A la luz de la luna
Joseon siempre ha sido uno de los países más tranquilos de toda Asia, pero a la vez el más invadido, provocando asi que sus habitantes tengan que aprender a “defenderse con sus propias manos”.
El mejor arquero… el mejor espadachín, los mejores amigos…con diferentes edades pero aun asi no les molesta. El protector de la nación, corazón dulce, mirada profunda; algunos de sus enemigos dicen que mirar sus ojos negros antes de la batalla es presagiar el destino final de sus vinas “sus ojos son la propia oscuridad” eso dicen. El brazo de la ley del Rey, su protector; sarcástico, imparable, inclemente, implacable… “es un honor morir en su espada” todos afirman.
Cuando fue que pasaron de ser amigos, Hyung y Donsaeng, maestro y aprendiz… cuanto para convertirse en amantes.
La orden está dada… “es la orden de tu Rey… debes obedecer… lo quiero muerto hoy en la noche… Siwon verificará que todo salga de acuerdo a mis deseos”; cuanto daría por desobedecer y desaparecer ahora mismo con su amado… “asi será”, pero no hay elección.
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“Te ayudare a escapar”
“Crees que lo haría”
“Serás capaz de clavar tu espada en su corazón”
“Ahora mismo a eso iré… solo déjanos a solas”
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La noche a caído una vez más, es fría como cada noche en este lugar… es el mismo escenario cada noche; las mismas flechas siendo lanzadas al mismo punto por la misma persona “la practica hace al maestro” siempre ha pensado de esa manera.
Pero esa noche era diferente a las otras y el joven de orbes oscuros lo sabía… claro que lo sabía, la luna se lo decía claramente.
“Estas aquí” una flecha…
“Tú también” colocado a su espalda la misma que sus manos han recorrido muchas veces…
“Te esperaba” otra flecha “Hoy es la última vez”
“Aun si vas al infierno creo que ahí estaría… no le llames ultima vez” su cintura la misma que sus manos apresaron en múltiples ocasiones… como ahora…
“Que romántico” una pequeña risa… otra flecha “Es la última” no se atreve a lanzarla… pero lo hace y es la primera en toda su vida que no toca el blanco como las demás “supongo que por ser la última vez” se desprende de todo su arsenal para mirar al de su espalda.
“Sigues siendo tan bello como la primera vez que te vi” acaricia sus mejillas
“Eso fue hace veinte años” se acerca a sus labios pero no los besa “Se enojara el Rey Sungmin si le robo a su amado una vez más”
“El único que ha robado algo ha sido el” acortar la distancia para él no fue difícil…
Disfrutar de sus labios es el mejor elixir que ha probado en su vida… lo perderá por una obsesión, por el capricho de uno, solo porque se “enamoro de el”… si pudiera matar al maldito del Rey podría ser feliz con su gran amor… pero él no dejaría que un amigo llorara la perdida de alguien que no ve más allá de sus narices… es más fácil morir con su amor que encargarse del intruso.
La luna brilla más que otras noches… sus rayos están sobre los cuerpos que se adoran sobre la yerba. Hincados sobre ella el más alto suelta el cabello negro de Yesung… es largo, liso y le encanta… más como su flequillo intenta ocultar sus hermosos ojos negros… el frio hace que las mejillas del mayor se sonrojen por el frio, el otro las besa para mantener el calor en ellas.
“Siempre has sido tan cálido” Revuelve su cabello color chocolate “Mi hermoso KyuKyu”
“Odio que me llames asi” los dos ríen “Solo contigo soy asi” Dice serio “Te amo”
“Te amo” el otro afirma
El más alto cuela sus manos, despojando a Yesung de la parte superior de su traje de práctica, sus manos tocan la blanca piel a su alcance… rosándola como si fuera porcelana… sus labios rojos dejan un camino de besos desde su cuello hasta si clavícula.
Recostarse en la grama juntos, no representa un problema… esta fría pero a Yesung no le importa mientras pueda disfrutar de las atenciones de Kyuhyun; ve devoción en sus ojos… mesclado con dolor y rabia… ese delicioso color chocolate en sus ojos no debe mancharse con esos dos últimos adjetivos… por eso él también lo mira con amor, el más profundo y el único que tiene para entregar… solo a él.
Ambos desnudos… a la luz de la luna… amándose, entregándose… es la última vez… sus mentes no los dejan olvidarse de ese hecho, pero aun asi es importante seguir amándose… porque es la última vez.
Besos fogosos pero llenos de amor… el mayor no desea seguir sin hacer nada por eso deja a Kyuhyun bajo su cuerpo haciendo que se entierre en el sin advertencias ni nada… es urgente… doloroso pero lo aguantara… lo ama y por él es capaz de cualquier cosa.
Es una danza la que sus cuerpos realizan al unirse… pero toda danza llega a su final… se quedan observándose… las lágrimas no tardan en salir desde ambos rostros… rápidas gotas que son alcanzadas por los labios contrarios para impedir su avance.
“Recuerdas el traje azul que tanto te gusto el otro día”
“Lo quería para ti pero no me dejaste comprarlo”
“Lo compre” le sonríe “Quiero que limpies mi cuerpo y me vistas con ese traje… ese broche de tortuga que tanto me gusta, ponlo en mi cabello y lleva mi cuerpo al lago donde nos conocimos… es ahí donde quiero descansar Kyu-ah”
“Algún día te encontraras conmigo… después de esto… tu volverás a mi”
“Yo volveré… si es necesario perseguirte al infierno lo haré”
“Un ángel como tú no debería estar en un lugar como ese”
“Recuerda que yo te robe del cielo”
“Antes era un iluso… el cielo lo conocí cuando te vi a ti”
“Es hora” Tomo la espada que desde el principio descansaba a sus costados desenfundándola en el camino “es irónico… yo te la regale para que lo protejas, y él manda a matarme con ella”
“No sabes cuánto deseo que la carne de que toque esta espada no sea la tuya”
Sus manos envolvieron sus manos en el mango de la espada… “Te amo” pronunciaron…
El metal era frio… el filo atravesó la carne fácilmente llegando al corazón… la sangre no tardo en dispersarse manchando a ambos pero en ningún momento dejaron de verse… Kyuhyun saco su espada tirándola a un lado para abrasarse al cuerpo que caía entre sus brazos… sus ojos se llenaron de lágrimas.
“Kyu siempre has sido un llorón” rio pero un gemido de dolor se le escapo
“Tú me enseñaste” acaricio sus cabellos “Te duele mucho”
“Me duele más dejarte” cerro sus ojos “Bésame otra vez”
“Todas las que quieras” un beso de despedida… el ultimo… su último suspiro… prometió regresar… le dijo que lo amaba; el ya no lloro más… la persona que secaba sus lágrimas ya no está más… no hay razón para hacerlo ahora.
Se levantó del suelo con un cuerpo en brazos… su amor ya no estaba ahí… tenía que cumplir su ultimo pedido y asi lo hiso. El lago esa noche también se veía hermoso como su cuerpo.
“Espero que sepas que no lo mato porque sé que lo amas Siwon”
“Te lo agradezco” hiso una profunda reverencia “La barca esta lista… sus flores favoritas, esas puse”
“Debería acompañarlo hasta ese lugar también” veía el cuerpo de su amado rodeado de flores en la barca y no podía creer lo hermoso que estaba, ni siquiera la muerte podía influir en el.
“Te dejaría ir pero no lo haré”
Suspiro… empujo la barca sobre el agua… la misma que ahora ardía en fuego.
“Nos encontraremos otra vez… Kim Jong Woon, Yesung… mi amor… de nuevo… a la luz de la luna”