Capítulo 15.
Tsuna aún estaba hipando, había estado llorando por una hora, le había dado miedo toda la situación, además su cabeza era una bola de confusión, no tenía a sus amigos, ni a su familia, Reborn lo había mandado a un lugar desconocido donde al parecer era un ser venerado de manera psicópata, ya que ninguno de los dos chicos se le acercaba, estaban con la cabeza baja evitando verlo a los ojos y a cada suspiro que daba, el pelirrojo se veía más pálido, el robot estaba junto a él con las armas desenfundadas listo para defenderlo.
- Podrías guardar tus armas, por favor – el Gole de inmediato acató la orden – puedes seguir cuidando el lugar… si quieres – Shoichi le hablaba con tanta inseguridad al robot ya que sentía que en cualquier momento le apuntaría con las armas, pero no pasó la enorme bola de acero se movió y siguió con sus rondines.
- Dile algo – Spanner codeo a su amigo.
- ¿Qué pretendes que le diga?, perdón por querer matarte y amenazarte con una barra de hierro, por favor no le digas a Reborn – el castaño escuchaba la plática perfectamente y esos comentarios lograron que sonriera a pesar de todo lo malo que había pasado ese día.
- No le diré nada a Reborn – el pelirrojo lo volteo a ver asustado – si quieres… - se volvió a sentir inseguro, esos chicos no se veían malos y su intuición le decía que confiara en ellos.
- Lamento el inconveniente, es que pensé que era un intruso y bueno usted… si no le dice a Reborn sería de gran ayuda – el pelirrojo agacho la cabeza para pedir el favor, no quería que el asesino tomara represalias en su contra, después de todo su misión era mantener a la familia de Iemitsu a salvo.
- No te preocupes, mi nombre es Sawada Tsunayoshi mucho gusto – Tsuna le extendió la mano y le sonrió, causando que ambos personajes se sonrojaran, habían olvidado el increíble carisma que tenían los usuarios de la llama y verlo ahí a él, era como ver el cielo despejado en el lugar más alto del mundo, era brillante, deslumbrante y precioso.
- Wow… yo soy Irie Shoichi y él es mi compañero Spanner, ah y también esta Giannini, pero él se encuentra en otro piso – sonrió y habló con nerviosismo, sentía que se iba a desmayar, su corazón se había acelerado con el toque del menor y él se sentía cohibido por su brillo.
- Eres muy hermoso – el rubio no había contenido el comentario sonrojando a Tsuna, que aún no se acostumbraba a la atención que había estado recibiendo últimamente.
- Jajajaja gracias.
Ambos ingenieros se dedicaron a guiar al menor por las instalaciones y le contaron todo lo que había y también presumieron que había sido mandada a hacer para protegerlo a él, también le enseñaron al Gole Mosca, había varios en la base y todos reaccionaban a la presencia del portador de la llama, también habían notado que absolutamente todas las puertas abrían al toque de la mano del menor, pero ellos no recordaban haber ingresado esa clase de información, pensaron que Reborn lo habría hecho, pero no los había visitado en mucho tiempo.
Llegaron a los pisos inferiores y entraron a lo que parecía un laboratorio enorme, había cosas tan raras que él no entendía para que servían, pero se veían increíbles y costosas, así que no se acercó a ellas no quería romper algo y deber dinero. Llegaron hasta el hangar donde estaban los aviones, sorprendiendo a Tsuna, ya que no pensó que ese lugar fuera tan grande para almacenar tantas cosas.
- Giannini, baja un momento, tienes que conocer a alguien – Shoichi había agarrado confianza después de 30 minutos de haber platicado con el menor y ahora lo llevaba del brazo por todo el lugar, se sentía poderoso de poderlo tocar con tanta confianza, que quería presumirlo.
- Es el hijo de Iemitsu – sama – Giannini sacó la cabeza y de inmediato reconoció la cara de Tsuna, ya que lo había visto en fotos desde que había nacido – ¿qué haces tocándolo? – cuando vio la confianza con la cual lo llevaba del brazo se alarmó, ya que ninguno de ellos tenía el rango para poder hacer eso, si se llegaban a enterar lo matarían.
- Tsuna – sama me dejó – presumió haciendo que el castaño se emocionara, nunca lo habían presumido de esa manera y lo hacía sentirse especial, así que se sonrojó por la mirada del pelinegro que acababa de conocer y escondió la cara en el brazo de su acompañante, causando que se les paralizara el corazón a los tres presentes.
- Sí alguien se entera de esto… - Giannini no terminó la oración.
- Estás más que muerto – a Shoichi casi le da un infarto ya que la última frase la pronunció una voz de ultra tumba detrás de él, al voltear su peor pesadilla se volvía realidad, ahí estaba Reborn con otros usuarios de la llama, la esposa de Iemitsu, a Basil que era uno de los guardianes que se encargaban de cuidar de los usuarios y a los que parecían ser los guardianes del cielo.
- Reborn – san – dijo con miedo el pelirrojo, pero lo salvó la campana, ya que Tsuna al oír la voz de su tutor soltó a su guía y corrió a los brazos de su mamá feliz de verla a salvo y después abrazó al asesino, lo cual calmó por completo su sed de sangre, claro que no se sentía totalmente a salvo, los guardianes lo veían con odio y Basil no parecía feliz de que se tomara tales libertades.
- Me alegra saber que están todos bien – Tsuna revisó a todos sus guardianes y se aseguró de que en verdad no les hubiera pasado nada, calmando los ánimos de todos los presentes.
- Tsuna lleva a tu mamá a su cuarto al igual que a los demás, tengo que hablar con estos tres – señalo a los ingenieros y Shoichi pensó que iba a amanecer en alguna coladera muerto.
- No vayas a enojarte con ellos Reborn, por favor, fueron muy amables conmigo – Reborn rodó los ojos e hizo ademan de que se fuera, pero por dentro quería jurarle que jamás haría algo que lo hiciera sentir mal, incluso si eso implicaba tener que tolerar que ese idiota hubiera llevado a su alumno del brazo.
Guio a los demás a la parte de arriba y le enseñó el lugar donde estaban las habitaciones, a excepción de Hibari y Mukuro los demás escogieron una de inmediato, pero Tsuna sabía que ellos necesitaban su propio espacio y de ser posible lo más alejado el uno del otro, así que cada uno tenía su propio piso, según Spanner eso se repetía cada generación, así que siempre se tenía destinado un espacio especial para los guardianes de la nube y de la niebla.
- ¿Dónde está tu cuarto? – preguntó la nube al ver que él estaba en un lugar silencioso con acabados japoneses y con espacio suficiente donde podía entrenar.
- Más arriba subiendo el elevador…
- Está muy lejos, te quedaras conmigo – Hibari siguió caminando y Tsuna se sonrojo, si bien el lugar era lo suficientemente grande para albergarlos a los dos sin que se vieran la cara, a él le daba pena compartir el espacio con el presidente.
- Bueno, es que mi cuarto lo comparto con mi mamá y no quiero…
- Tráela – era la respuesta simple de Hibari, pero Tsuna no se sentía listo para compartir espacio con el presidente, además si los demás se enteraban estaría en problemas.
- Él tiene su propio espacio Hibari, no se quedará aquí – Reborn apareció como milagro para el castaño, ya que él no podía decirle que no al presidente – Tsuna ve a tu habitación y cuida de tu mamá – literalmente lo corrió para hablar con su guardián a solas, solo esperaba que no se mataran.
Reborn al ver salir a su alumno volteó a ver al menor, el cual se veía molesto por haber sido interrumpido, ambos sabían que Tsuna no sabía decir que no a las personas y si el presidente hubiera insistido un poco más el menor y su mamá terminarían en su territorio acaparando su atención por completo, a Reborn lo ponía celoso pensarlo, pero le preocupaba más que los guardianes se enteraran y quisieran empezar a pelear.
- Dino dice que te volviste bastante fuerte, pero quiero corroborar que puedas proteger a Tsuna – el pelinegro frunció el ceño, él se encargaría de que nada malo le pasara al castaño, nadie tocaba su propiedad – después de todo, no siempre haré tu trabajo – mencionó Reborn en son de burla indicando que él era el que cuidaba de Tsuna y haciendo enojar al pelinegro, que no dudo en atacar para matarlo.
Tsuna por su parte iba pensando que había muchas cosas que no entendía, no solo de su poder o de Byakuran, sino también de Vongola, Giotto le había dicho que él la había creado para poder proteger a todos aquellos descendientes de la llama, pero no le había dicho nada más, así que movido por la curiosidad y sabiendo que Reborn lo mataría por no hacer lo que le dijo, regresó al hangar donde había dejado a los ingenieros. Al llegar vio a los tres en estado depresivo, seguramente Reborn los había regañado, luego hablaría con él.
- Hola – saludó de nuevo y los tres se levantaron de inmediato tomando distancia pertinente, no querían que Reborn los volviera a regañar – sé que Reborn los regañó, pero tengo muchas dudas y solo ustedes podrán ayudarme – ninguno de los tres se podía negar a algo que les pidiera el usuario de la llama, no solo por su carisma, sino también por su nivel jerárquico en la familia.
- No hay problema, le ayudaremos con cualquier cosa que nos pida, pero no podemos hacerlo aquí, es un lugar donde no puede estar – se movieron a una sala más elegante – aquí es un lugar más digno de usted – dijo Giannini mientras servía té.
- La verdad es que no conozco nada sobre la familia – confesó sonrojado – todo este tiempo parece que me dejan de lado o simplemente ignoran que yo no crecí cerca de Vongola, así que quisiera que me explicaran todo sobre ellos… por favor – los tres se sorprendieron.
- Bueno… es una historia larga – Shoichi se rasco la cabeza, no sabía por dónde empezar, pero el menor lo veía con mucha atención, así que no podía fallar – Según los archivos a los cuales tenemos acceso todo esto nació de Giotto Vongola mejor conocido como Vongola Primo, su intención era que todos los usuarios de la llama tuvieran un lugar donde vivir, estar protegidos, una base donde pudieran ayudar a las demás personas con su poder, vivir lejos de aquellos que buscan su corazón y sobre todo alejados de las personas normales – Tsuna se sorprendió – como ya se habrá dado cuenta para un ser humano normal queda deslumbrado por su llama y empieza a generar una dependencia del usuario, obviamente los guardianes también tienen ese problema al inicio, pero a diferencia de las personas normales ellos pueden subsistir lejos de la llama – Tsuna quedó impactado, recordaba como las personas a su alrededor empezaban a ponerle más atención de lo normal.
- ¿Estás diciendo que la gente normal de la organización no puede… convivir conmigo? – los tres ingenieros asintieron.
- Cuando entras a trabajar para Vongola te prohíben acercarte a los usuarios, pero tienes que dar la vida por ellos de ser necesario – explicó Spanner – de hecho, cuando nosotros conocimos a su papá para construir la base y a pesar de que él fue el líder del proyecto, nosotros no convivimos mucho con él, Basil, Orégano o Lal Mirch eran los que nos decían que quería Iemitsu – sama – Tsuna se sorprendió, no conocía a esas personas, pero al parecer trabajan para su padre.
- Cualquier persona que esté en Vongola sabe que los usuarios son la prioridad máxima – confirmó Shoichi – usted mismo lo vio, yo cree a Gole Mosca y sabe que mis órdenes son absolutas, pero pone la seguridad del usuario por encima de la del creador, eso es algo que cualquiera de mis inventos debe de hacer – Tsuna estaba sorprendido – aparte el usuario de la llama más pura es el líder de la organización, los líderes de Vongola han sido hombres y mujeres con llamas poderosas y transparentes, Nono el líder actual logró defender a toda la organización completamente solo contra a Byakuran, yo vi parte de la pelea mientras huía, sus llamas cubrieron todo el palacio, encerró a Byakuran para que todos pudiéramos salir y cuando todos estuvieron fuera congelo el palacio por completo, aun después de dos años desde que congelo todo, el palacio sigue congelado con su poder – Tsuna lo vio sorprendido, había visto el palacio en sueños y era enorme, congelarlo en su totalidad sonaba imposible a menos que una era de hielo saliera de la nada.
- Xanxus es su hijo menor – el castaño abrió los ojos de sopetón, recordó lo patán que era el pelinegro y no podía creer que fuera el hijo de una figura tan respetable, no conocía a Nono, pero si se había sacrificado por todos los que vivían en el castillo debería ser un increíble hombre – a pesar de eso no se parece a ninguno de sus hermanos, Nono tuvo 4 hijos y de todos Xanxus tiene la peor actitud, el peor carácter y su llama no es tan pura, él jamás podría aspirar a heredar Vongola – Tsuna sabía que el pelinegro no era precisamente el mejor, pero ser hijo del líder te colocaba directamente en la línea de sucesión.
- Pero… es hijo de Nono… es su derecho en caso de que sus hermanos no pudieran – Reborn le había dicho que él podría ser el líder de Vongola cuando terminara la guerra, pero al parecer había alguien que podía tomar su lugar.
- No, aquí no se respeta de donde naces, sino que tan pura es tu llama – aclaró Giannini – por ejemplo, la de usted se parece mucho a la de Nono – Tsuna se sonrojo – además es hijo del asesor externo tiene el mismo derecho de Xanxus de poder ser líder.
- ¿Qué es un asesor externo?
- Vongola se divide en dos poderes, precisamente para evitar que colapse en caso de que alguno de los dos llegara a faltar, el líder generalmente da las ordenes y todos lo obedecen, pero si el asesor externo determina que no es prudente puede oponerse y se somete a juicio su decisión. El asesor externo también toma decisiones sobre Vongola, claro que sus decisiones pasan por el líder y si se autorizan se ejecutan, si el líder llega a faltar por cualquier situación, todo el poder de Vongola recae en el asesor externo y se vuelve el jefe en funciones hasta que se decida un nuevo heredero, así que es un puesto muy importante, ambas partes se complementan y en nivel jerárquico están a la par, así que usted está también en una posición privilegiada como Xanxus – Tsuna no quería heredar Vongola y resultaba que su padre era importante, al grado que si algo malo pasaba de verdad tomaría el control de Vongola.
- Mi papá jamás me habló sobre esto… casi siento que pensó que jamás estaría en esta situación – Tsuna se encogió en su lugar – cuéntenme sobre Byakuran – los presentes cambiaron la expresión de emoción por hablar de Vongola y se notaban incomodos por el enemigo en común – si no quieren…
- Tranquilo jefe – dijo Giannini con una sonrisa dolida – es difícil hablar de él, pero tal vez lo que le digamos le ayude en la pelea contra él, como sabe el poder del fénix se divide en 3, aquellos que aparecen ese poder lo cuidan los Arcobalenos Reborn es uno de ellos, pero su poder es aún desconocido para muchos, pero a pesar de que son independientes a Vongola se han quedado cuidando de ella, está usted que posee el poder de purificar la maldad… y luego está el poder de viajar entre las dimensiones, los que poseen ese poder es actual la familia Gesso, al igual que el poder de los Arcobaleno es difícil saber cómo funciona, desde la época donde se otorgaron los dones, pero nosotros los ingenieros tenemos una teoría – Tsuna puso más atención – a cada decisión que tomamos hay una ramificación o un futuro diferente al cual vamos a llegar, prácticamente nuestras decisiones marcan nuestro camino, entonces pensamos que ellos tiene la habilidad de poder saber qué pasará en cada uno de esos futuros – el castaño se preocupó por esa situación.
- Estas diciendo que él sabe dónde lo que pasará en este mundo, ósea… que este no es un lugar seguro – entró en pánico.
- No, cada decisión cambia el mundo como lo conocemos así que él solo puede ver el futuro en paralelo al momento que vive en este momento – el castaño no entendía muchas cosas así que le hicieron un dibujo sobre cómo funcionaba el poder de Byakuran según su teoría y entonces entendió mejor – cuando él llegó al castillo de Vongola sabía que Nono se sacrificaría, porque en cada mundo que veía Nono siempre lo hacía por nosotros y seguramente logró contrarrestar su poder por lo mismo.
- También quiero preguntar sobre otra persona – Tsuna no sabía si ellos la conocerían, pero debía de intentar – ¿conocen a Yuni? – todos lo vieron con cara de no entender, se pusieron a pensar – si no la conocen está bien, solo quería saber más sobre ella.
Tsuna continuó platicando con los ingenieros sobre Vongola, los hijos de Nono, también le contaron más historias sobre los líderes de la familia, pero para ellos Primo era un misterio, siempre decían que no había mucha información sobre él o que su información estaba clasificada y solo aquellos que poseían la llama podían acceder a ella, se le fue el tiempo tan rápido que no se dieron cuenta de que ya eran las 11 de la noche, solo notaron eso hasta que Reborn entró al cuarto hecho una furia.
- ¿Dónde te dije que te quedaras? – Reborn le gritó y lo amenazó con un arma, los ingenieros se quedaron petrificados, pero de inmediato se alejaron del asesino, ya habían visto que pasaba si se le amenazaba a un usuario dentro de ese lugar y como por arte de magia aparecieron 2 Gole Mosca que protegieron a Tsuna con su cuerpo y amenazaron a Reborn con sus armas listas – quiten estas cosas antes de que las rompa.
- Los Gole Mosca no dejaran que dañes al usuario, una vez empiezan a protegerlo, ni siquiera a mí me hacen caso – Reborn resoplo molesto.
- Bien – guardó su arma e iba a agarrar a su alumno, pero la maquina no lo dejó pasar.
- Debe de alejarse del usuario, si da un paso más se le considerara amenaza de nivel máximo – el pelinegro quería romper el robot a base de disparos, pero si destruía a uno los demás vendrían también y no podría dejar a la base sin guardias.
- Tsuna ve a tu cuarto antes de que me hagas enojar más – y así el castaño agradeció que las maquinas lo protegieran.
Mientras Tsuna corría a su cuarto pensaba en todo lo que relacionaba a la familia, le hacía sentir dudas sobre seguir en ese camino, Byakuran era fuerte y tenía conocimiento de otros mundos, sabía de su nivel actual de fuerza, tal vez hasta sabría ya como vencerlo… ¿cómo podría vencer a alguien que ya sabía que iba a pasar? Ahora entendía porque Reborn y Giotto no eran tan positivos con lo que se avecinaba.
Continuara…