Al otro día Draco (ahora en el cuerpo de Harry) fue el primero en despertar, después de ser revisado por Madame Pomfrey por segunda vez se dirigió a la habitación de Harry.
- Veamos qué podemos hacer con esta ropa –dijo resignado tomando algo de la poca ropa que tenia Harry y dirigiéndose a la ducha. Al terminar se cambio y se vio al espejo –ahora entiendo porque se ve así, pero Draco Malfoy nunca puede lucir así, aún cuando está en el cuerpo de alguien más, supongo que con un hechizo bastara –Tomó su varita y con un simple movimiento los pantalones se ajustaron a sus piernas, y la camisa dejo de quedarle tan grande- ahora el cabello –hizo otro hechizo haciendo que su cabello quedara desenredado y de lado, manteniendo un aspecto húmedo, dándole un aspecto sexy –y ahora el toque final, oculus reparo –finalizo viendo perfectamente. No sé porque no lo utiliza –al haber terminado, Draco tomo la mochila de Harry y se dispuso a buscar su clase, caminaba por el pasillo, que por ser la hora del desayuno estaban vacios, a excepción de una persona que parecía perdida –Potter? –dijo caminando hacia el- que no sabes lo que es un peine?
- Qué rayos me hiciste? –dijo asombrado.
- Y tú que me hiciste a mi? No sabes vestirte?
- Mira quién habla, puedes cerrarte esa camisa?
- Yo si tengo estilo Potter, por lo visto tendré que darte unas clases –respondió jalando a Harry hacia lo que era su casa, entrando a su cuarto –ahora tenemos que apurarnos antes de que alguien llegue y me mate por estar aquí.
- No necesito que me des clases de nada Malfoy, que le hiciste a mis lentes?
- Tus lentes están bien, solo utilicé un hechizo, te vez mejor, y se te ven los ojos, no lo había notado, pero son… bonitos…. –Draco rio al ver la cara de asombro de Harry, viéndose a si mismo sonrojado era algo nuevo –no te creas tanto, solo se reconocer las cosas. Por lo visto ya te duchaste así que empezaremos con sacar esa camisa del pantalón –comento empezando a sacar la camisa –después el cabello –continuó haciendo el mismo hechizo que el utilizo en el cabello de Harry –valla no tengo que trabajar tanto como trabaje en ti.
- Quieres parar? –dijo fastidiado.
- Tranquilo Potter, que no pienso pelear contra mi cuerpo.
- Pues deja de fastidiar y vámonos antes de que no podamos hablar con Mcgonagall.
- Hasta casi hablas como yo –dijo divertido Draco.
- Se supone que debo hacerlo- respondió resignado y ambos salieron sin problema y caminaron al comedor –Nada de molestar a mis amigos Malfoy –le dijo Harry cuando vio que Hermione y Ron se acervaban y se recargo contra una pared unos metros lejos de ellos.
- Harry! Te fuimos a ver a la enfermería y ya no estabas! –pregunto Hermione acercándose.
- Nos dejaron salir hoy – “hablar con estos ineptos será insoportable” pensaba.
- Te encuentras bien Harry?
- Claro, por eso nos dejaron salir.
- Seguro? Que hacías con el huron? –pregunto Ron
- No estaba con él solo venimos de la enfermería…
- Harry que le paso a tu ropa? –interumpio extrañado Ron
- Se llama saber vestir.
- Pero…
- Mejor vallan a desayunar y yo los alcanzo después.
- No desayunaras?
- No tengo hambre hermione
- Pero siempre desayunas, seguro que no quieres venir?
- Seguro, tengo que ir a la biblioteca a ponerme al corriente con todo
- Está bien, nos vemos después –respondió hermione yéndose con Ron pero antes de que Draco pudiera regresar con Harry vio que alguien se acercaba a él. “creo que habrá un pequeño problemita para Potty” pensó algo divertido pero a la vez preocupado por como pudiera terminar eso.
- Draco! –dijo zabini acercándose a Harry –pansy fue a buscarte a la enfermería.
- Blaise –respondió Harry tratando de parecerse a Draco –es que nos dejaron salir temprano.
- Como te sientes? –pregunto pegándose demasiado a Harry.
- Bi… bien… -tartamudeó nerviosos.
- Me alegro –dijo cerca de sus labios –te extrañe anoche –continuo pasando una mano por el cuello de Harry
- Mejor entremos Blaise –dijo Harry tratándose de alejar.
- Pero nunca desayunas, mejor vallamos al cuarto –Respondio Blaise empezando a besar el cuello de Harry.
- Malfoy! –dijo Draco acercándose a ellos haciendo que se separaran.
- Piérdete Potter –dijo Blaise.
- Tu piérdete Zabini, tenemos que ir a cumplir un castigo y no pienso llegar tarde por su culpa, muévete Malfoy –dijo enojado Draco.
- Si, no quiero otro castigo, mejor me voy –dijo viendo a Blaise, los vemo despues –termino de decir yéndose junto con Draco –porque no me dijiste que tenias novio?! –pregunto enojado ya que nadie los veía.
- No es mi novio –respondió Draco, solo nos divertimos juntos.
- Me da igual! Yo no puedo fingir ser tu con él!
- Ya veremos que hacer mientras busquemos a Mcgonagall.
- Oye Malfoy… entonces… eres gay? –pregunto mientras caminaban.
- Eres lento he Potty?
- Lo tomare como un sí –dijo tratando de no pelear.
- Pues sí, si lo soy.
- No lo sabía…
- Y porque tendrías que saberlo? no tenias que saberlo.
- Porque?
- Porque ahora me molestaras con eso.
- Yo no te molestare con eso, por si no te das cuenta, tu eres el que me molestas a mi, yo solo me defiendo.
- Como sea –respondió tocando la puerta de la oficina de la profesora Mcgonagall.
- Pasen –dijo desde adentro y ambos pasaron –los puedo ayudar en algo? –pregunto extrañada al verlos juntos y sin pelear.
- Profesora tenemos que hablar con usted… sobre algo que nos pasó.
- Díganme –continuo interesada, después de oír lo sucedido se hizo unos minutos de silencio –escuchen, lamentablemente no puedo hacer algo ahora, no sé que tenia la poción, ni sé porque tubo ese efecto, tendremos que esperar al profesor Snape para que podamos hacer algo, pero en este caso no podrán dormir en ninguna de las casas.
- Entonces donde dormiremos? –pregunto Draco calmado, no es que le hiciera mucha ilusión dormir con los gryfindors.
- Les daré un habitación que compartirán, si la compartirán obligatoriamente –agrego antes de que se quejaran- y espero que no haya ni una sola pelea –dijo con tono severo viendo a los dos muchachos –esto es para que aprendan a no pelearse, ahora por favor, salgan, después de la cena los acompañare a su habitación.
- Creo que solo nos queda esperar –dijo Draco saliendo de la oficina junto con Harry.
- No te molesta que compartiremos habitación? –pregunto sorprendido el moreno.
- En realidad… no, a ti si?
- No lo sé, será raro…
- Eso no lo niego, pero prefieres estar con Blaise Potty? –añadió tratando de romper el momento de sinceridad, ya que era extraño.
- Cállate Malfoy, yo no soy…
- Gay? Seguro? –respondió deteniéndose.
- Por supuesto que estoy seguro!
- Dime Harry, cuantas novias has tenido?
- Harry… suena mejor que Potty –dijo con una tímida sonrisa.
- A qué viene eso?
- Me llamaste Harry.
- Deliras Potter –respondió Malfoy –mejor voy con tus amiguitos, suerte Potty –concluyo enfatizando la última palabra.
- “porque tiene que ser así?” –pensó Harry –“si no fuera porque siempre me molesta… me caería bien”
- Hey Draco! –dijo Zabini interrumpiendo los pensamientos del moreno –vi a tu papá cuando se iba, todo bien?
- A mi papa?… si todo bien, solo que no me avisaron, estuve con la profesora Mcgonagall y no me dijo nada…
- Y porque te diría?
- Si sabes que no te vino a ver a ti.
- A no?
- Claro que no, siempre dices que para él hubiera sido mejor que no existieras.
- A si… -dijo triste de pensar que de verdad pensara eso Malfoy.
- Tranquilo, por lo menos no te ha pegado.
- Me qué? –dijo alarmado.
- Bueno la última vez fue porque te negaste a ser mortífago… pero, quiero decirte que estoy orgulloso.
- Gracias –respondió Harry consternado. “Malfoy rechazó ser mortífago… no puedo creer que su padre le haya pegado…”
- Te encuentras bien?
- Si… -respondió reaccionando.
- Solo me preocupas, estas raro, y algo triste, no me gusta que te despiertes en la madrugada por pesadillas.
- Estoy bien, no te preocupes.
- Lo prometes?
- Lo prometo –respondió Harry con una sonrisa.
- De acuerdo, te creo –dijo Blaize dándole un beso en la comisura de los labios –vamos con Pansy? Esta muy inquieta por qué no te ha visto.
- Claro, vamos. –ambos caminaron hasta la biblioteca y encontraron a Pansy –a quien ve? –pregunto Harry al ver que estaba muy concentrada viendo hacia donde había muchas mesas.
- A quien más? –respondió señalando la mesa donde se encontraban Ron, Hermione y quien se suponía que era él pero era Draco. A caso le gustaba Ron? , o… él? -Tenemos gatitos a la vista –dijo sonriente.
- Draquito! –dijo Pansy levantándose y abrazandolo –como estas? Haz comido bien? Dormiste bien?
- Si Pansy, estoy bien –respondió divertido, le agradaba que los amigos de Draco se preocuparan por él, hacia que no extrañara tanto a sus amigos.
- Deberías de aprender de Harry Ronald –decía Hermione –aunque estuvo en la enfermería tiene ganas de hacer los deberes!
- Los hago! –dijo fastidiado Ron.
- Quieres ayuda Harry?
- No gracias, ya terminé –respondió amable, no era tan malo estar con ellos.
- Genial! –vitoreó Hermione –hasta me ganaste Harry.
- Ya me aburrí –se quejo Ron –aun tenemos 3 días para terminar esto, y tengo hambre.
- De acuerdo Ronald, vallamos a cenar –desistió enojada guardando sus cosas y salieron los tres, la cena paso sin contratiempos, todo parecía normal, Harry y Draco trataban de hablar lo menos posible para no decir algo que los delatara, al terminar la cena la profesora Mcgonagall vio a ambos muchachos recordándoles sus castigos.
- Tengo que irme –dijo con desanimo –la la profesora Mcgonagall pensó que sería interesante ponernos un castigo.
- Suerte hermano, y no dejes que el hurón te haga nada –dijo Ron.
- Gracias –respondió Draco y empezó a caminar a la puerta donde ya se encontraba la maestra junto con Harry.
- Síganme –dijo seria dirigiéndolos entre los pasillos hacia su habitación.