¡Hola Ali!
¿Sabes una cosa? Te juro que si estuvieras aquí, o por lo menos más cerca, te golpearía mucho… ¡Te estoy odiando desde aquí! ¡Y odio a Diana! ¡Y a la chica del crush! ¡Y a mi! (bueno, a mi no tanto…) Más bien… ¡odio a todo el mundo hoy!
Te preguntarás… ¿Y a esta que le pasa? (y si no te lo preguntas, pues muy mal ¿Qué clase de mejor amiga a distancia eres?… aunque te contaré de todos modos…)
Pues, como sabes, hoy viernes, cumplo mi primer semana de clases… y pues, te cuento… ¡vivo con la chica del crush!... fue algo bastante interesante… te contaría, pero como estoy súper molesta contigo…
…
Bueno, ya, si te cuento… Resulta que pues, luego de mi insomnio del lunes por la ridícula chica del crush, me levanté de malas. Fui a la escuela, pero por más de malas que quería estar, cuando la vi sentada en su banca con unos audífonos tan despreocupada, sonreí bobamente (si, primer razón por la que me odio yo). Como no quería quedar como idiota de nuevo, simplemente decidí que, hasta que se me ocurriera algo, no iba a hacer nada, y como dices “dejar caer todo por su peso” (y esa es la primer razón por la que te odio a ti… ¡que consejo más tibio!). En fin, pues, a media mañana, luego de hora y media de aburridísima clase, me salí al baño a lavarme la cara, tú sabes, para no quedarme dormida. (Conste que fui yo primero)… el punto es que Sofía llego al baño minutos después, pero no me noto. Estaba hablando por teléfono con un alguien, y le dijo que aun no encontraba lugar para vivir… así que … ¡que se me prende el incienso! Quise salir de mi “escondite” y ofrecerle el depa, digo, al fin que nos falta alguien, pero dudo que lo hubiera aceptado por la primera mala impresión mía… así que me puse brillante… Dianita se sentía algo culpable, pues como se supone que su hermana se iba a venir a vivir con nosotras, ni ella ni yo hicimos por buscar a otra persona… así que cuando estuve segura de que Sofía regreso al salón, fui a buscar a Diana y le conté de mi “nueva compañera”… se decidió (si, entiéndase que casi la obligue) que ella le ofrecería el departamento. Y así fue… ¡y ella acepto!
Si, claro, Diana omitió que vivía conmigo… digamos que “fingió un encuentro casual con la chica nueva, donde hablaron y mágicamente Diana la invito a vivir con nosotras”… Si te preguntas porque Diana hizo eso… la respuesta es sencilla, adivina quien lavará los trastes ¡toda la semana!
En fin, el punto es que el mismo martes ya estaba durmiendo en casa… “nos presentó” y “nos súper sorprendimos” al darnos cuenta que somos compañeras de clases. Le dije que habíamos empezado con el pie izquierdo, y ella me vio con algo de duda… ¡que me encantan todas sus expresiones! (si, segunda razón por la que me odio…)
Como el cuarto en el que duermo es mucho más pequeño que el de Diana, ellas dos compartirán cuarto, cosa que no me incomoda. Como sea, a pesar de que tuvimos una cena tranquila (entiéndase tranquila por callada, donde cada una de las tres tenia su rol… Diana hablaba sin parar, Sofía escuchaba, sonreía y evitaba con maestría las preguntas hacia ella, y yo, obviamente, pretendía escuchar, pero estaba más concentrada en verla a ella) y que pude dormir bien, me levante tarde y ellas dos se fueron sin siquiera despertarme
(lo sé, que rudo) así que no pude tener mi momento de charla con Sofía… porque en ese momento, había decidido que iba a acercarme a ella para saber quien rayos es y que tiene que me parece tan atractiva.
Llegue al salón y hasta yo escuche a las inútiles de mis amigas (razón porque las odio a ellas) como se burlaban de Sofía, de manera “sutil”, que de sutil no tiene nada, porque todo el salón estaba escuchando. Las calle, defendiéndola frente a todos, cosa que no me pareció una estupidez como la vez anterior… el punto es que la chica crush solo se levanto, me sonrió cínicamente (bueno, ahí no sabia que era su sonrisa de cinismo) y dijo “oh, gracias por defenderme, que no sabía que tenia un autoestima tan baja que me iba a poner a llorar porque ni siquiera puedo con esto sola… enserio gracias”, y se sentó de nuevo… dejándonos a todos callados… ¡estúpida niña! (y por eso la odio a ella)
Me repateo su actitud… ¡ahhh!... me senté bufando de coraje, y por más que quise concentrarme, no pude… si, así es eso, un enorme circulo vicioso… ella me desconcentra (ya sea porque me pone como idiota o porque me deja frente a todo el salón como una), no pongo atención a la clase, cuando me doy cuenta, me enoja más, me quita el sueño y me levanto de peor humor… ¡mi vida es un caos!
Ese día (miércoles) ya no intente ningún acercamiento, estaba de tan mal humor que no hice nada, ni en la escuela ni en el depa… ¡me valió!... a ella pareció que le daba igual, cosa que me puso más de malas… así que me fui a dormir muy molesta…
Pero creo que el universo se divierte conmigo… ¡me va a volver loca! El jueves las tres (Dianita, Sofía y yo) salimos medianamente temprano, así que estuvimos en la casa. De repente no vi a la chica del crush, pero no me importo… Dianita me mando por algo a su cuarto, y yo, ya algo acostumbrada a que solo vivíamos las dos, entre sin tocar ni nada… y la vi… acostada en la litera de abajo, totalmente dormida… parecía un ángel… no pude moverme, no podía hacer nada… volví a sentir, y con más fuerza el estúpido magnetismo… como si poseyera su propia gravedad y me jalara hacia ella… se quedo dormida mientras leía, pues en su pecho descansaba el psicoanalista… interesante que se de tiempo para leer cosas no-químicas… me pare frente a ella, y note mi propio nerviosismo… sudaba, temblaba ligeramente, escuchaba mi respiración, pesada y complicada… cuando fui consiente de nuevo, ya estaba acortando el espacio entre ambas, con las manos apoyadas a cada lado de su cabeza… me asuste de lo que pude haber hecho, pero ella seguía con el mismo gesto tranquilo y hasta un poco risueño… ignorante de lo que casi hice… salí de ahí casi corriendo…
Me encerré en mi cuarto con la idea de no volver a salir de ahí nunca jamás en la vida… no al menos hasta que tenga mil años… y pues… lo peor estaba por venir… no pude dormir casi nada de nuevo; a las tres de la mañana salí por un poco de agua y la vi en la cocina… el problema, ahora estaba en pijama… Nada muy provocativo, un pants algo holgado y una blusa pegada que poco dejaba a la imaginación, pero en mi condición, te juro que tuve que voltearme para poder controlarme… asumió que la ignoraba, y en realidad, en ese momento no me sentía con la fuerza para desmentirla. No dije más y me fui a acostar de nuevo… y pues… me apena un poco admitir que los pequeños ratos que podía conciliar el sueño, solo veía imágenes de ella… y pues, de mí… en digamos… amm… posiciones sugerentes… y pues… ¡Ash! ¡Dejémonos de tonterías, que tuve sueños eróticos con ella y ya!... Y antes de que empieces con preguntas tontas… sí, la imagine desnuda, sí, imagine que la besaba, y si, imagine que lo hacía con ella… Lo más horrible no era tener el sueño en si… sino que la estúpida persona que lo provoca esta apenas cruzando el pasillo…
Y hoy ha sido el día más horrible de mi vida… imagínate, toda la semana con la cabeza hecha un lio, casi sin dormir… ¡yo! ¡Sin dormir! Ando de súper mal humor… y lo peor del caso… en todas las clases me estaba durmiendo… y deja tú el problema con los profes… ¡imagínate! Que en cuanto cerraba los ojos o la veía, por más corto que fuese el momento, volvían a aparecer las imágenes de mi sueño… he estado todo el día completamente roja, abochornada y pues, para que mentir, sintiéndome del asco… es horrible… bueno, el sueño no estuvo para nada mal… pero, ¡no! ¡por Dios! ¡Que ella es una chica, igual que yo! ¡Que apenas y la he visto! ¡Que no puedo, no debo! Nunca, nadie me había dejado como idiota frente a tantas personas, frente a mi misma y ella lo logra sin poner mucha intención… Nunca (aunque no lo creas) había tenido sueños eróticos con nadie… ¡Menos con una chica! ¡Me estoy volviendo loca! ¡Ayuda!
Y pues, ahora me odio principalmente porque “yo” la traje a vivir a mi departamento…
Así que ahora si planeo internarme en un monasterio refundido en lo más profundo del Tibet… donde de la chica del crush no quede nada…
¿Dónde estas ahora que más te necesito?
Ali, me siento muy confundida, enojada y frustrada… ¡tengo miedo pues!
Respóndeme por favor… porque contigo es con la única persona que puedo hablar enserio, siendo solo yo…
Saludos, y un abrazo de oso desde aquí
Mar