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STUCK IN A MOMENT por LIAMSUZUKI

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Misaki lamió un par de dedos hasta dejarlos empapados y comenzó a acariciar su ano, con su mano izquierda cogió su dura erección  para masturbarse y dijo el nombre de quien lo ponía así de caliente

 

—MIYAGI.... AHHHH....

 

Takahashi cerró sus ojos al tiempo que mordía su labio inferior, pasando los dedos en círculos esparciendo la saliva por su entrada y sin dejar de sacudir su miembro para encontrar alivio a las ganas que sentía por ser follado.

 

Miyagi no daba crédito a lo que que sus oídos escucharon y sus ojos veían: Misaki desnudo, pronunciando su nombre  y dando inicio a masturbarse por completo.

Su vista quedó fija en ese ano que él ya había profanado con su longitud y se le erizó por completo la piel.

Esto fue el detonante para que un cosquilleo se presentara en sus testiculos y recorriera su verga hasta dejarla durísima, lista para meterla en ese orificio tan caliente. Miyagi respiro profundo pero ni así pudo contener un leve jadeo por la excitación 

—Ahh.. 

 

Misaki abrió sus ojos al oír al mayor, esas leves caricias que se daba no eran suficientes, así que decidió meter su dedo medio con suavidad y encontrar más placer 

 

—Ahhhh...mmmm....—Soltó otro gemido al invadir su entrada—Sensei.. ahhhh—Su falange viajó de forma lenta hasta que todo estuvo adentro y comenzó a meterlo y sacarlo sin apartar la mirada de los ojos del profesor—... ahhh.. Miyagi...ahh

El docente respiro profundo al ver ese dígito moverse con ímpetu de adentro hacia afuera dando una escena gloriosa para sus ojos. 

—AHHHH...Sensei... ¿Te gusta lo que.. ves?

 

El pelinegro no podía articular su respuesta y no era necesario, Misaki podía apreciar como la erección de Miyagi amenazaba con salir de su pantalón, por lo que le motivó a ponerse más cachondo y sacudió su miembro con fuerza, pronto un segundo dedo estaba adentro y los movía más frenético tratando de encontrar su próstata.

—mmm... ahhhh.. 

 

Miyagi relamió sus labios, era fascinante ver a Misaki complaciéndose y !Dios! como se le antojó que su polla fuera la que llenará ese orificio tan caliente mientras le mordía los pezones. Takahashi lo sabía, sabía que Yō estaba igual de excitado y en cualquier momento podría desamarrarse para ir por él y someterlo, así que no se lo pondría tan fácil; Misaki dió unas ultimas embestidas con sus dedos antes de sacarlos y decidió que haría venir primero a Miyagi.

 

—No.. no te detengas Misaki.. sigue masturbandote para mi..—Pidió el profesor con la voz entrecortada 

 

Misaki lo ignoró, dejó de acariciar su miembro y se colocó de pie para ir a la cama con Sensei. De forma sensual se deslizó hasta las piernas de Miyagi, abrió el cinturón y después el botón de los pantalones; Takahashi sonrió al ver el miembro de Yō muy rígido y con el grueso glande saliendo de la ropa interior 

 

—Mira lo que tenemos aquí...y eso que no te he tocado....

 

Misaki sonrió triunfante y lo despojo del pantalón junto con el bóxer, al instante la longitud de Miyagi quedó recargada en su estómago mostrando el gran tamaño y con una gota escurriendo por el tronco. Al profesor se le antojo tener la boca de Misaki comiendo su erección y levantó un poco su cadera incitando al castaño a meterla en su boquita.

 

—Misaki...ven, quiero que la chupes

 

—Shhhh—le calló con un susurro—Misaki fue a la camisa para terminar de abrirla y ver el perfecto torso de su novio—Dijiste que no querías, así que, no lo haré. Té correrás de otro modo Miyagi Sensei.

 

El castaño abrió las piernas de Miyagi, dio la vuelta acomodándose entre ellas y quedando a la altura de los genitales del docente.

 

—Libera mis manos Misaki—Pidio con voz ronca Miyagi al ver ese culo alzado, moría por tocarlo, por abrir sus glúteos e insertarse muy profundo.

 

—No...—Misaki retomó las embestidas con sus dedos y gimió de nuevo—AHHHHHH

 

Miyagi veía los dedos moverse con tanto desenfreno que no pudo evitar gemir y su miembro arrojó más líquido preseminal.

—Misaki... me harás 

 

El castaño seguía con su tarea, haría venir a Miyagi sin tocarlo, sin penetración, solo con su espectáculo y vaya que lo estaba consiguiendo.

Misaki escuchaba claro los jadeos del mayor por lo que decidió meter otro dedo más gimiendo con gozo.

—Ahhhhh.....Miyagi....

 

El profesor ya no aguantaba, ver esos tres dedos abriendo ese ano terminó por enloquecerlo. Un calambre en sus bolas le anunciaba el inminente orgasmo pero él quería hacerlo adentro de Misaki

 

—Misaki... por favor...ahhh

 

—¡He dicho que no!—Misaki continuó con las embestidas, él también estaba en su límite pero no cedería, no lo haría por mucho que quisiera a Miyagi adentro.

—Ahhh Miyagi... mi amor.. 

 

—¡Misaki no resisto!

 

Miyagi no supo cómo lo logró, pero pudo zafar una de sus muñecas, sacó  la mano de Misaki del interior y agarró su polla dispuesto a meterla en su novio pero no tuvo tiempo porque en segundos sé corrió 

—MISAKI... AHH..

 

Una intensa corriente cimbró su  cuerpo con dos tiras de semen salpicando la entrada del castaño, los espasmos recorrían los genitales  de Miyagi quien no daba razón a eyacular tan rápido como si fuera adolescente. 

 

Misaki mordió su labio al sentir el caliente semen ensuciando su entrada por lo que volteó de inmediato y sonriendo por su victoria.

Miyagi jadeaba, el sudor se notaba por su frente y restos de su corrida yacían en su estómago. El profesor frunció el ceño y liberó su otra mano de la corbata. Con fiereza agarro la nuca de Misaki y comenzó a besarlo muy desesperado, enredando sus lenguas ignorando el dolor de su rostro 

 

Cuanta falta le hacía saborear su boca, sentir su saliva escurriendo de las comisuras, con el calor de sus labios apoderándose de los suyos, eso fue todo lo que necesitó Miyagi para perder la cordura. El profesor terminó el beso y obligó a Misaki a bajar hasta su miembro 

 

—Limpia mi semen con tu lengua, Misaki.

 

—Con todo gusto guapo.

 

Takahashi obedeció lamiendo todo hasta llegar al falo de Miyagi, le encantaba su enorme tamaño,las venas marcadas y sin pensarlo dio un lengüetazo desde la base hasta el inicio del prepucio.

Lo haría ponerse erecto de nuevo y mientras tanto, sacaría los restos de su esencia.Misaki ya era experto en mamar esa longitud, sabía que el máximo placer se hallaba en el glande por lo que se concentró ahí delineando su capullo y frenillo. 

 

 

Miyagi terminó de desvestirse sin despegar la vista del castaño que ahora lamía sus testiculos y después metía uno por uno a su boca, haciendo que sintiera escalofríos, ese niño era muy perverso y le encantaba. 

 

—Mírame Misaki 

El castaño obedeció y sus ojos hicieron contacto con los del profesor que cogió el rostro del menor para guiar el movimiento de su boca. Le fascinaba tener a Misaki a su merced disfrutando de su virilidad así que empuñó el cabello de su novio y jaló haciendo más fuertes las embestidas.

—Lámela bien y después regresas a mis testiculos para chuparlos.

Misaki obedeció las indicaciones del profesor lamiendo con verdadera gula al pelinegro.

 

Miyagi colocó un par de almohadas por su espalda para estar elevado y le ayudó a Takahashi a girar quedando en posición de 69 y de esta forma, ambos disfrutar de un buen oral. Misaki casi se atraganta al ser movido tan intempestivo pero dejó guiarse.

 

—Que bonito trasero tienes Misaki.

 

Lo nalgueó un par de veces y jaló el pene de Misaki para hacerle una rica felación, el castaño tuvo que sacar el miembro de su novio para gemir a gusto cuando Miyagi la metió en su boca.

 

—Miyagi... ahh...ahhh

 

Misaki no soportaría más, en cualquier momento se vendría llenando la boca de su novio quien ya estaba firme como piedra  de nuevo. 

El profesor intercalaba su lengua por el ano, testiculos y pene del editor, no le molestaba probar su propio semen después de tremendo orgasmo, al contrario, lo lamió y volvía a escupirlo en ese orificio tan apetecible.

 

Misaki ya no chupaba a Miyagi, sus manos se aferraban a la sabana por el placer, estaba llorando por todo lo que había aguantado desde que salieron del Hotel hasta este momento, por lo que no tuvo más opción que rogar 

 

—Miyagi...detente..

 

—No, hermosura.Veremos cuánto resistes tú Miyagi pellizco ambos glúteos con fuerza para separarlos y simuló embestidas con su lengua por la entrada de Misaki.

 

—Ahhh...Basta.. quiero esto adentro de mi— Misaki agarro el pene de Miyagi con fuerza—Te lo ruego...

 

El docente sonrió por las  suplicas del editor, el también quería sentir su calor, sentir como su miembro era asfixiado por la cavidad anal de Misaki, pero antes, le haría pronunciar un par de palabras que le rondaban por la mente hace días. Dos palabras que él quería decir hace mucho pero no lo hacía por miedo.

Miyagi detuvo la felación y volvía a girar a Misaki para sentarlo a horcajadas sobre el

 

El castaño muy desesperado agarró el falo de Yō para insertarlo por su ano pero no le fue permitido, él docente le sujeto ambas muñecas y lo jalo hasta quedar sus rostros muy juntos 

 

—Di que eres mío 

 

—Soy tuyo Miyagi... pero por favor ¡hazlo ya!

 

—No hasta que digas que sientes por mi 

 

Misaki dudó un par de segundos y se perdió por instantes en los ojos de Miyagi, el profesor limpio un poco sus lágrimas y le miraba con deseo, con sinceridad y sobre todo, con AMOR. El cerebro de Misaki hizo click y sus orbes se hicieron mas grandes, no creyó que Miyagi sintiera eso por él y entonces...

 

—MISAKI, YO TE AMO—Dijo Miyagi con devoción...—Estoy enamorado de ti 

 

Amor...otro hombre le amaba y el corazón de Misaki se aceleró hasta lo impensable, Takahashi se puso feliz porque Miyagi le correspondía..

 

—Y YO TE AMO A TI.

 

El conjuro fue pronunciado, Miyagi alzó de la cintura a Misaki quien se posicionó sobre el glande y de una sola estocada tragó por completo el miembro de su amante 

 

—AHHH..MI..MIYAGI..

 

El profesor gruñó, cerró los ojos unos instantes disfrutando ser consumido de tan maravillosa forma y dió paso a las frenéticas estocadas, su boca fue directo al cuello de Misaki para morderle sin dejar de follarlo tan duro como deseaba, haciendo que gritara por tanto placer.

 

—AHHHHHHH...Más por favor..más 

 

Misaki brincaba con fuerza por esa dura carne, movia su cadera en círculos, no resistió otro segundo más y por fin se corrió sobre Miyagi.

Una considerable cantidad de semen fue expulsada por lo que se  dejó caer sobre el pecho del mayor. El docente lo apresó con fuerza calmando el temblor de su cuerpo.

 

—Me encanta que te vengas así Misaki
Miyagi giró sin salirse de Misaki para dejarlo acostado y subió ambas piernas a sus hombros, su pene se deslizaba con extrema facilidad, lo sacaba por completo y volvía a meterlo sin piedad. Era fascinante ver el ano de Misaki siendo alimentado con su duro falo y no dejaría a nadie más que lo hiciera. Miyagi deseaba con todas sus fuerzas ser el único que proporcionara este placer a su novio.

—Solo yo te voy a meter mi verga Misaki—Pronunció en su oído el cual comenzó a lamer y descendió hasta el hombro del castaño para morderle—Solo yo voy a sentir como la aprietas y dejas así de mojada 

 

—Sí Miyagi..solo tu...ahhh

Takahashi aferró con sus piernas la cadera de Miyagi para hacer más  profundas las embestidas, cuanto había extrañado tenerlo adentro de él y por fin estaban juntos.

 

El profesor se detuvo en los pezones para morderlos hasta dejarlos hinchados y después calmaba el dolor con su lengua. Misaki le sujetaba del cabello para que no se separara. Miyagi había logrado sacar su lado perverso y eso le encantaba, disfrutaba al máximo el sexo con su novio.

 

Miyagi se apartó de Misaki para agarrar su pene y hacer que tuviera otra ereccion, no le demoro mucho puesto que sus estocadas daban justo en su prostata. Para Takahashi era  maravillosa la sensación de sentir el inicio de un orgasmo cuando Yō tocaba ese punto y después retrocedía cuando este sacaba por momentos su falo.

 

—¿te gusta?

 

—M..mucho, sigue por favor Miyagi...ahhh

 

El pelinegro salió de Misaki para ponerle en cuatro, empujó la cara del castaño hasta que estuvo completamente pegada al colchón y elevó su trasero. 

Acaricio la entrada con sus dedos y se inclinó para hablarle al oído de nuevo.

 

—Eres precioso Misaki... 

Eso era una verdad para Miyagi, no había ser más hermoso para sus ojos que Misaki, quien si proponérselo, ya le había robado el corazón y   se apoderaba de su cuerpo con apenas mirarlo, con solo un rose era suficiente para enloquecerlo. Había quedado rendido de amor por el.

 

Misaki sintió la dureza abrirse paso por su esfínter provocando una nueva oleada de sensaciones. Cada embestida era deliciosa para ambos, sus cuerpos calientes y sudorosos disfrutaban al máximo, no había duda que el amor es el mejor afrodisíaco para hacer el sexo tan ardiente, sublime para Miyagi y Misaki que sabiéndose amados, elevó hasta las nubes su placer.

 

Miyagi era consciente de no soportar mucho viendo a Misaki en esa posición tan indecorosa así que cerró los ojos intentando distraerse.

El castaño llevo una de sus manos por debajo de su estómago para acariciar los testiculos de Miyagi que le golpeaban los glúteos, estaban muy duros, listos para vaciarse por segunda vez, así que por inercia, el mismo comenzó a moverse impactando su cadera contra Miyagi 

 

—Ahhhh.... Miyagi..ahhh 

 

—Misaki... detente..si haces eso me vendré.. 

 

El castaño hizo caso omiso y se movió frenético provocando un sonido más obsceno cuando su culo y el falo de Miyagi hacían contacto.

—Más...Miyagi...¡dame más! 

 

El profesor soltó un gemido y agarró la cadera de Misaki para joderlo con fuerza, le azotó las nalgas hasta dejarlas rojas mientras lo martillaba con sus embestidas. El sudor de Miyagi caía por la espalda de Misaki, ya estaba en el punto de no retorno pero no quería eyacular así. Ansiaba ver el hermoso rostro de Misaki gimiendo por lo que le dio vuelta otra vez, dejando al castaño boca arriba. 

 

Takahashi lo sabía, pronto ambos estallarían y el mismo abrió sus piernas como contorsionista, separó sus glúteos mostrando su entrada muy dilatada e invitó a Miyagi a hundirse en él 

 

—Hazme tuyo... lléname con tu semen 

 

—Ya me perteneces Misaki..

 

Miyagi cogió su erección con la mano izquierda para empujar de nuevo, con la derecha entrelazó sus dedos con los del menor y retomó las embestidas...

 

—Te amo Misaki.. te amo..Ahhh

 

Misaki sintió cada uno de los espasmos de Miyagi mientras su esperma lo llenaba, el le siguió con su eyaculación vaciándose en su abdomen.

 

—Miyagi.....AHHHH

 

Invaluables segundos de placer recorrieron sus cuerpos, era increíble el estado de inconsciencia que se generaba tras el orgasmo con esa deliciosa corriente eléctrica golpeando cada fibra de su ser. 

 

Sus ojos se conectaron de forma amorosa haciendo sonreír a Miyagi  que se dejó caer en Misaki respirando con evidente dificultad, Takahashi estaba igual y con movimientos torpes acaricio la espalda del mayor.

Cuanto habían disfrutado follarse de esa manera, fundirse el uno con el otro y lo más significativo, fue confesar sus sentimientos.

 

Poco a poco sus corazones recobraron su ritmo habitual y continuaron abrazados sintiendo su acompasada respiración, era tranquilizante estar juntos después de los malentendidos 

 

Para Miyagi fue un gran alivio saberse amado, la forma que Misaki rechazó a Akihiko cuando lo encontró en el pasillo le hizo valorar más su amor.

Misaki demostró su lealtad a la relación que mantenían y aunque estuviesen alejados, le dejó claro que no se metería con alguien mas

 

Misaki valía cada puto golpe recibido y que propinó a Akihiko, lo que no le gustó fue ver los celos del escritor.

 

—¿Que es lo que estás pensando Miyagi?Takahashi levantó su rostro al verlo estático

 

—Pienso en lo hermoso que te veías con ese smoking y que el estupido de tu ex sigue amándote.

 

—Eso no es cierto.

 

—Claro que lo es, Akihiko sigue enamorado de ti Misaki, sus ojos lo delataron por completo.

 

—El ama a Shinobu, solo está confundido por las situaciones que se han presentado.

 

—¿Como la de que tu suegro que te pidió una relación?

 

—¿Eh? ¿Como sabes eso?

 

—Akihiko fue a contarle a Hiroki y..

 

—Y Kamijō te dijo a ti. Es extraño que ambos tengan al demonio cómo amigo en común. 

 

—Es raro en efecto, pero de no ser así, jamás podría haber llegado para impedir que Akihiko hiciera otras cosas contigo. Para la próxima lo mato.

 

—No digas esas cosas Miyagi, suena horrible y yo tengo una pregunta para ti 

 

—Dime

 

—¿Ya no sientes nada por Shinobu? 

 

Miyagi se incorporó para salir de Misaki, el editor gimió cuando el falo resbaló por su pierna y parte del semen alojado se dispersó por sus muslos. 

El profesor cargo al castaño y le sentó sobre su pelvis, con mucha ternura acarició su rostro y repartió besos cortos.

 

—No, ya no le amo. Misaki, tu eres el primero con quien me confieso. 

 

—Pero con..

 

—Con mí Sensei fue distinto, lo dije mientras ambos mirábamos el mar, aquella fue una confesión de adolescente, un primer amor como los que todos tenemos. Risako trajo un poco de tranquilidad y desfogue sexual. Con Shinobu fue más por su insistencia y me llevo mucho tiempo decirlo.

Pero contigo todo fue tan abrumante, una noche te apareces salvando mi vida, a la semana te encuentro varado en la gasolinera y cuando veo tus ojos siento que por fin encuentro a quien había esperado tanto tiempo.

Tu encanto me cautivo al instante, no sabes como te añore todo ese mes que me desaparecí, pensando en tu rostro, en las pláticas que tuvimos, en cómo seria si pudiera besarte, como se sentiría hacerte el amor y te juro que disfrutar tus labios y hacerte mío, ha sido lo más hermoso y delicioso que he probado en toda mi vida.

 

Misaki quedó con la boca abierta con tal confesión, Miyagi se acercó para besarlo y correspondió a sus labios.

Tras unos minutos se separaron, Misaki se sintió muy mal al ver que el rostro del profesor comenzaba a inflamarse.

 

—Será mejor que veamos a un médico, ya se nota morada tu nariz Miyagi 

 

—No saldremos hasta mañana, te siguen buscando eso es seguro y por mi rostro le pediré a Kusama que me revise.

 

—¿Quien es él?

 

—El novio de Hiroki y si quieres verme tranquilo, hay algo que si puedes hacer Misaki

 

—¿Que cosa?

 

—Hazme el amor hasta que quede exhausto, esta noche quiero disfrutarte hasta quedar rendido. Esta noche no quiero saber de nada y nadie que no seas tú. Lo único que deseo es permanecer contigo, a tu lado Misaki,

 

Misaki se sonrojó por esas palabras, pero él también lo deseaba. Con lentitud se acercó a Miyagi y los besos no se hicieron esperar. Takahashi sintió cómo la erección de Yō crecía tras su espalda.

Se alzó de forma parcial y la alineó en su orificio, Misaki cerró los ojos y en segundos Miyagi se enterraba en el.......


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