Notas de Helsic:
Gracias a todas por leer *-* las quiero mucho D':
El ángel y el Demonio
~ Capitulo 12 ~
Los días pasaron con una extraña lentitud como si el tiempo se hubiera eternizado desde el momento en que había peleado con LeeTeuk. En los días venideros habían cruzado sólo las palabras de rigor, hablando sólo sobre temas relacionados a los ensayos y a los proyectos de la empresa, parecían dos perfectos desconocidos, se habían convertido en simplemente dos compañeros de trabajo. En el colegio, los días dejaron de ser aquellos brillantes días en los que KangIn era el centro de atención de todos los contextos, al principio creyó que la gente a su alrededor había cambiado, pero poco a poco se dio cuenta de que en realidad quien había cambiado era él. Ahora tenía una actitud más reflexiva, más introspectiva y siempre parecía estar enfrascado en lejanos y profundos pensamientos, quizás por ello muchos de sus antiguos amigos ya no se acercaban a él, no le hablaban mucho y la soledad se hizo aún más fehaciente.
Lentamente se dio cuenta de que aquellos a quienes alguna vez creyó que podría llamar amigos en la escuela no eran más que actores secundarios en una película de bajo presupuesto, esos a quienes alguna vez llamó amigos sólo eran personas que le habían rodeado influenciados e interesados sólo por lo que él transmitía, quizás pensando que ser amigos del chico popular de la escuela les haría ser ‘cool’ a ellos también, quizás pensando que si estaban a su lado, nadie les desafiaría. Frunció el ceño molesto al pensar en este tipo de cosas, tanta basura que recoger en su vida y él ni siquiera sabía donde podría tirarla.
Las tardes de ensayos se volvieron rutinarias y KangIn comenzó a esperar pacientemente el día, la hora, el momento en el que LeeTeuk volvería a hablarle sin esa desesperante máscara de perfecta indiferencia. Porque aunque se había acostumbrado a ese trato, la idea de que de un momento a otro el mayor olvidaría las cosas y todo volvería a ser igual que antes, le taladraba el cerebro todos los días y se estaba convirtiendo en su obsesión. ¿Cuánto tiempo había pasado? ¿Un mes quizás? No estaba muy seguro, los días se habían vuelto tan parecidos unos a otros que no podía distinguirlo con claridad, pero estaban en pleno Otoño y la situación no había cambiado en lo más mínimo.
KangIn comenzó a observar a LeeTeuk con más detenimiento, buscando un leve gesto, sólo una leve ruptura en esa máscara, pero ese gesto nunca llegó, el mayor continuó comportándose tan naturalmente que asustaba y KangIn sólo podía mirarlo desde la oscuridad, si, porque LeeTeuk era la luz y él era la oscuridad. Lo fisgoneaba a cada momento como un animal al asecho, deseando ver un punto de quiebre, un momento de debilidad.
Pero el tiempo pasó y lo único que comenzó a notar fue la forma cariñosa como LeeTeuk abrazaba a EunHyuk cuando esté le pedía consejo en las prácticas.
Es especial con EunHyuk…
No claro que no, aquello sólo era un abrazo de amistad, su mente sólo imaginaba cosas absurdas, EunHyuk sólo era un Dongsaeng más.
¿Y que me dices de SungMin? Mira como le toma las manos con esa ternura, como le sonríe mientras le habla.
No, claro que no, se volvió a repetir en su mente, SungMin es sólo un Dongsaeng más y LeeTeuk, tiene la asombrosa facultad de tratar increíblemente bien a todo el mundo.
¿Y HeeChul? Últimamente salen mucho, los has visto beber juntos y hablar entre risas, hay mucha cercanía entra amos ¿verdad?
Es sólo por la edad, no seas tonto. Los Hyungs salen de vez en cuando a divertirse, necesitan ese espacio para hablar… de cosas de Hyungs.
Está bien, está bien ¿Pero y DongHae? A DongHae si le trata de manera diferente ¿verdad? Has visto como le conciente como a un niño pequeño, como le compra dulces le tranquiliza y defiende cuando EunHyuk y Xiah lo molestan…
Eso es sólo porque… porque DongHae no sabe como defenderse. Es sólo porque LeeTeuk es un buen Hyung, nos cuida a todos y se preocupa por todos por igual.
¿En serio y también por ti?
Aquel pensamiento le hizo temblar el cuerpo ligeramente con un escalofrío. ¿También te cuida? ¿También se preocupa por ti?. No, no era así y KangIn lo sabía muy bien, desde que había dicho esas terribles cosas, LeeTeuk había cambiado drásticamente con él, no había familiaridad en sus gestos, no había cercanía todo era un vació absoluto y nauseabundo. El incidente en el colegio, la noche en vela estudiando matemáticas y la clase de Taekwondo parecían recuerdos borrosos e imprecisos en su memoria, demasiado lejanos y demasiado irreales, le costaba creer que aquello alguna vez le hubiera sucedido, que ese joven que ahora observaba con testarudez, alguna vez hubiera sido ese mismo joven de sus recuerdos.
Pero las cosas fueron soportables y relativamente tolerantes hasta ese domingo en la tarde, ese domingo en el que sintió que moría y luego regresaba del mundo de los muertos sólo para obtener una sangrienta y cruel venganza. Aquel había sido un domingo caluroso y habría sido aburrido y perenne, de no ser porque decidió que dejar de pensar en LeeTeuk de aquella forma tan obsesiva sólo le traería dolores de cabeza y decidió acompañar a Hangeng.
Había visto al Chino saliendo del otro apartamento, llevaba un maletín azul oscuro colgado a su espalda y estaba vestido con un simple vaquero azul y una camiseta blanca con rallas negras. Le extrañó verle sólo, pues HeeChul siempre estaba a su lado y si no era él, pues estaba Kibum. Decidió en cuestión de segundos que acompañaría a Hangeng a donde fuera que este iba, porque cualquier cosa era mejor que quedarse en el apartamento pensando en LeeTeuk.
Alcanzó a Hangeng cuando este iba un par de pisos más abajo y le dijo que lo acompañaría a donde iba. Hangeng se había mostrado sorprendido pero no molesto y habían resultado yendo una enorme librería del centro de la ciudad, donde el Chino buscaba un diccionario de Verbos y conjugaciones en Koreano. KangIn le ayudó a buscar entre los estantes y estuvieron más de una hora ojeando libros y escogiendo los que serían más óptimos para su estudio. Al cabo de ese tiempo, salían de la librería y Hangeng cargaba una bolsa con un diccionario y dos libros de gramática.
- Yo soy mucho agradecido - Dijo Hangeng cuando cruzaban la calle - ¿Quiere Youngwoon comer conmigo? - Le preguntó el chino sonriendo. KangIn aceptó porque su estómago rugía pidiendo algo de comida y muy pocas veces un amigo le daba por invitarte así no más a comer.
Fueron al centro comercial favorito de KangIn, al que solía frecuentar cuando aún conservaba su novia, Hangeng no lo conocía y se mostró emocionado desde el momento en el que entraron, mirando las vitrinas con aprensión y admirando la perfecta, sencilla y minimalista decoración que le daba un toque agradable y familiar al recinto.
Comieron en el mall de comidas del último piso. KangIn había pedido un helado doble de vainilla con trozos de fresa bañado en gotitas de chocolate y Hangeng había pedido un Banana Split con dos bolas de helado de coco y arequipe. Comieron animadamente, hablando sobre tonterías de sus vidas, KangIn corrigiéndole a cada segundo los errores de pronunciación y conjugación a Hangeng. Fue un rato agradable, Hangeng era un chico encantador con el que no resultaba muy difícil hablar, además siempre había alguna anécdota o un detalle curioso e interesante que contar sobre China.
Se quedaron un poco más allí luego de comer, hasta que finalmente decidieron ir a los juegos, Hangeng pagó la cuenta y KangIn se sintió incómodo por unos instantes que no duraron mucho porque una vez en los juegos de video el podría invitar al otro. El local, era tan enorme que si no andabas con cuidado te perdías entre las montañas de máquinas de videojuegos, estaba bastante lleno y era razonable para un domingo en la tarde. Habían muchas familias allí, padres esperando con rostros cansados a sus hijos que jugaban en los arcades y muchos adolescentes compitiendo entre si en los juegos de pelea.
Hangeng quiso jugar primero en el Pump it Up* y terminaron jugando varios créditos, KangIn se sorprendió al ver la increíble habilidad del Chino para seguir el ritmo de la música y pisar las flechas en el momento correcto, él por el contrario era un completo torpe y perdió muchas veces sintiéndose frustrado. Recordó que era igual en las prácticas, Ryeowook y él eran los que peor lo hacían siempre, les costaba mucho coordinarse y seguir el ritmo de los otros, no como DongHae y EunHyuk quienes tenían una química perfecta al bailar, viéndolos a ellos dos y a Hangeng uno podría imaginarse que las coreografías eran un juego de niños. Pero no lo eran y KangIn tenía que hacer un esfuerzo sobre humano cada que les enseñaban un nuevo paso. Había estado trabajando fuertemente en los últimos días, quizás por eso había dejado de ser tan activo en el colegio, siempre amanecía demasiado cansado, como si no hubiera dormido durante la noche.
Hangeng puso IVAH de H.O.T, su canción favorita decía mientras le subía la dificultad y la velocidad a sus flechas, KangIn, quien ya sudaba considerablemente puso la canción en nivel fácil, porque sabía que sería una total perdida de tiempo si intentaba seguirle el ritmo a Hangeng.
- H.O.T yo fan - Dijo Hangeng emocionado mientras comenzaba la canción - Cuando estoy en China, siempre escuché H.O.T - Finalizó.
- ‘Estuve’ - Le corrigió KangIn y Hangeng sonrió alegremente.
- Cuando estuve en China - Repitió, KangIn también sonrió, entonces la canción comenzó y ya no pudieron continuar hablando. El menor intentó poner toda su atención a las flechas y poner todo su esfuerzo para pasarla en ‘A’, lo vio como un reto, si podía hacer coreografías en la academia ¿Cómo no iba a poder pasarse una canción en ese nivel de dificultad tan sencillo?.
Estaba enfrascado en esos pensamientos, cuando con el rabillo del ojo, creyó ver a alguien que le resultó muy familiar, giró su cabeza y entonces fue cuando lo reconoció, no cabía duda era LeeTeuk. Esa gran nariz era inconfundible, también ese hoyuelito en su mejilla, pues estaba sonriendo. Las flechas en la máquina comenzaron aparecer, pero KangIn ya no estaba interesado en la canción y se quedó mirando a LeeTeuk quien le estaba dando la espalda, más bien estaba de medio lado pero parecía no haber reparado en la presencia de KangIn. ¿Qué estaría haciendo por allí? Se preguntó KangIn olvidándose completamente de que aún continuaba de pie sobre el tablero del Pump it up y estaba a punto de perder la canción. Se sintió un poco mal al verle sólo e inclusive sintió el impulso de acercarse e invitarlo a jugar con él y Hangeng, pero entonces ocurrió algo completamente inesperado.
Contuvo el aliento cuando una chica llegó dando brinquitos y se colgó de su brazo como un gancho de ropa, la chica tenía un algodón de azúcar reposado en una de sus manos y él le sonrió al verla. KangIn abrió tanto los ojos que le dolieron, aquella chica…
Aquella chica era su ex-novia.
No había duda. ¡Era ella!... y ¡Estaba con LeeTeuk!. Su corazón se contrajo tan fuertemente que lo trajo de nuevo a la realidad, respiró con fuerza sintiendo que un nudo de pelos se le formaba en la garganta.
- ¿Qué pasando? - Preguntó Hangeng cuando terminó la canción y notó que KangIn había perdido - ¿Qué mirando? - Preguntó de nuevo al no obtener respuesta, el Chino se giró y entonces alcanzó a divisar a LeeTeuk Hyung y a la chica - ¡JungSu Hyong! - Exclamó sorprendido - ¡¡¡HYOOOOONG!!! - Le gritó y movió sus manos frenéticamente para llamar su atención.
LeeTeuk se giró y notó a Hangeng y a KangIn subidos sobre la plataforma del Pump it Up. Valla casualidad tan conveniente, pareció pensar, pues KangIn lo vio sonreír de manera extraña mientras se acercaba a ellos con la chica aún a su lado.
- ¡Hola Dongsaengs! - Exclamó LeeTeuk con naturalidad, KangIn quien aún continuaba sintiendo esa bola de pelos sólo alzó la mano ligeramente para saludarlo.
- Jugando Pump it Up - Comenzó a decir Hangeng feliz - ¿Quiere Hyong jugar? - Le preguntó recostándose en la barra de metal de apoyo de la máquina.
- Hola Youngwoon - Dijo la chica con gesto altivo y se pegó aún más al brazo de LeeTeuk, en sus ojos había orgullo, parecía como si disfrutara restregándole en la cara que estuviera saliendo con su amigo. Su expresión parecía decir “A mi nadie me termina…” Y KangIn lo comprendió, aquello era como una venganza.
- ¿Quiere Hyong y amiga jugar? - Preguntó Hangeng de nuevo - Podemos tomar algo - Invitó con una sonrisa inocente. KangIn deseó que la respuesta fuera un rotundo no, tragó saliva con dificultad deseando salir corriendo de ese lugar.
- Hangeng, eres un dongsaeng muy amable y atento, pero me temo que ahora no puedo - Le respondió LeeTeuk - Nos veremos esta noche en el apartamento - Finalizó.
- ¿Este chico es también de SM? - Preguntó ella muy interesada y reparando a Hangeng como si se tratara de una carne en exhibición. LeeTeuk asintió con la cabeza y luego de despedirse con la mano, se alejó caminando y ella lo siguió.
KangIn se quedó allí de pie sintiendo que el bullicio a su alrededor se enmudecía, que los colores y las líneas se desdibujaban para quedar todo sumergido en una profunda oscuridad en dónde el único punto de luz era el cuerpo delgado de LeeTeuk que se alejaba caminando. No había tenido más ganas de jugar, ¡no tenía ganas de nada maldita sea!. Se debatía entre extrañas sensaciones y tuvo que sentarse en uno de los bancos y cerrar los ojos para poder pensar con más claridad.
- ¿Youngwoon-shii? - Escuchó la voz de Hangeng, abrió los ojos y notó que el Chino traía dos refrescos en sus manos, le ofreció uno a KangIn quien le dio las gracias - ¿Esta malo? ¿Esta malito? - Preguntó con expresión preocupada. KangIn miró a Hangeng e intentó sonreír pero no lo consiguió y sólo se llevó la bebida a los labios.
- Si quiere volver a casa, se puede - Continuó diciendo - Si no esta bueno, volvemos a casa -
- Estoy bien - Dijo KangIn refiriéndose a su salud. - Estoy bien Hangeng, no tenemos que volver a casa aún - Y Hangeng quien entendía mejor de lo que hablaba, se mostró feliz y comenzó a enumerar todos los juegos a los que aún quería ir.
***
Esa noche cuando regresaron a la casa, HeeChul se puso histérico porque Hangeng había desaparecido sin avisarle y le había llamado durante toda la tarde al móvil y este no había contestado, cuando el Chino revisó su celular, tenía 10 llamadas perdidas de HeeChul, le explicó que seguramente por el ruido del local de videojuegos no había escuchado sus llamadas. KangIn le dio las gracias a Hangeng por tan agradable tarde y se fue a su habitación.
Entró en el cuarto y se encontró a LeeTeuk allí. Estaba recostado en su cama leyendo un libro. KangIn cerró la puerta y todos los sentimientos experimentados en la tarde se abultaron como un enjambre de abejas africanas sobre su cabeza, tragó saliva observando en silencio a ese delgado joven ¡En quien no había dejado de pensar todos esos días!. Era increíble pero LeeTeuk había ocupado sus pensamientos desde el día en que habían discutido, para bien o para mal siempre estaba presente en su cabeza y se odio mucho por eso.
- ¿Cómo termino tu día? - Le preguntó despacio, prevenido, agazapado como un animal al asecho. LeeTeuk levantó la vista de su libro con indiferencia antes de contestar.
- No me quejo - Respondió alzando los hombros.
KangIn se sintió infinitamente incómodo. De repente deseó decirle a LeeTeuk que no andará con su ex novia, porque ella era una chica manipuladora y superficial, porque ella lo había usado a él sólo porque era de SM. Por que…
Porque no soportas verlo con alguien más ¿verdad?
Tonterías. Porqué no me gusta perder. Se repitió molesto con su traicionero subconsciente. Pero fuera lo que fuera, sentía esa necesidad de prevenirlo, de alejarlo de ella.
- ¿Estás saliendo con EunJin? - Murmuró sin pensarlo. Lo preguntó directo y su voz pareció carrasposa. LeeTeuk se puso de pie y se acercó a KangIn, había una insólita sonrisa de vampiro en su pálida cara.
- ¿Por qué? ¿Acaso no puedo? - Fue la respuesta de LeeTeuk quien ahora estaba a escasos 10 centímetros de su rostro. KangIn experimentó una extraña sensación como cuando un profesor te pide la lección e inesperadamente la olvidas por completo, un frío en su estómago le recorrió por la columna como una serpiente viva y húmeda resbalando por su espalda.
- No… no es eso - Respondió, su voz sonó ¿asustada?. ¿Qué era aquello? ¿Era miedo lo que sentía? ¿Miedo a esa sonrisa y a esa mirada oscura y abismal de su Hyung?.
- ¿Entonces…? - Preguntó LeeTeuk sin dejar de mirarlo a los ojos, profunda e intensamente. Nunca lo había mirado así, nunca había tenido su rostro tan cerca como para percatarse de todo lo que esa mirada podía transmitir, en como se arrugaba ligeramente la piel de la comisura de sus labios y posteriormente se formaba ese curioso hoyuelo en su mejilla derecha.
- Es que ella… bueno ella - Comenzó a decir KangIn. ¿Pero que demonios te pasa KangIn? Es sólo tu Hyung, enfréntalo como el hombre que eres, es mucho más delgado que tu, es mucho más débil, no hay nada que temer…
Si lo hay y lo sabes. Ese chico da miedo, mucho miedo, tanto miedo como el monstruo que había en el armario cuando eras pequeño, ¿Lo recuerdas? Claro que si, como olvidar esos ojos penetrantes e inyectados en sangre, esa sensación que te oprimía el pecho… Es justo como esto ¿verdad?
- Ella es asunto mío - Terminó LeeTeuk con suficiencia - Sabe hacerlo muy bien con la boca… bueno, eso ya debes saberlo ¿verdad? - Finalizó. Aquello fue como haberse tomado un trago de vinagre, sus puños se tensaron inconcientemente hasta que los nudillos se volvieron blancos por la fuerza, la locura manifestándose en su cabeza como una enfermedad infecciosa, las ganas de golpearle ese rostro de niño bonito presentándose en su boca como un puñado de tierra sucia.
- Cállate imbécil - Logró decir tomándolo por el cuello de la camisa, pegando su frente contra la de él. Sin apartar un segundo su mirada de esos ojos afilados como puñales.
- ¿Y que harás si no me callo? - Dijo LeeTeuk con una sonrisa energúmena, su rostro de ángel transformado en un verdadero demonio - ¿Me golpearás hasta el cansancio? ¿Eso es lo que harás? - Se quedó unos segundos en silencio como para que sus palabras hicieran un efecto más adecuado - Pégame, si es que eres tan hombre - Le incitó.
KangIn sintió el aliento de LeeTeuk sobre sus labios y en un inesperado impulso frenético, lo besó.
Continuará…!!!!!
Nota de Helsic: ;_______;’’’ aishh ahora si no se q hacer D:!
¿Bueno que tal? *^*
Pump it Up: Maquina Coreana de baile *A* fantabulosa!!! Si no la han jugado JUEGENLA es una orden Dx!! 