Hoy como todos los días iba a aquella cafetería que quedaba cerca de mi trabajo ‘‘Coffee Day’’ un hermoso y elegante lugar con sillones cómodos y mesas de cristal, también había una gran variedad de pasteles, bebidas y bocaditos simplemente exquisitos.
Como todas las tardes a las 6 pm estaba sentado con un informe en manos viendo las cuentas e ingresos de la empresa en la que trabajaba
Realmente este trabajo era agotador, peo lo único que alegraba mis días era él
Aun no sabía su nombre, pero con esa sonrisa iluminaba mi vida
Solo sabía su apellido era ‘‘Kim’’ por el gafete que llevaba
- Buenas tarde señor ¿que desea servirse? – esa voz tan dulce de siempre solo sonrió al escucharlo
- Un capuchino por favor – lo anota en aquella pequeña libreta que traía siempre en esas manitas pequeñas y finas – No mejor que sean dos y...mmm... ¿me puedes recomendar algún pastel?
- ¡Claro! Le sugiero este – señala en el menú
- ¿Tarta de coco? ¿Que tiene de especial? – le cuestiono
- En realidad es uno de los favoritos de los clientes, a todos les encanta – responde
- Esta bien, tráeme un rebanada de ese – lo apunta en su libreta
- Bien enseguida traigo su orden- me sonríe una vez mas y se retira
Sigo leyendo aquellos informes, es un alivio saber que las ventas han mejorado dando un mejor ingreso a la empresa suspiro sacándome un peso de encima y dejo los papeles a un lado
Me dedico a observar la ciudad por el gran ventanal, me saco los lentes que llevo y lo veo venir con una bandeja blanca, los dos capuchinos humeantes y la rebanada de la tarta sugerida por el
Pone todo el pedido en la mesa de cristal con mucha delicadeza
- ¿Desea algo mas? – me pregunta
- Siéntate –
- ¿Disculpe? – se sorprende
- Siéntate por favor – digo de manera amable haciendo un ademan para que lo haga
- Disculpe – sonríe con un ligero sonrojo en la mejillas – no puedo hacerlo estoy en horas de trabajo
- Por favor – le ruego
- Mmmm – le tomo de la mano y lo miro con tristeza
- … Esta bien... – se sienta y pongo el capuchino y la tarta en frente de el
- Come por favor –el solo me mira un poco asustado
- No puedo señor...
- No me digas señor – le interrumpo – mi nombre es Choi Siwon
- Bueno… Choi Siwon, disculpe pero no puedo
- ¿Cual es tu nombre? – le cambio de tema
- Kim… Kim Jong Woon
- Gusto de conocerte Jong Woon
- Señor debo irme – se levanta apresuradamente, pero no quiero que se vaya, no ahora que he dado el primer paso para conocerlo, no ahora que quiero decirle lo que siento
- No te vayas – lo tomo del brazo
- Por favor señor Choi, perderé mi empleo – en ese momento me levanto y me dirijo a la barra y encuentro a un muchacho mas joven y bastante parecido a él
- Disculpe ¿donde puedo encontrar al dueño? – se pone nervioso y traga un poco de saliva
- Pase por aquella puerta – me señala
- Muchas gracias – le sonrió y me dirijo al lugar indicado
Toco la puerta dos veces y escucho el ‘‘adelante’’, me adentro en aquella oficina donde observo a un hombre de cabellos rubios con una sonrisa caracterizada por un hoyuelo en la mejilla, detrás de un escritorio tapizado
- Buenas tardes – se levanta - soy el señor Park Jung Soo
- Buenas tardes – saludo con una venia
- ¿En que puedo servirle? – dice amablemente
- Vengo… - suspiro – para hablar de uno de sus meseros
- ¿Lo han tratado mal? ¿Le han dado un mal servicio?- cuestiona con rareza
- ¡No! - exclamo – es solo que quisiera que lo deje salir… más temprano
- ¿Cómo mas temprano? Ha surgido un problema
- No es... como decirlo era algo complicado de explicar solo le diré...- sonio avergonzado – que es por amor – el sonríe y parece comprender la situación
- Disculpe señor…
- Choi… Choi Siwon
- Señor Choi... perdóneme pero no puedo hacer eso, es viernes y el café es lleno necesito a todos los meseros presentes
- Mmmm…- tenia que pensar en algo – y… - lo dudo pero no hay otra opción –…yo trabajo… usted podría dejarlo salir un poco mas temprano- se ríe un poco por mi ocurrencia
- Esta bien – asiente
- Muchas gracias – le sonrió
Salgo de aquella oficina y me dispongo a ayudar a otros meseros, el me mira extrañado al igual que el chico de la barra pero aun así los ayudo
Pasadas dos horas los cuatro meseros ya sean hecho amigos míos incluso el chico de la barra que me acabo de enterar es el hermano de el hombre del que estoy enamorado me ha agarrado confianza y hemos hecho de este trabajo una diversión con pequeños juegos y bromas
Ni siquiera tome en cuenta lo de salir mas temprano me quede con ellos hasta la hora de cerrar le pedí amablemente al dueño que le deje la llave a Jong Woon o Yesung así le decían en el café ya que quería invitarlo a come algo, el comprendió y así lo hizo
Le pido a Yesung que se siente y que me espere un rato, voy a la cocina y sirvo dos capuchinos y tomo el ultimo pedazo de la tarta de coco todo lo pongo en una bandeja y lo llevo a la mesa en la cual el se encontraba pongo todo en la mesa y me siento con el
- Ahora come –
- Solo me haz hecho quedar para esto – se ríe
- No – le digo mas serio – en realidad - miro el contenido de mi taza me siento nervioso – quiero decirte algo
- Come un pedacito de tarta y me mira
- ¿Quep? – dice con la boca llena sonrió ante aquello e incluso me rio – no te rías – me mira con un puchero
- Esta bien – le sonrió – es que siempre he venido a este café, no se si lo has… - en ese momento siento sus labios sobre los míos, aquello me toma desprevenido pero correspondo a ese roce tan intimo que he esperado
Sus labios son suaves tanto que temes quebrantarlos, cálidos que pueden solo avivar la llama de nuestro amor, dulzones que de por si se te hacen adictivos
Se separa y puedo notar el sonrojo en sus mejillas
- No es necesario que lo digas – acaricia mi mejilla y yo tomo su mano hundiéndome en su tacto – no soy tonto para no darme cuenta, te he visto venir cada día y haces lo imposible para que te atienda a ti-
- Siento ser muy obvio – le sonrió
- No importa, solo te diré que yo correspondo a tu sentimiento y que me has hecho esperar mucho por este día – me mira con cariño y vuelve a rozar mis labios
- Te amo – le miro con sinceridad
- También te amo – me sonríe
Toma mi mano y salimos de aquel lugar, nos encargamos de cerrarlo y luego nos montamos en un taxi rumbo a su casa
En el camino solo disfruto del entrelazo de nuestros dedos, de esas miradas y sonrisas llenas de felicidad y cariño y de uno que otro beso que son tan dulces como la miel
Llegamos a nuestro destino pago el taxi y me dirige al edificio de cinco pisos que se encuentra enfrente, entramos y tomamos el ascensor, no es necesario decir nada de por si se siente bien el solo estar ambos tomados de la mano
Bajamos en el tercer piso el saca sus llaves y me invita a pasar a ese pequeño apartamento que de por si se siente hogareño
- ¿Vemos una película? – sugiere de pronto
- Claro – le sonrió
- Siéntate – me dice – mientras yo voy por una película y a cambiarme de ropa
Asiento y el toma mi rostro plantándome otro beso, se aleja y me deja solo en aquel lugar, tomo asiento mientras observo algunas de sus fotos realmente era hermoso
Vuelve con solo una polera y un pantalón de tela pone el video y se acomoda junto conmigo, por mi parte lo abrazo haciendo que se acomodo en mi pecho
Comienza aquella película pero de por si sabemos que aquello solo era para estar juntos un rato mas
Empezamos a besarnos subiendo cada vez la intensidad del beso, el se montan en mis piernas y me dedica una sonrisa traviesa para volver a besarme mientras yo lo rodeo con mi brazos
Comienza descender por mi barbilla llegando a mi cuello dando pequeños besos que solo provocaban mas estragos en mi
Desabotona con paciencia la camisa que llevo mientras delinea mi abdomen solo puedo jadear ante su contacto y ataco su cuello haciéndolo gemir por la acción
Empiezo por sacarle la polera que lleva y voy besando su pecho dedicándome en esos pequeños botoncitos rozados los cuales chupo y tironeo para dejarlos totalmente erizados
Al terminar con mi labor el toma mi mano apaga el televisor y me conduce a su habitación se sienta en la cama y comienza a besarme mientras yo caigo encima de el a medida que el se acuesta
Nos besamos de una manea más torpe mordiéndonos los labios y uniendo nuestras lenguas insinuándonos más al acto que estábamos a punto de cometer
Acaricia mi cuerpo desde mi cuello hasta llegar a mi miembro y aprestándolo un poco haciéndome gemir mientras veo como lame sus labios
Comienza a acariciar esa parte de una manera exquisita y excitante cada vez mi cuerpo reacciona mas ante ello, no quiero que pare se siente tan bien, y en los pocos minutos que han pasado ya siento la molestia de estar con ese pantalón, como si el leyera mis pensamientos lo desabrocha y me los quita junto con los boxers y vuelve a su labor masturbándome de una manea desquiciante para mi
Ya de por si muevo mi cadera y mientras eso pasa comienzo a desabrochar también sus pantalones y los quito junto con el bóxer como el lo ha hecho conmigo y comienzo a rozarme con el causando el roce de nuestras hombrías lo cual nos gusta a ambos y seguimos con aquello gimiendo de la manea mas ronca que podemos
Comienzo a besar su cuello mientras sigo con los roce en un intento de callar mis gemidos
- Hazme tuyo Siwon – susurra en mi oído estremeciéndome mas, el me observa y me sonríe y yo hago lo mismo y lo beso
Comienzo por darle mis dedos y el los lame y los chupa de la manea mas sensual mientras me mira
Cuando ya están lo suficientemente lubricados los llevo a su entrada como siempre primero meto uno mientras el se acostumbra y luego así el segundo para dilatarlo y el tercero por ultimo para que prepararlo para lo que viene
Cuando creo que ya es suficiente introduzco mi hombría viendo la cara de dolor de mi amado quiero detenerme pero el enrosca sus piernas en mi cadera y me empuja hasta que entro totalmente en el, beso sus labios hasta que se acostumbre incluso lo masturbo para que se olvide del dolor
Mueve su cadera contra la mía dando la señal para seguir primero voy lento no quiero lastimarlo y el comienza a jadear lo voy besando mientras disfrutamos del ser uno solo
Las embestidas han aumentado de velocidad el grita mi nombre y yo gimo sobe sus labios se siente tan condenadamente bien, noto que el se irgue y me observa con lujuria y comienza a mover su cadera, he dado con su punto dulce hacia que lo embisto otra vez en ese lugar
- ¿Ahí? – susurro en su oído
- …- el solo asiente y doy mas fuerte en ese lugar haciéndolo gritar por más
Ya llegamos a nuestro ansiado clímax y comienzo a masturbarlo mientras lo beso y ahogo sus gritos en mi boca
- ¡Wonnie! – grita separándose de mi boca y esparciendo su semilla en nuestros abdómenes y mi mano yo doy dos embestidas mas y me corro gritando su nombre
Me dejo caer en su pecho agotado y con la respiración agitada al igual que la de el, salgo de su cuerpo y me recuesto a su lado inmediatamente lo abrazo y comienzo a repartir beso por todo su rostro mientras el nos tapa con las cobijas
Desde aquel día cada día voy al café ‘‘Coffee Day’’ a las 6 pm encontrándome con mi amado dándole un beso casto para luego ayudarlo a atender aquel lugar donde todos me han recibido bien quedándome con el hasta la ultima hora para beber dos tazas humeantes de capuchino con una rebanada de tarta de coco recordando aquel hermoso día donde toda nuestra historia de amor había empezado