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“Muchas personas opinan que las preferencias, manías y gustos de un individuo determinan la personalidad del mismo, así por ejemplo, las personas que les agrada el color negro, que tienden a ver mucho el reloj y cuya ropa está perfectamente planchada, nos habla de una persona perfeccionista, impaciente, algo neurótica y con un sentido de la responsabilidad muy desarrollado. Los colores, por ejemplo, son un punto muy importante para determinar la personalidad de una persona, pues refleja fielmente las cualidades y defectos de cualquiera; se debe de tomar en cuenta el color que le guste más al individuo y no el que use con más regularidad, por ejemplo, que le guste el color marrón pero que en su guardarropa predomine el color naranja, entonces se tomará en cuenta el color marrón, pues muchas veces la ropa tiene un tono exigido como uniforme en su trabajo, escuela o compañía, cuan…”
-Para ya con eso Sakura, no puedo creer que sigas leyendo esas publicaciones, sabes que esa revista es tan amarillista y falsa como tu trasero con calzón de relleno. –Dijo la rubia mientras soltaba una risita burlona
-Eres una tonta Ino, yo creo que la publicación es real –Contesto seria mientras cerraba su revista y la volvía a guardar dentro de su bolso- además, deja de hablar sobre mi trasero, nunca volveré a contarte un secreto- Le reprocho dirigiéndole una mirada acusadora.
-Ya, ya, no te lo tomes tan en serio, además aquí no hay nadie que pueda oírme- Le dijo conciliadora –Por otro lado ¿En qué te basas para creer que lo que dice tu revista de chismes es cierto?
-Pues mira, por ejemplo, a Naruto le gusta el color naranja y según esta revista, ese color representa a una personalidad explosiva, alegre, dinámica, gusto por la decoración y suele ser una persona agradable y dinámica, y todas esas cualidades salen a la vista en Naruto ¿no? – Explico Sakura, con una marcada sonrisa de triunfo.
-Ash, bueno, pero eso lo nota cualquiera que simplemente lo mire, es obvio, no por nada es empleado más querido de la compañía y sobre todo, por esa cualidad es el mejor amigo de los jefes… aunque de hecho es con el único con el que hablan, a los demás solo nos ignoran –Se quejo la rubia con una cara de tristeza.
-Si, Sasuke_san e Itachi_sama son muy serios, lo único que yo he tenido de ellos es el saludo de buenos días y ya… -Corroboró la ojiverde.
De repente la cara de Ino se iluminó –Tengo una idea –anunció –Veamos que tan cierta es esa revista tuya…
-¿Lo de los colores? Pero si apenas si sabemos sus nombres ¿Cómo carajos vamos a saber sus gustos?
-Pues solo hay que observar como visten, ya sabes que aquí ellos son los jefes así que lógicamente no deben de llevar uniforme ni nada por el estilo, ellos eligen su ropa a su gusto ¿no?
-Bueno, en eso tienes razón…
Después de dicha charla, el reloj marco las 8 de la mañana, la hora oficial de entrada, así que cada secretaria se dirigió a su escritorio, Ino era la asistente y secretara de Itachi, mientras que Sakura lo era de Sasuke.
Esperaron pacientemente hasta que los jefes hiciesen su glorioso arribo, lo cual sucedió una hora después. La puerta del ascensor se abrió en el piso numero 23 dando aviso de que la espera había terminado, Itachi vestía su elegante traje negro, junto con una bella camisa de color vino rojizo, junto con una corbata color rojo encendido con visos negros, sus lujosos zapatos brillantes e impecables, sin duda un joven de 29 años muy apuesto.
Detrás de él llegó su hermano menor, Sasuke, el cual vestía un pantalón de color negro pero con visos azul marino y una camisa de color azul eléctrico, sin corbata, con los tres primeros botones desabrochados y las mangas recogidas en ¾ , sin duda un aire muy casual, fresco y sexy, tal y como lo era aquel chico de 22 años.
-Buenos días señores Uchiha –dijeron al unísono ambas secretarias.
-Buenos días Señoritas –contestaron los otros, después dieron instrucciones precisas sobre lo que se haría ese día y cada uno entro a su oficina. Al momento de que volvieron a quedar solar en el recibidor, Sakura corrió al lado de su amiga con la revista en mano.
-¿Viste? Es la tercera vez en la semana que Itachi_sama viste con tonos rojizos y que Sasuke_san usa colores de azul muy fuertes. –Informó emocionada Sakura.
-Sí, si lo note –Contesto su amiga –A ver, saca tu revista. Sakura inmediatamente hizo lo pedido y busco la página con desesperación hasta que la encontró
-Mira, aquí dice que “Las personas que visten con colores rojizos obscuros, como el marrón rojizo, el ocre, el color vino rojizo y el color rojo quemado, son personas dominantes, increíblemente inteligentes, de carácter práctico pero preciso, líderes natos, decididos, serios e inclusive algo fríos, muy pasionales y tienden a tomar las riendas y control de todos los aspectos de su vida.”
-Bueno, pues eso definitivamente encaja con el carácter del jefe, se nota a kilómetros que tiene esas virtudes, no por nada logró fundar y hacer crecer una empresa como está siendo tan joven –Comento la rubia
-Tienes razón –Apoyo la pelirrosada – A ver, veamos que dice del azul… “Las personas que usa colores de azul obscuro, eléctrico, rey o marino, nos habla de un individuo frío y distante con la gente que no conoce bien, suele ser introvertido aunque muy calculador, sabe lo que quiere y es muy meticuloso en cada aspecto de su vida, le gusta rodearse de personas que estén a su altura o que cumplan sus expectativas, suelen ser muy vengativos pero también son muy creativos en la cama, no tienen límites y a veces ponen en riesgo su integridad física…” -Pues eso también suena a Sasuke… -Murmuro Ino.
-¿Ves? Te lo dije, esta revista no miente –Dijo orgullosa Sakura.
-¿Qué leen? –Preguntó una tercera voz, haciendo saltar a las dos chicas.
-Ah, Naruto, eres tu –Comentó aliviada Ino –Pues leemos esta revista que trajo Sakura y parece ser que tiene un poco de razón.
-¿Por qué creen eso? Esas revistas solo inventan cosas –Comento el rubio con una mueca de burla.
-No es cierto, a ti te describió de maravilla, y a Itachi_sama y Sasuke_san también –Contraatacó sería Sakura.
-¿Saben los colores preferidos de Sasuke e Itachi? –Preguntó incrédulo el rubio.
-¿Eh? Bueno, no, pero suponemos que a Itachi_sama le gustan los colores rojizos y a Sasuke_san le gustan los colores azul obscuro, porque son los colores que más usan en su ropa. El rubio las miro y sonrió de medio lado
–Ellos usan esos colores porque saben que les sientan bien, no porque realmente les gusten…
-¿Y tu como sabes eso? –Le preguntó una sorprendida Ino.
-Son los beneficios de ser amigo de la infancia de Itachi y Sasuke, ya sabes, los conozco desde hace 21 años, nos sabemos muchas cosas–Comento como si nada.
-Entonces dinos ¿Cuáles son sus colores favoritos? –Pregunto Sakura casi en tono de suplica.
-Pues yo diría que… el blanco y el rosa –Contesto, poniéndose rojo y aguantándose una risita nerviosa.
-Ash, eres un idiota Naruto –Le reprocho Ino -Ni porque soy tu prima me ayudas.
-Oye eres una prima lejana, apenas me entere de tu existencia cuando entraste a trabajar aquí –Se defendió el rubio.
-Como sea, ya en serio, dinos los colores, por favor ¿Si? –Le rogo la pelirrosa.
-Es que es en serio, es el blanco y el rosa... rosa pálido, delicado, no como tu cabello. -Señalo con burla haciendo que Sakura lo mirara mal.
-Eso no puede ser posible, nunca han venido vestidos de esa forma… -Le señalo la rubia.
-Ya se los dije, ellos usan el color que mejor les sienta, pero una cosa es eso y otra sus gustos colorimétricos, por ejemplo yo uso el naranja por que resalta el color de mi piel y mi cabello, a veces uso el azul claro por mis ojos, sin embargo mi color favorito es el rojo encendido… -Entonces en ese momento miro su reloj y se puso nervioso – Y hablando de eso ya se me hizo tarde para una cita, nos vemos luego. –Y salió disparado rumbo al elevador.
-De seguro fue a ver a su novio… -Murmuro Ino
-¿Naruto tiene novio? –Preguntó curiosa.
-Sí, es bisexual, su pareja actual no la conozco pero creo que se llama Gaara.
-Uhm, que nombre tan curioso… Como sea, yo no le creo a Naruto, la descripción del blanco y el rosa no va para nada con Itachi_sama ni con Sasuke_san… pero bueno, luego seguimos con eso, ya me voy a trabajar o mi jefe se pone violento
–Y cada quien se fue a su escritorio.
_----------------------------8 horas después---------------------------------_
-Hasta mañana señoritas –Se despidieron ambos Uchiha y se adentraron por el elevador.
Llegaron al estacionamiento, abordaron el auto que el mayor condujo y salieron del la empresa. El viaje de regreso a casa fue silencioso como siempre, solo la música de fondo y las luces de la ciudad relajaban el ambiente.
Arribaron a la su lujosa zona de residencia y finalmente aparcaron en su elegante casa rodeada de extensos jardines, a esas horas la servidumbre ya se había retirado a sus casas, así que estaban solos.
-Te extrañe… -Murmuro el menor justo cuando la puerta se cerró a sus espaldas.
-Y yo más… -Le contestó su hermano. Sasuke se volteó y se lanzó a los brazos de Itachi, quien lo recibió gustoso, amaba esa parte del día, cuando estaban solos y juntos sin que nada ni nadie se interpusiera entre ellos.
Con amor y deseo tomo de los glúteos a su hermanito y lo levantó, haciendo que éste a su vez rodeara sus caderas con sus deliciosas piernas, Itachi comenzó a caminar hacia la habitación, subió las escaleras, camino el pasillo central y finalmente llego a su destino. Sin deshacer el beso y menos el abrazo, se dejo caer sobre el colchón con Sasuke sobre él.
-Te amo, te amo tanto. –Decía entre suspiros el menor, luego se enderezó, quedando sentado sobre la pelvis del mayor, entonces comenzó un lento movimiento de caderas, de atrás hacia adelante. -¿Te gusta?
-Me encanta –Contestó el mayor, dirigió sus manos hacia la cadera de su amado pero este lo tomo por las muñecas antes de que lograra su cometido. –Nada de manos, todavía no… -Le reprendió Sasuke con una sonrisa juguetona en los labios.
-Eres malo Sasu_chan, pero más tarde te castigare –Contestó roncamente.
-¿Cómo me vas a castigar Onii_san? –Pregunto con una voz imperiosamente sensual que calentó aún más a su hermano. -Te ataré las manos al cabezal de la cama, te voy a morder esos pezoncitos suaves y dulces que tienes hasta que te haga llorar de placer, te voy a follar tan duro por ese bello culo que no podrás caminar en días… y lo mejor es que… Te gustara, te gustara mucho porque eres un goloso lujurioso con cuerpo de ángel.
Mientras tanto Sasuke se saco los pantalones y le quito los suyos a su hermano, quedando ambos solo con sus bóxer negros de lycra muy ligera, haciendo que casi estuviesen desnudos uno sobre otro, el menor movía la cadera ahora en círculos, sobre el largo y muy erecto miembro de su querido amante, lentamente bajo su cara hacia ese lugar y con total devoción succiono los testículos de Itachi, haciendo que éste echara atrás la cabeza y cerrara las manos en puños sobre las sabanas, Sasuke se concentro en chupar y mordisquear esa delicada zona una y otra vez, la ligeresa de la tela le permitía sentir las pequeñas venas palpitantes de ese saco de carne, con cuidado dirigió su dedo al espacio entre los testículos y el ano y presiono firmemente una y otra vez.
-Sasuke, Sasuke, así, más… -decía guturalmente el mayor.
-Si amor, te lo dejare tiezo y duro para que puedas follarme a fondo. –Le contesto con voz ronca, pues en su propia anatomía ya sentía los estragos de la excitación, una prominente erección pugnaba por escapar de la prisión de lycra y una insinuante mancha de pre-semen dentro de aquellos boxer anunciaba su desespero.
-Ya, ya está listo –Dictaminó Itachi al tiempo que tomaba con ambas manos la cabeza de su hermanito para detenerlo de su labor -Esta tan parado que te empalaré hasta los pulmones.
-Eres un pervertido – Le contestó divertido el menor, se levantó de sobre su hermano e intercambiaron posiciones. Sasuke estaba acostado sobre su espalda de frente a su querido, Itachi tomo ambas manos del menor y las ato tal como dijo, pero decidió que sería buena idea inmovilizarlo completamente, sacó las sogas de color rojo que tenía guardadas bajo su cama
-¿Jugamos? –Le pregunto mientras balanceaba dichos lazos entre sus manos, pues aunque él se muriera de ganas por atarlo jamás haría algo sin el consentimiento del menor.
-Solo sé cuidadoso… -Aquello fue un sí completamente. Itachi tomó una de las piernas de Sasuke y pasó la soga detrás de la rodilla unas tres veces y después le hizo un bello y estético nudo, la separó y pasó el resto la soga por debajo de la cama para sacarla de nuevo por el otro lado, entonces tomó la otra bella rodilla y la ató del mismo modo que a la otra, dejándolo completamente expuesto, sin poder cerrar un ápice sus bellas extremidades inferiores.
-Te ves tan morbosamente sensual –Comento el mayor.
-Ya me estoy aburriendo –Atacó Sasuke, pues si algo tenía era un exceso de poca paciencia. Entonces el pelilargo sonrío de medio lado y comenzó a lamer sobre la ropa interior tal y como lo había hecho antes su hermanito, degusto el sabor salado del pre-semen y continuo por humedecer el resto de la prenda, acerco su dedo con cuidado, pero en vez de presionar dónde su hermano, él decidió introducirlo lo más que pudo en su ano, empujando con todo y la ropa una y otra vez, haciendo que el pequeño se retorciera de placer.
-Métemelo, por favor, ya no aguanto –Decía entre jadeos el atado, mientras que Itachi disfrutaba de las contracciones del ano de hermanito que se contraía de manera rítmica. Itachi procedió a sacar unas tijeras de su mesita de noche.
-Recuérdame comprarte otros bóxer después –le dijo, para después tomar la húmeda tela y proceder a recortar toda la entre pierna, liberando su erección y de paso dejando a la vista ese hambriento anito.
–Delicioso, bello, hermoso…
-Deja de mirarme y has algo –Le incitó completamente desesperado. El mayor se recostó cobre su pecho, entre las piernas de Sasuke y quedo con la cara completamente enfrente del recto de su amante y lo miro contrarerse, le gustaba mirarlo, le gustaba ese color rosado, era un color rosa tan delicado y bello, y estaba rodeado por esa piel pálida y blanca, inmaculada como el mármol, amaba ese contraste, amaba esa bella combinación de colores y después de admirarlo con la devoción propia de quién admira la más bella obra de arte, se decidió a darle la más larga y lenta lamida de la historia, pasó su áspera lengua desde el ano hasta llegar a la punta del glande, desfruto de la reacción de su hermano, un largo gemido cargado de placer escapo de los labios que tanto amaba, y decidió seguir con su labor, unos minutos después procedió a introducir uno de sus largos dedos a ese hermoso agujero rosado, lo introdujo hasta que su nudillo choco con el trasero de su hermanito, lo dejo dentro, sin moverlo, sintiendo ese calor envolvente, húmedo y lleno de tantas texturas, finalmente y ante los quejidos de Sasuke, decidió meterlo y sacarlo con fuerza repetidas veces, luego con ayuda de su otra mano, introdujo otro dedo y ahora ambos adentro, en forma de gancho, se dedicaron a buscar aquella protuberancia que impulsara el placer de Sasuke a niveles insospechados.
-¡Puta Madre! ¡Maldita sea! –Gimió el menor… Lo había encontrado, cuando Sasuke se excitaba demasiado, se le soltaba la boca y toda clase de improperios escapaban de ella.
-Rico ¿verdad? –Le dijo con una sonrisita lujuriosa mientras seguía presionando con fuerza esa delicada zona.
-Con una mierda, me encanta –Y sus manos se tensaron entre sus amarres, comenzó a mover su pelvis de arriba hacia abajo con la intensión de obtener más penetración, mientras que Itachi disfrutaba de ese bello espectáculo, veía como el miembro de su hermano temblaba a cada arremetida que le daba con sus dedos a su delicada próstata, y con el movimiento de caderas que éste hacia el pene se movía de un lado a otro sin cesar.
Itachi consideró pertinente comenzar a ensanchar esa pequeña cavidad para prepararlo para algo mejor, entonces con los dedos que tenía adentro del recto de Sasuke, comenzó a jalar hacia los lados delicadamente pero con constancia, viendo con singular placer que el anillo de carne cedía sin mucho contratiempo, y se quedo ahí, de nuevo, observando el tono rosado que reinaba en las paredes dentro de aquel delicado orificio.
-Bello… -Murmuro hipnotizado.
-Méteme la verga de una jodida vez, imbécil –Rugió el menor. Itachi se mordió el labio, estaba tentado a hacerlo sufrir un poco más, pero la verdad es que él también estaba bastante necesitado ya.
-Muy bien amor, pero necesito que me la lubriques bien porque ayer se nos acabo el lubricante –le informo –O la quieres así ¿Seca? –Le preguntó.
-Maldita sea, a ver ven acá –Le ordeno el menor al tiempo que abría su boca lo más que podía, pues Itachi a parte de tenerla larga la tenía bastante gruesa. El pelilargo se saco los bóxer, dejando a la vista un hermoso miembro de imponente glande, un inmaculado miembro de color blanco con la punta rozada… a Sasuke le encantaba esa combinación, era como una dulce paleta de caramelo con sabor a fresas con crema… quizá ésta paleta no tuviese muchas fresas, pero definitivamente si tenía mucha crema… ya lo había comprobado una innumerable cantidad de veces.
Se dedicó a darle la felación del siglo, succionando con fuerza el miembro y pasando una y otra vez su lengua por el frenillo y el glande, a veces hacia presión con su lengua sobre el orificio de la uretra porque sabía lo que mucho que le ponía a su hermano que hiciese eso y finalmente dejo caer una gran cantidad de saliva sobre el glande y vio como ésta se resbalaba lentamente por todo lo largo del miembro
–Listo, ya esta… Itachi regreso a su antigua posición y se colocó entre las piernas de su amante, colocó la punta de su brillante miembro en la entrada de su hermano y pudo ver con claridad cómo se acoplaban uno con el otro, el color entre ambos era magnifico y finalmente, de una sola arremetida se introdujo por completo, se dejo ir sobre aquel orificio que no ponía ninguna resistencia a ser ultrajado y destrozado, sintió como la hinchada próstata era rozada por su glande de forma inmisericordiosa y violenta.
Sasuke estaba en el paraíso, sus piernas tan abiertas y dejándolo tan expuesto lo hacían sentir tremendamente caliente, le enloquecía como el gordo miembro de su hermano acariciaba cada parte de su interior sin que él pudiese evitarlo, se sentía sometido, y eso le encantaba. Itachi comenzó a mordisquear esos pezones rosados, tan similares a los suyos, pero más tiernos, más suaves; los succionó con gula y sin detener las arremetidas.
-¡Puta madre! tócame, por favor– Rogo el menor.
-No, quiero que te corras solo con mi pene en tu interior –Le contestó Itachi.
-¡Eres un maldito hijo del diablo!
Entonces Itachi se detuvo y saco más de la mitad de su miembro, levanto la cadera de su hermano poniéndole un par de almohadas debajo, dejándolo en un ángulo más cómodo.
-Ahora sabrás lo que es bueno –Anuncio el pelilargo. En esa nueva posición, su pene ya no entraba hasta adentro, solo entraba 10 centímetros, la distancia justa para golpear directamente a la sobre estimulada próstata del menor y así lo hizo, con fuerza y precisión golpeo el lugar justo, y por el nivel de sensibilidad de la zona Sasuke sintió una tremenda descarga de dolor pero antes de poner quejarse una oleada de incalculable placer lo atacó haciendo que su espalda se curvara como la de un felino en celo.
-Ahhhhg Itachi, eres un puto jodido Dios del sexo –Grito lleno de éxtasis. Y la escena se repitió incontables veces, hasta que las sensaciones llenaron a tope al menor –Me voy a correr –Anunció en medio de un gemido, pero no tardó ni medio segundo de haberlo dicho cuando un segundo glorioso gemido escapo de sus mordisqueados labios, su ano se contrajo irremediablemente sobre el pene de su amante, impidiéndole escapar y presionándolo de manera tan precisa que el mayor no pudo evitar eyacular con fuerza, llenando a su amante hasta el tope.
Ambos quedaron exhaustos, pero increíblemente satisfechos, ese había sido el mejor orgasmo de la semana, sin duda. El mayor se dedico a desatar los amarres de su pequeño hermano, con cuidado de no hacerle daño y después ambos se acomodaron para dormir en la misma cama, a ninguno le apetecía ir a ducharse justo ahora.
-Rosa y blanco… -Murmuro Itachi a la nada.
-¿Qué? –le pregunto su amante, pues no había escuchado bien.
-Rosa y blanco –Repitió y ante la cara de duda que tenía el menor, decidió explicárselo mejor. –Naruto hace unos días me pregunto sobre las cosas que más me gustan, le comente algunas, pero al final me dijo “Y supongo que tu color favorito es el rojo obscuro ¿no? siempre usas ropa o accesorios de ese tono” y estaba a punto de contestarle que sí, pero me llego la imagen de tu bello, trasero y definitivamente amo el color blanco que tiene pero más amo tu bella entrada rosadita…
-Dios Itachi, solo piensas en sexo, que pervertido eres –Le dijo Sasuke con fingida molestia – Pero no se lo dijiste a Naruto ¿Verdad?- Le preguntó alarmado.
-No claro que no, solo le dije que me gustaba más el blanco y el rosa… aunque él es muy perspicaz, además me dijo que, aunque tú detestas los dulces, tienes un fetiche por las paletas de caramelo de sabor fresa con crema, después guardo silencio, de repente se puso rojo hasta las orejas y salió corriendo de mi oficina, supongo que no hay que ser un genio para deducir a que conclusión llego ¿Cierto? –Declaro Itachi con una sonrisita burlona.
-Al menos el dobe es discreto, es el unico que sabe de nuestra realación y es muy respetuoso al respecto –Acotó Sasuke, para después soltar una risita burlona –Con razón cuando me ve chupando una de esas paletas sale disparado de mi oficina también –Y ambos se soltaron a reír –Aunque prefiero la “paleta” original –Murmuro sensualmente el pelicorto.
-Pues la noche es larga mi amor…
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End :P