Tomé el autobús a la casa de mi hermano y saque mi teléfono, sabía que lo que iba a hacer era un poco masoquista pero necesitaba saber que me excusa me daría Naoyuki.
-hola
-hola Natsu- saludo con su voz entrecortada- ¿y este llamado?
-te extrañaba- contesté- ¿te oyes un poco agitado pasa algo?
-es que estoy en el gimnasio- mintió- estoy un poco ocupado en este momento, nos vemos mañana
-en realidad hoy- comenté- me dieron un día libre, ya voy camino a Tokio
-eh… tu, es que hoy tengo una reunión muy importante- volvió a mentir- por qué no vas donde tu hermano por hoy y mañana nos vemos
-supongo que está bien- baje mi cabeza- hasta mañana
-hasta mañana-corto el llamado
Baje mi cabeza y volví a llorar, no quería ver Nao con otra, no quería que no me mintiera, pero tampoco quería terminar con él. Me limpie el rostro y baje frente al departamento de mi hermano subí hasta el decimo pisos y toque la puerta de su casa.
-¿me dejas pasar?-pregunté cuando Aoi abrió
-¿Natsuki que te paso?-preguntó mirándome preocupado- tus ojos están hinchado
-yo no puedo seguir con esto- contesté abrazando a mi hermano- yo creía que estar con Nao era suficiente, pero no puedo soportar verlo con alguien mas
-Natsu- mi hermano me abrazo con fuerza y caminamos hasta el sofá- yo te dije que esto iba a pasar
-siento no haberte hecho caso- baje mi cabeza
-¿y qué piensas hacer?-preguntó levantándose para ir hasta la cocina
-terminar, no sé si lo que nosotros tenemos se puede llamar algo, pero creo que lo mejor es terminar con lo que sea que tengamos
-es lo mejor- me sonrió mientras me acercaba una taza de té- se que no debería decir esto, pero Nao no es para ti
No respondí y me quede mirando la taza
*
Salí del departamento de mi hermano muy temprano. Había dormido unas pocas horas en la noche ya que no podía dejar de pensar en Nao. Había ensayado cientos de veces la forma de decirle que esto no podía seguir pero no encontré la forma correcta.
Abrí la puerta del departamento y pude ver a Nao viendo televisión
-buenas- salude acercándome lentamente hacia él
-Natsu- se levanto de sillón y me dio un fuerte abrazo- vamos a la cama
-Nao yo- me dio un largo besos y me relvo al curto a tropezones. Caí sobre la cama y Nao siguió besándome yo cerré mis ojos y solo pude pensar en la muchacha que había estado aquí el día anterior- lo siento hoy no estoy de humor
-está bien-pude ver la molestia en su rostro- supongo que esas cosas pasan- dijo levantándose de la cama
-lo siento- baje mi cabeza- ¿ya desayunaste?
-no aun no
-voy a ir a preparar algo- le sonreí
-gracias- beso mi mejilla
Caminé hasta la cocina y prepare un poco de arroz, unas salchichas y pescado, para que comieran un buen desayuno japonés
-que delicioso aroma- se acerco a mí y me abrazo por la espalda- adoro como cocinas, en especial tus postres
-me gusta cocinar-contesté sirviéndole un poco de arroz- pero hoy no hay postre
-estoy bien con esto, la actriz del nuevo drama en el que estoy se supone que cocina- comentó riendo- pero en verdad creo que no puede hacer ni un sándwich
-no seas malo- baje mi cabeza- tu tampoco cocinas muy bien
-eso es verdad- metió un poco de comida en su boca- pero te tengo a ti para no morir de hambre
-Nao yo- baje mi cabeza. Era ahora o nunca, si no le decía a Nao que quería terminar hoy no lo haría jamás- he estado pensado esto hace un tiempo, pero no sabe si decírtelo o no
-dime- me sonrió- ¿qué pasa?
-¿lo que nosotros tenemos que es?
Dejo su plato y me miro seriamente
-supongo que una especie de relación abierta, yo puedo salir con quien quiera y tu puedes hacer lo mismo si quieres
-entonces si yo te digo que estos saliendo con alguien más a ti no te importaría
-para nada- volvió a mirar su plato- no tengo derecho a exigiste algo que yo no hago, creo que algo se te quedo prendido dijo mirando la olla
-el ramen- salte hasta la olla y la apague antes de que se derramara mas- lo siento, enseguida limpio
-no te preocupes- se levanto de su silla para acercarse hasta mi- no es necesario que lo hagas ahora- me tomo por la cintura
-Nao estamos en la cocina- dije zafándome de su agarre- ve a terminar tu desayuno y déjame limpiar esto
-luego se limpia- me subió a la mesa y comenzó a besarme
-Nao no en la cocina- Naoyuki ignoró mis palabras y siguió besándome mientras su mano se deslizaba por mi pantalón- Nao…
Se detuvo al sentir el timbre. Me levante de un salto acomode mi ropa y fui a abrir. Era su representante
-hola Natsu- me sonrió- ¿esta Nao?
-en la cocina- dije acompañándolo hasta donde se encontraba mi “novio” comiendo un poco de arroz
-hola tío- saludo al hombre- ¿ya desayunaste?
-acabo de llegar del aeropuerto así que aun no como nada-contestó el hombre sentados junto a su sobrino
-¿quiere un poco?-pregunté mostrándole lo que había preparado
-por favor- le serví un plato al hombre y me quede la su lado-esta delicioso
-gracias- baje mi cabeza-yo me retiro, voy a cambiar las sabanas y lavar la ropa
Salí del lugar y comencé a limpiar el departamento, estuve un largo rato lavando y dejando la ropa al sol y Nao seguí hablando con su representante
-Natsu yo voy a salir con mi tío- dijo dirigiéndose a la a habitación-vamos a una reunión así que probablemente llegue antes de la cena
-está bien
-¿te agrada mucho Naoyuki?-preguntó su representante
-el es un gran amigo-contesté mientras recogía algunas cosas
-¿por eso vienes a verlo cada semana?
-me siento en deuda con el- dije con mi cabeza baja- se que Nao no es muy ordenado y siempre esta trayendo chicas diferente a el departamento, por lo que traer a casa a alguien extraño para que limpie no debe ser muy bueno
-no creo que sea bueno que pases mucho tipo con Naoyuki-comentó su tío
-¿por que dice eso?
-estoy listo-Nao salió de la habitación y se puso su lentes de sol- nos vemos luego Natsu
Me despedí de ellos y volví a mi tarea de limpiar, tomé los platos y sin mucha concentración los comencé a lavar. Tenía que hablar con Nao si o si esta noche, no soportaba entrar a esa habitación si pensar que no solo esa chica si no que cientos de otras estuvieron hay con el hombre que amaba.
Nao llego a la casa después de la cena con algunas bolsas y una gran sonrisa.
-Nao tenemos que hablar- dije en cuanto lo vi
-claro dime- contestó mientras buscaba algo en las bolsas que traía consigo
-no sé como decirte esto pero yo
-lo encontré- saco un pequeño amuleto
-¿y eso?
-la semana pasada grabamos en un templo y vendían pequeños amuletitos, pero había olvidado la bolsa en la oficina- estiro su brazo y me acerco el presente
-¿es para mí?-pregunté tomándolo
-claro- me sonrió- es salud, así nunca te enfermaras
-gracias- le di un tierno beso en los labios
-¿qué era lo que en querías decir?-preguntó sentándome en sus piernas
-yo…- era ahora o nunca- bueno yo… no es nada- le sonreí y bese sus labios
-vamos- me levantó y me llevo hasta el cuarto
-¿no estás cansado después de la reunión?-pregunté mientras se montaba sobre mi y comenzaba a quitarme la camiseta
-para nada
-pero…- no encontraba ninguna excusa para zafarme
-estoy bien Natsu- me beso suavemente- déjame aprovechar el tiempo que nos queda
-Nao- lo miré a los ojos antes de que vilera a besarme- te amo- dije cerrándome mis ojos y dejándome llevar.
*
Era un idiota pero un IDIOTA con letras mayúscula. Me levante de la cama y miré a Nao dormir tranquilamente. Me di una ducha. No le podía decir que no ante él, solo al escuchar su voz hace que toda mi determinación (si es que alguna vez la tuve) desapareciera. Estaba profundamente enamorado de Nao y no podía hacer nada contra eso.
-aun es temprano ven a la cama- Nao abrió sus ojos y me llamo a su lado
-me tengo que ir- dije tomando mi bolso- había olvido que tengo que entregar un trabajo en conjunto, mi compañera me envió un mensaje ayer en la noche muy enfadado
-no puede ser después, son apenas las siete y treinta-comentó- vamos quédate un poco más
-si me voy ahora llegare alrededor de las doce, lo siento mucho
Se levanto de la cama, se puso su ropa interior y se acerco hasta mí
-entonces hasta la próxima semana
-gracias por todo- le di un largo beso, no quería que este momento se acabara pero era por mi bien- te amo
-lo sé- acaricio mi cabello y me sonrió
-te amo mucho- me abrase con fuerza a él antes de salir del departamento
Caminé hasta la parada de autobús con la cabeza baja. No había encontrado una mejor forma de irme que mentirle acerca de la escuela, era la última vez que vería a Nao y no quería que el momentos e arruinara por su cara enfadada
Tomé el autobús y escribí un mensaje más de diez veces, ya que no podía encontrar las palabras adecuadas. Compre el ticket y me subí al tren que estaba a punto de salir, me acomode en un asunto y volví a mirar el teléfono, di un largo respiro y envié el mensaje que había escrito mientras iba en el autobús “Las relacione abiertas no son para mí. Sé que tú me habías aclarado las cosas desde el primer día y yo lo acepté. Pero mi corazón ya no puede aceptar compartirte con alguien. Espero que podamos volver a ser amigos como antes. Con cariño Natsuki”. Este era el final, Nao lo leería y todo volvería a ser como antes, lo veri apenas una vez al año cuando fuera a ver a sus padre y solo se acercaría a mí para decirme hola.