Sister.
Esa noche era la fiesta de despedida de solteros de Sasuke, mañana mismo se casaría con Naruko Uzumaki. Todos sabían que era un mujeriego de lo peor, incluso si estaba comprometido con Naruko, Sasuke presumía de que se follaba a cuanta mujer se le pasara por el frente y sólo se casaba porque la rubia era la hija de su jefe y él quería ascender.
Naruto no podía quedar quieto mientras ese rufián juagaba con el corazón de su hermana, así que pidió el cuarto más costoso y lujoso del hotel instaló varias cámaras y contrató a una prostituta. Su plan era invitar anónimamente a Sasuke al cuarto y entonces la prostituta haría presencia y ellos dos follarían ante las cámaras escondidas, así Naruto tendría pruebas de que el Uchiha era un maldito mujeriego y su hermana entraría en razón y se negaría casarse.
Un Sasuke borracho llegó a la habitación, el mensaje anónimo decía que podía disfrutar de todo, así que se dejó caer sobre el sofá y se sirvió una copa de champagne. Mientras que le daba un sorbo, vio a una pelirosa, en lencería, salir del baño, era muy hermosa, de cuerpo voluptuoso, caminaba sensualmente hacia él.
Con la experiencia que Sasuke tenía, sabía que esa mujer era una puta y él no la había contratado, pero fuera quien fuera, estaba agradecido de tan buen regalo, iba a disfrutarlo.
Naruto estaba en su carro, fuera del hotel, y observaba todo lo que pasaba por su laptop. Sasuke era muy predecible, ni corto ni perezoso, apenas vio a Sakura, la prostituta que contrató, se le fue encima y la tocó y besó sin tapujos. Deseaba que Naruko estuviera ahí y viera todo, incluso si eso rompía el corazón de su hermana, ella tenía que ver que su novio y futuro esposo era una porquería, sin embargo, las caricias y besos no eran prueba suficiente. Para desencantar a Naruko, Naruto iba a necesitar más pruebas, necesitaba un video donde Sasuke se follara a la pelirosa.
Naruto siguió observando la pantalla, Sasuke se le acercó el oído a la pelirosa y con una sonrisa le susurró algo al oído, Sakura sonreía con malicia, pero al rato, puso mala cara y se levantó de sus piernas, las cuáles estaba sentada. Confundido, Naruto vio a Sakura desaparecer por el baño, ésta se vistió rápidamente y reapareció donde Sasuke, pero no para seguir con las caricias sino para pasar de él e irse.
Naruto se bajó del carro apurado, su plan no era ese, se fue corriendo hacia la habitación y esperó a Sakura en el corredor, apenas la vio la arrastró hacia un espacio oscuro para saber porqué no hacía su trabajo.
—¿Por qué te vas? ¡Aún no te has acostado con esa rata!
—Ni lo haré, no con lo poco que me pagaste y aunque me pagaras mucho —dijo ella entre molesta e incómoda —. No hago esas cosas…
—¿De qué hablas?
—Averígualo, tú, yo me largo —dijo ella empujándolo a un lado y se fue hacia el ascensor — y no te regreso el dinero.
Naruto resopló enojado, no sabía qué salió mal con su plan, dejó el rincón oscuro para irse, pero se quedó sin aire al ver al Uchiha en medio del corredor. «Mierda, ¿escuchó todo?»
—Eres buen cuñado, contratarme una puta —dijo Sasuke con una sonrisa.
—No dejaré que te cases con mi hermana.
—Lo haré, cuñado.
Naruto odiaba que Sasuke lo llamara “cuñado”, odiaba que ese ser tan rastreo fuera su familiar.
—Pero esa maldita se largó y me dejó bien caliente —Sasuke se sobó la entrepierna al mismo tiempo que caminaba hacia el rubio.
—¿A mí que me importa?
—Tú la contrataste y se fue, así que tú terminas el trabajo… —Sasuke empujó a Naruto contra la pared, se le aproximó loo bastante para que éste le oliera el aliento a alcohol.
Naruto se consideraba bisexual, se había acostado con chicos antes, pero Sasuke era diferente, era el hombre que más le asqueaba y enfermaba, con sólo tener la mano de éste en su hombro lo enloquecía en el mal sentido de la palabra, quería patearlo e irse. Pero entonces un nuevo plan se le vino a la cabeza… «Si me acuesto con él, puedo chantajearlo con el video, de seguro no querrá que nadie se entere que Sasuke, el macho mujeriego se acuesta con chicos… Pero no quiero que me toque… Pero es la única forma de salvar a Naruko».
—Tienes razón, debo terminar el trabajo —dijo Naruto con una sonrisa, trataba de parecer sensual y provocativo en vez de asqueado y molesto.
Sasuke frunció el ceño, el rubio no era tan cooperador, esperaba un golpe, en cambio, éste le sonreía con una sensualidad, que no creía que éste poseía.
—Dime tú si lo hacemos aquí… o en la habitación… —dijo Naruto y restregó su rodilla contra la entrepierna dura del pelinegro.
Sasuke le regresó la sonrisa, no sabía lo que tramaba el rubio, pero iba a seguirle el juego. Lo cogió del mentón bruscamente y lo besó sin advertencia, su lengua entró a su boca de golpe. Naruto no podía creer que estaba besando al que más odiaba, sin embargo, un parte suyo disfrutaba del beso, el pelinegro no era mal besador e incluso le arrebató uno que otro suspiro antes de separarse.
—Esta noche va a ser larga —dijo Sasuke y agarró a Naruto por la nuca y lo llevó a la habitación.
A pesar de que Naruto no le interesaba en nada de lo que Sasuke podía ofrecerle, su cuerpo pensó lo contrario, sintió un cosquilleo en su entrepierna como seguía al otro a la cama. Pensaba que todo iba a ser rápido, después de todo Sasuke estaba borracho y debía madrugar mañana para la boda (algo que el rubio iba a impedir por encima de todo)
—A ver, quítate la ropa —dijo Sasuke a cierta distancia.
Naruto no quería, pensaba salir corriendo, pero la idea de tener a ese rufián en la familia y como esposo de su querida hermana, le hacía aguantar. Se desvistió de la forma más rápida posible, esperando terminar todo de una vez.
—Mmm… Quién iba a decir que mi cuñadito estaba tan bueno —dijo Sasuke mirándolo de arriba abajo —. Aunque aún no estás parado —miró desaprobado que el miembro del rubio siguiera flácido. Eso lo arreglamos, dije, la noche es larga.
Naruto se limitó a darle una mirada de indiferencia y asco.
—¿Qué esperas, cuñadito? Quítame la ropa —dijo Sasuke con media sonrisa.
Sorprendido, Naruto se le acercó, aguatando las ganas de golpeando, le quitó la ropa con prisa y una vez que Sasuke estuvo desnudo, el rubio no pudo evitar abrir la boca de sorpresa y sus mejillas teñirse de rojo violentamente, no podía negar que el miembro de Sasuke estaba grande, y en erección era algo que nunca había visto antes. Si no fuera porque odiaba a Sasuke, le seguro distraería ese miembro largo y grueso en su interior, pensó.
—Espero que no seas tan remilgosa como esa zorra —dijo Sasuke refiriéndose a Sakura —. A ver si tú quieres jugar.
«¿Jugar?» Naruto se estremeció y vio a Sasuke caminar hacia una maleta negra y de ahi sacó una soga.
—Pareces atlético a pesar de ser delgado, supongo que podrás resistir y si no, me vale —dijo Sasuke, golpeaba la soga contra su mano como caminaba hacia el rubio —. Levanta los brazos.
—¿Qué?
—Levanta los brazos —dijo Sasuke y presionó la tosca soga contra su mentón.
Naruto empezaba a imaginar porqué Sakura se largó de ahí y él mismo estaba a tiempo de irse, pero la curiosidad, el orgullo y las ganas de salvar a su hermana de ese desgraciado… Todas esas cosas, lo mantuvieron ahí. Obediente, levantó los brazos, Sasuke encajó la soga en un aro, que estaba en el techo, después ató las manos de Naruto, entonces el rubio quedó expuesto de la siguiente forma: de pie y maniatado por encima de la cabeza.
Sasuke fue a la maleta y sacó un aro y lo puso alrededor de la punta del miembro del rubio, éste sólo pudo sentir molestia, entonces Sasuke empezó a bajar el aro por la longitud, el miembro seguía flácido y sin problemas el aro se ajustó en la base.
—Mmm —Sasuke caminó alrededor de Naruto.
—Ya deja de jugar y cójame —Naruto se sentía humillado en esa pose, odiaba a Sasuke más que nunca.
—No te desesperes —dijo el otro risueño —. Déjame admirar tu piel blanca antes de que torne roja y violeta…
Desconcertado, Naruto vio cómo Sasuke fue a la maleta y sacó una fusta, después caminaba hacia él con un brillo perverso en los orbes negros. Sasuke tiraba de la fusta, era flexible, a simple vista parecía dura. Naruto nunca había hecho nada sadomasoquista, al parecer iba a estrenar con su enemigo.
—Espero que aguantes más que tu hermanita.
—¿Qu… é? —Naruto no podía creer que su adorada hermana hiciera esas cosas, no podía imaginarla en esa pose, antes de que pudiera pensar más, recibió el primer golpe.
De su garganta salió un grito de dolor, entonces recibió otro golpe en el pecho, después Sasuke fue hacia tras y le lanzó otro golpe en la espalda. Era un espectáculo precioso, con cada golpe Sasuke se excitaba más, su miembro estaba tan erecto que líquido preseminal salía de la punta, pero antes de follar al rubio, quería marcarlo, le dio un latigazo en la nalga, tan fuerte que lo dejó rojo.
Después volvió a encararlo, dio leves latigazos contra el miembro de Naruto.
—Mmm, con que te gusta que te peguen, cuñadito —dijo Sasuke y tocó la punta del miembro, que comenzaba a erguirse, con la punta de la fusta.
Naruto resopló enojado, él no se excitaba por nada de lo que le hacía Sasuke, sin embargo, su cuerpo pensaba lo contrario y parecía estimularse con los latigazos. Sasuke cambió el látigo por un vibrador, un poco más pequeño que su miembro y ante la impotencia de Naruto, se lo introdujo por detrás haciendo que vibrara a máxima velocidad.
Naruto ya había probado esos juguetes antes, pero no le gustaba, un pene de goma no era lo mismo que uno real, no se sentía tan bien. Sin embargo, su intención no era sentirse bien a manos de Sasuke. Ahora el pelinegro lo cogió de los cabellos e hizo fuerza y lo tiró hacia abajo hasta ponerlo de rodillas, no tuvo que desatarlo, la cuerda lo tenía bien amarrado, la cuerda podía aumentar a disminuir el largo dependiendo si estaba de pie o arrodillado. Era como si esa habitación era perfecta para los juegos del azabache.
Naruto dio una mirada asesina a Sasuke, estar de rodillas ante él era humillante, y al ver la sonrisa de éste supo lo que quería.
—Vamos, sé que quieres meterlo a tu boca —dijo Sasuke y restregó su erección contra la boca de Naruto.
Al principio cerró la boca con fuerza, pero Sasuke usó más fuerza y empujó el miembro dentro.
—Mmm, a todos le gustan que una buena polla le folle la boca —dijo Sasuke y empezó a entrar y salir ferozmente de la boca del rubio.
Sin siquiera dejarlo respirar, Naruto sentía que se atragantaba, al mismo tiempo su cuerpo se acaloraba gracias al dildo que vibraba en su interior. Sasuke entró su miembro y presionó con fuerza, entonces descargó su leche dentro de la boca del rubio. Naruto contrajo su cuerpo y gimió aún con el miembro en la boca, su propio miembro se acrecentaba mientras que el líquido caliente del mayor bajaba por su garganta.
—Due… le… —balbuceó Naruto cortante, antes no le molesta el aro que Sasuke le puso en su miembro, pero ahora que estaba erecto, el aro lo apretaba tanto que dolía y no lo dejaba correrse.
—¿Quieres correrte? —preguntó Sasuke pellizcando su pezón.
Avergonzado de sentir placer en manos de éste, Naruto asintió, Sasuke le quitó las ataduras y con las piernas débiles, Naruto cayó al suelo.
Sasuke enredó el cabello rubio en sus dedos, jugó con ellos un rato antes de halarlos, así levantó a Naruto del piso y lo tiró a la cama.
—Muéstrame cómo te corres —dijo Sasuke y admiró a un Naruto tan exforzado. El pobre respiraba jadeante con el dildo en su interior y aún con las manos temblorosas y rojas por haber sido atado —. Muéstremelo —Sasuke le quitó el aro del miembro rápidamente haciendo que el rubio lanzara un quejido de dolor y placer.
Nunca se hubiera imaginado que estaría masturbándose para el deleite del ser más odiado, pero Naruto lo hizo, envolvió su miembro palpitante y empezó a subir y bajar la mano, necesitaba correrse, ese dildo entraba y salía de él vibraba tan salvajemente que tocaba su punto especial. Sasuke se relamía con la escena, cogió el miembro flácido por la mamada del rubio, ahora empezaba a erguirse nuevamente por lo que veía.
Ante tanto placer, Naruto iba a correrse, sin embargo, una mano fuerte agarró la suya y le impidió que siguiera tocándose, era Sasuke, éste tenía el miembro duro otra vez y lo flotaba contra el suyo. Naruto se mordió el labio inferior, el miembro de Sasuke contra el suyo era más delirante que su propia mano. El azabache usó la mano libre para sacarle el dildo, metió sus dedos para confirmar que la entrada del de orbes azules estuviera dilatada.
—Veo que te sigue doliendo —dijo Sasuke y frotaba su miembro contra el de Naruto, estaba más duro que nunca —. Te daré placer si me lo pides.
—Vete al demonio.
Sasuke no dijo nada, usó el dildo cubierto de sudor y líquido transparente para pasearlo por el pecho del rubio, Naruto tembló como la punta del juguete rozó su pezón.
—Vamos, di “amo, métamelo”.
Naruto soltó una sonrisa sardónica, Sasuke estaba loco si creía que iba a rebajarse. El azabache introdujo el vibrador dentro de la boca de Naruto, aquello hizo que el rubio se ahogara, luego, llevó su miembro hacia la entrada de éste y empezó a frotar ahí, en la entrada estimulada anteriormente por el juguete.
—Dilo, di que me quieres dentro de ti —decía Sasuke, subía y bajaba su miembro contra la entrada, que pedía a gritos por recibirlo.
«¿Cómo? —Naruto tenía el dildo en la boca, le costaba trabajo decir algo, además no iba a decirlo»
—¿Sabes querido, Naruto? En realidad no me odias a mí sino a tu hermanita —dijo Sasuke agarrándolo de los pelos —. La odias porque ella es la que recibe esto… —dejó de frotar su miembro y presionó la punta en la entrada —. En realidad, quieres que te coja desde el primer dpia, dilo…
La punta de Sasuke opalpitaba contra su entrada, Naruto no aguantaba más y escupió el dildo con dificultad, después…
—Amo…, entra… en mí…
—¿Qué? —fingió asombro.
—Entra en mí, penétrame —Naruto no podía negar el deseo que tenía, necesitaba saciar la calentura, movió las caderas hacia el miembro de Sasuke y e hizo que la punta entrara en él.
Sasuke soltó un gemido, su voz era ronca y masculina, deslizó su miembro en el interior del ojiazul y de ahí en adelante lo embistió ferozmente sin detenerse, los gemidos de placer de Naruto le decía que llegaba hasta su punto. El rubio nunca había sido cogido de esa forma, aquello era nuevo y peligroso, temía terminar siendo un adicto, además, hacerlo con alguien que despreciaba aumentaba el morbo, no había amor ni compromiso, era sexo puro y salvaje.
Sasuke tenía razón, él quería que lo cogiera, que entrara en él en el primer día que su hermana lo presentó. Había pensado que el pelinegro era tan atractivo y varonil, con su simple voz lo estimulaba. Y ahora su fantasía era realidad, Sasuke lo penetraba de una manera increíble, su miembro salía y entraba y lo atravesaba hasta el fondo, Naruto no podía hacer más que rendirse y aferrarse a las sábanas, aún le quedaba una parte que le daba vergüenza por caer de esa forma, hundía el rostro contra la almohada para evitar gemir de esa forma., pero Sasuke se lo hacía difícil, le paseaba las manos por el pecho, le volvía a pellizcar los pezones, ya tan sensibles, y luego agarraba su erección y masajeaba bruscamente en busca de que se viniera.
Con cada estocada hasta su punto especial, con cada masaje por su miembro, de la base a la punta… Naruto arrojó un alarido de placer a tiempo que su cuerpo se estremecía bajo las embestidas del azabache, contrajo los nervios y expulsó su esencia, sin embargo el climas aún no era definitivo, mientras que el orgasmo lo invadía de pies a cabeza, Sasuke seguía bombardeándolo, parecía insacibale, sacaba y entraba su miembro sin parar ni un momento.
Naruto extasiado y consternado, alcanzó a ver la cara de su pesadilla, las mejillas pálidas del pelinegro se habían tornado rojas y jadeaba con la respiracuio nagitada, entonces no pudo verlo más, Sasuke llevó la cabeza hacia atrpás y detuvo su miembro en el interior del rubio, iba a llegar…
—Ni se… te ocurra… correrte… dentro… —amenazó Naruto.
—¿Crees que voy a dar la razón? —dijo Sasuke con burla, retiró su miembro y volvió a meterlo abruptamente, era la última estocada, tan fuerte y duro contera el punto de Naruto, los dos gimotearon de placer, Naruto sentía que iba a venirse otra vez mientras que Sasuke dejaba salir su esencia, para disgusto y placer del rubio, la esencia se dejó en su interior.
—Te dije… que no… —gimió Naruto enojado, no era que pudiera preñarse, era un hombre después de todo, pero aquello era un acto tan personal, golpeó a sauske en el pecho para que saliera de él de una vez por todas, pero éste no se movió hasta que quiso.
Los dos se miraron el silencio, los ojso azules estaban aguados por el placer, odio, dolor, había tantos sentimientos y Sasuke ya no tenía esa sonrisa sarcástica, ahora estaba impasible, estoico.
—Tus juegos, eres un enfermo —dijo Naruto más seguro que nunca, no iba a dejar que ese monstruo se casar con su querida Naruko.
—¿Cómo piensas impedirlo? Mañana entregarás el anillo en el altar, cuñadito.
Naruto miró por todas partes, trató de recordar dónde carajos dejó la cámara, entonces vio el florero, como un espía había instalado una cámara entre las flores de plástico.
—Ya verás —dijo Naruto sonriente, una vez que saliera de su embrollo, iría a por el video, lo demostraría a Sasuke y éste no se casaría con su hermana porque si no, mostraría a todos que él era un marica.
Follar al hermano de la novia era un escándalo, follar a un hombre era un escándalo mayor. Sasuke Uchiha podría perder mucho si saliera a la luz que cogió a un hombre. Naruto ensanchó su sonrisa al sentirse ganador.
Sasuke sonrió como si supiera lo que pensaba, sacó su miembro de su interior haciendo que el rubio lanzara un quejido, ya que se había olvidado de ¡aquello” adentro. Sasuke lo observó un rato, los dos intercambiaban sonrisas de una forma rara. Naruto trató de levantarse, un poco de la esencia de Sasuke resbaló entre sus glúteos y piernas, para ir hacia el florero, sin embargo, el ojinegro se le adelantó y quitó la cámara de las flores.
—¿Cómo? —congelado, Naruto no sabía cómo descubrió la cámara.
—Verás, una zorra ama más el dinero que el sexo —dijo Sasuke conectando el video al televisor del cuarto —. Sakura, la putita que contrataste me contó todo a cambio de que le pagara el triple…
—Maldita…
—Cuando te vi en el corredor no sabía qué ibas a hacer, y cuando te me ofreciste te seguí el juego… Ahora he llegado a la conclusión de lo que harías con el video… Arruinar mi imagen, dejarme como un marica… Creo que el que perdería eres tú.
—¿Yo? Mis padres ya saben de mis andadas —dijo Naruto tratando de perder la compostura.
De repente por el televisor apareció el video de Naruto gimiendo bajo los brazos de Sasuke, era realmente vergonzoso, el rubio pudo ver en HD cómo el otro lo flagelaba y le penetraba con el vibrador.
—Es cierto que mi imagen se arruinaría mucho, pero igual me vale lo que mi familia o amigos piensen de mí… —dijo Sasuke subiéndole el volumen para que el otro escuchar cómo gritaba hacía un rato por ser cogido —. Pero a ti sí te importa lo que piensa una personita… Naruko… Si quieres yo mismo le envío esto…
—No —gritó Naruto asustado —. Si ella ve esto, le rompería e corazón… Ella te ama… y… yo la amo… si ella ve esto, me odiará por siempre.
—Entonces tenemos claro que esta noche ha sido una buena follada y que mañana me caso con tu hermana, cuñadito.
A Naruto todo le salió por la culata, no sólo el desgraciado iba a casarse con su hermana sin que pudiera evitarlo sino que ahora estaba en manos de Sasuke… El pelinegro era su dueño, podía hacerle lo que quisiera mientras que tuviera el video en su control.
Sasuke no pudo evitar pensar que era realmente atractivo un Naruto tan sumiso, el Uzumaki que siempre lo había despreciado y lo había visto por encima de sus narices, no sólo gimió como una perra posesa para él esa noche sino que ahora estaba bajo su poder. Su miembro empezó a ponerse nuevamente, esa noche y las noches futuras iban a ser largas… Jugaría con el rubio cuando quisiera hasta aburrirse… Sólo esperaba no chocarse con eso llamado amor.
Estoy segura que puedo alarga esta historia, Naruto está obsesionado con su hermana o la usa de excusa para estar con Sasuke y Sasuke sólo quiere follarlo, porque es un ninfónmano o secretamente también tendrá sentimientos por el lrubio... En serio puedo alargar esto, pero por el momento lo dejamos así :P Espero que les haya gustado más que a mí en haberlo escrito Drug ID