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El que persigue, consigue por Athan_Anubis

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Notas del capitulo:

Hola a todos,

Siento mucho la demora, pero como había explicado, tenía que estudiar. Y eso que solo me ha ido más o menos jejeje

Aquí vengo con el siguiente capítulo,

Espero les guste

 

El que persigue, consigue

 

 

 

Capítulo 4: Al resguardo de la oscuridad de la Noche

 

 

En la oficina de la Hokage se encontraban 6 jounin de la élite de Konoha, todos atentos a lo que la Godaime indicaba.

 

 

- Como ya han de estar conscientes, la misión en la que van a estar ustedes no permite el más mínimo error.

 

 

Kakashi, Neji, Sakura, Sai, Sasuke y Naruto asintieron con un movimiento de cabeza de manera firme.

 

 

-Van a partir hoy mismo a la Aldea oculta de la Arena. Cuando lleguen, el Kazekage ya estará informado y ustedes van a estar su disposición. El líder de la misión será Naruto.

 

 

Ninguno de los presentes objetó, pues sabían, desde que lo hubieran visto ser asignado para la misma misión, que él sería quien los dirigiría.

 

 

Años atrás, la decisión de que el de ojos azules fuera el líder de la misión sonaría extremadamente absurda, pero ahora era diferente. Todos los presentes sabían que Naruto había madurado, que ya no era una persona que tomaría a la ligera una decisión que tendría repercusiones serias. Sabían del extremo esfuerzo que hizo en sus entrenamientos, no solo en ninjutsu, taijutsu y genjutsu, también hubo practicado todo acerca de estrategia, del control de sus emociones cuando el momento lo ameritaba y de conocimiento en general. No había ninja en Konoha que desconfiara de sus habilidades, a excepción de los consejeros.

 

 

Así, Naruto se hubo convertido en un líder capaz en el que todos confiaban.

 

 

- En una hora en la puerta de la entrada.- continuó la rubia.

 

 

Después de dichas esas palabras, los jounins desaparecieron dejando una voluta de humo cada uno.

 

 

 

*******

 

 

 

Cinco minutos antes de que se cumpliera la hora, la Hokage ya se encontraba en la entrada, momento en el cual Naruto llegaba y se colocaba al lado derecho de la mujer.

 

 

Por un tiempo hubo silencio, hasta que fue roto por la mujer.

 

 

Tres palabras.

 

 

-Confío en ti.- dijo la rubia sin voltear el rostro, justo antes de que llegaran los demás ninjas.

 

 

El voto de confianza que le hubo dado Tsunade oba chan, significaba más de lo que en realidad parecía. No solo era confianza de una Hokage en Naruto, sino, era la confianza que le tenía aquella rubia a la que consideraba especial.

 

 

Como a un familiar.

 

 

Después de la muerte de Jiraiya se sintió un tanto desolado. Sentía que había perdido una parte importante en su vida que por fin había conseguido, algo que le había estado haciendo falta. Un familiar. Mas se dio cuenta que aquel hombre formaba uno de los participantes de su familia, que aunque ya no lo iba a ver, podría recordar los buenos momentos que habían pasado, pues, había otra persona que formaba parte de su familia. Que se preocupaba por él.

 

 

Tsunade.

 

 

No respondió, pero interiormente se alegró de las palabras que le había dicho la rubia.

 

 

*******

 

 

Los 6 jounin partieron en dirección a la aldea oculta de la Arena. Demorarían tres días en llegar, por lo cual solo quedaban otros tres días para abastecerse, descansar e ir a la Aldea oculta de la Roca.

 

 

Cada uno iba sumido en sus pensamientos.

 

 

Naruto estaba deliberando mentalmente la mejor manera de dividirlos al momento de la lucha. Confiaba en cada uno de ellos, todos eran fuertes y astutos. Luego de pensarlo y debatirse mentalmente por unas horas, llegó a una decisión. Ya más tranquilo, se fijó en la hora y, se dio cuenta que hubo estado tan distraído que no vio que ya era hora de comer.

 

 

Se detuvo y los demás le imitaron.

 

 

-Vamos a comer y luego continuamos.

 

 

Todos se sentaron en la forma que quisieron. Sai, Sakura y Kakashi se sentaron cerca. Neji un tanto alejado y ni que decir de Sasuke, que no conforme con no estar a su lado, se sentó de tal forma que les daba la espalda.

 

 

Sasuke sabía que Naruto se acercaba, ya lo sentía venir. Sonrió de medio lado con una altanería propia del que sabe que va ganar algo antes de haber empezado.

 

 

Quizás podría ponerle una correa en el cuello.

 

 

- Siempre tan teme - escuchó el azabache que le decían, mientras se sentaban a su costado.

 

 

- Pareces mi mascota - fue lo único que atinó a decir, para luego coger un palito que se encontraba cerca y tirarlo - A por él.

 

 

“Tan cretino como siempre.”, fue lo que primero que se le vino a la mente a Naruto.

 

 

- Muy gracioso teme - dijo Naruto haciendo el amago de tirarle un golpe, que Sasuke esquivó fácilmente.

 

 

Pero “el que ríe último, ríe mejor”. Además que, “en boca cerrada no entran moscas”.

 

 

- Pero si soy tu mascota, espero que me hagas un espacio en tu casa, que me alimentes y sobretodo que de vez en cuando me hagas mimos - continuó el de ojos azules, doblando el cuello para acercar su cabeza a la mano de Sasuke.

 

 

Dichas esas palabras, se escucharon unas carcajadas bastante fuertes detrás de ellos. Ver la forma en la que Naruto abordaba al azabache cada vez que podía era sumamente gracioso. Tenía cada ocurrencia.

 

 

Kakashi ya no sentía como que hubiera aconsejado a una pared. Bueno, tal vez sus consejos no se estuvieran llevando a cabo, es más, ni siquiera teniéndose en cuenta. Pero, quizás así era mejor. Era mucho más divertido ver los esfuerzos de Naruto para “conquistar” al azabache. Si Kakashi hubiera sabido con anterioridad que las cosas se darían de esa manera, entonces hace mucho que el rubio sabría que estaba colado hasta los huesos por Sasuke.

 

 

Por su parte, el azabache simplemente ignoró el comentario, enfrentándose a dos cuestiones interesantes.

 

 

En primer lugar, ¿desde cuando era tan hablador?, es decir, él nunca hablaba más de lo necesario. Y su respuesta le llegó de manera contundente, “dime con quién andas y te diré quién eres”. Resultaba que Naruto era una plaga que estaba en cada parte de su vida.

 

 

En segundo lugar, ¿Como es que cada cosa que él dijera tendría que convertirse en un comentario acerca del… “amor” que le profesaba Naruto?. Si bien es cierto que estaba acostumbrado a que se le declararan, es más, que le hostigaran hasta el punto de querer lanzarles un genjutsu de tal magnitud que fuera capaz de dejarlas inconscientes, con que estaban enamoradas de él, nunca hubo alguien como el de ojos azules. De momentos parecía tener una neurona y en otros, le sobraban. Justo como la noche anterior, cuando estaban comiendo en Ichikaru.

 

 

Aquél comentario que le hubo hecho Naruto lo desconcertó un poco. El rubio siempre había sido una persona que lograba sorprender, pero pensó que después de tantos años conociéndolo, sabía que iba a hacer y que no. Ese comentario lo recordaba claramente.

 

 

Pequeñas frases bien dichas, dejan grandes huellas.

 

 

Era raro. Ya de por sí es extraño que tu amigo se te declare, ahora había que aumentarle la novedad de que era un acosador.

 

 

Se dice que nunca se puede conocer a una persona totalmente, y al parecer, podría ser verdad.

 

 

 

Los únicos que no rieron ante lo hecho por el de ojos azules fueron Sasuke y Neji, siendo este último el que propuso continuar el camino.

 

 

 

*******

 

 

 

Prosiguieron en dirección a la Aldea oculta de la Arena, hasta que se tuvieron que detener, pues era de noche y necesitaban descansar. Esa noche harían guardia, primero Naruto y luego Neji. Los demás se echarían a dormir.

 

 

Decidieron no armar una fogata, puesto que se veía con claridad gracias a que había luna llena y el ambiente estaba caliente debido a que era verano.

 

 

Naruto estuvo parado hasta que todos se ubicaron en la posición en la que iban a dormir. Cuando creyó que los demás se encontraban en los brazos de Morfeo, se acercó a Sasuke.

 

 

Y comprobó una vez más que el maldito engreído y altanero tenía de que creerse.

 

 

Su piel tenía un color tan claro que gracias a la luz de la luna parecía brillar, sus rasgos, a pesar de ser masculinos, le gustaban hasta en lo más mínimo. Pero más allá del físico del azabache, lo que más le gustaba de Sasuke, era que era Sasuke. Porque aún los defectos del azabache le gustaban, es más, cada pequeña parte que constituyera parte de él, le gustaba.

 

 

Estaba muy distraído mirando al azabache, que no notó que hace mucho la respiración del objeto de su observación, no era tan regular.

 

 

- ¿Cuánto tiempo piensas estar ahí viéndome? - dijo abriendo los ojos y sin mover ni una parte más de su cuerpo - No puedo dormir si me observas tan fijamente.

 

 

Como un flash, le llegaron a su mente los consejos de Kakashi, sobre todo uno que le sonaba repetidamente en la cabeza.

 

 

Sexto: Cada vez que tuviera una mínima oportunidad y estuvieran solos, debía de meterle mano, para que se fuera acostumbrando.

 

 

Bueno, si ya había sido descubierto, nada de malo tendría que aprovechara la oportunidad que se le estaba presentando. Si bien es cierto que no estaban solos, los demás estaban dormidos, así que para el caso era lo mismo.

 

 

Rápidamente se subió a horcajadas encima del vientre de Sasuke, conteniendo con sus piernas los brazos del azabache. Lo miró a los ojos por unos minutos, negro y azul, en los cuales ninguno dijo nada, los labios del contrario se veían tan apetecibles.

 

 

El rubio, no lo pensó más, rápidamente acercó su rostro al del azabache, solo los separaban uno o dos centímetros, sus respiraciones chocaron, ambos seguían mirándose fijamente a los ojos.

 

 

Naruto lo besó.

 

 

Al principio solo posó sus labios en los del contrario, al ver que el otro no decía nada ni hacía nada por evitarlo, comenzó a moverlos lentamente, solo rozándolos, eran suaves y tibios, deliciosos. Sintió una respuesta, los labios de Sasuke también comenzaron a moverse, movimientos decididos, con muchas más ansias que los de él. Decidió probar más de esa boca tan apetecible, con sus labios succionó el labio inferior de Sasuke, lo mordió levemente, a lo cual el otro dejó escapar un suspiro de dolor y placer, desliz que aprovechó para colar su lengua en la boca del contrario. Una batalla, ambas luchaban por el dominio, palpándose entre sí y todo aquello que encontraban en sus camino.

 

 

Hasta que Naruto comenzó a sentir un leve dolor en la boca y la lengua, que aún seguía explorando la de Sasuke, el dolor, en vez de amainar, seguía en aumento, hasta que no soportándolo tuvo que emprender la retirada. Ahí notó la respuesta a aquel acontecimiento.

 

 

Hacía tiempo que Sasuke había aprendido a manipular el chidori, para que este fuera capaz de recorrer por cualquier parte de su cuerpo que él deseara, no causándole daño a él, pero sí a quien lo tocara, así fuera un puñetazo o cualquier ataque, el que conseguía más daño era el atacante y no así, el propio Sasuke.

 

 

- Cuando quieras éstos - dijo Sasuke pasando la lengua por sus labios - ven por ellos. Pero también vas a tener una sorpresita como la de hoy.

 

 

Dicho eso, cerró los ojos y comenzó a dormir.

 

 

Sasuke, debido al tiempo que pasó con Orochimaru, aprendió a dormir estando lo suficientemente consciente para saber si estaba siendo vigilado o si iba a ser atacado. Sus sentidos habían adquirido una gran práctica, y ahora, sin él buscarlo, sus sentidos estaban siempre alerta a cualquier ataque, por lo que la intensa mirada de Naruto sobre él, no le permitía dormir.

 

 

Naruto lo observó por un rato hasta que de un momento a otro sonrió de medio lado, con una sonrisa más propia de Sasuke que de él. Si el azabache pensaba que por ello se iba a amilanar, se iba a rendir, o poner triste, pues muy mal pensado. Había que aceptar que por un momento se quedó desconcertado ante lo dicho y hecho por Sasuke, pero…

 

 

El que juega con fuego, se quema”.

 

 

Si Sasuke quería jugar con fuego, no iba a salir chamuscado.

 

 

Iba a salir carbonizado. De eso se iba a asegurar él.

 

 

 

*******

 

 

 

Desde que se había echado, se hizo el dormido. Claramente Naruto esperaba hacer algún movimiento, pues se notaba en sus facciones las ansias, y como buen maestro de él y el azabache, no se iba a perder detalle de los avances que tuvieran. Lo observó con detalle, primero se había acercado a Sasuke, y luego lo había besado. Eso le había alegrado, puesto que, algo de lo que le había enseñado estaba siendo puesto en práctica. Sus esfuerzos no habían sido en vano. Pero esa alegría, pasó a ser sorpresa, su otro alumno le estaba correspondiendo al beso, eso si no se lo esperaba. Conociendo a Sasuke, hubiera jurado que pondría un poco más de resistencia, aunque pudiera ser que estaba un tanto excitado, y es que cualquiera estaría en esa situación, Naruto, era muy bueno en la cama, o al menos eso le había parecido.

 

 

Quizás algún día podría probar algo con el rubio, solo para asegurarse de si sus suposiciones eran acertadas.

 

 

Un poco después, vio las verdaderas intenciones de Sasuke, sonrió ante ello. Las cosas se iban a poner interesantes. El chidori siempre le había parecido una técnica fascinante.

 

 

Luego vio algo que le desconcertó, pues eso sí no se lo esperaba ni de broma. Uno de los jounin, Neji, estaba despierto y con uno de sus puños apretado dolorosamente, mientras veía la escena protagonizada por el rubio. Averiguaría un poco más al respecto.

 

 

 

*******

 

 

 

Con la idea de saber que era lo que iba a pasar entre sus alumnos, estuvo pendiente toda la siguiente noche, pero no ocurrió nada, dado que estarían vigilando Sai y Sakura.

 

 

Así pasaron dos días y dos noches. En el tercer día, llegaron a su destino.

 

 

Kakashi recordaba aquél lugar en las mismas condiciones, pero había algo que se notaba cambiado, no por ello menos importante.

 

 

Las personas, ya sean ninjas o pobladores normales, parecían ser felices de habitar en ese lugar. Sus rostros ya no tenían rastros de aquellas facciones asustadas o encolerizadas, ahora eran un tanto relajadas y serenas. Solo un buen líder podría lograr algo así.

 

 

Y ello le lleno de curiosidad.

 

 

Recordaba claramente al ahora Kazekage. Solo lo hubo visto tres veces en su vida, la primera fue en el examen del Chunin, y ese ninja, representaba una de las armas secretas de esa aldea. Recordaba claramente los ojos de aquél chico, bellos ojos aguamarina que se mostraban llenos de ira, soledad y resentimiento. La segunda vez que lo vio fue cuando Konoha solicitó la ayuda de la Aldea aliada, el cambio en el chico había sido sustancial. Si bien es cierto que no era alguien extrovertido como Naruto, vio que en sus ojos ya no había tantos sentimientos acumulados, parecían más serenos, y sabía que eso era por el de ojos azules, como llegó a comprobar la tercera vez que lo vio. Después de tres años de la partida de Sasuke, sus caminos se volvieron a cruzar, la misión era rescatar al Kazekage, y vio como los hermanos del de ojos aguamarina, creían en Naruto, para ayudar a su hermano.

 

 

Cuando lo rescataron y revivieron, otra vez sus ojos buscaron los de aquél joven, ahora eran tan diferentes de cuando los vio la primera vez. Lo que mostraban aquellos ojos aguamarina, le gustó.

 

 

Tranquilidad.

 

 

Kakashi estaba un tanto impaciente por ver como habían cambiado esos ojos aguamarina en ese periodo que no los había visto.

 

 

 

Notas finales:

Bueno, espero haya sido del agrado de ustedes.

A que ahora Sasuke estuvo genial ¿verdad?, auqnue me molesta que le haga eso a mi Naruto jejeje

Nos vemos la siguiente semana.

Espero les haya gustado la continuación.

 


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