¿Cómo describir esta sensación que le agobia cada mañana? ¿Cómo podría verbalizar el sentimiento que oprime su pecho cada día al despertar? Y aunque lo hiciera nadie podría entenderlo, porque él es el joven que lo tiene todo, es un genio en toda la expresión de la palabra, famoso a nivel mundial y una enorme fortuna que heredará, con por lo menos una docena de personas cortejándole, una madre devota, unos padrinos amorosos, amigos leales…
Simplemente a ojos del mundo él no tendría motivos para sentirse así ¿Cómo podría alguien tan privilegiado sufrir depresión?
Can you hear the silence?
Can you see the dark?
Can you fix the broken?
Can you feel, can you feel my heart?
De nueva cuenta observa el techo de su habitación fijamente preguntándose si vale siquiera la pena realizar el esfuerzo de levantarse e iniciar el día, son las diez en la mañana y el silencio a su alrededor es terriblemente abrumante, recordándole lo sólo que está. Un suave suspiro escapa de sus labios y traga saliva en un intento de contener las lágrimas que comienzan a acumularse.
-Puedes hacerlo, un paso a la vez- se dice a si mismo las palabras de aliento que suele decirle la terapeuta que ve a escondidas una vez al mes porque Howard no cree en “esa basura de la psicología”.
Can you help the hopeless?
Well, I'm begging on my knees
Can you save my bastard soul?
Will you wait for me?
I'm sorry, brothers, so sorry, lover
Forgive me, father, I love you, mother
-Son sólo sueños- repite mentalmente como un mantra mientras se levanta de la cama y se dirige al baño.
Nuevamente en el espejo le recibe una versión de si mismo que le desagrada, su piel está reseca y más pálida, lo que hace que las ojeras luzcan de un morado aún más intenso, sus labios están abiertos de tanto morderlos cuando la ansiedad comienza a sobrepasarlo.
- ¿Joven Anthony? - la voz de Jarvis se escucha seguida en un par de toques en la puerta
-Estoy en el baño Jarv…
-Entiendo, el desayuno está servido y los Sres. Rogers están aquí- le informa el mayor
-… ya bajo- las lágrimas escapan de forma silenciosa, le espera un día más de fingir que no está completa e irremediablemente roto.
Can you hear the silence?
Can you see the dark?
Can you fix the broken?
Can you feel my heart?
Can you feel my heart?
Se encierra en su habitación y suelta un largo suspiro de alivio, logró sobrevivir un día más sin que nadie notara lo mal que se siente. Se ha aislado de todos, ni siquiera sus antiguos amigos logran acercarse lo suficiente y en ocasiones ya no sabe si le aterra más el permitir que se le acerquen o quedarse completamente solo al final, es difícil pero la única vez que se abrió al respecto todo terminó terriblemente mal; cuando todo inicio sus amigos simplemente no comprendieron que pudiera sentirse de esa manera al tener todo al alcance de su mano así que acudió a Steve Rogers, su padrino le escuchó atentamente y después, creyendo que le ayudaría decidió hablar con su padre… Ese día fue la última vez que llamó a Howard papá, porque algo dentro del joven Stark se rompió después de tener que soportar sus gritos y palizas por ser un “estúpido niño ingrato y caprichoso”.
El castaño entra en el cuarto de baño y se desnuda con prisa para realizar su ritual de todas las noches, en la regadera su piel se torna rojiza después de tallarla siete veces asegurándose de no dejar un solo sitio sin limpiar, cepilla debajo de sus uñas hasta sentir que están lo suficientemente limpias, y aun así al salir sigue teniendo la sensación de suciedad que nunca desaparece. Sin poder hacer más se pone la ropa de dormir y se recuesta resignándose a lo que viene.
I'm scared to get close, and I hate being alone
I long for that feeling to not feel at all
The higher I get, the lower I'll sink
I can't drown my demons, they know how to swim
La cama es cómoda, muy suave y tiene un tenue aroma a rosas silvestres, cuando abre los ojos ya sabe que él está de pie esperándole. Como cada noche un hombre de cabellos tan claros como madre perla, piel cremosa y ojos rojo escarlata le sonríe ampliamente mostrando sus filosos colmillos.
-Bienvenido a casa min mane*- susurra el albino acercándose para tomar su mano y el otro siente las afiladas garras negras rozar su palma mientras sus nudillos son besados.
Tony no hace nada para detener sus acciones, hace dos años que soñó con él por primera vez y sin importar el tiempo aún se estremece ante el toque del hombre, pues le ha visto tomar esa horrenda forma neblinosa, tan oscura como la boca de un lobo y masacrar gente para colocar los cadáveres a sus pies, “tributos a mi luna” suele decirle.
-Estás perdido en tus pensamientos querido- le susurra ayudándole a ponerse de pie
-Lo siento- susurra el castaño con voz queda mientras se deja guiar al tocador donde el otro le hace tomar asiento y comienza a cepillar su cabello con delicadeza mientras Tony admira su bello reflejo, su cabello cae en rizos hasta la altura de sus hombros, su piel color caramelo y mejillas sonrojadas, ojos brillantes y llenos de vida.
I'm scared to get close, and I hate being alone
I long for that feeling to not feel at all
The higher I get, the lower I'll sink
I can't drown my demons, they know how to swim
Lo chocante de estos sueños no sólo es lo reales que se sienten, sino también lo cómodo que está aquí. La mansión de estilo gótico tiene el perfecto balance entre ser acogedora y atemorizante, y a pesar de estar aislada por el neblinoso bosque que les rodea y completamente vacía a excepción de ellos dos, extrañamente se siente como un hogar.
-Todo está listo Anthony- le indica el otro sonriéndole de esa manera que le hace cuestionarse si realmente le sigue temiendo.
-Yo… Abbadon…- la voz le tiembla mientras los recuerdos de los gritos de terror y el baño de sangre, las imágenes de cuerpos desmembrados, vísceras expuestas y huesos triturados inundan su mente.
-Todo estará bien, min kjaerlighet*. Esta será la última vez, lo prometo- susurra acariciando su mejilla con ternura.
-No quiero, tengo miedo…- solloza el castaño sin poder contener las lágrimas, e intenta ponerse de rodillas para suplicar, pero el más alto lo evita.
-Lo sé, y lo siento amor, pero es necesario… No te expondría a eso si no lo fuera- jura mirándole con pesar- Tengo que salvar tu alma.
Y entonces sucede, siente como pierde el control de su cuerpo y no puede hacer otra cosa más que observar mientras es guiado a aquel oscuro sótano. Las trece figuras que sollozan de rodillas en el piso de fría piedra son apenas visibles a la luz de las cinco velas negras que indican cada una de las puntas del elaborado pentagrama en el cual deberá colocarse, Abbadon lo ubica en su posición habitual donde es inevitablemente consciente de todo lo que le rodea, el calor hace que su piel se perle en sudor, la extraña mezcla de la sal, salvia y madera de tejo inunda sus fosas nasales. El rubio acaricia su rostro una última vez y le quita el suave camisón dejándole completamente desnudo para proceder a dibujar las runas sobre su piel acompañado de aquel extraño cantico en latín y él llora en silencio deseando poder dejar de sentir por completo.
I'm scared to get close, and I hate being alone
I long for that feeling to not feel at all
The higher I get, the lower I'll sink
I can't drown my demons, they know how to swim
Tony despierta, pero esta vez todo es diferente, el joven es consciente de un suave y electrificante picor que recorre cada milímetro de su piel, toma asiento en la cama y mira sus manos como si buscara reconocer sus propias extremidades, inhala profundo sintiendo aun el ferroso aroma de la sangre en sus sueños y una sonrisa escapa de sus labios.
-Bienvenido de vuelta, min mane*- susurra una potente y gutural voz.
El aludido mira hacia el lugar de donde proviene el llamado y se encuentra una extraña figura con la apariencia de fuego verde rodeado de un espeso humo que revolotea como si tuviera vida propia.
- ¿Cuánto tiempo estuve encerrado? - murmura el joven poniéndose de pie, se mira al espejo y si bien su aspecto es ligeramente diferente puede reconocerse de inmediato.
-Poco menos de tres siglos- contesta la sombra tomando la forma de Abbadon- tardaste mucho en encontrar tu camino de regreso.
-La magia que me venció fue poderosa, no podía recordar absolutamente nada, ni siquiera cuando iniciaste con los ritos…
-Lamento haberte hecho eso, tenías tanto miedo y me rompía el corazón- murmuró tomando su mano con delicadeza, como si temiera su rechazo.
-Lo sé, puedo sentir tu corazón- dice el ser que anteriormente fue Tony acercándose y coloca su mano sobre el lugar donde debería estar el latido del corazón de Abbadon… si es que los demonios tuvieran uno.
-Estoy listo para servirle hasta el fin de los tiempos, su majestad- Abbadon se permite sonreír con alivio mientras se pierde en la profundidad de los ojos que hace eones le hechizaron por completo.
-Debemos anunciar a los infiernos que su legítimo señor está de regreso y recuperar nuestro trono, min sol*- el castaño sonríe y estira los dedos haciendo que sus garras crezcan y se tornen negras- pero antes, hay un mortal en esta casa que tiene una deuda pendiente conmigo.
-Déjame ayudarte, llevo tanto esperando poder vengar lo que ese imbécil te hizo en tu forma mortal…
-Lo siento beloved, pero tengo que darle esta lección personalmente a mi “querido padre”.
Can you feel my heart?
Can you hear the silence?
Can you see the dark?
Can you fix the broken?
Can you feel, can you feel my heart?
Son las tres en la madrugada del 31 de octubre, en la mansión Stark reina el silencio y la oscuridad, María y Jarvis duermen tranquilos en sus respectivas habitaciones hasta que un aterrador grito les despierta, intentan levantarse, pero están completamente paralizados, sus cuerpos no responden y no pueden hacer más que escuchar el llanto y suplicas de un hombre que evidentemente está siendo cruelmente torturado. Cuando todo por fin acaba parece que han pasado horas, pero el reloj marca apenas el paso de un par de minutos, corren a la planta baja y entran al estudio privado de Howard Stark esperando encontrase con una horrenda escena del crimen, pero lo único que les recibe es el cuerpo del magnate sentado ante su escritorio donde descansa un vaso con whisky y un puro a medias, lo único perturbador en el lugar es la expresión de absoluto horror en su rostro.
FIN