AL COMPÁS DE TU CORAZÓN
“Dile que sí, aunque te estés muriendo de miedo, aunque después te arrepientas, porque de todos modos te vas a arrepentir toda la vida si le contestas que no” Gabriel García Márquez
Me duele la cabeza –Se quejó Seunghyun y como no, si había bebido 2 botellas de vino.
Había bebido de más y se sabía que se ponía muy sentimental cuando bebía así que no tardaría en llamar a los miembros de Big Bang para decirles cuanto los quería. Se levantó apenas para empezar a tararear una canción que había tenido en la mente todo el día.
No había salido a ningún lugar, le gustaban cosas más discretas y a pesar de la fama que podía tener prefería seguir con su propia intimidad así que no, no había llamado a nadie para salir. Se encontraba bien disfrutando de su propia soledad o eso intentaba creer porque a pesar de haber trabajado en su película sentía un gran sentimiento de inconformidad. Pocas veces se había sentido tan inseguro de su propio talento y ahora que parecía que su carrera estaba ya realizada y que los sueños estaban cumplidos otro sueño estaba empezando a crecer en su interior; El actuar.
Se levantó, acomodándose en el sillón, miró directamente la puerta en completo silencio. Había bebido demasiado vino, miró a su lado. Habían demasiadas botellas regadas en el suelo ¿Cuándo había sucedido eso? Arrugó el ceño y echó la cabeza para atrás diciendo incoherencias; la mayoría tenían el nombre JIYONG en ellas. Pasó un tiempo y podía decirse que se habría quedado dormido en el sillón si no fuera porque el timbre sonó. Seung estaba decidido que quien fuese no le dejaría entrar, no estaba en buenas condiciones para recibir visitas, sin embargo el timbre siguió sonando
¿Quién es…? –estaba algo desorientado por el vino, a las justas logró pararse y caminar hacía la puerta. La abrió de golpe y malhumorado porque esa persona no dejaba de tocar insistentemente la puerta.
Su expresión se suavizo al ver a Jiyong afuera.
Ji... ¿Qué haces aquí? Es tarde ¿Ocurrió algo? –preguntó rápidamente
Los sentidos de Seung no estaban muy agudos esa noche, podía ver claramente como Ji se mordía el labio ¿ansiedad? ¿Nerviosismo?
No contestabas el teléfono –respondió finalmente y Seunghyun no sabía si su imaginación le estaba jugando una broma ¿Ji estaba sonrojado?
GD no solía visitarle a menudo, se quedó un rato parado mirándole. Confuso y extrañado por la rara respuesta. Si Seung no contestaba el teléfono era normal, él mismo lo sabía. Hasta se conocía que los miembros de BIGBANG solían mandarse mensajes de texto para quedar a comer, sin embargo TOP solía enterarse al último y no era que no le avisaran. Si no que no veía los mensajes. Y ahí estaba Ji mirando para abajo con una mueca nerviosa en el rostro. De pronto Seunghyun se dio cuenta de su mala educación.
Oh, ven adentro –Dijo torpemente
Hace tiempo que Jiyong no me visita…
Pensó y abrió bien la puerta para dejarle entrar. Seung aún sentía algo de vino en su organismo pero la borrachera se estaba yendo y siendo reemplazada por la curiosidad.
¿Cómo has estado? –preguntó Ji y luego se golpeó mentalmente por hacer una pregunta tan estúpida
Bien… -Seunghyun caminó hacía el sillón y con una señal de su mano le indicó a Ji sentarse -¿Qué deseas beber? –le preguntó
Vino por favor–respondió, mirando el par de botellas vacías que se encontraban en la mesilla.
No era incomodidad lo que sentían sino una electricidad en el ambiente, siempre había estado presente al estar solos. Por eso ambos se habían alejado con demasiada frecuencia y a pesar de estar en el mismo grupo no interactuaban mucho. ¿Miedo a lo desconocido tal vez? ¿Cobardia? Solo ahora Ji había tenido la fortaleza de venir solo a casa de Seunghyun, desde hace varios años su relación parecía hacerse lejana y ahora mientras Ji se encontraba en la villa del mayor se preguntaba que hacía ahí, por qué no había llevado a alguien con él, por qué la villa estaba tan silenciosa y su corazón latiendo tan fuertemente.
Seung salió de la cocina con dos copas y una botella de vino, sus ojos se encontraron y se sonrieron automáticamente.
Me preguntaba… que hacía nuestro Jiyongie aquí –empezó TOP sentándose para luego servir el vino con una sonrisa tranquila –Ha pasado tiempo...
Los minutos transcurrieron, Ji sabía que no podía mentirle. Seunghyun tenía la mirada que solo le mostraba a él, cuando le pasó la copa el menor bebió un poco intentando pensar… él mismo se preguntaba porque había corrido hasta ahí. Sí, había corrido. No había estado muy lejos de la villa cuando sin premeditación alguna había corrido hacía allí. Decidió decirlo, ya después de tantos años ya no era saludable seguir ocultándolo.
Te extraño –susurró Jiyong seriamente
Se quedaron mirando un momento y luego Seung le sonrió.
Sí su Hyung también los extraña, hemos estado ocupados ¿eh? Igualmente a finales de año es nuestro comeback. Estaremos tan juntos que se hartaran de mí. – se rio – ¿No es así maknae?
¡Yah! No me digas maknae –replicó Ji siguiéndole el juego a su ingrato Hyung
Ambos bebieron de sus copas, Seung se sintió mejor al tener alguien con quien compartir sus horas de soledad.
Tengo que contarte algo, Es mejor hacer algo a arrepentirse por no haberlo hecho a tiempo ¿cierto? -Jiyong puso una mano en el hombro de Seung
¿Qué? Dime – pregunto curioso, para luego dar a vuelta el rostro y regresar a mirar a Ji pero la mano del menor le detuvo.
¿Recuerdas cuando me besaste? –
¿E-n en… la parodia de Secret garden? –preguntó tenso
No Hyung, me besaste cuando dormíamos en el mismo dormitorio –recordó el duro cuerpo de Seung, acorralándole y sin previo aviso tomando su boca entre sus labios.
Seunghyun cerró los ojos, su mente revoloteo a cuando apenas cumplían un año de su debut. Una cama cálida, Ji dormido profundamente, el olor a su cabello recién lavado y sus labios frunciéndose en un botón mientras dormía. Tan bello y sonrosado que era difícil para Seung contener el impulso de tocar aunque sea con un dedo los labios de Ji y así lo hizo. Pronto sus dedos no fueron suficientes y una noche mientras todo el dormitorio se encontraba en silencio Seunghyun le había besado, pero era como una adicción y no pudo parar hasta que vio los ojos abiertos de Ji.
Creyó que su amistad se había acabado junto con su carrera, sin embargo todo parecía ir normal excepto por una cosa. Jiyong empezó a evitarlo. Nunca habían hablado de sentimientos, de amistades rotas y aún peor de amor en todos estos años…
Seunghyun intentó levantarse luego de abrir los ojos y percatarse que Ji le seguía mirando pero sintió como Ji le detenía una vez más y ponía su cabeza en la espalda de TOP. El menor empezó a hablar con firmeza y convicción.
Al fin después de muchos años de miedos, sobre todo a lo que soy y quiero ser he decidido amar libremente ¿Sabes por qué tuve tanto miedo aquella vez? Cuando me besaste comprendí por qué te ayude a entrar a YG no me malentiendas sé que fue por tu talento, pero también ese día al verte quise con todo mi corazón tenerte a mi lado. Que fueras mío, pero me asusté de lo que estaba sintiendo y de lo que quiero de ti. Y ahora que confío en lo que siento en que puedo hacerle frente a las consecuencias te digo que… amo infinitamente cada parte de ti… Seunghyun
Ambos se quedaron inmóviles, sin mirarse aún. Las palabras quedaron flotando en el aire, cada uno estaba asimilando lo que ocurría entonces Seunghyun se dio la vuelta, agarró las mejillas de Ji y lo besó.
¿Por qué has estado actuando como si nada pasará? ¿Por qué no puedo enojarme contigo? –Le preguntó besando otra vez sus labios –Matas mi ego, cada día actuando como si nada pasara…
Lo siento, lo siento tanto. Perdóname creí que con el tiempo los sentimientos cambiarían.
Mírate estás temblando –Seung sonrió
Ji hizo un puchero fingiendo molestia pero no lo consiguió, estaba tan feliz.
Seunghyun le abrazó fuertemente y Ji no tardo en corresponderle, era como si el peso de una gran cruz se disminuyera, mirarás a tu lado sorprendido y vieras a alguien ayudándote a cargarla. Los sufrimientos es mejor compartirlos y la felicidad es mejor disfrutarla en compañía. Ya no tendrían miedo si la persona que amaban estaba cogiendo su mano. ¿Qué había motivado a Ji a declararse de forma tan apasionada? El morir sin antes decir lo que su corazón gritaba, ya que un día Seung se había lastimado la mano en la grabación de su película. No había sido muy grave, pero en ese momento Jiyong se dio cuenta que si perdía a Seunghyun se moriría. Puede que no físicamente pero de todas las cosas horribles que imaginaba esa era la peor, arrepentirse de lo que no hizo a tiempo.
Hyung… hay una cosa que no te he dicho aún –murmuró Ji
¿Qué cosa?
Hay algo que he anhelado desesperadamente, tanto que ha llegado a doler –confesó, luego respiró profundamente antes de hablar - Hazme el amor por favor
No tienes que pedirlo desde hoy… todas las noches te amaré – prometió Seung –
Jiyong alzó el rostro y besó a Seung, era irreal que pudiera besarle libremente ya sin ataduras mientras Seung cerraba los brazos alrededor de su cintura, de forma algo posesiva. Se le hizo natural porque siempre había soñado con eso. Seunghyun mantuvo sus manos acariciando los contornos del menor. En un momento vio las venas de su cuello y se acercó para pasar su lengua por toda la extensión de la nuca. Los suspiros que emitió Ji lo ponían más ansioso. Su cuerpo entero estaba siendo llevado por el instinto y su mente estaba recordando, reproduciendo todo lo que alguna vez imagino hacer con Jiyong.
El menor llevó sus brazos a los hombros de Seung, en tanto se perdía entre sus labios y el sonido de los besos empezaba a excitarle, porque aunque algo de inseguridad recorría su mente siempre había dicho que era mejor arriesgarse y vivir así que se acomodó encima de Seung, con las piernas a los costados de él. Se estaban dejando llevar por lo que sentían por primera vez.
Seung se levantó con Ji aun rodeando su cadera, cogió a Jiyong de las nalgas para llevarle mientras seguían besándose.
Cayeron en la cama suavemente, abrazándose. Las cosas estaban ocurriendo naturalmente, sin miedos que los detuvieran ni sonidos externos. Estaban en su propia burbuja y las miradas de ambos se encontraron. No se habían mirado así nunca por temor a tener esperanzas infundadas, era la mirada que te dice que todo está bien, que las cosas mejorarán. No se habían mirado a los ojos tanto tiempo jamás, era algo diferente. Seung apegó su cuerpo a Ji que sintió como la calidez del otro le daba tanto confort, tenía ganas de llorar por lo que estaba pasando que ni en sus mejores sueños pudo recrear. Sus labios se encontraron de nuevo, se moldearon juntos como si fueran hechos para el otro. El menor acariciaba el cabello de Seung, acercándose más si era posible, sus ojos cerrados, besando con infinitas ansias al otro. El deseo, la necesidad creció haciendo que las caricias inexpertas del principio se convirtieran en manos nada temerosas en hundirse en la sensación de pertenencia.
¿Tienes miedo? –preguntó Seung cuando pasó la camiseta de Ji por encima de sus hombros
¿Por qué lo tendría? –Respondió -Aunque… tengo miedo sí, miedo a amarte, a que me ames y luego despertar sabiendo que fue un sueño.
Seunghyun sonrió, cogió la mano de Jiyong y la llevó a su pecho.
Siente mi corazón, late como loco. Esto es real porque aquí dice amar a Kwon Jiyong con todas sus fuerzas.
Jiyong llevó sus manos lentamente hacía la camisa de Seung, cuando logró desabotonarla y se la quitó, suspiró entrecortadamente. Pasó sus manos por todo el pecho del mayor, sabía que podría volverse adicto a acariciarle, a besarle. Era tan precioso porque sabía que era afortunado de tenerlo para él. Mientras tanto Seung movió sus manos hacía el pantalón del otro, lo jaló hacía abajo y dejó a Jiyong desnudo. De verdad que era un pecado desearle tanto.
Ninguno se esperó cuando Seung movió su mano hasta la entrepierna de Ji y le acariciara con devoción, inclinándose para besarle un pezón, atraparlo entre sus labios y empezar a mover sus caderas por encima del cuerpo esbelto que se retorcía disimuladamente en placer. Aunque Seunghyun estaba vestido Ji podía sentir la erección presionando contra su pelvis.
Mmm… ah…. Seungg –gimió levemente retorciéndose y envolviendo sus brazos alrededor del cuerpo más musculoso –
El otro escuchaba los jadeos y no podía más que sentirse motivado a seguir, a darle placer. Movió su mano más rapidamente alrededor del miembro de Ji que encogió su estómago, soltándose del cuerpo de Seung y agarrando las sábanas con demasiada fuerza.
Seunghyun… Hyung… yo estoy… argh
Lo siento… - la mano de Seung se alejó.
Jiyong al sentir la vacilación de Seung entró en pánico, no quería que se echara para atrás, que le dijera que era un error lo que estaban haciendo. Así que se movió para desabrochar lentamente y con cuidado el pantalón del otro. Cuando se lo quitó, retrocedió, en tanto una idea atrevida cruzó por su mente. Se llevó un dedo a sus labios hinchados por los besos y con la otra mano pasó sus dedos por sus piernas, recorriendo su propio miembro libidinosamente, y finalmente llegando a sus pezones a los cuales acarició de forma experta. Esto era porque muchas veces se había acariciado pensando en él. Seunghyun se quedó sin respiración.
Eres como un pecado –exhaló mientras llevaba las piernas de Ji a sus hombros.
Ah… ¿Qué vas a hacer? –
Seung lamió sus dedos, sonrió cuando Ji le miró expectante y sin previo aviso acarició la rosada entrada, tanteando silenciosamente. El primer dedo entró sin mucha dificultad, movió el dedo en círculos mientras Ji se mordía los labios. Fue entrando sus dedos delicadamente.
¡AH! AH… Ahí… se sintió… tan bien –
Lo encontré… -sonrió satisfecho Seung –
Seung… Entra en mí, lléname –pidió Jiyong
Seunghyun se acomodó entre las piernas de Ji.
Quiero que sepas, eres mío desde este instante –Entró en él con firmeza –Quiero que recuerdes este momento y jamás lo olvides
Agh…ahhhh –un largo y ronco gemido salió de los labios de Ji, se presionó contra la cama, las manos de Seung se fueron a los muslos de Jiyong. Salió y entró nuevamente mientras las palabras se volvían inútiles, no había palabras para describir lo completo que se sentían. Como un rompecabezas que había sido creado especialmente para unirse, así eran sus cuerpos en ese momento.Primero Seung embestía con cuidado, pero pronto a pasión le cegó y dejó fluir libremente su deseo. Se hundió dentro de Ji mientras este le mordía el cuello. ¿Cómo se podía albergar tanto anhelo tantos años? Las embestidas se volvieron salvajes, junto con los gemidos de ambos.
Si… haaaa, más adentro, t-tócame Seung –Los brazos de Seung se envolvieron alrededor de Jiyong.
Jiyongie… umhh eres deliciosamente apretado –estocada tras estocada Ji creía que moriría de placer y lujuria porque el dolor inicial había desaparecido rápidamente cuando Seung tocó un punto de su ser, que casi le hace dar alaridos.
Seung buscó los labios de Jiyong para besarle desenfrenadamente, cogiéndole las manos para ponerlas encima de su cabeza mientras sus cuerpos chocaban. Cuando Ji sintió un líquido escurrirse entre sus piernas y a Seung emitir un jadeo ronco en sus labios, llegó al extasis.
No se movieron varios minutos, respirando trabajosamente entonces Jiyong abrazó a Seunghyun, ahí desnudos. Complementándose, sintiendo sus pieles tocarse íntimamente.
Tus latidos van a compás de mi corazón –murmuró Ji asombrado
Es porque finalmente decidimos estar juntos. Igual que nuestros cuerpos se unen, nuestros corazones también.
Eres muy romántico Hyung –sonrió Ji mirando el rostro de Seung
Es porque estoy enamorado –replicó, luego se inclinó para una vez más, besarle.
Porque no hay más pruebas de amor que cuando besas, eres correspondido y sabes que eres de alguien. No como propiedad sino porque así lo has querido.
1 mes después
…..
Taeyang estaba sentado descansando de su rutina de ejercicios, en tanto Seungri se le acercó.
Hyung… ¿Has visto a GD Hyung?
Ya sabes maknae que siempre que desaparece se lo encuentra en la casa de TOP Hyung
Cierto, igual que no llegue temprano me preocupa –dijo Seungri –Ayer estuvo diciendo que lleguemos temprano
No te preocupes mira ahí llegan… -Taeyang no termino lo que iba a decir.
Seunghyun cogía la mano de Ji, ambas manos estaban adornadas con una pulsera celeste. Pulseras de pareja obviamente, caminaban tranquilamente y sonriendo. Se veían tan confiados y con una actitud tan despreocupada que solo pudo pensar en lo que siempre había sabido todos estos años.
Maknae, mira al fin lo van a decir, al fin dejaron de tener miedo –Finalizó Taeyang con una sonrisa alegre.