21.- NACIMIENTOS COMPLICADO Y REGRESANDO A CASA.
Sasuke corría lo más rápido que podía, pero sentía que debía ir mucho más rápido aun, la verdad es que no se había ido muy convencido con Kakashi, Naruto al parecer no se estaba sintiendo bien, pero estaba seguro que las cosas se pondrían peor si no tenía noticias de Iruka pronto, por lo que había decidido ir, lo bueno es que no se había enfrascado en una pelea sin sentido, hubiera sido demasiado problemático y una pérdida de tiempo, sintió como alguien se le había emparejado, no tuvo que ser adivino para saber de quién se trataba.
- Sasuke, que bueno que te encuentro, las cosas se han complicado, Naruto entro en labor de parto.
- lo presentí Itachi, es por ello que me vine lo más rápido que pude – decía preocupado Sasuke.
- debemos apurarnos, aun falta algo para llegar y al parecer el embarazo es más complicado de lo que parecía.
- demonios lo sé, tenemos que ir más rápido – dijo y cuando peso que no podía ir más rápido su velocidad aumento un poco.
- ¿encontraron a Iruka?, ¿Cómo está el y su bebe? – pregunto Itachi algo preocupado por el sensei.
- se encuentran bien, el niño está sano al igual que el sensei, Kakashi los triara cuando estén en condiciones de moverse.
- me alegro.
- Sai, Shino, Neji y Lee, ¿Cómo se encuentran ellos?
- sus vidas no peligran pero están fuertemente lastimados y Lee aun no despierta, no se sabe que tan grave es su golpe en la cabeza.
- ya veo…
Sin más que decir, los dos hermanos en un poco menos de media hora ya estaban en la cabaña, Sasuke fue lo más rápido que podía al consultorio donde atendían a Naruto, supo donde porque Deidara y Gaara estaban fuera mirando atentamente esa puerta, entro y lo que vio no le gusto en lo mas mínimo.
Naruto que era sujeto de una mano por Hinata se encontraba viendo con lagrimas en sus ojos hacia donde estaba Tsunade y Sasoe, los cuales rodeaban una mesita donde al parecer tenían acostado a un diminuto cuerpecito que no se movía, la rubia frustrada volteo a ver a Naruto negando con la cabeza, eso derrumbo al pequeño zorro.
- Nooo! – grito abrazándose fuertemente a si mis, de verdad que no podía creer que uno de sus hijo no lo haya logrado, Sasuke al verlo así se acerco a él y miro a Hinata pidiéndole una explicación.
- el embarazo se complico, tu no estabas aquí, se supone que Kyubi solo podía ayudar a dos mientras tú lo hacías con uno, pero – miro al bebe que estaba en la mesita donde lo habían estado intentando reanimarlo - … Kyubi ayudo a un bebe y a Naruto, el otro no pudo ser ayudado…
Sasuke negó con la cabeza y prácticamente se arrojo hacia la mesita miro al pequeño cuerpecito sus cabellos negros y su piel pálida lo hacían ver que se parecería mucho a él, miro hacia un lado y una incubadora se veía al otro bebe, el cual tenía los cabellos rubios pero de piel pálida, sonrió al pequeño que estaba bien y volvió su atención al que no, quitándose el guante del uniforme, con su mano desnuda comenzó a frotar el pecho del pequeño, se podía ver que le estaba pasando algo de chakra, recién había nacido el pequeño, así que aun tenía la posibilidad de ayudarlo.
Naruto por su parte no apartaba su mirada de la espalda de Sasuke, vio como este se quitaba su otro guante y pasaba su mano por los negros cabellos del bebe mientras se inclinaba lo suficiente para alcanzar la orejita y susurrarle cosas en el oído, cosas que nadie escuchaba más que el bebe, pasaron cerca de diez minutos en esa posición cuando de repente se escucha un sonido proveniente del bebe y se ve como poco a poco va abriendo los ojos mostrando sus orbes heredadas, un intenso azul que miraba al azabache, no cabía duda, el corazón del bebe había comenzado a latir, el pequeño estaba vivo.
- Oh por Dios – dijo Tsunade en lo que se acercaba a revisar al pequeño, las lagrimas de frustración fueron suplidas por unas de inmensa alegría – quien diría, su cuerpo solo necesitaba recibir tu chakra, a pesar de que en las noches les transmitías un poco sin que Naruto se diera cuenta, no fue lo suficiente para que llegara a los dos, es por ello que al recibirlo directamente como lo acabas de hacer fue suficiente para que viviera.
- … Sasuke… - Naruto aun le miraba expectante, había sentido un nuevo chakra en la habitación, pequeño pero a la vez fuerte, pero no veía bien si de verdad era de su bebito, el azabache entendía eso rápidamente y aun pasando un poco mas de chakra al pequeño, lo tomo con un brazo y camino hacia la camilla donde estaba Naruto y se lo enseño, el rubio no pudo más que romper en llanto por la felicidad.
- tiene tus ojos dobe – dijo Sasuke con una sonrisa en el rostro, una que hace mucho tiempo no se veía.
- pero se parece mucho a ti, incluso el otro bebe también se parece, solo saco mi cabello – a pesar de eso lo decía de lo más feliz mientras era agarrado fuertemente de uno de sus dedos por la manita del bebe.
- ya pensaste los nombres?
- sí, que te parecen Yasuhika para el rubio, el nació primero sin ningún problema, será nuestra pacifica luz, y a este pequeño Kiyoshi ya que parece ser que será muy sereno y tranquilo.
- nada mal… - dijo feliz, pero tenía una duda, no sabía si sería correcto preguntar, ¿Qué apellido seria el que tendrían los niños, realmente no le importaba mucho, estaba muy feliz con el simple hecho de que estuvieran vivos y sanos, al igual que Naruto, solo pensaba que sería una buena señal que Naruto les diera el apellido Uchiha, porque así puede que considere que los deje ver.
- si… Yasuhika y Kiyoshi Uchiha – el azabache lo miro sorprendido, aunque lo deseaba creía que no pasaría – eh tomado una decisión Sasuke… viviéremos contigo… será nuestra última oportunidad, no por mi ni por ti, por ellos, tu y yo sabemos cómo es la vida sin nuestros padres con nosotros, seremos los mejores padres que podamos ser, y sobre nosotros… - no pudo evitar sonrojarse – ya veremos conforme al tiempo, aun estoy muy molesto y sobre todo herido, puede que incluso nunca querré que me toques de nuevo, pero, también puede que algún día como siempre lo he hecho te perdone completamente y quizás… volver a ver un nosotros completo, si es que también lo deseas tu…
Naruto no pudo decir más, el ver a Sasuke que sonreía con lagrimas en sus ojos lo hacían sentir bien y a la vez confundido – gracias Naruto… pondré todo de mi parte, ya lo veras, ya lo veras.
Deidara miraba todo desde la puerta, estaba feliz de que en parte Naruto le diera una oportunidad a Sasuke, aunque veía el amor que el Uchiha menor le tenía a su amigo, no entendía cómo es que él había iniciado todo eso de las infidelidades, según lo que le comento Iruka, antes de que atacaran la cabaña en una de las platicas que habían tenido, Sasuke había sido quien los sedujo y metió ideas en sus cabezas, provocando el resultado de las infidelidades, pero era algo extraño, la mirada de Sasuke era de adoración y amor infinito, en parte sentía que Sasuke amaba mas a Naruto, de lo que alguna vez Itachi lo llegaría amar a él, no pudo seguir con sus pensamientos porque Tsunade salió de la habitación casi arrastrándolo.
- ¿saben algo de Iruka?, quería preguntarle a Sasuke pero no me atreví a interrumpir el momento – dijo la mujer mirando a los que estaba afuera esperando noticias del rubio.
- según lo que me dijo Sasuke, Iruka ya tuvo a su bebe y se encuentra a salvo con Kakashi, en cuanto estén en condiciones de viajar regresaran – informo Itachi - ¿Cómo está Naruto?
- bien, sus bebe están a salvo igual que él, Sasuke llego en el momento justo para salvar a uno de sus hijos, ahora solo es cuestión de darles tiempo para descansar – la rubia miro a Gaara – y tu deberías estar haciéndolo, Sao llévalo a su habitación – el chico asintió y se llevo al pelirrojo – necesito que te relajes Deidara, mañana hablaremos de cómo está la situación, así que descansa, fue un largo día.
Así todos se dispusieron a irse a las recamaras que no estaban en mal estado, Deidara durmió en la habitación de Itachi, mientras este se quedaba dormido en el piso, el rubio lo hacía en la cama, no porque no quisieran dormir juntos, solo era por la comodidad del embarazado, Gaara por otro lado durmió en la habitación que le correspondía a Sai junto con su bebe ya que este estaba en uno de los consultorios para estarlo monitoreándolo, Naruto y Sasuke se quedaron en la habitación de Deidara, ambos antes de dormir tuvieron una plática demasiado reveladora para Naruto, que a la vez lo dejaba muy confundido, muchas cosas no cuadraban en su comportamiento con sus palabras y con lo que veía en sus ojos, pero no pudo evitar molestarse cuando le conto lo de Sakura, pero en parte se lo agradeció, la sinceridad en las palabras de Sasuke además de la forma en que se lo conto, lo hicieron olvidar ese hecho pasarlo por alto y seguir con su plan de iniciar de nuevo, aunque claro, estaba seguro que la pelirrosa en algún momento se lo restregaría en la cara, pero bueno, muchas dudas surgieron con respecto a Sasuke, no sabía qué hacer ni a quien preguntarle, y con su mente confundida se dejo abrazar por Morfeo.
Neji, Lee y su bebe, descansaban juntos en la habitación siendo custodiados por Sao, el cual estaba demasiado preocupado por el bebe, se preguntaba ¿Qué pasaría si Lee no recuerda a su hijo? Lo más seguro es que las cosas se complicarían, mientras Sasoe, se encontraba en la habitación de Kiba, recién había examinado a Shino, el cual descansaba tranquilamente aunque de vez en cuando se quejaba del dolor, Kiba en cambio, se encontraba ya listo para practicarle la cesaría y despertarlo, no pudo evitar preguntarse si Deidara ya estaba próximo también; Tsunade era otra historia completamente diferente, ella se encontraba fuera de la cabaña con Hinata, la cual se encontraba echándole tierra a una fosa, era donde habían enterrado a Shizune.
- se encuentra bien Tsunade-sama? – pregunto Hinata mirando a la rubia la cual se encontraba mirando con sake en mano hacia donde Hinata echaba la tierra.
- nunca creí… que ella pudiera traicionarme de esa manera… menos por insignificancias como dinero – decía con una mirada triste y algunas lagrimas de decepción.
- uno nunca sabe lo que esconde un corazón, siempre creemos que nadie es capaz de traicionarnos hasta que lo hacen y nos llega de una manera tan dolorosa como ahora.
- ni que lo digas…
- pero bueno, por lo menor ya es abuela de verdad, no?
- si, creí que perdía a uno de mis nietos también – recordando que por poco moría uno de los hijos de Naruto – me alegro que Sasuke llegara a tiempo.
- bueno, de todas las cosas malas que han pasado esos bebes son un salvavidas.
- así es…
Mientras en el antiguo laboratorio de Kabuto, Kakashi no dejaba de ver al hermoso bebe que dormía tranquilamente en los brazos de Iruka, ellos no podían irse hasta que el moreno se encontrara en condiciones para soportar el camino, lo más seguro es que tendría que llevarlo en brazos, no era problema, pero no quería llevárselo hasta que estuviera mejor.
Al día siguiente, todos los que están bien se encontraban reunidos en la sala con Tsunade mirándolos a todos - bueno, es el momento del recuento de los daños, primero empecemos con Sai, este aun no despierta pero hoy al revisarlo me di cuenta de que sus heridas no están infectadas por lo que la fiebre que tiene esa causa solo del dolor, ya ha bajado y esta mejor, puede que en unos días despierte – Gaara por primera vez desde que vio el estado de Sai respiro – como te encuentras tu Gaara?
- mejor, ya casi no siento dolor por el parto y mi bebe también está bien, recién le di de comer.
- me alegro, supongo que ya sabes qué hacer cuando regresemos a Konoha.
- así es, me iré a Suna, le pediré que si para entonces Sai no despierta, que cuando lo haga lo deje irse a Suna por tiempo indefinido.
- de acuerdo – dijo la mujer no muy segura, no sabía qué era lo que el pelirrojo planeaba solo esperaba que nada malo – sobre Shino, las cosas con el son delicadas, por las circunstancias puede que él se quede con el bebe, ya que si Kiba sigue con lo que pensada del niño antes de infundirle el coma, Kiba no querrá al bebe, el problema es que Shino no podrá mantenerlo por lo que he decidido jubilarlo con anticipación para darle algo de dinero mensual para mantenerse él y al bebe.
- porque Tsunade? – pregunto Naruto, ya que el ignoraba el estado de Shino.
- porque a pesar de que vuelva a caminar, ya no podría hacer las misiones, sus piernas están fracturadas y lo más seguro es que en un futuro le causen problemas con los cambios climáticos, por lo que no está en condiciones para seguir con las misiones.
- pero si volverá a caminar? – pregunto Itachi.
- sí, lo más probable es que tarde un año en poder hacerlo por su mismo, bueno, sobre Neji, la infección esta cesando, por lo que es probable que no pierda todo su brazo, se recuperara, el problema es Lee que aun no sabemos cómo lo afecto el golpe en su cabeza, el bebe lo ha estado alimentando Sao en lo que el despierta.
- Sao está con ellos en este momento? – pregunto Sasoe.
- así es, está vigilando a Lee, bueno, de Iruka aun no sabemos nada, solo lo que dijo Sasuke, por lo que confiaremos en que se encuentre bien, Naruto, a pesar de que pusiste en riesgo la vida de tus hijo y la tuya a intentar esperar a Sasuke no te regañare, ya que gracias a eso el pudo llegar a tiempo y salvar a tu bebe, ahora solo quedan dos embarazados y no son nada fáciles.
- lo mejor sería comenzar con el de Deidara – comento Hinata.
- comenzar, pero yo… aun no rompo fuente ni nada – dijo Deidara preocupado.
- sí pero a ti se te practicara cesárea ya que a diferencia de ti Naruto tenía al Kyubi para soportar el parto natural, Hinata te ayudara con el flujo sanguíneo mientras Itachi te da chakra y a los dos niños, como veras, esta vez te la veras complicadas – dijo mirando al azabache mayor.
- no me importa si me quedo sin una sola gota, mis hijos y Deidara estarán bien – la determinación de Itachi hizo sonreír a Deidara.
- bueno, entonces Hinata prepara a Deidara, mientras en lo que pienso que hacer con Kiba.
- Kiba también será por cesárea ¿verdad? – pregunto Naruto.
- así es, pero, sin Shino el bebe no sobrevivirá…
- entonces es solo cuestión de que Shino despierte… - comento Sasoe.
- pero aun no sabemos cuándo lo haga y Kiba también ya está en tiempo – la Hokage veía difícil la situación – no me quedaría otra más que hacer despertar a Shino después de que Deidara tenga a los niños.
- lo mejor sería hacerlo y dormirle de la cadera para abajo y así no alterarlo con el dolor de sus piernas fracturadas – sugirió Hinata.
- bien, Hinata, Sasoe, me asistirán, los demás les pido que estén al pendiente de los otros inconscientes – dijo la rubia para encaminarse hacia el lugar donde practicaría la primer cesárea.
En lo que ellos hacían lo necesario para el nacimiento de los gemelos de Deidara, Sao se encontraba en la habitación de Neji y Lee, estaba muy preocupado porque Lee aun no despertaba, además de lo que había sucedido cuando lo había hecho, unos quejidos lo saco de sus pensamiento y vio como Lee iba abriendo sus ojos, poco a poco iba mostrando sus orbes negros, y paso lo mismo, de nueva cuenta parecían que miraban perdido todo, como si no supiera donde estaba.
- ¿ quién eres y dónde estoy? – definitivamente no era buena señal.
- ¿no recuerda, el porqué esta en esta cabaña, lo que ha pasado en estos últimos días? – pregunto intentando ocultar su angustia.
- la verdad… no… yo no seque hago en este lugar y ¿Por qué tengo vendada la cabeza? – se incorporo quedando sentado en la cama y miro hacia todos lados, encontrándose con la imagen de Neji en la otra cama que estaba a un lado del, no supo porque pero su corazón latió mas fuerte y rápido, una extraña emoción al verle le embargo en todo su cuerpo - ¿Quién…quien es él?
Los gestos de Lee no pasaron desapercibidos para Sao, pero realmente no sabía qué hacer, entonces como se diría “se le prendió el foco”, no sabía si era lo correcto, solo creía que así seria, alguien que no recuerda las cosas, tener estabilidad en su vida sería lo mejor.
- para empezar tu nombre… ¿recuerdas tu nombre?
- …mmm no…
- es Rock Lee, eres de la aldea de la hoja, eres de Konoha, tu eres considerado uno de los mejores ninjas además de que te encuentras casado con Neji Hyuga que es el que está ahí y tuviste un bebe de el… - más despacio no se lo pudo haber dicho.
Lee intentaba procesar la información, estaba completamente anonadado – y… quien eres tú?
- soy Sao su médico.
- a… y dices que estoy casado con… él? – señalando a Neji, a lo que Sao simplemente asintió, no podía creer que estuviera casado con alguien tan guapo como el – pero se puede? Digo, los dos somos hombres, aparte no entiendo, ¿Cómo es que tuve un bebe de el?
- pues si mira, como no son la única pareja de homosexuales que existen la Hokage decidió darles permiso de que pudieran contraer nupcias, y no hace más de unos cuantos meses que Naruto Uzumaki, uno de tus amigos descubrió una forma para poder embarazarse, usted como ama tanto al joven Neji hizo la prueba y mire… - salió prácticamente al cunero donde descansaba la pequeña Mika, y se la enseña a Lee quien no puede evitar mirarla maravillado y tomarla entre sus brazos con delicadeza – esta es Mika, su niñita, se parece mucho al joven Neji.
- ya … y ¿porque está el así? – pregunto viéndolo con preocupación.
- no hace mucho nos atacaron eh intentaron hacerles daño, el los defendió lo mejor que pudo pero no salió ileso de toda la batalla, el los ama mucho y no iba a permitir que nada les pasara – no es que estuviera mintiendo, después de todo el siempre había visto el amor en la mirada de Neji, solo omitió el hecho de que estuvieron en algún momento separados y sobre todo las razones.
- entonces… ¿es por eso que mi corazón late de esta manera?, porque nos amamos…
- así es, ustedes son…felices – dijo sonriendo.
- ¿podrías contarme más? – Dijo mirándolo – no quiero que sienta que me he olvidado por completo nuestra vida juntos, no quiero que me sienta como una carga…
- no sé mucho de su vida personal en sí, le contare lo que sepa, pero créame que dudo que él, en algún momento lo considere una carga… - Lee no pudo evitar sonreír ante sus palabras, por otra parte, Sao sabia que sería mandado fusilar por no omisión de ciertos asuntos que no estaban conclusos, pero ya se arreglaría con la Hokage y los demás, además de contarle a Neji cuando despertare, puede que incluso esto le diera meritos en lo que Lee recuperaba la memoria.
Mientras Sao creaba una gran historia de amor, Tsunade ya estaba lista para traer al mundo a los pequeños niños de Deidara, Hinata había controlado el flujo de sangre para que no perdiera mucho en la cesárea, ya que sería demasiado agotador para Itachi darle a su rubio y a sus bebes el chakra que necesitaban.
- ¿ya pensaste que nombre les vas a poner Deidara? – le pregunto Itachi para distraerlo un poco ya que se veía nervioso, además de que sostenía su mano fuertemente.
- ¿eh?... ah sí… ahora que lo mencionas, había pensado el nombre de uno solo, si fuera hombrecito quería que se llamara Deichi, pero no he pensado para la linda nenita.
- pues porque no esperamos a que nazca para verla, te parece?
- seria genial…
Tsunade les interrumpió diciéndoles que ya era momento de comenzar con la operación, Itachi tuvo que poner una de sus manos en el pecho de Deidara por si algo sucedía mandarle descargas de chakra y mantener latiendo su corazón, la otra mano se poso en el vientre abultado, no tardo mucho en sacar al primer bebe, al parecer ya estaban listos para salir al mundo, Deichi fue el primero en salir a lo que Itachi abandonando un poco el pecho de Deidara brindo un poco de chakra directo al cuerpecito del bebe, el cual empezó a llorar inmediatamente, el pequeño tal parecía que se parecería a Deidara por los cabellos rubios, pero al verlo abrir sus ojos por milésimas de según se sorprendió al ver sus ojos con dos colores diferente, su ojo derecho era negro mientras el otro era azul, no cabía duda que el pequeño no solo compartía el nombre de los dos, sino que sus ojos también.
- es hermoso – dijo Tsunade pasándole el niño a Hinata - seguiremos con la princesa – la rubia ya sudaba en demasía, para ella era estresante el tener que hacer las cosas rápidas pero a la vez bien, no podía darse el lujo de fallar porque no solo era una vida la que tenía en sus manos, no cabía duda que ser medico era lo más difícil que había experimentado en toda su vida.
Continuo rápidamente con la nena, al parecer era la que menos chakra había recibido, por lo que rápidamente se la paso a Hinata y esta la acerco a Itachi para que le diera chakra directo al corazón, la pequeña abrió sus ojos tranquilamente, había nacido bien y sana.
- Emi… vendita belleza – dijeron al mismo tiempo Deidara e Itachi, mirándose sorprendidos pero con una sonrisa en su rostro, ambos al ver a la pequeña supieron su nombre, la pequeña tenía unos extraños cabellos entre rubios y negros, además de que sus ojos negros tenían unos extraños destellos azules que lo hacían brillar de manera enigmática.
Por suerte a pesar de haber sido complicado el nacimiento de los gemelos no paso ningún susto, pronto la nueva familia ya se encontraba descansando en la habitación de Itachi, por otro lado Naruto y Sasuke tenían una pequeña conversación.
- ¿Cómo es que decidiste darme esta oportunidad? – Sasuke no pudo evitar preguntar.
- tuve, hace tiempo, una plática con Iruka-sensei, además he de decir que siempre he pensado nuestra situación, viendo nuestra vida me dije que darte la tercera y última oportunidad no me quitaba nada, en cambio podía ser que a ambos no diera mucho.
- … - no supo que decir ante esas palabras.
- sé que eso no responde en si a tu pregunta, pero cuando sea el tiempo adecuado, cuando realmente mi corazón te haya perdonado encontrare exactamente las palabras que la respondan, solo necesito que me tengas paciencia, creo que es lo menos que me debes.
- tendrás el tiempo del mundo Naruto… - sonrió muy poco para después dirigirse a los dos cuneros donde estaban sus bebes, contemplarlos se había vuelto un pasatiempo tan hermoso, Naruto no pudo evitar sonreír ante la imagen de Sasuke, ante su mirada que le dirigía a los bebes, admiración, añoranza, amor, no cabía duda que los ojos son la ventana del alma.
Mientras Tsunade se dirigía hacia la habitación de Shino para ver como se encontraba, todo dependía de su estado para saber cómo proceder con Kiba, pero antes de entrar se topa con Sao.
- Sao, ¿ya despertó Lee?
El chico con una sonrisa nerviosa miro a Tsunade – bueno… si… mire… - Sao comenzó a contarle todo lo que había sucedido y como había procedido con respecto a la situación de Lee, la rubia lo miraba sin ninguna expresión en el rostro, no se sabía lo que estaba pensando - … y eso fue lo que sucedió… - el chico ni se atrevía ver a la rubia, la cual después de un breve silencio.
- ¿QUE HICISTE QUE? – un grito que difícilmente no se escucho hasta Konoha – como tomaste una decisión de ese calibre, que no has pensado en las consecuencias!!
- lo hice créame, pero es que Lee necesita estabilidad, paso por muchas cosas antes de tener al bebe, después tener al bebe y el ataque en el cual perdió la memoria, decirle todo de nuevo por lo que ha sufrido, además… hubiera visto su cara cuando vio a Neji y al bebe, estaba feliz, sonríe alegremente y además le habla a Neji, el cual ha mejorado mucho anímicamente, creo que incluso despertara pronto!! – decía emocionado además de desesperado por hacerse entender.
- mira, se que lo estás haciendo de buena fe, incluso creo que es buena idea, si lo que quieres es que Neji tenga meritos para cuando Lee recuerde, pero si cuando lo hace no se obtiene la reacción que deseas, que tal si Lee se enoja por tomar una decisión de tal magnitud – la mujer entendía completamente lo que Sao había hecho, inclusive ella había pensado en algún jutsu que les borrara la memoria a todos y los hiciera empezar de cero, pero ese no era el caso.
- yo tomare la responsabilidad, de ello, no me importa ser odiado si al final ellos están bien, además, puede que salga bien si Neji hace las cosas bien, no cree?
La rubia lo miro, lo que decía Sao era verdad, si Neji hacia bien las cosas esta vez podía ser que todo resultara a de una manera favorable para esa pareja, todo dependía de la honestidad de Neji – bien, pero serás tu quien se encargue de decirle a todos, no creo que la mayoría lo tomen bien y nos arriesgamos que alguien con un ataque de furia le diga la verdad a Lee, sobre todo Kiba que pronto despertara ya que planeo hacer hoy también la cesárea, así que prepara a todos y sobre todo a Neji cuando despierte.
- ¡si! – Sao estaba muy esperanzado a que las cosas salieran de buena manera, la Hokage solo rogaba por que así fuera.
- bien estate al pendiente, yo iré a ver a Shino – Sao salió corriendo decirle a todos, estaba claro que las cosas no las iba a tener fácil, pero tenía que ver si resultaban, por otro lado Tsunade entro a la habitación de Shino, no pudo evitar sorprenderse al verlo despierto – como te sientes?
- con mucho dolor… - dijo entre dientes, le dolía mucho sus piernas – mis piernas…
- es comprensible las tienes fracturadas, te dormiré de la cintura para abajo por un tiempo – dijo mientras se preparaba para atenderlo.
- Kiba… ya es momento de que nazca el bebe… ¿no? – a pesar del dolor se sentía la preocupación en la voz.
- así que por eso despertaste… si hoy precisamente venia a ver cómo te sentías…
- puedo hacerlo…
- no pregunte eso.
- no pregunto nada.
- mmm – Tsunade le durmió de la cadera para abajo – poco a poco ara efecto, y no importa lo que diga, sé que no me dirás que tan débil te sientes ni nada por el estilo, solo quiero que sepas que es mejor que te cuides porque el que se hará cargo del bebe serás tu, por suerte a pesar de ser complicada la cesárea solo necesitaremos que concentres el chakra en el vientre de Kiba y después directamente con el bebe, puede que en tu condición sea gran desgaste pero estarás bien, así que ya mando por Sasoe para que te traslade al consultorio de Kiba, ya es momento de que nazca tu hijo.
- bien…
Y así fue, Sasoe traslado a Shino al consultorio de Kiba que era donde se había estado quedando ya que su habitación había sido destruida con la pelea de Tanimoto, pronto ya todo estaba listo para comenzar.
- Hinata, controlara la regulación de la sangre y Sasoe auxiliame con Shino…
Por otro lado Sao se encontraba en la habitación de Lee, el cual se había quedado dormido pacíficamente al igual que su bebe, pero pronto se percato de que Neji estaba despertando.
- Neji-san!
- Sao… - dijo con su voz algo reseca, lo atendió lo mas en silencio que pudo y después le conto todo lo que había sucedido y lo que le había dicho a Lee sobre su situación - ¿Por qué hiciste algo como eso Sao?
- porque es necesario, es una buena oportunidad para que ustedes como familia estén juntos, además puede hacer esta vez las cosas bien, inclusive si llegase a recobrar la memoria podría ser que inclusive llegase a tener meritos con él para por lo menos dejarle ver a la hermosa Mika.
- pero y si no, si sale peor… - Neji no estaba muy seguro.
- peor de cómo estaban no lo creo – en eso tenia razón, pero no pudieron seguir con la plática ya que Lee había despertado y al ver a Neji despierto sonrió como tenía tiempo sin hacerlo.
- Neji… que bien que ya despertaste – se levanto y fue hacia él, quería abrasarlo pero temía lastimarlo por lo que se le ocurrió darle un pequeño beso en los labios, ese toque había sido como vida para Neji, el cual cerro sus ojos disfrutando de ese contacto, lagrimas inundaron sus ojos, Lee lo miro extrañado – ¿Qué sucede?, ¿te duele algo?
- …no… - lo miro y sonrió entre lagrimas – no tienes idea… de cuento extrañaba tus besos, me alegro que estés bien – a pesar de que estaba feliz, una parte de él no lo estaba, sabía que no se lo merecía, lo sabía, pero por un momento se olvido de eso, dejaría pasar unos días, después le contaría a Lee la verdad.
Pasaron las horas y ya entrada la noche, un peligris llegaba a la cabaña con un castaño en brazos, el cual también tenía una preciada carga en sus brazos, todos estaban feliz de tenerlos ya en casa, Tsunade a pesar de lo cansada que estaba reviso al bebe y a Iruka.
- está en muy bien estado, pero por hoy ha sido demasiado, será mejor que descansen.
Y así todos se fueron a descansar a las habitaciones disponibles, pero Kakashi antes de irse con Iruka fue hacia la habitación de Shino, encontrándolo viendo hacia el cunero que estaba a un lado de su cama.
- veo que sobreviviste, me alegro, sobre todo por el bebe, sin ti no creo hubiera podido nacer, es una pequeña copia de Kiba, ¿no?
- así es, es hermoso… - dijo sonriendo.
-¿ ya pensaste como lo llamaras?
- Yuu… bueno, si es que Kiba no lo acepta, la verdad desearía que él lo aceptara y le pusiera nombre… - Kakashi lo miro triste, en parte, por cómo era Kiba, estaba seguro que el que menos posibilidades de una reconciliación tenía era Shino.
- ¿Kiba ya despertó?
- no, Tsunade-sama dijo que despertaría en un par de días, puede que para entonces ya estemos en Konoha.
- ¿cuanto tiempo duraras en cama?
- pues se supone que tres meses reposo absoluto, lo más seguro es que tenga que contratar a una enfermera para que se haga cargo de Yuu si Kiba no…
- al parecer te estás haciendo a la idea, ¿no?, de que Kiba siga con la misma mentalidad…
- no lo culparía… quería preguntarte algo…
- adelante…
- no te sientes confuso con lo que paso entre todos nosotros, sobre Neji, Itachi, Sai… Sasuke… como si la razón que creía tener por ser infiel no fuera tan clara ahora?, digo… me he sentido así ahora que no he convivido mucho con…
- me he sentido igual… de hecho… de hecho creí que lo había hecho por curiosidad, mi mente pervertida de siempre… pero pensándolo bien, jamás creí que me atrevería a pasar los limites de mis propias perversiones, nunca pensé en que tocaría a mis propios alumnos, ni mucho menos engañar a Iruka por una razón tan estúpida como la curiosidad… y precisamente las dudas han crecido ahora que eh estado alejado un poco de Sasuke.
- tú no crees que eso es raro…
- siento que estoy olvidando algo con respecto a esto… pero no se… es confuso…
- tal vez hablarlo con Sasuke…
- no… me temo que Sasuke está peor que nosotros…
- entonces…
- tendremos que esperar… me temo que ahora el tiempo es el que dirá.
Paso un día más cuando de repente un grupo de AMBUS llego a la cabaña y empezaron a trasladarlos hacia Konoha.
- entonces, ¿regresaremos a Konoha? – pregunto Deidara a la Hokage.
- si, la cabaña quedo muy dañada y si sigo usando a Yamato como constructor se va a hacer rico, así que será mejor que regresemos de una vez a Konoha, por mientras los que van directo al hospital son Kiba el cual será dado de alta en cuanto despierte que será pronto, Neji también estará unos cuantos días en el hospital aunque la infección ha cedido no quiero que salgan sorpresas, Sai aun esta inconsciente así que también, Shino hasta que los intensos dolores pasen y podamos mantenerte con medicina que ya solo puedas manejar, por lo que el Yuu también se quedara en el hospital, en cuanto a Naruto, Deidara, Gaara y Lee solo les hare la última revisión y podrán irse a casa… ¿ya decidieron a donde se irán? – tenía que hacer la pregunta.
- ¡claro! Yo y mi poder de la juventud nos iremos a la casa que compartimos mi amado marido y yo para preparar todo para cuando regrese a casa – decía un muy animado Lee, ya todos estaban al tanto de su falta de memoria, una parte de ellos estaban enojados por el hecho de que eso implicaba de hacer como si no pasara nada y tener que poner una buena cara cuando realmente, en el caso de los Ukes estaban molestos con Neji, aunque la otra parte era pura envidia, un comienzo prácticamente desde cero, sin errores, sin dolor, sin malos recuerdos, pero para Neji no era de esa manera y se podía ver en su melancólica mirada, él sabía que no merecía que Lee hiciera más cosas por él, estaba feliz porque de nuevo pudo probar sus labios pero era un gusto que debían ser negado, pero tampoco podía hacerlo sentir mal desairándolo porque se sintiera incomodo, no es que no quisiera sus besos es que los quería plenamente del Lee de siempre.
- me alegro Lee… - la rubia solo pudo decir eso, no le paso desapercibido la incomodidad de todos, mucho menos la de Neji que se encontraba en una silla de ruedas – Sao, porque no llevas a Neji a su habitación se ve cansado… - el nombrado simplemente hizo lo que se le ordeno.
- voy contigo – dijo Lee – además así aprovecho y le doy de comer a Mika – y así los tres se fueron dejando a los demás.
- bueno… ¿y los demás?
- en cuanto me revises y me des de alta me regreso a Suna con Shin… ya sabes lo que te pedi Tsunade – dijo Gaara mirando a la rubia.
- claro…
- ¿regresas a Suna? – pregunto Naruto mirándolo con tristeza.
- no te preocupes Naruto… solo es cuestión de arreglar cosas pendientes, aunque puede que mínimo si pase mas del año sin vernos, pero prometo venir a visitarte… ¿De acuerdo? – le sonrió como siempre lo ha hecho con él.
- bien…
- ¿ tu Naruto? – le pregunto la rubia.
El rubio miro a Sasuke el cual le regreso la mirada, ellos ya se habían puesto de acuerdo, se irían a vivir a la mansión que los padres de Sasuke le habían construido para cuando este se casara, no la habían utilizado por el hecho de la nostalgia de vivir en la casa principal, pero esta vez Naruto era el que había puesto condiciones, y una de ellas era demoler esa casa, claro, llevándose todo lo que consideraba como un buen recuerdo, lo que quería era destruir era destruir esa habitación oculta donde había visto su peor pesadilla, claro estaba que para Sasuke esto era un golpe fuerte a sus recuerdo con sus padres, era algo que inclusive le dolía en el alma, pero era algo que el mismo se había buscado, no se iba a negar, además Naruto le había dicho, que si querían nuevos inicios debían comenzar también con nuevos cimientos, demolerían la mansión, pero construirían una entre los dos, para sus hijos, pero obviamente eso no significaba que las cosas entre los dos estaban como en antaño, si Sasuke quería una familia feliz en un futuro no tan lejano tendría que seguir esta vez con las reglas de Naruto, esta vez era el momento de que Sasuke rompiera completamente su orgullo y pensara en alguien mas además de el mismo.
- si, nos quedaremos con Sasuke, pero en una mansión que sus padres le habían heredado para cuando él se casara.
- ya veo… ¿pero que pasara con la casa principal, la dejaran abandonada? - pregunto la rubia.
- será demolida – dijo tajantemente, Sasuke simplemente cerró los ojos, mientras Itachi mucho más de lo normal por la impresión, después de todo también había convivido con sus padres y su hermano en esa casa cuando era un niño.
- ¿Qué? – pregunto a un incrédulo.
- se que esa casa importante para ustedes – seguía Naruto – pero esa casa debe ser destruida…
- pero… -iba alegar algo Itachi, pero fue interrumpido por Deidara.
- estoy de acuerdo que esa casa sea destruida.
- Deidara… - el azabache mayor lo miro, vio en sus ojos mucho dolor, se estremeció ante eso.
- se que esa mansión… - se escucho la voz de Iruka– …es de los Uchiha y no tienen nada que ver conmigo, que solo tienen que ver Itachi y Sasuke, además de Deidara y Naruto que sus esposos, se que destruirla es un gran golpe para los primeros, pero… sé porque Naruto tomo esa decisión y Deidara lo respalda, pero aunque no tenga que ver conmigo he de decir que estoy de acuerdo con que ese lugar sea demolido.
- Iruka… - Kakashi le miro.
- es doloroso tenerlo en nuestra mente y corazón, si destruir esa habitación, donde ustedes… - no pudo continuar con lo que decía - si destruirla nos alivia aunque sea un poco, si al visitar a mis amigos, veo esa casa, o incluso piso ese mismo lugar, donde en una de sus habitaciones, aunque sea oculta, nos engañaron, como creen que nos sentiríamos… estoy completamente de acuerdo con Naruto y al igual que Deidara respaldo la decisión de este – completo Iruka sin decir más.
Era lo mismo que le había dicho Naruto a Sasuke, por lo que ya lo había comprendido, en cambio Itachi ante esas palabras lo comprendió en ese momento, sin decir más simplemente asintió, había sido error suyo y ahora les tocaba pagar con uno de los recuerdos más valiosos que había, que era la casa donde había convivido por un tiempo feliz con sus padres y hermanos.
- bien… ¿Deidara, donde te quedaras?
- con Itachi - dijo sin más.
- bueno, supongo que Iruka se quedara con Kakashi.
- no… - todos los miraron sorprendidos, se suponía que eran los que mejor estaban.
- he vendido la mansión Hatake… ayer salió un comprador según lo que me dijo Yamato, en cuanto me den el dinero y la entregue comprare un casita mas chica para nosotros, bueno tal vez también la haga Yamato, Iruka y yo acordamos utilizar su departamento como bodega en lo que sabemos qué hacer con algunas cosas, con otras las venderemos o las tiraremos, a pesar de que tenemos ahorrado dinero, es mejor agarrar un poco más para que no le falte nada, Hikaru tendrá todo lo que necesite.
- eso me parece una excelente decisión… - dijo la rubia, hasta que Kakashi mostraba madurez en algo – bueno solo falta que pasara con Kiba cuando despierte, Bien, sin más que decir es momento de que los ANBUS comiencen con el traslado con los que necesiten ayuda, es momento de regresar a casa.