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Aoitori (Traducción finalizada) por yuniwalker

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El tren llegó a la estación más cercana a su apartamento. A 20 minutos de la empresa y 5 minutos del hospital Central. Había vivido en este lugar desde que era un estudiante pero, en cuanto comenzó a trabajar en la oficina, se había alegrado de que este lugar le permitiera un tiempo de viaje relativamente más corto y más fácil. 


Pasó por la entrada, tomó la cerradura automática, hizo una reverencia al conserje y luego tomó el ascensor que lo llevaba hasta el séptimo piso. Se quitó el anillo del dedo anular de la mano izquierda, lo puso en un estuche de accesorios de cuero, lo guardó en su bolso y luego sacó la llave. Abrió y cerró la puerta con cuidado de no hacer ruido. El corredor estaba brillante y cuando finalmente llegó a la sala de estar, se encontró con que Kentaro Kawachi estaba sentado en el sofá con un libro entre las manos sobre repostería. Dijo "Bienvenido", así que comenzó a dolerle un poco el pecho. 


"Estoy en casa".


"Sí. ¿Quieres beber algo?"


Kawachi pareció tener la intención de levantarse así que se negó a toda prisa.


"No, está bien. Tranquilo". 


Kawachi sacudió los hombros y dijo: ¿Por qué no? Estoy un poco pesado, pero no es nada en realidad. Antes también era así."


Kawachi estaba embarazado de casi nueve meses. Y el próximo mes, tendrían un segundo bebé.


Un hombre a menudo pasaba desapercibido en este período porque el útero lo tenían en la parte de atrás, a diferencia de las mujeres. Kawachi tenía un poco de pancita, pero fuera de eso, su apariencia era básicamente la misma de siempre. Además, su condición física no había cambiado en absoluto por lo que seguía yendo a trabajar normalmente y nadie sabía que estaba embarazado, excepto claro, por su jefa.


Kawachi colocó el té favorito de Inukai en la mesa de la sala de estar y, aunque lamentaba su preocupación tan constante cuando llegaba tarde a la casa, estaba feliz de que lo tuviera presente en su mente. Podía decirse que eran... Un par de sentimientos encontrados.


Por lo general, cuando no tenían otros compromisos, comían juntos y cuando no podían hacer eso, era su rutina diaria pasar el tiempo tomando té.


"¿Yu te dio problemas? ¿Estás bien? ¿Cómo te sentiste con eso?"


"Creo que... Ya puedo manejarlo un poco mejor."


Kawachi, que había dicho abiertamente no amar a su bebé, fue hospitalizado debido a una fuerte depresión que lo mantuvo en cama por muchísimo tiempo. Mientras tanto, le vino el celo, y ya que no podía controlarlo ni con supresores o tratamientos, incluso llegó un momento en que admitió querer morir. Inukai se sorprendió de que hablara tan fácilmente sobre el suicidio a pesar de que tenía un bebito que lo necesitaba y estaba completamente dolido porque sabía que la causa principal, era que odiaba tener precisamente un hijo de él. "Si tanto quieres morir." Dijo. "Entonces no importa lo que haga con tu cuerpo". Y por lo tanto, pudo presentar un registro de matrimonio y adquirir un cierto poder sobre su pareja. Tuvo sexo a la fuerza con él, le mordió el cuello y lo volvió su enlace. Lo embarazó prometiendo que era para controlar su celo pero, la verdad era que lo había hecho porque pensaba que si se quedaba embarazado de nuevo, esta persona pensaría que era su obligación no morir. Como si pudiera obligarlo a permanecer en este mundo exprimiendo esa parte que le hacía tener culpa.


En pocas palabras, trajo a la fuerza a otro bebé solo porque tenía miedo de perderlo.


Ambos se quedaron a vivir en su casa e incluso le había acondicionado un cuarto a su bebé. Inukai llevó a una enfermera para cuidar de Kawachi y contrató a Sawako, que se había jubilado después de cumplir 60 años, como niñera de tiempo completo para el pequeño Yu. Su madre lo había tenido cuando era una jovencita así que, ya que no sabía nada al respecto y debido a que incluso comenzó a trabajar, su hermano, sobrinos y primos fueron todos criados por Sawako. Sin embargo, fue Inukai quien siempre sintió una conexión más especial con la mujer que ningún otro por lo que se mantuvieron en contacto incluso después de que dejó de ser ama de llaves. Luego le dijo: "Tengo un bebé ahora, así que me gustaría que me enseñaras algunos trucos al respecto". Por lo que ella dijo: "Por favor, déjame cuidar al hijo de mi hijo". Renunció a su trabajo y fue de inmediato con él para comenzar a trabajar en su casa. Por supuesto, tampoco tuvo prejuicio alguno con el hecho de que Kawachi fuera un O.


Lo ideal era que Kawachi pudiera relajarse, sin estrés y monitoreado diariamente por un especialista. Además, su psicólogo le había dicho que sería mejor que regresara al trabajo lo antes posible para que no se concentrara tanto en el cuidado de su niño. Algo como, alentarlo poquito a poquito a la crianza y dejarlo por periodos cortos (y a solas) con su bebé para ver como iba reaccionando. En palabras simples, Kawachi necesita tiempo para quererlo. No que lo obligaran.


Eventualmente, Kawachi e Inukai comenzaron a ir a trabajar durante el día y en ese tiempo, dejaban a Sawako al cuidado de su niño. Sin embargo, decidieron dividir el costo de los gastos de la niñera y la enfermera porque no le parecía tan justo vivir a sus expensas.


Al principio, Inukai se resistió a dejar a su niño solito por tanto tiempo así que, incluso cuando estaba en la oficina, se comunicaba por teléfono cada hora y todos los días sin falta. Sawako, que tenía mucha paciencia con el hombre, tomaba fotos y vídeos de todo lo que pasaba con él así que, después de estar completamente convencido de que podía manejar cualquier preocupación que tuviera sobre el cuidado de su bebé, el miedo simplemente desapareció hasta que pareció olvidar que lo tenía.


A veces, en medio de la noche, Yu podía ser completamente escandaloso. Lloraba tanto que Inukai lo tomaba entre sus brazos, lo alejaba de Kawachi y caminaba alrededor de la casa hasta que se comenzaba a calmar. Y cuando no podía dejar de llorar ni siquiera con esto, entonces lo llevaba a recorrer la calle en su carreola sin importar cuanto fuera a tardarse. Pero una vez, cuando finalmente regresó a casa de un turno largo en el trabajo, se encontró con que Kawachi estaba acurrucado en el sofá de la sala con un bebé completamente dormidito sobre su pecho, probablemente porque uno se había cansado de llorar y otro había empezado a tener sueño mientras lo esperaba. Y cuando pensó que Kawachi finalmente se estaba acostumbrando a la existencia de su niño y a la vida a su lado, llegó el momento de realizarle un examen físico a Yu. Inukai dijo que podía llevarlo por su cuenta pero Kawachi insistió en que iría también. Y como resultado, le dijeron que la salud de Yu estaba perfecta pero que Kawachi estaba embarazado de su segundo hijo. 


Como era de esperar, Kawachi, a quien le dijeron el resultado del examen médico, dijo "¿En serio?" Y luego se calló. Incluso en el camino de regreso a casa, el hombre tuvo pocas palabras que decir al respecto. Preparó la leche del niño, fue a bañarse e incluso se alistó para ir a trabajar muy temprano al día siguiente. Kawachi estaba visiblemente serio a todas horas y nunca hablaba ni con la enfermera ni con Sawako sobre el bebé que tenía en el vientre. Incluso se preguntaba si había borrado la existencia del niño para protegerse a si mismo de los problemas del futuro y aún así, cuando estaba buscando la llave de la oficina en la sala de estar, encontró el cuaderno de "padre e hijo" en la mesa y también, la prueba de que estaba tomando bien sus medicamentos.


Para evitar que Kawachi acumulara estrés, le recomendaron que lo llevara lejos de casa en sus días libres así que a veces decía: "¿Por qué no vamos de compras?" O "¿Por qué no vamos al parque?" Y se lo llevaba de allí por horas y horas.


Y meses después de eso, su hermano finalmente lo contactó de repente y le dijo que sus padres querían ver a Kawachi y a su hijo para reconocerlos como parte de su familia. Decían que no podían aceptar que fuera un O aunque Inukai ya los había registrado en sus documentos y que tampoco estaban de acuerdo con la manera en la que estaba manejando todo el asunto. Y es que incluso si Kawachi no lo amaba, tenía todo el deber de asumir la responsabilidad de sus acciones diarias y ofrecerle al hombre la mejor versión de él. Les habló por teléfono para decir que se reuniría con ellos después de que la salud de Kawachi se estableciera y sin embargo, a pesar de que hablaba con toda la calma del mundo, su padre no dejaba de llamar a Kawachi un "O sucio" o un "O fácil" así que estaba comenzando a ponerse furioso. No quería que dijeran esas cosas cuando no conocían toda la historia ni mucho menos, lo que el amor de su vida había tenido que pasar. Entonces dijo:


[Si papá piensa de esa manera, está bien. Nunca volveré a cruzar la puerta de tu maldita casa.]


Y eso solo significaba que estaba casi en la deriva. Sin la ayuda de sus padres, sin un futuro en una empresa importante y sin dinero extra. Aunque claro que también pensó que era un orgullo proteger a Kawachi y a sus niños utilizando su propio poder.


Sin embargo, de repente llegó un mensaje de su hermano que decía: [No seas imbecil. Discutamos tu futuro todos juntos.] 


Él dijo:


[Si mi papá se disculpa por insultar a mi pareja, iré a hablar con él]


[¿Por qué no solo vienes a la casa para mostrar la cara de tu hijo?] 


Pero cuando le preguntó a Sawako-san, pensando que algo andaba mal con esa petición, dijo que seguramente su madre sabía que su nieto era un varón y que tal vez por eso deseaba saber si era tan lindo como lo era Inukai a esa edad. Escribió [Voy a pensarlo.] Pero incluso si dijo eso, sabía que no era el momento adecuado ni la situación correcta.


Cuando volvió a la sala, Kawachi estaba todavía en el sillón, vestido con una camiseta de manga corta, un pantalón de pijama y una taza de té caliente entre los dedos. Incluso si tenían hijos juntos, no tenían tanto contacto el uno con el otro así que, en ese sentido, eran más como "compañeros de casa" que como una "pareja con hijos". Kawachi odiaba a muerte las relaciones homosexuales así que siempre tuvo miedo de que lo odiara y escapara si hacía un gesto exagerado en su dirección. Casi como si caminara sobre hielo fino todos los días. Deseaba que lo amara y deseaba que le diera su corazón, pero no podía decírselo...


El hombre suspiró al verlo.


"¿Te dije que Yu intentó caminar un poco?"


"Vaya, ¿Es enserio?"


Kawachi le ofreció su teléfono celular de inmediato. Cuando lo tocó, Yu, que se había puesto de pie con el sofá como apoyo, comenzó a caminar unos dos pasitos antes de caerse de nalgas. Sus pies y su carita parecieron terriblemente lindos de ver así que lo repitió una y otra vez y otra vez hasta cansarse.


"Y... Antes de que regresaras, una gran polilla entró en la casa por la ventana de allá. Él comenzó a mover la cabecita de un lado para otro para seguirla pero, terminó llorando cuando se le acercó."


"Jajaja Yu llora mucho. Además, cuando lo hace puedes encontrarlo fácilmente desde donde sea que estés."


"Tiene unos pulmones muy fuertes" 


"Él es fuerte en todos lados. Y aprende tan rápido sobre todo que estoy seguro de que pronto va a ir al baño solito. Ya no vamos a tener que comprar pañales".


Kawachi se encogió de hombros. 


"Estás comprando demasiado de cualquier cosa de todos modos. Cuando vi el armario la otra noche, me sorprendió descubrir que estaba lleno de pañales y toallitas. Como dices, Yu crecerá y cambiará de comportamiento así que deberías ser más... Ay."


Kawachi pareció dejar de respirar por un segundo. 


"¿Qué pasó?"


"El bebé se movió un poco ahora." Kawachi puso su mano en la parte inferior de su abdomen y se rió. "Me patea más fuerte que Yu. Es interesante."


Inukai quería tocar su abdomen también. Quería sentir las señales de su bebé y darse cuenta de lo mucho que había crecido. Pero no podía decir que deseaba hacerlo porque podía ser que a Kawachi no le gustara su atrevimiento.


Kawachi, que seguía frotando la parte inferior de su vientre, dijo: "El nombre de este bebé... Deberías pensarlo tú".


Fue una propuesta inesperada.


"¿Yo?"


De alguna manera, empezó a sudar frío. 


"¿No es mejor que lo pensemos juntos?"


"Yo se lo di al primer niño, así que es justo que tú se lo pongas a este".


La verdad era que después de que Kawachi quedara embarazado, se había estado preguntando constantemente sobre qué hacer con respecto al nombre del bebé. Sin embargo, no habló mucho al respecto y esperó a que Kawachi diera el primer paso. Se preguntaba si el nombre saldría a relucir hasta que naciera pero, no esperaba que le pidiera algo como eso. Es decir, Kawachi dio el nombre, Yu, así que estaba bien que fuera en orden. Entendía la teoría. Pero para ser honesto, le hacía ilusión decidir con él.


No podía oponerse si no quería.


"Está bien".


"Confío en ti".


Kawachi se levantó del sillón, tomó su taza de té y se fue a la habitación diciendo: "Me voy a dormir. Buenas noches". 


Y se quedó completamente solo otra vez. 


Sacudiendo este sentimiento, Inukai entró en el baño para tomar una ducha bastante larga. Se vistió, terminó con sus tareas del hogar y se deshizo de todo su papeleo para quedar completamente libre alrededor de la medianoche.


Entró al dormitorio en puntitas para no hacer ruido.


Kawachi dormía en la cama, Yu en una cuna que le había dejado a su lado para momentos como estos y él, como siempre, dormía en un futón que estaba tendido en el suelo. Tal vez notó el ruido, porque los párpados de Kawachi se abrieron un poquito en su dirección pero, después de suspirar, pronto se dio la vuelta y volvió a cerrarlos.


Tenía a su persona favorita y a su hijo allí en el mismo espacio y a una segunda personita en camino. Debería estar feliz pero,... Se sentía tan terriblemente solo que era hasta insoportable. Amaba mucho a Kawachi y estaba loco por sus bebés. Pero aunque Kawachi estaba aprendiendo a amar a los niños, pareció completamente difícil que lo amara a él también.  


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