Narra Akai
Pues aquí me tienen de nuevo, es sábado en la madrugada y no puedo dormir, giro y veo el despertador marcando las 4:13 am. Lo que más necesitaba era descansar y termino con insomnio… Genial
No me queda mas remedio que hacer algo para matar el tiempo, esto algo ansiosa lo que logra que este de mal humor. Odio esta espera, siento que ha pasado años en vez de días y los minutos parecen horas… Esta ultima semana ha sido una de mas largas de mi vida, jamás creí sentir este sentimiento que es como si te estuvieran oprimiendo el pecho sin poder respirar bien… Y cada día más cerca de hoy sentía mayor esa sensación. Y ¿saben que?...La odio.
Me levante y veo como la negrura de la noche empieza poco a poco a cambiar de matices ahora mas claros, me encantaría quedarme aquí mirando el amanecer toda la vida, me embarga un sentimiento de tranquilidad, que hace , por momentos, olvidarme de todas las presiones.
Me voy a la ducha y lleno de agua la tina, coloco música lo suficientemente alto para escucharla, pero lo suficientemente bajo como para no despertar a nadie. Cuando ya estuvo llena, me desvestí y me metí a la tina. Cerré mis ojos haciendo que mi cuerpo lograra de a poco relajarse, manteniendo mi mente en blanco, ya que si empezaba a pensar en algo seguro iba a terminar en lo que iba a pasar en un par de horas, empecé a cantar bajito las canciones que iban saliendo, siempre con los ojos cerrados…
Me levanto, entumecida por el tiempo que estuve en el agua. Me envuelvo en una toalla para conservar el calor que me queda. Veo la hora y son las 6.30… Bien mate 2 horas solo en la ducha… Ahora el gran dilema…. ¿Qué ropa me coloco?
No quiero que piense que la quiero “conquistar” pero tampoco es para ir mediocre. ¿Unos jeans rotos estarán bien? Eso creo, opte por unos negros rotos parte en los muslos y las rodillas. Elegí una musculosa negra y arriba de esta una camisa cuadrille roja y azul, dejando desabotonado los primeros botones, total, estaba la musculosa que tapaba. Unas zapatillas de lona negras y alguno que otro accesorio como: un aro en la oreja derecha, un collar sencillo, unas pulseras de cuero y un reloj en la muñeca.
-Bien… creo que estoy presentable-Dije examinándome en el espejo- Ahora me falta el pelo.
Me lo seque con la toalla y luego con el secador, me tome mi tiempo. Luego alise un poco las puntas, no me gusta que se me formen “gatitos”. Me volví a ver en el espejo, conforme como iba quedando mi imagen.
Me fui al baño y empecé a maquillarme, delineador negro en los ojos y un poco de base en algunas partes. Me contemple ya colocándome mas nerviosa. Me lave los dientes, me coloque un poco de mi perfume predilecto y salí de nuevo a mi habitación.
Allí tome un bolso pequeño y metí mis cosas, la billetera, mis llaves, mis audífonos y una chaqueta. Tome mi celular y veo la hora… 08.18, bien… tengo tiempo para prepárame mentalmente e ir.
Aunque el lugar acordado no esta tan lejos de mi casa, siento que después de esto, no tendré muchas intensiones de volver a mi departamento. Llegue a la cocina y vi que era lo que había de comer, pero luego con una sensación extraña en mi estomago hizo que solo tomara un jugo. Me quede en la sala esperando a que pasara el tiempo, prendí un rato el televisor, pero al ver solo basura y anuncios tipo “compre ya” ¡Si nos llama se lleva este producto completamente gratis!
-hmm –Dije con sarcasmo cuando apague la televisión- ¿Y que mierda hago para matar el tiempo?
Mire a mí alrededor como si la respuesta iba a aparecer de la nada. Suspire y me fui a mi habitación y tome mi bajo. Empecé a tocar una melodía que hace tiempo compuse, pero por problemas de tiempo lo deje. Mis manos empezaron a hacer sonar las notas, sintiendo que aquella melodía del bajo me inundaba y me hacia ver que no había nadie mas en este momento, solo era yo…
Inconscientemente las notas iban avanzando y luego fue mi voz la que se unió, sentí que con solo este acto podía controlar al mundo. Mis manos temerosas al principio, ya estaban excitadas al sentir las cuerdas entre ellas y que vibren entre mis dedos.
La última nota que sonó, retumbo en toda la habitación… Extraño ¿no? Con solo haber tocado una canción ya me sentía mucho mejor. Miré de nuevo el reloj y vi que ya eran las 08.54 ¡Diablos! Todavía queda tiempo.
Me recosté en mi cama y coloque de nuevo la música, haciendo unos ejercicios de relajación que tiempo atrás me habían enseñado… En algunos momentos me quedaba mirando por la ventana viendo el despertar de las aves y ver una que otra persona en las calles. Cuando ya sentí mas ruido afuera me levante y volví, de nuevo, a ver la hora…. Eran las 9.57…
Ahora comienza mi dilema ¿Llego yo primero? ¿O la espero? Por que nunca se me ha dado eso de llegar tarde, siempre me gusta estar a la hora si no antes, además si yo llego después tendría que encontrarla y no tengo la menor idea de cómo esta ahora. Así que prefiero ir primero.
Tome mis cosas me coloque los audífonos y salí, afuera no hacia mucho frio por lo que me arremangue la camisa hasta un poco mas abajo de los codos. Cuando ya salí del edificio, camine escuchando música tratando de relajarme, tratando de imaginarme como terminaría todo esto. Seguí caminando hasta que llegue al parque. Divise una banca debajo de un árbol y me senté allí, me saque uno de los audífonos y espere, eran las 10.26 así que no esperaría tanto.
Estaba jugando con mi celular cuando siento una voz, llamándome, logrando que me mi corazón se parara (no literalmente)
-¿Akai-chan?-Dijo esa voz.
Levante la mirada y la vi… Siempre pensé que no iba a reconocerla cuando la viera, pero apenas la vi, supe que era ella. Sus ojos eran los mismos, decorados con una sombre morada, sus facciones eran mas delicados de lo que recordaba… Pero era ella.
-Azuhi…-Le dije levantándome. No podía creerlo… Ella si estaba viva… Me sentí tan feliz pero a la vez tan traicionada…
Ella me miro feliz por que la reconocí, me miro a los ojos temerosa un de cómo estaba reaccionando, yo no sabia que hacer… ¿Cómo enfrentarse ante una situación así?
-Ven-Me dijo se sentó en la banca y me hizo una seña de que esperaba que hiciera lo mismo- Creo que tendrás muchas preguntas…
Solo la imite en silencio mientras trataba de entender todo esto, no le había tomado el peso a la carta hasta que la vi a ella ahí.
Tenia que aclarar lo que estaba pasando por mi corazón y mi mente… Estaba feliz de verla eso era verdad, me alegro mucho de que en realidad este bien. Mi corazón palpita fuerte, pero no se si es por lo estresante de la situación o por…
-¿Cómo diste conmigo?-Pregunte al fin.
-La verdad, te busque por Inglaterra, porque siempre quisiste ir ahí. Después me vine pensando que no te habías a ningún lado y que solo cambiaste tu dirección y todo. Fue casualidad que estaba en un hotel y pasaras por afuera.
-¿Por qué esperaste a que pasara tanto tiempo?
-En eso tienes razón, pero yo quede algo delicada y por unos cuantos años no podía volar por que tenia delicado un oído. Así que no pude hacer mucho, pero claro tome mi independencia antes.
-¿Tus papas saben que estas aquí?
-Ellos saben que te iba a buscar, siempre se los dije.
-Y ahora que estoy aquí… ¿Qué es lo que esperas?
Ella me miro algo temerosa, su mano se poso en la mía y me la acaricio. Poco a poco caí en la verdad… Algo dentro de mi sabia la respuesta. Pero no quería admitirla…
-Yo…-Empezó a decir- Primero quería encontrarte para que no siguieras creyendo una mentira, tenia que darte las explicaciones correspondientes, era lo mínimo que merecías. Segundo… voy a ser sincera, vine a buscarte y que retomemos nuestra relación. Por que estoy segura de que si no hubiera estado ese accidente, nosotras seguiríamos juntas. Pero no puedo obligarte a que vuelvas con… “un fantasma” como yo lo soy. Se que es difícil, pero creo que juntas podremos hacerlo.
Ella me miraba esperanzada, se que es lo que ella quería, ero inmediatamente supe que es lo que quería yo. Y lamentablemente alguien iba a salir herida. Seguía acariciando mi mano mientras yo meditaba sus palabras, ahora más segura de lo que sentía.
-A veces…-Empecé- Es difícil sobrellevar un obstáculo por tanto tiempo, es difícil querer avanzar y que no te deje y que te siga atando al pasado. Tú fuiste eso estos últimos años. Siempre que quise estar con alguien, aparecías tú y ella no era nada comparado contigo. Así que terminaba sola… Todo eso fue para mí, lo doloroso que fue irme de nuestra casa, lo desolador era cuando visitaba tu tumba en nuestro aniversario, lo triste de las noches en las que no te podía tener, las lagrimas derramada… Todo ese sufrimiento… ya no esta.
-¿Eh?-Dijo Azuhi
-Yo sufrí mucho, pero ahora… estoy feliz. Por fin encontré a alguien que me hace olvidar todo lo que fue mi pasado. Y volver a tener un futuro. Lamento que las cosas sean así-Dije sinceramente- Me hubiera gustado que las cosas fueran diferentes. Pero no puedo cumplir lo que me pides. No puedo volver contigo por que yo ya estoy con otra persona. Y no esta dentro de mis planes dejarla.
Ella me mira con lágrimas en los ojos, me seguía acariciando la mano. Mientras su cuerpo daba pequeñas convulsiones debido a los sollozos.
-Eres una buena persona-Me dijo Azuhi- Espero que seas feliz con ella. Espero que ella e de todo lo que no pude darte yo. Te deseo lo mejor. Pero…Por lo menos déjame ser tu amiga… Fuiste más que nada una amiga. ¿Puedo conservarla?
-¿Eso te hará bien?-Le pregunté
-Si, Quizás una de las razones por la que no pude olvidarme de ti debe ser por que me sentía en el deber de aclararte lo que paso. Y ahora que lo he hecho, podre enfocarme en otras cosas.
-Espero que seas feliz. Tú también mereces ser feliz con alguien que te haga feliz.
-Gracias-Me dice sonriendo- Toma- Me da un papel.
-Es mi número y mi correo. Esta semana iré a Australia a buscar mis cosas y me vendré aquí. A mi hogar.
-Ohhh-Dije feliz, ya no hay mas despedidas- Eso es bueno. ¿Y cuando te vas?
-Mañana-Dijo levantándose
-Suerte-Dije abrazándola, sintiendo con mis manos que si, efectivamente era ella.
-Tu igual… Nos vemos otro día.
-Por supuesto
Nos despedimos y me quede mirándola mientras ella se alejaba, pensé que esto terminaría mucho peor. Mire a hora de mi reloj y veo que son las 1.28 de la tarde. Tome mi celular para llamar a Kim ansiosa pro decirle todo, y veo que esta descargado….
¿Qué hago? ¿Qué hago?
Inconscientemente mis piernas empezaron a correr, cada vez mas rápido, quería verla ahora. Mi mente ahora es un caos de sentimientos e ideas para decirle.
Cuando por fin llegue a su casa, me tome unos momentos para poder tranquilizarme (sin éxito) y toque el timbre…
Espere ansiosa a que me abriera, cuando sentí el “click” de la puerta la vi. Tenia los ojos algo rojos y se veía intrigada pero a penas me vio se sorprendió mucho.
-Akai…
Sin decirle nada entre, la tome en mis brazos y la abrace con todo el amor que pude transmitirle. Ella quedo sorprendida sin entender mucho lo que ocurría… Así que me dispuse a responder todas las preguntas que tenga rondando en su cabeza con solo dos palabras:
-Te amo-Le dije mirándola a los ojos.
Ella me miro sorprendida, de nuevo, pero entendió que era lo que pasaba y sonrió de la manera mas dulce que la he visto a ella. Salto a mis brazos mientras sonreía.
-Yo también te amo- Dijo riéndose y llorando a la vez.
No había nada mas que decirnos, nos miramos, aun abrazadas, y juntamos lentamente nuestros labios en un beso. Era nuestra manera de sellar nuestro amor…
Por que… ya no había que decir nada más.
Todo estaba dicho
Ya los “te amo” sobran
Y son sustituidos por nuestras miradas y sonrisas…
Al fin veo la felicidad en mi camino
Y puedo decir con toda honestidad
Soy feliz
Fin.