Un enemigo más…
En el aire partículas de polvo y vapor flotaban impidiéndole ver con claridad, de su boca emergía vaho que delataba su esfuerzo por trabajar de forma rápida, el ambiente aún seguía caliente, continuó en la labor de encontrar a sigetsu bajo aquella montaña de escombro y hielo. Todo había sucedido tan rápido, le sorprendía que el peliblanco reaccionó a tiempo para salvarlos.
Aún no lo creía, sus ex – compañeros de la agencia habían detonado una granada, tan desesperados estaban por detenerlos, removió un bloque más de hielo y un brazo se dejó ver, la adrenalina impulso a sai para trabajar más rápido.
- Vamos cabron, tu novio me destroza si te mueres! – replicaba sai mientras movía un nuevo bloque. –puta madre!, alguien responda, tengo una situación aquí. – dijo mientras intentaba comunicarse con alguien por medio del transmisor. El gemido de sigetsu lo hizo desistir de sus intentos, más escombros se removieron y por fin el cuerpo del peliblanco estuvo libre.- mierda, rarito pensé que estabas muerto.
- Siento que lo estoy, - apenas y pudo contestar. – que ha pasado? – preguntó sigetsu.
- No lo recuerdas!, - sai se sorprendió enseguida se puso serio, - nos atacaron con granadas pensé que pasaríamos a ser trozos de carne – se inclinó y tomó el cuerpo de sigetsu - , ahora vamos arriba, perdí contacto con el resto del grupo – el pelinegro lo puso en pie y le sirvió como apoyo para mantenerse de esa manera. – oh, mierda!!!- exclamó sai histérico - que mierda te pasa!, que mierda te pasa! – gritaba al ver cómo uno de los brazos del peliblanco se desprendía de su cuerpo y caía al piso para despues pasar a hacerse una especie de liquido.
- Oh mierda – exclamó también como respuesta el otro – imbecil, tendrás que avanzar tu solo- argumentó sigetsu.
- Que?, no, no puedo!, qué pasa si me encuentro primero con tu novio?, querrá matarme si ve que no estás conmigo!, y si intenta hacerme algo raro como venganza?. – sai hablaba sin separar una frase de la otra. Guardó silencio cuando la pierna de sigetsu pasó por lo mismo que su brazo, incluso ahora los dedos del pelinegro, comenzaban a hundirse de forma no natural en su costado, justo donde lo sostenía.
- No fue tu agencia, - intervino sigetsu, - es gente del gobierno, las granadas están equipadas con drogas supresivas, sólo causan efencto en nosotros…
- Entonces estás muriendo?- preguntó sai
- No idiota! – pero mi cuerpo no puede mantener la forma sólida – otra parte más de sigetsu se desprendió, - apresúrate vete, solo necesito tiempo para recuperarme, en cuanto pueda los alcanzare.
Sai no estaba del todo convencido, pero puso lo que restaba del cuerpo del peliblanco sobre el piso, y comenzó a alejarse del lugar...
La situación para karin fue tan obvia, los hombres frente a ella no eran de la agencia, eran hombres del gobierno, no dudaba que para esa hora ya sus transmisores estuvieran intervenidos, así que era menos peligroso no saber de sus amigos que tenerlos en línea y que el enemigo supiera cada uno de sus movimiento, por lo que sin culpa alguna los desconecto, ese movimiento en si era peligroso. Pero ellos ya tenían Experiencia en situaciones como esa, por lo que estaba consciente de que todos seguirían con el plan aún que no tuvieran noticias los unos de los otros.
Chispas saltaron provenientes de la pared en la que se cubría, volteo a ver su brazo adolorido y retiro de el una especie de dardo, su mente comenzó a buscar una solución, necesitaba tiempo para que la droga saliera de su sistema, pero en donde refugiarse?, comenzó a llevar su vista de un lado al otro, solo puertas, ventanas y sistemas de ventilación, sus ojos se abrieron, camino con dificultad hasta pararse bajo una rejilla de ventilación, se concentró, necesitaba viajar más de cinco segundos en el futuro, era vital saber cómo actuarían sus adversarios, pero también era una apuesta en su contra, aún que lo logrará, aún que derribara al grupo de atacantes, ¿podria tener la fuerza suficiente para escapar?.
El dolor de una bala al incrustarse en su clavícula la derribo de espaldas, gritó debido al dolor, ya no tenía opción, sus ojos se volvieron blancos, su cuerpo se levantó en un movimiento irreal, corrió con agilidad hasta el grupo de hombres, esquivó cada bala que encontró en el camino, golpeó con su codo el rostro de un soldado, la fuerza fue tal, que con un leve tirón también lo despojó de su casco, mismo que lanzó en el aire y que al golpear una de las armas, desvió la misma provocando que el tiro fuera directo a otro soldado y no a ella, se deslizó de rodillas, derribando aún hombre más, en el aire atrapó el arma y comenzó a disparar, cada uno de sus atacantes caía herido de muerte, casi tan pronto como todo sucedió había terminado, los ojos de la mujer recuperaron su color, con la última pisca de conciencia intento levantarse.
La droga estaba mermando sus esfuerzos, frente a ella todo se movía y volvía borroso, volvió a concentrarse e intentó saltar, pero el brinco fue muy débil y sus dedos apenas rosaron la rejilla de ventilación, cayó de rodillas, en su mente, los rostros de sus amigos se dejaron ver, que clase de líder moría dejándolos a la deriva?, tocó su clavícula y percibió en calor de su sangre, si lo que necesitaba era que su cuerpo dejara de estar letárgico solo por unos segundos sabía cómo hacerlo, reunió todo su valor, y apretó con fuerza la herida, su corazón pálpito con fuerza, un nuevo golpe de adrenalina la lleno, gimió entre dientes y se puso de pie, nuevamente salto y esta vez, sus dedos quedaron prendados de uno de los bordes, luchó por subir su cuerpo, y lo logró, apenas había espacio para su cuerpo ahí, pero al menos, por ahora estaba menos desprotegida, lo siguiente era seguir adelante, llegar hasta donde el plan la necesitaba. Se arrastró un par de metros y después simplemente su cuerpo dejo de luchar, se quedó inmóvil completamente inconsciente…
Kakashi disparaba en respuesta, aun lado de él, iruka seguía inconsciente, el color de su piel comenzaba a abandonarlo, la sangre que su herida derramaba era demasiada.
- Quienes son – le gritó el peliplata a juugo, - estoy seguro que no son nuestros hombres.
- Son del gobierno – respondió el de cabellos naranja que lanzaba por los aires el cuerpo de un hombre más. Su cuerpo estaba en su máxima exposición de su habilidad por lo que a eexepcion de su cabeza, todo lo demás parecía estar cubierto por roca. – hay que sacarlos de aquí. – señaló refiriéndose al grupo de agentes que se resguardaban en el mismo sitio de kakashi e iruka.
- Lo sé, pero no es viable retroceder, y con ellos ahí, dudo que podamos avanzar, - el gemido de iruka hizo que kakashi callara .
- Cómo está?, - preguntó juugo antes de cubrirse de una nueva lluvia de balas.
- Casi muerto – contesto sin esperanza el peliplata.
Juugo solo desvío la mirada, karin le había hablado de la posibilidad de que el gobierno los buscase incluso si eso significaba exterminar a la misma agencia, y no es que los planes para con ellos fueran diferentes, si no que, simplemente el gobierno buscaría rescatar lo más que pudiera de su “inversión” y ellos eran dicha inversión.
En ese preciso momento entendió más que nunca los planes de la pelirroja, necesitaban atrincherarse ahí, ser el centro de atención, que los civiles voltearan a verles y al mismo tiempo hacerse de aliados, pero jamás pensaron que se atreverían a tanto, sería a caso que fuera del lugar la gente no notará nada extraño, hacía unos cuantos minutos karin corto toda comunicación, eso solo significaba una cosa, lo peor estaba sucediendo y sumando problemas a su ya difícil plan, ahora los agentes, que debían ser fuerza de combate, no eran más que un grupo de hombres desarmados y temerosos.
Juugo escuchó el caer de una especie de artefacto de metal, buscó con su mirada el lugar en el que había caído, cuando lo localizó se lanzó cubriéndolo con su cuerpo, una granada?, eso era una granada, la explosión se escuchó levantando su cuerpo debido a la potencia, en el piso una especie de cráter, kakashi y el grupo de agentes no tuvieron más remedio que retroceder unos metros, el peli naranja se levantó, sus oídos no captaban sonido más que un insesante chirrido, intentó caminar, pero no lo logró, cayó de rodillas y llevo sus manos hasta su estómago, la zona solo estaba cubierta de sangre y despojos de carne . Kakashi soltó a iruka e intento ir en su ayuda, el menor lo impidió con una seña de su mano, al instante tras kakashi y los demás, la habilidad de sasuke se deslizó traspasándolos mientras gruñía desatado en ira, el moustruo esta vez, no respetó vida alguna, los hombres del gobierno caían o eran lanzados por los aires ya muertos gran parte de ellos con miembros cercenados, la sangre comenzó a salpicar el lugar completo, en el piso ya comenzaba a formarse un gran charco, la escena era desgarradora e inquietante.
Kakashi dio un salto cuando itachi lo toco en su hombro, lo miró sorprendido y asustado.
- Esto está del carajo, que hacemos?, - preguntó el pelinegro, pero kakashi no respondía, lo hizo cuando lo que parecía ser parte de un pie cayó cerca, kakashi vomito, itachi apenas pudo contenerse.
- Ve por el- señaló hacia juugo- seguiremos el plan, - termino de decir el peliplata, itachi cumplió de inmediato la orde antes de preguntar.
- Y sasuke?
- Parece no estar herido, por ahora nos adelantaremos, en cuanto pongamos a nuestros hombres a salvo vendremos en su apoyo- itachi se detuvo,
- No puedo dejarlo – refirió con seriedad, kakashi se volvió a el presa de la deseperacion.
- Y QUE,AHORA RESULTA QUE ES TU HERMANITO Y TE DA MIEDO DEJARLO, HACE SOLO UNAS HORAS LO LLAMABAS PUTA Y PENSABAS DE EL LO PEOR! – gritó el peliplata, itachi simplemente comenzó a caminar sin quererlo de verdad. Volteo un par de veces a medida que se alejaban.
En verdad dejaría a su hermano?, la culpa se arremolinaba en su pecho y en su mente, era claro que no tenían un lazo sólido, pero el simple hecho de haber “hablado” con El y conocer algo sobre su vida, le hizo sentirse más cercano.
Su comunicador comenzó a tener cierta interferencia, se dio cuenta de que, el de kakashi también, pues se había detenido, cuando el sonido se limpió, la voz del rubio se pudo escuchar.
- Aquí Naruto, alguien me escucha?, repito aquí Naruto alguien me escucha, - ninguno de ellos contesto por lo que Naruto continuó hablando, - tengo a karin, está herida, me dirijo al punto de encuentro, cambio y fuera.
Al cesar la comunicación, todos miraron al techo del lugar, prestaron atención a los sonidos que se colaban desde afuera.
- Son helicópteros! – gritó kakashi, y solo un pensamiento derivó de ello, serían refuerzos para sus futuros aliados, o refuerzos del gobierno?...
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