circunstancias-
- Bueno es difícil coincidir con alguien, que no es capaz de hablar civilizadamente…- exclamo molesta Scarlett, pero luego de un momento suspiro- oye…aunque no lo quieras admitir tu y yo tenemos algo en común y es Evelyn… ella quiere algo de mí que no puedo darle y lo tomara de mi aunque no quiera… tu no quieres eso ¿verdad?- Scarlett miro a Dante fijamente queriendo ver su expresión a detalle- digo… que yo este con ella… podríamos… tener un acuerdo para evitar eso, sin tener la necesidad de ponernos en riesgo, ambos salimos ganando… a ti te va todo ese rollo ¿no?-
Dante paso de enojado ha sorprendido a medida que escuchaba a Scarlett. Lamentablemente para él, la mocosa tenía razón, él no quería que la relación de Evelyn con Scarlett avanzara porque en ese momento ya no sería de ninguna utilidad para su maestra por lo que sería desechado.
- Odio admitirlo pero tienes razón pequeña bastarda-
Scarlett extendió su mano con duda pero era lo necesario para cerrar el trato, al cabo de unos largos segundos Dante hizo lo mismo, estrecharon sus manos en un apretón fuerte.
- Esto no nos hace amigos- exclamo Dante
- Por supuesto que no- exclamo Scarlett- ni creas que te he perdonado por lo de Silvana- dicho esto comenzó a ordenar el desastre que había dejado Dante y una vez que él se fue se cambió para que Evelyn no se diera cuenta.