DongHae estaba dándole un fuerte y doloroso abrazo, ante la mirada confundida de KyuHyun y la furiosa de Jessica.
-¡Hyung, hace mucho tiempo que no sé nada de ti!-le reclamó haciendo un puchero que le pareció idiota a KyuHyun, que rodó los ojos con molestia.
-Lo sé Hae-dijo JongWoon logrando soltarse del agarre de su amigo- ¿Qué haces en Seúl?
-Ahora trabajo aquí-dijo sonriente- ¿a qué venias tú al hospital? ¿Estás enfermo?-preguntó con expresión preocupada.
-Me trajo a consulta-dijo KyuHyun llamando la atención de DongHae y JongWoon- estoy esperando a su hijo.
-¡Oh dios!-gritaron Hae y Jessica con la misma cara de sorpresa absoluta.
JongWoon suspiró con cansancio antes de volver a tomar la mano de KyuHyun entre una de las suyas, jalándolo suavemente hacia él.
-¡No puedo creerlo!-dijo Jessica, saliendo de su shock, mirando con furia a KyuHyun, ya que él había conseguido que lo ella jamás logro al lado de Kim.
-¿Cuándo se casaron?-preguntó Hae acercándose sonrientemente a KyuHyun extendiendo su mano- Lee DongHae.
-No estamos casados Hae- le informo JongWoon algo incomodo de tener que hablar de eso en el hospital-¿te parece si vamos a desayunar a algún lado?
-Tengo que volver a mi casa- dijo KyuHyun- tengo clases hoy en la tarde y debo preparar algunas cosas.
-¡Claro hyung!- dijo Hae-¿Cuánto tienes…?
-Cho KyuHyun- dijo de forma algo cortante, la situación no le agradaba en lo más mínimo, como para ponerse a fingir amabilidad en ese momento-dos meses.
-Vamos- dijo JongWoon jalando a Kyu y a Hae hacia el estacionamiento.
-¿Aun conservas tu deportivo?- preguntó viendo el lujoso auto estacionado enfrente de ellos.
-Sí, ¿traes tu auto?
-Claro, ¿crees que andaría por las calles caminando?-le dijo sonriéndole-¿nos vemos en el restaurant de siempre?
-Claro-le dijo y comenzó a caminar hacia su auto, abriéndole la puerta de KyuHyun, que entró de mala gana.
Arrancó el auto, el ambiente entre ambos era de completo y tenso silencio, hasta que JongWoon cayó en cuenta de que no recordaba donde vivía KyuHyun.
-Mocoso-le llamó, oyendo por toda respuesta un gruñido-¿Cómo llego a tu casa?
-¡Ni eso recuerdas!-le gritó molesto, mientras sus ojos se llenaban de lágrimas, asustando al mayor que nunca había sido bueno consolando.
-P-perdón-murmuró- No llores Kyu, ya perdóname-le dijo viendo que el menor comenzaba a sollozar, limpiándose con fuerza las lágrimas que bajaban por sus mejillas.
-Ya cállate y conduce por esta calle-le dijo señalando una calle enfrente de ellos.
Cuando por fin llegaron a la casa donde vivía KyuHyun, este bajo del auto con rapidez entrando sin darle a JongWoon tiempo de absolutamente nada.
-¿Qué paso Kyu?-le preguntó SungMin que se encontraba limpiando la sala de la casa, con solo divisar las lágrimas en los ojos del menor, su instinto materno y asesino salió a flote, abriendo la puerta viendo que JongWoon aun no se iba-¡¿QUÉ LE HICISTE A MI BEBÉ KYU?!
JongWoon levantó sus manos alejándolas del volante, bajando la ventana.
-Solo le pregunte la dirección, y de repente comenzó a llorar-dijo apresuradamente, ya que el rubio tenía pinta de quererlo matar.
SungMin suspiró frustrado llevando sus manos hacia su cabello, antes de volver su vista a JongWoon que se encogió en su asiento.
-Lárgate antes de que enserio te termine matando-le dijo con los ojos cerrados.
JongWoon no lo pensó dos veces antes de prender nuevamente el auto, yéndose de ahí, para ir directamente a un viejo restaurante chino donde él y DongHae, cuando llegó bajo del auto, entrando al lugar viendo rápidamente al menor sentado en una de las mesas más alejadas, caminó hasta él sentándose.
-¿Paso algo malo?-preguntó al ver la expresión que tenia su hyung.
-No…bueno si, hice llorar a KyuHyun-dijo rascándose la nuca.
-¿Por qué?, ¿le dijiste algo respecto a su peso?, una vez le dije a mi hermano que estaba algo pasado de kilitos y no me hablo por tres semanas, creo que todo el mundo tiene problemas con eso-dijo Hae haciendo una tierna mueca.
-No, le pregunte su dirección-dijo JongWoon, haciendo nota de no mencionar el peso del menor nunca de los jamases.
-¿El que tú vallas a ser padre es resultado de una aventura de esas que te fascina tener?-le preguntó el menor colocándose de pronto completamente serio.
JongWoon sintió un nudo formarse en su garganta, cuando su celular sonó, agradeció a todas las deidades que recordó y tomó la llamada.
-¿Dónde estás?-preguntó SiWon-se supondría que hoy cuidarías a SunHee para que yo y HeeChul pudiéramos salir a comer fuera.
JongWoon se pegó en la frente con su otra mano, renegando de su olvido, mientras que DongHae no le quitaba la mirada de encima.
-Voy para el departamento ahora mismo-dijo y colgó la llamada- lo siento mucho Hae, pero olvide que le había prometido a SiWon que cuidaría a su hija-le dijo levantándose.
-No importa hyung-le dijo resoplando- pero eso si, no te salvaras de mi interrogatorio-le advirtió entrecerrando sus ojos.
Con KyuHyun
Se encontraba en su cama, cubierto por las sabanas mientras sus manos se paseaban lentamente por su apenas perceptible vientre, acariciándolo con cuidado y cariño.
-Tu appa es un idiota-le dijo a su bebé-pero es muy guapo, pero no como yo, definitivamente serás el bebé más hermoso de todo el mundo-le dijo sonriendo bobamente.
-¿Kyu estas bien?-preguntó SungMin al otro lado de la puerta con expresión preocupada.
-Si hyung-dijo sentándose en la cama, al tiempo que la puerta se abría dejando entrar no solo a SungMin sino también a YunHo.
-Vamos por un helado-dijo el mayor sonriéndole, y no hubo que decir más para ver a KyuHyun casi corriendo al auto del mayor para ir por su helado.
Con JongWoon
Llegó casi corriendo al departamento, siendo rápidamente recibido por un molesto HeeChul que le entregó en brazos a la pequeña SunHee que estaba jugando con un peluche de gatito.
-Mas te vale cuidarla bien JongWoon, porque si le veo el más mínimo rasguño a mi bebé, te juro que no me importara dejar a tu hijo huérfano-le advirtió HeeChul jalando a SiWon para salir del departamento.
-Tu Omma tiene un pésimo carácter-le dijo Jong a la pequeña que comenzó a reír alegre en los brazos de su tío.
-¿quieres un helado?-le preguntó oyendo un ¡SÍ!, de parte de la pequeña que solía hablar mucho- bien vamos-le dijo saliendo del departamento con la pequeña, la heladería no estaba muy lejos del departamento, y caminar no le caería nada mal.
Cuando llegó a la heladería pidió un cono de chocolate y una pequeña cuchara y se sentó en una de las mesas que había en el lugar acomodando a la pequeña entre sus piernas dándole pequeñas cucharadas del helado.
-¿Rico?-le preguntó viéndole el rostro manchado de chocolate, sonrió y cogió una servilleta limpiándole la carita.
-¿Qué vas a querer Kyu?-le preguntó YunHo estando parado frente a la caja registradora, mientras el menor veía el enorme y sutido menú, que tenían.
-Quiero un titan, con vainilla, chocolate, nuez, pistacho y aguacate-dijo sonriente.
Tanto la chica que atendía como YunHo lo miraron como si fuera alguna clase de bicho extraño, la chica asintió y comenzó a preparar el pedido.
La mirada de Kyu comenzó a divagar por el local, no era un lugar muy grande pero si resultaba acogedor, su mirada se detuvo en la mesa pegada a la ventana donde se encontraba JongWoon con una niña en brazos dándole helado con una cucharita, y por mas que quisiera haberse molestado ante aquella escena, no pudo le resulto odiosamente adorable, sobre todo al ver la sonrisa boba e idiota que adornaba los labios del padre de su hijo.
-Imbécil-murmuró sin quitarle la vista de encima.
-¿Quién?-preguntó SungMin llegando hasta ellos.
-Nadie- dijo volteando a ver al rubio que levantó una ceja no muy convencido-¿YoungWoon irá a casa esta noche?-preguntó.
-Sí, ¿por qué?
-Preguntaba para saber si iba a necesitar los tapones de oídos y la música lo más fuerte que pueda-le dijo sonriendo con malicia al ver el sonrojo intenso que atacó el rostro del mayor.
-Solo te salvas de mi enojo, por el pequeño que estas cargando-le dijo frunciendo el ceño, aun sonrojado, al tiempo que YunHo se volvía hacia ellos entregándoles sus helados.
-¿Por qué estas tan rojo, KyuHyun que le dijiste?-le dijo frunciendo un poco el ceño.
-¿Por qué tengo que ser yo quien lo haya hecho sonrojar?, digo yo sé que soy increíblemente sexy y todo, pero por favor, soy hombre embarazado, no puedo con un tercero ahora-les dijo sonriendo antes de llevar a sus labios una enorme cuchara llena de helado.