Aquí estamos en el aeropuerto esperando al famoso prometido, Meghan esta tan emocionada que no cabe en si, Luca trata de contenerla y yo solo los veo. Tomé la decisión de que si quieren dormir juntos que duerman, total eso no es de mi incumbencia en absoluto, ese es problema de ella y su familia.
En eso un joven moreno alto, como de la estatura de Luca, bastante atlético, ojos cafés claros preciosos y sin duda guapo se va acercando mirando para todos lados como buscando a alguien, trae una maleta de tamaño medio; en eso, Meghan voltea a ver lo que yo estoy viendo, sus ojos se agrandan y todas sus facciones cambian a una que jamás le había visto, si, ahí esta ella lanzándose sobre el con ojos brillantes, una sonrisa deslumbrante y la felicidad que desborda de todo su ser.
- Carlos!!!!- el grito de emoción al ser atrapada en los brazos de aquel hombre latino
- Meghan preciosa!- suelta con la misma emoción alzándola y girando- te extrañe tanto linda- le dice bajándola con lentitud tomando la cara de Meghan entre sus manos y regalándole un dulce, inocente y tierno beso en los labios y ahí, en ese preciso momento fue que sentí por primera vez, como mis tripas se hacían el mayor nudo del ser
- Carlos cuñado!- Luca saluda con emoción pero formal
- Luca, tiempo sin verte- le sonríe dándole un abrazo- cada día más guapo, ¿Cuántas novi@as andamos acá?- le pregunta jocoso- ¿vale la pena venirme?- los tres se ríen y yo sin entender
- Jajajaja, pues acá es igual que allá, bueno si te gustan los asiáticos hay de donde ver- siguen con sus bromas, en lo que me acerco a ellos
- Hola linda- saluda curioso “Carlos”
- Muy buenos días- saludo cortes haciendo la reverencia
- Que preciosa- se le sale- y habla perfectamente el español- dice con emoción casi chillando, yo entrecierro los ojos
- Jajajaja, como eres- Meghan habla- Carlos ella es Maia- le guiña el ojo y el abre los ojos sorprendido- Maia él es Carlos mi “pro me ti do”- dice feliz, en eso siento como me abraza efusivamente
- Un gusto conocerte, me han dicho tantas cosas de ti, eres más hermosa de lo que mi dulce Meghan dijo y – mira a Luca- más seria de lo que otros dicen- dice con risita tímida- de verdad estoy encantado en conocerte gracias por controlar a esos dos- se separa de mi con una sonrisa encantadora ¿Cómo habla este hombre? Apenas pude entenderle
- Un gusto también para mi conocerle joven Carlos…- hago espacio para que me diga su apellido
- Oh solo Carlos o Carlitos, como tú desees- ¿me está coqueteando? Enfrente de Meghan y Luca, que descarado y lo peor es que ellos ven todo esto con una sonrisa sin decir absolutamente nada - ¿A dónde vamos ahora?- pregunta tan relajado el hombre
- Primero dejaremos tu maleta en casa, te bañas, ves donde te dormirás y luego vamos a que saludes a la familia- contesta rápido Luca tomado la maleta que yo ya me disponía a agarrar
- Si, sabes que mis padres quieren ver a su yerno favorito- Meghan no oculta para nada su emoción
- Amo a tus padres, son un encanto, nada más porque te separaron de mi- finge llanto- ¿me enseñarán los lugares?- pregunta curioso
- Claro que si cariño- Meghan lo toma de la mano y seguimos el recorrido
“Cariño” ¿Qué demonios está pasando? Meghan con nadie externo a su familia es así ¿Cómo es esto posible? Esto es muy incómodo y lo peor es que me lo tengo que tragar todo y no irme de aquí, esto va a ser una larga, muy larga visita
- Buenos días Maia- me saluda “Carlitos” sirviéndome una taza de café que claramente necesito con todo esta cuestión barata que se está suscitando
- Buenos días- respondo seca, ¿desde cuándo respondo así? ¿Por qué con esta familia y allegados las cosas se me salen de control?
- Sabes si quieres que Meghan sea más cercana solo tienes que abrirte a ella- habla señalándome con la taza
- ¿Qué no deberías estar durmiendo? Ya sabes cambio de horario y todo eso- apunto, no quiero hablar con el
- Ah no, siempre despierto temprano, en realidad siempre los he despertado, más cuando me quedo a dormir con ellos- dice pensativo y a mi ahora el café me sabe a míe…
- Oh no sabía- digo haciendo obvio que ellos no me han platicado de el
- Es porque no te has abierto a ellos, si no, sabrías muchas cosas de mi- soba delicadamente mi mejilla, el color rojo esta en toda mi cara y me quito rápidamente
- Carlos no la molestes- aparece bostezando Meghan y los ojos aun cerrados- suficiente es que este compartiendo cama conmigo- extiende su mano para recibir una taza de café que EL le paso ¬¬, ahora él se me queda viendo con media sonrisa
- Bueno eso pudo evitarse si durmieras conmigo- me voltea a ver y ahí es cuando aparece esa sonrisa petulante que termina de revolverme el estomago
- Iré a bañarme- me paro para irme rápidamente, estoy que hecho chispas
El camino al departamento fue rápido, solo dejamos la maleta y salimos directo a comer con la familia que en “gran alegría comimos todos juntos y dichosos por la visita” (nótese mi sarcasmo), bueno solo yo no estaba cómoda, todos si le dieron una gustosa bienvenida.
Después regresamos al departamento y ya se disponían a decir lo de las recamaras cuando no me aguante y dije
- El cuarto donde usted se quedara es este que es el de Meghan- el sonrió pícaro- Meghan dormirá conmigo y Luca en su habitación, buenas noches- y me fui a mi recamara sin dejarlos objetar nada.
Si, se fue al carajo eso de no meterme, pero seguro que si esos duermen juntos algo pasa ahí y… ashh no lo voy a permitir.
Salgo de mi habitación y me encuentro con el solo en la sala, ya iba a girarme cuando
- Maia preciosa- giro a verlo- ¿Cómo se le ponen los subtítulos?- pregunta fingiendo llanto
- Aquí- le voy enseñando y me jala para sentarme a su lado
- Gracias, que tal si pones algo que te guste y con subtítulos para que tengamos que hablar- dejo un espacio respetable entre los dos, lo vi feo
- No veo la televisión- digo extrañada por el comentario
- Mmmm eres igual a esos- sonríe- eso es bueno- toma mi mano- tienes preguntas y si no las sacas ahora te juro haré que las saques y no de forma amable así que habla- frunce el ceño pero su voz no deja de ser amable, pero yo quito mi mano
- No sé de qué habla- le contesto
- Maia háblame de tu o te acuso con Meghan- ah! Pero que hombre tan desquiciante se parece a Meghan y caigo en el pensamiento que tal vez por eso son tal para cual y ash eso me enoja mas- Jajajajaja para ser la mujer inexpresiva que me comentaron lo haces muy mal- me mira encantado, él es hasta cierto punto como Alice son contradictorios- mira Maia, si te abres a esa preciosa mujer que tengo por prometida te juro que serás muy feliz- vuelve a tomar mi mano dulcemente- no le hagas daño por favor- habla casi como suplica haciendo que mi corazón se estruje- ella es muy sensible aunque no lo deje ver- dice tierno poniendo un cabello detrás de mí oreja, en eso veo como Meghan llega y yo me alejo de El
- Carlos- dice seria- ya te dije que no la molestes
- No la molesto, solo hablo con ella- su sonrisa convenció por completo a Meghan, siento que si en algún momento el intentara propasarse conmigo nadie me creería, los tiene por completo comprados
- Claro, claro, como si no te conociéramos- dice Luca serio con brazos cruzados viéndolo
- Y por lo mismo saben que es verdad- les guiña el ojo, los dos niegan y sonríen a la par como si se hubieran puesto de acuerdo, exhalo con frustración, ¿Cómo es que esto me está pasando a mí?
- Hoy solo vamos a caminar y mañana vamos a nadar ¿te parece?- Meghan comenta ilusionada
- Lo que tú digas corazón- cara de idiota, ojos brillantes, sonrisa seductora y a mí que me parta un rayo.
Sé que lleva poco tiempo aquí este hombre, pero realmente como pesa, o sea, siento que ha estado más de un mes aquí, Meghan no se le despega, habla, ríe, se relaja, parece tan suelta a su lado, es tan libre y argh se ve tan bella así, no lo puedo negar ni un segundo, hacen una pareja tan bonita.
- Sabes- volteo a ver la voz y es Luca- mañana es la cena familiar- dice viéndolos interactuar
- ¿Lo presentará?- si lo presenta sería un gran paso, uno que no se si quiero ver
- Na, o bueno como novio, pero la cena es para hacer lo que dicta la tradición con ustedes dos- sus ojos no se despejan de ellos, creo que todos estamos al pendiente de ellos dos- deberías de relajarte un poco, tu mal humor se está exponiendo mucho- y ahí es donde reconozco que se está burlando de mí, volteo a verlo- paz, pido paz
- Luca a veces eres…- sus ojos se abren y un brillo de fascinación está ahí presente
- ¿soy?- pregunta expectante
- Ve a hacerles mal tercio- volteo la cara, casi digo una impertinencia
- Jajajaja rayos debí presionar más, estuve tan cerca- se ríe y va con ellos
El tiempo pasó rápido, jugamos en la alberca, nadamos, no puedo negar que me relajé con todo, hasta que me cansé y me fui a acostar a una de los camastros
- Aun no me acostumbro a las energías de esos dos- me levanto los lentes y ahí está el otra vez haciéndome platica, pero veo su mirada perdida y no esta en Meghan, eso me molesta
- No deberías ver chicas- le digo seria
- Jajajajaja – me ve a los ojos- solo hay una mujer para mis ojos y esa es Meghan- y fue tan convincente que no pude debatirle- pero no veía a las mujeres, los japoneses que hay aquí- dice señalando a los otros del club- son lindos pero no mi tipo sin duda
- Ah- digo sin más en lo que los dos nos relajamos, esperen ¿dijo japoneses? Y volteo rápido a verlo
- Por fin llamé tu atención- habla con media sonrisa, creo que tengo la boca abierta
- ¿eres bi?- no sé de donde salió la pregunta y mucho menos como es que la dije
- Nop, esos mellizos si lo son- los señala con la mirada y ahí es cuando varias cosas cuadran, el cómo Meghan y Luca hablan abiertamente de si alguien está lindo o linda sin tabús o como se les acercan personas del mismo sexo pero con intenciones sumamente claras y ellos no se incomodan, abro y cierro mi boca varias veces sin poder articular- eso lo sabrías si te abrieras a Meghan- está serio- como también sabrías que si ella durmiera conmigo no pasaría nada porque su prometido es totalmente homosexual- su sonrisa victoriosa me refunde por completo- así hubieras estado más relajada y no celosa desde mi llegada hace tres días- se ríe- si sientes algo por ella podrías decírselo y ya, si no, alguien te comerá los mandados- se acomoda mejor en esa silla tomando una bebida
- Ella, yo, yo no siento nada por ella- ahora si él se quitó los lente y se sienta para verme, veo como ellos hacen el intento por acercarse, pero él les hace seña para que no lo hagan
- Haré que te creo, que cada vez que ella te ha defendido no te sientes más libre, que cada libertad que ella te da no hace que sientas algo en ti pero que por miedo a interiorizarte lo dejas pasar, que estos días con solo verla a mi lado o dándome un beso tu ser no quiere reventar de enojo y que tu mirada no me ha querido matar más de una vez- sí, el rojo que reflejo es una cuestión única en la vida- que cuando ella no hace sus travesuras no quieras ponerla en su lugar y decirle más de una de las verdades que bien le hace falta escuchar, digamos que haré de cuenta que no he visto como la miras, que tu corazón ha sentido más de una vez como se estruja por verla triste o enojada, que ha dado brincos de felicidad en sus alegrías o que se ha enternecido con alguna de sus niñerías- me siento desnuda- pero peor harás tú al mentirte a ti misma y que al hacerlo la dañas- dice con tristeza
- ¿Cómo?- juro que apenas salió el ruido de mis labios
- Porque me pasó igual- sus ojos brillosos la ven- si de alguna mujer me tenía que enamorar sería de ella, la amo, la amo tanto como a ninguna mujer voy a amar- creo que no estoy entendiendo nada- pero mi amor no es romántico, sé que es único y que nunca la podría hacer la mujer más feliz del mundo- su tristeza es palpable
- Pero están prometidos- y siento esa punzada de nuevo, el niega con la cabeza
- Sí, pero para que mi familia no me pregunte porque no tengo novias- se muerde el labio- ella lo quiso así y como nuestras miradas son de amor sincero ellos no dudan nada- da un suspiro
- Yo…- rayos no sé qué decir
- Solo se su amiga, conócela, ábrete Maia, no desperdicies algo que puede ser completamente hermoso, ya sea una amistad, yo no me arrepiento de nada- la vuelve a ver y si, ahí está ese amor que se profesan sin tabús y que a muchos nos hacen pensar otras cosas.
- Yo lo intentaré- digo con dificultad
- ¿de verdad?- él me toma de los hombros con mucha emoción
- Sí, pero no prometo nada- digo con cierto temor
- Gracias- me abraza dulcemente y una gran emoción- de verdad gracias, eso la hará muy feliz.
Al regresar al departamento, la verdad es que cenamos comida instantánea de lo cansados que estuvimos, nos bañamos (cada uno en diferente tiempo) y directo a la cama, estábamos por completo agotados para siquiera hablar.
- Maia- dice Meghan a mi lado, yo le estaba dando la espalda y la verdad a nada de quedarme dormida
- Mmm- creo que ni las palabras me salen ya
- ¿Qué hablaste con Carlos?- oh esto es nuevo, no pudo quedarse con la curiosidad, en eso me volteo para verla- es que Carlos no me quiso contar ¬¬ - se le sale una risilla, yo estoy tentada a hacerle la maldad de tampoco contarle porque pues ella nunca me aclaró que su prometido es gay y bueno no tenía que contarme pero aun así
- Pues…- bostezo y mis ojitos se cierran
- ¿Pues?- si la mujer tiene mucha curiosidad, no me dejará dormir
- Me dijo que Luca y tu son bisexuales- ni puedo abrir los ojos de la pesadez que tengo
- ¿te molesta?- su pregunta es con miedo, puedo leerla en su voz
- ¿Por qué habría de molestarme?-ah ni se si se entendió lo que dije
- Gracias- solo sentí un dulce beso en mi frente y que me abrazó al acomodarse, después me perdí completamente en mis sueños.
Tengo mucho que pensar, todo lo que me dijo Carlos me sigue golpeando la cabeza y el ser, por lo menos sé que mañana no la veré hasta la cena por cuestiones de tradición, espero para ese entonces poder pensar con claridad, porque teniéndola así de cerca, no me es posible y si mi cuerpo no estuviera tan cansado sé que ahorita estaría con los ojos bien abiertos observándola y tratando de descifrar que es lo que me pasa.