Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Ohh Yess!! por ennygma

[Reviews - 5]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

EN MI VIDA


********************

Mordía con saña y desesperación las pocas uñas que le quedaban, repasaba una y otra vez todo lo que había visto hace unos momentos. Estaba completamente impactada. ¿Cómo no se había dado cuenta antes?, de lo único que se daba cuenta ahora, era de lo torpe que en verdad lograba ser.


Un ligero dolor en unos de sus dedos le advertía el dejar de morder con esa intensidad. Estaba en el lobby de ese hermoso hospital esperando a sus amigos, tenía que decirles, tenía que contarles todo de lo que se había enterado en la noche.


Sabia a perfección que esa no era manera propia de comportarse en un lugar como ese. Eso poco le importaba en ese momento. En el fondo de ella, su corazón estaba emocionado, incrédulo. Palpitaba haciéndose grande con una fuerza descontrolada y al mismo tiempo se encogía de la pena.


¿En qué momento su vida había dado ese giró?. Su mente cada vez se llenaba más de ideas, de preguntas, de sueños y alegría. Se encontraba perdida en esos pensamientos sin importarle nada a su alrededor.


- Déjate de la ropita que trae, uff, ese cabello maltratado y descuidado. Esa mujer es un desastre. Admito que una manita de gato no le caería nada mal, en verdad que desperdicio de belleza.- aquel hombre joven completamente afeminado miraba de pies a cabeza a Kate.


- Hay cariño eres te-rri-ble. Anita ¿por qué estás dejando que te llene la recepción de uñas y pellejos?. Horror, en fin mejor escapemos de este espantoso acto.- mencionó una mujer de unos 47 años aproximadamente, se colgó del brazo de su acompañante y se alejaron de la secretaría.


Kate seguía sin percatarse de lo que sucedía frente a ella, ansiaba que sus amigos llegaran. Necesitaba compartir toda esa información inmediatamente.


La secretaría vio como esas dos personas se alejaban aún criticando a la pelirroja, detuvo la mirada en Kate por un segundo. La pelirroja no vestía mal, sus jeans azules y su polo rosa no le parecían mala combinación. Su cabello recaía sobre sus hombros, un broche con un zafiro negro sujetaba por en medio de su cabeza un par de mechones. Anita movió levemente la cabeza en un gesto de desaprobación.


¿Qué le daba derecho a las personas de dinero el criticar a alguien de esa manera?, ¿Qué tenía de malo el morderse las uñas?. Una persona que puede ser y comportarse tal y como es en cualquier parte es algo de admirar, no todos pueden mostrar su verdadera forma. Vivimos en un mundo que cada vez es más falso y banal, donde si usas "las mejores marcas" es por que vives bien, y eres mejor que los demás. En su trabajo cada minuto trataba con gente así, eso era algo frustrante ya que muchas veces uno que otro cliente la trataba mal, estaba agradecida que los señores St James jamás la trataran de una manera déspota o grosera pero aún así envidiaba a aquella pelirroja con ese súper poder de desajenarse de su entorno y poder ser ella misma sin miedo a las críticas o rechazos.


- Buenos días, cariño cada día te pones más hermosa. Luces increíble, aunque me imagino que esas pequeñas ojerillas que se están asomando es por estar pendiente de nuestra ceñuda favorita ¿cierto?, pero no te preocupes ahora mismo Devora te dejara di-vi-na.


- Gracias Gary, tu siempre tan lindo. Buenos días Devora, gracias por venir.- Rose saludo con un par de besos en el aire a las mejillas de cada uno.


- Gary tiene razón Rose, esas ojeras no son nada favorables en tu hermoso rostro, vamos comencemos de una vez. ¿Dónde está mi niña?


- Devora han llegado más temprano de lo previsto, ella aún duerme.


- Entonces comencemos contigo, algo debemos hacer con esas espantosas ojeras.- Rose solo atinó a reír nerviosamente.


La puerta de la habitación de Jessica se abrió dejando pasar a Demián con un par de vasos de café.


- Salvada por la campana.- dijo Rose mirándolo nerviosa.


- Nop, ni lo pienses.- respondió Demián quien giró sobre sus pies y salió de la habitación sin más.


_______________________________


- ¿¡Queeeeeeee!?.- el grito de Mónica resonó en toda la cafetería.


- Si si si si, tampoco puedo creerlo. Casi grito de esa manera cuando ellos me contaban.- Kate sujetaba las manos de Mónica.


- Es.... es .... oh por dios Kate, es .. Wow. ¿por qué ustedes no lucen sorprendidos?.- La mirada profunda de Mónica se clavó en Martín y Cristin.


- Ahmm..., bueno.. verás....- Martín comenzó a rascarse el cuello.


- ¿Cristin?


- Kate a mi ni me mires, yo me enteré el día del evento en el parque.


- ¿Martín?.‐ preguntaron al unísono Mónica y Kate.


Martín suspiro profundamente.


- Es algo de lo que no se habla, es verdad que aquellos tiempos fueron los más felices para Jessica sin embargo intenta dejar atrás esa etapa de su vida. Antes ella era una persona completamente diferente a la que es ahora, digamos que siente una pequeña vergüenza cuando se recuerda en esa época.


- Me di cuenta en el parque cuando Oliver le susurró algo al oído a Josh. Ese día Josh no quiso decirme nada, pero más tarde cuando este tonto y yo nos encontrábamos a punto de dormir lo interrogue y no le quedó más remedio que contarme la verdad.


- ¿Por qué nunca me dijiste Martín?.- lo miraba Kate.


- El día que nos contaste sobre tu cena en Vikings me di cuenta de que Jessica disfrutaba del que tu no supieras nada, si yo te decía algo sobre eso ella se daría cuenta de tu cambió, justo como ahora. Llegaría rápido a la conclusión de que yo te conté y me metería en problemas con ella. No la conoces enojada Kate, en verdad es terrorífica. Paso..


- Cobarde.- refunfuño Kate.- ¿Qué tan mala puede ser? creo que exageras.


- El joven Martín no se equivoca.- interrumpió Demián.- ¿puedo?.‐ señalo la silla desocupada.


Sobresaltados los chicos asintieron con la cabeza. Demián sonrió y se sentó.


- ¿Alguien quiere café? Era para la señora St James pero esta ocupada con ciertos personajes, es descremado.- no había terminado de hablar Demián cuando la mano de Mónica se movió más rápido que la mano de Kate ganando así el vaso. Demián sonrió y continuó.- Jessica a cambiado mucho en estos años, cada día que pasa se vuelve más parecida a su abuelo. El era un hombre sabio, imponente y de mucho temer. Créame señorita West, de haber sabido que usted no sabía nada, jamás hubiera mencionado algo de esto hace unas horas.


-¿Fue por eso que a Rose le dio un ataque de risa?


- La señora St James nunca a podido controlar esa risa de nervios cuando se siente incomoda, es una de las cosas que a Jessica le gusta provocar en público.


- ¿Fueron amantes?


- ¡Mónica!.‐ la regañaron todos.


- No pasa nada, esa pregunta es más común de lo que creen.


- ¿Entonces lo fueron? ¿tuvieron una relación?.- preguntó Kate.


- Soy un hombre leal señorita West, no cometeré el mismo error hoy dos veces. Sabe algo, Jessica es una total cínica. Usted pregunté todo lo que quiera, ella siempre le dirá la verdad crudamente. Solo cuidado, tal vez hayan cosas de las que no quisiera enterarse.- tranquilamente Demián bebió de su café.


- Se ve que la quiere como un padre, la protege como uno.- Kate hizo un berrinche por no obtener la respuesta a la pregunta que lleva ya rato resonando en su cabeza.


- A quien protege es a usted señorita West, buenos días a todos.- Oliver estaba completamente arreglado y perfumado. Vestía un traje azul y se veía muy atractivo.


A su lado estaba Sofía sonriendo delicadamente, traía puesto un vestido ligero color menta y el cabello suelto, se veía espectacular.


- Buenos días, lamentamos interrumpir.- realmente la voz de Sofía era angelical.


- ¿También huyeron de las hienas?.‐ reía Demián.


- Si, por poco y nos atrapan. Los padres de Jessica decidieron regresar al Hotel y venir apenas les avisé que aquellos se han ido. Demián hubieras avisado que llegabas hoy, Héctor y Shara regresaron a la ciudad por Ian. Les hubiera encantado verte antes de partir.


- Pienso quedarme hasta que Jessy este totalmente sana, podré verlos más tarde. Estoy más que encantado al pensar que los veré juntos después de tanto tiempo.- sonrío.


- Por que no vamos a un lugar más cómodo, ellos tardarán varios minutos. ¿Ya desayunaron?, conozco un lugar increíble cerca de aquí.- ofreció Sofía con una sonrisa angelical.


- Este....


- Señorita West no rechacé la invitación. Oliver podría ayudarla con el tema que la acongoja.- Demián soltó una risita.


Sin más el tiempo fue pasando agradablemente, Kate no pudo evitar comer de nuevo en ese lujoso lugar al que Sofía los había llevado. Sabía que subiría de peso si continuaba desatrampándose de esa manera. Se prometió a si misma que después de ese desayuno solo comería cuando sintiera hambre de verdad.


Su misión había fallado por completo, tarde se dio cuenta que Demián solo había dicho eso para convencerla de ir a ese restaurante. De Oliver solo obtuvo las mismas palabras "pregúntale a ella" tras poner un segundo los ojos en blanco desecho la idea de seguir investigando.


Al llegar al hospital le advertiría a Jessica que hoy era el día de "la charla", que ella buscará la manera de deshacerse un momento de los demás para que así todas sus preguntas y dudas fueran resueltas de una buena vez. Tranquila con su decisión se dejo llevar y disfruto de ese momento en compañía y dejando por un momento de lado sus inquietudes.


_______________________


- ¿Qué sucede?.‐ preguntó Oliver al ver a Devora, Gary y a Rose fuera de la habitación de Jessica.


- Oliver querido, wow hola, estas wowww.- Gary se llevó una mano a la boca mientras lo veía de pies a cabeza.


- Ese mequetrefe llegó y sin más nos corrió, no puedo creer que Jessica lo permitiera. Al parecer a estado haciendo ciertas amistades.- con la boca torcida Devora miro a Kate y a sus amigos.


- Devora no seas mala, la señorita Fuentes siempre a sido amiga de Jessica.- Rose soltó una risilla burlona.


- Mira Rose no voy a...


- No comiencen con lo mismo por favor.- Demián hablo con voz firme.- Señora Galaz no se a quién se refiere con mequetrefe pero lo que sí se es que no debería hablar de estas personas de esa manera. Podría usted arrepentirse de ello.- Demián parecía enojado.


En ese momento la puerta de la habitación de Jessica se abrió dejando ver a un jovencito de cabellos negros con una sudadera roja y unos jeans de mezclilla.


- Ya pueden pasar.- les dijo de mala gana


Entraron uno por uno a la habitación. En ella se sentía una carga negativa y así como fueron entrando, uno por uno se dieron cuenta de donde provenía esa aura oscura.


Aquel joven muchacho tomó asiento en la mesilla de la habitación en donde tenía un sin fin de documentos. En sus manos usaba a prisa el móvil de Jessica en el cual fijo la mirada sin prestarle atención a los demás.


Jessica estaba sentada en su cama, su cabello estaba completamente arreglado. Mostraba sus ondulados y hermosos cabellos negros con total perfección, sus ojos lucían un color miel bastante llamativo. A pesar de las heridas en su rostro y el tener el seño totalmente fruncido ella se veía muy hermosa.


Miraba la tv de la habitación en la cual Oz había colocado un USB. La grabación de Marianne en su concierto donde hablaba de Ghost estaba siendo transmitida.


- Jessica cariño no deberías juntarte con estas personas, debes recordar quién eres y el poder de tu apellido.- Devora decía estas palabras a Jessica mientras le daba los últimos retoques a su rostro.


- ¿A que personas te refieres exactamente Dev?.‐ la voz fría de Jessica resonó en la habitación. Ella no quitó la mirada del televisor ni un momento.


- Habla de este jovencito mal educado quién esta jugueteando con tus cosas y de estas nuevas personas que no encajan con tu estatus social.- Gary acomodaba su cabello encantado de los resultados que había logrado en tan poco tiempo.


Jessica giró la mirada en dirección a Oz quien sin importar lo que pasaba continuaba con la vista en su móvil. Acto seguido su mirada se detuvo por unos segundos en todas las personas que habían entrado, inmediatamente visualizó la incomodidad en el rostro de Kate y en la de sus amigos.


- Si Oz es un mal educado es cosa que ni a mi ni a ustedes les incumbe. Él esta aquí solo para hacer su trabajo, no para caerle bien a ninguno de ustedes. Y lo más importante, los nuevos rostros que ve merecen una disculpa. El señor se llama Martín, es mi hermano, ya había escuchado de él. Él es el nuevo CEO de Hess Enterprises, quien toma su mano es su prometida la señorita Cristin Adler. La morena a su lado es la señorita Mónica Montero, una amiga en común. Ahora ¿miran bien a esa hermosa pelirroja?.- ambas personas tragaron saliva y asintieron con la cabeza.- bien, es la señorita Katherine West. Mi novia.


La quijada casi se les safa a todos en esa sala, jamás imaginaron escuchar esa frase en boca de Jessica. Kate no logró impedir que su rostro quedara del mismo color de su cabello, Jessica le guiño un ojo y eso casi le ocasiona que su corazón saltara de su pecho.


- Me disculpo por mis palabras, no era mi intención hacerles sentir de esa forma. Mi trabajo aquí ha terminado Jessica. Creo que es mejor que nos retiremos.- Devora agachó la mirada mientras recogía sus cosas.


- No volveré a faltarles al respeto de esta forma. Con su permiso.- Gary al igual que Devora tomó sus cosas y sin más salieron de la habitación.


Jessica hizo un movimiento para acomodarse en la cama, una mueca de dolor opaco su rostro mientras llevaba su mano buena a su costado.


- ¿No pudiste esperar un poco más para hacer esto?.‐ Sofía fue la que se acercó con prisa para ayudarla.


- Una Hess siempre debe estar impecable Sof.- le sonrío.- Demián que gusto verte, aunque se que estás aquí más por cierto asunto que por saber de mi bienestar, ¿cierto?.


- Mala hierba nunca muere, siempre supe que buscarías la forma para escapar de la muerte. Veo que te acaban de avisar del inconveniente que tenemos.


- ¿Tenemos?. Demián me conoces muy bien, el problema aquí lo tienen ustedes con mi abogado, la señorita Marianne sabía perfectamente lo que pasaría si se le iba la lengua.


- ¿Llamo ya a Jefferson?.‐ Oz hablo sin quitar la vista del móvil.


- No Oz, si no me equivoco Jefferson ya no esta activo en la empresa. ¿Cuánto te pidió para traicionarme Demián?


- No fue mucho, el simplemente no quiso estresarse con esta situación.- Jessica sonrió.


- Vaya, supiste hacerlo. Aprovechaste muy bien mi estado inconsciente.


- Te traigo un buen trato Jess, al escucharlo quedaras encantada.


- Basta de trabajo, ahora mismo tienes que estar relajada. No se por que no te preocupas por tu salud un momento, recuerda que estás saliendo de este feo accidente. No estás bien Jessica, antes que nada tienes que recuperarte.- Acomodando la almohada detrás de ella Rose la regañó.


- ¿No vez que ya lo estoy haciendo?, quita tus manos de ella.- Sofía alcanzó a pegarle en una de las manos a Rose.


-¡Oyee!, para tu información Jessica disfruta más de mis manos que las tuyas llenas de callos.


- Tienen callos por que yo sin trabajo, no como otras que solo se la pasan haciendo nada.


- Chicas, chicas basta. Sus sacudidas me lastiman, recuerden que Jhon casi me mata.


- El cigarrillo es el que casi te mata, en realidad tu negligencia al no querer asentarlo en tu expediente clínico.- Martín se atrevió a hablar.


- En realidad el que casi te mata es la persona que te ocasionó el accidente.- Mónica ocasionó un gran silencio incómodo.


- El que te matará soy yo, dejaste añicos mi deportivo.- en el marco de la puerta se encontraba apoyado Alex quien vestía un traje gris Oxford hecho a medida.- Demián que gusto verte amigo, no creí que vinieras a ver a esta tonta.- Alex no pudo ocultar su emoción, sus ojos brillaban de felicidad.


Saludo a Demián con un apretón de manos seguido de un abrazo y unas palmadas en la espalda.


- Mira que cambiado estás muchacho. Quien te viera tan elegante.


- No siempre se viene a Londres a ver tanta belleza, disculpen mi grosería. Muy buen día.- con una sonrisa saludo de beso a Rose, Sofía, Cristin, un apretón de manos a Martín, otro beso en la mejilla para Kate y uno más para Mónica acompañado por un abrazo.


- ¿Y tu a que hora llegaste?.‐ preguntó Jessica.


- ¿Quién crees que te trajo a Oz tan rápido?, por cierto vi a Héctor y a Shara en el aeropuerto. Demián seria fabuloso salir a tomar unos tragos todos juntos, por los buenos tiempos ¿Qué dices?.


- Cuando ellos regresen y después de arreglar el asunto con Jessica sería agradable ese desestres.


- Jess.. ¿Qué pasa?.‐ Rose la miraba alarmada.


- Me siento cansada, creo que Jhon no tardará en venir para hacerme dormir de nuevo.- hizo una mueva de dolor.- Ustedes dos dejen de discutir por hoy, busquen a alguien quien venga a arreglar mi cabello. Ya no quiero a Devora aquí.


- Claro no te preocupes, te dejaremos descansar en lo que viene Jhon.


- Gracias Sofí, gracias a todos por venir. Mientras Jhon llega me gustaría quedarme a solas con Kate, es la única que no han dejado que se me acerque y yo la quiero muy cerquita de mi.- su sonrisa pícara se dibujó en su rostro.


Con sonrisas y una que otra risilla uno por uno fueron saliendo de la habitación hasta dejar a solas a Jessica con a Kate y por supuesto a Oz quien seguía con la vista en el móvil.


- Me dijeron que estas aquí desde la madrugada. No quiero que pases malas noches por mi culpa.


- Mi mente no deja de pensarte.- apenada por sus palabras Kate se acercó hasta tomar la mano de Jessica entre las de ella.


- Cuando los medicamentos me hacen dormir lo disfruto. Sueño contigo y puedo sentirte entre mis brazos, cuando despierto lo primero que busco es tu aroma. La sensación de que tu esencia llene mis pulmones es inigualable. Luego al verte, nada más me importa. Solo con tu presencia puedo olvidar el dolor o lo enojada que puedo estar.


- Que cosas dices.- con la cara colorada Kate miró de reojo a Oz.


- Que él no te dé pena. Se llama Oz, es mi mano izquierda. Se encarga de asuntos ajenos a la empresa de mi padre, de proyectos futuros y todas las cosas que se me ocurran. Oz ella es Kate de quien tanto te he hablado, ¿verdad que es hermosa?


- Señorita West he escuchado mucho de usted, nunca creí que lo que ella me contaba fuera cierto es usted una mujer muy atractiva. Me es un placer conocerla, mi nombre es Oswald y estoy a sus ordenes, nunca dudé en pedirme ayuda en lo que usted requiera.- el muchacho cerro los ojos y le dedico una amplia sonrisa, sin más regreso la mirada al móvil de Jessica.


- Dices cosas muy bonitas, cosas que me hacen sentir muy bien. Tengo muchas preguntas en la cabeza que quiero hacerte, pero esperare un poco más, no quiero fatigarte. Debes de recuperarte y hacerle caso a Sofía y a Rose, descansar y cuidarte. Eso es lo más importante ahora.


- Mentí hace rato, solo quería estar a solas contigo. No quiero que te separes de mi por nada, Katherine, lo que siento al tenerte cerca nadie antes me lo había causado. Esta sensación en mi pecho que me haces sentir con solo cruzar tu mirada con la mía es algo de lo que nunca me cansaré, estoy muy segura de eso.


- ¿Cómo estas segura de que esto que sientes no es un capricho?, Soy la clásica mujer que desconoce tu mundo y eso puede ser lo que te atrae de mi. ¿Has pensado en eso?.‐ la mirada de Kate era decidida, esa mujer penosa y sonrojada había desaparecido. El porte serio y firme que ahora presentaba la hacia ver completamente madura.


- ¿Lo dices por mi nivel económico?.- la pelirroja solo asintió con la cabeza.


Jessica río un poco, apoyándose en su mano buena logro moverse un poco a la derecha.


- ¿Qué haces?, vas a lastimarte.


- Te hago un espacio, esta cama está enorme y damos muy bien las dos. Ven recuéstate conmigo.


- No, estás loca. Puedo lastimarte, tus heridas, tus costillas, el doctor entrara y me regañara. No.


- Oz ayúdame a moverme un poco más.


Sin pensarlo el muchacho se puso de pie y se acercó para seguir las indicaciones que le habían dado.


- Gracias Oz, ponle el pestillo a la puerta, no quiero que nadie nos interrumpa, si viene Jhon ignoralo. No le abras, deja que busque la llave y que lo haga el mismo.


- Jessica no, el doctor tiene que entrar a medicarte.- Kate fue totalmente ignorada.


- Ven recuéstate a mi lado, solo quiero que estés junto a mi, estaré bien lo prometo. De Jhon no te preocupes, no se demorara en conseguir la llave y entrar. Anda ven ¿acaso negarás la petición de esta pobre enferma?.‐ Jessica puso un gesto tan tierno que eso logro convencer a la pelirroja casi de inmediato.


Kate se acomodó en la cama lo bastante cerca de Jessica como para sentir su calor sin siquiera tocarla. No se atrevería a acercarse más, no quería lastimar por ningún motivo a su hermosa morena.


Jessica por su parte pensaba diferente, al sentir a su lado a Kate alzó las sábanas que la cubrían. Obligando a la pelirroja a meterse en ellas y estar mucho más cerca de su cuerpo.


- ¿Trae algo debajo de la bata señorita Hess?.- la pelirroja se mordió un labio.


- Meta la mano y compruébelo señorita West.- retaba con la mirada más que con las palabras.


- ¡Oye nooo!, era una broma.- tras una mirada rápida, Kate busco su brazo y le dio un leve pellizco, ambas comenzaron a reír.


- Respondiendo a tu pregunta. Estoy muy segura que la atracción no es por que puedo impactar tu vida. Ser el centro de atención en todo lugar es algo que no me interesa. Me gusta mi vida y los lujos, sí, pero puedo asegurar que puedo vivir sin ellos. Así que no Kate, no es por capricho de niña rica lo que me hace sentirme atraída a ti.


- Contéstame algo importante..


>>si, al fin sabré la verdad<< pensó la pelirroja.- Tu y Rose, ¿tuvieron algo?, ¿ella te gusta?.


- Rose es muy atractiva, siempre a desbordado sensualidad. Me gustan mucho las mujeres, sería una total mentirosa si te dijera que su belleza me es indiferente. Me gusta mucho ponerla en situaciones vergonzosas, porque ella jamás puede evitar su risa de nervios y eso es muy gracioso para mi. No la veo con otros ojos que no sean de amistad.


- ¿Pero ha pasado algo más con ella?.


- Una vez nos besamos.


- Entonces fueron algo. Te enamoraste de ella.- Pensó en voz alta.


- No.


- Explícame.- ahora era Kate quien tenía el seño fruncido mientras esperaba la respuesta de la pelinegra.


- Cuando conocí a Rose aún no estaba segura de mi orientación sexual. Ella dejó Andorra para poder modelar exclusivamente la ropa privada que una amiga de mi mama diseñaba. Comencé a frecuentarla cada vez un poco más, siempre se iba con prisa al terminar de modelar. Ella no se quedaba hasta el final como las otras chicas, yo quería saber el por qué.


- Te enamoraste de Rose...- estas palabras fueron más para ella que para la morena.


- No. Me gustaba ver a las modelos, me gustaba verla a ella. Una noche me acerque a saludarla antes de que ella se retirara del lugar, le pregunte del por qué la prisa de quitarse del evento, me explico que tenía que cuidar a su padre. Después de esa noche hable con mis padres y dejaron que nuestro chófer la llevara a su casa, yo la acompañé todas esas veces. Se formó una amistad, poco a poco su vida fue cambiando. Su padre salió de su adicción y ella comenzó a relajarse un poco más, su carrera se alzó como espuma y yo comencé el trámite para emanciparme. Dejamos de vernos un tiempo, en el cual yo comencé mi historial con las mujeres. Una noche me llegó un mensaje de ella al móvil, me preguntaba si el rumor de mi homosexualidad era cierto, cosa que admití sin pena. Le confesé que ella me gustaba, creí que eso arruinaría nuestra amistad por que esa noche tras confesarle eso no volví a recibir un mensaje suyo. Fue hasta tres días después que ella se apareció en mi casa. Fue muy clara y directa.


***FLASHBACK***


- A mi no me gustan las mujeres, no me llaman ni por curiosidad. Te tengo mucho cariño, sin ti nada de lo que tengo seria real. No quiero perder tu amistad por nada del mundo, hoy vine dispuesta a terminar con cualquiera de tus pensamientos en los cuales llegamos a tener algo. Bésame.


- ¿Qué?.‐ dije sorprendida.


- Que sea un beso largo, pasional.


- Estas loca.- dije nerviosa.


- No, hablo en serio.- cortó distancia entre nosotras, podía sentir su aliento en mi barbilla.- Te quiero en mi vida por siempre y aunque se que no me alcanzara la vida para agradecerte, quiero hacerlo lo más que pueda. Pero no podre hacerlo si tu corazón me ve de otra manera por que yo jamás podré verte más que como una amiga. Así que bésame y dime que sientes, quiero que seas sincera.


- Rose si lo único que puedes ofrecerme es solamente tu amistad, yo respetare eso sin más. No me debes nada, ese día si me descubrían lo del puro iba a tener que escuchar un largo sermón por parte de mi padre. Me hiciste un favor y yo te hice uno, al ver en tus manos la hoja de solicitud de empleo supe que hacia lo correcto. Estamos a la par.


- Dime que no has fantaseado con besarme.


- Esto....- No pude evitar tragar saliva con fuerza.


- Si no me besas nunca sabrás lo que en verdad sientes por mi. Ahora mismo no sabes si es amor, cariño o deseo. Solo basándome tu corazón y tus sentidos te lo podrán decir. Bésame, bésame como tantas veces lo has imaginado.


Podía sentir una adrenalina recórreme el cuerpo, una sensación que no había sentido antes. Este no sería mi primer beso, ni el segundo mucho menos el tercero. Entonces ¿por qué me sentía así?, ella esta tan cerca de mi con esos brillosos labios a escasos centímetros de mi boca. ¿Lo que siento es amor?, sus palabras retumban como eco en mi cabeza >> si no me besas nunca sabrás lo que en verdad sientes por mi.<<


Decidida puse una de mis manos en su cintura y con la otra le tomé la barbilla que lentamente tire hacía arriba. Humedecí mis labios antes de sentir los suyos, ella se dejó llevar.


Abrió la boca permitiendo que su lengua jugara con la mía, un sabor a cereza se impregnó en mi lengua. No lo pude evitar, mis manos se movieron por voluntad propia. La tome de la cintura con ambas manos y la pegué a mi cuerpo volviendo así el beso más pasional. Sus suaves labios, su aroma y su sabor superaron mis expectativas. Esto era mil veces mejor a todo lo que había soñado. Continúe besándola y mi cuerpo se acaloraba.


Ansiaba más, mucho más. Una de mis manos bajo a una de sus nalgas, la apreté con una leve fuerza y de nuevo la pegué a mi. Pude escuchar su leve gemido, eso me incendió el cuerpo. Di un paso adelante y la apoyé en la pared de la entrada, deje de besar su boca e inmediatamente mi cabeza se deslizó hasta su escote.


Hundí mi cara en sus firmes pechos, aspire su aroma y mi lengua acarició su piel. Mis labios recorrieron su cuello hasta llegar de nuevo a su boca, volví a besarla y ese sabor volvió a engatusarme. Estaba perdiéndome en ella olvidando por completo que estábamos en la entrada de mi casa.


- Detente.- Musito.


Me separé de ella lentamente, al mirarla pude notar un ligero rubor en sus mejillas.


- Vamos a mi habitación.


- No te equivoques Jessica, fui clara desde el principio. Y con esto que acaba de pasar te lo confirmo de nuevo. No sentí nada, fue un beso insípido. Yo no te veo de otra manera. No me van las mujeres.


- Que dolorosas palabras, yo.. mi cuerpo...


- Estas excitada, lo se...- se alejó un poco de mi y fijo la vista en las estrellas.- Por una parte me hubiera encantado poder corresponderte. Eres una mujer muy atractiva, inteligente, decidida. Estas tan llena de cualidades y dones que decirlo todo me llevaría mucho tiempo. Amarte sería tan fácil que eso me lleva a otro pensamiento. Miedo, dolor... angustia. En tu beso solo sentí tu deseó, esas ganas que tienes de querer arrancarme la ropa y hacerme tuya. ¿Qué hubiera pasado si mis sentimientos fueran otros?, ¿si con este beso yo hubiera caído rendida a tus pies?. Después de haber ido a tu habitación, después de haberme entregado a ti. Dime ¿y al día siguiente?.


- Podríamos comenzar una historia juntas.


- Lo que sientes no es amor Jessica. Es solo deseó, atracción, todo menos amor. Cuando hay amor un beso se siente diferente. Cuando logras besar a la persona correcta unas pequeñas punzadas se sienten en el pecho, sientes como en cada rose de sus labios tus piernas comienzan a perder fuerzas. Te olvidas de todo y en lo único que piensas es en qué no quieres que ese beso terminé.


- Hablas como si conocieras el amor.


- Conocí a alguien... El estudia medicina.- El sonrojo que veo en su rostro no es el mismo que tenía hace unos momentos.


- Logras ponerme celosa.- Le confieso acercándome a ella.


- Jess....- se gira para verme a la cara.


- Eres una mujer impresionante Rose.- la tomó de las manos.- eres decidida y sabes bien lo que quieres en esta vida. Todo lo que has dicho es cierto, las veces en la que mi mente te dedica tiempo suelen ser siempre pensamientos sexuales, no hay un más allá.- desvío mi mirada apenada por un momento.- Quiero conocer a ese idiota, quiero que sepa que yo siempre estaré para defenderte y patearle el trasero si te hiere. Porque eso hacen las amigas ¿cierto?.


Sin pensarlo ella se guindo de mi cuello y hundió su cabeza en mi.


- No quiero perderte nunca Jess, quiero estar para ti siempre y quiero que estés en todas las etapas de mi vida, lamento no corresponder tus sentimientos pero confío que nuestra historia será mucho mejor como amigas que como pareja.


- Eso esperó, porque no sabes las ganas que me acabo de aguantar.- le sonreí.- ¿Amigas por siempre?


- Por siempre.


***FIN DEL FLASHBACK***


- Ese día se quedó en casa, estuvimos en la azotea de la mansión hasta la madrugada, me contó todo acerca de la persona que conoció, de la que se enamoró y que fue con la que se casó. Es solo una simple amistad, no hay más.- Kate la miraba incrédula, con la boca abierta, la nariz arrugada y el seño fruncido.- ¿Qué pasa?.‐ preguntó tan natural, como si lo que acabara de contar no fuera importante.


- ¡Eso no fue un simple beso!.‐ esta vez el pellizco en su brazo fue más fuerte, mucho más fuerte.


- Aaaauch... este si me dolió.


- Y agradece que fui considerada por que estas herida, que si no...- la pelirroja se cruzó de brazos.


- Para mi fue un simple beso o tal vez con el paso del tiempo le reste importancia. Es la primera vez que lo cuento.- sonrío cerrando los ojos.- Nadie nunca se atrevió a preguntar lo que pasó entre nosotras.


- La besaste parecido a la forma en la que a mi me besaste, ¿Cómo sabes que no es la misma situación?


- Luego de lo que pasó con ella... desate mi sexualidad, no voy a mentirte Kate. Besé muchísimas bocas antes de la tuya y toqué un sin fin de cuerpos antes de rosar tu piel. Desde el momento en el que te vi te deseé, solo quería hacerte mía y al día siguiente seguir con mi vida. Pero me desarmaste cuando te besé, mi mente dejó de pensar y mi cuerpo solo actuó. Jamás quise marcarte el cuello o propasarme contigo, es solo que hay algo en ti que no puedo evitar. Tu aroma me embriaga, tu cabello me hipnotiza y tu mirada me estremece. No deje de pensarte esa noche, no se como explicarte pero mi corazón late muy fuerte cuando estás cerca de mi.


- El mío también.- recostó lentamente su cabeza en el hombro de Jessica.- Jamás me imaginé sentir esto por una mujer, creí tenerlo con él, pero claramente él sentimiento no es nada parecido.


- ¿Aún estás con él?. Me dijeron que llego contigo.- Jessica bostezo


- Solo te diré que soy una mujer totalmente soltera, todo lo demás te lo contaré luego de que descanses.


- Trato hecho.- Sus ojos se cerraron lentamente recostando su cabeza sobre la cabeza de Kate.


El silencio reinó en la habitación, Kate se perdió feliz en sus pensamientos. Las palabras de Jessica habían amainado sus celos, sabía que en la vida de la pelinegra habrían más mujeres tan hermosas como Rose merodeando. Por ahora se relajaría, y decidida cerró también sus ojos y dejó que lentamente la respiración de Jessica la adormeciera.


- Por ahora estoy ganando.- dijo en voz alta antes de quedarse dormida.


_____________________________


La entrada del hospital estaba repleta de reporteros, el acceso a el era imposible. Días han pasado desde que Jessica despertó. Su recuperación era inigualable, los medios que afuera se encontraban querían saber más sobre su secretillo que por el avance de su recuperación.


La pelinegra estaba frustrada, cada día que pasaba su desesperación crecía más y más. Los días que había pasado en cama ya se le hacían eternos, Oz no se había movido de su lado para nada y aunque ponía de todo su esfuerzo no lograba controlar todos los pendientes de Jessica.


- Te dejaré sin nada Marianne, recuerda bien el contrato que firmaste. Mi abogada se encargará de hundirte. ¿Cierto señorita West?


Kate estaba conmocionada, días atrás Martin y Jessica le habían notificado que M&W abogados se había fusionado con empresas Hess. Kate quedaba como la abogada principal y la persona al mando ya que Martín se dedicaría en tiempo completo a la presidencia de la empresa.


Su primer trabajo se lo había pedido la razón de sus sonrisas de estos últimos días. Estaba decidida a demostrarle a Jessica que ella era capaz de llevar los asuntos legales de la empresa y de manejar al personal.


Estaba tan entusiasmada cuando Jessica le expuso su caso, "pan comido" había sido su pensamiento. Violaciones de contrato era trabajo fácil, podría hacerlo hasta con los ojos cerrados. Ganaría, destrozaría todo a su paso y le demostraría a Jessica que ella era excelente, no, excelente no, una diosa, la diosa de las demandas. Porque hasta ahora no había perdido ninguno de sus casos.


Toda esa seguridad se había ido al carajo al ver a Marianne, creía hasta hace poco que los miles de reporteros que afuera se encontraban estaban por la conferencia de prensa que Jhon daría en unos minutos.


Ver a Marianne frente a ella con ese vestido blanco entallado que apenas le llegaba a las rodillas la hacía sentirse pequeñita. Maldijo la hora en que había aceptado representar a Jessica.


Amaba todas las canciones de Marianne, no solo se las sabía todas de memoria, había asistido junto con Mónica y Cristin a varios de sus conciertos. Era la primera vez que la veía tan cerca, se daba cuenta que era más bonita en persona que en la tv o alguno de esos conciertos donde la había visto de lejos... bastantito lejos.


>>Que manera de hacer que tu artista favorito se entere de tu existencia<< pensaba la pelirroja.


>> Mis amigas me mataran, saldré en las noticias, los demás fans me odiaran. Si no ganó el caso con excelentes resultados, Jessica pensará que no soy tan buena como Martín le dijo<<


>>DEMONIOS<<


La incomodidad de Kate se hacía muy notoria en su rostro, estaba a nada de levantar una mano y comerse las uñas como hacía cada vez que se desesperaba.


- ¿Kate..?‐ Jessica la saco de su trance.


- Si, si... usted.. señorita Marianne.. a violado un acuerdo con mi cliente.. esto...esto....- nerviosamente se acomodo las gafas, fue un movimiento algo brusco el que dio en el puente de su nariz que las gafas cayeron al piso.


- ¿Estas bien?, ¿Se rompieron?.‐ la mirada de preocupación de Jessica ruborizo a la pelirroja.


- Si, no paso nada disculpen.- estaba completamente apenada.


- ¿Jessica podríamos dejar la formalidad de lado?, estamos en confianza. Marianne sabe bien lo que te ha ocasionado. La señorita West no está concentrada y el trato que te ofrezco va a agradarte.- La voz de Demián era muy pacífica.


- Lo que hice no fue con malicia, estaba saliendo a escena cuando me enteré de lo sucedido. No supe controlar mis sentimientos, es poco lo que te conozco Jessica pero en este corto tiempo he sabido apreciarte. Se que estás enojada, que puse tu mundo de cabeza con unas simple palabras. Hoy estoy aquí frente a ti dándote la cara, como le dije a Demián no objetare nada. Se hará lo que tu desees.- En la voz de Marianne se podría sentir su total sinceridad.


- Bien, háblame sobre ese "trato".- Jessica se notaba irritada.


- Se de tu proyecto en el cual el señor Oswald no a dejado de trabajar en estos días. Se que la razón por la que estás tan impaciente de salir de este hospital es porque todo se te está atrasando.


- Siempre supe que serías el primero en enterarte, Se para donde vas Demián y eso no me será suficiente.


- También se que hiciste tu tarea Jessica, Oswald no es muy sigiloso en este ambiente, dime ¿Qué es lo que tu propones?.


- Este Oz.- llevo la mano al puente de su nariz.- a veces se me olvida que es solo un niño.- suspiro.- ya venia venir tu trato. La señorita West redactará el documento necesario.- miró a verla.


-Sssi...- se limitó a responder.


>>¿De que hablaban?<< regreso la mirada a Jessica para poner atención y tomar notas, ella continuó hablando.


- Quiero que lleves las riendas de "Vox Sonus Records", no solo por el tiempo en el que me recuperó. Quiero que renuncies a Sound Records y seas el presidente de mi disquera, aún no logro conseguir gente para el departamento de A&R. Confió ampliamente en ti y se que tienes a gente de confianza a tu lado.


- Mi cabeza por la de Marianne, ya veo..- Jessica sonrió.


- Aún no terminó. La falta de Marianne también tiene que costarle a ella, firmará contrato con Vox Sonus Records por los próximos 15 años y tal como dijiste, Oz investigó. Quiero también a esa nueva banda que estas formando, a aquella chica que descubriste en ese reality y por supuesto a los hermanos Cisneros, escuche que son muy talentosos.


- ¿Algo más?


- Uhmm....- Jessica sujetaba su barbilla y se golpeaba levemente los labios con su dedo índice.- Quiero a uno de tus mejores colegas para que represente a Anthony, ese niño es un Dios con el chelo y en unos meses tendrá el debut que cambiará su vida.


- Que la señorita West redacte los documentos, acepto todo lo que propones.


- ¿Así de fácil?


- Cuando le pediste a Marianne firmar tú contrato sin que me diga a mi siendo su representante, sabía que algo harías para llegar a este punto. Al principio me enojó que jugaras de esa manera, se muy bien que actuaste así porque contemplaste mi respuesta y mi reacción. Tarde llegue a la vida de Marianne como su representante, se que tú y tu disquera será la mejor decisión. Mi renuncia en esa disquera eran algo de lo que ya había pensado pero que nunca me atrevería a hacer. Soy un hombre ya cansado. Lo que me ofreces me cae como anillo al dedo y mi esposa te lo agradecerá, si no me obligabas a retirarme de A&R departament jamás dejaría de andar por el mundo en busca de nuevos talentos. Me es un trato justo Jessica. Amenos de que tengas algo que decir Marianne.


- ¿Todo lo planteaste desde el principio?.- el tono de Marianne fue muy sensual.


- En este negocio los secretos no duran mucho en la oscuridad. Me había enterado de lo que Gia's se había convertido y me llenó de coraje saber como explotaban a sus artistas. Decidí formar algo diferente y desde el principio te tuve en la mira, tenía que acercarme a ti sin que Demián se diera cuenta. Me enteré de tu amistad con Shara y a ella le dije que buscara la oportunidad para ofrecerte los servicios de Ghost, al principio dudo por la amistad que las une pero cuando le dije que llegaríamos exactamente a este punto y que al final sería algo bueno para ti, decidió ayudarme.


- ¿Entonces que tu anonimato se perdiera estaba en tus planes?


- Así es Marianne, saldría y daría una conferencia de prensa que fácilmente había preparado. Sin embargo hay algo que no tenía planificado.


- ¿Que?.‐ preguntó preocupado Demián.


- Antes que los reporteros llegaran por causa tuya Marianne ya había alguien rondando el hospital. No se quien es, aún no se que es lo que busca. Oz lo a visto merodear el hospital, pidió las cámaras de seguridad y este hombre a sabido cubrirse el rostro muy bien. A estado tomando fotografías a todos los de mi alrededor y la noche previa a tu llegada entro a esta habitación. Como veraz no hay cámaras, no tardo mucho y no tengo idea de que es lo que busca.


- Tus padres aún no lo saben ¿cierto?


- Pienso que no, mi padre a estado muy tranquilo y mi madre no se ha enterado sino ya tendríamos al ejército en este hospital.- rió.


- ¿Y si es George?.‐ Kate estaba asustada.- ¿Y si a venido a terminar su trabajo?.


- No lo creo Kate, estuvo a solas conmigo en esta habitación y nada me pasó. A parte mi padre tiene a toda la familia Aguilera muy bien vigilada así que el asunto no va por ese lado.


- Dices que merodea el hospital y que al parecer solo nosotros y Oz lo sabemos, atrapémoslo.- Demián sonaba tranquilo.


- No quiero que nadie más se entere o que sospechen de que planeamos algo. Quiero tener una gran charla con esa persona primero.


- Ustedes jueguen a los ninjas, espías o lo que sea. A mi me da miedo así que yo me regreso a mi ciudad a seguir con mi vida en lo que te recuperas al 100% y comenzamos a trabajar ¿vale?


- No habrás pensado que te saldrías de esta así como así, ¿verdad Marianne?.


- No te entiendo Jessica, hemos llegado a un acuerdo y tu abogada nos hará llegar los papeles, ¿acaso eso no era todo?


Jessica miró a ver a su pelirroja, quien había estado en silencio y tomando apuntes como loca. Sus miradas se cruzaron y tal como había estado pasando en estos últimos días. Podía sentirse en el ambiente una carga de amor, de felicidad con solo verlas mirarse de esa forma.


- Dejé lo mejor para lo último, siempre tiene que haber un pago por los daños ocasionados. El tuyo será llevar a comer a mi hermosa abogada y a sus amigas a un buen lugar, la llenaras de todos los autógrafos que te pidan y sobre todo saldrás con una hermosa sonrisa en todas las fotos que ella quiera. ¿Entendido?


Los ojos de Kate brillaban, hasta hace un momento pensó que Jessica le diría algo negativo por su pésima manera de manejar el caso. Pero la pelinegra siempre buscaba la manera de sorprenderla. Sin pensarlo la abrazo y le dio depósito un gran beso en los labios.


- Ahora entiendo su nerviosismo señorita West.- Marianne la miraba con ternura.- La verdad que me vendría bien un buen lugar, unas buenas bebidas y por supuesto una gran compañía. Dejemos a este par solos y que sigan con su aburrida platica de James Bond, vayamos por sus amigas y tengamos una buena tarde de chicas.- tomó su bolso y se acercó a Demián para despedirse.


- Gracias... gracias.- susurro Kate al oído de su pelinegra, le dio un beso largo y con una gigantesca sonrisa se despidió de Demián para salir en busca de sus mejores amigas.


____________________________


- Lo tenemos señor, lo acabamos de atrapar en el lado sur del estacionamiento. ¿Qué quiere que hagamos?.


- Gracias Cristián iré a revisarlo enseguida, déjalo en el auto mientras. No demoró nada.- Cortó la llamada.- Cariño ve con ellas, yo tengo asuntos que atender y una gran plática con tu hija. Cuando regreses ya se habrá acabado el tiempo de trabajo y podrás cuidar de tu bebé sin interrupciones. Anda, una tarde de chicas es algo que no debes negarte.


- Iré con ellas cielo pero no seas muy duro con Jessy, aún está adolorida aunque no lo parezca.


- Pierde cuidado, seré prudente. Ahora vayan, salgan por la entrada de las ambulancias ahí hay menos reporteros.


Tras despedirse, las chicas salían directo a un gran restaurante dispuestas a pasar una tarde agradable. La emoción de Kate y sus amigas contagiaban a la señora Alina quien no evito sentirse como una jovencita más en el grupo.


- Vamos muchachos.- Fernando tocó el hombro de Martín y con una mirada le indico a Oliver que era "el" momento.- hijo lo que pasara ahora quedara entre nosotros, ni Jessica, ni tu futura esposa tienen que enterarse. ¿De acuerdo?


Extrañado Martín asintió con la cabeza y con paso decidió siguió los pasos de sus acompañantes.


Habían llegado al ala sur del estacionamiento, los guardias del señor Hess custodiaban el auto negro que había rentado el señor Hess.


Se pararon los tres frente al auto, Martín trago saliva y miró a ver de reojo a Oliver quien aparentaba estar muy tranquilo con esta situación. Con una seña de su mano derecha Fernando indicó que sacaran al hombre del auto.


Dos guardias acataron la orden y con cierta violencia sacaron a un hombre de barba y gabardina negra del auto.


- ¿Tú?.‐ La voz de Oliver contenía una absurda sorpresa.


Fernando solo puso los ojos en blanco, se llevó una mano al puente de la nariz y la otra la mantuvo dentro del bolsillo de su pantalón.


- Cuanto tiempo sin vernos la cara Oliver. Mírate siendo un gran gánster.- aquel hombre de gafas los retaba con la mirada.- Un delincuente siempre será un delincuente, así use trajes bonitos y hechos a medida. ¿Dime tu noviecita sabe con qué clase de persona duerme?


- Aquí no vas a estar hablándole así a nadie, el que hace las preguntas soy yo. Deberías darle gracias a Dios que Cristián y sus amigos aún no te agarran a golpes.- dijo señalando a los guardias.


- Fernando Hess, magnate de los negocios, heredero por derecho. Casado con la hija menor de la honorable familia Williams. Ejemplar ciudadano, un buen hombre con una reputación intachable. Bueno.. a excepción de la guarra de su hija quie...


Una fuerte cachetada por parte de uno de los guardias impidió que aquel hombre continuara hablando.


- Aquí hablas con respeto o me veré obligado a enseñarte un poco de educación.- Fernando se acercó más a él.- Dime ¿Qué es lo que buscas al espiar a mi familia? ¿Quién te mando? ¿Qué es lo que quieres?.


- Acabare con la falsa imagen de tu hija, dice ser una mujer correcta y madura. Se cuelga de tu apellido y se le reconoce como una mujer con una reputación intachable. Sabemos muy bien que Jessica está muy lejos de ser todo eso. Golpéame, mátame si es lo que deseas, pero la información que recaude será publicada en todas las grandes revistas. Pagara caro por lo que me hizo, ojo por ojo.


- Estas muy equivocado si crees que ella se llena la boca jactándose de perfección, se nota que no la conoces nada.- a pesar del mal momento que Fernando estaba pasando su voz y su porte desbordaba tranquilidad.- Platiquemos de hombre a hombre, lleguemos a algún tipo de acuerdo, prometo escucharte si comienzas a hablar con respeto.


Aquel hombre se tranquilizó, las palabras de Fernando le daban confianza y sin pensarlo se acercó a él a paso firme y con determinación.


- Trato.- Estiro la mano derecha mientras que con la otra se acomodaba las gafas.


__________________________


- Jessica has mejorado muchísimo, debo felicitarte por seguir mis indicaciones al pie de la letra. Mañana examinaremos esas costillas y depende de lo que las radiografías nos indiquen decidiré si te damos de alta o no.


- Esperemos que sean buenas noticias, ya no soporto estar encerrada aquí aunque, no puedo quejarme de las enfermeras, son tan lindas.- Jessica dejo escapar un suspiro.


- Más la pelirroja, ella está como quiere.- Jhon le alzó una ceja.


- Oye...


- Vez lo que siento cada que dices cosas así de mi esposa. Los celos aparecen cuando hay amor, quien te viera enamorada Jessiquita.


- Ya no puedo negarlo más ¿cierto?


- No, ya no. Fuera de broma, Katherine es una mujer muy hermosa, poseedora de una energía inigualable. Supiste escoger muy bien entre tantas eh.


Jessica tenía dibujada una amplia sonrisa en el rostro, se llenaba de orgullo cada que alguien decía algo favorable acerca de su pelirroja. Esa mujer le había robado el corazón en tan poco tiempo. No lo decía, pero ya comenzaba a ser notorio que estaba más que enamorada de esa mujer de hermosos cabellos rojizos.


Unos golpes en la puerta se escucharon del otro lado. Jessica, Jhon, Oz y Demián miraron a ver quién era la persona que ingresaría al lugar.


La puerta se abrió dejando ver a Fernando con un semblante bastante serio.


Tras de el se asomó Oliver con una cara de preocupación, parecía un perrito recién regañado. Jessica los observaba bien, en esos segundos sentía como los nervios comenzaban a invadirla, no entendía nada de lo que pasaba. Junto con Martín quien tenía una cara de no entender nada apareció el hombre de la gabardina.


Jessica entendió por completo el semblante de Oliver, en el instante en el que reconoció a esa persona supo que estaba en serios problemas con su padre. Su mente la regresaba a la edad de 5 años, la cara de su padre y su porte indicaba que se avecinaba un gran regaño.


¿Cómo pudo olvidarse de ese gran detalle?. Nada ni nadie la salvarían esta vez, sabía bien la gravedad de sus actos. Sabía muy bien que su padre a pesar de ese semblante tranquilo se encontraba enojado, muy enojado.


- Tenemos que hablar Jessica.- las palabras frías y tajantes de Fernando dejaron pálida en un segundo a la pelinegra.


Poco a poco sintió como su alma abandonaba su cuerpo, de su frente nacía unas pequeñas gotas de sudor. Estaba petrificada y estaba segura de sentir como la seguridad que siempre la caracterizaba se desvanecía en el aire.


>>Mierda<<


Fue lo único que pudo pensar mientras la mirada de desaprobación de su padre se clavaba fijamente en ella.


 


Continuara....


____________________________

Notas finales:

Holi!!!


¿Que les pareció este capítulo en donde poco a poco vamos entendiendo las cosas?


Estamos a la mitad de esta historia que como bien saben es mi bb.


Espero que estén disfrutándola tanto como yo al escribirla. Lo que se viene es lo que ya muchos esperan, la interacción entre las chicas. Están en un momento en el cual ya pueden disfrutar de su amor sincero, aunque debo decirles que no serán felices por mucho tiempo.


Espero continúen siguiendo la aventura de nuestras protagonistas y agradezco a todas las personas que han llegado hasta aquí.


La canción del titulo es de.....


Los que pensaron en The Beatles buuuu para ellos.


Esta canción es de una banda que levanto la economía de su país. Unos chavales que en la secundaria deciden formar una banda y tras el primer debut en su escuela se vuelven grandes.


Muchas personas piensan que "The Rasmus" no fueron exitosos y la cosa no fue así.


Si, se que todos solo piensan en "In the shadows" cuando se habla de ellos y es que esa canción fue de su cuarto álbum, sí, cuarto.


Y con la que muchos nos identificamos como emos y toda esa onda solo porque Lauri llegó haciendo un ruido para los años 90's.


Sí tienen tiempo y quieren busquen la historia de esta banda, es un tanto fría pero hermosa. Nos damos cuenta de que no tener un solo peso en la bolsa nos hace fuertes y felices.


Pero Enna, ¿Qué tiene que ver esto con Ohh Yess!!?


¿Quieren spoiler?


Verán como les dije este fic esta conmigo desde uhhh... y más adelante veremos la interacción de Jessica con su abuelo, la idea original fue gracias a Lauri y la relación con su abuelo. Ya con el paso del tiempo me decidí por cambiar la personalidad del abuelo de Jessica (que más adelante veremos) pero sin perder la esencia de lo que quería plasmar.


In my lifejodida canción más hermosa. Y no solo por las guitarras y la batería sonando Chingonamente... ¡No!


El video.... para mi, el video es una obra de arte y si buscan el como lo filmaron uff.


La letra es enganchadora, simplemente te dice alza la voz, se tú mismo, lucha, depende de tí, si te rindes.


Y por favor!!, recuerden que sus comentarios alimentan mi creatividad. No duden en decir que les gusto, que no les gustó ( como los datos curiosos más pinche largos que el capitulo ) y todo lo que se les ocurra xD.


Recuerden también seguirme para que se les avise de las actualizaciones :)


Disculpen por las faltas de ortografía o por si hubo uno que otro tecladazo.


Sin más los quiere...


E.L


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).