Es la hora del almuerzo, varios días han pasado desde el incidente en la clase de técnica y practica, Grell es el tema de conversación en toda la escuela, los maestros admiran su fuerza, aunque es deplorable su actitud, el niño se cree cada día superior a los demás no recibe castigo, la solución, hacerse su amigo, ahora Grell se rodea por mucho chicos en sus descansos, el sabe que son unos oportunistas, ninguno lo aprecia de verdad, solo buscan favores, con el director. Pero es mejor que estar solo. Desde ese día William no se vuelve a topar con su compañero escarlata aunque sigue escuchando de el.
Las peleas no se hacen esperar, no faltan los "amigos" que provocan la ira del pelirrojo, las burlas por su origen, más ciertos rumores que han surgido sobre la orientación sexual del chico consentido. Grell es cada día peor, prácticamente ingobernable, tres años han pasado, se acerca la graduación, solo los mejores alumnos se convertirán en shinigamis de élite, nadie cree que el pelirrojo logre graduarse, el chico solo se concentra en si mismo, es un sádico, abusa de sus compañeros y sus calificaciones son pésimas, aunque es un muchacho muy inteligente, en lo único en que sobresale es en la lucha cuerpo a cuerpo.
-Grell Sutcliff, nadie quiere hacer equipo contigo, debes comportarte, ¿como pretendes graduarte?.- Brendan suspira con fastidio, realmente Grell se esta vengando de la tormentosa infancia que le dio, más de una demanda se ha levantado en contra del pelirrojo, ningún chico desea practicar con el, bajo ninguna circunstancia, Grell ha sido sorprendido en varias ocasiones intimando con shinigamis graduados en las oficinas.
-Ninguno de esos mediocres esta a mi nivel, no pienso rebajarme a trabajar con la escoria.- se mofa el pelirrojo, según su educación, el esta en lo correcto, no ha cometido ninguna infracción, excepto el coquetear, ha salido con varias aspirantes a secretaria, pero no puede evitar sentirse atraído por los hombres guapos que laboran en las oficinas del despacho, no es su culpa que su padre trabaje rodeado de tantos caballeros galantes, Grell suele visitar a su padre Alexander sus días de descanso pero ahora su interés es otro.
Grell sabe que que sus pensamientos son impuros, su tío se lo dijo mil veces, pero el no puede evitarlo, le gustan los hombres, también las mujeres, pero es difícil encontrar chicas lindas en un reino de varones, no saldría con mujeres comunes y corrientes con las que al salir el mas lindo es el. El quería una mujer radiante, perfecta, tampoco es que el chico se interesara en cualquiera, no, sus hombres debían ser guapos, estoicos, pulcro, superiores a el, perfectos.
Un hombre en especial llama su atención, y lo vera hoy después del almuerzo, oh el profesor Spencer, como amaba a ese hombre, esos ojos maravillosos y enigmáticos. Grell disfruta mucho la clase de este maestro de melena larga y plateada, el imparte la materia de anatomía humana. La clase ha terminado y es hora de cambiar de salón, Grell esta muy perdido en sus fantasías sobre aquel hombre y al salir por la puerta choca con... ese antipático alumno, William se disculpa, hace una reverencia y entra a su salón Will también disfruta de esta materia, se siente cómodo con el que fue en su tiempo su tutor, Spears hace una reverencia para el veterano shinigami y toma siento frente a el.
Grell bufa con fastidio, de verdad odia que la gente actué como si el no existiera, caminando sin fijarse por donde va y estorbando en su camino, pero el pelirrojo sonrió ante el pensamiento de que en pocos mese seria un shinigami de élite y no tendría que volver a estos perdedores, en especial ese moreno antipático, con el que siempre coincidía para chocar.
Ahora Grell tenia un problema, debía realizar su examen en equipo, pero nadie quería todos le temían eso hacia sentir bien a Grell, pero de verdad quería graduarse, obtener sus importantes gafas de manos de "padre" Lawrence Anderson y salir a matar gente.
Brendan ya no sabe que hacer con Grell, pero debe ser paciente su sobrino sera recordado y reconocido como el "hijo" de Brendan Sutcliff. El hombre no podía evitar ser egoísta, muchas veces considero matar a su hermano y quedarse con el bebé Grell, pero sabia que el no tendría la paciencia de criar y amar a un niño pequeño.
Ahora Grell era casi un adulto, su viva imagen de mal comportamiento, era hora de cosechar su siembra, para su mala suerte, convirtió a esta dócil paloma en un cuervo que le sacaría los ojos al más mínimo descuido.
El director comenzó a revisar los expedientes de todos los alumnos en busca de un compañero apto para su sobrino. El viejo inspecciono meticulosamente cada archivo, su rostro se ilumino, encontró el ideal, "William Spears", alumno promedio, buenas calificaciones, rango "B", no hay rastro de que ellos hallan interactuado antes, Brendan duda de que siquiera conozcan la existencia uno del otro. Esto no le gustara a Grell, pero es el ultimo alumno que queda que aun no ha caído en las garras del pelirrojo sádico y engreído.
La puerta de la oficina de asignación de compañeros para el examen final es cerrada bruscamente, un fúrico pelirrojo sale de la habitación, Grell esta acostumbrado a que en la vida su palabra y voluntad son ley, no piensa rebajarse a trabajar con un mediocre "B", cree que puede reclamarle a su tío, entra a la oficina del director derribando a la secretaria, los papeles salen volando, el chico se encierra con su tío y comienza a despotricar, un golpe seco contra su mejilla lo hace callar, de verdad odia que golpeen su rostro. trata de calmar su respiración, pero su ira crece más al ver que su tío tiene una sonrisa en su rostro.
-Te odio.- grita el muchacho y se marcha a su habitación, su compañero pagara las consecuencias.