-¿Qué tenemos?
-un chico, que se ha caído desde una rampa de 1.60m... el muslo izquierdo parece dañado.
-ya me encargo yo-le dijo el chico de ojos felinos. Llevaba dos años trabajando de médico y amaba lo que hacia. Y así podía llevar a casa un poco de dinerillo y darle todos los caprichos a su adorable compañero de piso: Taemin. Hacia ya dos semanas que sentía algo por aquel chiquillo... ¿podía llamarse amor? muchas dudas.
Key se encaminó hacia la habitación 804, donde vería a su nuevo paciente. Al abrir la puerta se sorprendió al ver a un hermoso chico con cara de perrito. Sus ojos eran grandes y tiernos...pero se reflejaba dolor en ellos. No el dolor que te puede provocar una herida...un dolor más fuerte.
-¿Qué pasa?-le dijo éste. No le gustaba que se le quedaran mirando como lo hacía este chico. La otra persona que lo había hecho...
-nada...es que realmente pareces un perro.
-muy gracioso...por algo me llaman Puppy...-le contestó sarcástico- quieres darte prisa, ¿enfermera?
-¿enfermera?!-Key estaba indignado.
-sí, enfermera...-Jonghyun quería molestarle. No le gustaba que le recordaran que se parecía a un perro. Empezaron a llamarle así cuando salía con ella.
-oye mocoso, vine aquí para ayudarte, ¿ok? Así que hazme ver tu muslo y déjame en paz.
Jonghyun soltó una carcajada y le hizo notar que ya le habían quitado los pantalones y estaba en calzoncillos. Key se acercó y examinó la pierna del joven: como ya he dicho amaba su trabajo y no dejaría que un mocoso le estropease el día. Lo que vio en la piel del paciente no le gustó nada: un moratón grisaceo y amarillento, que se extendía desde encima de la rodilla y los calzoncillos cubrían el resto.
-quítate los calzoncillos-le ordenó a Jonghyun. Éste lo miró desconcertado.
-¿en serio?! No pienso desnudarme delante tuyo!-gritó.
-¿te crees que a mí me hace gracia esto?-dijo Key mientras se sonrojaba. El otro se cruzó de brazos.
-es de mala educación desnudarse ante una señorita-se excusó. ¡Ni loco se quitaría los boxers delante de ese médico! Key entendió cómo tenía que hacer.
-por suerte aquí no hay ninguna señorita. Pero...-miró directamente al chico perro, que a pesar de eso era extraordinariamente guapo. Siguió-creo que sé por qué no quieres: tu miembro es tan pequeño que te avergüenzas.
Jonghyun se escandalizó. Qué su pene era...¿pequeño?! ¿Cómo se atrevía?! Siempre había dado placer a las mujeres, siempre le elogiaban por el tamaño...
-¡tú estás loco! ¡Completamente loco!
También se había sonrojado. Había empezado a chinchar a su médico porque le había llamado perro y porque se aburría, pero no le había dicho nada como para que le obligase a desnudarse y le dijera eso sobre su miembro...
-este loco te quiere ayudar, y es tu médico. ¡Quítate ya los calzoncillos y acabaremos antes!
Jonghyun no pudo negarse. De mal humor se quitó lentamente el boxer, porque le dolía mucho el muslo. Iba tan distraído pensando en ella... por su culpa acabaría matándose.
Tiró al suelo la prenda y bajó la mirada al suelo. Key se acercó e intentó no mirar el miembro de su paciente. Aún no se habían presentado y él ya estaba mirando esa parte tan íntima... Jonghyun jamás había permitido que otro chico mirara su miembro, siempre había sido muy quisquilloso.
Key, sin embargo, ya había visto algunos pero jamás había trabajado tan cerca de uno.
Dejó pasar esos pensamientos y examinó la otra parte del muslo. Ay. Lo que vio le dolió incluso a él: el moratón seguía, y se paraba muy cerca del miembro de Jonghyun. Tendría que pasar mucho tiempo con ese paciente, así que decidió volver a empezar de cero. Se levantó y le miró a los ojos.
-bien, hagamos cómo si no nos conocemos.
Kim Jong Hyun le miró curioso.
-annyeong, me llamo Kim KiBum, pero puedes llamarme Key. Seré tu médico, así que espero que nos llevemos bien- se presentó el sexy chico.
-mucho gusto...soy Kim Jong Hyun y necesito que me cures, ¿ok?-le dijo el muy sexy joven. Le daba gracia su médico: a pesar de parecer una princesita era hermoso.
-Jonghyun....te voy a tener que hacer una cosa no muy agradable, ¿me lo permites?-titubeó Key.
-mmm...si es necesario...-Jonghyun no sabía a que se refería pero ya que se suponía que ellos ahora se llevaban bien y todo lo de antes no existía, no debía ser borde. De golpe abrió los ojos como platos.
¡Las manos de Key estaban manejando su miembro!
Alarmado miró hacia esa dirección.
-¿te duele mucho si hago esto?-Key no podía mirarle a los ojos. Se sentía...raro...el único pene que había tenido en las manos había sido el suyo, y le resultaba...¿excitante?
-no demasiado...-le contestó Jonghyun. Llevaba tanto tiempo en abstinencia...
Siguió tocandole, hasta que notó...cómo se ponía duro. Entonces oyó la voz de Jonghyun:
-yo...emm...esto...lo siento...-parecía muerto de vergüenza. Key se limitó a levantarse y a decirle que no se preocupara, que era normal.
-vuelvo mañana. Ahora intenta descansar. Nos vemos, Jonghyun.
-hasta mañana Key.
El chico con cara de perro se volvió a poner el boxer y sonrió tímidamente. Era un chico realmente lindo y sexy.
Key salió de la habitación y se paró delante de la puerta. Suspiró hondo. había manejado el pene de su paciente solo por trabajo...o ¿también por qué le excitaba? No, eso no era posible: ¡se acababan de conocer! Pero...
-umma!! ¿Por qué llegas tan tarde?-le reprochó Taemin mientras le ayudaba a quitarse el abrigo.
-uff ha llegado un nuevo paciente que tiene una fea herida así que me entretení en el metro pensando en eso y me pasé la parada...¡pero ya estoy aquí así que a cenar!
-¡claro umma!-dijo el alegre pequeñajo.
Ambos comieron Kimchi y Chajan myun y quedaron llenos. Se pusieron delante de la tele, como siempre hacia un año. Se conocian desde hace 3 y vivian juntos desde uno...siempre lo había considerado un hijo, aunque algo está cambiando...¿debería decirselo? Key escuchó la sigla del K-drama To the beautiful you. Miró a Taemin y se decidió.
-oye Taemin...
-¡Oh my gosh! ¡QUE LINDO HYUNG! NO ME LO PUEDO CREER! ¿COMO SE LLAMA?-gritó el pequeño indicando la televisión. El mayor miró al chico y se acordó que lo había visto en alguna revista de moda.
-creo que se llama Choi Min Ho...¡pero no estoy seguro!
-¡gomawo hyung! ¡En seguida voy a buscarlo en internet! - y diciendo eso Lee Tae Min salió disparado de el salón a buscar el portátil. Y Key no le pudo decir nada.
NARRA JONGHYUN
La maldita pierna me duele. No puedo dormir con eso...
¡Siquiera me deja girarme!
Y pensar que todo fue por tu culpa. Estaba pensando en tí cuando me caí...en cómo me traicionaste. Cómo te dejé. Lo mucho que lloré. Y por eso ahora estoy en este hospital con la pierna peor que una piñata.
Yo te amaba, ¿sabes?
Me has roto tanto el corazón que no creo que se podrá arreglar con nada y jamás.
Me has convertido en algo oscuro, antipatico y egoista.
Basta con pensar como le traté a ese médico antes... Quiero volver a ser ese chico que era.
A ser yo.
Demostraré a mi familia, a mis amigos, al Mundo, a tí...que sé levantarme tras la caída.
Porque seré otra vez ese chico. Volveré a ser yo. Un lindo cachorrito...amable, simpático, bromista y adorable.
Volveré a ser Jonghyun.
Cantaré y bailaré.
Leeré y viajaré.
Amaré a alguien, si es posible con mi corazón. Haré feliz a la gente y así me haré feliz a mí mismo.
Me incorporo.
No, esta noche no voy a dormir. Saco mi cuaderno de notas y anoto las nuevas estrofas que se me han ocurrido.
Y pienso en mi médico. Si voy a volver a ser yo, tengo que empezar con él. Me porté mal y ahora me mostraré como soy realmente. Es una persona curiosa, seguro que nos haremos amigos. Al menos espero...
Miro el cuadro de flores de la habitación: te habría gustado mucho...
¡no! ¡Babo Kim jonghyun!
¡Deja de pensar en ella! A partir de ahora ni una cosa más. Pero no puedo evitarlo y se me enumedecen los ojos. Te amaba, sabes...