El ángel y el demonio segunda parte.
Capitulo 27
"Cuestión de prioridades"
Sólo hasta que tuvieron ambos los pies en tierra (es decir en el aeropuerto Incheon), KangIn no le devolvió el teléfono movil a LeeTeuk. Una vez pasaron imigración, LeeTeuk finalmente revisó su buzón de mensajes.
- ¿153 llamadas perdidas? - Exclamó con los ojos abiertos en la sorpresa.
- ¡Ja! yo tengo 170 llamadas perdidas y más de 50 mensajes de voz, creo que me quieren más a mi - Se burló KangIn una vez en la sala de espera. LeeTeuk arrugó el entrecejo.
- No es gracioso - Comentó y continuó mirando su movil - Llamaré a los chicos... - Entonces antes de que pudiera marcar, KangIn le arrebató el teléfono - ¿Que haces? - Se quejó.
- Oh vamos Hyung... ni siquiera hemos salido del aeropuerto ¿y ya quieres saber de trabajo? - Exclamó KangIn metiéndose el movil al bolsillo del pantalón.
- No es sobre trabajo... puede ser algo importante - Comentó LeeTeuk aún con el ceño fruncido.
- Hyung... - KangIn pareció arrepentirse de lo que iba a decir, reflexionó unos instantes y luego posó una mano en el hombro de LeeTeuk amisosamente - Vamos a llegar primero al apartamento, vamos a dejar las maletas, a preparar la comida, porque muero de hambre... y te prometo que escucharemos los mensajes juntos ¿de acuerdo? -
LeeTeuk lo miró con reproche mientras caminaban hacía la salida más cercana donde buses y taxis con destino a Seúl pasában a gran velocidad.
- Tienes hambre porque no comiste lo que ofrecieron en el avión - Se quejó halando su maleta hasta la puerta que se abrió instantáneamente con su presencia.
- ¿Llamas comida a ese engrudo grasoso? - Se quejó KangIn, aliviado de que LeeTeuk no estuviera aparentemente enojado. LeeTeuk sonrió.
- Te quejas como una chica - Comentó el líder - Si continuas así, no tendré necesidad de conseguirme una novia -
- ¡Yah!... ¡aigo!... - Balbuceó KangIn sonrojándose - ¡Sube al taxi idiota! -
***
Dos horas después, se encontraban en el apartamento, había llovido durante el transcurso desde el aeropuerto, pero ya escampaba cuando arribaron al lugar. El recinto los recibió sombrío y abandonado, el piano aún destrozado los saludó tétricamente desde la esquina, LeeTeuk arrastró las maletas hasta la sala y las dejó ahí, mientras KangIn ordenaba comida por telefono.
- Oye, ¿no piensas arreglar ese piano? - Preguntó LeeTeuk observando como la madera torcida y astillada y las teclas parecían una espantosa sonrisa de un monstruo al que le faltaban un par de dientes.
- ¿Arreglarlo? ¡Si fuiste tu quien lo daño! - Exclamó KangIn - Deberías comprarme uno nuevo - LeeTeuk se llevó las manos a la cintura y justo cuando iba a responder, el timbre de la puerta sonó anunciando al repartidor del restaurante.
- ¿Pizza? - Exclamó LeeTeuk mientras observaba la caja blanca sobre la mesita de centro y se sentaba en uno de los muebles de la sala.
- Huele delicioso ¿verdad?, es de una Pizzería muy cercana, así que supuse que llegaría más rápido - Explicó KangIn abriendo la caja, una enorme pizza Napolitana cubierta de mucho queso esperaba por ser devorada, el menor tomó un pedazo y le dió un gran mordisco con entusiasmo - Deligiogo gomo sigmgpe - Exclamó con la boca llena de comida.
- Traga antes de hablar - Comentó LeeTeuk y extendió la mano - ¿y mi telefono? -
- Oh, es verdad - Dijo KangIn luego de tragar, se llevó la mano al bolsillo y sacó ambos móviles, undió un par de botones en el suyo y puso el altavoz para escuchar los mensajes dejados durante la ausencia. Las familiares voces no tardaron en dejarse escuchar:
"Hyung, contéstame por favor, he llamado cientos de veces a Jungsoo-Hyung, pero no me contesta, está contigo ¿verdad? - EunHyuk"
"KangIn-shii, ¿Cómo está Teuk-Hyong? ¿Está comiendo bien? ¿Lo estás cuidando bien? - Hangeng"
"Hyung, hize tarta de mora, pasaré por el apartamento para dejártela, a Teukie-Hyung le gustará - Ryeowook"
"¿Donde te has metido? Wookie y yo fuimos a buscarte pero no estábas ¿Dónde está Jungsoo-Hyung? - DongHae"
"¡Yah! ¡tu imbécil! contesta el maldito teléfono o me voleré loco - HeeChul"
"¿Está realmente Teukie-Hyung contigo, ¿Pasó algo malo? - Yesung"
"Estoy muy preocupado por la salud de Hyung - ShinDong"
"¡Tonto! - SungMin"
"Si... soy yo. Nunca llamo, así que sabes lo preocupado que estoy ¿verdad?, contesta por favor - Kibum"
"Hola Hyung, mis padres han decidido celebrar una eucaristía para orar por la salud de Teukie-Hyung y la pronta recuperación de KyuHyun, para el próximo sábado a las 6 en la iglesia de siempre, espero que puedan asistir, es muy importante para mi familia y para mi... he llamado a Teukie-Hyung pero no contesta, Confío en que lo estés cuidando bien...pero por favor respondeme - Siwon"
El mensaje de Siwon no era el último, pero LeeTeuk de un manotaso, silencio el telefono. KangIn alzó la vista, aún masticaba un pedazo de pizza.
- ¿Que pasa?- Preguntó KangIn viendo como el rostro de su acompañante se oscurecía.
- Te lo dije...¡Te lo dije! No debimos habernos ido así, ¡sin avisar! ¡debimos haber contestado el telefono! - Exclamó visiblemente molesto.
- No es para tanto Hyung - Comentó KangIn en un vano intento por tranquilizarlo - Sólo están un poco preocupados, pero sólo estuvimos fuera un par de días... -
- ¿Sólo un par de días? - Exclamó LeeTeuk elevando su voz - ¿Es que acaso no te importan los sentimientos de los chicos? ¿Por qué sólo piensas en ti mismo? -
KangIn casi se atraganta con la pizza a medio masticar que tragó inmediatamente al escuchar eso. La sangre le subía rápidamente a la cabeza.
- ¿Que dices? - Gritó, algunos pedacitos de queso volaron hacía la mesa - No estába pensando sólo en mi mismo, estába pensando en nosotros, si no dije nada ni les devolví una sóla llamada era porque quería... estár a solas contigo -
- No había necesidad de preocuparlos así, de igual forma hubieramos podido estar juntos - Se defendió LeeTeuk y se puso de pie.
- ¡Quería que pensarás sólo en mi! Que durante un par de días, me prestarás toda tu atención, es todo - KangIn también se puso de pie y sus puños golpearon la mesa, la pizza tembló y la Coca cola casi se riega en los vasos.
- Sigues siendo el mismo niño que reclama atención - Lo apuñaleó LeeTeuk. Estába muy molesto por lo que no midió el alcanze de sus palabras y lo que profundamente estas hirieron a KangIn. El menor se quedó mirándolo sin dar crédito a lo que acababa de escuchar, los puños le temblaban ahora.
- Si, ¡sigo siendo el mismo idiota! - Exclamó KangIn, mirando a su interlocutor intensamente,
¿Que significaba todo eso? era tan absurdo que carecía de sentido, sus manos aún temblaban cuando KangIn se dejó caer sentado en el borde de la bañera, una vez se había levantado de la mesa y se había encerrado en el baño. Sentía como si se hubiera tragado una pelota de tenis, no, una de tenis era demasiado pequeña, ¡se había tragado una de voleyball!, porque su cabeza palpitaba con fiereza y le costaba tragar saliva. Hacía mucho tiempo no se sentía tan enojado como en ese momento, por unos instantes creyó que iba a perder el control y él más que nadie sabía que pasaba si perdía el control. Por eso encerrarse en el baño había sido la mejor idea.
No se había encerrado allí por cobardía, no era que no pudiese sostenerle la mirada a LeeTeuk, no era que no hubiesen palabras para continuar la discución, era que simplemente, odiaba demasiado a su Hyung en ese momento como para no hacerle daño. Y no quería hacerle daño a un convaleciente, aunque las palabras de ese convaleciente lo habían herido produndamente, sin necesidad de tocarlo.
¿Pero que mierda había dicho? ¿Que seguía siendo el mismo niño que reclamaba atención?
KangIn se miró las palmas abiertas de las manos. Habían pasado muchos años desde aquella vez en la que se había sentido tan estúpido e impotente. Él ya no era ningún niño y mucho menos uno que reclamaba atención inmaduramente. Y LeeTeuk era la última persona en el universo de la cual esperaba que esa sentencia saliera de sus labios. ¿No lo conocía LeeTeuk más que ninguna otra persona? ¿No había sido testigo de cuanto había cambiado desde el momento en que sus vidas se cruzaron en el pasado?
Idiota, Imbecil y estupido. Todo el tiempo preocupándose por los demás. Todo el tiempo pensando en ellos...
¿Y donde quedaba él? ¿Donde quedaba todo lo que había hecho por él? ¿Eran más importantes unas estúpidas llamadas?
***
LeeTeuk se quedó de pie luego de escuchar el sonido de la puerta del baño al cerrarse. La pizza abandonada parecía burlarse de él desde la mesa y las ganas de comerla habían desaparecido. Se sentó lentamente en la silla una vez más y se quedó mirando como lentamente las burbujas de aire y gas ascendían en el vaso con coca cola. KangIn había actuado una vez más como un niño pequeño, había corrido a encerrarse en el baño como un niño pequeño, había escapado del problema que había causado, una vez más sin importarle nada más que si mismo. El telefono movil aún continuaba en la mesa y los demás mensajes esperaban ser escuchados, por unos instantes tuvo la tentación de continuar escuchando, pero el dongsaeng testarudo seguía en su mente, molestándolo, recordándole su actitud.
¿Por qué KangIn tenía que comportarse de manera tan irresponsable? Desde un comienzo, irse de viaje había sido una locura y más aún sin avisarle a nadie. Quizás si ellos fueran unos chicos comunes y corrientes, aquello no habría sido más que una feliz locura adolescente, pero ellos no eran unos chicos comunes y corrientes. Nunca más lo serían y eso lo tuvieron claro desde el momento en que aceptaron ser parte de SM. Ellos pertenecían a una empresa y debían reportarse si salían, no contaban con la libertad de viajar libremente por el país, pero más importante aún, tenían a 11 hermanos a quienes cuidar, 11 personas que se preocupaban por él, 11 personas con sentimientos... ¿Por qué no podía ver él eso?
Cada uno de esos mensajes le habían golpeado el corazón. Sus voces preocupadas, sus gritos y sollosos, podía imaginarlos nítidamente al otro lado del telefono, podía ver a HeeChul gritando con indignación, podía ver a DongHae al borde de las lágrimas, inclusive Kibum, podía verle sudar mientras marcaba los números una y otra vez.
¿Por qué KangIn no veía eso?
"Sólo están un poco preocupados"
Había dicho. Que tontería, como si todo se solucionara con eso, como si sus sentimientos de angustia se disolvieran fácilmente. ¡Como si no significaran nada!
LeeTeuk suspiró con impotencia y tomó el telefono entre sus manos, habían otros 50 mensajes de voz por escuchar...
***
Cuanto tiempo estuvo en el baño, KangIn no estaba seguro, quizás una media hora o quizás más. Con cada minuto que pasaba, la rabia inicial se disipaba para dejar paso a la tristeza y a la decepción, ahora se encontraba dentro de la bañera, acostado cuan largo era en ella. ¡Que bien le vendría un cigarrillo en ese momento! pero le había prometido a LeeTeuk que no volvería a fumar, sonrió, que patético debería parecer ahora metido en una bañera vacía, aún vestido con la ropa del viaje.
Entonces escuchó los golpes en la puerta. Ahí estaba LeeTeuk probablemente para recordarle que todo el mundo era más importante que él. Que los chicos estaban por encima de todo y que él, aunque se esforzara por demostrarle sus sentimientos, era simplemente eso, un amigo que se follaba y nada más. No su primer prioridad después de todo. ¿Entonces que había sido todo aquello que le había dicho en la isla? Sobre la relación y sus dudas, sobre Sohee... ¿Donde quedaba todo eso?
- Youngwoon - Se escuchó la voz de LeeTeuk al otro lado de la puerta.
- La puerta está abierta - Contestó KangIn, lo cual era cierto, no se había preocupado por ponerle seguro.
LeeTeuk entró unos segundos después, su rostro no reflejaba ninguna emoción en particular, pero ciertamente parecía haberse bebido una botella de vinagre. El mayor se recostó en la puerta unos minutos más y se quedó en silencio. KangIn tampoco dijo nada, no quería hablar del asunto, ya se había atormentado lo suficiente con monologos en su cabeza. Ninguno de los dos dijo nada en los siguientes 15 minutos que parecieron una eternidad.
Entonces fue LeeTeuk quien rompió el silencio.
- Youngwoon - Lo llamó, mantenía la mirada en el suelo - Lo siento -
KangIn abrió los ojos de par en par, no se esperaba eso. Generalmente cuando discutían era él quien pedía disculpas primero, de alguna manera le guardaba respeto a su Hyung y casi siempre encontraba pertinente hacerlo primero. (Además de que casi siempre era su culpa) pero escuchar esas palabras en labios de LeeTeuk era... extraño.
- Estaba muy enojado - Continuó el mayor visiblemente incómodo - y no medí mis palabras, realmente... no pienso así -
- Jungsoo - Esta vez fue KangIn quien habló - Voy a hacerte una pregunta y espero que me respondas sinceramente - LeeTeuk alzó el rostro y asintió suavemente, KangIn tomó un poco de aire y aún mirando hacía la pared, continuó - ¿Que hubiera pasado si te hubiera dejado contestar el telefono? ¿Que hubiera pasado en la isla? ¿Hubiera sido igual? -
LeeTeuk abrió los ojos conmocionado con la pregunta, se mordió el labio inferior y bajó la mirada nuevamente al suelo, ahora empuñaba sus manos con fuerza, KangIn giró su rostro lentamente notando esa reacción.
- Esta bien... te lo diré - Comenzó a hablar de nuevo el mayor - No tiene caso seguir ocultándolo -
KangIn sintió que el corazón se le detenía en el pecho. ¿Había un secreto? ¿Aún había algo que LeeTeuk no se atrevía a decirle?
- Siempre... me he preocupado por todos, como líder es mi tarea así que lo asumí honestamente, intentando ser responsable y hacerlo bien - Explicó LeeTeuk, parecía muy nervioso al hablar de ese tema - Pero con el tiempo, ellos dejaron de ser sólo compañeros de trabajo para convertirse en parte de mi familia, ustedes son mis hermanos... -
- Lo se - Afirmó KangIn - Así que no puedes dejar de ser LeeTeuk el líder de Super Junior por unos momentos... para estar conmigo -
- No - Negó el mayor alzando la mirada, posándola en el rostro de su interlocutor - No puedo dejar de ser Park Jungsoo, el hermano mayor que vela por su familia - Le corrigió, se quedó unos momentos callado para continuar - Siempre he sido yo el que se ha preocupado por todos, pero desde el accidente... - Ahora se veía realmente perturbado, como si estuviera a punto de desqubrajarse o deshacerse en pedazos - Desde el accidente, he tenido que soportar la compación y la preocupación de todos -
KangIn lo miró inquicitivamente, LeeTeuk se deslizó por la puerta lentamente hasta quedar sentado en la loza fría del baño al lado del lavamanos.
- He tenido que soportar las visitas de todos en el hospital, sus lamentos, lágrimas, ¡su dolor! un dolor del cual yo soy el causante, una preocupación y una angustia que son mi culpa - Exclamó, se llevó una mano al cabello y se lo revolcó descuidádamente - Algunas veces fingía dormir para no tener que enfrentar sus rostros y palabras tristes, pero entonces era peor, porque podía escuchar sus conversaciones a mis espaldas, es horrible Youngwoon... ¡no me gusta que se preocupen por mi! por eso, cuando escuché los mensajes en el telefono, pude vislumbrar sus rostros al otro lado de la línea, pude sentir ese dolor y esa preocupación de nuevo... fue por eso que... -
LeeTeuk cerró los ojos con fuerza, ¡genial! ahora tenía ganas de llorar. Odiaba ser tan débil frente a cosas como esas. ¿Cómo podía un lider ser así?.
- Hyung - Esta vez fue la voz de KangIn - Se preocupan porque te quieren - Comentó y sonrió por primera vez - Si no fueras el maravilloso lider que eres... no habrían tantos mensajes en el movil -
KangIn se levantó de la bañera y caminó hacía LeeTeuk que continuaba sentado en el suelo. Le sonrió y le extendió la mano para que se levantara, LeeTeuk lo miró duditativa, sus ojos brillosos ahora, su expresión dolida convirtiendose en una belleza extraordinaria para el menor.
- Lo siento de verdad - Volvió a repetir. Mientras tomaba la mano de KangIn y este lo alzaba con fuerza.
- Yo también lo siento - Susurró KangIn a LeeTeuk que se mantenía cabizbajo - Así que estamos a mano - Agregó dándole un par de palmaditas en el hombro, LeeTeuk sonrió tímidamente. - Aún tenemos 2 horas antes de la eucaristía de Siwon, así que no tenemos excusa para llegar tarde -
- Es verdad, hoy es sábado - Agregó LeeTeuk con una sonrisa más amplia. KangIn le pasó un brazo por la cintura y lo atrajo contra su cuerpo, de repente parecía más delgado y frágil que de costumbre, luego de eso le depositó un beso en el cabello, aspirando su aroma a Shampoo de lavanda.
***
Luego de terminar de comer y cambiarse de ropa, ambos partieron hacía el sector donde vivía Siwon con sus padres, bastante alejado del apartamento a decir verdad. En el pasado habían sido invitados por la familia Choi a diversas comidas y celebraciones en su casa, por lo que conocían muy bien la iglesia que quedaba a un par de bloques de la casa. El sacerdote era muy buen amigo de la familia desde que Siwon tenía memoria y había sido también un excelente consejero, inclusive con los negocios de su padre. El auto de KangIn arribó al iglesia directamente, 5 minutos antes de que la ceremonia comenzara.
Bajaron del auto rápidamente, ambos vestían un poco más sobrios para la ocación, con colores oscuros y trajes de corte elegante. La iglesia no estaba muy llena de personas, KangIn supuso que se trataba de una misa privada sólo con los familiares y amigos más cercanos. Cuando se asomaron en la puerta pudieron ver a todos los miembros restantes de Super Junior vestidos con trajes elegantes, ¡Inclusive los que no eran Cristianos! todos estaban allí, hablando en voz baja mientras esperaban el inicio de la misa.
- ¿T..teukie-Hyung? - Exclamó la voz de DongHae que fue el primero en divisarlos. Todos se giraron y mostraron caras de asombro. En cuestión de segundo estaban rodeándolos, haciéndo muchas preguntas y por supuesto mucho ruido.
- ¿Estás bien Hyong? - Preguntó Hangeng mientras Siwon abrazaba a LeeTeuk por la espalda.
- Estoy bien - Se apresuró a decir LeeTeuk, entonces DongHae comenzó a lagrimear.
- Estabamos tan preocupados - Comentó EunHyuk dándole palmaditas en el hombro a DongHae para reconfortarlo.
- ¿Donde demonios te habías metido animal? - Esta vez fue HeeChul, quien golpeó a KangIn con un puño en el hombro, haciéndolo encojer de dolor - ¿Estás seguro que estás bien?-
- Aigo... - Se quejó KangIn sobándose la parte golpeada.
- Si, estoy bien... - Sonrió LeeTeuk - Siento mucho haberlos preocupado -
- ¿Por qué no contestabas el telefono? - Exigió saber Kibum
- Fuimos al apartamento de Hyung... pero no estaban allí - Intervino Ryeowook.
- Bueno nosotros...- Intentó explicar LeeTeuk cuando fue KangIn quien habló.
- Simplemente quería que descanzara bien, por eso apagué su movil y lo escondí para que no pudiera responderlo, sabía que si se ponía a responder llamadas de todo el mundo no descansaría propiamente, ya saben como es nuestro Teukie, siempre preocupándose por todos - La explicación no pareció convencerlos a todos.
- ¿Y porque no contestabas tu el telefono? - Preguntó esta vez Yesung, a su lado ShinDong hacía un puchero.
- Por que sabía que me pedirían hablar con Hyung, así que apagué el mio también - Explicó KangIn como si fuera algo obvio.
- Pero... pero fuimos a tu apartamento a llevar la tarta que había preparado Wookie y...- Se quejó SungMin y fue entonces cuando la campana de la iglesia sonó y el sacerdote apareció en el palco hacíendo señas para comenzar la eucaristía.
- Ya nos veremos a la salida - Susurró HeeChul - Nos debes una muy buena explicación -
KangIn asintió con una sonrisita falsa mientras se acomodaba en los asientos de madera de la iglesia junto a LeeTeuk.