Capítulo 24: "Enfrentándonos a la realidad, parte II".
Al bajar las escaleras no pudo creer lo que sus ojos veían. Ahí parados en el recibidor estaban Yurie y la otra persona.
-Ryu-kun, siento venir sin avisar...
Era Kyu quien le habló tímidamente y bastante nervioso. El dragón tragó en seco y agradeció al cielo que Kerberos no estuviera de paso.
- si desean hablar pueden pasar a la sala -les ofreció con falsa amabilidad la mujer, en una audaz jugada ya que podría escuchar perfectamente su conversación.
-a-arigatou... -respondió el moreno dando un paso.
- NO
Alzó la voz el dragón, deteniéndolo y haciendo que lo mirara temeroso de ser echado de allí.
- vamos a mi habitación -le habló más a la mujer- no se va a quedar por mucho tiempo así que no subas.
Kyu lo siguió escaleras arriba sintiéndose incómodo, nervioso y arrepentido. El azulino lo guió hasta su puerta la cual abrió y le invitó a pasar con expresión fría. Ambos entraron y el dragón le ofreció asiento mientras miraba por última vez hacia la escalera por si Yurie se atrevía a desobedecerle. Luego cerró definitivamente la puerta tras de sí.
Se dirigió hacia donde estaba Kyu, pero ni siquiera alcanzó a sentarse en el sofá del costado cuando éste comenzó a hablar sin pausa.
- sé que dijiste que nunca viniera solo, pero qué más podía hacer? No me contestabas el móvil, incluso lo apagaste y yo tenía que arreglar esto de alguna forma. Es mi culpa, Ryu. Lo siento, perdóname, soy un gran idiota. Lo que hice fue muy infantil, no quería hacerte sentir mal...
- Kyu, si vienes a disculparte entonces es mejor que te vayas...
Le habló el dragón herido y molesto por la peligrosa situación a la que el moreno los había expuesto.
- qué? No, no! No me estoy disculpando por lo que tu crees! Ay, pero que estoy haciendo?! -se regañó alterado - Ryu, no pasó nada entre megu-chan y yo -continuó mientras se arrodillaba frente a él que estaba sentado en el sillón- te lo juro! En serio! Te lo prometo por lo que quieras!!... Créeme por favor...
Agregó mirándolo a los ojos con genuina congoja.
- pero entonces... que fue todo eso?
Preguntó el dragón desconcertado, porque era difícil no creerle a una persona como Kyu.
- eso es por lo que me estoy disculpando... no supe manejar la situación y se me fue de las manos, pero es que no sabía que pensarías tan mal de nosotros.
-Kyu -le dijo con determinación- fueron novios por tres meses. Yo los vi, yo estuve ahí y vi lo felices que eran juntos. Qué otra cosa podría pensar?
El peliverde agachó la mirada con tristeza.
- es sólo que... -habló despacio- yo pensé que había sido suficientemente claro... que idiota soy -se lamentó- yo me prometí que nunca te haría sentir menospreciado en relación a megu, pero mira lo que he hecho...
La atmósfera se hizo mucho más liviana en ese momento, haciéndolos a ambos más dóciles. Entonces Kyu se inclinó un poco y apoyó la frente en las rodillas del azulino mientras le decía expuesto y vulnerable como nunca había visto a alguien estar:
- perdóname, Ryu... no quería hacerte sentir así...
El corazón del azulino se conmovió profundamente. Sentía algo indescriptible, una sensación tan cálida y suave, porque Kyu estaba totalmente entregado a él. Sentía que tenía al de mirada dorada completamente en sus manos y cualquier cosa que le hubiera encomendado en esas condiciones la hubiera cumplido sin importar qué fuese. Le puso una mano en la cabeza y acarició tiernamente sus cabellos cortos.
-yo sólo quiero entender qué fue lo que pasó...
Ni siquiera le pedía que le contara el secreto, puesto que él era el menos indicado para exigir algo así, pero quería entender qué había hecho a Kyu llegar tan lejos como para crear tan feo malentendido.
El peliverde se incorporó y fue hacia su mochila la cual revolvió hasta sacar algo que parecía un libro. Lo tomó en una mano y lo ocultó tras de sí. Ryu pudo ver lo avergonzado que estaba y le pareció tan pero tan lindo que quiso saltar sobre él a hacerle cosas realmente indecorosas, bueno, se había excitado un poco al verle así pero debió contenerse. El moreno se acercó a él nervioso, con las mejillas rojas y la mirada esquiva, hizo un gesto pidiendo espacio en el sofá, el cual Ryu le cedió, y le abrazó por la cintura escondiendo su rostro en el cuello del otro. Tan tierno. Si Kyu seguía con eso ya no seria capaz de contenerse, pensó.
- etto... no vayas a pensar mal de mí, sí? -le pidió contra su cuello.
- no sacaré conclusiones apresuradas - aseguró bromeando, en alusión a todo el malentendido.
Ambos rieron suavemente. Entonces Kyu le pasó aquel misterioso libro, en la mano que tenía libre puesto que la otra estaba acariciando la espalda del moreno. Ryu lo tomó, era delgado, y lo subió hasta que su vista alcanzó el título.
"Manual del Sexo Seguro entre Hombres" -era su título.
- n-no es mío!! Bueno ahora sí lo es, megu-chan me lo dio!! L-l-lo que pasa es que cuando fue a mi casa llevo unos mangas, verás... Eran de su hermana... De de de esos románticos donde salen dos chicos... Y-y yo le dije que nunca había leído algo así y comenzó a hacerme preguntas, muchas preguntas! Y me propuso que los leyéramos, yo tenía curiosidad así que acepté, pero luego se puso muy... raro, sabes? Y... Etto... yo no pude seguir leyendo, me dio demasiada vergüenza! Entonces me preguntó... etto... si yo sabía... como... como... -hizo una pequeña pausa sin atreverse a continuar- dos chicos... hacen... eso... Yo le dije que no, porque no lo sé pero ella no me creyó y quiso mostrarme más mangas aunque yo no quería saber más!! La detuve pero ella me dijo que algún día tendría que saberlo y yo le dije que ninguno sabía si tú querrías hacer algo así, ella me dijo que más vale que estudiara si no quería ser el uke, ¡¡Ni siquiera sé qué significa eso!! Pero en fin, llegó hoy con este libro y me lo dio cuando fuiste a buscar agua para trapear el piso del salón, me dijo que ella tenía la obligación de educarme y entonces llegaste tú... Y todo se volvió taaaan confuso!!... Yo no quería que supieras porque no quiero que pienses que soy un pervertido y tampoco sabía como reaccionar si rechazabas la idea de... bueno... si sientes asco o algo así... Etto... creo que me daría un poco de tristeza...
Se hizo un silencio mientras Kyu esperaba la reacción de Ryu y éste trataba de comprender lo que estaba pasando.
- pero... -habló el azulino con una voz lejana- por qué andabas tan raro?
- etto... primero fue porque estaba un poco molesto porque fuiste tan cortante conmigo cuando te pregunte sobre tu viaje! Después pensé que estaba siendo egoísta al enojarme, porque tú me prometiste que algún día sabría todo, pero yo no podía olvidarlo y no quería aburrirte con el mismo tema de siempre cuando se suponía lo habíamos arreglado, por eso... no quería demostrarte que estaba molesto... creo q no lo hice bien... De todas formas, luego se me pasó y comencé a extrañarte pero megumi seguía insistiendo con el tema y no podía evitar recordar esos mangas cuando estabas frente a mí!!
- era de esos mangas de lo que hablaban todo el tiempo? -preguntó comenzando asimilar todo.
- puede ser... probablemente, es que como yo no quise seguir leyéndolos megu-chan me esta contando de qué va la historia a medida que ella avanza... dile que se detenga por favor! -se quejó infantilmente.
Ryu comprendió entonces todo el malentendido y no pudo hacer mas que echarse a reír. Se río con una mezcla de alivio, mucho alivio, de incredulidad y de vergüenza. Todo había sido un mal entendido muy estupido y enredado.
- no sabes cuánto me alegra oír que fue un malentendido! -exclamó apretándolo entre sus brazos.
-no estás molesto porque tengo ese libro? -le preguntó nervioso mirándolo a los ojos.
-claro que no! Por qué lo estaría?
-bueno... porque... no lo sé... no lo encuentras repulsivo?
- tú crees que sería repulsivo hacer algo asi conmigo?
- jajaja claro que no! -exclamó con naturalidad- nada de lo que pudieras hacerme me parecería ni remotamente repulsivo.
- me alegra oír eso...
-pero... yo no creo que pueda leer algo así... -advirtió apenado.
- entonces pásamelo, yo lo estudiaré por los dos -le respondió con media sonrisa y un poco sonrojado.
- e-en serio?!
- claro... yo quiero hacer esto contigo
A Kyu le dio un mini infarto al oírlo y un escalofrío bajó hasta sus riñones.
- y-yo también lo quiero... -susurró sonrojado.
- eso es bueno... -susurró dulcemente en respuesta- y no tienes que forzarte, pasará cuando tenga que pasar...
((n/a: o cuando a esta autora le de la gana jijiji))
- entonces... supongo que voy a dejártelo a ti cuando llegue el momento...
- bien...
Luego el dragón sonrió de esa forma que detenía el corazón del moreno. Y con sus cuerpos tan cercanos no pudieron ni quisieron evitar el beso apasionado que se dieron. De pronto, Ryu lo empujó suavemente con su cuerpo haciendo que se tendiera de espaldas en el amplio sofá con el dragón encima suyo. Abrió un poco la boca y Ryu le permitió profundizar el beso con su lengua, la cual introdujo entre los labios del azulino y comenzó a frotar con la suya dentro de su boca en una caricia muy húmeda y electrizante. Pronto el dragón dejó que el peliverde se encargara del beso mientras que él coló sus manos por debajo de la ropa acariciando su cadera y estómago. Kyu tomó entre sus labios la lengua de Ryu y la chupó en un movimiento de vaivén al tiempo que disfrutaba de las caricias que las manos del azulino ponían sobre su piel. Y en ese torbellino de placer el bello no fue lo único que se les erizó. Ambos tenían una seria erección cuando Ryu rompió el beso y atacó el sensible cuello del moreno con besos húmedos, lamidas de toda clase pero igual de deliciosas y chupetones que le hacían estremecer. Sin embargo, en el momento en que trató de desabrocharle el pantalón, Kyu le detuvo con la respiración agitada.
- m-matte... -pidió sujetándole las manos.
- te tengo aquí en mi habitación, todo fogoso y duro, cómo podría detenerme? -le respondió entre jadeos mientras volvía a besar su cuello.
- t-tú madre está... -trató de hablar con él torturando su cuello.
- tranquilo, ella no vendrá...
-estás... mmm!... se- seguro?
- totalmente...
Luego trató de seguir con su tarea, pero el peliverde le detuvo de nuevo.
- qué pasa?
- podemos... ir a tu cama? -preguntó tímidamente.
El dragón sonrió de gusto. Y quiso molestarlo un poco.
- por qué? No estás comodo aquí?
-n-no es eso... -se sonrojó aún mas si se podía.
-entonces?
- etto... sólo... quiero que lo hagamos en tu cama...
El dragón se carcajeó ante el ataque de vergüenza que estaba apunto de sufrir Kyu, pero cumplió sus deseos. Se retiró de encima y le tomó de la mano para que le imitara. Luego hizo que el moreno se tendiera entre las almohadas y él volvió a ponerse encima.
-pervertido -le llamó con una sonrisa.
Sin embargo, antes de que el peliverde pudiera reclamar o defenderse Ryu había cerrado su boca con un beso de lengua que le hizo olvidar totalmente lo que iba a decir. Entonces por fin le desabrochó el pantalón, liberando rápidamente su hinchado y húmedo pene, el cual comenzó a masturbar deliciosamente.
-tú también... Ryu.
Le pidió entre eróticos jadeos. Por lo que el dragón se puso al alcance para que el moreno desabrochara su pantalón, bajara la cremallera de su abultada entrepierna y tomara firmemente en su mano su pene duro y caliente. Se estaban masturbando muy rico cuando Ryu subió la polera del peliverde exponiendo sus pectorales y comenzó a chuparle un pezón, Kyu se estremeció dulcemente de placer sin entender por completo qué le sucedía a su cuerpo.
- q-qué... Ah!... n-no sabía que un hombre también era sensible ahí... mmm!
- te gusta? -le preguntó morbosamente muy excitado.
- uh... se siente rico...ahh...
Entre los gemidos de Kyu, el toque de su mano y la estimulación de chupar y lamer su pecho, Ryu también se estaba excitando mucho y advirtió que no duraría mucho más.
- estoy... en mi límite, Kyu...
- yo también...
-quieres correrte, haaa, mientras te chupo?... -le susurró sensualmente al oído enviando un escalofrío delicioso a recorrer su espina.
- ahá...
Entonces ambos se prepararon para llegar al clímax. Ryu comenzó a lamer y chupar el pecho de Kyu mientras se masturbaban muy rudamente. Se sentía tan bien para ambos que pronto sucumbieron al orgasmo eyaculando entre sus cuerpos.
Luego se tendieron agotados y respirando aceleradamente con el azulino sobre el moreno. Y una vez hubo recuperado la conciencia se alzó sobre él un poco para decirle:
- ese sí fue sexo de reconciliación...
Kyu rió respondiendo:
- ya veo por qué estuvo tan bueno
Y seguido se dieron un suave y cómplice beso en los labios.
Cuando Kyu estuvo listo para irse a casa, Ryu le propuso ir a dejarlo en automóvil, pero él se sentía demasiado avergonzado con Yurie, tanto por haberse presentado sin ser invitado como por haber hecho cosas indecorosas con su pupilo en la habitación de éste, así que prefirió que el dragón lo acompañara a la estación. Entonces eso hicieron. Y mientras iba en el trayecto de regreso a su hogar llamó al móvil de Megumi para contarle que todo había salido bien, que había aclarado el malentendido y que Ryu se había quedado con el libro para estudiarlo por ambos. La pelirrosa se lamentó y le respondió que se había timbrado en la frente la palabra uke con ese acuerdo, pero Kyu seguía sin saber a que se refería.
Continuará...