Especial
Después de aquel casto beso que compartieron Sanji y Law, ambos se separaron con una sensación de calidez en sus pechos, como si aquello fuera correcto en pensamientos del rubio y perfecto para el azabache.
-Law- Suspiro el nombre del contrario para luego tomar una pequeña pausa, pausa que le ayudaría a tomar valor para lo que estaba a punto de decir- En verdad me gustas- Le tomo de la camisa sin querer apartar su cercanía- Pero debo admitir que tengo miedo- Se mordió levemente su labio inferior en claro signo de nerviosismo y sobre todo de temor.
Temor a perder lo que tenía con el de ojos grises, temor de que las cosas no funcionaran y terminar con el corazón destrozado, temor a lo que le diría su padre si se enteraba del tipo de relación que se estaba planteando tener con aquel chico que le robo más de lo que pensó hace unos minutos, no solo le había robado el corazón, además se había encargado de robar el dolor que había cargado por años al sentirse insuficiente y no es que tuviera una muy mala autoestima pero a veces esos pensamientos le rondaban y no podía quitárselos de la mente.
-No debes de temer- Le acaricio la mejía mientras intentaba hacer que el rubio le mirara directamente- Si las cosas se dan entre nosotros es porque así tiene que ser, y si no se dan entonces buscaremos la manera de lograr que funcione- Le dedico una pequeña pero cálida sonrisa al menor, una de esas sonrisas verdaderas que muy pocas veces dedicaba a personas que no fueran su hermanita.
Aquellas palabras dichas por el de cabello oscuro logro hacer sonreír al de ojos azules, todo parecía posible en aquel momento.
-Intentémoslo- Fue la resolución del rubio luego de unos minutos de silencio. Y como toda respuesta por parte del contrario redujo el poco espacio que había entre ambos para rozar sus labios y así comenzar un suave beso que sería el inicio de su relación.
Sábado, 26 de mayo 2007 (Dos días después)
-Estoy en camino no me GRITES- Grito en contestación Sanji- ¡¿Como que no me estas gritando?! Se perfectamente cuando alguien me está gritando... Usopp contrólate llegare en cinco lo prometo- Colgó la llamada.
Por lo poco que había entendido el rubio, su mejor amigo había sufrido el ataque del menor del grupo es decir... Luffy.
Y por lo histérico que le escuchaba las cosas no habían terminado muy bien para el narizón.
Luego de unos minutos como había prometido llego a aquella casa que conocía tan bien como la suya propia.
- ¡SANJI! - Se le lanzo encima apenas abrió la puerta- LUFFY- Gritó/lloró- Se comió toda mi comida y mi padre está por llegar, además ensucio la casa al intentar atrapar a Ejercito- Le soltó para que pudiera entrar.
Lo primero que pudo observar fue los sillones tirados como si hubiese habido un atraco en la casa y no les importase por donde pasaran, y pudo ver a Ejército acostado en uno de los sillones, Ejército era el perro de Usopp, ambos lo encontraron, pero fue Usopp que se hizo cargo de él ya que Judge no le permitía tener animales en la casa. El porqué del particular nombre del can era porque a Usopp le gustaba bromear y decir que tenía un Ejército.
-Está bien- Se compadeció de su amigo- Ven, te ayudo a limpiar mientras tú ve a buscar algo para hacer la cena y así contentar un poco a Yasopp no creo sea muy difícil- Le sonrió para animarlo.
-Gracias Sanji- Esta vez lloraba de la alegría- Te he dicho que eres el mejor.
Corrió de su casa luego de decir aquello, debía apurarse para ayudarle al rubio, aunque en realidad el rubio le estaba ayudando a él.
Sanji ya se encontraba acostumbrado a situaciones como aquellas, sucedían más seguido de lo que parecía y siempre terminaba de la misma manera, Usopp le llamaba, él le ayudaba, Yasopp aparecía y tras entrar se daba cuenta de la situación, ellos intentaban todo para que el moreno menor no terminara regañado, cosa que nunca sucedía porque el mayor se divertía más por todo lo que ellos intentaban que enojarse por lo que había sucedido, además, por una extraña razón Shanks se enteraba de lo que hacía Luffy y la casa de Usopp volvía a estar llena de víveres, y todo volvía a la normalidad hasta que el monito volvía a hacer de las suyas.
Y para aclarar Shanks es el jefe de Yasopp y el autoproclamado padrino de Luffy, por lo que él se hace responsable del pequeño o bueno de todas las travesuras de esté, todo para encubrirlo y así el abuelo de Luffy (Garp) no le enseñaba a Luffy a respetar lo ajeno a base del puño de amor, como el mayor de los Monkey D. llamaba a las palizas que les propinaba a sus nietos cuando estos no hacían las cosas bien.
Mientras pensaba en lo divertido de la situación, se concentró en limpiar aquel desastre.
Pocos minutos después vio a su mejor amigo entrar lleno de bolsas, seguramente había utilizado sus ahorros para comprar esa cantidad de productos.
-He traído todo lo que creo es necesario, aunque no sé qué harás esta vez así que espero te sean útiles- Aunque se notaba por su respiración que se encontraba agitado por correr hablo con una rapidez sorprendente.
-Está bien Usopp, todo es útil- Tomo las bolsas para dirigirse a la cocina, ya había levantado todos los sillones y muebles caídos, solo hacía falta el barrer y limpiar un poco algunas cosas.
Usopp termino de limpiar los desastres de la sala dejado por su amigo, mientras tanto Sanji comenzaba a lavar y picar todos los ingredientes para la comida de ese día.
-Me alegra que hayas podido venir- Se sentó el moreno en una banca que había frente a la mesa donde el rubio se encontraba.
-Sabes que siempre vendré si me lo pides.
-Es que últimamente has estado muy ocupado, y en realidad por un momento me preocupe el que no pudieras venir- Y ante esa declaración el rubio se sonrojo, aun no le había contado a su mejor amigo sobre su relación con el azabache.
Y ante dicha acción, el de cabello rizado le miro.
- ¡NO! - Grito con sorpresa y alegría- ¿Con quién? A caso es Violet de la que te pasaste hablando todo el año pasado- Alzaba sus cejas pícaramente para luego hacer una cara de desagrado- Solo no me digas que es Pudding, ella te utiliza demasiado- Y aunque a veces no lo dijera en voz alta eso le dolía, porque Sanji era su mejor amigo y aunque el mismo se ponía en situaciones en que lo utilizaban, a él no le gustaba como algunas de las chicas se aprovechaban del rubio, aunque debía admitir que últimamente notaba que situaciones como esas ya no eran frecuentes y el rubio rechazaba con delicadeza hacer cualquier actividad que él no quisiese.
-Pudding-chan ha cambiado Usopp- Le miro con un cierto enojo casi fingido, y era casi porque, aunque no se tomaba tan enserio las palabras del menor le molestaba un poco el que hablara así de su amiga- Y no, no es ninguna de ellas dos.
-Pero no has negado el que estas saliendo con alguien- Sonrió orgulloso de su descubrimiento- Es alguien que no conozco- Entre pregunto y afirmo, y podía afirmar un poco aquello porque, aunque no habían estado juntos últimamente sabía que no había estado con nadie más que con su grupo de amigos.
-Yo no... -Intento negar, aunque sabía que el solo intentarlo era absurdo- Mejor dime cómo van tus avances con Kaya- Cambio de tema.
-Sanji- Quiso sonar a amenaza, pero sabía no había funcionado porque el rubio seguía como si nada- No cambies el tema- Frunció el ceño para luego suspirar con resignación- Esta bien- Cedió, si su amigo no quería hablar él no lo obligaría... por el momento- Pero hoy mismo se con quién estas saliendo- Sonrió con cierta arrogancia, sabía que podía lograr aquello o por lo menos obtendría un poco más de información de la afortunada- Y no vuelvas a mencionar ese tema, sabes que no le diré nada.
-Usopp por favor, todos sabemos que ambos se gustan, solo necesitan hablarlo, tal vez si le dices algo- Intento aconsejarle como ya muchas veces ha hecho, y es que era verdad, todos sabían de la atracción mutua que se tienen, pero Usopp no se atreve porque es alguien que siente no se la merece, piensa que Kaya es mucho para alguien como él.
Ahora que el de ojos azules lo pensaba Usopp y Nami eran los únicos de su grupo de amigos que tenían una beca para estudiar en su colegio, porque Kaya era una chica con dinero, y es que si él estaba en una clase social privilegiada Kaya le superaba, ella no necesitaba hacer nada para conseguirlo todo, y aun así se esforzaba por hacer sus cosas sola y sin influencia de nadie, caso parecido al de Vivi con excepción que Vivi es originaria de otro país además de ser de la nobleza, y por petición de la misma chica fue a parar al internado de su colegio que era el mejor de todo el país si se lo preguntaban a él. En el caso de Luffy no había que ser muy detallado, si su padre no quisiese pagar el colegio, lo haría su abuelo y de ser el caso que este también se negase lo haría Shanks, sin contar uno que otro amigo que sabía pagarían los estudios del pequeño chico, si este así lo quería.
-No lo hare Sanji, un día tal vez sea merecedor de ella, pero ahora no es el tiempo- Y el rubio dejo de insistir, porque en momentos como aquel es que debía dejar las cosas por la paz.
-Ya he terminado aquí- Presento la cena para ese día. Se había esforzado como siempre que preparaba uno de sus platillos- Ahora vamos a pensar que le diremos a tu padre- Sonrió como si no hubiesen tenido esa charla.
Ambos jóvenes reían, hasta hace apenas unos minutos tanto el moreno como el rubio habían terminado de lavar los platos y limpiado lo poco que ensuciaron, por lo que se encontraban sentados uno al lado del otro afuera de la casa del menor.
-Juro que pensé que morirías- El de las cejas risadas se limpió una pequeña lagrima de su mejilla- Como se te ocurrió utilizar ese cuchillo falso y no decirme, cuando vi la salsa de tomate pensé era tu sangre.
-Si te lo hubiera dicho seria menos creíble, además no podía perderme tu cara y la de papá- Se rio abiertamente de la preocupación de ambos, mientras imitaba la expresión sorprendida/asustada de su amigo.
-He escuchado tus mentiras un millón de veces, pero nunca pensé que dirías que unos tipos entraron a tu casa y que te amenazaron e hicieron una herida en el pecho con un cuchillo para robarse toda tu comida ¿Porque inventas todo eso si sabes que Yasopp se dará cuenta de todo, o mejor dicho ya lo sabe todo? - Repitió la pregunta que siempre le hacía al moreno en momentos como aquellos- Además se supone que solo diríamos que encontramos la casa hecha un desastre cuando llegamos de hacer compras.
-Así es más divertido- Contesto como tantas veces restándole importancia- Cambiando el tema, cuando presentaras a esa persona que nos roba tu tiempo- Levanto las cejas de forma sugerente mientras codeaba al rubio.
Esta vez el de ojos color azul solo pudo suspirar, sabía que no tenía caso el decir algo que contradijera a su amigo.
-Pronto- Tomo una pequeña pausa para pensar- Solo quiero estar listo.
- ¿Para qué?
-Ya le conoces, pero no es alguien con el que se hayan hablado mucho además no sé cómo lo tomara, no es muy... comunicativo- Y es que en cierta forma no sabía si el pelinegro estaría de acuerdo, es decir sabía que se querían, pero llevaban muy poco tiempo juntos dos días para ser exactos y un mes como "amigos" y no sabía si ya era tiempo de presentarse a sus amigos, aunque Law ya conocía a su grupo de amigos por lo cual tenía cierta ventaja, ya que estos ya lo han aceptado como parte del grupo.
-Así que ya lo conozco- Apoyo su barbilla con la mano en pose pensativa.
-Si- Fue lo último que se dijeron antes de quedarse en un cómodo silencio para ambos, dicho silencio duro casi 20 minutos antes de que el rubio partiera a su hogar.
-Te veo mañana.
-Claro.