El primer amor por Sora Hatake

Yamato llego a casa de Kakashi, la puerta estaba medio abierta por lo que se dio prisa a entrar.

— ¡Naruto! ¿Estás bien? —preguntó Yamato entrando

—Oh, Yamato-san, vino pronto —contestó el rubio sonriendo estando aún en el sillón

—Hola —saludó Sai asomándose al lado de Naruto

—Ah, vi la puerta abierta y me asuste por un momento —dijo el castaño soltando un suspiro aliviado

—Si, papá la dejo abierta para Sai y yo le dije a Sai que la dejara abierta porque papá dijo que vendrías

—Ya veo, ¿estás bien? Senpai me dijo que te lastimaste

—Si, me torcí el tobillo pero con el hielo ya no me duele y creo que ya la hinchazón bajo

—Menos mal. ¿No hay problema con que estés aquí Sai? —preguntó Yamato

—No, se supone que estoy en mi clase extra de lengua extranjera

— ¿Y el profesor no le llamará a tu papá? —esta vez cuestiono Naruto, sabía que él padre de su amigo era bastante estricto, era de lo poco que sabía mejor dicho.

—No, le avise al profesor que estoy en casa descansando porque me enferme

—Tú si que tienes todo cubierto, ¿no? —comentó el rubio sorprendido

—Es algo que aprendes con el tiempo —dijo Sai mientras sacaba sus libros

—Debe ser aburrido tener clases incluso después de escuela

—No es tan malo, a veces las aprovecho para dibujar

—De seguro disfrutarías más clases de dibujo

—Si, me gustarían más, pero igual creo que la lengua extranjera me ayudara en algo en el futuro

—Vaya, le ves lo positivo a las cosas

—Lo aprendí de ti —dijo Sai para girarse a ver a Naruto

—Vaya, eso…me halaga —Naruto desvió la mirada sonrojado

—Si, como hoy, que gracias a que te lastimaste el tobillo no tomaste la clase de matemáticas y fue bueno porque no llevabas la tarea

—Shhh—Naruto puso su índice frente a su nariz y boca para luego girarse a ver a Yamato sonriendo de forma nerviosa—Eso no es cierto, no le diga a papá

—Haré como que no oí nada —contestó Yamato

—Que amable de su parte Yamato-san. Por cierto,  ahora que están los dos aquí me gustaría que me aclaren eso de que son hermanos —Naruto los veía con el ceño fruncido

—Es una larga y complicada historia, de seguro te aburre o te confunde —contestó Sai

—No, no, en serio quiero saberlo

Sai vio a Yamato esperando que dijera algo.

—Yo me encargo —el castaño se acercó a los chicos para luego cruzarse de brazos—Verás Naruto, en realidad no somos hermanos de sangre

— ¿Son de los que comparten solo a uno de sus papás? —preguntó Naruto arqueando una ceja

—Tampoco

— ¿Entonces? —Naruto ladeo la cabeza para ver a Sai—Ahora entiendo lo de complicada

—Dejémoslo en que ambos tenemos un padrastro a quien le gusta cuidar su imagen, y es una bastante conservadora

— ¿Conservadora?

—Sí, es una persona que solo cree en la familia tradicional, y el cuidar su imagen  implica que debe tenerla

—Ah, si, papá alguna vez me hablo sobre ese tipo de gente conservadora, generalmente eran los que nos veían feo cuando salíamos a pasear por esa tontería de “familia tradicional”

—Pues eso, entonces nuestro padrastro se juntó con mi madre por eso, cuando ella falleció y luego yo me fui de casa, lo hizo con la madre de Sai

— ¿Entonces hace eso solo por cuidar su horrible imagen? Que molesto debe ser tener un familiar así

—Lo es —dijeron Sai y Yamato al mismo tiempo

—Entonces, a pesar de crecer en una familia así, ¿aun así te hiciste mi amigo sin importar que mi familia no sea “tradicional”? —Naruto se giró a ver a Sai

—Bueno, es que no comparto sus ideas. Además no importa como sea tu familia Naruto, tú siempre has sido bueno conmigo, y tus papás también, así que me di cuenta de que las cosas no eran como me las habían enseñado

—Oh, entiendo Sai, que genial eres por no dejarte llevar por esas cosas

—Bueno, creo que ha sido gracias a que te conocí y nos hicimos amigos

Naruto desvió su mirada y sintió sus mejillas calientes —Eso fue lindo, para venir de ti, digo, porque ya sabes, a veces no eres muy expresivo y eso

—A veces solo lo dejo fluir —dijo Sai levantando los hombros

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—Al fin terminamos —dijo Asuma soltando un suspiro

—A la próxima que necesites ayuda huiré antes de que te acerques a mí —comentó Kakashi

—Vamos, no te quejes, recuerda que las horas extras se pagan más —habló Asuma mientras recogía sus cosas

—Solo por eso te ayude —contestó Kakashi cuando escucho la puerta del salón abrirse

—Mira, ahí viene tu mejor amigo —bromeo Asuma

—Por si mi día no había sido suficientemente malo, todavía tengo que toparme con él —dijo Kakashi para sí mismo sabiendo bien a que se refería su amigo

—Perdón, no sabía que había alguien aquí —dijo Ebisu acercándose—Ah, Kakashi, hace tiempo que no te veía por aquí haciendo horas extras, ¿qué paso? ¿Finalmente el divorcio te dejo sin dinero?

—No, solo que le quiero comprar una computadora a mi hijo, ¿qué hay de ti? No te has divorciado y te veo siempre en las horas extras

— ¿Eh? Yo, bueno, solo me gusta ganar un poco más

—Si claro, debe ser solo por eso —dijo de forma vaga Kakashi

—Por cierto, no quería decírtelo porque quien sabe si aún estés sensible, pero vi a Iruka saliendo con otra persona

—Sí, ya sabía

— ¿Y no te hace sentir mal eso? Digo, parece que te supero rápido

—Pues no, ya estamos separados, no tengo porque meterme en sus relaciones amorosas —dijo mientras levantaba los hombros restándole importancia al tema

—Deberías aprender Ebisu —comentó Asuma

— ¿Eh? ¿Qué? ¿Yo por qué? —cuestiono nervioso

—Pues por ese drama que le armaste a Anko la vez que te rechazo, le estuviste insistiendo otras dos semanas

—Vaya, no es muy bueno Ebisu, ¿has ido a terapia? Te puedo recomendar a mi psicólogo,  me ha ayudado mucho

—Yo no necesito nada de eso

—Todos lo necesitamos aunque pensemos que estamos bien, pero bueno si en algún momento quieres ir avísame —dijo Kakashi dándole una palmada en el hombro—. Vamos Asuma, que me esperan en casa

—A mi igual, nos vemos Ebisu

—Justo hoy que estaba teniendo un mal día me lo tenía que encontrar —se quejó Kakashi cuando estaba seguro de que no lo escucharía —, pero eso que dijiste de que le insistió a Anko, ¿si es cierto?

—Si, ¿no te contó Anko? Estuvo un mes diciéndole que lo pensara

—Bueno, no todos saben sobrellevar el rechazo —comentó recordando el incidente con Rin

—Debes de saberlo bien, digo, tú eres siempre quien rechaza —bromeo Asuma

—Y espero mantener mi racha ahora que de el siguiente paso con Tenzō

— ¿Ya estás listo para hacerlo?

—Si, bueno, primero hablare con él y si él esta listo entonces yo igual

—Vaya, me das ternura cuando te pones así —comentó Asuma—, siempre me ha dado curiosidad saber como es que tú te le declares a alguien tomando en cuenta lo tímido que eres en ese aspecto, así que te deseo suerte con eso

—Gracias —dijo Kakashi solamente, pero en su mente estallo en un caos, ¿Cómo se le iba a declarar a Tenzō?

Tenía su mirada fija al frente, lucia totalmente concentrado al conducir, pero su mente estaba pensando en otra cosa. Si Tenzō aceptaba dar el siguiente paso, quería que su declaración fuera especial, después de tantos años finalmente regresarían a tener algo oficial y Tenzō merecía lo mejor, ¿pero cómo lo haría? ¿Y si se ponía nervioso y lo arruinaba? Sabia que ni iba a ser rechazado, ni nada parecido si cometía algún pequeño error,  de seguro a Tenzō no le importaría mucho realmente, él solo le sonreiría y le diría “esta bien senpai”, lo conocía tan bien que hasta le pareció oír su voz en su cabeza.

Soltó un suspiro y revolvió su cabello plateado, debía calmarse y planear todo, todavía tenía tiempo para quitarse los nervios y asegurarse de que las cosas salieran bien.

Bajo de su auto para ir hacia su hogar, entro y dijo su saludo de rutina.

—Estoy en casa

—Bienvenido, senpai —lo recibió Tenzō en la sala

Kakashi se detuvo un instante en la puerta. Estaba acostumbrado a ser recibido por Naruto, que lo hiciera Tenzō de alguna forma era especial, bien podía acostumbrarse a eso.

— ¿Y los chicos? —preguntó dejando sus cosas a un lado

—Están en la habitación de Naruto, estaba a punto de pedir una pizza para que comieran

— ¿Una pizza? De seguro Naruto te dijo que lo hicieras

—Oh, bueno, si lo hizo

—No, no, no te preocupes por eso Tenzō, en seguida preparo algo de comer, estoy intentando cambiar la dieta de ese niño que cree que puede vivir a base de comida chatarra —Kakashi fue hacia la cocina

— ¿Seguro senpai? De seguro vienes cansado —Yamato fue tras de él—Déjame pedirla para que puedas descansar

—No Tenzō, los chicos deben de comer sano porque están en crecimiento, si quieres hacer algo entonces ayúdame a cocinar

—Pues puedo hacer eso

—Ah, le dije a Yamato-san que se diera prisa antes de que llegará papá—dijo Naruto que estaba recargado en el hombro de Sai

— ¿Qué hacen?

—Están preparando la cena juntos

— ¿Cómo en las televisión? ¿Cuándo las parejas hacen cosas juntos? —cuestionó Sai

—Si, eso hacen las parejas Sai

—Nunca lo había visto en la vida real

— ¿Qué tus papás no son afectivos entre ellos? —Naruto arqueo una ceja

—No, apenas si se dan los buenos días a veces

—A veces me preocupa mucho el entorno en el que creciste —dijo Naruto viendo a su amigo

—Gracias

—Pero…no fue algo positivo

—Por preocuparte

—Ustedes dos, vayan a lavarse las manos para que vengan a cenar —dijo Kakashi girándose a verlos

—Ya vamos viejo —contestó Naruto para ir ayudado por Sai

Tenzō estaba revisando las cosas que estaban en la estufa cuando sintió como Kakashi se acerco a sus espaldas para mover los alimentos en las ollas. El castaño se quedo quieto completamente, se sentía acorralado, pero de una forma que le gustaba.

—No te pongo incomodo, ¿verdad? —preguntó Kakashi

—Para nada senpai

—Hay que hacer esto más seguido, ¿no crees? —comentó Kakashi sobre su hombro

—Claro, disfruto mucho pasar tiempo contigo —contestó de forma tranquila, ni siquiera él sabía cómo podía mantener la calma estando en esa situación, escuchando la agradable voz de su senpai justo a su lado, y oliendo esa fragancia varonil con un toque fresco que lo envolvía. — ¿Tu perfume es nuevo? Hueles bien —dijo de forma tímida, ¿qué tan raro era que reconociera incluso si la fragancia de Kakashi cambiaba un poco?

—Oh, si te diste cuenta, ¿te gusta? Lo compre pensando en ti, es una fragancia con un olor a bosque

Entonces todo ese acercamiento era adrede para que oliera su perfume, era un gesto lindo que lo hizo sonrojar, estar entre los brazos de Kakashi lo hacía sentir protegido, como cuando eran adolescentes —Me agrada senpai

—Sabes Tenzō, hay algo que me gustaría decirte

—Yo igual quiero hablar contigo de algo importante senpai

— ¿Te parece si tenemos una cita este sábado?

—Me parece perfecto —contestó el castaño

—Pues está dicho. Eso ya quedo listo —Kakashi apago la estufa y se apartó un poco de Tenzō para darle espacio

 — ¡Gracias por la comida! —exclamó Naruto una vez que estaban todos listos para comer

— ¿Te sientes mejor ahora Naruto? —preguntó Yamato

—Si, ya casi no me duele —contestó el rubio mientras comía

—Al menos espero que mañana ya puedas caminar sin tanto problema —dijo Kakashi

—Tendré cuidado papá

—No tienes de que preocuparte tanto senpai, Naruto esta en esa edad en la que parece que es de hule y se recupera rápido —bromeó Yamato

—Ojalá pudiera regresar a esos tiempos, ahora si duermo en una posición mala quedo adolorido por una semana —dijo Kakashi

—Por cierto, ¿ya no has tenido tantos problemas de salud? —preguntó el castaño

—No, ya no, de todas formas sigo yendo a chequeos mensuales

— ¿Por qué? —esta vez preguntó Sai que se había mantenido callado

—Kakashi-senpai tenía uno que otro problema de salud en la escuela, seguido terminaba en la enfermería

—No era tan grave, solo eran uno que otros desmayos —comentó Kakashi

—Si eran graves cuando estabas bien y te desvanecías de la nada, me preocupabas mucho —le dijo Tenzō

— ¿En serio papá? ¿Y por qué te pasaba? —interrogó el rubio

—Me sobre esforzaba mucho, no llevaba buena alimentación ni dormía bien y todo eso paso factura una que otra vez, estudiar y trabajar a veces era difícil —contestó Kakashi, que prefería no mencionar que también pasaba por el duro duelo tras la muerte de su padre, eran demasiadas cargas para un adolescente, de no ser por el apoyo de Tenzō no sabría si hubiera podido salir adelante en aquellos momentos.

—Ahora entiendo porque dices que solo me concentre en estudiar—dijo Naruto

—Pues sí, tú tienes a tu padre que haga horas extra para que puedas estar sin ninguna preocupación que no tenga que ver con la escuela

—Pero tampoco debes esforzarte tanto senpai, tú también debes de procurarte —dijo Yamato —. Y si no lo haces tú, lo haré yo

— ¿Eh?—Kakashi se giró a verlo

—Soy más joven que tú así que tengo más energía para cuidarte si tú no lo haces

— ¿Me acabas de decir viejo? —Kakashi ladeo la cabeza

—No, no, yo no quise decir eso—Yamato negó rápidamente con sus manos

—Si lo hizo —dijo Naruto riendo

—Oye, solo soy un par de años mayor —dijo Kakashi indignado

—Pero yo no quería decirte eso senpai, en serio que no

Sai apreciaba la escena frente a él. Tenzō no dejaba de disculparse y Kakashi lo veía con el ceño fruncido y negando con la cabeza, no sabía que las discusiones podían dar risa, o al menos Naruto no paraba de reír por la situación. Bajo la mirada a su plato, no podía diferenciar si lo cálido era la comida, o el ambiente familiar en el que se encontraba.