-Sasuke ¿Qué haces aquí?- pregunto el rubio mientras a sus espaldas sus amigos observaban la escena.
- viene a buscarte – dijo en tono seco y sin mayor expresión.
- no entiendo a que te refieres – Naruto podía ser muy despistado cuando se lo proponía. No notaba que el Uchiha estaba muriéndose al rebajarse a decir aquellas palabras, y mucho menos notaba que había un Gaara colérico detrás suyo.
- Ven vamos – le tomo de la muñeca mientras tiro de él.
- no Sasuke, espera me estas lastimando – antes de que pudiese terminar la frase el pelirojo ya tenia sujeto por el cuello al moreno que lo veía sin inmutarse tan siquiera un poco.
-Te dijo que lo soltaras ¿Qué no escuchaste? – ambos tenían miradas de hielo ; todos los que estaban por ahí se detuvieron a ver la escena.
- yo no se quien seas pero será mejor que me sueltes si no quieres un problema – no soportaba que la gente lo mirara.
- ya le has causado bastante problemas a Naruto como para que vengas a causar más , así que lárgate por donde viniste- lo azoto contra una pared provocando que lo poco de paciencia que quedaba en él fuera nula.
-yo no se de que estes hablando maldito mapache – se zafo del agarre con algo de trabajo.
- Ya basta los dos- antes de que pudieran siquiera percatarse ambos estaban sujetos por el cuello contra la pared , siendo su atacante Naruto . – no los voy a soltar hasta que se tranquilicen- ambos podían sentir el agarre tan fuerte del rubio y no se explicaban como si solo les sujetaba con una mano.
A su alrededor los murmullos no se hicieron esperar y el rubio al notar esto solto a ambos; de su mochila saco la chamarra del moreno y se la entrego sin decir palabra alguna para luego salir corriendo de aquel lugar, perseguido por Gaara, que antes de marcharse solo le espeto en la cara- ¿ya vez lo que ocasionas? Por favor solo lárgate-
Bueno a esos que les ocurría, después de dos semanas de marcarles y mandarle mensajes, se digno en venir a buscarlo y le salía con esta estupides , ¿Quién era ese pelirojo? En verdad que ese rubio lo único que le traía era corajes. No entendía muy bien la razón pero ese chico que se le había vuelto un capricho.
-vaya pero si resulta que Uchiha se junta con la zorra de Naruto- un chico a sus espaldas comenzó a hablarle.
-¿Qué quieres Inuzuka? – se volteo a verlo con la misma tranquilidad de siempre en su rostro.
-veo que me recuerdas Sasuke, pensé que después de salir de la preparatoria te había olvidado de todos – comenzó a caminar hacia el y luego le rodeo con su brazo por los hombros.
- simplemente no crei que basura como tu llegara hasta la universidad- se retiro su mano- ahora si me disculpas.
- dime ¿Qué te traes con el marica de Uzumaki?
- no se que problemas traigan entre ustedes , pero eso no es asunto mío.
- ¿así que no sabes que es un puto maricón?
- sus preferencias no son de mi incumbencia , compermiso – dicho esto salió sin decir más y disipando a la gente que aun quedaba con su cara de pocos amigos, no sin antes escuchar un “te incumbe más de lo que recuerdas” ¿Qué había querido decir con eso?.
-Vamos Naruto abre la puerta soy yo- solo se recargaba al otro lado de esta.
- no déjame solo- estaba más que emberrinchado.
-Nada de esto fue tu culpa, ignora a esa estúpida gente ellos no saben lo que paso realmente ese día , tu solo quisiste ayudar por favor, abré – se metió en el cubículo de al lado y subiéndose en el inodoro se asomo por arriba asustando a Naruto en el acto.
- no me asustes así ‘ttebayo – abrió la puerta y decidio refugiarse donde lo había hecho los últimos seis meses, en los brazos del ojiverde.
- oigan ustedes dos, será mejor que se suelten si no quieren más rumores por la escuela – les dijo Sai entrando al baño- cualquiera pudo a ver entrado
- claro que no por que estabas cuidando la puerta – encaro Gaara. Bingo le había atrapado , no dejaría que nadie entrase a ese baño en un mes de ser necesario.
- Chicos no entiendo ¿Por qué ustedes a pesar de lo que escucharon están conmigo? – los dos se quedaron callados por un momento.
-bueno veras Naruto , el día que ocurrió el incendio en el viejo edificio…nosotros estábamos ahí sabemos que tu no lo hiciste- el rubio no comprendía se suponía que ese día no había más que 4 personas en el edificio cuando todo ocurrió y después llegaron los demás viendo al rubio salir con recipientes de gasolina en las manos.
- significa que me han estado mientiendo…- no no era posible que las únicas dos personas en quienes confiaba le dijeran ahora esto.
-Naruto, nosotros vimos que en vez de salvar a tus padres de donde estaban les hiciste caso y sacaste todos los recipientes que pudiste para que no explotasen y el fuego se propagara por la facultad donde estaban los alumnos encerrados , sabemos que eres un héroe. – le coloco la mano en el hombro pero este solo se aparto de él.
- estaban ahí…¿estaban ahí y no me ayudaron ni a mi ni a mis padres? - la voz se le quebraba en mil pedazos. Sin escuchar el resto salio corriendo del baño. ¿a qué venia esto ahora?¿por qué decírselo después de tanto? Realmente no comprendía nada.
-¿Por qué sacaste el tema justo ahora? – Gaara estaba completamente quebrado por dentro.
- para poder detener esto – le entrego un panfleto donde venía una foto de Naruto el día del incendio y culpándolo de todo, pero no solo eso….
- ¿de dónde sacaste esto? – le arrugaba entre las manos .
- están por todo el pasillo, resulta que están circulando desde esta mañana – Sai se notaba muy serió- tenemos que encontrar a quien hizo esto antes de que llegue a alguna autoridad.
El rubio corrió sin ver hacia donde lo hacia y cuando vio una puerta abierta se refugió en ella. ¿Por qué sacarón ese tema de la nada? ¿Por qué no ayudaron ese día? Eran demaciada cosas para el pobre rubio no sabía como manejarlas y ahora con lo que paso con Sasuke el rumor de que lo había violado se acrecentaría por mayores. No podía consigo mismo, se refugio debajo de unas mesas de aquel taller oscuro a llorar hasta que sin darse cuenta quedo dormido.
-Itachi ..porfavor – no podía hablar claramente
-lo siento , en verdad lo siento – decía el pelinegro mientras recorria con besos y mordidas los hombros de su amante que se encontraba debajo suyo siendo embestido.
- me voy a venir Ita…- al decir esto sintió como cada embestida arremetida contra su persona había incrementado en profundidad y fuerza. El moreno lo estaba llevando al cielo, sabía exactamente como le gustaba. Cuando llego al climax pudo sentir como dentro de si su novio se venia.
- no te volveré a dejar nunca lo juro – le abrazo con fuerza hacia si, de la manera más posesiva que uno pudiese imaginar.
Deidara se giro para besarlo con cariño , su frente , su nariz; retiraba el cabello largo de su rostro que, debido al sudor se pegaba junto con el suyo. Lo beso con dulzura para que este ya no dijese ninguna palabra, estaba feliz, sentía que algo diferente le ocurría a su amado. Tenía pánico de lo que esto significaba, pero por aquellos minutos no quería pensar en eso. Solo quería dormir refugiado en el.
¿Cómo era posible que un persona que conocías de tantos años, no tuvieras ni idea de quien es realmente? Asi era su Itachi, un enigma indescifrable, nunca sabía como podía actuar, vivía con el miedo cotidiano de que un día tomara sus cosas y se fuese. Pero que en esta ocasión ya no regresara como lo hace tantas veces, si no que esta fuera la definitiva.
Era tan cambiante, era tan difícil, y tan doloroso a cada instante, más sin embargo ahí seguía a su lado amándolo. Al principio había sido hermoso, cambio por el, solo tenía ojos para el y gritaba a los cuatro vientos lo que sentía por él. No había persona más feliz y enamorada sobre la tierra que su Ita, pero eso cambio después de que regreso de un viaje escolar demasiado extenso. Algo paso que su Itachi se fue , el hombre que ahora tenía consigo era un egoísta que lo destrozaba mientras le decía que le amaba sin siquiera darse cuenta. Solo quería morir entre sus brazos mientras aun era algo de valor para él.
-Deidara amor, despierta- podía sentir unas manos en la espalda.
-¿Qué sucede? – de nuevo despertaba se sentía un tanto triste.
- quiero hablar contigo, es algo importante- se levantó de la cama saliendo de la habitación.
- ¿Qué ocurre? – se incorporo en la cama con algo de miedo.
- mira – le entrego una foto, en la que se encontraban cuatro personas , para ser más específicos una pareja y dos niños.
- ¿Qué es esto? – Itachi se sentaba frente a el un poco nervioso.
- Ella se llama Mikoto, él se llama Fukaku, él pequeño se llama Sasuke – señalo a cada uno con su dedo- Mikoto y Fukaku son pareja y Sasuke es su hijo – le indico al ojiazul que tenía enfrente con ara de desconcierto- y este pequeño de aca se llama Itachi.
-¿Qué es esto?-balbuceo mientras se le quebraba la voz.
- ellos son mi familia amor – Le sonrió con sinceridad.
- No me hagas esto – comenzó a llorar. Podía vivir de esta manera porque ya habái perdido toda esperanza en la relación, solo esperaba el día en que por fin lo destrozara y se fuera. Esto le daba algo que esperar, esto le creaba ilusión. Esto le lastimaba.
- te dije que no volveré a irme Deidara, no soy quien para pedirte que me creas pero por favor- le entrego un álbum de fotos- déjame compartir mi vida contigo y no solo seas una parte.
- yo , no sé qué decir – no podía dejar de llorar.
- en la noche iremos a cenar con ellos así que lo mejor es que digas que si, por que les dije que llevaría una linda señorita y no quiero quedar mal – lo abrazo mientras lo besaba.
- está bien – ahí estaba, sabía que algo andaba mal, bueno ser mujer era mejor que nada. Se quedó toda la tarde en la cama escuchando la vida de Itachi y platicándole la suya. No quería que esa tarde terminase nunca.
Ya era de noche, la luna enmarcaba el cielo con su fulgor , mientras las estrellas brillaban con su luz tan única sobre el cielo, muchas personas se detenían a observar esa belleza nocturna. Algunas personas se dirigían a sus casas bajo el manto nocturno, mientras que otras aun lidiaban con sus labores diarias.
-Pensar que tengo que hacer esta maldita maqueta- entraba con cansancio rotundo al primer taller que encontró vacío. Dejo sus cosas en la mesa y se dispuso a buscar los contactos de luz. Al encender la luz su sorpresa fue grande, un rubio dormía plácidamente debajo de la mesa de trabajo.- ¿y este dobe que hace aquí? – se acerco con cuidado y lo cubrió con su chamarra. Tenía trabajo por hacer como para buscar problemas ahorita.
Tomo asiento y comenzó a trabajar en su maqueta al mismo tiempo que colocaba un poco de música clásica para acompañar. Al poco tiempo estaba más que desesperado, no lograba que le saliera algo que sabía hacer a la perfección; tenía que hacer un corte exacto , la música en sus audífonos sonaba a todo lo que daba y justo antes de finalizar el corte, pudo sentir el frio del filo sobre su piel y una mancha roja tintar el papel después del mayor susto de toda su vida.
El rubio se había despertado y este no lo noto debido a la música. Cuando le retiro el audífono y le hablo no pudo evitar cortarse ante su reacción.
-¿Sasuke estas bien?- dijo asustado al notar que se había cortado.
-¡ERES UN COMPLETO IMBECIL ¿Cómo SE TE OCURRE LLEGAR ASÍ CON ALGUIEN QUE ESTA TRABAJANDO?!- el Uchiha gritaba a todo pulmón mientras sus ojos tomaban un color rojizo.
- no es mi culpa que seas un tarado y te espantes por cositas asi, ven déjame ayudarte- tomo la mano de Sasuke y se introdujo el dedo cortado en la boca.
- ¿Qué?¿que haces? – no comprendía.
- Listo , vez ya no esta sangrando- le mostraba mientras le ponía una bandita.
- dime ¿Por qué estás tan enojado? – ladeo su cabeza.
- dime, ¿qué hacías dormido en un taller que no es de tu facultad?- detestaba que le preguntaran por su humor.
-dime, ¿qué hacías hoy en mi facultad?- si quería jugar jugaría.
-¿dime,¿ por qué desapareciste por dos semanas?- le interrogo con cierto dolor en la voz
-dime, ¿porque sientes que todos te pertenecen? – algo estaba ocurriendo ahí.
-dime, ¿qué te paso en las mejillas? – la misma pregunta de nuevo.
-dime, ¿Por qué no haces más que lastimarme?- con esta ultima pregunta había ganado el Uchiha no comprendía de que hablaba.
- tengo que entregar esta maqueta para mañana por la mañana y no consigo que me salga, y me estoy atrasando con el plano – accedió a abrirse un poco con él.
- ¿Qué hora es?- decía asustado mientras observaba por la ventana
Lo mataría definitivamente lo mataría el abriendo su vida para con él y este idiota solo se preocupaba por la hora.
-ya no llegue a trabajar , carajo – azoto la cabeza contra la pared.
-¿ en que trabajas?
- a tiendo en una cafetería , lo bueno es que me llevo bien con el dueño, oye ¿quieres que te ayude con tu maqueta? – le dijo mientras la señalaba.
- no, es un trabajo muy preciso y…- observaba la maqueta, era verdad que si dejaba que le ayudase terminaría más pronto- pero solo a pegar y cortar cosas sencillas.
- pero tendrá que ser un rato , ya es muy noche y luego no hay transporte a casa – le indico mientras tomaba un cuter.
- yo te llevare a casa , ese no es ningún problema – le indicaba como cortar
- ¿de que hablas?-
- que te llevare hasta tu casa y no te estoy preguntando, es lo menos que puedes hacer después de los daños que causaste – le mostraba su dedo cortado como si fuera una prueba definitiva. Naruto se rio como solo él sabía. ¿Qué tenía aquel muchacho? Apenas le conocía y podía sentirse tranquilo a su lado. Y bueno no era el más inteligente, pero tenía esa linda sonrisa, su cabello hacia juego siempre con su ojos y hasta esas marcas en su rostro. Naruto le gustaba no lo podía negar.
Terminaron la maqueta a tiempo, para sorpresa de él , el ojiazul era muy bueno con las manualidades y realizo n excelente trabajo y como se lo había prometido le llevo hasta su casa.
-Bien aquí es – le indico para que detuviese el auto frente a unos departamentos de color naranja con detalles café.- gracias
No pudo decir nada más , el moreno le sujeto el rostro con ambas manos y poso un beso casto en sus labios dejando con asombro al rubio. Poco a poco cedió y lo que era un beso dulce, se tornaba en un beso demandante. No sabía si seguía soñando pero no desperdiciaría aquella oportunidad, Sasuke solto una leve sonrisa mientras lo besaba, el sabor de esos labios lo estaba volviendo loco, había pasado dos semanas pensando en eso. Era su maldito veneno desde que lo conoció y ahora que lo había probado no quería soltarlo. Intodujo su lengua en la cavidad vecina logrando con esto un gemido gutural, provocando en el una reacción más que instintiva , mordió sus labios mientras le besaba. Las cosas comenzaban a subirse de tono cuando el rubio le aparto un poco causando un gruñido del Uchiha con esto.
-Yo ….- si se animaría a invitarlo a pasar, pero el moreno hablo antes.
-¿Qué ocurre? – pregunto molesto
- es que yo …no me siento agusto primero – quería hablar de lo del rumor.
-vamos pero si tu eres gay ¿Qué no?- escucho sus palabras para sentir como se le rompia el corazón en pedazo.
- Sabes , no se que hayas escuchado de mi pero vete a la mierda- dicho esto salió del auto lo más rápido que pudo, quería llorar, quería soltarse a llorar pero no lo haría frente a el.
- Soy un imbécil – golpeo su cabeza contra el volante, no quería decirlo de esa manera era solo que, no pensó antes de hablar.
El pelirojo caminaba por la calle con el corazón destrozado, tantas horas de esperar a su rubio , para verlo besándose con el maldito del Uchiha. Su corazón ya no podía más con ese amor no correspondido, ya no lo soportaba más . Iba tan absorto en sus pensamientos que al cruzar la calle no se percató que venía un auto el cual lo impacto dejándolo en el piso. El conductor bajo apresurado y lo subió a su auto.
-o vaya , tengo que llevar a este chico al hospital en cuanto antes – dijo un peliplata que sin pensarlo dos veces piso el pedal a fondo
-Itachi , es increíble que durante tanto tiempo no hubieses traido esta señorita a la casa- le tomaba la mano con agrado – estaba preocupado pero ahora veo que estas en buenas manos- decía Fukaku con seriedad.
-Señor es usted muy amable, pero también la que se encuentra en buenas manos soy yo – le sonrió cordialmente .
- Lastima que tu hermano no pudiese conocerla pero sabes que es por la escuela – trataba de calmar el hecho de la falta del menor , la mujer.
-lo entiendo madre y se que en su debido tiempo la conocera…- al terminar de decir esto se escucho la puerta de la entrada.
- Mira pero si es tu hermano –Mikoto fue hacia el y lo trajo por los hombros- Sasuke ella es Deidara la novia de tu hermano
- Mucho gusto – hizo reverencia – espero disculpe mi falta pero me encuentro cansado y me gustaría retirarme a mi habitación.
- El gusto es mío ve a descansar, otra será la ocasión – Itachi fue el único que noto que algo andaba raro en su hermanito, pero cuando quiso acercarse , este le repelio cosa que no paso por alto el rubio.
- Madre ¿Por qué Sasuke esta aquí en la casa? – Itachi no comprendía se suponía que ambos vivian en una pequeña casa cerca de la universidad.
- tu padre le a pedido a Sasuke que se venga a la casa, para que así tu y tu novia vivan en la casa- le susurro para que el mayo no les escuchar.- se que no te agrada la idea pero no te preocupes yo cuidare aquí bien de Sasuke.
- Gracias ma – le dio un beso en la mejilla como acostumbraba desde niño.
-Itachi, ya se hace noche será mejor que lleves a esta señorita a su casa- todos se despidieron con formalidades , hasta que por fin estuvieron solos en el auto .
-Por dios , tu padre es el ser humano más temible sobre la faz de la tierra- decía Deidara quitándose los tacones.
- te lo dije, no sería nada fácil pero estoy sorprendido de que no descubrieran nada – se notaba preocupado.
- ¿sigues angustiado por tu hermano? – pregunto tranquilo
- si la verdad es que un poco, el antes no era así , una noche después de que regreso de la facultad, venía muy alterado solo se encerró en su cuarto, desde ese día no es el mismo- lo narraba con melancolía en la voz.
- discutió con alguien y al parecer fue su culpa- sintió la mirada interrogante de su compañero- ahorita, es por eso que estaba así, se le veía en la cara es la misma que pones cuando metes la pata o me lastimas- dijo tranquilamente- al parecer es un gesto de familia que se les vaya la luz en los ojos, podrán aparentar que su orgullo lo puede todo pero también siente remordimiento.
- tus comentarios fuera de lugar – solo se dispuso a decir mientras seguía manejando ¿Qué le había ocurrido a su pequeño hermano?