Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Superficially famous por parku

[Reviews - 176]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Superficially famous
Capítulo 21

 

 

La última semana había sido un infierno: tenía sesiones de fotos de sol a sol, gracias a la exposición de las fotos de Jongin. Mi tío estaba encantado con el trabajo que le había traído al poner su empresa en la mira de las noticias.

Los paparazzis, si me reconocían, no dejaban de perseguirme al salir del trabajo y cada segundo que pasaba maldecía más mis estúpidos celos de esa estúpida noche a esas estúpidas fans.

Todo se había ido al demonio y, por mucho que quisiera culpar a Kris, sabía que la mayor parte de la culpa era mía con pequeñas y cruciales acciones.

No había visto a Jongin rondar por la empresa, aunque estaba seguro de que no hubiera tenido tiempo de siquiera cruzar una mirada con él.

Seguía esquivando cual Neo en matrix los comentarios de Yixing sobre volvernos a China. Tanto por él y Sehun como por mí. A pesar de la mala fama, los malos compañeros de trabajo, la constante y repentina explotación de mi tío y mi pequeña gran depresión, tenía esperanzas de que todo iba a mejorar y pronto estaría con Jongin mirando una de esas películas que él tanto amaba bajo la manta deforme que habíamos tejido en tiempos mejores.

La noche en que descubrí los verdaderos pensamientos de mis compañeros fue un desastre. Me había tirado al suelo en posición fetal y no fue hasta que Yixing me encontró horas después que reaccioné y, con su ayuda, me acosté en la cama. Habiendo desahogado todo con mi mejor amigo y dormido un poco, pude pensar claramente y decidir que había sido un tonto injusto tanto con Jongin como conmigo.
No podía creer todo eso que leía porque esas personas no me conocían, no conocían al verdadero Jongin y mucho menos conocían nuestra relación.

Yo no era simplemente un fanático regalado desesperado por llamar su atención como decían esos hirientes comentarios. Y sí, Jongin borracho me lo había vuelto a mencionar, pero eso era el Whisky hablando. Estaba convencido de eso. Sabía que me amaba y que no había manera de que fingiera el torrente de emociones que demostraba cuando nos conectábamos en cuerpo y alma. Sabía que me amaba porque yo conocía el verdadero Jongin porque él me había dejado conocerlo. Y realmente nunca había mencionado nada de mi tío, nunca hubo indicio alguno de que le interesara el contacto.

Y podía estar seguro de que sí tenía sentido nuestra conexión y que él se fijara en mí… porque yo fui distinto para él. Un respiro de ese ambiente superficial y hostil. Y jamás demostré querer nada más que conocerlo a fondo. No mostré interés en su fama, su cuerpo (bueno, eso sí, pero cuando ya éramos algo más que amigos) o su dinero. Yo solo quería al Jongin verdadero debajo de Kai.

Respecto a mí había resuelto que yo sí era mucho más que el sobrino del dueño. A pesar del contacto, el puesto me lo había ganado a pulso, ya que mi tío no aceptaría cualquier persona ni arriesgaría el futuro del trabajo de su vida para consentir un “sobrino mimado”.



***


A pesar del tapabocas y la capucha, unos cuantos paparazzis me habían descubierto llegando a la empresa en compañía de Lay, atosigándome a preguntas que no hubiera podido responder ni queriendo porque, justamente por ellos, no podía acercarme tranquilamente a Jongin y él no aparecía. Ni siquiera por mensaje, para decirme que estaba bien o disculparse por ser un idiota conmigo.


“¿Dónde está Kai y por qué no aparece?”


“¿Ustedes siguen juntos?”


“¿Hace cuánto que salen?”


“¿Es cierto que Kai va a actuar en una película muy pronto?”


“¿El comeback será este mes?”


“¿Le va a hacer una sesión de fotos íntima nuevamente?

Y seguían haciendo preguntas sin cesar, a pesar de que yo no respondía y caminaba con la cabeza baja, ignorando todo mi entorno de micrófonos y gente desconocida. Y todavía quedaban unos buenos metros hasta la puerta de la empresa.


“¿Es cierto que usted y Kai están esperando un bebé?”


Y ese fue el colmo. Me detuve en seco para mirar el rostro de la mujer que había hecho la pregunta más estúpida que había escuchado en mi vida.

- ¿Pero vos sos…?- una mano me detuvo de cometer un grave, gravísimo error. Lay me dio una mirada de advertencia y me hizo un gesto de seguir, tomándome del codo y empujando levemente. Decidí hacerle caso y, después de volver a mirar mal a la mujer, volví a la tarea de atravesar el muro de paparazzis con preguntas estúpidas del estúpido de Jongin.

De ese estúpido que amaba y extrañaba con locura.

 

 

***

Sufría una pelea interna, buscando motivos para quedarme y encontrando menos a cada segundo. Realmente no le veía sentido a quedarme en Corea si no lograba recomponer mi relación con Jongin. El trabajo estaba dejando de ser agradable, mi tío era un grano en el culo, y yo no lograba reacomodar los cachitos de mi corazón que, aunque me había esclarecido, seguía dolido y magullado.

 

***


- Líder me permitió seguir trabajando acá- comentó Yixing, entrando al salón donde estaba preparando una sesión que tendría lugar en unas horas.
- ¿Líder?- cuestioné, ajustando un trípode.
- Tu tío- se encogió de hombros. Solté un sonido, que pretendía ser una risa, ante el apodo que mi amigo le había puesto a mi pariente. –Tal vez tenga que ver con que Kris renunció…- me encogí de hombros.
- Eso es genial… Que puedas seguir siendo coreógrafo y estilista acá, digo.
- Síp… Creí que iba a tener que buscar trabajo en otro lugar y, la verdad, es que no me quería ir- asentí. Yo tampoco quería que se fuera, era divertido trabajar con mi mejor amigo. -¿Te ayudo?
- Por favor- dije, irguiéndome después de pelear con el maldito trípode y secándome el sudor de la frente con la manga de mi buzo.

 

 

***


[Kai POV]

 

 

“¿Es cierto que usted y Kai están esperando un bebé?”


Incrédulo por semejante pregunta, observé detenidamente la reacción de Luhan. Frenó de golpe, mirándola fijamente y me encantó poder notar que iba a responderle, y estaba seguro que nada bonito. A pesar de mi gusto sabía que eso hubiera sido muy muy malo y agradecí que Yixing estuviera ahí para detenerlo.

Sabía perfectamente que Luhan casi cometía el error de maltratar a un paparazzi porque él no estaba acostumbrado a eso. Yo, después de tantos años podía medianamente manejar mis emociones para no reaccionar mal. O tan mal al menos. Pero él pertenecía a la parte del espectáculo detrás de cámara. Literalmente. Y no estaba para nada acostumbrado a aguantar las tonterías que hacían esas personas hambrientas de chismes, importándoles poco los sentimientos, privacidad o espacio personal con tal de conseguir un poco de jugosa información.

Y me sentía responsable por alivianarle ese peso... Wendy me miró desde su lugar en el sillón, como juzgándome. Mentira. La realidad era que me sentía sumamente culpable por lo que sucedió la última vez que lo vi. Su mirada rota, sus palabras, su portazo… Porque sí, a pesar de que él no sabía si lo recordaría o no, lo hacía y muy bien. Recordaba a Luhan diciéndome que le había roto el corazón por mis estúpidas palabras de borracho.

Y quería redimirme. Redimirme y decirle lo mucho que lo amaba. Que me disculpara… Que sin él no sabría cómo seguir adelante porque una vez que conocí a Xiao Luhan… ya no había un antes. Sólo un después… un maravilloso, colorido y… sobrio después.

Observando sin ver mi nuevo departamento con varias cajas aún sin terminar de desembalar, tomé mi celular sin poder esperar más, y tecleé rápidamente un mensaje para él.

“Perdón por lo del otro día.”

Al no parecerme suficiente teclée varios mensajes más, enviando todo a medida que escribía.

“Perdón por tardar tanto en pedir perdón”

“No quise decir cosas hirientes.”

“De verdad, lo lamento.”

“Te extraño.”

“Tuve que mudarme por culpa de los paparazzis… te paso mi nueva dirección… por las dudas.”

“Te quiero.”

“Perdón, Luhan.”

“Luhan…”

“Te amo.”

Me impacienté al no recibir respuesta inmediata como siempre… Tal vez estaba tan enojado que no pensaba decirme nada. Tal vez ya no quería aguantarme más… a mí o a mis recaídas. A mí y mi problema con el alcohol… a mí y mis cambios de humor debido a la bebida. Pero tu reacción a su tatuaje fue estando sobrio. Pensé, saliendo al balcón para fumar un cigarrillo. Observé con cariño la plantita que mi mamá me había regalado para estrenar el departamento y “darle más vida” como había dicho ella. Dándole repetidas caladas al cigarrillo, esperaba ansioso una respuesta.

El sonido de un mensaje entrante cortó mis pensamientos.

“Yo también te amo.”

Simple. Sencillo. Conciso. Como Luhan. Resumió su respuesta en lo único verdaderamente importante y me hubiera encantado que nuestros primeros “Te amos” nos los hubiéramos dicho en persona. Pero de todos modos se me antojaba perfecto por lo que representaban esos mensajes de texto: Que nosotros como una unidad, todavía existíamos.

Con la emoción martillando fuerte en el pecho, respondí su breve y hermoso mensaje.

“¿Podemos vernos? Necesito hablar con vos.”

 “No puedo ahora. Estoy trabajando.”

“¿Esta noche?”

 “Termino muy tarde.” Bufé indignado. Necesitaba verlo. ¿De pronto no podía hacerse un lugar para mí? Tiré la colilla del cigarrillo para afuera y entré de nuevo a la sala, tecleando una respuesta con mi as bajo la manga: caritas. Sabía que él amaba que usara caritas en mis mensajes.

“:C :C :C :C” Y, como sospeché, funcionó y Luhan aflojó enseguida.

“¿El viernes a la medianoche en el puente que te mostré que me gusta? No quiero arriesgarme a que ningún paparazzi encuentre mi casa”

“Bueno… Faltan tres días pero creo que puedo esperar. Quiero disculparme en persona y… contarte otras cosas”

Necesitaba contarle antes de que se enterara por otros medios mis planes a futuro cercano. Planes en los que, si todo salía como lo pensado, él también estaría involucrado.

No recibí respuesta. Medio feliz, medio angustiado, tomé la manta tejida por Luhan y por mí en un brazo, a Wendy en otro y me dirigí a la habitación que ya estaba bastante armada. Acostándome en la cama y forzando a Wendy a acompañarme en mi desgracia agridulce.

Porque, a pesar de todo, Luhan me amaba.

 

 

***


[Luhan POV]

 

“Luhan…”

“Te amo.”

Volví a ver todos los mensajes que me habían llegado de golpe, leyéndolos una y otra vez, casi escuchando cuando uno de los cachitos de mi corazón encajaba de vuelta en su lugar al leer que Jongin me decía que me amaba.

“Yo también te amo.”

Respondí simplemente y volví a bloquear mi teléfono para seguir trabajando, sintiéndolo vibrar casi al instante que lo guardé en mi bolsillo. Lo saqué de nuevo para leer su respuesta.

“¿Podemos vernos? Necesito hablar con vos.”

“No puedo ahora. Estoy trabajando.”

“¿Esta noche?”

Bufé con cansancio y angustia. Realmente quería verlo y escuchar lo que tuviera para decir.

“Termino muy tarde.”

“:C :C :C :C” Maldito. Usaba caritas en mi contra, como si fuera a negarle la oportunidad de vernos y hablar.

“¿El viernes a la medianoche en el puente que te mostré que me gusta? No quiero arriesgarme a que ningún paparazzi encuentre mi casa” Eso sería catastrófico y un problema. Y era algo a lo que no quería arrastrar a Yixing o Sehun. Y además no me sentía con fuerzas como para tener esa charla en su nuevo departamento. El riesgo de que todo saliera mal me hacía preservarme de estar encerrado con él en algún lugar.

“Bueno… Faltan tres días pero creo que puedo esperar. Quiero disculparme en persona y… contarte otras cosas”

Fruncí el ceño al leer eso. ¿Qué querría contarme? ¿Qué sería tan importante que tenía que ser en persona? Y además, quería disculparse…

Ese viernes sería el día definitivo, decidí. Dependiendo de cómo salieran las cosas con Jongin en ese puente, me quedaría o me iría. Y sin arrastrar a Yixing conmigo. Sin importar qué dijera él, no le iba a permitir volverse a China solo por mí.

 


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).