-Hola.-murmuro a través de una sonrisa Kyungsoo al verme entrar a su habitación. Kyungsoo no estaba igual. Su cabello desapareció como si nada y alrededor de sus ojos inundaban unas moradas ojeras, el seguía siendo hermoso para mí. Noto mi silencio y volvió a hablar:
-¿Estoy horrible, no?-dijo liberando una risa que odie.
-Horrible fue no acompañarte en esto, tu no necesitas verte hermoso para nadie…-mi voz sonaba firme.-yo soy el único que te puede ver hermoso, tu eres mío Kyungsoo. Los ojos gigantes de Kyungsoo se abrieron ante mi respuesta y sus mejillas se sonrojaron.
-Eres idiota Kim Jongin.-
-Ya lo sé, pero me amas igual.-sonreí y el bufo.
-Kai… Hazme un favor…-
-Dime.-
-Coloca el cd de Yiruma en el grabador que está en la mesa de luz, pon la pista 3.-su voz sonaba débil.
Hice caso a Kyungsoo y una melodía de piano empezó a sonar, totalmente cegadora al punto de decir que era hermosa.
-¿Qué es esto Kyungsoo?-
-Kiss The Rain…es para ti.- mordió su labio inferior mientras me dirigía una mirada totalmente adorable.
-Gra..Gracias, es hermosa.-murmure tomando su mano.
-Estas llorando Kai…-rio por lo bajo y yo me tape la cara.- No te tapes tonto, ven aquí…- Kyungsoo retiro mis manos de mi cara y puso las suyas sobre mis mejillas para darme un beso.- Te amo y mucho.-
-No…-intente secarme las lágrimas en vano y volví a sentarme en el banco al lado de la camilla de Kyungsoo.
-Por primera vez creo que “lo sientes”…-
-Tu eres todo lo que siento.-dije entrecortadamente entre lágrimas y me acerque para besarlo nuevamente en sus labios.- Nunca me dejes Kyungsoo…-susurre.
-Déjame que te explique algo Kai…-sonrió.
-No me des sermones por favor…-el solo bufo.
-Capaz nuestros cuerpos no estén unidos, sí, pero son nuestras almas las que se aman. El cuerpo es solo algo físico, el alma es la razón para que funcione, mientras mi alma este sin ti te esperare… Para luego unirnos de nuevo y darle un sentido a todo esto, una razón nuevamente… Nuestras almas serán las que se amen, eres mi razón Jongin, te amo.- mis brazos solo se dirigieron hacia el contacto con el cuerpo de Kyungsoo, lo abrase con toda la maldita fuerza que tenía mientras daba besos por toda su cara y cuello.
-No hables como si te fueras a morir Kyungsoo…-dije desesperado mientras sostenía sus hombros.
-Cuando tú hablabas así, yo no podía quejarme…-
-Pero en ese momento, tú eras un cero a la izquierda, cállate.-le di otro beso.
*
Kyungsoo respondía bien al tratamiento, me hacía bien verlo sonreír. Los médicos me decían que si seguía así no tendrían que tenerlo tan controlado y que podría compartir habitación conmigo nuevamente.
7 de enero:
Kyungsoo me canto en cama “Baby Don’t Cry”. Era cierto lo de su canción de “La serenita”. Su voz me hizo llorar y todavía más la tos de cinco minutos luego de cantarla.
10 de enero:
Kyungsoo me pidió nuevamente que ponga Kiss the Rain, luego canto “My lady”, nos besamos por un largo trascurso, si no estuviera débil le hubiera hecho el amor.
12 de enero:
La enfermera no me permitió ver a Kyungsoo y no pude dormir, hoy me había prometido cantar “Angel”… odio a todos.
20 de enero:
Kyungsoo no está bien, dejare de escribir.
21 de enero:
No pude, simplemente estoy aquí para decir el dolor que me causa ver a Kyungsoo caerse, está dormido la mayor parte del día, incluso cuando le hablo sus ojos se cierran de repente… pero después de todo sigue dirigiéndome esa sonrisa que amo. Aunque odio que me ignore… te amo idiota.
25 de enero:
Kyungsoo solo duerme y yo no puedo dormir sosteniendo su mano toda la fría noche.
-Parezco “La Bella Durmiente”…-murmuro débil Kyungsoo entre una risa.
-No… tu eres real… además no se me da de ser el príncipe azul.-
-Eso ya lo sabía…-tosió.-eres más bien un simio negro o el príncipe negro…
-Siempre tan gracioso…-dije con sarcasmo.
-Tengo mucho sueño últimamente Kai… incluso me acabo de levantar y quiero dormir nuevamente…-
-Bue..Bueno…-
-No te enojes… perdón.-
-No estoy enojado, solo que… es difícil Kyungsoo, para mi…-
-¿Qué te es difícil?-
-No lo diré…-
-Verme morir cada día mas…-sus palabras hicieron que mi interior se diera un giro brusco.
-Tu no estas muriendo…-lo detuve.
-Mi cuerpo y mente si.-
Mas lagrimas corrieron sin parar de mis ojos, la música seguía sonando y yo tenía las inevitables ganas de golpear a alguien… ¿Porque la vida me preparaba para sufrir siempre? ¿Lo merezco por estúpido?
-Kai debes retirarte.-dijo la enfermera.- Kyungsoo debe descansar… lo siento.
-Entiendo…-asentí y Kyungsoo se aferró a mi mano.- ¿Qué pasa?-le pregunte.
-Te amo.-murmuro, sus ojos estaban tan abiertos que me daban ganas de besarlos.
-Yo también, todo el tiempo.-me incline a besarle su frente. Note la incomodidad de la enfermera y me retire dejándolo otro día más sin mí. Nunca debí haber dicho que no quería compartir una habitación con él, ahora ya ni siquiera puedo compartir mi vida junto a su lado.
El día parecía pasar lento estando solo en una habitación y a Kyungsoo se le pasaban rápidas las horas de vida… Quisiera decir “Cuando se recupere podremos…” pero ahora parece todo lejos de mi alcance aunque Kyungsoo no puede dejarme, porque él me dijo que me ama, el me ama y yo lo amo a él, cuando uno ama a alguien no lo deja solo, porque su corazón le pertenece, Kyungsoo debe quedarse conmigo aquí en la tierra, al lado mío, en la misma habitación, esperando por una larga recuperación para luego marcharnos a amarnos lejos de aquí. Yo seguiré a Kyungsoo a donde sea.
*
-Pororo… despierta… Pororo…-le susurraba a Kyungsoo mientras acariciaba su rostro dormido. Sus ojos se abrieron lentamente y libero un pequeño bostezo.
-Kai…-murmuro.- ¿Qué haces tan temprano?
-Yo no diría que es temprano… son las cinco de la tarde pero si tú dices…-
-Perdón…-tomo su cabeza.- Perdóname Kai, soy un haragán.-reí.
-Jaja, no…-acaricie de nuevo su rostro.-Es mejor que yo no te moleste.
-Kai…-inclino su cabeza triste.-siento que mil ajugas recorren todo mi cuerpo, quisiera terminar con esto de una buena vez…
-¿A qué te refieres?
-Dejar este lugar y morir en mi casa…-sus ojos se llenaron de lágrimas.- Quisiera poder terminar mi vida tranquilo sin tantas ajugas, no creo poder sobrevivir Kai, siento mi cuerpo peor cada vez.
-Tú no te puede ir Kyungsoo, y tu NO MORIRAS.
-Pero Kai…-lo interrumpí poniendo un dedo sobre sus labios.
-Mientras yo este contigo, procurare que nada te ocurra… no morirás hasta que yo muera, los dos estaremos llenos de canas y primero haríamos el amor mil veces antes.
-Kai estas llorando…-
Me di cuenta que Kyungsoo tenía razón, era un estúpido al intentar demostrarle una posición fuerte si después lloraba como un idiota, me seque las lágrimas con la ropa y me dirigí hacia su rostro para depositar un beso en sus labios, Kyungsoo respondió a él, sus labios estaban muy fríos.
-¿Me llevas al parque?-murmuro.
-Estas definitivamente mal de la cabeza.-reí sarcásticamente.
-Hay cosa que quiero hacer antes de morir, me gustaría que me acompañaras al parque o tendré que arrastrarme por el piso hasta allí…-
-Ni en sueños Kyungsoo… no estas apto para salir ni siquiera al café del hospital.-
Me puso unos ojos de cachorrito.
-Por favor Kai… Te amo, llévame al parque…-Oír su voz como si me estuviera suplicando la vida me partió al medio y tome la sillas de ruedas.- Gracias mi amor.-quería golpearlo cuando dijo eso, ya que estaba jugando pero también quería besarlo de una manera destructiva.
-Ven que te ayudo…-pase mi brazo sobre su hombro para apoyarlo sobre la silla de ruedas, en eso Kyungsoo toma de mi rostro y me da un beso en los labios.
-Perdóname Kai, capaz este loco enserio pero lo necesito…-
Lleve a Kyungsoo hasta el parque del hospital, donde algunas veces habíamos compartido momentos juntos, donde lo oí cantar por primera vez, donde había observado lo hermoso que era.
-Es bello sentir el aire fresco… ¿No crees?- me sonrió.
Se quedó concentrado mirando al cielo nublado y cerro sus ojos. Su voz empezó a cantar.
-…Dan hanbeonman ni yeopeseo
Bareul majchwo georeo bogo pa
Hanbeon ttak hanbeon man yo (Angel)-
El todavía seguía con sus ojos cerrados y me aproveche para avanzar como desprevenido, puse mis manos sobre sus ojos y bese su cuello, luego fui avanzando hasta su boca y el soltó una pequeña risa.
-Kai… eres un tonto…-siguió riendo y yo volví a darle besos en su boca, luego me di vuelta al frente de él, todavía con mis manos sobre sus ojos y cuando estuve bien cerca las saque. Kyungsoo me miro sorprendido y yo lo abrase poniendo mi cabeza sobre su hombro.
-Te amo.-susurre en su oído. El dio leves palmadas en mi espalda.
-Yo te amo más… -note como depósito un beso en mi cabello y luego me levante para besar nuevamente sus labios.
Volvimos a la habitación donde la enferma empezó a gritarme mientras me daba un sermón sobre que Kyungsoo no podía salir, que su estado no se lo permitía y que ahora podría agarrarle una neumonía por mi culpa (Kyungsoo tenía peores cosas que esas). Fingí que la escuchaba hasta que acabo y me termino echando de la habitación.
Más tarde me lleve la noticia que iban a operarlo de nuevo.
*
-Kai…Kai…despierta.- oí la voz de Lizzy la enfermera.-Aquí tienes tu cena, cómetela por favor.
-¿Kyungsoo?-su cara parecía angustiada ante mi pregunta.- ¿Cómo está el?-
-Mira Kai… está respondiendo a la operación de hace unas horas, está en terapia intensiva…-
-¿Cómo está respondiendo?-
-Kai…-la interrumpí.
-Solo dime como mierda está respondiendo…-
-No muy bien… Pero debes pensar que la operación es reciente…-
-Quiero verlo.- mi voz sonaba firme.
-No puedes, te dije está en terapia intensiva, ahora no se permiten visitas…-
-Lizzy yo lo amo... necesito verlo.-
-No Kai, mira dentro de dos horas veré si puedo hacer que pases y te aviso, pero por favor ahora déjalo, además debe descansar…- asentí molesto y ella se retiró.
Espere hora y media a Lizzy, pero no llegaba, estaba desesperado por verlo. Entonces me decidí hacerlo por mis propios medios. Me quite el camisón del hospital para ponerme ropa normal así pasaba desapercibido.
Subí a la planta alta del hospital y apresurado observaba cada cartel de las habitaciones… “¿Dónde estaría Kyungsoo?” Por fin había encontrado la habitación indicada. Mire de reojo por la pequeña ventana de la puerta y ahí se hallaba… “Mi Kyungsoo”, débil, conectado a máquinas y con una máscara de aire. Mi corazón se hacía pedazos al verlo así, mi instinto solo quería abrazarlo y dejar besos por toda su cara. Entre rápido observando primero que no haya nadie, él estaba dormido… tome su mano dando leves caricias y luego con lágrimas que me nublaban la vista acerque mi cara hacia su rostro y deposite un beso en su frente. “Te amo pororo”
No sé cuánto tiempo paso, quizá una hora y Kyungsoo abrió sus ojos…
-Kyungsoo…-murmure y el sonrió por detrás de la máscara de aire.- ¿Cómo estás? Casi me quedo dormido junto a ti…-reí.
-Te amo…-pronuncio débilmente de su boca.- Te amo mucho.
-Yo también te amo… pero no te me pongas cursi, te pregunte como te sentías.-
-Kai… hazme una promesa por favor…-
-¿Qué? Kyungsoo no me hagas enojar, no te vas a morir.- le dirigí una mirada de malos amigos.
-Se feliz…-sonrió.- prométeme que serás feliz.
-Yo te prometo que seré feliz mientras tu estés conmigo…-me costaba decirlo.- pues tu eres mi felicidad…-Kyungsoo puso sus ojos en blanco y yo bufe furioso.
-He logrado que te conviertas en un poeta cuando hace apenas unos meses eras un negro del estanque…-
-No estoy jugando Kyungsoo.-
-Kai… ¿podrías…? ¿Besarme?- sus mejillas se sonrojaron a pesar de estar demasiado blanco.
-Te iba a besar de todos modos tonto.- me acerque a Kyungsoo, retire su máscara para tomar de su barbilla.- Quédate conmigo.- susurre rozando sus labios y luego lo bese, lo bese como si fuera una pequeño cofre de cristal, lo bese como si fuera la última vez que lo besara, lo bese soltándolo y dándole pequeños besos, bajando hasta su mandíbula, hasta su cuello, depositando en el todo lo que podía reflejar mi estúpida alma… luego el poso su palma sobre mi mejilla derecha y me miro detenidamente a los ojos mientras hacia esa hermosa sonrisa suya.
-Adiós Jongin.-
-No me dejes.- murmure débil sosteniendo su mano.- No puedes dejarme, eres un idiota.- mis lágrimas caían cada vez más. De sus ojos broto una lágrima y una pequeña sonrisa de costado iluminó su rostro. Me miraba con sus ojos dificultosamente entreabiertos, su dedo índice dio un golpe leve en mi mano que provoco que mi piel se erizara, su pecho cada vez parecía más débil al respirar y sus ojos se cerraban hasta el punto de no abrirlos más. Tome su mano con todas las fuerzas y no sabía que palabras salían de mi boca a los gritos.
Los enfermeros tomaron de mis brazos y me quitaron del lado de Kyungsoo, solo podía oír un sonido agudo que pitaba en mis oídos como fuego…
“Kyungsoo se había ido.”
“Kyungsoo no podía haberse ido.”
“Kyungsoo ¿Por qué?”
“Tú eres mi razón Jongin.”
“Kyungsoo no me dejes solo, no me dejes.”
“Se fue.”
*
Era estúpido, era odioso, ver como se llevaban a la persona que amas en la puta tierra como si nada, ver cómo te lo quitaban de tu lado… para siempre. Porque así era, me lo habían quitado para siempre, quizás ellos nunca sepan que hijo alguna vez fue mío y que yo siempre seré suyo.
*
(Narra 3ra persona)
Kai al paso de la semana pidió estrictamente que dejaran de darle sus medicaciones, podía hacerlo claro, ya que era mayor pero no lo hacía porque sí. El hecho de perder a Kyungsoo lo había destrozado por completo si alguna vez ya lo hubiera estado, ese corazón humano que latía en su interior para el no existía, solo quería morir… y lo estaba logrando. Comía hasta sentir que no le entraba nada más por la boca, azucares por doquier, le importaba una mierda lo que le digan los médicos. El dolor de Kai era fuera de su organismo era un dolor existencial de ese punto de sentir que no vales nada, de que te quitaron el corazón con una pinza por la garganta, que te lo pisaron al frente de tus ojos para convertirte en nada, que te quitaron el alma. Pasaba horas mirando a través de la ventana recordando la sonrisa de Kyungsoo, sus mejillas coloradas y su cara de pororo estúpidamente tierna. “Razón” era lo único que susurraba al ver al horizonte. Sentía que cada musculo le fallaba, al igual que los órganos, estaba completamente vacío, los vómitos se hicieron frecuentes ese día y Kai se vio obligado a quedarse acostado porque ni siquiera podía moverse. Los médicos ya no veían esperanza para él, sabían lo que él quería en realidad.
-Lizzy hay que decirle al niño que debe irse de aquí si no sigue el tratamiento, no podemos tener un paciente si no hace nada…-dijo una de las enfermeras atrás de la puerta de la habitación.
-Ya lo sé… es que Kai es así a veces, muy testarudo… yo lo conozco.- dijo nerviosa la enfermera Lizzy, mordió su labio inferior y siguió hablando.- pero… bueno, vamos a verlo.
-Parece que está durmiendo.-dijo la otra mirando por la pequeña ventanita de la puerta.- entremos.
Era demasiado tarde cuando ellas habían entrado. En la habitación Kai se encontraba tumbado sobre su cama con los ojos cerrados, no estaba durmiendo, su no-respiración lo delataba, estaba muerto. La enfermera soltó un grito ahogado y llamo a la otra para que viera al cuerpo, al acercarse noto que en una de las manos del chico su puño se encontraba cerrado agarrando firmemente un papel, la enfermera lo tomo temblando. El papel más bien era un envoltorio de caramelo y llevaba escrito en el algo con una borrosa caligrafía, la piel de la enfermera se erizo al leerlo: “Dejadme junto a quien es mi vida, capaz este junto a el ahora, mi única razón… Kyungsoo.”
CARTA DE DO KYUNGSOO A KIM JONGIN 24/12/13: “Algún día nos volveremos a ver, lo prometo. No cuentes el tiempo sin mí. Vívelo contigo. No me esperes, yo te esperare a ti. Allí arriba te encontrare y te amare como el primer día hasta el fin. Kiss the rain Jongin.”
FIN.
