Capítulo 3
Después del momento embarazoso que pasó con Neville, Draco quiso centrarse en las pociones, pero le resultaba difícil porque su mente solo piensa en -¿Por qué sintió burbujas en el estómago? ¿Acaso es por lo que dijo Neville?- No lo creía, tal vez las pociones que a estado tomando le causaron el malestar, y por eso causó las burbujas justo después de que Neville dijo que le pediría quedarse para siempre en la botica, si tenía que ser eso, ya que él no tenía ningún sentimiento por el que fue su compañero, tal vez agradecimiento pero sería todo-, cuando Neville comentó que le pediría quedarse para siempre en la botica, con él, ¡CON ÉL!, eso lo dejo pensando, -¿Qué piensa Neville de mi?-, no podía ser algo malo si le dejo quedarse en su casa y trabajar ahí—¿Verdad?— Decía mientras se miraba su reflejo en la poción que estaba haciendo,—¿A quién le preguntas? Estás solo, deja de pensar en eso. Casi suenas como las tonterías que las jóvenes brujas decían, y te causaban gracia— Hablaba consigo mismo.
-----------------------
Unas horas más tarde…
Neville entró al taller viendo que Draco estaba concentrado embotellando lo último que quedaba de la poción—Draco es hora de irnos, saldremos al callejón para aparecernos—Decía mientras estaba recargado en la puerta
A Draco le tomó de sorpresa que Neville entrara, pero disimulo que no le importaba, y en ese momento recordaba que no tenía su varita para aparecerse solo, y por tercera vez en el dia maldijo al ministerio porque tardaba, podria meter una queja, pero en cuanto vieran de quien venía, seguro la quemaban, por lo que solo que quedaba esperar —De Acuerdo, solo embotellar estos últimos y todo estará listo—Decía mientras se apresuraba a terminar, pero sentía una mirada en la nuca, a donde quiera que se movia sentia que la mirada iba con el -¿Que demonios pasa con el?, por qué no puede comportarse como en Hogwarts y ser torpe y tranquilo
Por su parte Neville, le divertía como Draco trataba de ignorar su mirada, sabía que le incomodaba pero no podía parar de hacerlo, cuando Draco se giró y venía directo a él le dio espacio para que cruzara la puerta siguiendo el por detrás— ¿Listo?—Cuando Draco asintió se aparecieron, cuando aterrizaron, sintió algo de envidia al ver que Draco estaba normal, el trataba de mantenerse recto para no quedar en ridículo frente a Draco, pero nunca se acostumbra a aterrizar bien, por más que lo haga, cuando se recuperó miro a la entrada de su casa, y había una lechuza esperandolos, la cual voló sobre sus cabezas, para terminar en el hombro de Draco, al cual le estiro su pata para que tomara el sobre que tenía, pero sin apartar los ojos de ellos, lo cual hizo sentir algo nervioso a Neville -¿Cuánto tiempo estuvo esperando?- Pensaba.
En cuanto Draco tomó el sobre, la lechuza voló sin esperar nada, Draco sin poder esperar abrió el sobre, y venía una carta con su varita —“Estimado Sr Malfoy… Le hacemos entrega de su Varita, que el ministerios retuvo por motivo....”—Draco dejó de leer— No pienso siquiera leer esta carta llena de mentiras y mierda—Decía molesto mientras tomaba su varita y lanzaba un hechizo para quemar la dichosa carta—Ni siquiera fueron capaces de mantener su mentira de que extraviaron mi varita, solo son unas sucias ratas— decía mientras maldecía y golpeaba el suelo con los pies, como si se tratara de un niño haciendo su capricho. Neville no podía dejar de verlo y reirse, por lo infantil y tierno, que se miraba, aunque estuviera maldiciendo, cuando Draco le dirigió una mirada que prometía dolor, no pudo evitar regresarle la mirada con la sonrisa más inocente que pudo poner, lo que hizo que draco bufara y entrara a la casa.
Neville le siguió, y en cuanto lo vio dijo —Vamos, Draco, tienes que admitir que es graciosos, no seas aburrido—Draco se volteó y puso una cara de tragedia total -Merlin, protégeme- Draco se acerca amenazante a él, y él comienza a dar pasos hacia atrás, hasta que resbala, y al caer siente como le lanzan agua, abre los ojos y mira a Draco con una sonrisa cínica, y la varita apuntandole, le había lanzado un Aguamenti, por un momento ambos se quedaron quietos, hasta que Draco comenzó a reír
—Tienes razón, es gracioso— decía con su sonrisa cínica, Neville vio su oportunidad, y lo tacleo, así ambos comenzaron a jugar en el suelo, sin varitas, sin maldad, y sin presiones, únicamente divirtiéndose, cuando ya habían jugado suficiente, y Draco está sobre Neville, proclamándose el campeón del momento, fue en ese momento que Draco se dio cuenta que no se había sentido tan relajado desde que la guerra había acabado, cansados ambos se sentaron en el suelo—Gracias—susurro Draco
—¿Dijiste algo?—Contesto Neville
—No lo repetire, si no lo escuchaste no es problema mío— Dijo girando la cara para no verle
—Lo escuche, solo queria saber si había sido real, o imaginaciones mías— Decía con una gran sonrisa— Aunque no entiendo por qué me agradeces.
Draco lo miró — ¿Por qué?, la verdadera pregunta sería ¿Por qué no agradecerte?—Decía mientras acercaba sus piernas a su pecho y se inclinaba— Me ayudaste cuando pudiste pasar de largo por el callejón, me curaste, me has alimentado y dándome un lugar donde dormir, y aun asi me diste tu confianza y me ofreciste un trabajo contigo—Suspiro y volteo a verle a la cara— Asi que solo aceptarlas, por que no las volverás a escuchar de mi. Neville lo miro, y le dio a entender, que aceptaba sus agradecimientos
—Tengo una duda—Draco lo miró con curiosidad— ¿A que te supo ese “Gracias”?— Lo dijo con una sonrisa en la cara
Draco lo miro y sonrio —Me supo a baba de Billywig*— Dijo mientras reia—Asi que solo tienes hasta las 12 de hoy para sentirte bien con mi humillación, aprovechalo, no muchos pueden decir que les agradecí—Todo quedó tranquilo de nuevo, ninguno decía nada o se movía, solo se quedaron ahí viendo la pared que estaba frente a ellos, hasta que un ruido, sorprendidos por el sonido, ambos se juntaron más, sin notar que sus manos se habían puesto una sobre la otra. Neville noto primero el contacto e iba a decir algo, pero otro ruido hizo que ambos magos sacaron sus varitas, y se dirigieran a donde los guiaba el ruido, notaron que el sonido venía del sótano, por lo que se posicionaron para atacar en caso de ser necesario, se miraron y empujaron la puerta, pero no había nadie, o eso pensaron ellos, ya que algunas cajas cayeron, ambos rápidamente se dieron la espalda por mero reflejo, conjugaron un—Lumos—No veían a nadie, o algo que era el responsable del ruido, hasta que Neville detrás de unas cajas miro una cola, le señaló a Draco y ambos se acercaron, Draco levito la caja, mientras Neville le apuntaba con su varita a unos—¿¡Gatos!?—gritaron al mismo tiempo.
*El billywig es un insecto nativo de Australia. Mide alrededor de un metro y veinticinco centímetros de largo y es de un azul zafiro muy llamativo. Del final del tórax sale un aguijón largo y fino. Quienes sufren la picadura de un billywig experimentan mareos seguidos de levitación.