13.- MISION.
Naruto seguía a Kyubi por toda la cabaña en busca de respuestas, necesitaba saber que era lo que le había pasado a su sensei y cómo fue que lo encontró el zorro, pero este siempre trataba de evadir el tema y perderlo de vista.
- dime que le paso a Iruka-sensei – exigió el rubio – además porque se fue tan repentinamente Tsunade.
- mira la vieja alcohólica se largo porque ya le tocaba, además de que es probable que venga mañana por la tarde o noche – no creía conveniente informarle que no regresaría sola.
- bien, pero no me has respondido que paso con Iruka – decía ya algo impaciente el rubio.
- …. Lo que sucede, es que… al parecer… alguien, si alguien logro entrar al área del paraíso.
- qué? – ese fue Deidara que se encontró con los otros dos ya que iba a la cocina por unas fresas con jalea de frambuesa y chocolate.
- pues sí, eso, que alguien logro entrar y por suerte logre salvar a Iruka, no sé muy bien quienes eran, ni lo que quieren, lo más probable era secuestrarlo para experimentar con él, pero logre frustrarles el plan, así que lo más lógico es que estén enfadados y quieran venir a por alguno de ustedes.
- no puede ser – decía el rubio mayor algo preocupado mientras abrasaba al menor.
- si es por ello que Tsunade se fue y va a traer un pequeño escuadrón de AMBUS para que los proteja.
- entonces más gente vivirá aquí ttebayo?
- así es Naruto, después de lo sucedido, no podemos estar solos – le dijo Deidara – necesitamos protección.
- es como dice la rubia, necesitan quien los cuide, pero no se preocupen será como si no estuvieran.
- mañana llegan Kyubi-sama? – pregunto Dei.
- así es, también viene Yamato para hacerles sus habitaciones.
- ttebayo…. Iruka estará bien? – pregunto preocupado mirando al Kyubi.
- no te apures, mejor ve a comer con Gaara y Lee que si no les dará indigestión por comer ellos solo todo.
Mientras en una de las habitaciones, precisamente en la de Kiba, Tanimoto había cerrado con llave la puerta y se encontraba en la cama del chico perro, al cual lo tenía con las piernas abiertas mientras él estaba entre ellas embistiendo con fuerza la ya algo irritada entrada del pobre chico que no podía defenderse, ya que después de su intento de aborto se había optado por ponerlo en estado de coma hasta que diera a luz a su bebe, por lo que el ninja medico aprovechaba ello para hacerlo suyo.
- uhmm eres tan estrecho y delicioso – gemía el chico – aah voy a terminar… uhmmm aaah – salió rápidamente del interior de Kiba y se vino en el vientre abultado y pecho de este – aah… eso fue delicioso.
Tanimoto sonrió maliciosamente, tenía ya varios días abusando del otro a su gusto, nadie sospechaba nada de él, aunque Lee a veces lo miraba extraño al igual que el zorro, pero no le importaba nada, además tenía que aprovechar porque según lo que había escuchado por casualidad de Tsunade es que iban a venir unos AMBUS a cuidar de los chicos por un ataque que hubo, él sabía perfectamente quien fue, después de todo el estaba en esa cabaña por indicaciones de ese sujeto y con ayuda de la otra mujer que también estaba dentro de ese plan.
- ahh es tan bueno, tenemos tiempo de otra ronda ya que me toca hacer la comida y después te vienen a visitar, además pronto vendrán esos molestos AMBUS, no tendremos mucho tiempo para nosotros, pero… - se acerco al rostro de Kiba y lambio sus labios - …pronto nosotros obtendremos lo que queremos y yo te quiero a ti, te tendré para mi solo…
Por otro lado Tsunade llegaba a la torre Hokage algo cansada por el viaje, pero sin perder tiempo mando llamar a las personas que necesitaba para que cuidaran de los ukes, se sirvió un vaso de sake en lo que esperaba, la botella casi se vacío cuando uno a uno los chicos fueron entrando, entonces la botella estaba vacía cuando el ultimo entro, el silencio era sepulcral, la última vez que todos estuvieron dentro de esa oficina no fue para algo bueno, no sabían a que fueron llamados pero tenían razones de peso para que no fuera algo bueno.
-… para que nos ha llamado Tsunade-sama? – fue la pregunta que termino con el silencio.
- creí que nunca lo preguntarían… Itachi.
- … - el nombrado miro a los demás que estaban en la oficina, algo le decía que no era para una misión normal por lo que ella los llamo, sino seria con sus respectivos equipos y los que estaban no lo eran, se trataba de su hermano Sasuke, Kakashi, Sai, Neji y Shino, así que asumía que tenía que ver con sus parejas – no nos ha llamado aquí por una misión, cierto Tsunade?
- de hecho Itachi, es todo lo contrario, es una misión y estos que ves aquí – señalando a los demás – serán tus compañeros de equipo, no creo que exista problema porque después de todo se conocen muy, muy, pero muy bien, o me equivoco? – el comentario fue mordaz y directo al hígado que causo un estremecimiento de vergüenza en todos, pero nadie dijo nada.
- pero, de que misión se trata como para que tengamos que ser nosotros un equipo, o es que ya encontró la forma de acabar con nosotros en esta misión – el que dijo eso fue Sasuke ya que no le daba buena espina que precisamente ellos fueran compañeros en esa misión.
La mujer sonrió de lado, los dos Uchiha nunca cambiaran, siempre racionales pero tan estúpidos que se contrasta todo, los miro a los dos, sus pieles mas blanca de lo normal, ojeras que compiten entre ellas, cabello opaco, su porte y arrogancia estaban extintos, ya no eran ni la mitad de lo que alguna vez fueron, vio a los otros y no estaban muy diferente a los otros, el cuerpo grande de Kakashi ahora era delgado, ya no ocultaba uno de sus ojos por lo que se podía ver lo opaco de ellos, algo le decía que su piel, que era más clara que la de Sasuke y los otros ahora lo estaba mas, Sai también parecía un fantasma, cabello y ojos opacos, Neji y Shino parecía que pronto se caerían del cansancio.
- a pesar de ese aspecto tan mediocre que tienen son los únicos que pueden llevar a cabo la misión, son los mas fuertes después de sus parejas, así que no me queda de otra, se vestirán de AMBUS y usaran sus mascaras en todo momento, además les daré las reglas de que deben seguir.
- de que se trata la misión? – pregunto Kakashi.
- deben cuidar a seis personas…
- vaya… de niñeras… - dijo sarcástico el Uchiha menor - …cuales son las dichosas reglas.
-no podrán hablarles su voz no debe salir de sus bocas ni por error, no tocarles al menos de que sea estrictamente necesario, no pueden mostrarle su identidad bajo ninguna circunstancia, usaran un jutsu para ocultar su verdadero chakra, inclusive uno para cambiar el tono de su cabello, su misión es protegerles de cualquier mal, inclusive de ustedes mismos – esa última parte no la comprendieron del todo – cuando sepan de quien se trata estoy segura de que lo entenderán.
- Tsunade-sama, disculpe la pregunta pero ¿Por qué tanto hincapié en que no sepan quienes somos, al grado de que ni siquiera hablemos?, además no creo que reconozcan la voz si nunca nos han visto – hablo Neji.
- creo que eres lo bastante inteligente para saber que si digo eso es porque esas personas los conocen, o por lo menos eso creían ellos – esa última parte la dijo en un susurro audible para Itachi, no sabía porque pero después de esas palabras, tenía muchas ansias de saber a quienes cuidarían – Itachi, Sasuke, Kakashi - conforme iba diciendo los nombres iba colocando unos folders con los datos de las personas que iban a cuidar y ellos lo iban tomando – Neji, Shino y Sai, podrán ver quiénes van a cuidar y es mejor que si se les ocurre intentar una idiotez la hagan ahora porque no pienso permitir que alteren a ninguno de ellos de ninguna forma – advirtió la mujer rotundamente.
Todos abrieron sus carpetas, sus ojos casi se salen de sus orbitas al ver a quien cuidarían, a todos les temblaron las manos, unos solo miraban la fotografía que había junto con el expediente y otros leían una y otra vez las circunstancias en las que se encontraban esas personas.
- como pueden apreciar, esos expedientes son clasificados y las fotos son recién tomadas – hablo la mujer esperando el intenso interrogatorio que podría avecinarse.
- Iru…ka…su vientre… - Kakashi en cuanto había visto la foto de su amado, se había puesto a leer el informe, no podía creer lo que leía y veía.
- porque lo tiene tan abultado – pregunto esta vez Sai mirando solo la foto de Gaara, el no había leído para nada el informe solo se había perdido en la foto de su amado.
- ellos están… están embarazados… - decía un tanto sorpresivo Itachi acariciando la foto de su rubio – es por eso verdad? – pregunto mirando a Tsunade – es por eso que extrañamente todos atacamos a nuestras parejas el mismo día, que los hicimos nuestros de esa manera, no?
Tsunade no sabía si sorprenderse o no, después de todo Itachi era catalogado como un genio, no era de extrañarse de que sospechara de que algo tan extraño como eso pasara sin ninguna razón – así es Itachi.
- Y porque… PORQUE NO NOS DIJO NADA VIEJA! – Sasuke no soporto mas y exploto, ver a su rubio con esa cara llena de melancolía y con su vientre ya algo abultado le había hecho demasiada meya en su corazón, quería estar con él, quería estar en esos momentos con él y decirle lo maravillado que estaba con la noticia, abrazarlo y besarlo de felicidad, además de querer quitarle esa cara de tristeza, pero otros sentimientos como la culpa le decían que él era el único culpable de que su rubio estuviera pasando por su embarazo solo, que era el único culpable de que él tuviera esa mirada cargada de soledad, él era el único culpable de que estuvieran separados.
- después de lo que hicieron, todavía lo preguntas, creí que eras más listo… - Sasuke tenso la quijada, la Hokage tenía razón, con qué cara o derecho tenia para exigir algo, pero no le importaba más que estar con el rubio aunque este lo odias, si, era egoísta y no lo negaba.
- no puede impedir que hablemos con ellos Tsunade – esta vez el que hablo fue Neji.
- por supuesto que puedo, además ustedes estarán de acuerdo por el propio bien de ellos.
- a que se refiere? – pregunto Sai.
- a que la salud de los chicos es delicada, su embarazo fue producto de un jutsu y su base es el chakra, pero aun así pueden tener los riesgos de un embarazo normal, aunque es más riesgoso porque el chakra como bien saben no es infinito, tiene un límite y durante todo el embarazo se usa de manera fija y continua, además de que necesita una gran cantidad para dar a luz, por lo que ahorita su estado es delicado, no pueden recibir más impresiones fuertes como la que ustedes provocaron – mirándolos con reproche – y ellos no los quieren cerca a ninguno, no quiero que tengan algún ataque o algo parecido, así que van a seguir las reglas.
- pero… - iba a replicar Sasuke, pero la voz de Shino atrajo la atención de todos.
- Kiba… Kiba está en coma? – la voz de Shino temblaba y las lagrimas no se hicieron esperar.
- …se que se escuchara mal lo que diré… pero ellos están expuesto a muchos riesgo y Kiba es un ejemplo de ello, puso en riesgo su vida y la del bebe con simples recuerdos, imagínense tenerlos enfrente.
- no puede ser… intento abortar… - el miedo era palpable en los ojos de todos , Tsunade sabía que esa era la reacción que necesitaba.
-así es, digamos que a diferencia de los otros, Kiba pensó y asimilo lo sucedido, te odia Shino – un escalofrió corrió por todo el cuerpo del nombrado – es por ello que no quería algo que viniera de ti, s por ello que lo dejamos en coma, para que no se hiciera daño y no intentara otro aborto, no podemos arriesgarnos de que alguno de los otros chicos intente lo mismo en estado de desesperación si los ven ahora que no están preparados para hacerlo, se de algunos que no han pensado en ocultarles que tienen un hijo, por lo que estoy segura que llegara un momento en el que podrán hablar, pero por el momento, por el bien de ellos ustedes solo pueden protegerlos desde las sombras, no hablarles, no tocarles, nada, solo cuidarles, ustedes saben que les deben eso.
- Si es la única manera de estar cerca de Naruto… está bien… - Tsunade pensó que el mas difícil había doblado las manos - …tiene razón le debemos eso…
- … pero porque ahora Tsunade-sama? – pregunto Itachi.
- Iruka… - el ser nombrado el moreno hizo que el peliplata la mirara – fue atacado mientras regresaba a la aldea, aunque no sabemos en realidad si fue un ataque o no, ya que como puedes ver Kakashi, además de Kiba el que más delicado esta es Iruka-sensei, por su carencia de chakra, algo le hicieron para nivelar sus estados de chakra, pero ya no llega al bebe, la reserva del vientre se agota es por ello que es urgente que vayas a donde él para que inyectes chakra directamente, solo tú que eres el padre puede hacerlo, en este momento está bien, por lo que realmente no sabemos el propósito de quien ataco y tampoco quien ataco, por lo que es primordial que ustedes mañana a las cuatro de la mañana estén listos para salir, sin ningún contratiempo, entendido?
Todos asintieron ansiosos, pero Kakashi hablo – porque… porque Iruka iba a volver?
- para salvar a su bebe, necesita de ti, pero no quería que tú fueras a donde él, por el bien de los demás chicos ya que no solo no es fácil para Iruka verte, para los demás también es difícil porque te acostaste con los esposos de ellos y no te sientas tan mal – dijo viendo la cara de Kakashi – esto es igual para todos.
- entonces… porque no irnos ahora? – pregunto Sai.
- porque ustedes deben de darse una ducha, comer algo y dormir bien, no quiero que vayan a ser más un estorbo que ayuda, cuando estén con ellos deberán alimentarse correctamente y dormir a sus horas, no quiero tener que lidiar también con ustedes, ¿comprenden? – los chicos asintieron y poco a poco fueron saliendo de la oficina, la verdad es que todos iban sumidos en sus pensamientos.
Sasuke e Itachi iban hacia el barrio Uchiha, cada uno con sus pensamientos dirigidos a sus parejas – Naruto… esta embarazado…
De repente el azabache menor se soltó a llorar e Itachi lo abrazo, aunque él no estaba muy diferente a su hermano – sé cómo te sientes, yo me siento igual.
- no puedo creer… lo que he hecho…aah… porque le hice esto… ahora el tendrá un hijo… mi hijo y eso me hace sentir peor porque sé que en parte, la mayor parte… fue por mi… por darme a mí un hijo… - agarraba fuertemente la ropa negra de su hermano, se sentía morir y los sollozos eran fuertes - …lo peor del caso ahora es que ni siquiera tengo el derecho de mirarle, que hare si no me deja ver a mi hijo Itachi, si Naruto no quiere que lo vea será como él quiera, no quiero alterarlo más ni nada por el estilo… pero quisiera estar junto con él y mi hijo, es lo que más añoro.
- lo sé Sasuke, no puedo creer que esos tontos hicieran algo como esto por unos estúpidos como nosotros, pero escúchame Sasuke – dijo tomando a un lloroso azabache del rostro para mirarlo a los ojos, los dos pozos negros inundados de lagrimas de tristeza, felicidad, culpabilidad y añoranza – lucharemos y haremos hasta lo imposible porque nos perdonen, sino lo logramos aun así estaremos a su lado, siempre cuidándolos, entiendes…
El azabache asintió, sabía que su hermano tenía razón, era el momento de ser él quien persiguiera a Naruto, tenía que darle lo que nunca pudo hacer a pesar que era lo que más deseaba, darle su corazón en bandeja de plata, lo que el rubio decidiera seria lo que él quisiera, así seria hasta el día de su muerte.
“Naruto, hare lo que pueda porque me perdones y estar a tu lado, te amo y amo a esa criatura sobre todas las cosas, sé que no lo merezco, pero quisiera estar a tu lado…”
“Deidara, Deidara, Deidara, Deidara, por favor, perdóname, perdóname, déjame estar a tu lado y ver a ese niño crecer, te lo suplico…”
Kakashi estaba en su casa, estaba empacando lo que necesitaría para la misión, la Hokage no dijo dónde estaba Iruka, pero no importaba, pronto estaría con el que eral lo que más deseaba, aunque no podía evitar preguntarse si el moreno en verdad estaría bien, además de que estaba preocupado por su bebe, miro en uno de los buro a un lado de la cama, una foto de ellos dos sonriendo y abrazándose, de las pocas foto que se ha sacado, la tomo entre sus manos y acariciaba el rostro de Iruka.
“ Iruka, se que planeabas volver a mí, tal vez no por mí, pero si por algo que nos une, un hijo tuyo y mío, no puedo creerlo, tu vientre abultado era hermoso, tú te veías hermoso, es por ello que si tu no pudiste volver yo voy a ti, como debe de ser… como siempre ha sido, voy a por ti mi hermoso Iruka y amado futuro hijo.”
Shino y Neji se encontraban comiendo algo en la casa del primero, el de cabellera larga era el que cocinaba ya que estaba algo preocupado por el otro, aun estaba muy afectado por saber que Kiba se encontraba en coma.
“Lee, yo no quiero que te pase nada, es por ello que antes de causarte de nuevo un disgusto que te afecte a ti y al bebe, prefiero cuidarte desde las sombras, si hablarte, sin tocarte, pero a tu lado, siempre a tu lado y al de mi futuro hijo, uno que gracias a ti será libre y que nunca sufrirá lo mismo que yo”
“Kiba, Dios, que te he hecho! Y por razones absurdas, por favor, no quiero que te pase nada, ni a ti ni a nuestro hijo, por favor, perdóname…”
Sai por otro lado se encontraba en su cama, la ansiedad y el nerviosismo que sentía no le permitían dormir, eran sentimientos que raramente sentía y ahora más que nunca los tenía a flor de piel, sentía asfixia que fácilmente interpretaba como miedo, sabía que debía dormir aunque fuera unas horas, pero no sabía si podría, no con tantos sentimientos encontrados, sobre todo, porque aparte de todo esos sentimientos de angustia se sentía extrañamente feliz por la noticia de que Gaara esperaba un hijo, sabía lo que significaría eso para el pelirrojo, porque era lo mismo que significaba para él, un amor que se le negó casi desde que nació, un amor fraternal.
“Gaara, que puedo hacer para que me perdones, no tengo ni la menor idea de nada, no sé nada de nada, pero me alegro que vayas a tener un hijo, pero te conozco, por lo que se que tendré que luchar una y mil guerras para que me dejes aunque sea ver de lejos al niño, pero no importa…”
Al día siguiente Naruto se levanto a eso de las diez de la mañana, sabía que Tsunade iba a estar desde las ocho en su oficina así que fue corriendo porque quería pedirle un favor, ni siquiera se molesto en tocar pero se sorprendió al ver a seis AMBUS con sus respectivas mascaras en frente de Tsunade, puso una de sus manos en su vientre y miro a la rubia con una sonrisa, no como las de antaño pero algo animada.
- lamento interrumpir ttebayo,ahora recuerdo que ibas a traer a AMBUS, supongo que es por lo que le sucedió a Iruka-sensei? – pregunto de lo más natural sin percatarse como uno de los sujetos enmascarado temblaba ante su presencia.
“Naruto…”