Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Un Omega parecido a una flor. (Traducción finalizada) por yuniwalker

[Reviews - 8]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

"No estoy acostumbrado a este tipo de cosas."

Era vergonzoso tener que comer con todo el cuerpo siendo sostenido por las manos de Harried, pero tenía que aceptarlo porque, después de todo, su condición no era precisamente "fuerte" para ese momento.

Harried acomodó las piernas y comenzó a llevar un pedacito de melón a la boca de Natsume.

"¿De qué hablas?"

"Nunca me han dicho que les gusto, tampoco me llegó a gustar nadie alguna vez y jamás he tenido a alguien que me tratara como un amante. Incluso cuando me fui de Japón, ese tipo de temas nunca fueron algo que me llamara la atención. Ya sabes, pensé que tenía que lograr algo con mi vida primero."

"Natsume es cauteloso y cuidadoso. Eso es una virtud."

Harried asintió con orgullo por alguna razón. Tenía una sonrisa deslumbrante sobre la cara así que Natsume tuvo que apartar la mirada de él. 

"Entonces es realmente un problema que estemos actuando así en este momento."

"Como dije antes, no me importa cuánto tiempo tenga que esperar por ti así que, por favor, déjame hacer algo bueno ahora que estamos juntos".

Harried, que apretó los labios contra las orejas de Natsume, esta vez sacó un pequeño botecito de yogur. Y ya que no tenía más remedio que abrir la boca, dejaba que el príncipe metiera y colocara suavemente la cucharita para alimentarlo justo como si fuera un niño pequeño. Y tenía que decir que nunca se había sentado en el regazo de alguien ni le habían dado de comer así. Ni siquiera cuando tenía la edad para hacerlo.

"A decir verdad, me gustaría demasiado llevarte a Jashar ahora mismo... Pero no lo hago porque entiendo que Natsume se enojaría conmigo si lo hiciera."

"Es verdad."

"Sin embargo, sobre eso de volver a Japón ¿De verdad tienes que irte?"

"Así es. Pero no por ahora."

El calor que tenía en el centro de su cuerpo no había desaparecido. En realidad, una vez que comenzaba con el celo le duraba entre tres a cinco días por lo que pareció que no tenía más remedio que posponer su regreso a Japón hasta que estuviera mejor.
Harried sonrió, besó la nuca de Natsume y le dijo lo feliz que estaba por tenerlo con él aunque fuera por un poquito más de tiempo. Él estaba pensando que tenía que contactar a Kotoku más tarde para contarle lo que pasó.

"¿Está bien si nos quedamos juntos mientras tanto? Solo nosotros dos..."

"..."

Su boca se pegó a su piel así que Natsume se puso tenso por reflejo. Estaba casi seguro de que lo mordería. Y si era mordido por Harried, entonces seguramente tendría un "enlace" con él y tendrían que permanecer juntos ahora casi por la fuerza. Por supuesto, aunque negaba todo el tiempo que fueran destinados y decía lo poco que creía en estos cuentos, estaba tan asustado que quería escapar...

Y al mismo tiempo, no podía moverse por la expectativa.

(No, estoy seguro de que Harried no me morderá. Él es un caballero.)

Además, lo suyo era básicamente imposible. Él iba a regresar a Japón y el Alfa conseguiría una manera de continuar con su vida normal. Harried se rió un poco de Natsume al ver que temblaba. 

"No tienes que tener miedo de mi. Nunca te haría daño."

Su voz, suave y gentil, tenía la increíble capacidad de hacerlo derretirse.
En lugar de morderlo, chupó el lóbulo de su oreja varias veces y abrazó a Natsume contra su pecho como para que no se fuera a mover.

"Obtuve muchas cosas interesantes de estudiar en el extranjero pero, sobre todo, puedo decir que soy muy afortunado por haber conocido a Natsume en esa última fiesta... Me gustaría poder pasar un poco más de tiempo contigo después de tu celo y también, incluso me gustaría dejarlo todo para irme contigo a Japón."

El tono en el que había dicho que "quería ir a Japón con él", era tan dulce como el que utilizaría un niño. Natsume pensó que su parte adulta y su parte infantil se mezclaban bien y estaba seguro de que llegaba un momento en que eso volvía a las personas completamente locos por él. En la universidad y en su país de origen. 

"Y si no puedo, entonces te perseguiré lo antes posible así que, por favor, dame la dirección de tu casa en Japón."

"... ¿Harried no tiene algo más importante que hacer? ¿Cómo deberes reales o cosas por el estilo?" 

"Naaa. El Reino ya tiene a mi hermana y a mi hermano así que estoy seguro de que se las arreglarán de maravilla sin mi. Más bien... Creo que serían del tipo de persona que me felicitarían desde el fondo de su corazón".

Natsume sonrió. Era fácil imaginarlo rodeado de una familia feliz y cercana, reunidos para comer, contando de su día y halagando los puntos buenos del otro por toda una semana. Miró hacia la mesa y notó esta vez como habían preparado varios tipos de frutas y vasos de yogur y como seguía teniendo a ese extraño sirviente en el borde del cuarto. Aunque asistían a la misma universidad, Natsume y Harried parecían vivir en mundos completamente separados. El país, la posición, el género, la personalidad, nada combinada con lo que tenía el otro.

"Si estás en Japón, entonces yo estaré allí también".

"¿No crees que podría ser aterrador? Ya sabes, un príncipe rodeado de mortales".

"No tengo miedo en absoluto." Harry sacudió sus rodillas con una pequeña risa. "Para ser honesto, se supone que cuando me gradue y regrese a mi país, debo casarme para mantener el linaje de mi familia. Mi tío me dijo que iba a darme a su hija, mi prima, como esposa, y sin embargo yo pienso que sería mejor profundizar mis lazos con los aristócratas y políticos más importantes para comenzar a crear ganancias. Japón sigue siendo un buen lugar para empezar con eso."

"Si es así, ¿Estar conmigo no sería un problema?"

"Vamos, ¡No me voy a casar con mi prima! Las costumbres y el ambiente de mi tierra son diferentes y muchísimo más rudas que los del promedio así que, no importa a qué país me vaya, siempre habrá dificultades para mí." Harried se dio la vuelta, mirándole con unos ojos verdes que brillaban más intensamente que antes. "Pero cuando vi tu rostro dormido, cuando te sentí junto a mi, pensé que definitivamente éramos el uno para el otro. Y estoy convencido de que siempre regresaré a tu lado."

"¿De qué hablas?"

"Por ejemplo, incluso si decides que es mejor si nunca nos volvemos a ver y me dejas, siento que nos encontraremos en algún otro lugar porque ese es nuestro destino. Se siente como si pudiera llegar a tu lado sin importar cuándo, cómo o dónde o la multitud de personas que tengamos a nuestro alrededor. Algo así como cuando encuentro Utarid".

"¿Utarid?"

Era una palabra que no conocía. Harried peinó el cabello de Natsume con sus dedos largos. 

"En palabras de Jashar, es el planeta "Mercurio". Es difícil encontrarlo si no conoces como se ve y solo aparece en el cielo por un tiempo y temporada limitados. Pero es tan brillante y hermoso que es emocionante de ver. ¿Alguna vez lo has hecho?"

"No..."

Después de todo, ver estrellas era algo que parecía ser solo para los estudiantes de primaria. 

"Siempre voy al desierto para verlo. El desierto en Jashar es rojo y magnífico, pero definitivamente el cielo estrellado se lleva el premio mayor. No se puede ver a menos que haga buen tiempo así que como siempre hace sol, puedo llegar hasta Mercurio casi sin el mayor problema. El maestro que me enseñó el placer de ver las estrellas también me dijo que los príncipes eran amados por ellas así que creo que es un pequeño capricho."

El gesto de apretar los labios contra su frente estaba lleno de una infinita pasión.

Harried era correcto y confiaba completamente en los sentimientos que había desarrollado por él. Pensaba que, incluso si ambos perdían la memoria al mismo tiempo, se sentirían atraídos nuevamente al encontrarse y podrían seguir desarrollando está misma pequeña historia de amor. Sin embargo, sentirse atraídos y poder vivir juntos era algo completamente diferente. Él tenía alguien por quién vivir y Harried tenía ya a alguien con quien casarse. Había dicho que iba a "renunciar" a eso, pero la gente de su pueblo probablemente no lo perdonaría si lo hiciera.

(Vivo para Kotoku-sama.)

Pensó que definitivamente iba a darle a Harried una dirección falsa. No quería molestar a Kotoku y sobre todo, no deseaba llegar a molestar a la familia y a la gente de Harried. Era mucho mejor eso que la idea de que fuera a enlazarse con un Omega extranjero que acababa de conocer y aunque Natsume pensó en eso para empezar, fingió no notar la tristeza que emergió desde el fondo de su corazón.


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).