33.- TODO TIENE UN FINAL.
El tiempo en un abrir y cerrar de ojos pasa sin que nos demos cuenta, las personas nacen y de repente ya tienen cinco años, juegan con sus pequeños amigos y conviven con su familia y sonriendo ante las muestras de afecto de sus padres, sobre todo dos pequeños niños, uno de ojos azules y otro de ojos negros que veían como su madre cocinaba con su padre abrazado a su cintura con una mano y con la otra acariciando el abultado vientre que tenía su madre, pronto ya no serían cuatro, sino cinco en la familia.
- vamos Naruto, ya tienes cinco meses de embarazo creo que deberías de descansar hasta que nazca el bebe y dejar a Kakashi o a Tsunade como tu suplente de Hokage.
- no lo sé… aun puedo moverme bien y son solo documentos los que tengo que revisar, no creo que pase a mayores complicaciones si trabajo unos dos meses más ttebayo.
- no, lo mejor sería que descansaras ya de una buena vez, porque aunque sean documentos siempre estás de una sola posición durante muchas horas, así que por favor, por mí y nuestro hijo para que no tengas ninguna complicación al momento de que nazca - decía mientras besaba la nuca del rubio.
- mmm de acuerdo, mañana citare a Kakashi y a Tsunade a ver quién quiere ayudarme, aunque sabes tú también podrías…
- naa yo prefiero quedarme a cuidarte y a esos dos mocosos que están de chismosos - y en movimiento rápido ya tenía a los dos niños en cada brazo mientras ellos se reían a carcajada abierta.
- jajaja no papi, no nos hagas cosquillas jajajaja – decía Yasuhika, mientras Kiyoshi trataba de escapar pero no pudo ya que su papa de una pierna y levantaba poniéndolo de cabeza.
- jajajajajaja no suéltame – gritaba Kiyo.
El rubio mayor no pudo más que negar con la cabeza, su familia si que era un caos total pero era muy feliz con ella, Yasu y Kiyo habían aceptado de muy buena manera al que ahora era su esposo, Tanimoto un joven alto y castaño había entrado en su vida como una luz en tanta obscuridad y se había encariñado también con sus hijos y ahora le llamaban “papá”, la ausencia de Sasuke ahora en su vida no fue de gran importancia como creía que seria, de hecho un año después de ello ya había conocido a su castaño, era un pervertido completamente bien dotado, por lo que en la cama lo satisfacía mucho mejor de lo que alguna vez el azabache pudo cuando estuvieron juntos y las cosas mejoraron aun mas cuando fue nombrado como el nuevo Kage de la Hoja.
- Oye Tani-kun porque no llevas a los niños con Iruka para poder hablar de cosas “serias” – dijo el rubio en un tono sugerente que fue captado rápidamente por castaño.
- claro Naruto-sama, tenemos muchas cosas que decirnos - dijo sonriendo de forma pervertida, dejando a los niños un momento para ir y besar al rubio de una manera muy pasional, sus manos que acariciaban la espalda fueron bajando hasta estrujar las nalgas sin pudor alguno haciendo que Naruto gimiera de placer…
- ¡NOOOOOOOOOO!
- ¡Sasuke!, ¡Sasuke! Despierta, cariño, amor despierta – Los ojos negros se abrieron exaltados ante ese sueño o más bien dicho pesadilla, su respiración era acelerada y estaba completamente empapado de sudor, miro a la persona que lo había sacado de ello y lo abrazo con mucha fuerza y de la misma manera fue correspondido.
- Naruto… dime que me amas y que ese Tanimoto nunca te ha tocado ese hermoso trasero que tienes – dijo mientras sus manos viajaban a esa parte de anatomía mencionada.
- ¡no eres más que un maldito pervertido Teme! ¿Qué demonios estabas soñando pedazo de baka? – dijo dándole un tremendo zape al de cabellos azabache.
- ¡ash! ¡Dobe no seas tan violento! – dijo sobándose la cabeza mirando al rubio que se había puesto de pie con el seño fruncido, al parecer molesto – y no me has respondido, ¡dime!, ¿te ha tocado ese trasero que por derecho me corresponde?
- por supuesto que… ¡No!, Teme ¿Cómo se te ocurre tal cosa? – Tanimoto realmente existía, era uno de los que trabajan en la torre y también ya habían pasado cinco años desde que nacieron sus hijos.
- es que ese sueño fue tan real… - susurro el Uchiha.
- ¿sueño?
- Naruto… te amo – el rubio se sorprendió, pero rápidamente se recompuso y fue a sentarse a un lado de Sasuke, el cual ante su cercanía lo abrazo de nuevo de una manera más calmada y escondió su rostro en el cuello de su esposo - ¿tú me amas verdad?, ¿te satisfago bastante en la cama?, ¿te hago sentir bien?
- Sasuke… te amo con toda mi alma, estoy extremadamente feliz de tenerte a mi lado, cuando creí que te ibas a ir de nuevo de mi lado creí que moriría, era un golpe que de lo más seguro es que nunca me hubiera recuperado y sobre si me satisfaces o no en la cama pues… - se sonrojo – me haces perderme cada vez que me tocas, disfruto tanto cuando hacemos el amor, tanto cuando me tomas o me dejas tomarte, además estoy muy feliz porque…
- ¿Por qué?
- …dentro de ocho meses seremos cinco en la familia – sonrió ante la cara de sorpresa de Sasuke, después se maravillo con su hermosa sonrisa y se indio ahora él en los brazos del azabache.
- gracias, gracias, gracias, no tienes idea de lo feliz que me haces, no cabe duda que esta vez disfrutaremos de tu embarazo como Dios manda, como no pudimos con Yasu y Kiyo.
Naruto le dio la razón, por fin podrían, habían pensado hace ya un año en tener mas bebes pero el rubio, al convertirse en Kage, platicando con su esposo tomaron la decisión de esperar y cuidarse hasta que las cosas ya tuvieran un paso más tranquilo y que no afectara en nada el estado del rubio, que aunque no necesitara ya tantos cuidados como la primera vez, tenia los riesgos de un embarazo común y el estrés era demasiado en ese tiempo.
- por cierto ¿Qué iremos a hacer con ellos?
- ¿a qué te refieres? – pregunto el rubio sin comprender a que se refería su esposo.
- si eso, que deberíamos hacer con esos dos chismosos, que en vez de estar durmiendo están espiando detrás de la puerta – después de decir esas palabras sus dos niños entraron a la habitación.
- moo papá, es que te oímos gritar y pensamos que papi te estaba golpeando – dijo el rubio menor subiéndose a la cama.
-¿eh? Pegarle yo…
- si papi – dijo el pelinegro menor subiéndose también a la cama – además no lo niegues que bien que le diste un zape, aunque bueno, papá es un de… de…. Uhm – se puso a pensar en como se decía la palabra que quería decir –¡degenado! ….uhm no…
- degenerado mi amor – dijo el rubio mayor – y si tiene razón lo es.
- ¿y qué es eso papi? – pregunto ahora el rubio.
- ¡es papá! – grito el azabache como si fuera lo más natural del mundo.
El rubio mayor no pudo evitar reírse ante la cara indignada que había puesto Sasuke y sabía perfectamente que no era porque le hubieran dicho degenerado, sino porque pensaban que era más débil que su papi además de un dejado – pero no es eso mis amores, su papá solo tuvo una pesadilla.
- oh… quieres que durmamos contigo para que ya no tengas mas malos sueños – decía tiernamente el rubio menor subiéndose a los brazos del azabache mayor.
- uhm, eso sería magnífico – dijo sonriendo y así los cuatro se acostaron en la cama muy bien abrazados y con una sonrisa en sus labios.
- entonces duérmanse porque mañana tenemos visitas… - anuncio Naruto.
- ¿Quién va a venir papi? – pregunto el azabache menor.
- vienen sus tíos Deidara e Itachi con sus hijos, además de Iruka, ya que vamos a festejar que ya se encuentra mejor, por lo que Kakashi y sus hijos también vienen.
- ya veo… - dijo Sasuke.
- si, sirve que aprovecho para preguntarle a Kakashi si en unos tres meses más pudiera hacerse cargo por un año del puesto de Kage en lo que me recupero y el nuevo bebe este mas grande.
- ¿nuevo bebe? – preguntaron los dos niños al mismo tiempo medio levantándose para mirar a papi.
- si ttebayo, van a tener un hermanito o hermanita…
- ¡¡¡wiiii!!! – gritaron los niños felices, entonces supo Sasuke que no iban a poder dormirse temprano.
Al día siguiente Naruto hacia la comida para la reunión, mientras Sasuke y sus hijos ayudaban a poner la mesa junto con algunas botanas, pronto el timbre se escucho y los niños corrieron a abrir la puerta dejándose ver a un castaño que venía en una silla de ruedas con bebe en brazos, mientras un peliplata empujaba la silla con un niño de cinco años colgado de su cuello.
- llegamos temprano – dijo Kakashi al ver que no habían llegado Deidara e Itachi.
- pues estar casado con Iruka-sensei le sirvió de algo Kakashi – dijo Sasuke dándoles pasada.
- moo Sasuke no deberías de ser tan malo conmigo, es solo que siempre se me atravesaba algo en el camino y casi siempre era el trasero redondito de mi Iru-koi.
- ¡Kakashi! – le regaño el castaño.
- Iruka-sensei, que bueno es verlo ya recuperado – dijo Naruto saliendo de la cocina para darle la bienvenida a sus dos senseis y casi padres.
- sí, gracias, la verdad es que ya no veía el día en que no pudiera salir de ese hospital… por cierto – miro a Sasuke – gracias – y luego a Naruto – de verdad gracias, sin ustedes creo que ninguno de los dos hubiera podido estar aquí el día de hoy – dijo mirando a la nena que tenía en sus brazos de apenas siete meses de edad.
Iruka se había embarazado de nuevo, tal parecía que el sello que había puesto el Kyubi para que ya no pudiera tener hijos no surtió efecto y el sensei había entrado en una edad demasiado peligrosa para tener otro hijo, con su primer hijo había sido delicado, esta vez había riesgo inclusive desde el principio, el zorro le había dicho que lo mejor sería interrumpir el embarazo pero eso era algo que ni siquiera quería imaginarse el moreno, el zorro le dio la razón ya que el perderlo podría ser muy contraproducente para la estabilidad mental del sensei, así que decidió ayudarle en lo más que pudiera dándole pequeñas cantidades de chakra ya que no podía darle mucho, después de todo su poder estaba creado de odio y por la noche no lo dejaba dormir por las pesadillas que le provocaba, Sasuke e Itachi al igual que Kakashi también le ayudaban con su chakra, fueron los ocho meses más difíciles de la vida de los senseis y de los que le rodeaban, muchas veces el moreno creyó no lograrlo pero su esposo e hijo siempre hacían lo que podían por hacerlo sentir bien, aunque después no fue al único que tuvieron que subirle el ánimo, ya que en el sexto mes de embarazo Iruka había caído en coma, por tal motivo Kakashi creía que lo perdería, su nena, que se llamaba Natzumi, había tenido que nacer con cesaría y la esperanza de vida de Iruka era mínima ya que la perdida de chakra era casi mortal, por suerte Kabuto intervino crean bastante chakra compatible para el moreno y gracias a eso logro salvarlo, aunque su condición actual era débil, en unos dos años lograría estar completamente bien, además Tsunade aprovecho para quitarle los órganos femeninos necesarios para embarazarse que se habían creado por el jutsu y por suerte ya no se habían vuelto a generar, al parecer eso era necesario para que el sello que había puesto el Kyubi funcionara.
-pues no podíamos dejar que nos dejaras – dijo Naruto sonriéndole – fue muy difícil para todos, pero no podíamos darnos por vencidos, después de todo eres nuestra familia al igual ahora lo es Natzu…
- de todas maneras Naruto – hablo Kakashi – sin ustedes no seque hubiera pasado.
- mejor no piensen en esas cosas y pónganse cómodos.
No tardaron en llegar el hermano de Sasuke y Deidara con sus tres hijos, habían tenido un hermoso Nene que ahora tenía dos años de nombre Toya, además de que el rubio tenía ya cinco meses de embarazo, todos estaban en la sala platicando y acomodando la comida que habían traído ellos para la convivencia, mientras que Naruto terminaba con lo suyo en la cocina teniendo pronto la compañía de su rubio amigo y de su sensei castaño.
- ah no puedo creer que ya pasaran cinco años – decía Deidara sentándose en una de las sillas de la cocina.
- cierto, es demasiado increíble, han pasado tantas cosas para llegar hasta dónde estamos y con quienes estamos – Iruka ayudaba a Naruto a cortar algo de fruta para el postre que estaba haciendo.
- yo se lo debo a ustedes, sin ustedes Sasuke realmente nos hubiera abandonado – Naruto no pudo evitar sonreír melancólico ante el recuerdo de hace cinco años, si Deidara e Iruka, inclusive Kiba no hubieran hablado con el azabache de su esposo lo más probable es que ahorita se hubiera sentido más muerto que nunca.
FLASH BACK.
Sasuke había sido dado de alta a eso de las cinco de la mañana, salió del hospital a paso lento, la verdad no quería llegar a la casa que aun compartía con el rubio, estaba demasiado inseguro de la decisión que había tomado, amaba a Naruto y a sus hijos, no quería dejarlos pero no quería hacer más daño además de que no merecía estar con ellos, se sentía sucio y una basura, no merecedor del amor de su rubio; salió de sus pensamiento cuando repentinamente ya estaba frente a la entrada del barrio Uchiha, iba a entrar cuando sintió una presencia y detrás de uno de los arboles salió un castaño, Sasuke inmediatamente bajo la mirada.
Iruka miro esa acción, sonrió ante eso, la verdad es que Sasuke aun seguía siendo un niño que estaba perdido entre tanta obscuridad, lamentablemente nadie había visto tal cosa, o si lo hicieron lo ignoraron, claro, como era un Uchiha debilidad es lo que menos deben de tener, sobre todo por su orgullo, pero su orgullo había sido pisoteado desde que era un niño, haciéndolo odiar a una persona que era importante para él, desde ahí empezó todo y nadie vio nada.
- ¿Por qué bajas la mirada Sasuke?
- yo solo voy de paso, con permiso Iruka-sensei – dijo queriendo avanzar pero Iruka se puso delante de el sin permitirle el paso.
- sé lo que piensas hacer, sabes, Naruto esta desecho y completamente rendido, hoy ni siquiera quiso ver a sus hijos…
- ¿Por qué habla conmigo? – le pregunto sin atreverse a mirarlo aun.
-¿Por qué no he de hacerlo?
- no se quizás ¿Por qué tuve sexo con su marido? –sonrió irónicamente mirando a Iruka levantando un poco la mirada.
- ¿ahora que no estás bajo el control de Orochimaru quieres acostarte con Kakashi?
- POR SUPUESTO QUE NO – dijo alterado ante tal pregunta.
- entonces ahí tienes tu respuesta, no solo tú no sabias lo que hacías tampoco el, claro que fue doloroso, no lo voy a negar pero no puedo odiarle ni tampoco a ti, te quiero Sasuke, eres como un hijo para Kakashi y yo te veo de la misma manera, aunque claro mi hijo favorito de ustedes dos es Naruto – se rio ante eso – solo fue una mala jugada del destino, se aprovecharon de nuestros sentimientos y todos salimos lastimados, pero debemos seguir adelante con aquellas personas que amamos y que están dispuestas a luchar con nosotros y estar agradecido de no hacerlos solos, ahora te pido que no culpes a Naruto por no seguir peleando por ti, pero es que si tu no pones de tu parte el se va a cansar de haber siempre luchado solo.
- …solo…
- así es, el siempre ha estado luchando por ti y es el que ha sacrificado muchas cosas, en cambio, ¿tu que has luchado por el?
Sasuke de nuevo bajo la mirada, era verdad, el nunca realmente ha movido ni un solo dedo por nadie, simplemente se ha dejado llevar, llevar por el odio que le inculcaron sin detenerse a pensar en nada, después por el amor de estar al lado de Naruto y por ello se caso con el, lo único bueno que hizo realmente, luego por Orochimaru haciendo todo lo que este ordenaba en su mente para arruinarse la vida y la que lo rodean y por último, el miedo, la tristeza, la impotencia, esos tres sentimientos lo estaban haciendo huir de nueva cuenta, en lugar de pensar, en lugar de afrontar solo se deja llevar, no pensar en nada, en ninguna consecuencia.
Sintió como unos brazos lo rodeaban, se vio siendo abrazado por Iruka - ¿Iruka… sensei?
- aun eres un niño asustado que la sociedad en la que vives te ignoro creyendo que por sé un Uchiha ya lo tenias todo y podía vivir solo, pero realmente eras un niño que había perdido el amor y guía de sus padres, sin ningún familiar o persona que viera por ti de alguna manera, a diferencia de Naruto que siempre estuvo solo pero recibiendo mi consejo y el del antiguo Hokage, el decidió su camino por si mismo porque siempre desde que tuvo conciencia vio por sí mismo, mas eso no significa que fuera menos doloroso, el ha sufrido tanto como tú, así que por favor, no hagas que se rinda y comienza a luchar tu también – dejo de abrazarlo y le sonrió – no te odio Sasuke, te quiero y quiero que estés bien junto con Naruto y tus hijos.
Después de eso Iruka se marcho dejando demasiado aturdido a Sasuke, duro una hora divagando en la entrada del barrio, no sabía qué hacer ahora, estaba tan confundido, comenzó entonces a encaminarse a casa, cuando estaba a una cuadra vio que un rubio lo esperaba a unos metros más delante de él, casi frente a su casa, de nueva cuenta bajo la mirada e iba a pasar derecho sin decir nada, pero igual que Iruka el rubio se puso en frente sin darle pasada, Sasuke tembló, sus dos jueces a los que mas temía se habían puesto frente a él, pero al que realmente le tenía pavor era a ese rubio.
- dime que no es verdad lo que me dijo Naruto – el rubio lo veía serio y con el seño levemente fruncido, estaba más que enojado.
- es lo mejor para todos… - susurro rodeando al rubio para seguir su camino – se que creen que no fue mi culpa pero…
- Oh no te equivoques – dijo Deidara haciendo que el azabache se detuviera ante ello – yo sí creo que fuiste culpable- Sasuke volteo a verlo, todos habían dicho que toda la culpa fue de Orochimaru y ahora Deidara decía que no, que había sido culpa suya – tú fuiste el que decidió irse con Orochimaru, tú fuiste el que decidió abandonar a Naruto y a las personas que te quería por poder y venganza, pero dime ¿de qué te sirvió todo eso cuando te enteraste que tu hermano era inocente?
Era verdad, la decisión de irse con esa serpiente había sido suya, las consecuencias las ha pagado día a día, entonces porque no dejarlo ir – entonces si es mi culpa, ¿Por qué no irme?
- porque no fue solo tu culpa, además no solo tu saliste afectado, sino todos, y cada uno está sufriendo las consecuencias, pero ninguno más que tu está siendo cobarde, todos luchan juntos, en pareja, pero al irte dejas de nuevo solo a Naruto, sin alguien que pueda sostenerlo a él, después de todo el siempre estuvo para ti y ahora te quieres ir, en lugar de luchar junto con él, deja tu, ni siquiera es eso, ya solo es ser felices juntos, pero tienes miedo, ere un cobarde y por lo que te odio es por ello y no por lo sucedido – camino hacia el e hizo que lo mirara levantando su rostro por el mentón – cometiste un error, reparalo mas no le saques la vuelta, porque tu mejor que nadie sabe que Naruto no vivirá, aunque tenga sus hijos nunca será el mismo y todo lo que ha luchado para ser feliz será en vano, le debes más que tu vida a Naruto, por lo menos piensa las cosas, ¿realmente el irte es un bien para todos?
Sasuke no dijo nada, no sabía que decirle, porque las palabras de Iruka y de el eran muy ciertas, solo era miedo y mucha frustración, no sabía cómo afrontar todas esas cosas, pero en huir era algo que no le daría la solución, lo sabía, siempre lo supo, inclusive antes de decírselo a Naruto, pero lamentablemente en lugar de hablarlo como toda su vida simplemente tomo la decisión más fácil.
- piensa antes de cruzar esa puerta y seguir destruyendo a Naruto y a ti mismo, piensa que es lo que quieres, como ha sido tu vida, si realmente irte es la solución de una vez te digo que volver ya no sería una opción porque tus hijos no son un juego, no merecen el tira y afloja al que has sometido también a Naruto, así que por favor piénsalo – dijo comenzando a irse para su casa – solo una cosa, tampoco le sigas cerrando las puertas a tu hermano, el te ama y ha sacrificado muchas cosas por ti para que seas feliz, además tu y el no tuvieron sexo, el no perdió el control hasta tal caso, así que no tienes que preocuparte por ello.
Después de que Deidara se fuera camino de nuevo hacia su casa, al estar frente a la puerta no pudo tocar ni entrar con su llave, simplemente dio media vuelta y se sentó en las escaleras que había en la entrada, Naruto por otro lado estaba sentado en el comedor, esperando la llegada del que al parecer seria su ex esposo, estaba tan cansado de que todo sus esfuerzos siempre fueran inútiles, Sasuke de nuevo lo hacía sentir un inútil y poca cosa.
Las horas pasaron y Naruto creyó que Sasuke simplemente no se había aparecido ni siquiera para despedirse o tomar algo de ropa, se fue a la habitación de los niños y se quedo dormido mientras lloraba, a la mañana siguiente, sus ojos estaban hinchados, le dio de comer a los niño e iba a ir con Iruka a ver si le podía ayudar a cuidar a los niños en lo que preguntaba si alguien había visto a Sasuke marchar, para ya caer en su realidad, hizo un clon dejándolo al cuidado de los niños, después de eso se dirigió a la salida, al abrir la puerta sus ojos se abrieron lo mas que pudieron.
- Sasuke…
El azabache no se había marchado, se encontraba sentado aun en las escalerillas, sus ojos también estaban hinchados mirando a la nada, al parecer también había estado llorando, al escuchar la voz de su rubio miro hacia él y le sonrió tristemente – Naruto…
- ¿Cuánto tiempo tienes aquí ttebayo? – pregunto caminando hacia él, pero el azabache no respondió esa pregunta, simplemente se quedaron callados por un momento.
- Naruto… has luchado mucho tiempo verdad, contra los malos sentimientos, contra la soledad, ¿verdad? – El rubio lo miro sin comprender – siempre has sido muy fuerte y yo… yo solo he sido una molestia para ti ¿no?
- por supuesto que no Sasuke, yo te amo…
- sí pero yo realmente nunca he caminado junto a ti, en cambio tu siempre atrás de mi empujándome y poco a poco te has estado quedando sin fuerzas – el rubio se sentó a un lado de el, con un gran nudo en la garganta – perdóname, perdóname por no haber visto todo eso, pero podrías hacer algo por mí, lo último que te pido…
- ¿… q…que…es? – Naruto ya no aguantaba las lágrimas, el miedo a perder a Sasuke era grande y sus palabras lo estaban haciendo rendirse por fin completamente.
- no te rindas, yo estaré contigo, pero no te rindas y sigue dándome fuerza porque esta vez yo pondré de mi parte, enséñame lo que nunca quise ver, por favor, nunca te vas a arrepentir, te lo suplico, dame la oportunidad de caminar a tu lado – Sasuke se cubrió el rostro con sus manos ya que las pequeñas lagrimas que salían se convirtió en un gran llanto – por favor… por favor…
- Shhh… Sasuke… tranquilo – Naruto lo abrazo, los dos se quedaron fuera de la casa hasta que el azabache se había calmado y entraron a casa.
Pasaron unas cuantas semanas y las cosas se veían tranquilas por lo menos con Sasuke y Naruto, pero el azabache no salía de su casa, aun no podía ver a su hermano y mucho menos a Kakashi, al saber que no había pasado con su hermano nada había sido un gran alivio para él, pero aun así lo había inducido para que le fuera infiel a Deidara, pero en lo que respectaba a Kakashi, con el si había tenido relaciones, con una persona que consideraba su padre, para él era difícil verlo, pero un día Sasuke salió de casa porque Naruto estaba ocupado y necesitaban comprar mandado, se armo de valor y salió solo, había sentido mucha suerte porque en todo el camino no se había topado con ninguno de los demás chicos, pero cuando regresaba, al salir de la tienda se encontró con Kiba, los dos se miraron sorprendidos y por lo que respectaba a Sasuke no sabía qué hacer o donde meterse, pero su sorpresa llego cuando Kiba le sonrió y fue a saludarlo.
- ¡Sasuke! Qué bueno verte, hace mucho que no te veía, estas muy pálido, deberías salir más de casa – le dijo dándole unas pequeñas palmadas en el hombro y sonriéndole de manera sincera.
- Kiba… - la verdad es que no sabía qué hacer y qué decir, no sabía cómo actuar delante de ninguno de los demás, el castaño lo supo con su mirada, una de inseguridad, confusión y angustia, por lo que suspiro y le dio un fuerte abrazo.
- no te encierres amigo, todos te extrañamos y queremos que salgas adelante, lo que paso solo es un mal recuerdo y en parte también fue nuestra culpa por no haber estado cerca de ti cuando te fuiste con esa serpiente, tal vez si hubiéramos dejado nuestras rencillas de lado esto nunca hubiera pasado, pero no hay marcha atrás, así que por favor, sal de ese abismo completamente, Shino, Lee y Neji también están preocupados.
Se separaron y se miraron a los ojos, los dos sonrieron y cada quien se fue para su casa con una promesa de volverse a ver pronto, desde ese día Sasuke agarro el otro cacho de valor para salir más seguido de casa y toparse con los demás, aunque al que no podía ver ni en pintura era a Kabuto por su antigua relación con la serpiente pero por lo menos no pasaba ningún percance cuando les tocaba coincidir ya que el de lentes se había hecho de una relación con Yamato y estaban en platicas de tener un hijo, claro Kabuto ya tenía todo listo y lo iba a hacer aun sin el consentimiento del otro, además estaba seguro que aceptaría.
Sasuke poco a poco fue acercándose de nuevo a Itachi y a Kakashi, con muchas reservas y con miedo de lo que pensaran de él, pero Kakashi en cuanto lo vio en la puerta de su casa no dudo en abrazarlo y decirle que todo estaba bien, que no había rencores y que la vergüenza la dejara de lado ya que en ese caso él se sentía peor porque lo consideraba un hijo, y aunque hoy en día a Sasuke le es un poco difícil convivir se encuentra mejor y sonriendo como nunca lo había hecho.
END FLASH BACK
- bueno, las cosas empezaron a moverse desde entonces, ya nos habíamos quedado en el dolor mucho tiempo – dijo Deidara.
- pero ya dejemos de hablar cosas tristes, mejor dinos que paso con los demás, ¿van a venir? – pregunto Iruka.
- invite a Kiba y a Shino pero es su aniversario de que volvieron a estar juntos y querían festejarlo en privado pues le dejaron el niño a Neji y a Lee que tampoco vendrán porque Lee está un poco delicado porque recién tuvo un hijo, a por cierto, Kiba también esta embarazado de un tres meses hoy le da la noticia a Shino – comento Naruto.
- ¿de verdad?
- sí, desde que Shino ya puede caminar con ayuda del bastón dice que Kiba no le da descanso en la cama – dijo riéndose el rubio menor y sacándole una carcajada a los otros dos – pero bueno, Shika no va a poder venir porque ya saben que tiene seis meses de embarazo y va a tener trillizos, esta enorme y no quiere moverse mucho además de que tiene que cuidar a Kai.
- aun estoy sorprendido de que Kurenai realmente se hubiera ido de la aldea… ¿trillizos? – hablo Iruka.
- si, Shika pensó que realmente se arrepentiría y se quedaría con su hijo pero no fue así… si son trillizos, al parecer Asuma es más poderoso que los Uchiha – dijo riéndose el rubio menor.
- ni que lo digas, tres… ¿tu crees que tenga problemas cuando nazcan? – pregunto Deidara.
- no, Kabuto ya comenzó con el tratamiento de crear chakra con los mismos caracteres de Asuma y proporcionárselos a Shikamaru, lo más seguro es que si sea un día difícil pero saldrá bien cuando nazcan los niños, de todas maneras estaremos al pendiente – dijo Naruto - ¿y Kabuto como va con Yamato? – pegunto mirando al sensei.
- van muy bien, aunque Kabuto es algo pervertido Yamato está contento de estar a su lado y viceversa, se quieren aunque su relación es extraña y con su pequeña Nana todo está de maravilla.
- ¿ellos ya no pueden tener más hijos verdad? – pregunto Deidara.
- no, podrían pasar por lo mismo que yo y Yamato no quiere arriesgarse, suficiente tuvo con ver a su sempai sufriendo por mí como para sufrirlo el mismo.
- eh ya terminaron de platicar – Itachi entro a la cocina – ya tenemos hambre.
- si ya vamos…
La comida paso tranquila entre risas y platicas amenas, al despedirse Naruto y Sasuke acostaron a sus hijos y después de que se durmieran el azabache cargo al rubio hasta la cama con besos suaves comenzó a desvestirlo y acariciar todo el acanelado cuerpo que tanto le gustaba, el también se desvistió y lo preparo con cuidado y entro en él, la habitación se lleno de gemidos y palabras de amor, al terminar los dos se abrazaron, Naruto acomodado en el pecho de Sasuke y este con sus brazos alrededor de la cadera del rubio.
- gracias Naruto…
- ¿Por qué?
- por no rendirte y darme otra oportunidad más.
- te amo Sasuke, los dos sufrimos y era lo que necesitábamos para dejar de hacerlo, pero realmente soy yo quien debería darte las gracias a ti, gracias por estar a mi lado y hacer que no me rindiera y por la maravillosa familia que tenemos.
- no es seria gracias a ti dobe.
- no a ti teme…
- dobe…
- teme…
- QUE A TI DOBE.
- NO TEME.
!END!