Steve camina por la mansión de Schmidt, sus manos sudan y si bien su semblante es tranquilo, él es consciente del estruendoso ritmo de su corazón estallando en sus oídos, sabe que tiene que controlarse pues ni siquiera la primera vez que pisó el lugar se sintió así y alguien podría empezar a sospechar de su comportamiento, no puede tirar a la basura tanto tiempo invertido desde que se infiltró en las filas de HYDRA.
-Todo va a salir bien- susurró para sí mismo antes de dar una profunda y lenta respiración
Hey!
In her heart there's a hole
There's a black mark on her soul
In her hands is my heart
And she won't let go till it's scarred
Cuando Phillips le habló de esta misión no estaba seguro de que pudiera funcionar, la Reserva Estratégica entiende bien que HYDRA es prácticamente una leyenda viviente, no hay forma de ingresar si no eres invitado por uno de sus miembros, nadie sabe desde donde operan y no hay un solo registro que pueda probar su existencia ¿Cómo podría él infiltrarse?
Con ayuda de Stark hicieron un plan tan intrincado y elaborado que parecía destinado a fracasar pero para su sorpresa funcionó impecablemente. Salvar la vida de Hildr Haugen de manera “desinteresada” le había servido en aquel momento para que aquella siniestra mafia estuviera en deuda con él, pero ahora que lo ve en retrospectiva no deja de pensar que fue un truco barato y cruel pues habían sido ellos mismos quienes atentaron contra ella.
Ha! Tried to breathe but I can't
'Cause the air she feeds me is damned
Got a touch like a thorn
'Cause the girl she's hiding horns
Trabajó arduamente para ganarse la confianza de todos ahí, llegó a conocer al círculo más íntimo de Johan Schmidt, su líder, y aunque era difícil estar lejos de su amigos y esposa se decía a mí mismo que todo el sacrificio valdría la pena al final. Claro que en aquellos momentos no esperaba toda la maraña de sentimientos y confusión que se instalaría en su pecho conforme más y más tiempo pasaba en el corazón de la organización ¿Cómo podría seguirles viendo como sólo una mafia malvada cuando había visto todo lo que hacían por su gente y aquellos que más los necesitaban? ¿Cómo podría seguir con sus planes cuando aquella mujer albina se había metido tan profundo en su corazón?
Cada vez es más y más difícil convencerse a sí mismo de que esto es sólo una misión y que su vida regresará a la normalidad una vez que termine, tan sólo debe cumplir con sus instrucciones, instalar los explosivos e irse, volver a los brazos de Margaret, de su alma gemela… pero ¿de verdad es eso lo que quiere?
She got blood cold as ice
And a heart made of stone
But she keeps me alive
She's the beast in my bones
She gets everything she wants
When she gets me alone
Like it's nothing
She got two little horns
And they get me a little bit
She's the fire in the sin
And I burn breathing her in
Now it's love suicide
And I sell my soul for the high
-Hola min kjaerlighet*- susurró una diminuta mujer de cabellos tan claros como madre perla sacándole de sus cavilaciones
-Cariño, no te escuché llegar- murmuró el rubio con una sonrisa diminuta en el rostro
-¿Está todo bien?
-Sí claro, sólo pensaba- contestó tomándola de la mano
-Eres muy guapo cuando estás concentrado- murmuró Hildr acercándose para abrazarle por el cuello poniéndose de puntillas
-¿Lo soy?- cuestionó con una sonrisa pícara tomándole de la cintura
-Steven… necesitamos hablar- murmuró acurrucándose contra su pecho
-¿Está todo bien?
-Sí, pero tengo que darte una noticia…
La mujer se separó para tomarle de la mano y guiarlo hasta una sala vacía, una vez dentro miró al rubio con semblante serio, por un momento Steve temió que le hubiera descubierto
-Sé que no hemos hablado sobre esto, y entenderé si no quieres formar parte de su vida…- murmuró la mujer mirando el suelo con nerviosismo
-¿De su vida? No entiendo…
-Estoy embarazada- le interrumpió la albina mirándole con ojos llorosos
En ese momento el mundo en el que creía Steve Rogers dejó de existir, sus ojos no pudieron hacer otra cosa que posarse en el vientre de la mujer, sus manos temblorosas tomaron las caderas de Hildr, sus ojos se anegaron de lágrimas imaginando como sería aquel pequeñito al que aún no conocía pero ya amaba con toda su alma.
-Tengo algo que confesarte- susurró Steve sin dudar, moría de miedo por lo que estaba a punto de hacer pero era la primera vez en su vida que estaba seguro de su actuar.
Truth be told I don't mind
'Cause her hand's my paradise
She can crush every hope
Got her heels stomping down my throat
Eran las seis en la mañana y Steve no había dormido ni un minuto pues la tarde anterior fue terrible, cuando confesó quien era realmente Hildr le miró con tal dolor en la mirada que Steve inmediatamente se sintió la peor escoria del universo. La mujer le había llevado ante Johann, la única razón por la que no le mataron en el acto fue porque ella abogó diciéndole al consejo que era el padre de su hijo no nato y Steve sin dudar confesó todo, les contó con lujo de detalle quienes eran todos los involucrados en esa misión, que información había compartido y cuál era el plan que tenían para el día siguiente.
-Johann confirmo todo lo que dijiste- dijeron desde la entrada de aquella habitación donde le habían encerrado
-Hildr…- el ojiazul le miró sin poder creer que la tuviera frente a él
-Han decidido que te enviarán con ellos e instalaras en sus instalaciones las mismas bombas que planeabas usar con nosotros, de lo contrario te llevaran a dar un largo paseo- susurró ella sin atisbo alguno de tristeza por el hombre al que se supone amaba y Steve no pudo hacer más que sonreír porque así fría, dura e inalcanzable fue como lo conquistó
-¿Si lo hago tengo oportunidad alguna de que me perdones?- cuestionó el mayor sin atreverse a dejar de mirarle
-¿Qué harás si digo que no?
-No lo haré, iré a donde sea que pretendan dejar tirado mi cuerpo sin poner resistencia- contestó sin creer la tranquilidad con la que lo decía
-… ¿Cómo puedes mirarme de esa manera?- susurró con voz herida- Después de haberme mentido de esa maldita manera. Siempre supe que ocultabas algo pero saber que jugaste conmigo tan sólo como coartada para ganar la confianza de…
-¡No!- le interrumpió poniéndose de pie- juro por dios que tú nunca fuiste parte del plan, simplemente eres maravillosa y cuando menos lo imaginé caí rendido ante ti, llevo tanto tiempo torturándome sin saber qué hacer con esto que siento por ti, intentando entender porque a pesar de que Margaret fue la que me hizo ver colores por primera vez, fuiste tú en realidad quien les dio vida*
-No puedes esperar que te crea tan fácilmente. Tienes una esposa y con ella planeabas volar en pedazos el único lugar al que puedo considerar un hogar…- susurró conteniendo las lágrimas a duras penas
-Haré lo que sea para ganarme tu confianza cariño, pídeme lo que quieras y lo tendrás- declaró atreviéndose a tomarle de las manos
-… quiero que obedezcas a Johann- el rubio sólo asintió frenético -¿Eres consciente de que si colocas esas bombas estarás causando la muerte de tu esposa?
-Lo sé- dijo dejándose caer de rodillas, su pecho dolía, sus ojos se anegaron en lágrimas pero no podía seguir mintiéndose, no quería seguir haciéndolo
-Y después me ayudarás a deshacerme de Johann, sabes bien que HYDRA nunca llegará a ningún lado si él sigue al mando- ahí está de nuevo, la mujer que todo el mundo creé una perra despiadada pero que con él es dulce y vulnerable
-Lo haré, sólo por ti- susurró abrazándose a sus piernas, sabía que estaba traicionando todos y cada uno de sus valores y principios, pero por ella y el pequeño que crecía en su interior lo haría.
She got blood cold as ice
And a heart made of stone
But she keeps me alive
She's the beast in my bones
She gets everything she wants
When she gets me alone
Like it's nothing
She got two little horns
And they get me a little bit
Hace tres días una inmensa explosión arrasó con la base militar de New Jersey, donde la Reserva Estratégica luchaba por crecer y expandirse, la catástrofe fue tan grande que nadie dentro de aquel bunker sobrevivió. Steve sintió un enorme dolor en el pecho al sentir que la castaña a quien había jurado proteger y amar había muerto, pero al mismo tiempo se sintió… liberado.
-Aun estas a prueba- susurró Hildr dejando caer el periódico junto al rubio quien desde su regreso de New Jersey no tenía permitido salir de dicha habitación.
-Lo sé, Johann dijo que él se haría cargo de evaluar mi lealtad- contestó el ojiazul mirándola con anhelo
-Tu hijo es lo único que te mantiene con vida por el momento, nadie confía en ti y será muy difícil que lo vuelvan a hacer- declaró la de ojos escarlata acercándose
-Mientras sigan confiando ciegamente en ti no deberíamos preocuparnos- dijo tomando la mano que le fue tendida y besó con ternura sus nudillos
-Yo no soy Johann, si vuelves a engañarme no quedará nada de ti para ser recordado, ¿lo entiendes?
-Lo entiendo…
She got horns like a devil
Pointed at me and there's nowhere to run
From the fire she breathes
She got horns like a devil
Pointed at me and there's nowhere to run
From the fire she breathes
She got horns like a devil
Pointed at me and there's nowhere to run
From the fire she breathes
Steve no se reconoce, ya no queda en él nada de la ciega esperanza que le guiaba cuando aceptó aquella misión en septiembre de 1971. En ocasiones se asusta de sus propios pensamientos, pero eso dura tan sólo unos pocos segundos, mira a su alrededor, analizando todo lo que han logrado y se dice que todo ha valido la pena, piensa en el cómo su antes tan bien valorada moral se retorció de tal manera que no hay cosa en el universo mismo que pueda ser más importante que la “perra desalmada” que ahora dirigía HYDRA con mano de hierro.
Mientras mira a Hildr con su hermoso vientre de poco más de seis meses no puede pensar en otra cosa que no sea lo que estaría dispuesto a hacer por ella, es consciente de que se ha vuelto un perro de ataque y no tiene ningún problema con ello.
Horns like a devil
Pointed at me
She got two little horns
And they get me a little bit
She got two little horns
And they get me a little bit
FIN