Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

C r u x e por ritsuka10

[Reviews - 156]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Vanessa

http://www.naportals.com/wp-content/uploads/2014/02/vanessa-hudgens-hair-arse-1770371495.jpg

Nicole

http://www.allkpop.com/upload/2013/10/af_org/KARA-Jiyoung-Nicole_1381070508_af_org.jpg

Shailene

http://www.hawtcelebs.com/wp-content/uploads/2014/06/shailene-woodley-in-women-s-health-magazine_4.jpg

Dakota blue

http://images4.fanpop.com/image/photos/21200000/Dakota-Blue-Richards-USC-Magazine-skins-21205484-986-1127.jpg

Ella (Bang)

http://assets5.capitalfm.com/2013/49/rudimental-and-ella-eyre-jingle-bell-ball-2013-live2-1386538206-view-0.jpg

Chloe 

http://www.chlomo.org/gallery/photoshoots/chloe_moretz_nino_munoz_photoshoot/chloe_moretz_by_nino_munoz_cosmopolitan_russia_nov_2013.jpg

Elle  (Jun)

http://www.flicksandbits.com/wp-content/uploads/2013/02/elle-fanning-2013.jpg

 

JongUp no podía apartar su mirada del segundo líder de Genbu las preguntas se aglomeraban en su cabeza, no lo dejaban estar en paz ¿Por qué su veneno no había surtido efecto en su cuerpo? ¿Por qué cuando lo beso no cayo rendido? Observo fijamente la herida que le provoco en la mano derecha había dejado de sangrar minutos después de hacerla, solo un pañuelo blanco cubría ese pequeño pedazo de piel blanca mordió su labio inferior con duda, desde que era niño vivió con el miedo de lastimar a las personas que lo rodeaban trágicamente era llamado como el niño tóxico, el pequeño que mato a su propia madre, se recargo en la pared cruzando sus brazos, se giro por un instante para mirar a su compañero, su hermano, sino fuera por el padre de DaeHyun tal vez muchos años antes hubiese muerto de hambre o asesinado por algún demente, JongUp tenía 20 años de edad de esos había compartido la mitad con la Familia Jung aquella que lo acogió cuando su progenitora pereció por un accidente causado por él cerró los ojos cansado de pensar en lo mismo una y otra vez, por una vez en su vida anhelaba ser libre de su maldición froto sus manos con desesperación.

—Sé que todos aquellos que me besan quedan en shock pero vuelve a la realidad y aporta algo a la reunión pequeño Moontos si deseas más solo debes pedírmelo. —Una varonil voz llego a los oídos del peli morado quien abrió los ojos de golpe topándose con un brazos por encima de su cabeza y lo arrinconaban en la pared, Him saco la lengua para lamer sus labios. —Sabes a chocolate. —Dijo pegando su cuerpo, su lengua trataba de introducirse en los apretados labios del menor quien no podía salir de su sorpresa. —Deliciosamente empalagosos ¿Así sabes? Quiero chupártelo como si fuera una paleta y comprobar si también eres tan dulce por dentro.

—Apártate de JongUp prometieron no meterse con nosotros. —Grito DaeHyun cruzando la habitación para lanzar al mayor por el aire, su fuerza era impresionante, el líder de Genbu fue a dar al muro contrario haciendo una gran abolladura. —Guk dile a tu compañero que deje de acosar a mi hermano.

—Prometimos respetar sus ideales pero yo no puedo controlar lo que Hime haga, él es independiente, él no es mi mascota y no soy su dueño. —Contesto el mayor quien estaba sentado en una de las sillas mientras tenía los pies encima de la mesa. —Up no es un niño para que lo defiendas, él es fuerte así que en cualquier momento puedo deshacerse de Hime, él tiene la capacidad de pelear su don es maravilloso, lo envidio.

El mencionado trago en seco era la primera persona que le decía que su habilidad de envenenar con su sangre o fluidos a otras personas era una don maravilloso, un regalo del destino, de un manotazo se deshizo del agarre de su hermano, era verdad él tenía la capacidad de defenderse de sus enemigos no era un bebe, de un rápido movimiento salto hasta donde estaba HimChan y le dio un golpe con el puño cerrado en el rostro provocándole un sagrado nasal.

—Tengo otras formas de matarte así que deja de molestarme. —Le grito tomándolo del cuello tirándolo al piso, se agacho para mirarlo a los ojos. —No te confíes nada más porque tiene un cuerpo indestructible puede haber un límite para tus recuperaciones y créeme que voy a descubrir tu secreto, soy una persona paciente.

Up desato el pañuelo que estaba alrededor de la mano derecha del líder dejando ver que ya no existía herida alguna, su piel blanca como la porcelana salía a relucir, una sonrisa se formo en los labios del mayor era la primera vez que alguien le prometía matarlo con tanta seguridad solo por un instante sintió miedo, por un segundo esos ojos lo aterrorizaron, era fascinante tener pavor de alguien era inquietante anhelar que ese niño cumpliera su promesa, lo deseaba, todas sus anteriores frases solo eran bromas Kim HimChan nunca había coqueteado con un hombre no tenía interés en ellos solo molestaba al menor en juego, para no aburrirse en las reuniones, en ese segundo sus deseos se volvieron tangibles quería poseerlo más que nadie en el mundo.

—Ya me cansé de sus juegos de machos así que creo es momento de irnos. —Interrumpió JunHong extendiendo su mano para que el peli morado se pusiera de pie. —Antes de irme quiero que me muestres las patinetas que tienen en la tienda.

El segundo menor asintió, tomó la mano del joven no sin antes darle una patada al pelinegro que estaba en el piso, extrañamente los dos pequeños habían hecho muy buena química ambos les gustaban las mismas cosas parecía que sus mentalidades eran infantiles, Bang siguió con la mirada a los jóvenes una sonrisa se dibujo en su boca al fijar toda su observación en sus traseros, le agradaban ambos niños, no le desagradaría un trió con ellos, un suspiro escapo de su cuerpo para el gran Bang YongGuk la vida se basaba en excesos de cualquier tipo, disfrutaba la hueca vida que tenía, solo un sentimiento corroía su alma, el deseo de venganza era la única emoción que experimentaba, el sexo su única salida para no volverse loco, un golpe en sus piernas provocaron que sus pies cayeran levanto la mirada topándose con los molestos ojos de YoungJae.

—La reunión se ha terminado los esperamos el próximo viernes en el casino principal de mi zona. —Habló dirigiéndose al resto, su tono de voz era pastoso, amargo. —DaeHyun quiero que me muestres objetos de tu joyería.

De la boca del mencionado salió un bufido pero clientes eran clientes además habían prometido llevar la fiesta en paz, por primera vez el menor se dirigía a él con respeto así que no quiso ser grosero asintió con la cabeza señalándole la salida para llevarlo a conocer el sitio.

—Bueno nosotros nos vamos tenemos mucho trabajo que hacer. —Soltó Bang poniéndose de pie caminando a lado de su compañero quien estaba sacudiendo su ropa. —Hasta luego.

Se despidió de un movimiento de manos ignorando la mirada del líder de Byakko, Jae mordió sus labios dolido, extrañamente unas tremendas ganas de llorar surgieron pero su vanidad era más fuerte así que se negó hacerlo nunca demostraría lo que ese hombre le provocaba, no aceptaría bajar su cabeza ante alguien tan malvado, tan despiadado, continuo su andar a lado del pelinegro quien lo miraba de reojo, los integrantes de Genbu habían desaparecido por la puerta principal, DaeHyun observo como el menor instintivamente se llevaba la mano a un objeto que estaba colgado de su cuello entrecerró sus ojos descubriendo que el pelinegro acariciaba la imagen de un Cristo, era pequeño, abrió los ojos impactado por su hallazgo llegaron a un negocio, que tenía el  tablero que decía Joyería.

—Pensé que no creías en ningún Dios. —Dijo al aire el mayor ordenando a una de sus empleadas sacar algunos accesorios de la Joyería al ver que el menor se giraba para cuestionar con la ceja levantada. —Habló sobre la cruz que cuelga de tu cuello ¿Eres cristiano?

—No, no profeso ninguna religión es un regalo que me dio mi abuelo, era de mi madre. —Contesto sacándolo para que el mayor lo observará. —Ella era muy ferviente nunca la conocí pero me agrada pensar que ella es un ángel como esa religión decía, es tonto nadie antes me cuestiono sobre este objeto.

Era verdad, entre todos sus amantes nadie le cuestiono sobre la cruz que colgaba de su cuello tampoco comprendía porque le había contestado honestamente al mayor tal vez porque su tono de voz fue dulce, amable, sin un rastro de malicia, quizá fuera porque prometieron hacer las paces que respondió de buena manera, una ligera sonrisa se formo en sus labios para después girara su rostro para observar los bellos accesorios que la asistente le mostraba, estaba encantado por esas joyas, adoraba usar objetos ostentosos que reflejaran su estatus social, esos que lo diferenciaran del resto, siempre fue un niño rico, creció rodeado de mimos, de lujos, su abuelo el gran líder de Byakko se encargo de cumplir cada uno de sus caprichos, los dos líderes comenzaron a platicar de banalidades relacionadas, DaeHyun estaba fascinado por los gestos que el menor hacia en su cara, parecía un niño pequeño en una juguetería fascinado por los accesorios que lo rodeaban de un momento a otro le recordó a su hermano menor JongUp. Las dos parejas de nuevos “amigos” pasaron una tarde conversando de ropa/artículos los líderes de Byakko tentaban con ser los mejores clientes de Seiryu ya que parecían amar las compras, salieron del edificio con las manos llenas de bolsas.

HimChan observaba la calle que estaba frente a su departamento, el clan Genbu habitaba la zona industrial de la metrópolis era la área más oscura para vivir, los rastros de antiguas fabricas abandonadas le daban un aire tétrico y desolador, la mayoría de los hogares eran condominios ellos tenían el mejor edificio de la zona cada uno de los líderes dormía en un piso, tenían su espacio personal, el pelinegro notó como su compañero subía a su motocicleta y desaparecía en la oscura noche aunque llevará más de 13 años viviendo con el mayor jamás sabía lo que pasaba por su cabeza ni conocía sus secretos ¿A dónde escapaba todas las noches? Aún recordaba el día que llegó a ese lugar, Bang ya era jefe de una pandilla, ya tenía fama de ser cruel.

—Cuando le pregunte al antiguo líder por qué me adopto él solo contesto que yo era la única persona que reconocías de tu pasado. —Hablo a la oscuridad pegando su frente a la ventana. —Yo no te recuerdo, no creo que nos conociéramos antes desde que tengo memoria recuerdo solo aquel espantoso orfanatorio, no te imaginas lo agradecido que estoy contigo Guk, te amo como el hermano que nunca tuve, eres mi única familia y sueño con el día que me veas de la misma manera, ruego que tu alma encuentre la paz que tanto buscas.

La gran metrópolis Zero estaba situada a mitad de un desierto en lo que antes era la zona del ecuador en el viejo continente Americano, a causa del calentamiento global muchos países quedaron sumergidos en el agua debido a que los polos se derritieron, lo que antes era conocido como Asia oriental era una zona plagada por la radiactividad la tercera gran guerra fue donde los humanos descubrieron que ellos no gobernaban en la tierra porque los gobiernos que llevaron esas matanzas solo se les podía calificar como demonios, miles de niños perecieron en las batallas químicas, millones de vidas perecieron, África sucumbió ante las enfermedades  sus pobladores no conmovieron el corazón de las grandes potencias quienes no se tomaron el tiempo de ayudar a sus hermanos, solo les importaba sus propios conciudadanos, muerte, hambre, ese fue el destino de casi el 70 % de la humanidad los que lograron sobrevivir crearon metrópolis y muy pocos se animaban a salir de ellas, temiendo que afuera la muerte los esperara, Zero estaba cubierta de enormes muros la zona era bastante amplia donde miles de personas habían nacido y crecido, el gobierno no era tan corrupto aunque si preferencial ya que para ellos los más importantes eran los nobles, aquellos que residían en las torres blancas del corazón de la ciudad, de cierta manera era un privilegio vivir sin miedo a guerras. YoungJae abrió los ojos fascinado por el evento que se celebraría en su casino, el festival de Sakuras era una excusa perfecta para abrir sus puertas a gente de todo tipo para que disfrutara de los beneficios de sus negocio, shows espectaculares, los artistas de primer nivel cantando en los clubs nocturnos, los burdeles ofrecían ofertas increíbles, shows sexuales especiales para los más adinerados, la perversión envuelta en glamur, la alegría del pelinegro radicaba en su venganza personal, le agradaba DaeHyun y JongUp pero no les perdonaría por la broma hecha en su visita.

—Wow te vez espectacular hyung se nota que quieres impresionar a los invitados. —Dijo un castaño sentándose sobre la cama y admirando a su compañero quien terminaba de arreglarse. —Quiero vengarme de Bang y no te vayas a meter.

—Ten cuidado JunHongie es peligroso y honestamente desconocemos su poder ahora sé que HimChan tiene un cuerpo invencible y DaeHyun tiene súper fuerza pero Guk es quien me preocupa. —Contesto el mayor sentándose a lado de su hermanito menor mientras acariciaba su cabello. —No voy a interferir pero si algo malo pasa debes hablarme no quiero que te haga daño, él no es una buena persona.

El menor asintió al consejo de su hermano mayor, Jun respetaba y admiraba a su compañero aunque solo tuvieran 8 años de conocerse lo trataba como su familia, para él el clan Baykko era su hogar, el sitio donde lo aceptaron como era, su madre murió cuando era muy pequeño aunque la familia Fanning cuido de él nunca se sintió cómodo, él era distinto, diferente a los demás sobrevivientes, era un evolucionado, un humano con el don de controlar el clima a su alrededor recordaba las muchas veces que hizo que lloviera para Elle no fuera al colegio, esa niña era la razón por la que había decido aceptar la propuesta del líder Yoo, era la oportunidad perfecta de tener dinero y darle la vida que merecía a su primer amor, era doloroso no poder verla tan seguido como deseaba pero era feliz sabiendo que la joven no sufría de carencias, se sumergió en sus recuerdos, a su mente llegaba la imagen de esa rubia sonriéndole, llamándole por su nombre.

—Deja de soñar despierto y ve alistarte si vas hacer enojar a Bang espero sea algo que humille su ego de macho. —Habló Jae sonriendo de manera divertida. —Quiero verlo enfurecerse hasta perder la cordura, pero ten cuidado pequeño.

—No te preocupes hyung déjamelo a mí. —Contesto el castaño saltando de la cama y poniéndose de pie. —En unos segundos nos vemos en la entrada del casino principal.

La zona liderada por el clan Bakkyo era un área atestada de casas de apuestas, burdeles, bares para cualquier clase de gente, estaban los más básicos hasta edificios enormes y elegantes esa noche el principal casino “Matoki” abría sus puertas a cualquier sobreviviente que tuviera para pagar una copa, las calles estaban repletas de personas ansiosas de cumplir sus más perversas fantasías, frente al edificio escenarios luminosos llamaban a la clientela, chicas con diminutos atuendos seducían a los transeúntes, hombres con abdómenes bien formados enamoraban a las mujeres que se animaban adentrarse, dos elegantes autos se abrían paso entre la multitud las personas giraban sus rostros sorprendidos ya que cada vehículo llevaba el logo de su clan, Genbu y Seiryo, los cuatro líderes descendieron cruzaron un saludo con la mirada, usaban trajes negros elegantes con algunas secciones doradas cuando miraron a la entrada dos jóvenes salieron acompañados por bellas mujeres que usaban pequeños trajes militares dejando ver su ropa interior roja, una sonrisa se dibujo en los labios de HimChan y YongGuk, esa ambiente de perdición era de sus favoritos.

—Bienvenidos a Matoki Castle, esta ocasión nuestra temática para el festival de Sakuras será “mOBSCENE” una noche donde los llevaremos a experimentar la decadencia humana a su límite, señoritas por favor acompañen a nuestros invitados de honor. —Varias jovencitas se colgaron de los brazos de los cuatros líderes, Up sonreía tímidamente mientras DaeHyun trataba de no parecer novato, los dos mayores eran unos maestros, HimChan ya besaba el cuello de una pelirroja. —Estarán de acuerdo que pospongamos nuestra reunión hasta el lunes, el festival dura todo un fin de semana.

—Por primera vez dices algo inteligente. —Le contesto Bang deshaciéndose del agarre de las chicas debido a que una morena salía de la puerta principal, llevaba vestido/camisa negra que le llegaba hasta los muslos. —Hyorin siempre es un placer volver a verte.

—Lo mismo digo Bang—sama. —Contesto la joven tomándolo por el brazo llevándolo al interior del edificio. —Esta noche tengo la obligación de complacer todas sus fantasías espero no se moleste que haya invitado a una amiga, su nombre es Ella Eyre.

La joven señalo a una chica de piel canela que llevaba un conjunto blanco semi transparente sus rizos rebeldes escondían su bella cara, solo sus labios rojos sobresalían, Bang abrió su otro brazo para que la chica se abrazará a él, sin pensarlo la beso, HimChan también recibía a unas viejas amigas Nicole y Vanessa quienes quitaron a las jóvenes que abrazaban a su presa juntas le dieron un beso en los labios al pelinegro quien no dejaba de alabar la belleza de ambas.

—Para que veas que soy una persona que no guarda rencores quiero presentarte a Dakota Blue, ella es nueva en nuestras filas pero créeme que ha sido muy buena alumna. —YoungJae le dijo a DaeHyun dejándole ver una jovencita vestida discretamente a diferencia del resto, llevaba unos pantalones negros pegados y una blusa blanca con toques rojos en el cuello, dejaba ver su blanca piel, su cabello era corto y poseía una cara de muñeca de porcelana. —Dakota por favor quiero que seas dulce con nuestro invitado.

La jovencita sonrío apenada provocando que el líder de Seiryu se conmoviera por ese acto, él no era un promiscuo como sus compañeros, a él le agradaba más conversar con alguna joven de manera más saludable cuando estuvo a punto de entrar Jae lo detuvo una nueva joven salía, su mirada era más provocativa, su cabello corto le daba un toque de rebeldía, solo usaba un traje de baño dejando ver su monumental figura.

—Mi nombre es Shailene tengo que verificar que Dakota haga su trabajo correctamente. —Habló la chica mordiendo el labio inferior del pelinegro quien estaba sorprendido por tal atrevimiento, un beso en la mejilla de la pelirroja novata lo despertó. —DaeHyun-sama esta noche trataremos de relajarlo.

Ambas señoritas asintieron, JongUp observaba la escena tenía miedo de tocar a las personas que lo rodeaban quiso zafarse pero su nuevo amigo JunHong lo detuvo, dos nuevas jóvenes lo acompañaban.

—Ellas son Chloe Moretz y Hyosung te acompañaran a disfrutar del lugar. —Le dijo dándole las manos de las chicas que le sonreían juguetonamente, Jun se acerco a su oído. —No te preocupes ellas son evolucionadas como nosotros, no creo que les vaya hacer daño tus besos, Chloe es muy fuerte además ya las pusimos sobre aviso y aceptaron el juego solo hay que tener el antídoto a la mano.

Up quiso oponerse pero la chica de cabello castaño lo detuvo besándolo, se colgó a su cuello para después morder su oreja.

—No te preocupes JongUp-sama soy inmune a algunos venenos. —Comentó arrastrando al chico de lentes al interior de la fiesta. —Hyosung-nuna le gusta probar cosas nuevas.

Los dos anfitriones se quedaron en la puerta al ver que sus invitados se adentraban al casino el cual había sido convertido en un club nocturno, la música resonaba por cada rincón, el olor a cigarro y alcohol se impregnaba en la piel de los asistentes, el mayor tomó por la cadera a una rubia, beso su mejilla.

—Supervisa a las niñas. —Le comentó al oído mientras le daba un pequeño golpe en el trasero. —Jennette si haces bien tu trabajo esta noche tendrás la fortuna de dormir conmigo.

—Claro Jae-sama esta noche no dejaré que nadie me separé de usted. —Contesto la rubia lamiendo la comisura de los labios del líder.

En el interior cada uno de los líderes estaba sentado en una sección VIP, en el escenario nueve jovencitas bailaban al ritmo del dj, las chicas usaban uniformes blancos atrás las letras GG brillaban en todo su resplandor los hombres no dejaban de vitorear sus nombres, en la pista de baile parejas se entregaban a movimientos que muchas personas calificarían como obscenos, mujeres besando a otras jóvenes, hombres con hombres, la diversidad sexual estaba en su máximo esplendor, en algunos montículos jóvenes bellos bailaban ante la mirada lasciva de nobles y urbanos, HimChan tenía su mirada fija en el líder de Seiryo ya que lamentablemente una de sus chicas había llegado a su límite, el veneno de su cuerpo había sido demasiado, el menor parecía no querer tocar a la castaña quien lo invitaba a moverse con más sensualidad, el pelinegro se puso de pie llevándose con él a la morena que estaba sentada a su lado debido a que Nicole había ido por unas bebidas.

—Quiero que bailes con Chloe pero no toques al chico que está a su lado es peligroso para ti. —Le susurro al oído pasando sus manos por su cintura y besando su cuello. —Provócala como si fuera yo.

JongUp levanto la mirada cuando notó que una pelinegra comenzaba acariciar a su pareja quiso hablar pero unos brazos en su cadera lo detuvieron, HimChan le quitaba lentamente por la espalda el saco, sus blancas manos lo paralizaron.

—No tengas miedo, Chloe es como yo. —Le dijo al oído mientras lamia su oreja. —Míralas.

El menor que tenía nada de experiencia en relaciones físicas se sorprendió al ver como las chicas se tocaban sin ningún rasgo de vergüenza un inmenso calor nació de su interior extendiéndose a cada célula de su piel, se deshizo de su saco mientras que Him continuaba desabotonando su camisa negra, el mayor les ordenaba a las dos jóvenes que debían hacer, las dos seguían obedientemente sin dejar de mirarlos, la respiración del pelinegro golpeo el cuello de Up donde el sudor ya hacia acto de presencia, el chico de cabello color morado solo se quedo con una camiseta negra de mangas cortas, su ropa fue a dar al piso u otros clientes se la ponían.

—Anda olvida tus perjuicios, esta noche deja que el demonio que vive dentro de ti se liberé. —Le susurro el mayor mordiendo su cuello, Up trataba de salir de ese trance pero no podía, vivía hipnotizado por la mirada de Chloe, por la voz de HimChan, sus manos adentrándose por debajo de su camisa, el poco aire frio colándose por su piel expuesta, el alcohol también ayudaba que su locura aumentará, sus instintos se apoderaban de su voluntad. —Mira a tu hermanito él ya se ha entregado al deseo.

El menor giró su rostro hacia su compañero quien seguía sentado en un enorme sofá en el segundo piso pero dos chicas estaban sobre su regazo peleaban por quien lo besaba primero, el pelinegro se miraba fascinado por el efecto que provocaba en el sector femenino, acariciaba a una y mordía el cuello de otra.

—Esto te ayudará. —Comento el mayor tomando por la barbilla al joven, lo beso, Up abrió los ojos al notar que el pelinegro le pasaba algo con su lengua, era una pastilla su sabor era idéntico a las cerezas pero desde el instante que se adentro a su garganta en su interior una revolución dio inicio. —Olvida tus reglas tontas, esta noche tienes permitido perderte.

Lo tomo de los brazos para continuar besándolo pero con una mano jaló a la castaña para colocarla en medio de ambos hombres, la chica se colgó del cuello del menor quien ya tenía la mirada perdida en sus ojos, Him abrazó a la chica por la espalda mientras le daba indicaciones al oído, JongUp no comprendía lo que pasaba a su alrededor la euforia se adentraba en su cabeza llevándolo a perderse en el éxtasis que esa pastilla había causado en su cuerpo, su vista se volvió borrosa pero su sentido del tacto se despertó al máximo, unas manos se colaban por su cuello enfoco la vista y se perdió en los ojos del líder de Genbu, lo incitaban a perderse en su debilidad carnal, lograba sentir los labios de la jovencita en su cuello, observo como otra chica se unía a la espalda del pelinegro instintivamente estiro su manos para prohibirle que se alejara, Him lamio sus dedos para despedirse con una sonrisa, Chloe se apoderó de la boca negra del menor sus miradas se cruzaron, el hambre hizo acto de presencia HimChan se vio rodeado por sus dos niños a quienes beso pero de vez en cuando le regalaba una mirada lasciva al menor quien contestaba con la misma firmeza.

DaeHyun trató de levantarse pero el alcohol en su sistema lo había golpeado a tal grado de tenerlo arrinconado en el sillón, estiro su brazo notando que la chica llamada Dakota había desaparecido, solo la joven de cabello castaño estaba sentada en su regazo besando su cuello, la tomo por el rostro para delinear facciones, sus ojos era hermosos, acaricio sus labios, devolviendo los besos  aunque los líderes de Seiryo habían estado con algunas chicas antes no se comparaban con las jóvenes que ahora tocaban, su belleza y personalidades erad muy distintas, seductoras.

—Ceo que es momento que DaeHyun tenga una reunión privada con Dakota. —Interrumpió una rubia separando a la pareja, ninguno de los parecía contento por la intromisión.—Puedes continuar con otro cliente.

—La quiero a ella.—Soltó el peliengro impidiendo que la castaña bajará de su regazo.— No estoy interesado en alguien más,

La joven mordió su labio inferior a lo lejos observo como su jefe la miraba y le hacia una seña de continuar con el plan.

—Será solo un tiempo, a Shailene después la enviaremos a su habitación para que pase la noche contigo.—Dijo sensualmente la rubia  tratando de separar a la pareja.—¿verdad Sha?

—DaeHyun-sama iré a su habitación y prometo preparar lo mejor para usted.—Contesto coquetamente la mujer dándole un leve beso en la mejilla.— No te preocupes no dejaré que nadie me toque hasta volverte a ver.

El líder asintió a su propuesta realmente le había agrado esa chica le ayudo a bajarse de sus piernas y se puso de pie caminando hacia la dirección indicada por la rubia mientras se adentraba por el mar de gente notó como en el escenario un hombre cantaba, su look extravagante podía asustar a cualquiera pero los asistentes coreaban los versos de la canción, las chicas de traje hacían poses obscenas incitando al público a la locura antes de entrar a un pasillo echó un vistazo al líder de Genbu quien tenía los rostros de dos jóvenes en sus piernas mientras besaba a una tercera, ahora comprendía que estaba en el infierno donde las personas no tenían miedo a pecar, esa noche la moralidad y buenas costumbres se esfumaron como una aguja en un pajar, solo hay una vida la cual hay que disfrutarla al máximo parecía que los sobrevivientes trataban de presionar ese ideal al máximo, DaeHyun siguió a la rubia que no dejaba de contonear las caderas, el pasillo tenía tapiz rojo varias puertas estaban en los costados sabía que cada una de ellas llevaba a un habitación donde tal vez una pareja estaría llegando al límite, varios gemidos lograban colarse subieron por el elevador para llegar al último piso.

—Solo lo mejor para nuestros invitados especiales. —Comento la rubia abriendo la segunda puerta a lado del elevador, cuando se adentraron a la habitación esta estaba adornada con una tenue luz roja, velos colgaban del techo, un enorme sofá se encontraba en el centro, las velas le daban un toque de romanticismo mientras el olor a rosas envolvió el ambiente en algo más sensual también había algo en el aire, un afrodisiaco aromático. —Dakota por favor encárgate de complacer a DaeHyun-sama.

La mencionada salió de uno de los rincones con un diminutivo conjunto le indico con la mano al pelinegro sentarse en el sofá, Dae siguió sus instrucciones, observo como la rubia salía del cuarto no sin antes lanzarle un beso, la pelirroja se puso a sus espaldas mientras acariciaba sus hombros para quitarle el saco, el mayor no opuso resistencia, la tonada de una nostálgica melodía dio inicio, el aroma y aquella música fue trasladando al líder a otro mundo echó su cabeza en el respaldo del sillón mientras las delicadas manos de su pareja le ponían una mascada en los ojos, nuevamente unos delgados dedos se colaban por su camisa desabrochándole la corbata, unos labios tocaron los suyos pasándole una pastilla aquella sustancia incremento su deseo sexual.

—DaeHyun-sama lo haré tocar la gloria. —Una delicada voz se coló por sus oídos, el hombre abrió las piernas sospechando lo que estaba a punto de pasar. —Usted será mi primer cliente.

Dakota levantó su mirada topándose con los ojos de su jefe quien acaba de entrar a la habitación en total silencio, Jae le indico con la cabeza que caminará hacia él al tenerla cerca le dio un pequeño beso en los labios para después ordenarle que se quedará ahí, el pelinegro se quito la chamarra para después acercarse a su presa con los dientes bajó el cierre de los pantalones del mayor, observo maravillado que el afrodisiaco estaba surtiendo efecto, con sus manos tomo aquella extensión y como si de una paleta se tratará comenzó a lamer, un gemido escapo de los labios de DaeHyun anteriormente ya lo habían complacido pero no esa forma, aquella juguetona lengua no dejaba de tocar pequeños puntos que lo estaban llevando al orgasmo, la notas musicales se colaban por su oído taladrando como si una mantra de sensualidad se tratará, llevo sus manos a su cabello al sentir como una boca devoraba su virilidad, esa cueva humedad era tan adictiva levanto más las caderas para llegar al fondo, mordió su labio inferior cuando unas pequeñas mordidas lo tentaron pero de pronto su placer se vio detenido.

—¿Por qué te detienes? —Cuestiono moviendo su cabeza, sus manos soltaron su cabello para vagar de manera tonta por el aire en busca de su compañera. —Continua.

—Debes decirme si te gusto DaeHyun-sama. —La chica dijo mirando la cara de su jefe quien también movía los labios indicándole que decir. —Por favor gime por más Oppa.

El tono de la chica era una combinación entre inocencia y perversión el pelinegro no lograba distinguir el ambiente que lo rodeaba ya que su olfato estaba estropeado por el olor a flores, su oído por la melodiosa música, su gusto perdido por aquel afrodisiaco, cada célula de su piel estaba emborrachada de deseo, de lujuria, acaricio aquel cabello corto, esas suaves facciones, sin ver su rostro estaba seguro que era perfecto trato de bajar sus manos por su pecho pero su pareja se alejo, necesitaba sus labios en su entrepierna.

—Continua has que me venga en tu pequeña boca. —Habló el mayor con el tono de súplica más lascivo jamás antes existido Jae tuvo que contener la risa, esa escena ante sus ojos era hermosa el líder del Este tenía las mejillas sonrojadas, sus labios gruesos entre abiertos. —Por favor continúa, sigue hermosa, eres la mejor.

Esas palabras elevaron la vanidad del  líder de Oeste a los cielos nuevamente se volvió arrodillar para continuar su labor esta vez no fue tierno si no todo lo contrario fue salvaje, succiono esa parte hasta quedarse sin aire, lamio sin piedad, sus manos acariciaron cada parte de la piel expuesta, DaeHyun araño el tapiz del sofá clavo sus uñas, rasgo la fina tela ante el éxtasis en el que estaba sumergiendo, los gemidos salían de su boca, la fricción de los labios de Jae eran la sección más deliciosa nunca antes sentida, el mayor termino viniéndose en aquella húmeda boca quien trataba de absorber ese blanco liquido, Jae se puso de pie limpiando sus comisuras le dio la vuelta al sofá para ponerse a la espalda del mayor donde lo tomo del cuello para besarlo, compartió de su propia esencia, su beso fue hambriento, necesitado, buscaban devorarse hasta quedarse sin aire.

—Te dije que no había mucha diferencia entre un hombre y una mujer. —La voz del líder de Byakko se filtro por los oídos del mayor provocándole un gran shock. —DaeHyuniee eres delicioso.

Jae soltó la mascada para que sus ojos se cruzaran con los del mayor, el corazón de Dae se paralizo al verse reflejado en aquellas orbes cafés solo por un segundo su excitación volvió a despertar, esa había sido la peor de las trampas que alguien le pudo haber tendido, terminar en la boca de un hombre haber sentido placer por un hombre era la de las ofensas más grandes que podía hacerle a su rligión giro su rostro hacia una de las esquinas donde la famosa Dakota estaba sentada, una inmensa rabia nació en su pecho fue un engaño perfectamente trazado, esa cara de mosquita muerta lo habían envuelto para llevarlo a la boca del lobo, una mordida en su oreja lo volvió a la realidad.

—Soy el mejor tú lo dijiste. —Le dijo en un susurro el cual evocó una oleada fría que recorrió su columna vertebral nuevamente la lujuria se hacía presente, esa voz, esos labios pegados a su piel lo invitaban a perder la poca cordura que le quedaba. —DaeHyunnie no te vuelvas a meter conmigo.

Bang YongGuk sentía que todo a su alrededor daba vueltas por primera vez había perdido el control en su consumo de alcohol solo recordaba a dos chicas besando su cuello mientras estaba sentado en el sillón, trato de ponerse de pie pero el mareo lo superaba a lo lejos observo como un chico de cabello castaño sonreía mientras hablaba con una joven llevo sus manos a su rostro para ocultarlo, no soportaba el dolor, cerró los ojos, recargo su cabeza en el respaldo, JunHong observaba la escena divertido muy pronto el mayor sabría de su venganza navego en el mar de personas para caminar al otro extremo donde se encontraba el DJ mientras trataba de evitar los toqueteos de hombres perversos una chica sin querer derramo su bebida en su elegante traje el menor se molestó un poco pero no pudo gritar ya que sus clientes lo observaban tuvo que dar media vuelta para ir a un baño para limpiarse, el joven tomo el elevador no iría al sanitario donde todos iban, le parecía algo asqueroso, bajo en el piso de la zona VIP donde ingreso a una de los tocadores se quito el saco pare verificar la mancha, sus labios se unieron formando una línea estaba a segundos de llevar su anhelada venganza, levanto la vista para mirarse en el espejo, le agradaba lo hermoso que estaba esa noche durante el tiempo que se admiraba no se percato que la perilla de la puerta giraba un pelinegro se adentro tomo por los hombros al castaño para arrinconarlo en el muro.

—Te dije que te haría mío, niño tonto estas a años de poder tenderme una trampa. —Una grave voz le dijo al oído, Jun levanto el rostro topándose con la fría mirada de líder Genbu, su semblante era serio. —Creías que no distinguiría las drogas que metiste en mis bebidas, eres el mocoso más estúpido que jamás haya conocido.

Lo tomo por la barbilla obligándolo a juntar sus labios Jun trató de resistirse pero la fuerza del mayor lo superaba a gran escala quiso usar sus poderes pero estaba dentro de una pequeña habitación la cual tenía clima artificial, no sería muy benéfico convocar rayos o lluvia en una lugar cerrado trato de negarse pero sus fuerzas se volvieron nada ante la hambrienta caricia el mayor, una lengua se introdujo en su boca ese sabor amargo a alcohol envuelto con cigarro lo perturbo, solo por un instante le fascino, era una mezcla agria, acida pero tentadora, movió su cabeza de un lado a otro pero esas suaves manos lo tenían aprisionado sin que su cuerpo pidiera permiso contesto a ese beso, su lengua fue una habida guerrera, una perversa sonrisa se dibujo en el rostro del mayor al notar que estaba ganando, sus manos fueron soltando el agarre para desliarse por ese bello cuello blanco, sus dedos se movieron provocando que los botones de la camisa salieran volando, la prenda se abrió dejando ver aquella piel color mármol, Jun observó como su pecho bajaba y subía debido a que caricias invisibles lo estimulaban ¿Qué clase de poder tenía Bang? Sin tocarlo podía percibir sus dedos recorrer cada célula de su cuerpo.

—Sabes ¿que quien tiene sexo conmigo se convierte en mi esclavo? Pequeño Sunshine eres deliciosamente dulce. —El mayor paso su lengua por las clavículas del menor mordisqueándolas, Jun nuevamente trató de defenderse pero sus manos fueron elevadas por encima de su cabeza un lazo invisible las sostenía, las delicadas manos del mayor se deslizaron por su pecho, por su abdomen. —Tan tierno, tan dulce, es como la piel de un bebe, de una rosa si tuvieras pechos serías perfecto pero no me incomodan estos botones rosas.

Los dientes blancos se obsesionaron por esos dos bellos pezones, un gemido escapo de la boca del menor quien rápidamente se mordió la lengua para que no salieran más, su piel se elevaba ante cada caricia odiaba que la lujuria ganará terreno ante su cordura, el mayor metió su rodilla en medio de las piernas del menor rozando con la caprichosa erección del castaño quien nuevamente se maldecía por no detener sus gemidos, una vez más los labios de Bang se posaron en ese cuello lo lleno de besos, de mordiscos, dejo cientos de ellos, buscaba marcarlo para que todos supieran que era su próxima presa, su nuevo juguete, su rodilla volvió a rozar con la entrepierna, nuevamente sus labios se unieron en un desesperado beso, Jun no paraba de maldecirse, de regañarse por ceder ante un su deseo carnal, Bang lo volvió a tomar de los hombros para girarlo ahora se pegó a su espalda para rozar su erección con el trasero del castaño, sin  previo aviso metió sus manos en sus pantalones tomo su miembro para masajearlo, nuevos gemidos inundaron el pequeño baño, como arte de magia la camisa de Jun se hizo añicos quedando solo pedazos flotando en el aire el frio recorrió su columna vertebral sus manos se vieron liberadas por el cordón invisible pero tuvo que ponerlas sobre el muro, araño el tapiz, sumergía sus uñas con ansia debido a que su virilidad era fervientemente atendida. 

—No dejaré que te vengas hasta que me digas hyung de forma linda. —Una tenebrosa voz ordeno, Jun podía percibir aquel aliento a alcohol con cigarro pero también con un olor a menta en su nuca. —Sé un niño bueno, complace a tu hyung, gime para mí.

—No lo haré, me niego a caer en tus sucios juegos. —Contesto mordazmente, un apretón sobre su parte intima causo que un grito saliera de su garganta,  dolía. —No doblegaras mi orgullo.

Una carcajada resonó por lugar mientras unos dientes se clavaban en el hombro desnudo del atacado, el mayor pegó más su cadera a ese trasero, froto con demencia su erección, Jun apoyo su frente en la pared no aguantaba más, estaba llegando a su límite su parte intima era presionada prohibiéndole llegar al orgasmo, una húmeda lengua comenzó a descender por su espalda, se mordió el labio hasta provocarse una herida, sumergió sus uñas en el tapiz cuando percibió que su pantalón caía hasta el piso junto con su ropa interior, una traviesa lengua se adentró en su interior, la desesperación lo fue devorando desde las entrañas, esa maldito órgano húmedo estaba tocando puntos que nunca pensó que tenia, la rabia se vio reflejada en su rostro, se detestaba por no ser más fuerte, por no tener la suficiente voluntad.

—Detente. —Grito desesperado mientras un hilo de saliva escurría por su cuello cerró los ojos derrotado. —Hyung, Guukkie.-hyung por favor.

El mayor sonrío satisfactoriamente sabía que esas pocas palabras habían surgido de una dignidad pisoteada, de un orgullo destrozado, sus manos reanudaron su trabajo, sus caricias aumentaron, se puso de pie para pegar su rostro en la nuca del mayor quería escucharlo gritar después de varios masajes el castaño llegó al éxtasis, nunca antes había experimentado aquella sensación desbordarse desde su interior, ya antes lo había hecho con hombres y mujeres pero jamás tuvo esa oleada de placer convulsionando su cabeza, algo le había faltado estaba consciente que por un segundo deseo que el mayor se adentrara en su interior trato de volver a la calma pero un nuevo dolor se hizo presente en su piel, algo ardiente tocaba su espalda a la altura de su omoplato, es como si una vara al rojo vivo tallara algo, se giro para ver como el mayor escribía con su dedo ¿Qué clase de monstruo era el líder de Genbu? ¿Cuántas habilidades tenía? Un grito desgarrador escapo de su boca aquella inscripción le ardía nuevamente recargo su frente en el muro, su vanidad le impedía llorar pero las ganas no le hacían falta, el mayor al ver que había terminado su trabajo acerco su lengua para limpiar la sangre de la piel quemada, JunHong gimió ante el contacto era como si las saliva de su atacante fueran paños fríos refrescando su herida de un momento a otro el dolor desaparecía trato de moverse pero el miedo lo había congelado ¿Qué tan poderoso era Guk?

—Ahora eres de mi propiedad. —Le susurro el mayor alejándose del castaño antes de salir por la puerta le lanzo un beso. —Para la próxima rogaras porqué te posea.

Jun al escuchar que la puerta se cerraba abrió los ojos se subió el pantalón caminó hacia el espejo para observar el regalo dejado, “Mascota de Bang YongGuk” aquella frase estaba tatuada como si hubiera sido hecha por un metal ardiente, como se marcaba al ganado, un grito de frustración escapo de los labios del menor quien golpeo el vidrio con toda la ira contendía en su ser, Bang reía fascinado mientras caminaba por el pasillo pero su sonrisa desapareció cuando se topó con un pelinegro.                     

   

Notas finales:

GRACIAS POR SUS REVIEWSS, lo siento lo dejó de rápido espero no me odien, mm creo que es justo que les ponga chicas a los conejos hahah ellas me gustan principalmente Dakota Blue para Jae, Sha para Dae, Ella para Bang, para Him me gustaria Emma Watson pero ella tienen otro papel y para Uppie Chloe XD  ahh la chica del maknae es Elle Fanning bye es muy tarde y tengo que ir a trabajar xD


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).