Pov Minho
Vivir o morir….elegir un camino es algo posible? Uno puede elegirlo en realidad? No es más que una cuestión del destino? Porque la gente se rehúsa a creer en que el destino es real y que nada se hace sin premeditarse? Solo es cuestión de analizar un poco las cosas, como bien dicen nada pasa por casualidad.
Sé que no fue casualidad que aparecieras frente a mis ojos por primera vez hace dos años, logrando miles de sensaciones en mi igual al que si hubiese corrido un maratón, como si me hubiese golpeado la cabeza dejándome aturdido y confundido o alguien me propiciara un fuerte golpe en el estomago que me saco el aire y me regreso en el instante en que note la cosa más bella que haya visto en mi vida….tu sonrisa.
Desde aquel instante supe que mi vida había cambiado, un nuevo inquilino se me había metido por los ojos directo al corazón y para poder para toda la revolución de sensaciones que había en mí interior tendría que morir.
Algo que por nada del mundo deseaba, era increíblemente feliz al verte cada día, aun si tu ignorabas mi presencia, al ser completamente invisible ante tus ojos, algo que en el inicio que te conocí no fuese tan grande el sentimiento, pero así me sentía.
Te vi por primera vez cuando yo al estar dentro del equipo de futbol de la escuela estaba atento de los nuevos inquilinos que remplazarían aquellos que ya se habían ido. Al principio fuiste tú el que paso desapercibido por mi; ni siquiera recuerdo como venias vestido solo tengo una imagen borrosa de cómo te presentaste ante todo el equipo.
Pero creo que el verte casi a diario, ver tu amabilidad con tus nuevos compañeros, con tus hyungs hizo que llamaras mi atención como si fuera elaborado por un hechizo. De un día para otro ya te tenia aprisionado en mi mente, contaba las horas de ir a los entrenamientos con tal de verte.
Con el paso del tiempo se hizo mas grande mi necesidad y verte solo en las practicas no basto, mis ojos codiciaron lo que veía a diario, te buscaba por toda la escuela, para que al final de mis búsqueda te viera rodeado de algún amigo o amiga; tu sonriéndoles amablemente o solo observándolos con esa mirada profunda y encantadora que tienes.
Me asombraba la manera en que se iban los días, mientras tu tenias toda mi atención, una que por desgracia nunca te diste por enterado.
Hoy es 10 de octubre, una fecha importante, aniversario de la muerte de mi madre y su cumpleaños, tenía que ir a comprar flores para llevarle, hace ya cinco años que ella murió de cáncer, fumaba demasiado, desde que ella era adolecente tenía ese asqueroso habito. Pero al menos sabía el porqué mi desprecio por las personas que suelen fumar y las aborrecía más cuando lo hacían delante de mí.
Ya han pasado tres años que salí de la preparatoria, una etapa hermosa y dolorosa, cuando más lo pienso siento que me la pase viajando sobre una nube, solo concentrado en llamar tu atención, que te fijaras que tan loco me traías, juro que casi podía lamer el suelo por donde pisabas.
Durante un día, donde mi profesor de filosofía había faltado, encontrándome solo dado que mis amigos habían salido a comprar su almuerzo, me puse a pensar que estaba gastando mi tiempo por alguien que estaba fuera de mi alcance, lo digo porque el día anterior te vi con una chica, muy linda, tú la abrazabas con devoción y después tomar su rostro para besarla, aquella vez fue lo peor que pude sentir en toda mi vida; tal vez exagero, pero tú fuiste mi primer amor, el primero que desato la locura del amor en mí, hurtaste mi corazón escondiéndolo de su dueño, dejándome ciego, incapaz de degustar otro sabor que no fuera la dulce amargura, incapaz de oler algo más que no fuese tu olor a lavanda, sin secar aquellas lagrimas que recorrían mi rostro por mi falta de tacto, todo te robaste de mi….dejándome completamente vacío.
Al pensar que ya no podía con ese amor ciego por ti y debía dejarte por mi salud y por mi futuro solo pude notar que cada día aun cuando no te buscaba te aparecías frente a mis ojos, podía sentir esa mirada tuya sobre mí, solo el tratar de olvidarte se me hizo imposible.
Así se volvió mi vida en la escuela, viendo los días pasar mientras me volvía un acosador por ti, tan pronto se me fue el tiempo que sin meditarlo ya estaba llenado mis solicitud para la universidad.
Entonces llore, llore como cuando perdí a mi madre, llore como si me hubieran enterrado miles de cuchillos en el cuerpo, llore hasta más no poder, mi cobardía nunca me dejo decirle todo lo que me provocaba con solo verlo y cuanto anhelaba ser parte de su vida. El ultimo día de clase lo vi caminando hacia la salida mientras en mi mente me repetía una y otra vez con el temor recorriéndome por el cuerpo “solo espero que esta no sea la última vez que te vea mi querido Taemin”, mientras mi respiración se cortaba al ver que volteabas por unos instantes para verme a mí, si solo a mí, esa mirada que tanto amo esa vez era dirigía a mí.
Me sentí morir porque tal vez las cosas hubieran sido tan diferentes pero yo nunca le di una oportunidad de que cambiaran, si bien dicen que el destino no lo puedes cambiar, pienso que puedes labrar los caminos que te conducen a ese destino, ojala hubiera comprendido eso antes.
Pero como dicen el hubiera no existe, así se han pasado ya cinco años que aun espero por mi corazón, lo sigo buscando, sigo esperando por volver a sentir sus latidos y su calor en mi pecho.
Y al fin después de aminar por tantas calles y llegar a la florería favorita de mi madre me encamine a la estación del metro y sin más sentí algo pesado en mi pecho….era mi corazón subiendo al mismo vagón que yo, envuelto en esa chamarra banca tan conocida por mis ojos y esa melena cobriza que no podía lucir mejor en alguien que no fuera el…una sonrisa apareció en mi rostro mientras posaba su mirada en mi.
Y bien al fin le darías una oportunidad al destino, es aquel que está tocando tu puerta…..