Asi pues, salimos del edificio y nos dirigimos a los baños de hombres que quedan detrás del instituto *los mas solitarios, que obvio*, en todo el recorrido no me soltó y cuando llegamos me aventó cual saco de papas y caí de rabo en el piso, golpeándome de paso la cabeza con una de las puertas de los baños.
Yuugo se quedo afuera mirando que nadie fuera a entrar y de paso a arruinarles la entretención. Los otros tres entraron junto conmigo.
--y bien gatito, ¿que acaso es que no entiendes cuando te hablamos, o qué?-- dijo Sai mientras caminaba hacia mí y me levantaba de las solapas de mi camisa.
--yo…… yo no…-- empecé a titubear, pero es que aunque este acostumbrado a este trato no quiere decir que me guste y que no me de miedo, algo debía decir a mi favor –-yo… yo no voy a dejar de ser buen estudiante solo porque ustedes se les da la gana-- solté con un solo aliento. Y vaya que me arrepentí, ya sabía yo que hacerme el duro no es bueno.
De un solo golpe, que me reventó la nariz y quebró mi labio inferior, Sai me mando de nuevo al suelo, para después darme una patada en el estomago que me hizo retorcerme del dolor.
--Lo que no entiendes gatito, es que no es solo que seas buen estudiante, es que solo estar ante tu presencia nos asquea sobremanera, respirar el mismo aire que tu nos asfixia-- dijo mirándome con esos ojos negros llenos de ira mal contenida.
--ya, ya Sai cálmate-- le dijo Suigetsu caminando hacia donde nos encontrábamos –-deja algo para nosotros-- continuo, mostrando esos dientes que tiene cual piraña hambrienta al frente de su próxima comida. Cuando menos me lo espere, me cogió del cabello levantándome, abrió de una patada la puerta del baño y hundió mi cabeza en el retrete. Cabe decir que eso fue…. como decirlo, ¿asqueroso?, ¿grotesco?, ¿humillante?, ¿todas las anteriores?, tal vez si, y me mantuvo ahí durante 30 segundos creo, saco mi cabeza y aspire tan profundo, como si no hubiera inhalado el oxigeno del ambiente durante mucho tiempo, pero estaba en eso, cuando sentí mi cabeza de nuevo en el agua maloliente e infectada otra vez…..
Esto era, como decirlo…. normal, solo me decía a mí mismo, aguanta un poco más Naruto que todo pasara, cuando se sientan satisfechos se irán y me dejaran en paz, tranquilo, aunque sea hasta que se les dé por aleccionarme de nuevo. Pero es que ¡carajo!, los golpes y esta humillación duelen tanto que al veces me provoca ya no ser parte de este mundo, asi, descansaría yo y por ende ellos al librarse de mi asquerosa presencia, como bien lo dijo Sai.
Salí de mis pensamientos cuando sentí mi cabello ser jalado de nuevo levantándome en el proceso, luego me tiraron al suelo y comenzaron a golpearme en todo el cuerpo, donde cayera la patada, de pronto escuche a Sasuke detenerlos. Y es que si, Sasuke en todo lo que llevaba de la golpiza no me había puesto una mano encima, pero eso no me preocupaba ya llegaría su momento y parece que este es.
--¿saben algo?-- les pregunto a los otros dos --esto de golpearlo siempre ya me está cansando y la verdad es que parece que no da resultado-- termino por decir.
--¿entonces qué sugieres?-- le pregunto Suigetsu.
--yo creo que podemos hacerle un favor-- contesto simplemente, mirándome con ojos de…. ¿lujuria?
--¿un favor?-- pregunto otra vez Suigetsu.
--aja, podemos hacerle el favor…. de convertirlo en hombre-- termino diciendo con una sonrisa ladeada que en verdad me causo muchos escalofríos- mírenlo, estaríamos haciéndole el favor de que sienta aunque sea una vez en su vida lo que es tener sexo, porque de aquí a que él lo logre por si solo………
--Oh, entiendo-- dijo Sai con una mirada no muy buena que digamos y eso ya no me gustaba para nada, puede que yo parezca tonto, pero definitivamente no lo soy, y si que entendí lo que ese bastardo insinuó, y no lo puedo permitir, esto ya es demasiado –-estoy de acuerdo, pero quien se lo coge primero?-- pregunto.
En ese momento trate de levantarme como pude, no debía permanecer ahí por más tiempo, así que mientras ellos hablaban comencé a caminar dirigiéndome a la salida, es lo que pretendía hasta que sentí un par de brazos enroscarse desde mi espalda en mi cintura.
--¿a dónde vas, lindura?-- me pregunta Suigetsu,pasando su lengua por mi mejilla, desde mi mentón hasta la comisura de mi ojo –-chicos, parece que la zorrita se nos quiere escapar y dejarnos con las ganas-- dijo mirando a los otros –-pero no se lo vamos a permitir ¿verdad?-- dijo mirándome de nuevo.
--por favor-- dije en un susurro –-déjenme ir….. ya…. ya me golpearon, asi que dejémoslo asi, no los voy a acusar ni nada *como siempre, además de que no soy una nenita para andar dando quejas* por favor-- termine diciéndoles con voz suplicante.
--no me parece, además, ¿quién eres tú para decidir que debemos o no hacer?-- me dijo Sasuke lamiendo mis labios, apenas en un roce. Me removí inquieto, porque aunque hubiera deseado de todo corazón que Sasuke me besara, no era ni remotamente como mi mente lo imagino tantas veces, él, ellos querían violarme y no podía permitírselos, así que empecé a moverme con más ganas para poder soltarme del agarre que Suigetsu mantenía en mí, pero fue inútil, sus manos se engancharon a mis caderas fuertemente causándome un quejido de dolor, apretándome contra su pecho y sentí una dureza en mis nalgas, el muy cabron ya estaba empalmado y me lo estaba refregando completo.
--No, no, no, no-- empecé a repetir como autómata, no quería, me sentía perdido y humillado *todavía más* --no, por favor-- dije de nuevo, alzando un poco mi voz y mirando a Sasuke a los ojos , que era el que estaba en frente mío, pero me sonrió y volvió a pasar su lengua por mis labios y me beso, coloco su mano derecha detrás de mi cabeza ejerciendo presión para que no pudiera despegarme de su boca, me besaba tan fuerte, tan rudo, solo para lograr hacer que yo abriera mi boca y le permitiera el paso, pero no lo consiguió, asi que soltó un chasquido y me golpeo en el estomago, logrando inmediatamente un quejido en mi, y por consiguiente que yo abriera mi boca, cosa que no desaprovecho y me beso de nuevo, solo que esta vez sí explorando toda mi cavidad.
En ese instante empecé a llorar, no solo por lo que me estaban haciendo, Sasuke besándome como si la vida se le fuera en ello, Suigetsu acariciándome, mejor, manoseándome por completo y Sai, que no estoy muy consiente en qué momento se unió a la “faena”, bajándome los pantalones y estimulando mi miembro; sino, porque Sasuke me estaba matando lentamente por dentro, como cuando se le echa sal a una herida abierta, y es que en este preciso momento fue que me percate de mi mayor temor, de lo que mas estaba huyendo y eso es precisamente el saberme enamorado de Sasuke Uchiha, porque sí, eso era lo que estaba, porque cuando me beso sentí que mi mundo se movía, que el piso se convertía en arenas movedizas en las cuales me hundía lentamente, que me quemaba mis entrañas con un fuego abrazador pero agradable, pero todo eso desapareció en cuanto me percate de que no lo hacía porque sintiera algo por mi ni mucho menos, sino por hacerme daño, para saciarse, para satisfacer su egoísmo y orgullo, viendo a alguien débil caer ante él. Se le veía en la cara la satisfacción que sentía al hacerme esto, maldito, maldito, mil veces maldito, por hacerme esto, por lastimarme de esta manera tan ruin y miserable, por rebajarme, por menospreciarme.
--tú solo relájate y disfruta-- me dijo Sai desde su posición apretándome mi entrepierna causándome un quejido de dolor –si te relajas la pasaras bien, o por lo menos no tan mal- soltó una carcajada, que me hizo temblar.
--no, aléjense, suéltenme, ¡AYÚDENME POR FAVOR!-- grite rogando a Dios que alguien me escuchara, pero como estábamos en los baños traseros, por ende, los menos concurridos, y además ya habían acabado las clases entonces era muy poco probable que alguien lo hiciera, pero nada perdía con intentar.
--¡CALLATE!- grito Suigetsu arañándome el pecho –-¿no ves que te pueden escuchar?-- dijo ya con un tono normal --aunque en realidad lo dudo mucho jejejeje--
Luego de eso sentí que me estamparon en el piso y me sacaron pantalones y bóxer al mismo tiempo de mis piernas, y las cerré por acto reflejo rogando y suplicando que se detuvieran, que eso no estaba bien *como si a ellos les importara*, que llegaría alguien y los vería *como si eso fuera a pasar*, que si querían me iba de la escuela *si es necesario, lo hago*, pero no escuchaban y yo estaba desesperado, llorando y gritando, pero no me prestaban la mínima atención, entonces me percate de que Sasuke abría su pantalón y sacaba a la luz su miembro ya erecto y duro, separo mis piernas con un solo esfuerzo, se posiciono en medio y me alarme, *no Sasuke, tu no por favor, por favor si lo haces no te lo perdonare, no me dejaras algo que me haga desear vivir, por….. favor*
--tú no, por……. Favor-- susurre y Sasuke entrecerró el ceño y me miro con desprecio, luego sentí el dolor más horrible que pude haber sentido en lo que llevaba de vida, sentí como si me hubieran enterrado miles de agujas en mi trasero, y fue aun peor cuando empezó a moverse sin darme tregua a acostumbrarme, salía y entraba, como poseso de mi, y yo sentía mi cuerpo desfallecer….. Siguió así hasta no sé cuando, ya que a los minutos de haber entrado en mi me desmaye, por la fuerza que había estado haciendo para tratar inútilmente de defenderme, por la angustia que se veía reflejada en mis abundantes lagrimas, por encontrarme siendo violado por seres disque humanos igual que yo, por el sentimiento de saberme violado y humillado por la persona que se robo mi corazón, corazón del cual ya no quedaba absolutamente nada.
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--tú no, por……….favor-- escuche que susurro Naruto y me encolerice, ¿cómo que yo no?, ¿por qué?, ¿luego cualquier otro si?, ¿que se creía este imbécil?, asi que me enterré en el con fuerza y sin pensarlo, cosa que resentí al momento ya que por lo apretado sentí mi miembro adolorido, lo escuche gritar y rogar que parara pero no me intereso, me hice el de oídos sordos, Salí inmediatamente y vi mi miembro lleno de sangre, pero tampoco me importo y empecé a envestirlo como si mi vida dependiera de ello pero al rato sentí que Naruto ya no se movía y me detuve, alce mi mirada y lo vi, con los ojos cerrados y con una mueca de dolor en su rostro…… no se movía…… y me preocupe.
--Suigetsu ¿qué pasa?, revísalo-- le grite y de inmediato lo reviso y me dijo lo que ya me suponía.
--se ha desmayado, je que poca resistencia tiene este enclenque-- escuche que dijo –-¿y nosotros qué?-- dijo dirigiéndole una mirada a Sai.
Salí de él *del susto ya se me había bajado la excitación* y me arregle, y lo divise, estaba lleno de chupones, golpes, y rasguños, además de que su cara estaba llena de lagrimas y su cabello mojado por lo del retrete de antes, pero lo que se llevo la peor parte fue su entrada, la verdad me asuste, pero nada se vio reflejado en mi rostro, pero por dentro me sentí una basura, una completa y reverenda basura, estaba llena de sangre, creando un pequeño charco en el suelo, y se veía muy maltratada y desgarrada.
“mierda, mierda, mierda” me decía mentalmente “Sasuke eres una mierda, ¿cómo se te ocurrió hacerle eso?”, pero lamentablemente lo hecho estaba hecho y no había nada que pudiera hacer. ” ¿Por qué paso esto?, esto no debería haber pasado”, si era cierto que dije que lo violaríamos pero a la mera hora yo iba a detenerse, solo lo iba a asustar, pero cuando lo escucho decirle que yo no, mi sangre hirvió y deje de razonar y he ahí en el suelo de ese sucio baño las consecuencias.
--vámonos-- dije alto y fuerte y como perros fieles se levantaron, arreglaron y salimos. Dejando a Naruto a su suerte en ese baño, después de todo alguien lo encontraría y lo ayudaría.
Íbamos por el pasillo y les dije que se adelantaran que ya los alcanzaba, pidiéndole de paso el celular a Suigetsu, me miraron como preguntando “¿a dónde vas?”, pero enseguida asintieron, Suigetsu me dio su celular y se fueron. Luego me devolví en mis pasos y fui de nuevo al baño, en el camino marque un número y cuando me contestaron solo dije “baños traseros del instituto, Naruto” y colgué. Era muy poco probable que rastrearan la llamada, además de que me iba a deshacer del celular, que se compre otro, para eso tiene dinero. Y mi voz, pues trate de engruesarla para que se oyera diferente, y si me descubrían pues solo diría que lo encontré y decidí llamar, eso era todo, no sacarían de mí una palabra más.
Entre al baño y vi que seguía ahí, pensé que tal vez ya habría despertado pero al parecer no era asi, sentí una opresión en el pecho, me acerque y le acaricie su mejilla un poco hinchada y mojada por los golpes y las lagrimas, y le susurre un débil “lo siento”, era estúpido decirlo a estas alturas del partido, pero me sentía tan mal y tan sosegado, que necesitaba decirle algo, necesitaba soltar un poco de peso de mi consciencia, aunque él no me escuchara. Después le di un beso en sus labios y me retire lo más pronto que pude no fuera que la persona a la que llame llegara y me viera, me fui tranquilo porque sé que esa persona lo ayudaría sin pensárselo dos veces.
*No sé qué es esto que siento, pero lo único que sé es que no debería sentirlo "llevo mis manos a mi rostro y sonrio", está mal, la idea había sido aleccionar a la mariquita de Naruto, pero parece que el tiro me salió por la culata, el solo hecho de haberme empalmado con él ya deja mucho q decir… sí que tenía razón el refrán que dice que no escupas para arriba porque en la cara te cae, jeje que idiota soy*