Cuando Bruce termino de hacer los últimos análisis y enviárselos a Shuri, se acercó al rubio quien lo veía cansado;
-por esta noche necesito tenerte bajo observación, te quedaras aquí ¿bien? - dijo cuando el otro asintió y miro a su amigo, quien no se había ido de su lado. Banner sonrió -Bien, nosotros nos iremos a dormir. Te veremos temprano- el rubio miro a Bucky asustado y este entendió de inmediato
-yo me quedare Banner, - dijo el soldado -no dejare a Stevie solo
-bien
-buenas noches- dijeron ambos al mismo tiempo mientras que el rubio despedía al pequeño hombre con la mano. Cuando se fue, James jalo una silla y se sentó a su lado;
- ¿de verdad tienes siete? - pregunto mirando al otro
- ¿de verdad eres Bucky? - recibió como respuesta - ¿Por qué tu brazo es de metal? Eres el papá de Bucky ¿cierto?
-soy yo Stevie
-pero te ves…
-es una larga historia. – Bucky tomo aire y comenzó a contarle a su amigo todo lo que paso intentando que este lo entendiera. Cuando termino, vio como el otro lo veía confundido - ¿entiendes?
-entonces… soy un adulto, pero por “magia”- e hizo comillas en el aire - ¿ahora tengo la mentalidad de un infante?
-lo tienes
-estas mintiendo. - rio el otro cuando su amigo suspiro -Mentir es malo
- ¿cómo explicas que tenga barba?
-es falsa
-ya duérmete punk. Debes descansar, mañana resolveremos esto
-bien-. El Capitán se recostó mientras que el otro le acariciaba suavemente el cabello rogando que esto se arreglara y que todo fuera un sueño.
A la mañana siguiente, Bucky se despertó al oír la puerta abrirse y ver como una cabellera castaña con una camiseta del Capitán América y unos pantalones de Hello Kitty entraba por la puerta;
-buenos días- dijo en voz baja al ver al rubio profundamente dormido
-buen día, - contesto de igual forma el castaño de pelo largo - ¿Qué estás haciendo fuera de la cama mocoso?
-tía Nath me dijo que el Capitán estaba en la enfermería cuando pregunte por él porque no fue a verme anoche – contesto acercándose y tocándole levemente el brazo que tenía la vía - ¿ya está bien?
-no lo sé, acabo de despertar- contesto el mayor cuando vio a su amigo estirarse
-buenos días, Buck. - dijo con pereza y volteándose para ver al menor
- ¿Cómo te sientes?
-un poco mejor. – contesto incorporándose -Hola- dijo con vergüenza al ver al menor
-ho-hola… soy Pe-Peter- contesto el menor mirando al otro asustado. Bucky solo se encogió de hombros
- ¿es tu amigo Bucky?
- ¿es verdad lo que me dijo la tía Nath?
-Stevie- dijo el soldado mirando al Capitán - ¿Qué edad tienes?
-ya sabes que tengo siete, tonto. No me molestes. - contestó haciendo un puchero cuando su estómago gruño -Tengo…
-apenas te revisen, iremos a comer algo, no cenaste nada
-gracias- sonrió el otro cuando por la puerta entro el doctor Banner.
La revisión fue bastante rápida y Bruce les dijo que ya podían irse. Steve le agradeció tomándole la mano con vergüenza y luego salió junto a los otros dos, tomando de la mano al soldado de cabello castaño que se sonrojo un poco;
-Stevie… no puedes estarme tomando de la mano- dijo en voz baja mientras caminaban. El rubio se detuvo en seco y le miro con un puchero
-pero somos amigos… - dijo bajito y quedándose en su lugar - ¿ya no quieres ser mi amigo porque eres grande?
-no, no es eso- intento decir el otro cuando vio los enormes zafiros azules del otro nublarse. Peter enseguida le tomo la mano y le sonrió
-yo tomare tu mano ¿sí? - dijo cuando el rubio lo miro sonrojado -El señor Barnes está un poco cansado es todo
-pe-pero no te conozco
-ya te dije mi nombre y ahora somos amigos ¿está bien? - el rubio asintió y comenzó a caminar de nuevo junto a los otros dos hasta que llegaron a la cocina, donde ya estaban Clint, Natasha, Sam y Tony tomando el desayuno. Inmediatamente, el Capitán se escondió detrás de su amigo sin soltar la mano de Peter;
-buenos días grandulón- saludo Natasha viendo como el rubio se ocultaba tras el soldado
-veo que seguimos igual- menciono Clint suspirando
- ¿Cómo amanecieron hoy? - saludo Sam al verlos mientras que Tony se servía café sin notar a los que habían entrado, ya que estaba hablando por teléfono
- ¿Cómo te sientes hoy Pete? - pregunto la espía acercándose al menor quien sonrió
-mucho mejor- respondió este cuando Tony por fin se volteo y vio como Peter tenia de la mano al enorme rubio escondido tras Bucky. Esto le hizo hervir la sangre y colgando el teléfono se acercó a los otros y jalo al pequeño castaño;
- ¡¿Qué demonios Rogers?!- soltó con agresividad mientras que este se sostenía de los hombros de Bucky y Peter se asustó al sentir el jalón - ¡¿Por qué tienes a mi hijo de la mano?!
- ¡papá basta! - soltó el castaño menor cuando vio como su padre jalaba al Capitán mientras que empujaba a Bucky
- ¡respóndeme!
-y-yo… - dijo el rubio con los ojos nublados
- ¡suéltalo, Stark! - grito Bucky metiéndose entre ambos mientras que el rubio corría a los brazos del pequeño castaño ya llorando
- ¡¿Por qué me grita?! ¡¿Quién es él?!- soltó asustado siendo abrazado por el otro
- ¿Qué? ¿a qué juegas?
- ¡Stark! - exclamo Natasha -Te lo intente explicar y Wanda lo intento anoche
-yo le explico, - se escuchó la voz de Bruce quien entraba en el salón -ven conmigo Tony, tenemos que hablar- el moreno comenzó a seguir al otro en silencio mientras que Peter intentaba calmar a un muy asustado rubio. Cuando ya lo logro y le limpio las lágrimas, se acercó a la isla mientras que los demás se marchaban a iniciar su día
- ¿Dónde estaba Wanda y Visión? - preguntó James viendo a los otros salir
-se fueron a una misión desde muy temprano. Vendrán en unos días- contesto Sam dándole a Steve un vaso de agua que este miro, pero no toco
- ¿Cómo contactaremos al mago?
-Nath está en eso
-bien. - los otros comenzaron a salir cuando el soldado se acercó a su amigo -Stevie quédate con Peter ¿bien? Iré a bañarme y bajo en un rato
-no… ¿no nos bañaremos juntos? - pregunto el otro en voz baja haciendo sonrojar un poco a su amigo, de pequeños siempre lo hacían, pero ahora, él lo veía incomodo
-hoy no. Te deberás bañar solo
-bien- suspiro mientras que Peter le ponía una taza con cereal frente a él
-yo lo cuido- exclamo el menor cuando el otro asintió y salió por la puerta en carrera aun pensando en lo que estaba pasando.