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Hotel Santuary (AiorosXSaga Yaoi Lemon) AioSa por AMMU TEIKOKU YUDAINA

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Notas del capitulo:

Mis terrones de azúcar, aquí mamá terrón de azúcar publicando un nuevo capitulo de este fanfic que se es el favorito de la mayoría de mis terrones de azúcar, jajajajaja

Muchas cosas han pasado sin duda, les diré que por el momento me he estando sintiendo bastante feliz y tranquila con tantas cosas que he hecho.

Espero lograr hacer muchas mas cosas...

Pero también les diré una cosa... Este capitulo es un regalo de cumpleaños algo atrasado para el terrón de azúcar aleariesmushion, jajajaja se que ya casi vamos por los dos meses después de tu cumple, pero al fin a llegado.

Espero que lo disfrutes muchos.

Ademas de que te vamos a cantar la canción oficial de la familia terrón de azúcar mas abajo.

Igual debo decirles que con este y otro mas... terminaremos todos los regalos de Marzo, y por ende ¿Saben que significa?

Los semanales regresan este Lunes.

Así que estén atentos terrones de azúcar.

-¿Milo?- El susto le duró poco, lanza y suspiro tranquilo, ya notando y confirmando que si se trata de ese pelicerúleo, y no de nadie que pudiera causarle algún problema o ponerlo en un muy fuerte dilema.

-Vaya, vaya… Por tu rostro de susto, pensabas que iba a hacer alguien más…- Sigue dándole gracia esta situación, mientras se acerca al pelilila, y de esta forma rodearlo con su brazo por los hombros -¿Con quién hablas para asustarte de esa forma?- Curioso ante la situación del Doncel.

-Con un… Amigo…- Recuerda en ese instante que aún sigue en llamada, además que obviamente el rubio podría estar escuchando todo y eso le da mucha pena por alguna razón.

-¿Un amigo entonces?- Alza su ceja derecha, para sonreír al ver como esas pálidas mejillas se sonrojan por completo –Oh, bueno… ¿Eso significa que puedes salir el sábado? Ya que no tienes novio, ni una cita en sí- Un comentario fuera de lugar, solo para ver al mundo arder.

-¡¡¡¿EH?!!!- Estos comentarios le sorprenden al Doncel, que da hasta unos pasos hacia atrás, alejándose del pelicerúleo pues ahora le da cierto miedo y desconfianza.

Al ser muy inocente, Mu es fácilmente tomado como objeto de algunas bromas suaves por parte de este compañero de empleo, y el ayudante de cocina, sin embargo tampoco se pasan, pues podrían ganarse el enojo de los mayores que aprecian al pelilila.

Milo sólo quería avergonzar al otro, para así poder lograr algo que sin duda estará difícil de hacer, si es que Mu sólo se queda estático y sonrojado por sus palabras…

Y por otra parte, Shaka se encuentra muy atento escuchando todo lo que ocurre del otro lado de la llamada… Siente como la sangre le hierve, dándole intriga y una enorme molestia que se refleja en su ceño fruncido, por cómo ese sujeto que sólo escucha, pareciera insinuársele al chico que le gusta.

-Milo, basta de decir eso- Frunce el ceño, ahora si cubriendo el celular para que no se escuche la conversación -¿Por qué estás diciendo tonterías?- Se enfrenta a los ojos azul verdosos, aunque aún se mantiene lejos de ese pelicerúleo, mirándolo desafiantemente.

Nota la acción para ocultar el sonido brevemente y así saber que desea.

Y el qué lo está molestando ahora sin previo aviso.

Sus ojos azulados miran atentos al de cejas curiosas y rápidamente, suspira, para tomar otra postura, ya no tanto de burla, sino de una cierta tranquilidad y amabilidad.

-No aguantas ni una broma- Alza sus hombros para restarle importancia al asunto -Solo vengo a informarte que necesitan que vayas a reparar algo a la habitación de los Acuario y sabes que ellos no soportan que los hagas esperar- Alza el dedo índice, moviéndolo de un lado a otro, para sonreírle, como si se burlar de su cruel destino.

Casualidad que justamente estando hablando de esas personas por teléfono, en donde el joven que pertenece al país de la India, le advierta, y le pidiera que tuviera cuidado… Que esa familia también le podría hacer daño.

Debía ser una coincidencia, y también algo que sin duda pondrá de nervios al rubio…

Las esmeraldas miran atentas a quien le interrumpió momentos antes, con la boca ligeramente abierta y su cuerpo estático.

Comprende que es su trabajo, y aún debe obedecer esas órdenes…

No debería tener motivos para pensar que le harían algo malo.

¿O sí?

Un suspiro sale de sus rosados labios, cierra sus ojos, descubriendo el teléfono, para así poder volver a hablar con quién lo espera en la línea -Ehmm… Shaka… Tengo que ir a trabajar, ¿Podemos hablar después?- Claro que le entristece un poco, pero igual le confunden las palabras que el otro le dedico previamente.

Solo espera que no empiece a decirle de nuevo que puede ayudarlo en lo que sea… O necesite… Pues en primer lugar no puede ilusionarse con un apersona que solo ha visto de forma virtual, no conoce nada de él en sí…

Solo sabe que debe cuidarse de todos…

-Mu, ¿Estas bien?- Su primordial pregunta al no haber podido escuchar casi nada, salvo por pequeñas palabras que alcanzo a apreciar -¿Quién es Milo? ¿Qué tienes que hacer? ¿Te están amenazando?- Sus cuestionamientos unos más rebuscados y raros, que los anteriores, pero es su corazón inexperto y preocupado quién habla.

-Nada de eso, Milo es mi amigo, y debo volver a trabajar así que…- No termino cuando volvió a sentir al pelicerúleo casi pegado a él.

-No te preocupes seas quien seas, aquí te cuido a Mu, pero ahorita necesito robártelo, así que…- Y sin permiso alguno, invadiendo la privacidad y espacio del pelilila, cuelga la llamada, solo al apretar una tecla.

Claro que no dio ni siquiera oportunidad de despedirse a los dos que estaban hablando.

La manera de actuar de Milo, es bastante curiosa, y hasta rara ante los ojos de Mu, pues… Esté joven hombre, podrá ser muchas cosas, pero aquellas que no, es el de ser grosero con él, o tomar decisiones por los demás.

Claro que sólo habla por experiencias y vivencias propias, con este joven.

Aun así eso no evita que el pelilila se sienta molesto por este comportamiento, dándole un empujón al otro para apartarlo, sin importarle la diferencia de estaturas y edades, que son pocas en todo caso.

-¡¡¡MILO ESCORPIO!!! ¡¡¡¿POR QUÉ TE ESTÁS COMPORTANDO TAN MAL EDUCADO?!!!- Posa las manos en sus caderas, para ver desafiante al otro, con sus cejas en forma de punto, bastante juntas, y dejando en claro que no está nada feliz por esto ¡¡¡¿QUÉ TE PASA?!!! ¡¡¡¿QUIÉN TE DIO EL DERECHO DE COLGAR ASÍ MI TELÉFONO?!!!-

Es clara su molestia, cualquiera lo estaría si están hablando con alguien que les llama la atención, que intentes mantenerse alerta por cualquier cosa, para así no ilusionarte, y llega algún amigo de la nada y los interrumpe de esa forma.

Aunque es según por una orden en sí, pero… Aun así es bastante curioso.

Sin embargo para el pelicerúleo, al ver este comportamiento en Mu, solo lo logra apreciar, y su semblante sonriente y burlón, se relaja para dar paso a uno de seriedad y desolación.

Algo que ha estado viviendo últimamente… Desde que… El dolor en su corazón apareció.

-Lo siento Mu, pero tengo que hablar contigo…- La seriedad en sus palabras, que repentinamente hacen sentir el ambiente tan diferente a lo que se estaba presentando.

Dejando que el Doncel con herramientas algo pesadas se quede impresionado y curioso por este comportamiento repentino, y cambio de aptitud.

Ante sus esmeraldas ese semblante no augura nada bueno.

Tanto es ese pensar, que ha bajado su celular para guardarlo entre sus ropas y tomar la caja de herramientas, para acercarse al otro.

-¿Qué te sucede?- La angustia por saber que le ocurre a un amigo va directamente a reflejarse en su rostro.

---En la India---

Sin duda con lo que acaba de pasar, sólo le hace pensar en mil cosas a la vez, preguntándose internamente si algo malo le está ocurriendo al Doncel de sus sueños.

Por qué si, comprendió que se enamoró perdidamente a simple primera vista virtual de alguien que nunca había visto antes, pero eso no le importa en lo absoluto.

Quería mantenerlo a salvo, protegerlo del mal que esa hotel representa.

Dándose cuenta que el haberle hablado, fue a causa de la terquedad de su propio corazón y la espontaneidad que pocas veces deja ver, pero que en esta ocasión no niega que necesitaba hacerlo.

El saber si puede hacer algo para que nada malo le pase, el cuidar a ese indefenso y hermoso Doncel como lo considera.

Pero no sólo por eso está como animal enjaulado, caminando alrededor de su cama, apretando su teléfono y pensando si sería buena idea volver a llamarle o no.

No quiere verse entrometido, pero su corazón le grita, como su mente que algo malo está por pasar, y más al a ver llegado alguien a importunar el momento tan hermoso y preciado que se estaba dando... Aunque en sí, se llegó a tornar algo incómodo para el pelilila por su insistencia.

Y que si esa interrupción no se hubiera dado, posiblemente le habría dejado muy en claro sus intenciones.

Si, Shaka está dispuesto a dejar en claro cuáles son sus motivos para con Mu.

Puede que sea menos intenso que Aioros, pero también es capaz de demostrar que va enserio, contra quién sea por ese Doncel.

Está preocupado, celoso, angustiado, un loco enamorado que solo cree que le harán daño de forma colateral a quién su corazón añora ya tener.

-No puedo esperar más- Se detiene en seco, con sus manos detrás de su espalda, sosteniendo el celular de última generación, apretando sus labios… Con los zafiros brillantes por la decisión que ya no sacara de su mente.

Sus pies firmes, se dirigen hacia su escritorio, donde su laptop encendida se encuentra… Su mano libre teclea un poco, el reflejo de la pantalla es el único destello de luz artificial…

Comienza a dar vida a su idea más descabellada se le pudiera ocurrir…

-Lo siento padres, pero… Si mañana no me dan una respuesta a mis dudas, tendré que tomar diferentes medidas- Y con la mirada seria, su ceño fruncido y solo pensando en una sola motivación, deja ver en su pantalla vuelos comerciales hacia Grecia.

Sin duda alguna ha tomado una decisión importante, que va a causar tremendo impacto a alguien que no lo espera.

Eso si no se cuenta la reacción de sus padres al saberlo.

---Grecia (Hotel Santuary)---

Los dos jóvenes empleados de ese hotel, que van bastante concentrados en la conversión que mantienen en su andar al lugar donde marca el final de su jornada.

-¿No has vuelto hablar con él?-

-No, no lo he hecho-

-Tú eres el único que podría hacerlo entrar en razón-

-Milo, yo no tengo ese poder…- Lo mira con un rostro preocupado y devastado -Camus me dejó de hablar… Solo porque me volví amigo de Saga-

-No debiste dejarlo solo… Mi Camus no es como su familia- El tono del pelicerúleo se escucha angustiado, y su mueca muestra los dientes, por la desesperación, respira agitado, deseando que también a crean en la inocencia de uno.

-Yo también lo creía, pero… No tiene otra opción- Lanza un suspiro, llevando la caja de herramientas sujeta por ambas manos, dirigidas hacia el frente -Nunca estará contra ellos, a pesar de que deba cumplir todos los deseos y obligaciones que le indiquen-

-¡¡¡NADIE SE PUEDE CASAR SIN AMOR!!!- Las lágrimas se apoderan de sus ojos azulados, para detenerse en seco y bajar la mirada, temblando, crispados sus puños.

A unos centímetros, Mu también se detiene, admirando lo que acongoja a su buen amigo, que como desearía ayudarlo, pero él ya es una causa perdida.

-Muchos lo hacen… Y no puedes odiar a Aioria por lo que… Esa familia…- Solo se puede referir a ellos de manera despectiva -Han decidido y Camus… Te ha demostrado en más de una ocasión que no quiere nada contigo…- No quiere ser cruel con el pelicerúleo pero, sin duda necesita que le abran los ojos.

-¡¡¡¿POR QUÉ LOS DEFIENDES TANTO?!!!- Levanta la mirada para enfrentarse a las esmeraldas que están en completa calma -¡¡¡SOLO HAN VENIDO A MOLESTAR!!!-

-Los Acuarios les están tendiendo una trampa, sabes que ellos no son de fiar…- Le intenta explicar lo más rápido y tranquilamente posible, deseando que ningún huésped se queje por los gritos del otro.

-Claro, culpar los a ellos de todo está mejor, ya que… Si esos visitantes idiotas ayudan a tu amigo Saga a lo que sea que quiera, no te importa nada mas- Frunce el ceño… Acercándose más al pelilila, dándole igual que sea su amigo.

-¿Milo?- Se sorprende de esto, pues esté también conoce parte de lo que acontece en esa familia contra el peli azul -¿Cómo puedes decir algo así? Saga, también ha sufrido, no es justo-

-Claro, claro… Si, Saga sufre, se hace la víctima, si tanto dolor y sufrimiento le causa esté lugar debería irse, empezar de nuevo… No estar dándole lástima a los demás- Sus palabras se escuchan demasiado crueles, pero está hablando una parte de él, aquella que está llena de enojo y odio… En donde ya no sabe que más hacer.

Pero debería tener cuidado en como habla de alguien que el Doncel aprecia, pues no se detendrá para darle su merecido.

Mu sin darle tiempo al otro en reaccionar, alza su mano derecha, tomando vuelo, dejando que la caja de herramientas sea sostenida por la libre…

Y solo de repente escuchar el sonido de una mano chocando contra el rostro de alguien más.

Su ceño fruncido, sus ojos furiosos y su mano que ha dejado bien marcada la bofetada en el rostro del que no mide sus palabras.

-¡¡¡TÚ TAMBIÉN ERAS AMIGO DE SAGA, PERO COMO DICES, PREFIERES SER ALIADO DE ALGUIEN… QUE SOLO JUEGA CONTIGO!!! ¡¡¡NO CULPES A LOS DEMÁS POR TUS ABSURDAS ACCIONES Y CONSECUENCIA!!!- Pocas eran las veces que este chico reacciona de esta forma, pero… Le colmo tanto la paciencia esas habladurías del pelicerúleo, y más cuando este sabe gran parte de la verdad.

Y aun así prefiere quedarse de lado de alguien que nunca le ha demostrado de forma concreta algún sentimiento de amor, o mínimo amistad.

Sentir la bofetada y esas terribles verdades, lo han herido profundamente.

No está bien jamás tomar partido en algo que no les corresponde, cada persona involucrada ve solo un lado, dependiendo del por qué se estén metiendo.

Mu solo ve como víctima a Saga.

En cambio Milo, ve como víctima a Camus de su familia y por ende, víctima de los ojos de odio de varios empleados que conocen lo que ha ocurrido y sólo lo tachan de maldito, cuando todo ha sido culpa de sus padres y hermano mayor… Sólo sigue órdenes en sí.

Enfureció también, alza su cabeza, con la mejilla roja, los ojos furiosos contra el Doncel… Que en ese momento desearía que no tuviera esa condición para regresarle el golpe.

-Bien, bien, bien… Ambos idiotas deténganse- No se espera por nada del mundo que alguien, quien siempre disfruta de peleas y discusiones se ponga como medidor de algo así.

Su posición en medio de ambos chicos, cruzado sus brazos, y mirándolos de forma malhumorada.

-¡¡¡NO TE METAS EN ESTO DEATH MASK!!!- Habla fastidiado el pelicerúleo, que no quita su mirada del pelilila.

-Me meto porque ambos son unos estúpidos. Estar peleando en el hotel, que poco quiere esta gente, para correr a alguno de ustedes- Mira al segundo mayor en esta situación -Y si mal no recuerdo, a ti te querrán despedir de inmediato, al menos el mocos aquí- Señala con el pulgar al de ojos verdes -Sirve de algo, pero tú, te has puesto en evidencia en querer obtener el corazón de alguien que de verdad no te quiere-

Es un secreto a vivas voces, que Milo desde que ingresó a trabajar en el hotel, se perdió en el amor hacia el menor de la familia usurpadora, y desde que pudo, comenzó a defenderlo de toda palabra que lo difamar a, o las comparaciones con su familia, simplemente no permitiría que algo así sucediera.

Pero es verdad, es cierto… Camus jamás le dio motivos para creer que podrían estar juntos… Siempre ha tenido en su mente los ideales de su familia, en que si planea enamorarse o casarse en un futuro, debe ser con alguien que pueda ser aliado de su familia…

Aunque en sí, no le tome importancia, sólo sigue la corriente, para no molesta a sus progenitores…

-¡¡¡CÁLLATE!!!- Alza su voz contra el asistente de cocina.

-Ja, ¿Duele saber la verdad?- Lo toma en son de burla, para que las cosas estén calmándose en cierta forma. – No lloriquees, ni culpes a los demás… A mí solo me interesa que me paguen, así que si quieren estar discutiendo y golpeándose, háganlo dónde no fastidie a nadie- No se sabe si es una persona buena que actúa de forma mala, o una persona mala que intenta hacer algo bueno, pero este peli morado es alguien que no tolera tantas estupideces juntas.

Pero si bien está influenciado por que desprecia algo las injusticias en cierto modo, aun así no se metería al fuego por nadie.

Claro que esto hace enfurecer al pelicerúleo que… Con sus puños crispados, entiende que si llegara a enfrentarse contra el sujeto de escasa barba, tendría las de perder… Y si le devolviera el golpe a Mu, no estaría bien visto aunque se lo merece por reaccionar así a una disputa verbal.

No lo piensa más, dando media vuelta y así darles la espalda a ambos, para irse aún furioso por cómo ambos están contra Camus…

Pero está viendo la situación demasiado rebuscada y mal. Es lo que provoca un corazón enamorado.

-Ambos son unos imbéciles- Y sin más prosigue a alejarse, enojado apretando sus dientes, y de paso hacer una seña con el dedo medio a ambos.

-Ay, qué bonito…- Pará el peli morado esto le da exactamente igual, contestando la seña igual, para posar de nuevo su vista al otro que solo está mirando al suelo, como si estuviera arrepentido de sus acciones -Sin duda la amistad o lo que sea, los hace unos idiotas por completo- Niega con la cabeza, para dirigirse hacia la cocina.

-No debí… Haber hecho… Eso…- Mu se encuentra en una encrucijada que provocó por reaccionar de forma pésima ante los reclamos del otro.

-Ay, ya… ¿Pará qué te arrepientes? Ya lo hiciste, acéptalo y listo… Mejor ve a obligar a tu amigo a que cene, o coma, o lo que sea… Que Aldebarán le tiene algo rico para que trague, y tú eres al único que no echa a la primera.

Rápidamente le da esta información para seguir su camino, y no darle mayor importancia al asunto.

Y bueno, así queda el Doncel que acaba de cometer un error, que los motivos no lo justifican de ninguna forma, el darle una bofetada a alguien que en sí, no lo estaba atacando a él.

---Sala de calderas---

Aunque está con su dolor y decepción, no podía quedarse todo el día lamentándose, y menos con la montaña de tareas que debía realizar.

Tuvo que comer a la fuerza, ese problema de pensar que no necesita alimentarse bien para cumplir con todo, vendrá a cobrarle factura muy pronto…

No quiere ser una carga para nadie. Pero… cree que si trabaja sin parar, no pensara en todo el pesar y crueldad que vive constantemente.

Le espera una larga noche, tiene tantos deberes aún, que no va ni por la mitad.

Le están cumpliendo las amenazas, los deseos de hacerlo aún lado para que no se acerque a Aioros, y no importune el plan que ya está hecho trizas sin haberlo intentado correctamente.

Saga está decidido a alejarse de ese castaño, le rompió el corazón, ha pensado de más y muy mal de él…

Ha derramado tantas lágrimas… A veces cree que está luchando una batalla en vano.

Se promete cada día que debe ser fuerte y soportar el hoy, un día a la vez… Solo eso, y tal vez pueda tener una manera que le ayude a salvar su único recuerdo familiar, pero… Cada instante está más lejano, y puede que ya no quede tiempo.

Que al final… Cuando todo esté desecho, y ningún ladrillo quede en pie…  tal vez… Y sólo tal vez, sea el momento en él ya no pueda soportar más...

Desea ser fuerte, pero, el sentimiento de que alguien que le provocó sentimientos tan extraños y hermosos, que le  hiciera sonreír y sentir que la vida no era tan cruel…

Le decepcionó, pensando que solo se burlaría de él al grado de obtener su corazón para jugar con su cuerpo y dejarlo en una peor situación.

Saga solo está atando cabos de forma desordenada y cruel… Refugiándose de mala forma en sentimientos negativos, para no ser más herido de lo que ella está.

Tantos motivos que causan su malestar… Que si estuviera diagnosticado, más que una depresión es lo que le atormentaría…

Sin embargo, aunque sus lágrimas caigan y su rostro manchado de hollín, y cenizas se presente… Debe aún mantenerse en pie, para no dejarse vencer…

Aún se aferra a una pequeña ilusión, en que le dicta que todo podría estar bien, pero… Que no puede dejar de pensar en esos ojos color de un bosque profundo, escuchar esas palabras que le dedicaban un amor que no cree merece.

-Solo… Aléjate de mí… ¿Es tanto pedir?- Pregunta con una voz dolida, y sus lágrimas cristalizando la vista, mientras sigue llenando la caldera del carbón necesario para que se mantenga cálido el hotel, pues todo está empezando a enfriar.

Adiós a los calores, hola a los días fríos e intensos.

El escuchar de la puerta abrirse detrás de él, no lo saca de sus pensamientos del todo, imagina muy bien quién puede ser, ya que casi nadie baja hasta allí…

Solo no quiere ver a ese amigo que hizo algo que no le agrado para nada.

Prepara una cita que resultó en fracaso, es algo que no sabe si podría perdonárselo a Mu.

-Saga… Aldebarán me pidió que… Por favor vayas a comer algo…- Es cuidadoso en sus palabras, pues ya sabe que ha ido demasiado lejos con su pensamiento de que su amigo sea salvado por el amor.

No existe respuesta de parte del decepcionado y enfadado peli azul que sigue con su labor de palear los pedazos de carbón y arrojarlos al fuego.

Entiende que no le responderá, pues sigue molesto con él, y no lo puede culpar por eso… Si hubiera estado en su lugar, estaría igual o peor.

Sin embargo no se puede dar por vencido ahora mismo, y más al verlo tan mal.

-Si no quieres hablar conmigo…  Está bien, solo ve a alimentarte por favor… Amigo, y…- Baja su mirada, sujetando su brazo derecho, cargando algo de culpa -Lo siento, no debí creer que Aioros te haría feliz, o algo así… Yo… Ni siquiera sé en qué estaba pensando solo… Creí que sería tu felicidad, me equivoque y…- Se le escapa una lagrima, por el sentimiento de culpabilidad que tiene en su corazón -No me odies, por favor…-

El peli azul… difícilmente puede estar tan molesto con alguien que considera un buen amigo… Que si bien, sus interacciones antes de que ese pelilila entrará a trabajar allí, fueran algo mínimas, no significa que no lo quiere como su mejor amigo y posiblemente el único en este punto de su vida.

Aunque si viera bien a su alrededor, se daría cuenta que tiene más.

Pero, solo está decepcionado de que le hiciera esto, cuando bien pudo haber sido también utilizado.

Si saga tiene un nivel de inocencia, Mu tiene más, y eso logra hacer que no vea que las personas a veces que aparentan ser buenas, pueden llevar malas intenciones…

Detiene el trabajo, suspira… Su cuerpo tiembla por tanto que conllevan sus deberes, y el esfuerzo para hacerlos.

Piensa que si llegan a hablar, podrían… estar bien, aunque sea ellos dos… No podría odiar a Mu…

Ha estado para él, en tan corto tiempo que no quiere perderlo.

Se gira para verlo, sin importarle sus ropas sucias y andrajosas, cuál cenicienta de cuentos de hadas…

-Mu, lo que hiciste no fue…- No continuó, pues nota los brazos desnudos de su amigo, que los observa, y de inmediato frunce el ceño en angustia y preocupación total -¡¡¡¿QUÉ TE PASO?!!!-

La desesperación comienza a reinar en su mente, pensado en mil cosas… Las marcas de ser sujetado por los brazos con tal fuerza, solo lo había visto en una sola persona…

En él mismo frente a un espejo, al ser más joven y maltratado…

Su idea se va directamente en que si no pueden hacerle peor daño a él, podrían herir a su único amigo para darle una lección, y eso no puede permitirlo.

Notas finales:

Buenos días, tardes, noches, ¿Que hora es? ¿Quién me ha robado el reloj? ¿Como están mis terrones de azúcar?

Yo me encuentro super bien, ufffff...

Creo que ya casi no les he compartido mucho de mi vida, bueno...

Les diré que ya aprendí aplicación de uñas con dip y también el gelish, espero en algún momento logre hacer algunos diseños de los preciosos dorados de alguna forma, que sean bien bonitos jajajaja

Pero aun me falta bastante practica lo iré haciendo de a poco eso si.

También, que... Debemos cantarle la canción oficial de la familia terrón de azúcar a aleariesmushion, espero que lo disfrutes mucho.

Un día feliz para ti, hoy e tu cumpleaños si que si, felicidades aleariesmushion, tu cumpleaños si que si.

Un día feliz para ti, hoy e tu cumpleaños si que si, felicidades aleariesmushion, tu cumpleaños si que si.

Saben algo... Este Fanfic, tendrá muchos dolores en sus corazones, Saga y Aioros... Sufrirán mucho por su amor, las cosas no gran nada fáciles...

Pero no diré mas, me gusta ponerlos algo nervosos con esto.

Sin mas espero que pasen un hermoso sábado y espere a leer algo mas al estilo ShaMu muy pronto. 

Y que los semanales regresan, aunque sea una semana, también con los resultados de las ultimas votaciones y también otras mas, jajajaja

Tengo que ir preparad mil cosas, pero disfruto hacerlos.

Les agradezco a todos mis terrones de azúcar por su apoyo, el hecho de que sigan aquí conmigo, esperando cada locurita con emoción siempre.

La verdad jamas podre terminar de agradecerles su mega apoyo, los mega quiero a todos.

Por favor sigan cuidándose, que ahora muchas cosas muy terribles y feas están sucediendo en este mundo tan difícil...

Los mega quiero, manténganse a salvo por favor.

Ammu se va. 


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